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#amor entre mulheres
conexao-anth · 1 year
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Minha vida hoje completamos 3 anos de relacionamento com: cumplicidade, lealdade, amor, carinho, aprendizado, paciência, amadurecimento, compreensão, gratidão, ternura, guerra e paz, brigas, carinho, felicidade, estresses, fidelidade, harmonia, sossego, afeto, admiração, coragem, desespero, fé, desculpa, alegria, esperança, atenciosa, beleza, vida.. uma infinidade dentro de cada dia que vivemos juntas compartilhando a nossa vida nessa união que eu agradeço a Deus que me permitiu te conhecer e ter você em minha vida. Quero te agradecer por tudo que vivemos durante esses 3 anos e te peço para que possamos seguir por mais 10,20,30 anos até meu último suspiro. Meu amor, você deu sentido a minha história, você faz parte da minha vida, você se tornou a minha família, a família que estamos construindo juntas eu você e a nossa filha, quero todos os planos, encantos e sonhos, quero a realização de nossos desejos e vontades. Eu quero viver ao teu lado desde o dormir ao acordar. Você pra mim é tudo, tudo que eu preciso, você nos meus braços me dizendo: “vida, me beija, amor” ! Definitivamente eu amo você.
Ass: th
Feliz 3 anos meu amor, eu amo você! ❤️
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amenidade-s · 10 months
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Eu sinto o seu olhar.
E é gostoso perceber que quando você me olha você meio que se perde em mim. E por eu notar isso, nossa, só tenho mais certeza do quanto eu te amo e te quero na minha vida sempre. Parece mentira mas não é, eu sinto apenas verdade no seu olhar, meu amor, minha gata, meu bem, meu mel. Vou ser sua para sempre, mesmo que a gente termine.
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elrinconfelizdekaren · 10 months
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Reseña “imagina tú y yo” la heteronormatividad y su influencia en la percepción del amor romántico.
Nombre: “Imagina tu yo”, “Rosas Rojas”, “La novia de la novia”
Año: 2006
Director: Ol Parker
Trama: En el día de su boda, camino del altar, Rachel ve a la persona con la que quiere pasar el resto de su vida. No es su prometido, ni siquiera un invitado apuesto... es la chica encargada de las flores de la ceremonia.
Puntuación: 8/10
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En la película "Imagina tú y yo", se aborda el tema de la heteronormatividad y cómo esta afecta la forma en que percibimos el amor romántico.
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A menudo, las personas tienen la idea de que "hoy en día hay más homosexuales que antes", y aunque puede ser cierto, esto podría ser debido a que en el pasado las personas del colectivo eran asesinados o encarcelados. Sin embargo, creo que es un trabajo de la Sociologia darle respuesta a esa preposición.
Algo que llama particularmente la atención de la gente, es que una persona en una relación heterosexual, y que aparentemente sea “normal” termine saliendo del closet un tiempo después. Algunas personas pueden decir que esas relaciones previas eran el closet en si mismo. Que, ante el miedo a la homofobia, preferían tener una vida falsa, cuidadosamente estructurada y que evitara todo conflicto.
Sin embargo, estos cambios pueden sorprender hasta los mismos protagonistas de estas historias. Es el caso de Rachel, la protagonista de esta reseña y una de las protagonistas de la película “imagina tú y yo”
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Rachel cree que su relación es tal y como debe ser para ser llamada perfecta. Un cálido sentimiento de absoluta calma la llena el corazón cuando esta con el hombre que se convertiría en su esposo, Heck. Él y ella han estado juntos por un largo tiempo antes de casarse, empezaron probablemente como amigos, y cuando las cosas avanzaron en otra dirección solo se dejó llevar… y ese viaje era tranquilo, seguro. Su corazón se sentía en casa, pero no saltaba de emoción ni se desbocaba. Se suponía que el amor era así. ¿cómo algo tan correcto no lo seria?
El mismo día de su boda, Rachel conoce a luce, la florista con la que conectaría casi de inmediato. Un “clic” indescriptible, un “feeling” diferente las hace conectar, y después de ayudarla con un incidente bochornoso, su relación parece echar raíces casi de inmediato. ¿pero qué tipo de relación? Ni Rachel ni luce sentían que dicho sentimiento era susceptible de la categoría amistad.
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Luce no esconde su sexualidad durante la película y el despliegue de comentarios sobre la misma, hacen que Rachel empiece a cuestionarse aspectos de la suya propia. Con el tiempo, se dan encuentros entre ellas, y aunque no es intención de ninguna de las dos, una atmosfera romántica se instala en cada situación. Un simple suspiro, mirada, hace que el corazón de Rachel se desboque por primera vez.
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En este punto se podría advertir que Rachel podría ser descrita como una mujer bisexual. Pero hay varios indicios en la película que me hacen pensar en Rachel como una lesbiana víctima de la heteronormatividad.
Para empezar, ¿en qué consiste la heteronormatividad?
La heteronormatividad es un concepto que se refiere a la suposición generalizada y predominante de que las relaciones sexuales y románticas normales y aceptables ocurren entre personas de diferentes sexos (hombre y mujer) y siguen patrones y roles de género tradicionales. Es un sistema de creencias y normas sociales que establece la heterosexualidad como la única orientación sexual "normal", relegando otras orientaciones sexuales, como la homosexualidad, la bisexualidad o la pansexualidad, a una posición de marginalidad o incluso de inexistencia.
Es posible que algunas personas no tengan conciencia de su propia orientación sexual debido a la falta de información, la presión social y la internalización de la heteronormatividad. En muchos casos, el proceso de autodescubrimiento y aceptación puede llevar tiempo y estar influenciado por diversos factores.
Básicamente, crecer en un sistema en donde toda relación no heterosexual es vista como anormal, puede hacer que incluso las personas pertenecientes a la comunidad no se perciban así mismas dentro de ella, ya que, aunque parezca extraño o imposible, simplemente no lo saben.
Bueno, ahora liguemos el termino al descubrimiento del amor de nuestra protagonista.
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Para Rachel no hay un camino directo al amor, solo se siente “cálido y cómodo” y lo mantienes ahí, dándole la oportunidad y antes de darte cuenta realmente, estas como “si, esto debe ser amor”
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Luce le manifiesta su desacuerdo, expresando que se reconoce el amor de inmediato. “tan pronto como los ojos se encuentran” y que todo lo que pase después de eso solo prueba que estuviste en lo cierto durante ese momento.
La perspectiva del amor de Rachel no me parece a mí incorrecta o correcta. Sin embargo, cuando ella conoció a su esposo vio en él un buen material de novio y después vio en él un buen material de esposo. Así que, ¿por qué no? Encontrar a esta persona que llena tu vida con todo lo que se supone una mujer debe necesitar; debe ser amor. Es esta actitud durante la conversación, la que me hace dudar de una atracción sexo romántica hacia su esposo. Rachel parece más resignada a los resultados de un conjunto de pasos inevitables en su vida, que al desarrollo de un amor romántico gradual.
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Esta perspectiva se refleja también en la falta de química sexual entre Rachel y su esposo en varias escenas de la película. Cuando el sexo se sugiere o se plantea directamente, se puede notar la falta de conexión entre ellos. Rachel responde de manera complaciente, pero no parece emocionarla. Solo cuando intenta negar su creciente relación por Luce, hace un esfuerzo por forzar la química entre ellos, creando situaciones divertidas y peligrosas para agregar emoción a su atracción.
Rachel, a pesar de su actitud pasiva con respecto al sexo, no puede ser descrita como una mujer asexual o que difícilmente siente atracción física hacia otros. Después de todo, llega un momento de quiebre con luce, cuando finalmente reconoce sus sentimientos como románticos y se deja llevar, dando rienda suelta a su atracción.
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Más tarde en la película, Rachel intenta alejarse de Luce en un intento de serle fiel a su esposo, y finalmente vemos la resolución de sus sentimientos hacia él confesados mientras él dormía ebrio, aunque lo recordaría al día siguiente:
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“No podría, no querría dejarte. Eres mi mejor amigo. Y eso fue suficiente para mi entonces. Y lo será de nuevo”
En resumen, "Imagina tú y yo" plantea cómo la heteronormatividad puede influir en la percepción del amor romántico, llevando a las personas a conformarse con relaciones que no necesariamente reflejan sus verdaderos deseos y emociones.
A medida que Rachel se permite explorar sus sentimientos hacia Luce, experimenta una liberación y una conexión más profunda con su propia identidad y deseos.
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La película aborda el amor entre mujeres de una manera dulce y apasionada, mostrando la importancia de seguir nuestros verdaderos sentimientos y deseos, incluso si desafían las normas establecidas.
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En general, recomiendo esta película con mucho cariño y le doy una calificación de ocho estrellas. Sin embargo, mencionaría que hay un personaje en la portada que aparece pocas veces y en una de ellas no aporta nada relevante para la trama aun cuando la promoción de la película le prometía mas relevancia. A pesar de eso, la historia y las actuaciones son conmovedoras y valiosas. La película ofrece una mirada refrescante sobre el amor y la autenticidad.
Por otro lado, los personajes principales, tanto Luce como Rachel y Heck, su esposo, están muy bien estructurados. Sus valores y personalidades son claras, y la película muestra el autodescubrimiento y la autorrealización de Rachel de forma coherente. No hay prisas ni contenido que sexualice el romance sáfico, algo común en las películas de ese tiempo que abordaban el amor romántico entre mujeres desde una mirada muy masculina
Además, la película tiene un final feliz, así que ¡adelante y disfrútala!
“Imagine me and you, I do
I think about you day and night, it's only right
To think about the girl you love and hold her tight
So happy together”
-Happy Together, soundtrack.
"Imagina tu y yo, yo lo hago
Pienso en ti dia y noche, es lo unico cierto
Pensar en la chica que amas y sostenerla fuerte
tan felices juntas"
-Happy Together, banda sonora.
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voceemeugirassol · 4 months
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Duas semanas…
Duas semanas foi o tempo que fiquei longe de você….
Duas semanas que não senti seu cheiro….
Duas semanas que não te abraço…
Duas semanas que meu olhar não cruza o seu…
Esses dias passaram tão devagar … os minutos pareciam horas as horas dias e os dias meses …. as coisas não fluíram e meu coração ficou clamando pelo teu…
A mulher do sorriso lindo, dos olhos negros jabuticaba, das piadas mais engraçadas, não estava ali… pra me fazer companhia, pra me acariciar, me encher de beijos.
Meu corpo ferveu durante todos esses dias pedindo o teu, o calor dos seus braços, sua boca percorrer meu corpo nu, seus lábios encostarem nos meus… e seu gosto, ah que saudade de sentir seu gosto… fico salivando de vontade de você, do jeito que você me pega e me faz gemer de tanto tesao. Que vontade de me envolver em você e ficar suada, corpo mole de tanto fazer amor com você.
