Tumgik
avedemar · 6 months
Text
Siento el borde del acantilado bajo de mis pies. Una voz, en el fondo, llama mi nombre. Hay vértigos que se desean, que se te meten debajo de la piel y escarban túneles como las hormigas en la tierra. Cierro los ojos, tengo la boca seca; siento el vacío asentándose sobre mi pecho, y el calor del cuerpo que no mengua. Vierto sal en las heridas, aún sangran, parecen jamás sanar. La oscuridad, su hondura me deglute, me devora, inca sus dientes aferrándose a mi carne como el zorro se aferra a su presa. No hay piedad para los que saltan al vacío. La caída es placentera, el camino se acabará pronto. Yo te veo desde arriba, con el cuerpo en llamas, con la boca desierta, y siento, siento el borde del acantilado bajo mis pies.
Con M de Mar
29 notes · View notes
avedemar · 7 months
Note
Oh, ave marina que gritas al viento,
al mar y sus olas, tu canto es porteño.
Los cielos vacíos con tus danzas llenas,
los astros contemplan tu fuerza y tu aliento.
Oh, ave marina que firme resistes
lo mismo las lluvias que los vendavales.
Tu miras de cerca los rayos del sol
y ocasos enteros guarda tu interior.
Pequeña gaviota que vuelas, que nadas,
cuando sin temor te lanzaste en picada.
Te veo desde lejos solitaria y libre,
yo sé que no hay puerto que en tu pecho anide.
Oh, ave del mar sin apego, ni abrigo
naciste del viento y mueres en suspiros.
Oh, ave del mar, ¿dónde has alzado tu vuelo?
Las olas me cuentan que te has perdido en el cielo.
¿En qué lejano horizonte hallaré tu rastro?
En cada ola que rompe, espero tu regreso.
Oh, ave del mar, ¿a qué playa te ha llevado el viento?
Mi corazón ansioso de espera muere varado en el puerto.
¿En qué nido distante descansas tus alas?
La brisa marina me jura que aún me amas.
Oh, ave del mar, que emigras, que viajas.
Mi faro te espera, mi faro te llama.
19 notes · View notes
avedemar · 8 months
Note
Oh, ave del mar, ¿dónde has alzado tu vuelo?
Las olas me cuentan que te has perdido en el cielo.
¿En qué lejano horizonte hallaré tu rastro?
En cada ola que rompe, espero tu regreso.
Oh, ave del mar, ¿a qué playa te ha llevado el viento?
Mi corazón ansioso de espera muere varado en el puerto.
¿En qué nido distante descansas tus alas?
La brisa marina me jura que aún me amas.
Oh, ave del mar, que emigras, que viajas.
Mi faro te espera, mi faro te llama.
19 notes · View notes
avedemar · 11 months
Note
¿Quién es Ave de Mar?

“Es una gaviota nacida en la tierra
volaba en los cielos de alguna ciudad
con techos y ramas de cálido abrigo
y con otra gaviota soñaba volar.

No tienen sus alas la fuerza ni aliento
No pueden alzarla en ascenso fugaz,
luchar contra el viento, tenerla en el aire
llevarla a un destino de incierto arribar.

Ocasos dorados con noches oscuras
cual negro es el fondo profundo del mar,
sin cálido abrigo en el gélido invierno
y sin fresco refugio en verano fugaz

Es frágil gaviota nacida porteña
que en cielos vacíos y en la inmensidad
de noches eternas y estrellas brillantes
esquivo destino debiera encontrar.

