Tumgik
#debo confesar que tenía mucho miedo de hablar
familia-op · 1 year
Text
Miedo a Perderte…
No es nada personal, pero debo confesar algo que me inquieta el corazón… Tengo miedo de perderte, tengo miedo de una vez más perder a una persona que es tan especial en mi vida, quizá porque lo sienta cerca, quizá porque tendrá que suceder.
Sólo espero puedas quedarte toda una vida, quiero que sepas honestamente que te estoy entregando el corazón, y quiero compartir contigo esos pequeños detalles que no tengo con nadie, esas palabras que guardo sólo para ti, mis ganas de escribir sobre amor, mis locuras que hago para hacerte sonreír o tal vez cosas cursis y mis ganas de querer estar contigo por las noches y abrazarte con tanta devoción, te confieso mis pretextos que invento sólo para sonreír y ser feliz un momento contigo, pero creo que ahora entiendo que tenía miedo desde un principio…
Miedo de perderte…
Tanto que creo que mis sentimientos se encuentran en una cuerda floja, donde no sé si es mejor dejar sentir, permanecer por siempre, o simplemente borrar esos sentimientos, alejarme y perderte.
Dicen que nadie te pertenece y que si una persona no tiene un título oficialmente, ese sentimiento no es válido o es algo pasajero, pero si de algo estoy segura es que los sentimientos no necesitan un título o ser reconocidos por muchos para tener valides o al menos ser honestos y hablar con el corazón y la razón.
Yo entendí que no es necesario, pues aprendí a querer cada detalle, cada momento, tus más grandes virtudes y hasta de tus peores errores, y creo que eso puede ser una bonita forma de comenzar amar a alguien, despacio, con dedicación y hablando con el corazón!
Atte.
Mileny27
Tumblr media
39 notes · View notes
pandihowell · 2 years
Text
La fábrica derrumbada
Cerca de mi casa había una fábrica abandonada, desde que tengo memoria así lo fue, pues conforme fui creciendo me contaron que antes si se trabajada allí, pero como un día se fueron a huelga y jamás volvió a funcionar.
Obviamente me acostumbré a verla ahí, ocupando el gran espacio de su terreno, observando sus paredes con grafitis y sus ventanas dañadas; a veces cuando me daba curiosidad mezclada con un poco de miedo, imaginaba que me metía a investigar, sobre todo de noche para hacer el ambiente más misterioso, a jugar con mis amigos, o que podría grabar cosas geniales ahí. Nunca supe que tan prohibido estaba, pero en parte también me satisfacía de adrenalina hacerlo, como si rompiera las reglas, corriera el riesgo, esperar no ser atrapada, todo esto a pesar y con la diferencia entre el no poder y no deber, pues claramente las rejas que la rodeaban ya estaban dañadas y algunas tiradas, y muy bien podría alguien entrar sin problemas.
Por el gran espacio que abarcaba, mi tía siempre soñaba que un día alguien resolviera los problemas judiciales, la comprara e hiciera un centro comercial, ya saben, cosas de adultos.
Definitivamente su sueño se cumplió antes que el mío, pues hace unos meses, supuestamente alguien ya la compró, nadie sabrá que tan limpio y licito fue el proceso, y se rumorea que efectivamente es muy probable que sea un centro comercial.
Como todos los días debo de pasar por ahí cuando regreso de la escuela, vi como la fueron derrumbando, no se si clasificarlo como de a poco a poco, pero un edificio se fue y después los otros, las paredes cayeron hechas pedazos creando grandes rocas de cemento, luego no se que les hicieron a estas, limpiaron la tierra, retiraron algunos árboles, las grúas hicieron lo suyo, y nosotros observamos como buenos espectadores (metiches y chismosos), en ocasiones detenían su labor, precisamente porque no se sabe cómo se logró ejecutar esto, y así siguen; no se nada de construcción pero supondré que hoy en día están a un paso anterior de aplanar y crear lo que será el piso.
En fin, ¿Qué tiene de relevante esto? Pues como ya saben que soy un poco dramática o fuera de lo común, tomé esto como una metáfora para el reflejo de mi vida.
Sinceramente no me he estado sintiendo bien, no les puedo decir desde cuando o darles un número si me lo piden de manera cuantitativa, quizá la pedrada asemeja al semestre escolar, y puede que ya casi esté cerca de lo que llaman "vendrán días mejores".
Pero como sea, quiero confesar, que así como veía que se iba derrumbando esta fábrica, así sentía que también se iba derrumbando mi vida, mis sentimientos, mi sonrisa, mi esperanza, incluso un día mis ganas de vivir; mi voz, mi motivación, mis sueños, mis ambiciones, mi compañía, mis amistades, mi presente, mi futuro y mi pasado.
Ya no volveré a ver esa fábrica nunca más, como tampoco quizá algunos amigos que quería de regreso; tenía que aceptar que así como esta edificación se estaba yendo, también mi pasado, por eso se llama así, ya yo no regresaría a la preparatoria nunca más, no importa cuanto lo añore, ya no viviré lo que viví en esa etapa, la verdad, me dio miedo y me llenó de angustia incluso tampoco poder volver a ser la que fui:
Mi yo que confiaba más, que ya había aprendido a hablar en voz alta y a defenderse, a participar en cada clase, a reír mucho, mi yo que era admirada, querida, escuchada, que la respetaban y le ponían atención, que disfrutaba aun de ciertas bandas y series, que aprendía con gusto un idioma, que leía, que escribía novelas, que tocaba la guitarra, que hacía ejercicio, que no tenía problemas de espalda, que tenía receso en la escuela, que tenía siempre a alguien a lado, que dormía más, que se sentía inteligente, incluso un tanto más que los demás, que podía hablar de mis pasiones sin pensar que quien me estaba escuchando sentiría que eran aburridas, que al igual yo podía escuchar sus pasiones y sueños, y me los contaban con ilusión y brillo en sus ojos, no con insuficiencia, la mirada baja, con bromas, con el corazón roto, la mente perdida, la voz bañada de alco hol u otras sustancias.
La que tenía personas que le hicieron confiar y amar al mil y les mostré transparentemente mi alma, donde podía llorar con esas personas con libertad, contarles desde mi día hasta lo más profundo, cuando aún creía que me durarían hasta la vejez o al menos para más rato; yo la que decidía o elegía la soledad, si la obtenía era porque en su mayoría era yo quien me apartaba, no porque me abandonaran; yo quien no sentía que me juzgarían a cada rato o que me harían daño, cuando todavía creía que podía guiar y ayudar a otros, que mis palabras y acciones serían suficientes para mantenerlos brillando o por lo menos que no se apagaran; cuando no me pensaba a mi misma como alguien aburrida o amargada y podía decir bromas o hasta albures, yo la que podía ver las sonrisas de los demás y mínimo salía a un poco de más lugares; la que aún las redes sociales la entretenían, que aún entendía o escuchaba los temas del momento, desde entretenimiento hasta noticias; done estaba bien si soñaba a futuro porque no tenía prisa, la que aún era menor de edad y supuestamente le encantarían sus cumpleaños; yo la que no se sentía tan perdida como si fuera una eternidad, la que aun tenía fe en la comunicación, que mantenía amistades con varones, la que tenía principios más fijos y no dudaba tanto, la que no debía de conformarse y aceptar una vida tan anti-hedonista a razón de las carencias.