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pronoixa · 5 months
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ˡᶰ: ᴾᵒʳ ᵠᵘᵉ ᵉʳᵉˢ ᵐᶤ ᵐᵃ́ˢ ᵉᵐᵇʳᶤᵃᵍᵃᶰᵗᵉ
ᴮᵉᵇᶤᵈᵃ
ᴺ:ᴾᵒʳ ᵠᵘᵉ ᵠᵘᶤᵉʳᵒ ˡᵉᵉʳ ᶜᵃᵈᵃ ᵘᶰᵃ ᵈᵉ
ᴸᵃˢ ᵖᵃᵍᶤᵐᵃˢ ᵠᵘᵉ ᵐᵉ ᵈᵉᵖᵃʳᵃᶰ ᵃᵗᵘ ˡᵃᵈᵒ
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sorria-e-acene · 8 months
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saficouniverso · 10 months
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De REPENTE, namoradas
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Quando o assunto é amor, sabemos que o impossível pode se tornar surpreendentemente possível. E a história de Patrícia e Helena não poderia estar distante disso. Quando Helena Lancellotti é acusada de homofobia, o destino a leva a embarcar em um relacionamento com a treinadora de tênis de seus filhos. Apesar das diferenças marcantes entre as duas mulheres, as coisas começam a fugir do plano cuidadosamente traçado por Lancellotti quando elas se envolvem emocionalmente e acabam se apaixonando além do que jamais imaginaram.
Sabemos que os clichês são bem-vindos em um romance lésbico, mas a autenticidade e a narrativa divertida com que essa história é contada me deixaram verdadeiramente impressionada. Esse romance vai muito além de uma simples aventura adolescente ou de um momento fugaz no tempo, ele revela o que está por trás de um relacionamento entre duas mulheres. As perspectivas das duas personagens são essenciais para transmitir aos leitores todas as confusões mentais e sentimentais que enfrentamos quando nos apaixonamos. Alguns momentos podem ser previsíveis, mas a maneira como a história é conduzida até esses eventos é realmente envolvente.
Além das questões LGBTQIAP+, a trama aborda problemas relacionados à família, inseguranças, diferenças sociais, machismo e até mesmo a cultura do cancelamento, tudo isso sem exagerar. Há um toque de humor nisso também, rsrsrs. Apesar de ser um spin-off do livro "Só Por Um Verão", você pode desfrutar plenamente de "De REPENTE, Namoradas" sem ter lido o livro anterior. Gostei muito dessa obra e aqui fica minha recomendação sincera e meus parabéns às talentosas escritoras Gisele e Bruna Baldassari.
Em breve, trarei mais uma das suas histórias incríveis para o blog.
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elasamamelas · 1 year
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Crescemos em uma sociedade que diz o tempo todo que o certo, que o normal, que o natural é se apaixonar, é beijar, é amar, é namorar, é casar com o sexo oposto e aí crescemos e aos poucos vemos que não, não temos esse tipo de sentimento pelo sexo oposto e sim por alguém do mesmo sexo.
O medo vem, afinal, todo mundo diz que é errado, que é ruim, que não é natural.aí vem O medo da rejeição, o medo do julgamento, o medo de não ser aceita. Travamos uma luta interna, a luta de auto aceitação, a luta de desconstrução dos próprios pensamentospreconceituosos e nada mais importante do que a auto aceitação, o auto amor.
Texto: Bler. Não copie, compartilhe
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imninahchan · 1 month
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𓏲╰ ᰔᩚ · # ﹕꒰ ENZO MATÍAS ESTEBAN FRAN
⠀⠀ ⠀⠀ ⠀⠀ ⠀⠀ FELIPE AGUSTÍN SIMÓN ꒱ ↷
⌜ 𝐀𝐕𝐈𝐒𝐎𝐒: headcanon narrado, sexo sem proteção, dirty talk (degradação, dumbification, elogios), pegada no pescoço, masturbação fem e masc, tapinhas, cockwarming, manhandling, breast/nipple play, humping, somnophilia(?), exibicionismo, cigarro ⋆ .⭒˚。⋆ ⌝
𓍢ִ໋🀦 VOCÊ ACORDA EXCITADA APÓS UM SONHO ERÓTICO ─────
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✰Ꮺ !𝐄𝐍𝐙𝐎
O sono leve o faz abrir os olhos no primeiro som agudinho e manhoso que ecoa da sua garaganta. Suspira, esfregando os olhos para conseguir focar na silhueta que o seu corpo forma sobre a cama, ao lado dele, os feixes de luz do banheiro penetrando por baixo da porta do quarto. Nena, te chama baixinho, toca no seu braço.
Você sobressai, desperta de imediato, um pouco confusa, piscando os olhinhos em meio ao escuro da madrugada. “Te acordei, amor?”, o som da voz dele é rouco, aveludado, tem ternura quando percebe que você ainda estava dormindo antes dele mexer contigo. Acaricia o canto do seu rosto, “desculpa. Me desculpa, okay? Vem cá”, te leva para mais próximo, até que entrelacem as pernas e a sua cabeça descanse no peito masculino. “É que você ‘tava resmungando, pensei que estivesse falando comigo...”
Um bocejo escapa da sua boca, arrasta o rostinho contra a blusa de algodão que ele usa de pijama, “eu ‘tava sonhando só”, conta.
“Sonhando, hm?”
“É. Com você.”
Os seus olhos se acustumam com a escuridão, as pupilas dilatadas oara dar tempo de flagrar o sorriso repuxando na face do uruguaio. Você respondeu de uma forma tão genuína que ele recebe a informação com ramance de imediato, o afeto que sente por ti dominando os ânimos quando descobre que nem quando está desligada, dormindo, a sua mente é capaz de esquecê-lo. Mas você sabe, bem sabe, o conteúdo desse sonho. O corpo quente, as têmporas suadinhas. Vem, vamo’ dormir de conchinha, ele te toma entre os braços, encaixa-se na sua costas. Um beijo estala na sua bochecha. Pode ouvir a respiração masculina ao pé do seu ouvido, o suspiro de relaxamento. Você até fecha os olhos de novo, morde o lábio, pisando em ovos com a vergonha para instigar não quer saber o que aconteceu no sonho?
“Não, cê não...”, ele começa a se justificar, mas para no meio do raciocínio. O silêncio que se instala no quarto por esses míseros segundos até que ele saque as circunstâncias é de fazer os seus joelhos se apertarem um contra o outro, na espera. Poderia ser pornográfica e explicitar todo o cenário que a sua cabeça criou, só que não precisa pois Enzo puxa o ar para os pulmões, ah..., compreendendo tudo sozinho.
Te abraça com mais força, a virilha sendo jogada contra a sua bunda, como se quisesse fundir seu corpo no dele. O sonzinho da risada soprada na região posterior ao seu ouvido te arranca um arrepio. “Então, é isso que fica se passando na sua cabecinha quando tá dormindo? Essas coisas feias...”, e você se encolhe mais, o eco da voz rouca de sono repercutindo por ti inteirinha. A ponta do nariz grande roçando na sua bochecha, a mão que antes só te envolvia, agora subindo para apertar o seu seio. Quanto mais ele empurra o quadril contra ti, mais vontade tem de espaçar as pernas para que ele possa colocar logo.
Para Enzo, é muito bom saber que aparece nos seus sonhos, e melhor ainda quando te come tão bem durante o dia que quando você deita a cabeça pra descansar ainda está pensando nele. “Eu já te fodi hoje”, sussurra, os dentes mordiscam pela sua nuca, “Duas vezes, nena... e você ainda quer mais?”, segura na sua mandíbula para virar seu rosto pra ele, sela os lábios nos teus, “Ah, uma mulher tão bonitinha, mas que só pensa em levar pica, olha, até sonha...”, e você chama o nome dele, Enzo, prolongando a última sílaba num dengo sem igual só para que ele possa te calar com um ‘shh’, um murmuro de tranquilizante, garantindo, “sem chorar, nena, não precisa chorar, tá?”, é ágil pra te livrar do short de pijama e trazer a ereção. “Calma”, sopra, com outro sorriso, se ajeitando pra entrar, “aqui, toma...”, desliza, ocupando, a umidade intensa fazendo ir lá em cima de uma vez só. Tão molhadinha, ele não deixa de citar, “sonhou que eu ‘tava te fodendo tão bem assim que ficou toda molhada desse jeito, amor?”
O toque da mão alcança a sua garganta, envolve, enquanto o quadril se arrasta no colchão, indo e vindo, pra preencher o seu interior. Assim, de ladinho, debaixo da coberta, tudo parece ainda mais quente, gostoso. Você fica paradinha, conquistada, recebendo o que ele te oferece, na velocidade que quer. Se permite entreabrir os lábios, mansa, pra só perceber que está até babando quando a saliva vaza pelo cantinho da boca e atinge a fronha do travesseiro.
“Bobinha...”, Enzo ri, limpando pra ti com as costas da mão. Pega na parte traseira do seu joelho e ergue a sua perninha um pouco pro movo ângulo facilitar melhor. Mas, às vezes, se o ritmo aumenta, ele escapa de ti, de tão babadinho o pau escorrega pra fora muito fácil, os seus remungos se misturando ao dele, ah, não..., sendo o tom do homem com aquele resquício de deboche, como se tirasse uma com a sua cara. Um sorriso vadio que é melhor você nem se virar para flagrar. “Vai ter que ser devagarinho, okay?”, diz, retornando pro compasso lento, torturante de meter, os pés da cama nem remexem contra o piso do quarto. Morde o lóbulo da sua orelha, “mas prometo que não paro até encher bastante a sua bucetinha de porra, tá bom?”
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✰Ꮺ !𝐌𝐀𝐓𝐈𝐀𝐒
No cômodo escuro, a única fonte de luz vem do celular do argentino. Corre o dedo e os olhos pela tela do aparelho, entediado, sem vontade alguma de fechar os olhos e dormir. E ao contrário dele, você não demorou a pegar no sono na hora que vieram pra cama. Tão apagada desde do dia cansativo que a mente descontrai a sua tensão com o mais promíscuo dos cenários, não é mesmo? Se entrega ao devaneio inconsciente, o corpo virando de bruços, o quadril empurrando contra o colchão pra virilha roçar. Se encolhe, o cenho franzindo, um resmungo doce ecoa da garganta, o nome do rapaz reverberando abafado, Matí...
Os olhos de Matías vão pra ti, acende a luzinha do abajur na mesinha de cabeceira pra poder ver melhor. O sorriso brota tão fácil nos lábios que tem até que se conter pra não soltar um risinho. Quer ver até onde seu corpo vai, se vai mesmo se esfregar no colchão na frente dele — o que internamente está desejando que aconteça. Mas você para, o som da respiração ecoando mais alto, como se o possível sonho erótico tivesse chegado ao fim justo agora que ele te notou. Por isso, tem que se aproximar, implicar.
“Você é tão putinha, meu deus...”, sussurra ao pé do seu ouvido. Matías, que susto, você rebate de volta, despertando num sobressalto. Aperta no ombro dele, quando o corpo masculino pesa sobre o seu propositalmente. “Tava fantasiando peripécias comigo, né? Nossa, que piranha...”, e a sua reação menos irritada é estalar a língua e tentar empurrá-lo pro lado, sem muito sucesso, porque ele pega nos seus pulsos, te domina toda só pelo prazer de continuar provocando feito um pestinha. “Até dormindo você pensa na minha pica, garota. Eu posso te comer o dia inteiro que ainda vai sonhar que eu tô fodendo, não é? Ah, que cérebro de puta cê tem.”
Ai, cala a boca, cara, você rebate, virando o rosto pro outro lado, longe de onde sente a ponta do nariz dele roçar. “Ih, mas tá bravinha, é? Tá bravinha?”, e você jura, o sangue até ferve quando ele começa com esse tom debochadinho, “você que sonha com a porra do meu pau, geme o meu nome e tudo, e você que tá bravinha?”