No es ave marina sin nidos ni afectos,
no es ave de tierra de muy corto andar,
es una gaviota nacida porteña,
que muy hondo en el alma ama la libertad”.
| Enrique Germán Martínez, fragmento |
11 notes · View notes
avedemar · 1 year
Text
Los días pasan en una secuencia interminable, iguales unos a otros. El tiempo se escurre lo mismo que la vida se escapa en un hilo de sangre, y siempre son las mismas caras, las mismas calles, las mismas canciones repetidas en bucle, el mismo vacío. El acantilado de mi pecho sigue igual de hondo. Como autómata, sin poner resistencia me dejo llevar por la cotidianeidad; escondo la cara y atrinchero el corazón. Las sonrisas siempre van bien, me repito a mí misma, cada vez que siento las lagrimas al borde de los ojos. Soy una profesional. Nadie lo nota, y a veces, parece que yo también lo olvido. La coraza es dura, y ahí adentro, en lo profundo de ella, una niña se acurruca. Los días pasan en una secuencia interminable, iguales unos a otros. Aquí, aquí nada cambia.
Con M de Mar
68 notes · View notes
avedemar · 1 year
Text
Llevo días con el miedo metido en el cuerpo pensando en ti, en cómo está historia es un laberinto, una tierra sin dueño. Me he convertido en herida. Soy grito, llanto, agonía y desesperación. La tristeza me muerde por dentro y trato de disimular, la vida sigue, los días pasan, y entre tú y yo es lo único que pasa, el tiempo. Kilómetros y más kilómetros, ¿cuánto hay que caminar para poder llegar a ti? Tocarte significa derribar el muro. Gigante infranqueable que amenaza con aplastarme. Estoy hecha hielo, olvido y silencio. Estoy hecha nada. Afuera hay sol, aquí adentro… solo yo.
Con m de Mar
121 notes · View notes
avedemar · 1 year
Text
Estoy aquí, pero me encuentro lejos. Escribo sin parar, la tinta se desliza y forma palabras, las palabras se vuelven frases y las frases ahora son párrafos. Estoy intentando que comprendas, estoy tratando que sepas, que te quede claro que aunque estoy aquí hace mucho que me encuentro lejos. Estoy aquí desgastándome la vida, gritándote con todas mis fuerzas y de la única forma que sé que ya no estoy, que me he ido… Y aún así contra todo presagio estoy aquí; aunque a ti ya no te importe, aunque a mí ya no me duela.
Con M de Mar
54 notes · View notes
avedemar · 1 year
Text
Me gusta tu movimiento, tu vibra roja, el canto que emanan de tus ojos que se detiene en todo lo que los otros olvidan. Me gustan tus pasos, ese andar desenfadado que convierte en camino cualquier senda. Te respiro, tu aliento me alimenta. Dibujo con la yema de mis dedos tu sonrisa donde las tristezas han reconocido un hogar. Niña triste, niña dulce, niña olvidada. Regálame tu melancolía, quiero beber de tu veneno. Eterna, silenciosa, adolorida. Me gustas cuando eres acantilado, me gustas cuando eres tú.
Con M de Mar
94 notes · View notes
avedemar · 2 years
Text
Qué tengo yo de ti sino solo la idea de lo pudo ser y no fue. Sueños, quimeras, deseos, eso y nada más has sido en mi vida. Vacío, distancia y silencio.
Con M de Mar
67 notes · View notes
avedemar · 2 years
Text
Te extraviaste y aún no te das cuenta. Subiste al barco y zarpaste como zarpan los que aseguran saber a dónde van. Rompes las olas con la certeza de quién cree que huir es salvarse. Te veo y me duele el alma, pobre niño perdido. Tu herida aún sangra, pero tú ya te has quitado la venda. Te lanzas a la batalla con las lagrimas frescas, no te permites pausas ni descansos. Continuas, porque de lo único que estás seguro es que para sobrevivir hay que seguir en movimiento.
Herido y sin descanso.
Con M de Mar
71 notes · View notes
avedemar · 2 years
Text
Me desperté con el pecho ardiendo. Mi sangre se vertía sobre viejos caminos sedientos, intenté ver el cielo, pero su azul me hería los ojos. Hoy es un día de esos en lo que no logro encontrar paz, donde miles de voces me persiguen gritando. Y el entendimiento cae como balde de agua fría sobre la cara. La cordura se ríe de mí, de mi debilidad absoluta para dejar atrás lo que creí olvidado. Supe que no habría salida cuando con franca tranquilidad acepté la verdad, cuando me abracé a ella y cerré las ventanas a más posibilidades. Qué decepción más grande esa de esperar por algo que nunca nos alcanza. Como pulmones que tratan de expandirse bocanada tras bocanada y no hay aire que los llene, así me asfixio, así me ahogo entre las mentiras que yo misma me susurre creyendo que de esa forma podría mantener el equilibrio. Habría sido mejor caer y descubrir que esperaba por mí en el fondo del acantilado. Lo que hoy siento, lo que hoy me quema es la condena que solo se reserva a los cobardes, a las aves que prefirieron quedarse en la rama porque le tuvieron miedo a volar.
Con M de Mar
88 notes · View notes