La que aún bailaba, y si algo salía mal se refugiaba siendo tan buena en la escuela obteniendo altas calificaciones, adquiriendo conocimientos en demasía, y no al contrario, llenarse de tanta flojera, querer no hacer nada, y abandonar todo (mi yo actual); la que aún usaba uniforme, a la que se le declararon posibles novios, la que aún sobresalía y no se sentía tan opacada, la que aún creía en la meritocracia, la que tuvo varias oportunidades para salir a diferentes lugares y las rechazó, la que pudo haber jugado fingiendo ser aun una infante pero lo evitó, la que aún no se arrepentía de su pasado porque lo que estaba viviendo era su presente.
En la prepa pude haber sido una fábrica con ventanas rotas, algunos ladrillos desmoronados, las paredes con grafitis, árboles salvajes al rededor, la pintura desgastada; pero no fue hasta ahora que pasé a ser una fábrica derrumbada.
0 notes
kuroimiyukatz · 3 years
Text
DabiHawks week 2021
Día 2: Escuela de héroes
Heyy! Estoy mucho más emocionada que ayer! 😆
@dabihawksweek20 muchas gracias por tu trabajo y por hacer esto posible ❤️
Ahora sí, vamos con el día dos.
Día 2 Escuela de héroes
Ojalá pudiera decirte que te quiero. Que me distraigo viéndote entrenar. Que te considero tan inalcanzable como cuando te veo volar.
Ojalá pudiera decirte que posiblemente eres el único que alguna vez me ha tomado en serio. El único para el que he sido algo más que una causa perdida e incluso debo admitir, que fuiste el primero en hacerme sentir que soy digno de admiración.
—¡Haz mejorado ese control en tus llamas, Tōya-kun! —celebraste después de una práctica—. Entrenas mucho últimamente ¿No es así?
Me quedé perplejo sin creer lo que escuchaba. Justo venía de comenzar el día con otro sermón por mi mala actitud en clases y mi falta de compromiso, según los maestros de la UA.
Con todo eso encima, me impactó como nada el que tú, Takami Keigo, el chico ángel, el alumno estrella de nuestra generación se hubiera fijado en los esfuerzos de un inadaptado como yo.
A partir de ese día me buscaste y aunque yo no lo quisiera al principio, me encontraste. Sabías dónde y cuándo abordarme. Mas yo no te lo puse fácil, pues pasaba de ti molesto, confundiendo tu amabilidad con arrogancia.
—¡¿Qué mierda pretendes?! —exploté aquél día saliendo de clase. No lo soporté y te tomé por el cuello de la camisa—. ¡Llévate tu puta lástima a otra parte!
Te solté y me alejé furioso. Me tenía harto la condesendencia de todos a mi alrededor.
—¿Cómo podría tener lástima de alguien que estuvo a punto de derrotarme en una práctica?
Tu voz era completamente seria, sin un solo titubeo. Me detuve en seco y volví la vista atrás.
—¿No te lo dije aquel día? Tu control de llamas ha mejorado bastante a comparación del inicio de año —continuaste—. Debiste haber entrenado mucho, ya no eres ese incendio descontrolado.
No lo había pensado, pero en esa práctica te lancé una flecha de fuego (mi última técnica que intentaba perfeccionar) en pleno vuelo. Por supuesto, fallé; pero te pasó lo suficientemente cerca como para hacerte perder la trayectoria y buscar apoyo en tu equipo.
—De no haber sido por Rumi, habríamos perdido…
Era cierto, ni siquiera me había fijado en el repunte de la chica conejo que al final le dio la victoria a tu equipo. Tan solo me hundí en mi frustración por no haber acertado en el blanco.
Me sentía como un imbécil. Habías sido sincero desde el inicio. Esa actitud franca derrumbó mis barreras y desde ese día comenzamos a hablar más seguido e incluso a comer juntos, aunque tus amigos se incomodaran con mi presencia a la hora del almuerzo. Sus miradas de extrañeza me cohibían e inevitablemente, me ponían a la defensiva.
Tan pronto te percataste, optaste por pasar tiempo a solas conmigo después de clase, o en la azotea de la UA. También, comenzamos a caminar juntos a casa.
—¿Tú por qué quieres ser un héroe, Tōya-kun?
Preguntaste una tarde de verano mientras bebíamos café frío en lata.
—Para demostrarle a todos que se equivocan, supongo. En especial al maldito viejo.
Tus labios se apretaron como pensando qué decir.
—Yo creo que no necesitas demostrarle nada a nadie. Tú no eres como él. Tu poder funciona diferente aunque sea parecido.
La lata que sostenía mi mano derecha casi fue a dar al piso. Me resultó increíble que lo hubieras notado, que el control de mis llamas estaba estrechamente ligado al de mis emociones.
“Eres un ser excepcional” pensé sin poder quitarle la vista a esos ojos ámbar, a toda tu figura, que con la luz del atardecer parecía hecha de oro. “Eres pura luz”.
—¡No te creas tanto Takami! —dije contradiciendo mis verdaderos pensamientos mientras te daba un codazo en las costillas.
Me devolviste el codazo dando un nuevo sorbo a tu café. Entonces, esa sonrisa misteriosa que derretía a todas las chicas de la escuela, se asentó en tu rostro dedicándola solo para mí.
El corazón retumbó con fuerza. Así fue como dejé de pensar que esas chicas eran unas ridículas por dejarse arrancar suspiros tan fácilmente, porque ese día yo mismo suspiré por ti.
Sin quererlo me volví tan ridículo como ellas, pero al menos yo soy un ridículo discreto. Eso sí, debo confesar que secretamente envidio a esas chicas. Quizá tan solo intento justificar esta cobardía de mierda, pero envidio que ellas puedan expresar su fascinación por ti tan libremente, sin miedo a ser juzgadas.
Por eso quisiera poder decírtelo, que deseo estar contigo mucho más, hablarte, mejorar, entrenar, mirarte, tocarte... Corresponder de lleno a tu brazo sobre mis hombros, a tu mano sujetando mi muñeca sin tensarme como un idiota enamorado.
Quisiera tener el valor, tomar tu cara y decírtelo con un beso, ya que las palabras no son lo mío.
FIN DEL DÍA 2
Nos vemos mañana!
-MiyuKatz
9 notes · View notes
tomybabylum · 3 years
Text
Le voy a ser sincera; más que nada, desearía hallar una manera lo suficientemente adecuada para comenzar con este pequeño detalle que la fría noche otoñal me ha invitado a hacerle, no obstante, debo confesar que siempre me ha resultado algo dificultoso dar el puntapié inicial a cualquier tipo de elemento escrito. Sean cartas, ensayos, historias o simples mensajes, reconozco de todo corazón que los comienzos jamás han sido lo mío. Pese a eso, intentaré hacer lo mejor que mi –algo torpe– cabecita me permita.
En fin, aquí vamos.
Entonces... ¿Por dónde empezar?
Pues usted me dirá lo evidente: "Por el principio, Oli", pero lo cierto es que no es tan obvio como piensa.
Quizá lo sabía, quizá no, pero se puede perfectamente comenzar con una historia tanto por el inicio, como también por el medio y por el final. A aquello se le conoce como los "tiempos narrativos", es decir, la disposición temporal con la que se ordena el relato. Cuando comienza por el desenlace, se le denomina como "in extrema res", en cambio, los que comiencen por el desarrollo intermediario se conocerán como "in media res", y por otro lado, aquellos que den inicio manteniendo un orden cronológico de los hechos, son los relatos "ab ovo". Todos esos nombres raros provienen del latín, son comprensibles. Aunque debo mencionar que "ab ovo" significa "en el huevo", lo que hace referencia a que el punto de partida se da en el origen de todo. Una metáfora muy bonita, claro, pero obviamente no estoy aquí para darle clases de lenguaje ni mucho menos enseñarle algo que, es muy probable, ya supiera porque lo pasan como setenta veces en secundaria. Suspiro.