“Eu não gemi seu nome!”, devolve, convicta, mas ele tem o gosto de te garantir que sim, gemeu sim, e igual quando ele tá metendo tão forte que você fica burrinha, de olhos revirando. “E daí?”, você o olha com pouca paciência, “E daí, cara?! O que que tem? O que cê vai fazer?”
O que eu vou fazer?, o argentino repete a pergunta sugestiva que você jogou no ar mesmo sem perceber. Está sorrindo de novo, canalha. De repente, se ergue, te solta. Senta sobre as panturrilha, bem entre as suas pernas, a carinha mudando pra uma expressão plena, inocente. “Não sei, nena”, dá de ombros, “O que você quer que eu faça, hm?”
Você pousa o olhar na figura dele. Sem camisa, só com aquele short de pijama que você sabe que não está usando nada por baixo. Matías não vale nada, é tão vadio quanto você, com certeza tem algo em mente. E não está errada. Ele enrosca o antebraço por baixo dos seus joelhos e te arrasta pra mais perto. As mãos tocam no interior das suas coxas, vão descendo e descendo até a virilha. “Quer que eu transforme seu sonho em realidade, é isso? Quer que eu te foda igualzinho você sonhou?”, questiona, sem tirar os olhos de ti. Os dedos alcançam a barra da sua calcinha, desenha pela costura, chegando até onde o tecido está molhadinho. “É isso que você quer?”, arreda pro cantinho, só levando agora o foco pra sua buceta babadinha de excitação. “Poxa, deve ser isso que você quer, né? Mais pica, porque o que ganha normalmente não é suficiente pra essa buceta gulosinha”, deixa um tapinha ali, que te faz crispar os lábios, sentindo a região esquentando. “Mas eu deveria te foder? Deveria, mô?”, pende a cabeça pro lado, fingido.
Não demora a colocar a ereção pra fora, porém. Segura a si própria entre a palma da mão, fecha os dedos ao redor da rigidez, na vontade que as circunstâncias o despertaram. “Pior que eu acho que você é tão cachorra que deve ter mentido tudo isso só pra ter uma desculpa pra pedir uma foda”, acusa, casual, te fazendo morder a isca pois se apoia sobre os cotovelos para rebatê-lo não menti nada. “É?”, ele chega mais perto, o olhar devorando os seus lábios torcidinhos num bico adorável, “Então, cê é só a cadelinha mais burra por pau que eu já conheci mesmo.”
Você vê a cabecinha batendo contra o seu clitóris, resmunga baixinho, porque está com o pontinho tão sensível de tesão que o simples choque te faz arder. E o jeito que ele se esfrega por ali é cruel, principalmente quando leva até no buraquinho, aponta e tudo, mas não afunda. Matí..., o nome ecoa da sua garganta, numa súplica. Ele sorri, ladino, “Isso. Foi bem assim que cê gemeu meu nome ainda agorinha”, diz, “Geme de novo. Me pede pra meter em você, vai”, encoraja sem vergonha alguma, “Chora um pouquinho pelo meu pau, e eu prometo que coloco em você, princesa. Juro de dedinho”, mordisca o próprio lábio, se divertindo com a sua cara de irritada retornando pra face.
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✰Ꮺ ! 𝐄𝐒𝐓𝐄𝐁𝐀𝐍
Ele não está dormindo. A posição é reconfortante, a mão espalmada na lateral da sua barriga, a lateral da face deitada nos seus seios. Gosta de sentir o seu corpo tão pertinho, do jeito que está abraçada a ele, com os dedos nos cabelos do homem. Mas não é a melhor das circunstâncias pra pegar no sono; depois de um dia estressante, a cólica roubando todo o seu bom humor, só queria poder tê-lo guardadinho dentro de si, ficar cheia, aconchegada, ao ponto que o conforto é tamanho que fecha os olhinhos e dorme fácil fácil de tão cansada.
Esteban te oferece o que necessitava, se enterra todo e fica quietinho, só te ouvindo ressonando, completamente entregue. Já planeja sair de fininho, com cuidado pra não te acordar, quando você espasma, apertando-o com mais força, contraindo ao redor dele. Ei, o que foi?, a voz do argentino soa calminha, vai invadindo os seus ouvidos conforme ganha consciência. Ele ergue o torso, toca no cantinho do seu rosto, afetuoso, “O que foi, cariño?”, sopra. Os seus olhos se abrem devagarzinho, sendo a face do homem a primeira coisa que vê, à luz da televisão ligada no quarto, o player do filme pausado na metade da reprodução.
Os fios dos cabelos dele estão bagunçadinhos, os lábios entreabertos, e aquele olhar carinhoso te derrete toda assim que nota. Kuku, chama num tom choroso, travando mais as pernas na cintura dele. “Oi, tô aqui, meu amor”, ele assegura, colando a ponta do nariz na sua, “Você me assustou... Teve um sonho ruim?”, quer saber, e você nega, não, bem baixinho, “É? Foi um sonho bom, então?”
Muito bom, a sua resposta ganha um sorriso levinho dele, quase que de alívio. Mas é só o seu quadril começar a remexer por baixo do homem que a sua fala recebe a interpretação correta. Esteban desde a mão pra entre as suas pernas, tem que esgueirar o dedo pra tocar no melzinho que escorre pela ereção e parte justamente de ti. Não era pra estar tão molhadinha assim se estava dormindo, a não ser que...
“Me fode”, você pede, com charme. Ele retorna a atenção pra ti, sorrindo, não diz uma só palavra, ainda aparentando incrédulo com a verdade. A carinha de lezado te dá mais tesão, leva a resmungar com dengo, rebolando, praticamente implorando pra ele realizar só mais esse desejo seu. “Nossa, cê tá tão manhosinha hoje...”, o escuta apontando.
É que eu tô ovulando, justifica. “Não tá, não”, ele desmente, “Te fodi durante o seu ‘período fértil’ todinho, princesa, não é possível que você ainda precise tanto de pica...”, o tom de voz masculino permance tranquilo, o que é ainda pior pra sua sanidade, porque ouvi-lo te negando, com tanta gastação, é mil vezes mais excitante. “Tô começando a achar que é você que é uma menina muito desesperadinha, sabe? Eu não ligo de te comer todo dia, mas será que se passa outra coisa na sua cabecinha senão a vontade de dar a bucetinha pra mim?”, está te olhando com os olhos cheios de ternura, “hm?”
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✰Ꮺ !𝐅𝐑𝐀𝐍
“Bom dia, flor do dia”, a voz agudinha dele sopra ao pé do seu ouvido. Não só te desperta do cochilo da tarde, também traz um sorriso enorme pro seu rosto, os ombros encolhidos debaixo da figura masculina que te envolve sobre a cama e beija o seu pescoço. “Pensei que não fosse mais acordar...”, aí ele deita ao seu lado, de braços abertos, o rosto virando para te olhar. “Hoje é sábado, são umas cinco da tarde, só pra te situar.”
“Para, eu não dormi tanto assim...”, você retruca. Levanta as costas do colchão, esfrega os olhinhos. Quando se senta, as mãos acabam descendo pelo corpo, automáticas, pra tocar entre as pernas. A umidade te incomoda, te faz questionar na verdade. Não se lembra de nenhum estímulo que pudesse te deixar mais molhada que o normal ao acordar pela manhã. Os dedos voltam meladinhos, chamam a atenção de Francisco, que se apoia nos cotovelos, exibe um sorriso.
“Hmm, sonhou comigo, foi?”, te caçoa de imediato. Mesmo que a sua reação seja estalar a língua, olhando para ele com cara feia, ainda não eo suficiente para lacrar os lábios do garoto. Inclina o corpo na sua direção mais uma vez, a face indo de encontro com a curva do seu pescoço para mergulhar ali, “E o que eu tava fazendo nesse sonho que te deixei assim, hein? Hein?”, pesa por cima de ti, de faz deitar sobre o colchão de novo, rindo, “Eu te fodi gostoso, é? Hm?”, mordisca a sua pele, esfrega o nariz por baixo do lóbulo da sua orelha. “Eu te comi assim?”, de prontidão se coloca no meio das suas pernas, segurando nos seus joelhos para separá-las mais. A virilha encosta em ti, praticamente ensaia a estocada fictícia.
Francisco!, você repreende, porém perde todo o crédito porque está rindo. “Já sei!”, o sorriso travesso na face do argentino denuncia que está pronto para alterar a posição, “Eu te comi assim”, facilmente te vira de bruços, puxa o seu quadril pra te empinar, mas você foge do toque, cai com o peito no colchão, para, seu bobo, gargalhando de tamanha gozação. E ele vem por cima, deitando a cabeça nas suas costas. Segura no cós do seu short de pijama, brinca com o tecido, fazendo uma horinha antes de perguntar, como quem não quer nada, “vai ficar molhadinha assim mesmo?”
Você espia sobre os ombros, sorri, “por quê?”
Ele quer fazer pouco caso, indiferente, mas o sorriso também invade os lábios, “ah, se o meu amorzinho sonhou comigo, nada mais justo do que eu dar pra ela igualzinho ela sonhou, né?”, a proposta te agrada, bastante. O argentino muda a direção para se deitar com as costas no colchão, a cabeça na direção dos pés de cama. Bate a palma da mão por cima da bagunça de lençóis, “Vem, senta na minha cara”, convida sem pudor, “deixa eu te chupar, cê é tão gostosinha...”
“É?”, você se livra rapidinho do short antes de engatinhar sobre ele. Para com o rosto sobre o dele só pra deixar uns beijinhos estalados, uhum, ele confirma num murmuro, vai ser meu café da manhã. E você ri, soprando ar contra os lábios dele, “tá bom... mas eu também quero meu café da manhã.”
Ele faz biquinho, esticando os lábios pra tocar nos seus de levinho, “aí, eu deixo você me mamar, pode ser?”
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✰Ꮺ !𝐅𝐄𝐋𝐈𝐏𝐄
Talvez seja por causa dessa posição, do toque quente dele. Os corpos abraçados sobre o colchão, a cabeça de Felipe no seu ombro, o joelho dele entre as suas pernas, e a palma da mão segurando o seu seio por baixo da blusa do pijama. Com certeza é isso, porque foi só fechar os olhinhos pro cochilo da tarde que a mente foi longe, desligou, e acendeu o cenário prazeroso das mãos e da boca do argentino tomando os seus peitos. E despertar, excitada, com o contato certinho da forma que imaginou não facilita nada, não é mesmo?
Luta contra o próprio anseio, mesmo que o formigamento abaixo do umbigo seja desesperador. Quanto mais tenta não pensar na fantasia, mais o cérebro revisita as cenas eróticas. Vívido, se lembra de tudo. Das mordidas nas mamas, da língua molhada chupando a pele, e até do som estalado que a boca fazia ao mamar os biquinhos. Respira fundo, tentando se controlar. Pensa em se erguer, em deixar a cama para ir se saciar sozinha, porque o rapaz pesando por cima de ti até ressona, no sono profundo.
Sente os mamilos durinhos, tanto que o resvalar no tecido da blusa é torturante, incomoda. As mamas aparentam o dobro do peso, embora paradinha, só englobando a carne, a palma dele é capaz de te instigar, desejar que aperte, mesmo sabendo que doeria. Seria muito pervertido da sua parte se se esfregasse no jeolho dele só um pouquinho? Tipo, só um pouquinho, só... Devagarzinho, com cuidado, nem o acordaria... Ai, nossa, se sente muito suja por não conseguir se aguentar. Remexe os quadris, lento, o bastante pra roçar o pontinho sensível e conseguir um alívio.