avedemar · 2 years
Text
Muchas veces te imaginé así, tenías un cigarrillo entre los dedos y la mirada perdida en un deseo que no iba a cumplirse. ¿Por qué hieres con solo verte? Eres el puñal, y tu propia herida. Intento olvidarme de esta estúpida idea de poder lograr que no me duela quedarme junto a ti. Mientras trazo estrategias que me saquen de este ciclo vicioso que me hace sentir como un péndulo, tú, le tiras un sorbo hondo al pequeño cilindro que muere entre tus labios y pienso que me gustaría ser él, que con gusto dejaría mi vida en tu boca solo para complacerte, solo para sentirme parte de ti por un momento. El horizonte se deja comer por la oscuridad y tú sigues ahí, calmado, callado, navegando el tormentoso mar de tus adentros, con la boca asesinado cigarrillos, con tu lejanía destrozándome el corazón.
Con M de Mar
50 notes · View notes
avedemar · 2 years
Text
Eres la guerra en mis entrañas,
el vértigo que crece en mi garganta,
las ganas de pertenecer-te.
Cuando hablaba de rebeliones era inevitable pensar en él.
Con M de Mar
38 notes · View notes
avedemar · 2 years
Text
Trocitos…
Un pedacito por aquí,
una migaja por allá.
Uno para ella,
otra para la de atrás.
Comida hay para todas las bocas,
para la mía… jamás.
Con M de Mar
59 notes · View notes
avedemar · 2 years
Text
Uno se diluye, a veces, en medio de la espera. Yo espero, ¿qué espero? No sé, pero dicen que la esperanza muere al último, y yo espero mientras siento que me diluyo. Estoy perdida en algún punto medio entre lo que busco y lo que sé que no voy a encontrar. Han sido días raros estos, días donde el silencio me ha hablado mucho, pero me come la voz, donde los libros son el refugio perfecto y la lluvia ayuda a refrescar el pensamiento. Me siento frente a la taza de café y naufrago en el océano oscuro que contiene. Dejo que el tiempo pase sin preocuparme por ocuparlo haciendo algo. Algunas veces, si a la tinta le apetece, juego a escribir, otras simplemente me libero de las poses y dejo que la vida siga. Al fin y al cabo nadie es tan necesario como para que el mundo detenga su marcha.
Con M de Mar
79 notes · View notes
avedemar · 2 years
Note
Saludos nuevamente.
Gracias por seguir aquí, respondiendo mis Ask. Le confirmo que usted puede llamarme Mr. S.
Lo de mis recomendaciones literarias, tal ves son extrañas, pero le garantizo muchas horas de lectura, y sobre todo, placenteras.
Confieso que a mi también me sorprendió mucho leer que se encuentra al sur de México.
Pero respondiendo a la pregunta de ¿Qué tan al sur? Le daré pistas.
**Estoy en donde las olas rompen con la arena, donde los barcos zarpan rumbo al horizonte, donde el sol chamusca la piel de todo aquel que ose deambular a medio día, donde la industria bombea sin parar humo, químicos y smog.
(Y me encantaria seguir esta conversación lejos de miradas extrañas).
Hey, Mr. S.
Me parece que tengo la respuesta… se la daré en privado.
3 notes · View notes
avedemar · 2 years
Note
Hello again...
Me encanta esta interacción que hemos logrado mediante los Ask de esta red social.
En cuanto a su respuesta de aburrirme... Lo veo complicado, no suelo aburrirme fácilmente y menos con lectores y escritores como usted que, entre líneas muestra más de lo que escribe en palabras.
En cuanto a mi recomendación de libros solo puedo hacer 3.
1.- El huracán lleva tu nombre. De Jaime Bayly. Fue de los libros que marcó un precedente en mi ánimo de lector/escritor aficionado. Creo que le gustará.
2.- Ernesto Guevara, también conocido como el Che. De Paco Ignacio Taibo II. Lo leí en un momento de mi vida, donde me encuentraba solo, en una ciudad nueva y sin nadie que me consolara. Por el contrario, fui señalado de "paramilitar" por alguien que era casi un ilodolo para mi.
3.- Los amigos que perdí. De Jaime Bayly. Al igual que los anteriores, me hizo comprender, muy a mi modo, la etapa de mi vida que transitaba.
Espero le guste mi recomendación.
Y nuevamente, saludos, también, desde el sur de México.
Hola, Mr. S, ¿puedo llamarlo así? Supondré que sí. Es raro, ¿sabe? Esto de hablar de esta forma, no suelo responder ininterrumpidamente los ask, normalmente los dejo pasar después del segundo ask consecutivo. Ya veremos qué pasa.
En cuanto a lo de aburrirse o no también lo veremos. Por otro lado sus recomendaciones literarias son libros nuevos para mí, no creo haber escuchado sobre ellos. Elegiré alguno al azar y voy a leerlo cuando termine el que tengo ahora atascado entre las pestañas. Ya le comentaré después qué sabor me deja en el paladar.
La curiosidad se acomoda en el sillón de la esquina y me ve atenta mientras yo le pregunto con cara de asombro, ¿qué tan al sur?
¿Seguimos la conversación en otro lado lejos de ojos extraños?
5 notes · View notes