¿Ya mencioné que soy pésima con los inicios? Y es que acabé dándole una jodida clase de vocabulario, cuando el real motivo de esto no tiene nada que ver con los tiempos narrativos.
O tal vez sí, no sé.
Como sea, a lo que verdaderamente importa.
Hace unas horas que no hablamos, usted me dio sus motivos. No sé cuál sea el problema que lo aqueja y asumo que fue bastante feo como para que haya decidido desaparecer por lo que restaba de noche (no es por creerme importante, pero sé que le gusta estar conmigo, para que haya renunciado a eso, tuvo que ser algo grave), pero a decir verdad, no pretendo entrometerme de sobra. Lo que en verdad me interesa es su bienestar y buscar subir sus ánimos de alguna manera que sea factible y se encuentre a mí alcance, simplemente no podía ir a dormir sabiendo que mi hermosa y brillante lucecita se encontraba medio apagada. Aquello oscurece mi mundo, también, y es que usted es el sol que me ilumina. No puedo permitir que se apague, haré todo lo que me sea posible para hacerlo brillar de la forma tan bonita que lo hace siempre, incluso si se ve como una misión difícil ahora mismo. Encenderé a mí lucecita cueste lo que cueste.
Y por eso me tiene aquí, en plena madrugada de martes, siendo las 2:07 AM –siendo muy consciente de que tengo clases mañana–, escribiendo esto para usted. Antes que nada, me interesa saber que me fui a mimir habiendo hecho al menos un intento de traer de vuelta su sonrisita hermosa, incluso si sé que mañana me estaré cayendo de tuto en clases.
En primer lugar, quería darle las gracias –otra vez– por haberme permitido un día más a su lado, por hacerme sentir tan amada y tan segura de algo. La felicidad que siento a su lado no se compara a nada que haya experimentado antes. Aún me quedan cosas por agradecer, pero por ahora lo dejaré ahí.
Le voy a contar un pequeño secreto, ¿sí?
Durante mucho tiempo viví con una percepción errada del amor, un concepto totalmente distorsionado, una idea fatal de lo que este significaba. Por varios meses estuve en un vaivén de emociones mayoritariamente negativas, me encontraba sumergida en un profundo agujero negro lleno de dolor, pero a su vez, no conocía más que eso. Era mi zona de confort, pues nunca antes había vivido más que eso, estaba convencida de que así era la realidad.
Tal agujero negro me consumía viva, me asfixiaba, y aún así, a mí me aterraba que en algún momento este tuviese un final y me expulsara, pues como ya dije, no conocía más que eso. Tenía miedo del mundo exterior a ese lugar oscuro y frío, pues podía ser incluso peor, o tal vez todo lo contrario, pero me daba miedo arriesgarme, y por ello seguía aferrada a la oscuridad.
Y así el tiempo fue pasando, el agujero me absorbía más y más, hasta que un día ocurrió lo que tanto me martillaba por las noches, mi pesadilla; el agujero negro si tenía un fin y yo llegué a él.
Intenté quedarme ahí con todas mis fuerzas, afirmarme de cualquier borde. Pero quizás la fuerza de este era brutal o la vida es muy sabia, como sea, acabé siendo expulsada pese a mis pataleos.
Fui arrojada en un universo nuevo, completamente desconocido para mí. Estaba aterrada, he de admitir, y es que cuando estás acostumbrada al dolor, supongo que es normal que te asuste lo nuevo. Yo era una estrella opaca en ese universo lleno de colores, sin embargo, poco a poco fui recuperando mi luz, aprendí a brillar por mi propia cuenta. Ese nuevo universo ya no se veía tan aterrador como antes.
Divagué por ahí, entre estrellas, cometas y asteroides de colores que me iban dejando distintas enseñanzas de vida, incluso me dieron consejos para evitar caer en nuevos agujeros negros que se camuflaban en piel de estrella, pero eran tan letales como un meteorito.
Y así crecí, me transformé, pensé que lo tenía todo. Ya estaba bien y tenía unos cuantos amiguitos espaciales que me llevaban a juntas de estrella fugaces. Fue en una de esas, entonces, que conocí al mismísimo sol, la estrella más grande y brillante de todas.
Y entonces supe que, contrario a lo que creía, no lo tenía todo aún. Me faltaba eso tan hermoso y resplandeciente para complementarme del todo.
Me enamoré del sol, me enamoré perdidamente de su luz, de la viveza que irradiaba, de lo tímido que a veces se ponía cuando me pillaba mirándolo desde algún rincón. Comencé a girar entorno a él, intenté acercarme, y con un poquito de esfuerzo, logré finalmente iniciar una conversación con él.
Irónico, porque yo no soy buena en los comienzos.
Pero por él, estaba dispuesta a empezarlo todo.
Hoy supe, entonces, que mi solcito se siente algo apagado, y no se imagina cómo me duele verle así, desganado y sin su efusividad tan característica.
Mi Lumiére, mí bella y radiante luz.
Desde que llegó, me ha entregado nuevos motivos para vivir, para esforzarme cada día un poquito más. Quizá no se da cuenta, pero cambió todo en 360 grados y yo nunca antes me había sentido tan viva, tan plena, tan feliz.
Así como usted alegra mis días, quisiera alegrar los suyos también, entregarle el mismo amor que a diario me brinda. Sé que ahora está triste, y definitivamente no me gusta verlo así, pero me he prometido estar a su lado en las buenas, las malas y las peores. No podría alejarme de su lado cuando sé que la está pasando mal, claro que le daré su espacio siempre que me lo pida, pero mi mano nunca dejará de estar aferrada a la suya aunque no nos hablemos.
Ya han pasado unas tantas horas desde que se ha ido, debo admitir que ansío que pronto sea mañana para poder lanzarme a sus brazos otra vez, o recibirlo a usted en los míos para que se desahogue y deje fluir sus emociones. Tenga en consideración que siempre estaré para secar sus lágrimas y besar sus mejillas mojaditas cuando sienta que ya no puede más. Lo amo con locura, no podría abandonarlo bajo ninguna circunstancia mientras se mantenga dentro de lo cuerdo.
Y así como yo no lo dejaré solo a usted, debo darle las gracias a usted por no dejarme sola a mí, por elegirme.
Y gracias también por enseñarme lo que es el amor puro, lo que verdaderamente significa amar de la forma más sincera, libre y sana. Que el amor no es dormir entre lágrimas, con la incertidumbre de lo que ocurra al otro día. Que tampoco es tener miedo de hablar por temor a la reacción contraria. Que no son amenazas, que las cosas se pueden resolver sin exaltarse.
Que se puede amar y ser feliz al mismo tiempo.
Porque nunca había vivido algo como esto.
Y podría darlo todo con tal de que este paraíso no acabe nunca.
Encontré a mi sol, que me ha elegido a mí entre tantas estrellas comunes y corrientes.
Y le juro, mi amor, que su mano nunca voy a soltar.
Lo amo con locura, mi chiquitito.
Buenas noches, recuerde que no existe pesar que dure cien años. Todo cambia, todo mejora en algún momento, incluso si el panorama no se ve prometedor.
Y si no me cree, pregúntele a esa estrellita que se enamoró del sol.
Con mucho amorcito, y esperando que todo esté bien pronto.
–Su Oli.
PD: Es un relato ab ovo. ;)
PD2: Haga click aquí para una sorpresita más.
PD3: Lo amo, mi sol.
10 notes · View notes
Text
blog 137 ;
Mi primer experiencia con la iglesia, fue de una pulsión erótica tan grande que casi, casi tuve mi primer orgasmo a los seis años. Quizá era un vistazo de lo que iba a ser mi vida diez años después, pero es que con esa mente inocente apenas entendía lo que estaba pasando.