Solta o ar dos pulmões. Pode ser que esteja presa demais ao próprio deleite porque parece alheia ao seu redor; ao som distante da televisão ligada no cômodo ao lado, da cidade, da respiração do Otaño. Rebola mais um pouco, o braço que envolve as costas do argentino o segura com mais vontade, os dedos procurando pelos fios dos cabelos espessos dele. Ar escapa por entre a sua boca, num arquejar. E morde os lábios, de imediato, julgando que fez barulho demais, até cessa o movimento dos quadris.
Mas o ecoar rouquinho da voz masculina te desconcerta, “continua, bebê”. Felipe arrasta a face pelo seu colo, com ternura, ainda está grogue de sono, dá pra notar, só que a disposição de te oferecer prazer sobrepassa qualquer outro desejo que tenha nesse momento. Ele encaixa melhor o joelho entre as suas pernas, a palma da mão se fecha ao redor do seu seio, com firmeza. Arranca um gemidinho doce, reclamando da pontada que sente no biquinho e se deliciando com a rigidez do toque ao mesmo tempo.
“Pensei que estivesse dormindo”, ele cochila, o ar soprando no seu pescoço, “mas a minha garota é insaciável, tô achando... Aposto que até sonha comigo fodendo ela”, e o jeito que você se retrai toda leva Pipe a cogitar que está mesmo correto. Levanta o olhar pra ti, aqueles olhinhos claros te mirando com brilho, um pequeno sorriso ameaçando tomar conta dos lábios. “Ah, nena...”, se entrega total ao escárnio, ao ego inflado pela constatação, “queria muito que você não fosse essa cadelinha boba que tu é, mas não dá, né? Cê não se aguenta”, sobe a barra da sua blusa, traz pra fora só os seus seios para poder usurpar do local todinho. Chupa um, continua apertando o outro, com apetite. Solta o biquinho duro num estalo, a face corada e a voz bêbada pra zombar “não pode me ver que precisa de atenção, não é?”, fricciona os dedos no outro mamilo, “é uma putinha muito necessitada de carinho. E tanto faz como eu vou te comer, né? Posso ficar só mamando nos seus peitinhos”, afunda o rosto no vale dos seus seios, esfrega a ponta do nariz ali, “te colocar pra rebolar na minha coxa, ou te dar pica. Tanto faz. Tanto faz pra quem é a cachorrinha desesperada preferida do Pipe, né?”
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✰Ꮺ !𝐀𝐆𝐔𝐒𝐓𝐈𝐍
Você deita de bruços, a lateral da face deitada no braço esticado do homem. Não é sempre que isso acontece. Na verdade, nem se lembra da última vez. Normalmente, vai deitar tão cansada que a mente nem tem tempo de fantasiar. Mas a circunstância inesperada não é um problema, nem de longe. Se tem algo que Agustín já deixou bem claro que não dispensa é a oportunidade de te foder.
Toca sobre o peitoral nu, chamando o nome dele baixinho. O argentino suspira, despertando, “oi, nena”, dizendo. Eu queria que você me fodesse, você vai direto ao ponto, sem rodeios. Um silênciozinho domina o quarto por um momento, a lascividade das suas palavras causando tensão no ambiente, porém é só o tempo necessário para ele ganhar o domínio do próprio corpo e se levantar para acender a luz no interruptor.
O sorriso ladino dele é a primeira coisa que você vê, torna-se impossível controlar o seu próprio, mordendo o lábio, travessa “Então, a minha mulher me acordou só pra pedir pica...”, ele balança a cabeça negativamente, fingindo alguma decepção, “tsc, onde é que eu fui arrumar uma puta tão emocionada...”
Eu meio que tive um sonho contigo, você explica. Ele se aproxima da cama de novo, o joelho afunda no colchão macio, “é mesmo?”, a cabeça pendendo pro canto. Você me comia tão bem que eu não vou conseguir dormir mais, murmura, com manha, aquela carinha de anjo, os lábios crispadinhos só pra apaixonar o homem. “Entendi”, ele diz, “aí, precisa que eu te dê um trato pra poder ficar bem cansadinha e pegar no sono mais fácil, né?”
Uhum, é exatamente isso que você precisa. “Beleza”, ele estica a mão para pegar no seu tornozelo e sem dificuldade nenhuma te puxar até a borda da cama. “Vou te comer bem, daquele jeito que deixa as suas perninhas tremendo. Você sempre dorme igual um anjinho depois”, segura no seu quadril, te vira de modo que possa te colocar de quatro. Só afasta o tecido da calcinha, o dedo correndo pela umidade exacerbada, “molhadinha desse jeito... Seria até pecado se não me deixasse meter em você, linda.”
A mão entrelaça nos seus cabelos, desce na nuca, aperta. É uma pegada bruta que te faz arrepiar, toda empinadinha nessa posição, apenas esperando ardentemente que ele coloque em ti. O arranhar dos dedos na sua cintura, segurando pra poder se encaixar certinho. Não tem motivo pra não pôr tudo, com tanto melzinho escorrendo, a ereção vai inteira pra te rechear. E já que vai te foder da forma mais canalha que conheça na intenção de deixar cansadinha, os tapas estalados não podem faltar. A carne da sua bunda até queima, o corpo todo estremece, o gemido dengoso escapando na sua voz quebradinha. Chega a se perguntar se os vizinhos conseguem ouvir, pelo menos, o estalo do tapão... Ah, que vergonha... Mas eles que se danem dessa vez, vai, você necessita uma boa foda pra literalmente apagar sobre o colchão depois de bem gozadinha.
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✰Ꮺ !𝐒𝐈𝐌𝐎𝐍
Abre os olhos, o corpinho ferve, as pernas enroladas no lençol da cama dele. Ainda consegue sentir a buceta latejando, e não sabe se é reflexo das estocadas fortes de agora há pouco ou da fantasia despudorada que levou todo o prazer que sentiu da foda pra sua mente desacordada.
Com as pálpebras cerradas, de bruços, desce a mão lá pra baixo, pressionando o antebraço contra a barriga. Tem que tocar pra ver o estrago. Desabou no travesseiro depois do terceiro orgasmo, sem ânimo pra mais nada, nem um sorrisinho ou um ‘obrigada’, e com esse maldito sonho, então, deve estar ainda mais babadinha, né? Pô, e põe babada nisso. A mistura das jorradas de porra entre os lábios íntimos inchadinhos, o interior das coxas, junto da excitação atual. Sente o clitóris dolorido, como se clamasse por uma atenção ali, mesmo que pouquinha, quando puxar a mão pra fora de novo. E até ia ceder a si própria, claro, mas só se o riscar do isqueiro não te fizesse abrir os olhos.
“Dorme uns quarenta minutos direto e, quando acorda, a primeira coisa que faz é se dedar escondidinha...”, a voz masculina ecoa nos seus ouvidos. Vê a silhueta do homem, apoiado no parapeito da janela aberta, a luz do pôr do sol criando o desenho do corpo seminu. O cigarro sendo tragado; a fumaça jogada no ar. Se força bem as vistas, também dá pra notar um sorrisinho sacana na face do argentino, “...eu sempre escolho as mais vagabundinhas mesmo...”
Você levanta parte do torso, se apoiando no cotovelo para retrucá-lo, “cê bem que podia me foder. Eu tenho meus dedos, sim, mas cê tem os dez e um pau à toa”. Ele ri, soprado, espia na sua direção por cima dos ombros, “te foder, é?”, sopra a fumaça, “de novo?”
A entonação é maldosa, de escárnio. “Se eu meter em ti mais uma vez, linda, cê vai se apaixonar.”
É a sua vez de rir, dando a ele um gole do mesmo tom de gozação. “Cê precisa de mais que uma pica pra me fazer apaixonar, Simón.”
É?, ele se vira pra ti, os braços sustentando no parapeito. “Engraçado. Eu juro que quase ouviu um ‘eu te amo’ mais cedo, os seus olhinhos brilhando só porque a minha pica tava metendo em ti.”
Você revira os olhos, num suspiro. “Tá, depois a gente pode ficar de gracinha um pro outro, agora vem aqui e faz o que eu tô precisando”. E ele caminha até ti, de fato, a proximidade te levando a crer que foi respeitada, que toda a marra do argentino caiu por terra na sua primeira simples instrução depois de dar o gostinho pra ele do que é foder uma buceta.
Mas Simón se inclina apenas para alcançar o outro travesseiro, “quer gozar de novo, gatinha?”, e oferecê-lo, deixando por cima de ti, “se esfrega aí, você consegue”, e retorna pra janela, pra mesma posição em que estava antes.
Parece uma piada de mal gosto, a feição na sua cara já diz tudo que um milhão de palavras pra expressar a frustração não conseguiria dizer. Até poderia rebater, talvez contar pra ele que sonhou agora mesmo que dava pra ele mais uma vez porém sabe que só vai fazer a energia de puto dele crescer e não está com paciência pra ego de homem agora — ainda mais um hermano.
Muito bem, guia o travesseiro pra entre as pernas, se encaixa sobre, um ângulo bonzinho pra roçar. “Isso aí”, o escuta murmurando, os olhos fixados na sua figura, “viu como você consegue?”, o tom gozador não vai te afetar mais, pois já tem a mente feita com a sua provocação. Ignora tudo que Simón te diz, cada palavra suja, termo degradante. Deixa ele te chamar de putinha, de cadela, falar o quanto parece uma virgenzinha procurando um alívio no meio da madrugada porque não tem ninguém pra te comer. O seu foco é a performance, a sensação deliciosa que se constrói na boca do estômago.
Rebola, jogando o bumbum no ar, a bagunça úmida se espalhando pra fronha. A cabeça pendendo pra trás, a face de deleite sendo pensada para ser um doce aos olhos do argentino. Quer atiçá-lo — ao bruto, quer se vingar do ‘não’ que recebeu. Logo, os lamúrios se tornam mais audíveis, a voz torcendo no dengo, os gemidos vazando pelos lábios entreabertos. Simón, o nome dele ecoando pelo cômodo.
“Fala comigo, nena”, sente o toque quente da palma na sua bochecha, a carícia suave. Arrasta a bochecha nas costas da mão dele, dócil, mas sem comunicar mais nada, quietinha. Se esfrega mais, mais, os quadris dançando por cima do travesseiro. Chega até a quicar, pornográfica mesmo, propositalmente gostosa demais para o homem que pega na sua mandíbula, aos suspiros. Quer dar um tapinha na sua bochecha, igual fez diversas vezes mais cedo, porém somente morde o próprio lábio, a outra mão apertando a ereção que se forma dentro da cueca. “Ah, sua cachorra...”, o resmungo em meio ao sorriso é o primeiro sinal do seu triunfo. Com certeza, ele pensou que você fosse choramingar, estupidamente implorar pra ser fodida pelo pau dele e nada mais que isso. Não esperava que o deslumbre de te ver tão exibidinha na cama assim, se masturbando, fosse uma possibilidade. “Cê não vai deixar em meter em ti agora, vai?”, pergunta mesmo já sabendo a resposta, recebendo o seu aceno negativo. “Pô, nem a cabecinha?”
Você ri, não, nega. E ele não desiste, aparenta ainda sustentar a marra de antes, só que, sem dúvidas, está mais mansinho. “E porra? Quer na boquinha? Não vai desperdiçar leitinho, vai?”
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jenniejjun · 3 months
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. ˚⁺↷ reneé rapp como sua namorada .
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𝐍𝐎𝐓𝐀𝐒 𝐃𝐀 𝐀𝐔𝐓𝐎𝐑𝐀:
olha só, surtei surtei surtei. não tem o que falar, eu surtei. isso aqui é só um headcanon porque não tô aguentando mais olhar pra essa mulher explodindo de gostosa e saber que não posso sentar na cara dela, juro. me aturem nessa! não especifiquei se a mc é famosa ou não, apenas que ela conhece a sabrina carpenter! essa vai pra minha companheira de surtos por essa mulher, @imninahchan !
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Você e Reneé se conheceram por meio de uma amiga em comum, Sabrina Carpenter. A loira apresentou vocês duas durante uma festa privada, Reneé tinha acabado de lançar seu EP em meados de 2022.
A conversa fluiu bastante, não é difícil com Rapp já que ela se mostra genuinamente interessada em tudo que você fala.
Talvez fosse coisa da sua cabeça, mas pra cada característica sua que citava, Reneé parecia ter um elogio na ponta de sua língua.
Naquela noite, vocês cantaram One Less Lonely Girl no karaokê de Sabrina. Era a música favorita de Reneé para esse tipo de ocasião.
Depois dali, era óbvio que sairiam de lá com seus respectivos números.
Reneé adorou você, seu jeitinho de ser e a forma como ria sempre que ela flertava com você. Saíram muitas vezes juntas.
Até o ponto em que eram inseparáveis.
Os fãs de Reneé te adoram, sabem o quanto você faz bem para a cantora e, por isso mesmo, não acreditam quando ela insiste que vocês duas são amigas.
Vocês duas andam de mãos dadas.
Quando não conseguem, os mindinhos se cruzam, pelo menos.
É a primeira pessoa para quem ela mostra suas músicas, óbvio.
Reneé adora ficar abraçada com você, principalmente quando está bêbada. Foi assim que vocês tiveram o quase primeiro beijo de vocês.
Até que ela dormiu no seu colo e acordou ao teu lado no dia seguinte.
Reneé é bem direta, logo, te chamou pra sair depois de acordar.
Vocês nunca oficializaram as coisas entre vocês, era muito claro que estavam juntas. Não houve um pedido.
Quando viram, já se chamavam de namoradas.
Espere ser a musa da maioria das músicas dela, inclusive das mais sacanas onde ela diz tudo o que gosta de fazer com você. A família de vocês que lute.
Ser a primeira na fila de todos os seus shows, inclusive ser a que ela vai puxar para o palco para cantar One Less Lonely Girl.
Os fãs idolatram a relação de vocês.
Muitas fotos. Muitas mesmo. Uma galeria cheia de fotos de vocês. Poucas delas vão pro Instagram.
Beijinhos preguiçosos porque a Reneé tem cara de malandra que vai segurar seu rostinho e te beijar bem devagar antes de algum compromisso apenas para se afastar e dizer que tá atrasada.
Ela falou que ama primeiro, você falou logo em seguida.
Ser a acompanhante dela em qualquer premiação que ela vá, você tá lá de trophy girlfriend.
Reneé se estressa fácil quando as pessoas ao seu redor são tratadas mal, por isso, pode esperar que algum dia ela vai surtar com alguém que te olhar torto.
Seus beijos deixam ela calma e você tira proveito disso.
Uma relação muito melosa, no bom sentido. Você ama ficar penduradinha na sua namorada, enchendo ela de beijos e abraços.
Ela te chama de “bebê” porque esse é o apelido favorito dela pra vida.
NSFW abaixo.
Reneé adora ficar de amassos contigo, é o passatempo favorito dela. Encontrou um cantinho quieto e que ninguém vai perturbar vocês, ela tá te deitando.
Os beijos de vocês são lentos, não só pela preguiça citada acima, mas porque ela gosta de saborear seu gostinho. Passar a língua nos seus lábios e chupar eles pra dentro dos dela, meter os dentes ali até você gemer baixinho.
Se prepara pra usar uma tonelada de base no pescoço, se você já não usa, porque Reneé Rapp só falta sugar sua alma pra fora.
Ela é o tipo de namorada que acha as mordidinhas de amor fofas, ver a marca suave dos dentes dela na sua traqueia. A forma como suas pernas pressionam o quadril dela, tentando se fechar pelo tesão que sente.
Ela ama teus peitinhos, apertar eles enquanto mói a intimidade contra a sua. Ela sente como se estivesse no paraíso com isso. Aperta, gira os biquinhos endurecidos de prazer pra te escutar lamuriar, puxa de levinho.
Mas o que ela gosta mesmo é de enfiar a boca neles.
Beija eles como se fossem tua boca, trava uma batalha ganha com seus mamilos como se estivesse chupando sua língua. A auréola sofrendo na boca faminta da Rapp. Pode ter certeza que ela vai chupar eles até eles ficarem vermelhinhos e você estiver choramingando que vai gozar.
Mas do mesmo jeito que ela gosta de você deitadinha feito boneca enquanto ela te usa de picolé, ela também gosta de ser cuidada.
Fica deitada enquanto sente você chupar ela, é o que ela mais espera do sexo. Vai do céu ao inferno ao te ver entre as coxas dela, abusando do nervinho que deixa ela toda molinha pra você.
A posição favorita de vocês, com certeza, é o 69. Assim, ela te come e você come ela. É o trato perfeito.
Reneé me passa uma vibe de quem não gosta de muita sujeira não, o sexo com ela é mais romântico, erótico. Parece que vocês tão pintando juntas. Ela é o tipo que te chama de “amor” na cama.
A tesourada come solta quando vocês tão juntas, vou apenas deixar isso aqui. Mas imaginem, vocês cobrindo a boca uma da outra e rastejando pelo ápice. Isso acontece muitas vezes.
O tipo que deita com você e dedilha tuas curvas, sorrindo bobinha porque te tem do lado dela. Passando “inocentemente” um dedo por um bico durinho ou enfiando a mão entre as suas pernas.
É isso, quero uma Reneé Rapp.
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toriverso ©️
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conexao-anth · 10 months
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Não quero tirar você da minha vida. Não temos motivo para ter raiva uma da outra, mas respeito se você não quiser, por algum tempo ao menos, falar comigo. Peço que tente entender a minha posição, e entender sobretudo que essa é a única solução que vejo para nós agora.
Há amores que nascem para cedo morrerem, e isso não os torna menos verdadeiros, apenas curtos. Assim está sendo com nosso amor que apesar de todo nosso esforço, não sobreviveu a um namoro à distância.
Sinto tristeza, é inevitável, mas também sinto esperança. Talvez esta porta se tenha fechado para que outras se abram depois. Não guardo rancores ou arrependimentos, e tudo que vivemos e senti ao seu lado, carregarei no coração e na memória pela vida com orgulho. Você foi um pedaço da minha vida, da minha história, e apenas desejo que seja feliz. Eu sempre irei te amar, minha Th
Ass: An
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littlegirlovhazz · 10 months
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Bad Boy? ❤️‍🔥
Oioi gostosinhas!
Muito obrigada por todo o amor que vocês deram a My property 🩵
Eu recebi esse plot nas asks e foi pedido que tivesse muito lactation e breeding kink, então aqui está, eu adaptei algumas coisa pro meu estilo. Temos Louis guitarrista com piercings e Harry professora delicadinha.
Avisos: Breeding kink (muito), lactation kink, spanking, ProfessoraxAluno, hinter, leve diferença de idade, desuso de camisinha, sexo dentro da faculdade.
Hazz: 26
Lou: 21
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Louis estava um pouco cansado, ele era um cara muito popular, extrovertido e fazia parte de uma fraternidade, eles eram uns mauricinhos, pegavam todas as líderes de torcida e as patricinhas da faculdade. Louis meio que odiava tudo isso, mas seu pai queria que ele entrasse, seu pai era um cara muito bom e ele lhe dava trabalho o suficente sendo totalmente diferente do que aquele homem que o criou, as tatuagens que cobriam seu corpo, os piercings em sua cara. Então ele fazia o papel de representar a fraternidade apenas causando confusão na faculdade, ele não entendia pq as pessoas ainda pareciam estar na escola, com toda rivalidade idiota e a perseguição pela popularidade e status.
Foda-se o que esse bando de gente achava dele, exceto por ela.
A nova professora estava na faculdade a menos de um mês, ela era novinha, com 26 anos e recém formada, era provavelmente a mulher mais gostosa que Louis já conheceu. A duas semanas atrás ele e os colegas planejaram uma pegadinha para dar boas vindas a nova professora, ele se arrependia amargamente, mas não podia voltar atras, não quando mesmo cheia de chantilly ela parecia tão apetitosa, com os olhos verdes em fúria, os peitos grandes lotado pelo doce. Louis queria que fosse sua porra.
A mulher de cabelos cacheados o abominava, apesar de ser um delinquente, o de olhos azuis era extremamente inteligente, com notas excelentes, e provavelmente era por isso que não tinha sido expulso, talvez seu pai ser parte do conselho também fosse um grande motivo. Desde o primeiro dia a professora tentou fazê-lo errar, na expectativa de uma detenção. Mas não conseguiu, apesar de saber que ele havia planejado a pegadinha do chantilly, ela não poderia afirmar, então ela o infernizava. Se ela soubesse o quanto seu pau ficava duro toda vez que ela o olhava com raiva, como se fosse bater em sua cara toda vez que ele dava uma resposta certa da matéria.
Mas Louis era um bom garoto e se ela o queria tanto na detenção, talvez ele devesse dar isso a ela.
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Harry o odiava, odiava com todo seu coração, mas seu corpo idiota não estava conversando com sua mente. Sua xotinha só faltava pingar quando via aqueles olhos azuis, o piercing na sobrancelha ou o no canto da boca que ele vivia prendendo entre os dentes ou as tatuagens nos braços definidos. Isso a deixava ainda mais puta, pq ela queria estapear sua cara tanto quanto queria se acabar em seu pau. Ela tinha se vestido um pouco diferente hoje, a saia curta era rodadinha e de couro marrom, sua blusa era branca de botões, como tecido era grosso não tinha um sutiã por baixo, seus peitos empinados estava livres, uma meia calça fio quinze cobria suas pernas e escarpins brancos estavam seus pés, era uma sexta, ela queria se sentir bonita. Seus cachos estavam bem definidos e acabavam um pouco abaixo de seus ombros, ela usava pouca maquiagem, apenas bastante rímel para que seus olhos ficassem destacados e os óculos com armação fininha e delicada, ela estava tendo um bom dia, até entrar em sua sala e se deparar com aquele inferno de garoto.
Louis usava uma tank top preta e jeans do mesmo tom, a tigelinha bagunçada e os olhos, a porra de seus olhos azuis elétricos a comiam com o olhar e a sobrancelha com o piercing arqueada em desafio, mas o maior problema era a guitarra, que ele tocava em pé em cima de sua mesa, era um rock muito pesado, mas os alunos pareciam se divertir. Após o episódio em que levou um balde de chantilly em sua cabeça e viu aquele sorriso debochado no rosto bonito, Harry sabia que ele seria problema, o tentou mandar diversas vezes para detenção, pq ela queria ensinar algumas coisas que seriam bem úteis para que o idiota usasse o cérebro, mas Louis a surpreendeu novamente, ele também era inteligente e falava com propriedade, isso fazia seu corpo se arrepiar ainda mais.