El ballet me consumía los días de semana, los sábados podía permitirme algunas malcrianzas y los domingos... ¡A misa! Porque según mi madre, no haberme acabado los guisantes el jueves había sido pecado, preguntar «por qué» era pecado (y lo hacía constantemente), tener poca energía para bailar un viernes... No, no era pecado, pero que me pusiera las piernas en hielo horas más tarde, os aseguro que sí. Y como tan pecaminosa era la Melanina de seis años, había que confesarse.
Me sentaba detrás del confesionario, me saludaba una voz extraña y ajena. Lo miraba, lo miraba pero apenas vislumbraba su rostro. Me daba miedo, la idea de recibir castigos me atemorizaba. Al final, siempre me explicaban las diferencias entre el cielo en el infierno; vamos, básicamente diciendo que si eres una come mierda, tu alma sufre por el resto de la eternidad. Me ponían a rezar, y estaba eximida de toda culpa.
Supuestamente.
¿Pero qué confesaría mi madre? ¿Y mi padre? ¿Cuánto los había ayudado Dios? ¿Y por qué querían que ese ente invisible, improbable (y ahora para mí inexistente) me mostrara el camino? ¿Qué camino? ¿El de ser una come mierda que se viste de santa? ¿O el de ser una mojigata reprimida que se folla sus almohadas hasta dejar las plumas fuera? ¿O quizá el de un hombre de Dios que abusa de niños desamparados? ¿El camino del Vaticano, tal vez, bañado de oro con palabras de empatía?
No lo sé. Pero aquel domingo, Dios se me figuró entre las piernas y me metió el diablo dentro. Creí estar poseída (venga, que eso era lo que le enseñaban), y supe entonces... Que mi alma iba a sufrir para siempre. No entendía por qué, pero sabía que aquel hormigueo entre las piernas era inmoral. Lo presentía, aún sin tener idea de qué se trataba.
Me había despertado como cualquier otro domingo, con Felipe lamiéndome las mejillas y soltando pelo a lo bestia entre mis almohadas. Mamá me había dejado un vestido color cielo sobre la mecedora, y unos zapaticos blancos de lo más monos.
Me sentía diferente, más viva, más necesitada, más enérgica. Me abrazaba un calor distinto, uno que me hizo creer que, a lo mejor, había despertado con temperatura. Mi madre discutía con mi padre, como cada domingo, porque no le apetecía la corbata que llevaba puesta.
Felipe estaba desquiciado, como cada vez que me veía abrir los ojos. Iba, venía, se bajaba de mi cama y volvía a subirse de un salto. En una de las últimas veces, enterró la pata entre las mantas; fue directo a mi coñito virginal, sin saber él (ni yo) dónde se estaba apoyando. Saltó una vez, dos, tres. Su pata se movió sobre mis panties con tanta fuerza que aquel calor inicial se transformó en un volcán a punto de haber ebullición.
Completamente aterrorizada, lo alejé de un empujón. Le grité que se fuera, y mi madre lo sacó al jardín. El pobre Felipe no tenía idea que solo con su emoción por verme amanecer, había estimulado mi coño por primera vez en la vida. O al menos, la primera que yo recuerdo.
Hostia, estaba caliente. Estaba tan caliente y tan perdida, tan necesitada y tan aturdida. Quería volver a sentir aquella presión, pero algo me gritaba que estaba mal. Estaba tan mal, que le eché el pestillo a la puerta para que nadie me viera cuando formé un bulto con las cobijas y comencé a intentar, de algún modo, repetir aquella presión «allí». Pero nada, las mantas no servían; eran tan blandas y versátiles, que acababan esparcidas por toda la cama, y yo completamente frustrada. Tenía a mano un peluche de un conejo, eso sí. Y su nariz dura me pareció más apropiada.
Aleluya. Dios me había iluminado con su sabiduría. Casi podía ver los rayos de sol, las nubes abrirse, los ángeles danzar a mi alrededor. Todo fue calidez, amor, cosquillas y un «ya casi, ya casi, ¿ya casi qué?, no sé, pero ya casi» que se vio interrumpido con severos golpes a la puerta.
Salté de la cama, avergonzada, aterrorizada, roja, agitada, con la calentura a tope y la corrida sin siquiera haber asomado. Esa mañana, mi madre me obligó a confesar que me había encerrado en mi habitación. Pero no hablé de Felipe con aquel hombre, y tampoco del conejo, y tampoco de la sabiduría que Dios había espolvoreado sobre mi cabeza.
Ese domingo, la misa fue todo lo que transcurría mientras mis piernas se apretaban inquietas sobre la banca. Los dedos me temblaban, y no podía pensar en otra cosa. Quería llegar a casa, quería volver a mi cama, quería volver a sentirme tan tan bien. Pero no toleraba la electricidad carcomiéndome; tan inquieta me tenía, que mi madre me acusaba de haberme bebido sabe quién cuántas tazas de café.
Miraba al sacerdote mientras hablaba. Apretaba las piernas, torcía los dedos en las puntillas del vestido. Miraba al sacerdote, escuchaba a mi propia cabeza.
Cuando descubrí que dar pequeños brincos sobre la banca me aliviaba aquellos "nervios", me volví una cría desagradable, come mierda y malcriada, porque no escuché a mi madre durante el largo rato que me mascullaba que me quedara quieta.
«Que te den», llegué a pensar.
Y os debo confesar, he dicho una pequeña mentirilla al comenzar. Es que me parecía muy fuerte asumir que mi primer orgasmo fue a los seis años en misa, mientras escuchaba al sacerdote hablar. Pero así fue, saltando sobre la banca y restregándome como si tuviera al mismísimo Lucifer pujándome dentro de las entrañas.
Me llevé un bofetón, por supuesto. Es que ir los domingos a misa no te libera de no saber tratar con tus hijos, según aprendí. Y además, me llevaron a urgencias por temor a que sí me hubiera zampado litros de café (pero primerísimo que todo, rezaron por mi alma en la misa).
Nadie supo lo que pasó ese domingo en realidad, ni siquiera yo hasta muchos años después, cuando descubrí (de verdad, de verdad) mi sexualidad. Ironías de la vida, la iglesia acabó dándome mucho más de lo que me quitó. Incluso un sacerdote al que expresarle mis pecados, de rodillas y con cinto en mano. Pero aquel es otro cuento, digo yo...
—Mel
Tumblr media
2 notes · View notes
Text
Me parte el coño y el culo, pero me encanta
Comienza como un abuso, pero termina siendo una excelente cogida que disfrute mucho.
Soy una chica morena, de unos 1, 60 de alto, delgada con el cabello a rulos preciosos, me gusta hacer deporte así que mis nalgas están bien duras y mi abdomen plano, senos pequeños pero firmes y debo confesar que muy sensibles.
Recuerdan cuando todos veían juego de tronos, estas series de ambiente medieval me gustan mucho, la trama, los personajes, pero un aspecto especial que me gusta es la manera en que relatan que tenían sexo,
- Dios!!! ¡Que rico ha de ser que te cojan así!!!
Solía pensar mientras veía estás escenas. Nunca pensé que hubiera alguien que cumpliera esas expectativas.
Un día un amigo, Miguel Ángel, quién siempre me ha hecho saber sus intereses de follarme, me invitó a su casa para una maratón de juego de tronos, se acababa de estrenar una nueva temporada y yo tenía muchas ganas de verla, además también me gustaba mucho jugar con las ganas de Miguel Ángel, el cual se desesperaba con cualquier provocación que le colocara en frente, me gustaba jugar a provocarlo hasta ver en su rostro la necesidad de cogerme y luego de eso irme y reírme en su cara, como siempre era muy respetuoso conmigo nunca tuve miedo de que me obligará a hacer algo, no pensé que alguien en realidad pudiera cumplir con hacerme su sumisa.