Os dedos do aluno tocavam rápido nas cordas, seus braços definidos eram destacados enquanto ele segurava a guitarra preta, o cabelo estava caído em seus olhos azuis que a devoravam com o olhar e ele tinha um sorriso com aquele maldito piercing que era leve e debochado, como se desafiasse Harry. Suas pernas estavam marcadas pela skinny apertada com uma corrente pendurada e coturnos pesados em cima da sua mesa, ele era a personificação de bad boy dos livros, chegava a ser ridículo. Ela deu passos tranquilos até a mesa e quando chegou perto, apenas levantou a mão em um sinal para ele parar, os outros alunos agora tinham se acovardado, mas claro que Louis não, ele apenas diminuiu a música para os acordes de stairway to heaven, essa era coincidentemente uma das músicas favoritas da professora de olhos verdes e parecia mesmo que o garoto poderia ser a escada pro paraíso, ou a barra para o inferno.
- Senhor Tomlinson, você pode descer? - Louis parou a guitarra e pulou para o chão, já que ele não era maluco de desobedecer alguém tão gostosa, então a mulher apenas lhe entregou o papel da detenção.
Harry não gritava e isso surpreendeu Louis, ele achava que a professora ficaria revoltada, mas esse não era seu jeito, a menos que estivesse sendo fodida, ela era calma e falava devagar. O garoto pegou o papel, o instrumento e se dirigiu para fora da sala, essa ao menos era sua aula, ele só precisava ver os olhos verdes cheios de ódio mas como ele era um idiota não calculou o fato de que ficaria o restante do dia de pau duro.
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Louis estava sentado na última cadeira do canto, existiam mais 6 pessoas na sala de detenção. Harry entrou vestindo aquela maldita saia, a meia calça delineava as pernas compridas e os sapatos de salto as deixavam ainda mais longas, ela era gostosa pra cacete, a camisa branca delineava os peitos gostosos, eles eras tão grandes e ele queria cobrir eles com o seu leite. Ela não colocou seus livros em cima da mesa e um outro professor entrou.
- Senhor Tomlinson, pode me acompanhar? - Ela disse com um tom doce e os pelos da nuca de Louis se arrepiaram, levantou de imediato pegando a mochila. - Como você é o único que eu coloquei na detenção, vai cumprir na minha sala.
Ele concordou rapidamente e Harry saiu rebolando na frente dele, o garoto a seguia como um cachorro pelo campus, babando por aquela bunda. A sala dela era uma graça, toda delicado, exatamente igual a ela, tinha uma mesa cheia de papéis e um sofá verde escuro no canto e um espelho a sua frente. Ela se debruçou exageradamente na mesa para poder colocar seus livros em cima e Louis teve a visão da polpa da sua bunda, ele não conseguiu segurar o riso, ela era tão oferecida.
- Acha algo engraçado, Senhor Tomlinson? - Ela disse se virando para olhar em seus olhos e apoiando a mão na mesa.
- Acho engraçado como você é oferecida, me deu uma detenção para se exibir pra mim? - As bochechas dela ficaram vermelhas mas ela não perdeu a postura, retirou os óculos e os pousou sobre a mesa. Louis estava bem perto dela agora e o tapa foi certeiro na bochecha dele, ela segurou o rosto do garoto surpreso com as unhas compridas pintadas de branco.
- Sabe Louis, acho que você precisa aprender uma lição, não sabia que garotos dessa idade eram tão mimados a ponto de necessitarem que sua professora os corrijam. - O sorriso no rosto do de olhos azuis era gingantesco, ela pagaria por aquele tapa, mas ele a deixaria sentir que estava no comando, ele ia destruí-la. - Queria saber o que se passa nessa cabecinha.
- Qual delas? - A covinha no rosto da professora era debochada. - Ambas só pensam em você e na sua bocetinha.
Louis olhou pra baixo e viu os biquinhos apontando no tecido grosso e a blusa estava manchada pelo leite que saia deles. A boca dele se encheu de saliva grossa, ele precisava mamar. Harry percebeu que os olhos azuis brilhavam para o leite manchando sua blusa, sempre que ela ficava muito excitada isso acontecia, a diferença era que ninguém tinha olhado para isso com vontade, geralmente o sentimento era de nojo.
- Você vai ficar quieto se eu te colocar pra mamar garotinho? - Ele voltou o olhar para o verde tão penetrante, seu pau pulsava na calça.
- Por favor gatinha.. - Louis implorou, ele não implorava, por nada, nunca.
Harry o puxou para o sofá e abriu os botões da camisa, liberando os peitinhos grandes, tão gostosos, a brisa fez com que seus biquinhos endurecessem mais e o aluno não pensou duas vez ao se sentar ao lado da professora e beijar seu pescoço, ela sentia o piercing gelado contrastar com o calor de sua boca, ele passou a mão pela barriga dela e chegou bem perto de seu ouvido.
- Você não tem um bebê, então por que seus peitinhos estão cheios de leite, me fala Hazz? - Ela choramingou quando o garoto pegou o biquinho direito entre os dedos e apertou, fazendo una gotinha de leite surgir na ponta.
- Eu.. eu fico assim quando estou excitada, eu vazo, por todos os lugares. - Ele lambeu uma faixa atrás de sua orelha.
- Uma vadia tão boa, o pacote completo. - Ele beijou o pescoço e distribuiu beijos até abocanhar o bico esquerdo, Harry gritou e foi a primeira vez que Louis escutou seu tom de voz alto, ele sugou com força, mamando forte até o gostinho doce invadir seu paladar, era a refeição mais gostosa que ele já havia provado, ele se esbaldou sugando cada gota, sentindo o leite escorrer até mesmo pra fora de seus lábios.
Sem parar de mamar, ele desceu a mão até a coxa coberta pela meia calça e acariciou até chegar no meio das pernas dela, onde a meia se encontrava encharcada então Louis sentiu o quão ela estava excitada, por que essa puta não usava o caralho de uma calcinha, bêbado do cheiro de pêssegos que ela emanava e pelo leite doce, ele rasgou a meia com apenas uma mão, para encontrar a boceta encharcada, ela estava tão molhada que o líquido escorreu em seus dedos quando ele a tocou.
- Você é uma vagabunda tão oferecida Harry, sem calcinha e dando aula pros seus alunos? - Ele disse parando de mamar e estimulando a xotinha dela, amassando seu clítoris entre os dedos. O tapa que ele deu no rosto dela foi tão forte que ficaria a marca de todos os dedos, ele segurou em seu queixo. - Abre a boca, Vadia.
Ela obedeceu, era como se um chave tivesse sido virada no momento que Louis tocou aquela boceta, a professora se tornava uma submissa, seu corpo estava mole e ela só queria obedecer. O Aluno cuspiu grosso dentro da sua boca e desferiu mais um tapa, sorrindo sádico e sentiu seus dedos molharem ainda mais quando ela gritou gozando.
- Agora sim Harry, uma professora boazinha. - Ele se levantou e Harry o olhou confusa, mas ele logo abriu o cinto e o zíper da calça, tirando seu pau pra fora, ela estava hipnotizada, era enorme, grosso, a cabeça arroxeada e as bolas pesadas, diversas veias cobriam seu pau e ele visivelmente pulsava. - Mama como uma boa vadia e eu vou te foder enquanto acabo com cada gota de leite desses peitos gostosos.
Harry tirou a blusa e a saia, se ajoelhando, ainda com a meia calça rasgada e os escarpins nos pés, ela estava de costas para o espelho, dando a porra de uma visão para o garoto, porra Louis achava cada pedaço do seu corpo uma perdição do caralho, ele estava com tanto tesão que seu corpo inteiro estava tenso, ele segurou os cabelos cacheados em uma mão só e deixou ela descer sozinha as primeiras vezes, ela babou em todo aquele pau, mamando devagar a cabecinha, sentindo o gosto de pré-gozo, até que ele passou a arrematar contra sua boca, era tão bom. O garoto era bruto, seu couro cabeludo estava ardendo, a garganta sendo massacrada pela cabeça macia e ele dava tapas em seu rosto, as lágrimas desciam por seus olhos sem permissão e isso parecia só incentivar seu aluno, sua xota pulsava e pingava no chão, seu leite escorria de seus biquinhos para toda sua barriga, ela estava uma bagunça do caralho.
- Caralho Harry, se eu soubesse que você era uma puta tão boa, eu teria pedido pela detenção, eu tinha colocado fogo na universidade pra poder foder essa boquinha. - Ele investiu mais 3 vezes antes de tirar seu pau, olhando para o rímel todo borrado e os olhos ainda mais verdes pelas lágrimas, ele cuspiu em sua boca e a viu engolir, batendo em seu rosto. - Boa garota.
Ele a levantou pelo pescoço, a jogando no sofá e nem perguntou, apenas alinhou seu pau na boceta molhada e meteu até o final.
- Louis! Porra, porra… Louissss. - Ela gritou e gemeu tão forte e delicioso, que o de olhos azuis sentiu seu pau pulsar, a boceta era tão apertada. - Fode, fode forte por favor.
- Oh baby, você é tão quente, meu pau encaixa tão bem em você. - Ele investiu tão forte, sentindo as paredes dela o apertando com tanta força, ele abocanhou novamente seu biquinho, mamando gostoso, fodendo ela sem parar. - Você vai gozar e eu vou te encher de porra e nem assim eu vou parar Harry, eu só vou parar quando eu tiver vontade, vou te encher de novo e de novo, olha pro espelho pra ver o quão gostosa você fica comigo te fodendo até o talo.
- Louis! Eu vou fazer xixi, para… por favor. - A boca sugando seu leite, os mamilos já sensíveis de tanto que aquela boca tomava, o leite escorria pela boca dele, o pau ia fundo na xota, era tão grande que ela sentia bater em seu útero, quando ela olhou pra baixo e viu a boca sair do bico e o leite escorre pelo queixo com a barba rala, o piercing reluzindo e os olhos azuis que a desafiavam, tudo explodiu.
Harry esguichou tão forte e gritou tão alto que provavelmente todos na faculdade ouviram que ela estava sendo comida por Louis, foi tão forte que expulsou o cacete de dentro, molhando o garoto e o sofá e nem assim ele parou, voltando a meter, sentindo seu baixo ventre esquentar ele acelerou até que a encheu de porra, gozando naquela boceta quente. Ele não perdeu tempo em chupar a xotinha, sentindo a mistura de sua porra e o gozo dela, sugando bem antes de beijar sua boca, cuspindo lá dentro e entrelaçando suas línguas, era sujo, obsceno e gostoso pra caralho.
- Louis.. amor.. goza mais, eu preciso de mais porra sua na minha bocetinha. - Harry implorou, ela amava isso, se sentir cheia de porra do seu macho.
Ele a levantou, a apoiando no espelho que havia enfrente ao sofá, em pé, a meia calça estava em pedaços, as coxas gostosas tremiam, mas o pau de Louis se recusava a amolecer, ele tinha tanto leite para encher ela ainda. Ele se esfregou na sua fenda, vendo o cuzinho piscar, mas ele deixaria pra foder ele com bastante tempo, gozar dentro e colocar um plug e fazer Harry dar aulas para os alunos babarem em cima dela enquanto era a sua porra presa naquele cuzinho. Isso fez uma chama de ciúmes subir no peito de Louis, como se lembrasse que essa era sua professora e provavelmente ela já havia fodido com alunos que não eram ele, com esse pensamento ele meteu dentro da boceta novamente.
- Com quantos você já fodeu, Harry? Quantos comeram o que agora é meu? - Ele segurava no cabelos cacheados e arrematava tão fortemente que o espelho tremia, segurou em seu peito com a mao enquanto beijava sua nuca.
- Ohh.. n-n-nenhum Lou, Caralho! Você foi o primeiro, e-eu não quero outro, só você me fode assim. - Isso encheu o ego de Louis e ele largou o cabelo dela para segurar nos dois peitinhos, maltratando com seus dedos enquando a segurava, o contraste das tatuagens e da pele branca, Harry em cima dos saltos e as pernas tremendo o deixam insano, falando que só ele a fodia assim.
- Você não vai foder com mais ninguém, nunca? - Ela concordou com a cabeça e ele deu um tapa em seu clítoris, o estimulando. - Grita Harry, grita o nome do teu dono! Você é minha puta particular.
- Louis! Você ta me fodendo tão forte… me enche de porra, me da todo o seu leite, eu quero sentir escorrendo. - Ela sentia o quão molhada estava e queria esquichar de novo, por que ele era tão bom, ele tocava cada cm do seu corpo, beijava sua nuca e falava em seu ouvido que ele era seu dono, como sua boceta era quente, gostosa e apertada.
- Ninguém levou meu pau tão bem, você foi moldada pro meu cacete. - Ele bateu forte em sua bunda, sentindo seu pau jorrar leite e ele continuou fodendo. - Olha o quão cheia você está Harry, to sentindo minha porra escorrer pelo meu pau de tão lotada de gozo que você está.
Isso mexeu com a cabeça de Harry, essa era coisa que ela mais amava quando fodida, estar cheia, sentir o leite quente em si, ela gozou tão forte, molhando suas pernas, Louis, o chão, o espelho. O Garoto a segurou pela cintura enquanto ela perdia a força, não parando de esguichar, seus olhos reviraram, seus peitos vazam leite, ela babava e o orgasmo atravessava seu corpo, parecia que eram 100 de uma vez só, ela ainda tremia quando Louis a deitou no sofá. Ela ainda se sentia em êxtase, quando desmaiou.
——————————
Harry acordou quando Louis estava terminando de limpar seu corpo com uma camiseta que tinha na mochila, ela se sentia exausta, extremamente mole, sua bocetinha doía e seu corpo também.
- Ei princesinha, você esta bem? - Ele era tão bonito, tinha um rosto perfeito, ela amava seus piercings, ele colocou a mão quente em sua bochecha e acariciou, também fazendo carinho em seus cachos. - Você foi tão boa princesa, tão boa pra mim. Posso te levar pra casa?
Harry o puxou para um beijo, entrelaçando suas línguas, sentindo o gosto delicioso da boca de Louis, ele estava a tratando tão bem. Ela choramingou com o quão boa era sua boca.
- Lou, mama mais um pouquinho? Eles ainda estão tão cheios. - Ele sorriu e não perdeu tempo, deitando espremido com ela no sofá e abocanhando o biquinho, sugando todo o leite docinho de leve, sentindo o sabor em suas papilas gustativas. - Oh, tão bom.
- Você é minha Harry, só eu posso ter isso entendeu? - Ela concordou com a cabeça. - Só eu posso mamar, só eu posso te foder e se for preciso vou foder sua xota e seu cuzinho, mamar nesses peitos no meio da sala de aula para todos saberem que você me pertence, entendeu?
Ela estava hipnotizada com os olhos azuis elétricos e com a boca dele suja do seu leite, só sabia concordar e quando ele voltou a mamar permaneceu até que eles adormecessem apertados no sofá.
📚📚📚📚📚📚📚📚📚📚📚
Quem quer parte 2 deles fodendo na frente de todos na sala de aula?
Me deixem saber e espero que tenham gostado 💚
All the love,
Blue.
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gardensofbabilon · 1 month
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Mamma mia! - Enzo Vogrincic x Fem! Reader
Você e Enzo são os dois atores sensação em hollywood no momento, após tanta insistência de seus fãs, um papel romântico com o galã uruguaio finalmente bate a sua porta.
a/n: deixem requests pfff
tw: palavrões...
popbase
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ATENÇÃO AOS CORAÇÕES LATINOS!!! seutwitter e nousotwiterrrr estarão na mais nova comédia romântica da netflix!! Preparados pra muita pegação no set?
vsgrincic AI CARALHO O ENZO TEM EMPREGOOOOOO
lovesenzito MENTIRAAAAAAAAAAA EU QUE PEDI
snpoems O SEU TRABALHO netflixes É PROVIDENCIAR MUITOS MIMOS PORRA
kukuesteban o boludo tem sorte pra caralho
juanicar enzo no oscar outra vez!!
10 meses depois
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seuuser Após longos 10 meses... ''Todos menos você'' está entre nós!! Foi um prazer poder trabalhar com tanta gente sensacional.. em especial meu fotógrafo pessoal vogrincicenzo (fotos tiradas por ele btw!)
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vogrincicenzo melhores meses da vida! adoro seu ser fotógrafo (curtido por seuuser)
suabff amiga!! quanto orgulho de você ahhhhh, que venham mais e mais conquistas, você merece o vogrincicenzo e muito mais hahahahah (curtido por vogrincicenzo)
juanicar *unwritten intensies*
user4 Queria tanto ser o enzo
⤷ snbrasil rt intenso, como é sortudo quem beija a boca Dela
user5 o enzo é um puta fotógrafo, se fosse eu me tremia toda com os olhos dessa mulher (curtido por seuuser)
todosmenosvoce Contem aqui se valeu a espera pra ver enzito e sn juntinhos!!
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vogrincicenzo Alguns registros da premiere de todosmenosvoce, tem sido uma jornada diferente e intensa.
Tive a melhor experiência da minha vida ao lado de uma mulher talentosíssima em tudo que se propõe (obrigado pelas fotos), foram 10 meses de risadas, brincadeiras, choros.. mas principalmente de cumplicidade e amor.
Espero que aproveitem tanto quanto nós!
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seuuser Desse jeito vamos competir para ver quem tira as melhores fotos!
⤷ vogrincicenzo Acho que vou amassar você igual no basquete! ⤷seuuser ENZO VOCÊ ME ROUBOU. LITERALMENTE
⤷ vogrincicenzo Você não sabe perder alalallaa
kukuesteban Que orgulho boludo!! Dale!! (curtido por vogrincicenzo)
user2 ahhhbahhasdbbe eles ficam se fotografando
netflixes Quando vão liberar as fotos que vocês tiram???!
user4 QUEREMOS TODOS MENOS VOCÊ (ENZO'S VERSION) (curtido por vogrincicenzo e seuuser)
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gqspain Essa semana temos uma edição abençoada! seuuser fotografada por vogrincicenzo na capa com uma entrevista de aquecer o coração dos dois! Link na bio para mais..
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user7 ''Enzo completou dizendo que em poucas vezes na vida foi atingido por um raio tão forte quanto aquele que o alcançou quando viu s/n pela primeira vez'' VOCê TA ME ZOANDO 😭😭😭😭😭😭😭
vogrinciclover ''Acho que ter conhecido o enzo durante esse período difícil da minha vida mudou quem eu sou hoje'' VOU VOM6TAR
seuuser obrigada gq pela oportunidade!! Não poderia ter sido melhor e o fotógrafo é sensacional 😊
vogrincicenzo Foi um prazer abrir meu coração e minha câmera para vocês! Até a próxima!
snbrasil ABRIR A CÂMERA??? ESSAS FOTOS SÃO ANTIGAS???? OIII?
3 meses depois..
popbase O sucesso de bilheteria e de crítica ''Todos menos você'' Com os atores seutwitter e nousotwiterr acaba de receber 5 indicações ao oscar! Parabéns aos nossos latinos!
enzosgf ENZO VOGRINCIC 3 VEZES OSCAR NOMINEEEE CHUPA
snsunshine É A ROMCOM SO SÉCULO
vgrincsns queremos um pedido de casamento no palco vai ser babadoooo
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seuuser Acordei com a notícia que somos 5 vezes indicados ao Oscar, que momento.
Enzo, o coração desse filme, não poderia ter feito nada disso sem você ao meu lado, essa indicação não é só minha, ela é Nossa, afinal nós somos um.
Muito obrigada a todos que assistiram ao filme, apoiaram a campanha e me auxiliaram até aqui, em um pequeno gesto de retribuição: um dump das gravações! A vida tem sido tão bondosa comigo.
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vogrincicenzo Mi cariño, estou estonteado de ser a pessoa que você compartilha as honras da vida, obrigado pelo ano e que ano. Você merece.
juanicar Pombinhooooos, vocês merecem!!
blaspolidori 👏👏👏👏
snbrasil Ai tem um cisco no meu olho. Que orgulho de dizer que estamos aqui desde o primeiro dia. (curtido por seuuser)
⤷ seuuser Eu sempre vejo vocês! Obrigada!!
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vogrincicenzo Família unida e comemorando, espero que a sn não me mate pela foto.. Eu te amo meu amor e futura mulher! Compartilhar todas as manhãs ao seu lado é uma benção, especialmente em dias como esses, a vida não parece real. Obrigado a todos.
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voceemeugirassol · 1 year
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Eu sempre soube que seria ela... Mesmo antes de sermos algo, já éramos tudo.
myself
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todo7roki · 4 months
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MINISKIRT - KEEHO
a/n: esse pedido vai para @keeholover infelizmente eu apaguei sem querer a ask que voce mandou, me perdoe?
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keeho x leitor!f
CONTEÚDO: smut, guarda-costas!au, richgirl!au, dirtytalk.
AVISOS: palavras de baixo calão, keeho trabalha para seu pai, ele te chama de coelhinha, pegação no provador, ele é meio canalha, ele dedilhando você.
Keeho odiava distrações no trabalho, porém, quando o trabalho é vigiar a filha do chefe, as distrações são constantes. Ele estava aqui para ser um dos melhores funcionários de seu pai, você não sabia dizer a função dele mas sabe que agora ele está te seguindo e grudado em você como um carrapato.
— Não precisava me acompanhar nisso, você sabe disso não é? — Você falava enquanto olhava algumas roupas em uma loja no shopping, Keeho estava atrás de você, com algumas sacolas na mão e arrumando seus óculos.
— Eu estou apenas fazendo meu trabalho.
— Fale logo que você é apenas um pervertido que deseja me ver provando roupas, eu juro que não vou ficar chateada. — Você parou de andar e olhou para ele. — Talvez eu até goste disso.
Ele sorriu, olhou para os dedos que agora estavam vermelhos por conta das sacolas pesadas, e olhou novamente para seu rosto.
— Nós dois sabemos que eu não preciso te espionar para te ver sem roupa, não é mesmo coelhinha? — Você não sabia o que responder, se virou para frente e voltou a olhar as roupas.
Keeho te deixou sem palavras, porém você não é uma mulher de ficar calada e quem fala por último sempre ganha.
— Eu vou experimentar algumas das roupas que peguei, se você quiser pode se sentar e esperar. — Você falou, pegando algumas sacolas da mão dele e indo em direção ao provador.
— Ou eu simplesmente posso assistir...