Estando en su casa, ya avanzado el maratón de la serie que estaba bastante buena, Miguel Ángel va se levanta y va por unos Doritos y Refresco para comer un poco, de repente llega con una cubeta con unas cuantas cervezas a las cuales yo no me negué, después de varias recargas a la cubeta ya estaba muy entonada, quería sexo, pero no le daría ese privilegio a Miguel Ángel, no se la merecía, pero me gustaba mucho provocarlo.
- Vivi: Miguel Ángel, ¿hace cuánto no coges?
- Miguel Ángel: cuando haces esas preguntas es que tienes en mente empezar a jugar conmigo de nuevo.
- Vivi: ¿por qué dices que juego jejeje?
¿No crees que puedas llegar a gustarme?
- Miguel Ángel: sé que no, aunque no comprendo porque provocarme cada vez más. Algún día podría reaccionar.
- Vivi: sé que no vas a reaccionar.
Le decía a Miguel Ángel mientras me daba la vuelta y meneaba mi culo mientras me levantaba, di la vuelta Caminando hacia su lado de la sala donde habíamos bebido no sé cuántas cervezas, sujete su rostro y lo bese, bajaba por su cuello e iba soltando el botón de su pantalón, pensaba que, nunca había llegado tan lejos en mi juego con Miguel Ángel, pero seguí hasta que tuve su verga en mis manos, lo masajee un poco, luego me detuve.
Me levanté y vi su verga demasiado dura, aunque seguía sin provocarme nada, me di la vuelta y me preparaba para irme, cuando sentí unos brazos fuertes que rodeaban mi cuello, casi logra asfixiarme, me volteo y puso de rodillas con una fuerza descomunal.
-Miguel Ángel: ¡Abre tu boca puta! Abre tu boca y comete mi verga.
-Vivi: Miguel Ángel, nunca habías llegado tan lejos, no empieces algo que no puedes terminar.
Miguel Ángel seguía presionando mi cuello y mi boca con sus manos, nunca había notado lo fuerte y toscas que eran sus manos, me sentía demasiado excitada mientras me hacían más y más sumisa.
Empecé a tocarme levemente y sentía la humedad debajo de mis pantys, tenía ese gran pene en mis labios y no tuve más opciones que darle besos lentos y lamer su punta poco a poco, rodearlo con mi lengua y bajar lamiendo hasta su base, mientras Miguel Ángel me iba soltando solo un poco para poder abrir mi boca bien y luego de subir dándole besos a su verga meterlo completo a mi boca, lo rodee con mi lengua dentro de mi boca, sentí que Miguel Ángel fijo mi cabeza y empezó a embestirme metiendo su verga hasta lo más profundo de mi boca, estaba quitándome el aire y mi cara se veía un poco roja, pero nada me importaba no quería sacar esa verga tan rica de mi boca.
-Miguel Ángel: ¡Que rico lo chupas!!! Maldita, vez que llegaría el día en que te iba a hacer mi perra.
-Vivi: deja de hablar tanto. Solo es una mamada y ni siquiera lo estoy disfrutando.
-Miguel Ángel: Parece que si lo disfrutas, sigue comiéndome la verga, me voy a venir y quiero que te lo tragues todo.
Miguel Ángel seguía metiendo tan fuerte su verga en mi boca que ya no podía hablar ni menos respirar, se corrió dentro de mi boca y todo me lo trague, siempre me gustó tragar lechita, pero está fue de las mejores mamadas que había hecho, lo disfrute mucho.
La verga de Miguel Ángel seguía tan dura aún después de venirse y el seguía aplicándome tanta fuerza que apenas pude soltar el botón de mi pantalón para que él no me lo arrancará y lo destrozara, no tengo mucha ropa y no podía dejar que se perdiera la poca que tengo, disfrute muchísimo cuando me lanzo sobre ese mueble donde veíamos la serie y me rasgo la blusa de tiros que llevaba puesta, mi sostén también quedó por la mitad y el pantalón salió de un tirón con todo y mi panty que vi caer y darme cuenta que estaba sonadísima.
Su verga parada y dura empezó a masturbarme en el clítoris con su punta, empecé a gritar muy fuerte.
-Miguel Ángel: O dejas de gritar o te voy a callar y no hablaras más nunca.
Se acercó a mi cara y con una mano me tapo la boca y con la otra me sujeto las muñecas, en ese momento deje de gritar y empecé a gemir, me estaba sintiendo sumisa y totalmente dominada ante él, de una sola vez entro completo, hasta el fondo toda su verga, me dio tan duro que me vine en ese momento, no lo pude evitar, mi coño apretado cada vez más y el entrando y saliendo completo para con una gran fuerza entrar de nuevo hasta lo más profundo, me la metía tan rico que ya no ponía resistencia y empecé a menear mis caderas.
-Vivi: ¡No pares maldición!!! Sigue metiendo tu verga en mi más duro.
-Miguel Ángel: ¿Ya lo estás pasando bien puta?
¿Lo estás disfrutando? ¿Quieres que me detenga?
-Vivi: Si dejas de metérmela así de rico te vas a arrepentir.
-Miguel Ángel: Aquí el que pone las reglas soy yo, me escuchas, perra.
Después de decirme eso en el oído, Miguel Ángel me apretó las caderas para que no las moviera más, se levantó, abrió mis piernas y me jalo al borde del mueble con mucha fuerza teniendo su verga todavía dentro de mi coño apretado y ya ardiendo por tanta fuerza, subió mis piernas y las puso sobre su pecho para darme más profundo y yo ya no podía más, me corrí a chorros, el siguió dándome y yo ya no podía más, me ardía de tanto sentir su verga que seguí tan dura, ya no podía resistir.
-Vivi: ¡Por favor para!! ¡Para, ya, me duele, ah, ah, para Miguel Ángel, ah, ah, ah, me duele no puedo seguir más, ah, ah, ah aaaaaah!!!!
-Miguel Ángel: ¡No voy a parar, tengo todavía mucho por hacerte pagar, me has dejado con la verga dura mucho tiempo y hoy no va a ser igual!!
-Vivi: ¡Métela en mi culo!!!! ¡Por favor, párteme el culo también así de rico!! ¡Ah, ah, aaaaaah!!!!
Miguel Ángel seguía metiendo su verga en mi coño adolorido y al mismo tiempo ensalivó sus dedos y uno por uno fue metiéndolos en mi culo, yo lloraba de dolor y placer al mismo tiempo por mi coño destrozado y sentía como mi culo se iba abriendo más cada vez, ya había tenido sexo anal, se los contaré en otra historia, pero gracias a eso el sexo anal me vuelve loca, si me dan una cogida y no me parten mi culito bien partido no fue una buena cogida jeje.
Miguel Ángel paro de darme por mi coño que ya no podía más, estaba rojo y hinchado por su rudeza, pero también muy muy húmedo y extasiado por todo lo que Miguel Ángel había hecho con él, me volteo de un solo jalón y quedé en cuatro en el mueble, Miguel Ángel me escupió el culo y se sintió demasiado rico, me metió su lengua y fue la gloria por un momento, la movía tan rico dentro de mi culo.
-Miguel Ángel: ¡Abre bien ese culo!! Maldita perra, voy a hacerte mía y después me rogarás para que te coja de nuevo.
-Vivi: ¡Si papi, métemela duro, aah, no puedo esperar a hacerte venir en mi culo!!
-Vivi: ¡está entrando!!!! ¡Está muy dura!! Está entrando, siento como se abre mi culo y se va rompiendo, ¡está muy grande, aah, aah, aaaah, aaaah!!
Miguel Ángel empezó a entrar en mi culo y se sentía demasiado rico, las paredes de mi culo no resistían, pero me encantaba, empecé a menéame, pero Miguel Ángel me hizo bajar la espalda y hombros pegados al mueble, me jalaba el cabello mientras me embestía y mi culo apretaba su verga dura, sentí como algo caliente me llenaba el culo desde dentro y voltee a verle la cara a Miguel Ángel y era puro placer, se había corrido en mi culo, sentí como lentamente salía de allí dentro, me encanto sentir como mi culito se iba cerrando poco a poco, Miguel Ángel cayo al otro lado del mueble , cuando quise darme cuenta Miguel Ángel se había quedado dormido.
Yo no podía ni cerrar bien mis piernas y casi ni caminar, como pude llame a un taxi recogí mi ropa y me subí en el taxi, sentada de lado.
En unas horas después Miguel Ángel me llamo y me dice:
-Miguel Ángel: perdona por todo, me cegué sabes que yo no soy así.
Yo solo pude decir: Que buena violada me diste.
3 notes · View notes
lamaria93 · 4 years
Text
Un cuento
Sólo vengo a ordenar ideas, que no me dejan dormir y si acaso existe alguien ahí por favor; corríjame. Empieza así, como cualquier tragedia/historia  de amor, 
Ya nos conocíamos y sin embargo un día me escribió y claro que me parecía interesante.  No pude declinar su oferta de salir.
Yo tenía muchos problemas en aquella época por que estaba muy enganchada a estimulantes y sustancias.  Pero entre todo ese desastre me hizo sentir especial, me tendió su mano y mejoré a su lado.   
Me fui lejos, a estudiar, me termine de recuperar y volví con la promesa de estar juntos.  De formar un hogar, de continuar siempre a su lado.  A mi regreso, no había espacio para mi.  Nadie me esperaba cuando llegué.  Al bajar del avión, me llevó a mi casa, hicimos algo parecido al sexo.  Tan trivial, sobre un colchón lleno de polvo en el piso.  No había preparado nada para mi, pero me esperé por que esa no iba a ser nuestra única parada... no se que piensa la gente de mi, pero si me gustan las flores.
Entonces, recordaba cada noche que me esperó.  Las noches que me necesitó y no pude estar, y todas esas acciones virtuales que me mantuvieron a su lado.
Visitamos a su familia, y subimos a su casa, el hogar que había preparado para los dos y que con todo el tiempo que estuve fuera pasé imaginando.  Pero tampoco encontré gran cosa.  Bueno, había conseguido electrodomésticos de cocina... seguía siendo un departamento de soltero.  
¿Pero que me merecía yo? Si, la que se fue. 
A medida que pasaban los días, quería esforzarme por agradar.  Fui ama de casa, fui empleada doméstica, fui un destapador de caños y la que sacaba la basura.  Nadie me hacía el amor en las noches. 
La ansiedad me estaba comiendo y ya no tenía medicina.  Fumé marihuana.
La fumé de día, de noche, escondidas, en presencia, con amigos, sin amigos. Todo esto en una ciudad extraña donde todos parecerían tener dos caras.  Pero yo quería que se enamorara de mí, porque he conocido el amor en sus dos direcciones, y aquí no había eso.  Y busque ocultarlo, como si fuera algo malo.  Como si esta ansiedad fuera un pecado.  
Ya tenía medio año en aquella ciudad, no conseguía empleo y sin embargo nunca sentí un apoyo real.  Como si me dijera, hey en mi negocio tengo un espacio para ti, pero eso nunca sucedió. Sin embargo, recibí una oferta y me salvó la vida.  Ayudó mucho a mi autoestima que ya estaba bajo la media. 
Sabes, estimado/a lector/a tengo esto que no me da paz.  Yo quería ayudarle, demostrarle que era útil así que busqué involucrarme.  Había una tablet vieja y le dije, descarga aquí las redes de tu negocio, en mis tiempos libres que chugcha* haré social-media.  Y así hicimos.  Se sincronizó información de su celular personal.   Se me cerró una ventana de la tablet y abrí el historial.  Pero había demasiadas pestañas y sólo yo la usaba y al fijarme leía las búsquedas:  prostitutas, porno trans, transgéneros en tal locación, porno gay, scorts en tal sitio y todas las fechas coincidían en horarios que él “salía a trabajar” 
No tengo nada en contra de la comunidad LGBTI, yo soy bisexual. 
Quiero confesar que nunca le dije el momento en el que sucedieron las cosas, deje pasar un par de semanas que tomé la valentía de escribirle una mañana... el estaba en su trabajo y le dije, será que podemos hablar, me encontré con algo que no entiendo.  Ha pasado un año y aún no entiendo.
Tal como si me acabara de dar cuenta.  Le mostré fotos y todas aquellas cosas que tenía ahí, por que se sumaron fotos de la nube, capturas y un millón de cosas que por algún motivo guardé en mi cuenta personal, información que noches como hoy reviso para torturarme.  Eso está mal, lo se. 
Le dije, ¿Por esto es que nunca me haces el amor?  Porque es mejor la paja que estar conmigo. 
Aceptó su error, me pidió disculpas.  Pero en mi ya nada era igual. 
Esa noche intentamos hacerlo, pero una vez más su pene no se erectó y yo hice el típico gesto de revolver los ojos hacia atrás.  Lo que me costó eso.
Abrió el closet, y empezó a tirar toda mi ropa y a gritarme que me largue de ahí.  Le pedía de favor que se tranquilizara, pero sólo era peor. Yo no podía parar de llorar, estaba muy nerviosa. Tomó un cuchillo de la cocina y amenazó con matarme.  Me tomó del brazo, me tiró al piso, me insultó. 
Nunca me había pasado algo así, conseguí tranquilizarme y hubo una cierta calma por unos segundos.  En un descuido, salí.  Estaba en pijama corriendo por la calle sin tener donde ir, no era mi ciudad y cuánta vergüenza sentía con mi única amiga allí que vivía una situación similar y era yo quien le pedía que se empodere.   Todo esto un 18 de marzo del 2019.
Me llamó, desde un parque cerca de casa de aquella amiga hable por teléfono con él. Me aseguró que estaría tranquilo, que lo disculpara, que estaba avergonzado y yo muy nerviosa.  Lo medite y volví.   
Me tomé un ansiolítico o dos, o tres.  Sólo para dormir.  Aquí todo se pone borroso, llegue y mi todas mis cosas tiradas por el piso.  Me dormí, y qué pena que no fuera para siempre.  Todavía tengo esta pesadilla de que sigue pasando.
Cuando miro hacia atrás pienso mucho en que esa no era yo.   No me reconozco, entre todo aquello que hice y que di.  Fueron 8 meses de convivencia desde que llegué de BCN.  Se que hay mujeres que viven esta realidad todos los días y a lo mejor esto es un pelo de gato. 
Laceró mi autoestima. 
Aunque nunca me volvió a agredir de esa manera, una mañana, un mes después con una pareja de amigos de él de visita en casa, me gritó frente de la chica.  Yo estaba escuchándole pero sintió que no, yo estaba china/fumada/volada/grifa/chantada 
Me quedé muda y avergonzada.  Él tiró los cubiertos y se fue a trabajar, quedó el desayuno que había preparado para todos sobre la mesa.  Esa chica me abrazó y me dijo ¿qué le pasa?  ...y le conté, le hablé del maltrato, le dije que le tenía miedo, le dije que no sabía qué hacer.  Lloró conmigo y me dijo “no te dejes ver las huevas de nadie” ¡Qué sacudón! Y en su abrazo sentí el calor que me hacía falta, en esos días hacía más frío que nunca.  