— Por Deus Keeho, não seja um pervertido sem vergonha. Fique aqui e eu sairei para que você possa ver as roupas.
Sua intenção era apenas chamar a atenção, mas provocar sempre foi seu ponto mais forte, e sua maior arma seria uma linda minissaia. Você vestiu e se ajustou bem ao seu corpo, seu reflexo no espelho era de se admirar. — E então? — Você abriu a porta do provador, o homem sentado ao banco tirou toda a atenção do telefone e olhou para você, para suas coxas.
— Você está tão gostosa, coelhinha.
— Eu fico imaginando se meu pai escuta você falando uma coisa dessas.
— Só assim para ele saber que a filhinha dele gosta de receber elogios depravados. — Ele olhou nos seus olhos e em seguida para seu lábios, suas mãos grandes foram de encontro com sua coxa nua. — Posso te ver provando as outras roupas? Na verdade, eu queria ver sua minissaia de perto, eu posso?
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O provador estava pequeno para vocês dois, as mãos de Keeho subia por suas pernas, passando por baixo de sua saia e seus dedos longos iam de encontro com sua calcinha. — Você sempre me deixa uma bagunça, eu te odeio coelha.
— Não me culpe amor, você que é cheio de tesão. — Lábios que alternavam entre seu pescoço e um beijo molhado, ele segurava sua carne com força, deixando marcas dos dedos dele, e beijava como se a vida dele dependesse daquilo.
— Quero te foder, eu preciso de você. — os dedos dele entraram em você, fazendo você gemer.
Mãos na sua boca, prendendo de leve a sua respiração. — Bem baixinho princesa, baixinho. — Keeho queria fazer você gozar nos dedos dele, ele queria sentir seu gosto antes de comer você.
— Você está tão linda com essa saia, eu quero que você fique com isso enquanto eu estiver comendo você.
— Pra alimentar seus sonhos eróticos? — Mesmo com muito tesão e com dificuldade para falar, você não perdia a oportunidade de provocar.
— Talvez, mas é que eu achei que sua bunda ficou ainda mais bonita nessa roupinha.
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hansolsticio · 3 months
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ᝰ.ᐟ chwe hansol — "minha mulher".
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— namorado sincerão! chwe hansol × leitora — gênero: fluff, sugestivo, angst. — conteúdo/avisos: vernon sem papas na língua, relacionamento estabelecido, linguagem imprópria, assédio!!! (se você tem gatilho, não leia, por favor.), menção a violência, choro, nonie com raiva, é o mesmo vernon de "calado" (mas pode ser lido sozinho), um tiquinho de comfort no final. — word count: 1381. — nota da autora: eu juro que tentei escrever um negócio engraçadinho e bonitinho igual o outro, mas o diabinho no meu ombro queria muito meter um angst nisso aqui, perdão.
"Vai Nonie, vem comigo, por favooor.", sua voz saiu abafada, o rosto amassadinho nas costas de seu namorado. Tentava convencê-lo a te acompanhar numa festa que seu chefe iria dar para o pessoal da empresa.
"Já disse que não 'tô com clima 'pra essas coisas, amor.", Hansol parecia desinteressado, preocupando-se em terminar de lavar a louça do jantar.
"Mas eu quero ir com você, Nonie. Eu até uso aquele vestido que você me comprou se quiser...", mudou sua estratégia, apelando para a obsessão que seu namorado tinha pelo seu corpo. Fez carinho no abdômen descoberto, para deixar claro qual era a intenção por trás da sua oferta.
"Tá tão desesperada assim?", você sentiu a vibração causada pela risada baixinha que o homem deu. "Por que você quer tanto que eu vá, meu bem? Algum motivo deve ter.", o homem se virou para você, apoiando as mãos molhadas na pia atrás dele.
"Porque você é meu namorado, ué. Não posso querer exibir meu homem?", você apoiou as palmas das mãos no peitoral de Hansol, levantando a cabeça para conseguir olhá-lo nos olhos.
"Seu homem?", te deu um sorriso bonito, aquele que fazia os olhos castanhos quase se fecharem.
"Aham. Meu homem.", você se ergueu nas pontinhas dos pés, dando um beijo na bochecha macia.
"Pois já que a 'minha mulher' — fez questão de enfatizar essa parte — quer tanto que eu vá, acho que não tenho escolha, não é?", segurou seu rosto entre as mãos grandes, selando sua testa ao terminar de falar.
"Só precisei te chamar de 'meu homem' pra te convencer?", você perguntou meio impressionada, não achava que ia conseguir tão fácil assim.
"Sim, me deu tesão.", na cabeça dele, era motivo suficiente.
"Você não tem jeito mesmo.", disse entre risadas, se levantando novamente para beijar os lábios rosinhas.
Você não mentiu para Hansol, realmente queria mostrar o quão bonito seu namorado era, mas não pelos motivos que ele deve ter pensado. A verdade é que tinha um cara te incomodando no trabalho, ele não havia feito nada muito absurdo, mas insistia em dar em cima de você sempre que podia. Você tentou deixar claro que tinha namorado — já que homens, infelizmente, só respeitam outros homens —, mas nem isso serviu. Não queria falar sobre isso com Hansol, sabia que ele não iria segurar a boca se visse o cara e, na pior das hipóteses, talvez não segurasse os punhos.
Sendo assim, seu plano magnífico era exibir seu lindo namorado a fim de que o cara finalmente te deixasse em paz. Fantástico, não é? Hansol com certeza discordaria.
𐙚 ————————— . ♡
Você dava os toques finais em sua maquiagem, usava o vestido que havia prometido a Hansol — aquele que, segundo ele, "deixava os seus peitos uma delícia". Observava o homem atrás de você pelo espelho, ele mantinha as mãos nos bolsos e te olhava estático.
"Com pressa?", você perguntou, terminando de passar o gloss na boca bonita.
"Não. Mas vou acabar ficando de joelhos no meio das suas pernas se a gente não sair logo dessa casa.", simples e direto, como sempre.
"Você sabe que um 'você tá linda' é suficiente, né?", diz com uma pitada de sarcasmo, sem conseguir segurar o sorriso.
"E que graça tem falar só isso?", a pergunta soa retórica. "Você já sabe que é a mulher mais linda desse mundo.", te diz com toda a sinceridade.
"Nonie...", você, que já era rendida pelo homem, fica mole na cadeira. Levanta a cabeça para o alto e faz biquinho, esperando ele te beijar.
"Se eu te beijar agora, só paro quando conseguir tirar esse vestido.", a voz soa perversa.
"Hansol!", você repreende.
"É brincadeira, amor.", dá uma risada gostosa, abaixando o torso para te beijar.
𐙚 ————————— . ♡
Vocês dois já haviam chegado há um tempinho. Você teve a oportunidade de apresentar Hansol para algumas pessoas, mas não viu nenhum sinal do seu parceiro de trabalho.
Passadas exatas uma hora da sua chegada, você estava convencida de que ele não viria. Aliviada, resolveu focar em curtir o resto da noite com seu namorado. Ficou pertinho de Hansol a noite inteira, dançaram juntinhos e vocês até cochicharam sobre algumas fofocas relacionadas aos seus colegas de trabalho. Vernon só se separava quando ia buscar bebida para vocês dois e, vendo seu copo vazio, o homem te deu um selinho se virando para ir buscar mais.
Você resolveu usar esse tempo para checar seu telefone, a cabeça abaixada não te deu chance para prestar atenção no ambiente a sua volta. Um cheiro forte de bebida aguçou seu olfato e, antes que fosse capaz de buscar a fonte do odor, você sentiu duas mãos em sua cintura e um corpo atrás do seu. Sabia que não era Hansol, pois conhecia muito bem o cheiro dele.
"Finalmente te achei, princesinha.", a voz soava meio grogue, era seu parceiro de trabalho. Seu corpo travou, não sabendo como reagir.
"Me solta.", sua voz saiu fraca, seu coração palpitava sem parar. Tentou se afastar, mas as mãos te seguraram com mais firmeza.
"Para de fazer charminho. Vem comigo ali no-", o homem não conseguiu finalizar a frase, você sentiu as mãos te soltando abruptamente. Seu alívio durou menos que meio segundo, pois ouviu uma pancada abafada, como se algo houvesse caído no chão. Você se virou depressa, dando de cara com um Hansol enfurecido e o seu parceiro de trabalho jogado no chão.
"Qual a porra do seu problema?", a voz soou grave, Hansol encarava o homem claramente bêbado no chão. "Me responde, filho da puta!", a cena começava a atrair olhares, Hansol apertava os punhos ao lado do corpo, as bebidas que havia ido buscar já se encontravam no chão.
"Nonie...", você disse com a voz trêmula. Hansol finalmente te olhou, seu namorado entrou em estado de alerta assim que viu sua carinha de choro. Vernon sabia que você ficava extremamente desconfortável com confusões desse tipo. Seu namorado agarrou sua mão, deu uma última olhada para o homem no chão e te levou para fora do ambiente.
𐙚 ————————— . ♡
Do lado de fora, Hansol esfregava as mãos pelo rosto impacientemente, tentando se acalmar. Foram poucas as vezes que você o viu com raiva, mas essa parecia ser a pior de todas e você odiou ver seu namorado sob tanto estresse.
"Nonie, eu-", finalmente conseguiu coragem para falar, sendo interrompida logo que começou.
"Você tá bem, meu amor? Aquele filho da puta fez mais alguma coisa com você? Hm? Me diz. Eu juro que entro lá e quebro a cara dele.", o primeiro instinto de Hansol foi tentar te confortar. Segurando seu rostinho entre as mãos, te olhava como se você fosse a coisa mais frágil do mundo.
"Eu 'tô bem, Nonie. Me desculpa por-", foi atrapalhada novamente.
"Não, meu amor. Não me pede desculpa por nada. Eu que não devia ter te deixado sozinha, meu anjo. Me perdoa, por favor.", selou sua testa inúmeras vezes. As desculpas soando genuínas, como se ele realmente tivesse culpa de algo.
"Não foi sua culpa, Nonie. Eu não achava que ele ia tentar algo de novo...", sua voz tremulou novamente.
"Ele já fez isso antes, amor?", levantou seu rosto para te olhar nos olhos.
"Não desse jeito, Nonie. Ele só falava. Mas achei que ele finalmente me deixaria em paz quando visse você.", você explicou, deixando algumas lágrimas caírem no processo.
Hansol te apertou contra o peito dele, fechou os olhos com força enquanto apoiava o queixo no topo da sua cabeça. Porra, agora, mais do que nunca, ele queria voltar lá e dar uma surra no homem. Mas sabia que você não iria ficar nada feliz com algo assim, então se conteve.
"Amor, deixa eu te levar 'pra casa antes que eu entre lá de novo e quebre o nariz daquele merda.", suspirou exasperado, tentando afastar o pensamento da cabeça. "Amanhã a gente vê como resolve isso, tá bom?", deu um beijinho no topo da sua cabeça. "Eu te amo tanto, meu amor. Você sabe disso, não sabe?", te olhou nos olhos, limpando as últimas lágrimas que caiam.
"Sei sim, Nonie. Eu também te amo muito.", você acariciou o rosto do homem, que ainda estava meio vermelho. Hansol se esforçou para te dar um sorriso singelo, sentindo a raiva se dissipar.
"Vamos 'pra casa então. Preciso cuidar da minha mulher.", te deu um selinho demorado.
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