Esa noche me pidió disculpas, recordandome que fui una drogadicta y que bueno que si él era así conmigo era para que entendiera.  Por que yo la pase mal una vez, y sólo estaba él ahí para mí.  Que mis amigas eran falsas, que ninguna estaba para mi, que todas eran drogadictas y estaban mal.  Al parecer se sentía dueño de la verdad.
Lo que vino cuando se fue esa pareja de casa fue peor.  Todo era desdén, ya no sabía dónde iba, ni venía, ni con quien.  Miré esa tablet una vez más y lo encaré.  ¡Por qué sigues con esto! 
Me empujo, busco un martillo y frente a mi rompio la tablet a martillazos.  Yo estaba en shock.   Y al fin tenía algo de dinero de trabajar dando clases, me habían pagado ese mes por adelantado.  Llamé a mi mamá y le dije que no estaba a gusto ahí, no dije más.   Ella intuyendo algo me llamó por mi nombre y me dijo, esta no es la era en la que las mujeres deben aguantarlo todo si necesitas regresar a Gye yo te apoyo y lo hacemos.  
Le dije que se despreocupe, usé una parte del dinero que tenía para poder llevarme mis cosas que, para un año de estar ahí ya eran muchas. 
Debo mencionar que este no fue el único de mis intentos por salir de ahí.   Yo me sentía enamorada y nunca era una decisión tan firme de separarme como la de ese momento.  Lo hice.  Flete una camioneta, metí todo en maletas, llamé una amiga para que me espere en Gye,  solo dije que me regresaba y no me preguntó más.  Ella tan serena, vivía una situación mil veces peor.  Se dio el espacio, me llevó con todo y maletas a mi casa.  Me ayudó a subir en cada viaje y fue incondicional. Nadie entendía por que me separaba si nos veíamos tan felices. 
Este espacio duró 6 meses hasta que bajé la guardia.   Ahí estaba yo, frente a él de rodillas en un parque,  llorando como un niño, no lo podía creer.  Jamás lo había visto así.  Perdóname, quiero un hogar contigo, tengamos un hijo, nunca te volveré fallar, estar sin ti no es vida, vivo como un perro, todos mis amigos son falsos, tú esto y aquello. 
Me puse firme, y le dije que no sería fácil que yo ahora tenía una vida en Gye y que pues claro si me quería, tal cual yo renuncié a todo por estar a su lado él debía de hacer lo mismo.  Y aventurarse conmigo.  Se que no estuvo bien, por que en mi corazón jamás había perdonada nada... en mi guardo rencor. 
Esta vez en la distancia, yo me sentía más valiente de reclamar, de enojarme cuando algo no me gustaba, ya nada me parecía, todo era un absurdo... Quería vengarme y también grité, insulte y humillé a quien vino a mi con la cabeza abajo.  Esto duró unos 3 meses hasta que...
La cuarentena nos agarró en la misma ciudad, por aquello esa primera semana juntos después de un feriado de carnaval fue un tanto extraña, yo le había dicho que fumaba menos.  Pero cada que veía las noticias sólo se disparaba mi ansiedad y necesitaba fumar un rato.  Me miraba con asco, y empecé a verlo como era.  Le dije, se acaba la cuarentena y esto se termina;  yo nunca dejaré de fumar marihuana.   Y para mi ya era muy fuerte tener que ver en mi casa el desprecio en su rostro, yo ya no le llenaba.  El no estaba enamorado de mi tampoco... yo era una mujer pantalla. 
Esa mujer objeto que llevas a tu lado para disfrazar tu verdadero sentir.  Y ya en la intimidad me lo había dejado claro.
Dormía junto a alguien que se sentía en la obligación de hacerlo. 
¿Qué cómo lo sé? Pues bien, siempre me decía que allá fuera había hombres peores.  Maltratadores, mujeriegos, viciosos.  “Y él no era nada de eso, él buscaba protegerme”. Pero nada me laceraba más que sus comentarios llamándome drogadicta. 
Un mes después separados, él donde su madre y yo sóla en mi apartamento aún en cuarentena.  Decidí llamarle, a pesar que me dije que no lo haría, ya que un “supuesto amigo” en común estuvo enviándome audios, fotos y videos de lo bien que se la pasaban.  Incluso me videollamaba y le dije, hey si tu quieres hablar commigo está bien, pero ya no me menciones a tu amigo ni me cuentes nada por que no me hace bien, le dije, el es una persona que siempre que le doy la oportunidad vuelve a hacerme daño.  
Me sentía tan sola, el respondió mi llamada.  Esta vez estaba yo pidiendo disculpas.  Me dijo que ese mismo amigo le había comentado cosas de mi, como que le llame a pedir droga o cosas por el estilo.  Una persona que recibí en mi casa y con la que jamás me porté mal.  Todo muy turbio, pero después entendí.  Como seguíamos hablando y él ya estaba en la ciudad donde tiene su negocio, le envié yo un detalle sorpresa.  Sin saber aquello me llamó para insultarme, todo muy “sobrado” y haciéndome de menos... diciéndome que se había acostado con alguien en esta cuarentena, que sus acciones tendrán consecuencias (embarazo), que estaba ya en planes con alguien, que yo era una drogadicta que jamás iba a cambiar.   Que lo peor fue haberme pedido volver, que yo jamás lo perdoné.  Implore disculpas.  Llamaba y me gritaba diciéndome que tenía que escuchar lo que yo era.  Yo no era nada de lo que escuché ahí.
Me siento muy culpable de fracasar.  Así le llaman a estas situaciones y por alguna razón tengo esta palabra (fracaso) metida en el vocabulario.  Me duele. 
El 30 de junio recibí las últimas llamadas.  Sólo que esta vez ya no conteste.  
Ayer ese supuesto amigo me escribía, como siempre, haciéndose el tonto con un tema equis, decidí por bloquear.  Creo que es lo más sano para mi, es gracioso porque siempre era el quien me borraba, me bloqueaba, se quitaba comentarios y más.  Está vez lo hago yo.
Me siento muy culpable por permitir todo esto.  Por que no lo puedo creer, no puedo creer que fui yo la que cayó tan bajo.  
La que marcha, la que reclama, la que se instruye, la feminista.  Estoy avergonzada conmigo, cuando pienso en ello solo puedo llorar, como ahora.  Es otra noche sin dormir.   Pronto va a amanecer.  Esta ansiedad me esta haciendo pedazos y al mismo tiempo me hace muy fuerte, creo que no puede ser peor.   Me siento tan poquita y busco en la literatura, en podcasts, en amigas y hasta el horóscopo.  
¿Qué sigue? 
¿Quién me va a matar primero?
¿Seré yo?
Quiero volver a enamorarme de mi, y perdonarme.  Tengo 26 y siento que 4 años de esto ha sido demasiado tiempo perdido.  Tampoco es todo el tiempo del mundo, me siento destruida, me siento débil, me siento muy mal.
Pero ojo, cuando me veas por la calle como si fuera un reflejo sonrío bajo la mascarilla y las gafas.  Me siento como Garrick. Espero lector/a que entiendas la referencia.  Ya van a ser las 5 am.  Creo que ya es hora de dormir.
15 notes · View notes
arlyonne · 4 years
Text
Este es un ultimátum/ aviso general
Si te llegó este texto es porque te considero o consideraba importante, y me conociste en UVM entre el 2011 y el 2017
Yo sé que les caga que haga esto, me aviento biblias y mucho texto tratando de contar mi vida, pero creo que esta es la última vez que mando un mensaje de modo masivo:
Decidí alejarme de toda la gente que conocí en UVM porque estoy tomando decisiones muy duras sobre mi vida.
Primero que nada quiero dejar claro que no quiero que si existen reuniones futuras, mi amado Richy sea motivo de nostalgia, ni que el pasado sea la única razón para juntarnos porque doy por hecho que esto se trata de recordar el pasado, más no de avanzar.
Empezaré por confesar en su nombre que a la mayoría de ustedes, incluso a las más cercanas, él les tenía terror. No me corresponde ser mensajero de nadie, pero Richy murió con el terror de decirle a ustedes sus amigos y a su familia que su orientación sexual siempre fue distinta, y su identidad de género también. Él creció con miedo a todos, rodeado de gente que lo subestimó, y en estos puntos es por lo cuál yo consideré que era mi principal confidente.
Ambos estábamos hartos , y estoy harto de que nos sigan viendo y encasillando como poca cosa y el día que falleció me di cuenta de que todos los días nos han reducido a la memoria de alguien que ya no existe. Richy se fue del mundo sin lograr ser auténtico y yo no me voy a cruzar de brazos esperando la muerte y viendo como todos mis supuestos amigos se largaron con la idea de que soy una niñita que busca hombres y sin aspiraciones a otra cosa.
Procederé a presentarme:
Mi nombre es Lilo (y lo cambiaré las veces necesarias hasta sentirme cómodo, legalmente) tengo 24 años, soy de género no binario, mis pronombres son ELLE/ÉL. Mi orientación sexual es pansexualidad. Aborrezco a los hombres mamados y a la violencia romantizada. Por el feminismo, he dejado de tener gusto por ser un producto consumible para el género masculino. No me gustan los elogios femeninos, ni nada similar. Padezco disforia de género que consiste en sentir un sentimiento negativo hacia mis caracteres femeninos. Sigo amando la música, los doramas, el anime... sigo odiando que me digan que hacer, y quiero hacer de mi profesión la ayuda a las minorías.
Estoy buscando ayuda psicológica porque le tengo TERROR a la sociedad, ya que por ser una persona no binaria pertenezco a la COMUNIDAD TRANS. Me cuesta mucho hablar del tema con mi familia y siento que si ustedes y mi familia siguen negando mi identidad, soy un caso perdido.
Mi objetivo actual es usar el arte como protesta de la ignorancia y la violencia hacia nuestra comunidad trans, así como ser activista.
Debo admitir que decidí alejarme de todos los grupos de amigos de whatsapp y evitar contestarles a algunos, porque me siento bastante agotado y hasta siento que se están burlando de mi. Mi auto descubrimiento y transición hacia lo auténtico, es doloroso y considerarse a uno mismo trans implica el abandono social de familia y amigos. El constante soportar de la ignorancia en el entorno, tener que dar explicaciones a todos y repetir el mismo discurso de que "no me hables en femenino" o "no soy mujer", "no soy una señorita", "no tengo por qué complacer gustos o expectativas".
Ya es suficiente escuchar a mi familia haciéndome menos para que ustedes me traten como si esto se tratara de una etapa o una crisis de la edad, porque es evidente que mi identidad de género viene desde asuntos de la infancia y la juventud, de traumas y violencia sexual y psicológica.
A muchos les pedí ayuda y comprensión y se hicieron de la vista gorda porque nunca han estado listos para recibir y asimilar noticias tan fuertes y es por eso que a partir de esta carta decido alejarme de muchos de ustedes a pesar de la cercanía y las intimidades.
Si neta te vas a quedar en mi vida y a apoyarme, debes saber que pasó por dolor físico y psicológico constante, que necesito cercanía, atención, que quizá pase por etapas hormonales, un montón de disforia de género y hasta por algún proceso quirúrgico con tal de vivir en paz, luchando por mi y por los demás.
Llamale berrinche o como quieras a esta carta, pero neta ya me cansé de sentir que la gente va a estar cerca por nostalgia a algo: YA NO SOY LA MISMA PERSONA QUE HACE 3 MESES Y MUCHO MENOS LA MISMA QUE HACE 10 AÑOS.
Si van a estar conmigo, van a tener que dejar de ser unos tibios, de hablar de cosas dolorosas sin miedo y sin prejuicios... De lo contrario, te agradezco mucho tu amistad y que tengas buena vida.
Si te quedas conmigo, dime que quieres aprender y estás dispuesto a atravesar el dolor conmigo, que no me vas a fallar, respondeme con huevos, que vas a aprender a hablarme como me siento más cómodo ... De lo contrario, pues éxito.
Lo personal es político, no es un capricho.
La identidad se respeta, no se cuestiona, se aprende o se vive en la ignorancia.
Gracias a todos por estar conmigo en algún punto.
Atte: Tu amigo Lilo.
8 notes · View notes
lilium025 · 4 years
Text
Indeleble (GF) 5
Resumen:Los Northwest se han mudado lejos de Gravity Fall a Miami Beach (Florida) tras el Raromagedón, pero no a todos los integrantes de la familia esta feliz con esta decisión. Después de 5 años de abandonar el pueblo, Pacifica decide regresar a sus raíces en busca de un poco de libertad y nuevos comienzos
.......................
Gravity Falls no me pertenece
Capítulo 1 | Capítulo 2 | Capítulo 3| Capítulo 4
Capítulo 5 “Welcome, las Vegas o ¿Francia?”
"El exceso de alcohol es perjudicial para tus secretos..."
Mi cabeza daba vueltas mientras me levantaba, apenas podía abrir mis ojos cuando me levante de donde me encontraba y con todas mis fuerzas intente volver a mi misma. Al parecer, me encontraba en el suelo de una habitación algo desordenada, había dormido en un saco de dormir y conservaba todavía el top y pantalón que llevaba en la fiesta. Así que anoche alguien tuvo que llevarme hasta donde estoy y me acostó sin cambiarme, que alivio pero todavía no sabia donde estaba.
No me dio tiempo a descubrirlo hasta que algo se movió a mi lado, haciendo que saltara de mi asiento para luego descubrir la cara de Mabel que se había despertado en la cama de matrimonio.
- Buenos días, Paz- dice susurrando mientras luchaba por mantenerse despierta aun, a diferencia de mi, ella si llevaba puesto el pijama.
- ¿Qué ha pasado? No recuerdo nada de anoche, ni como llegue- digo sujetándome la cabeza con las dos manos por el terrible dolor de cabeza que tenía.
-A noche bebisteis mucho, más que yo y tuvimos que regresarnos a casa antes de que alguno de los dos hicieran una tontería- dijo mirándome con una sonrisa en su cara mientras miraba algo en su teléfono móvil.
-¿Los dos? ¿Te refieres a ti y a mi?- pregunto mirándola curiosa por su sonrisa, la misma que pone cuando tiene algo en manos.
- No, Dipper y tu. Mira- dice enseñando una cosa de su móvil. Una foto de Dipper y yo con la cabeza apoyada sobre el hombro de este mientras dormíamos.
- Madre mía...No me acuerdo de nada, ¿tan borrachos íbamos?- pregunto mientras miraba la foto con sorpresa, notando como mis mejillas se sonrojaban.
-¿Qué si ibais? No se lo que paso que te perdí de vista pero cuando te encontré de nuevo, estabas en medio de una competición de shots con Stan y todos apoyándoos- dice Mabel enseñando otra foto, en la que parezco haber ganado la competición. A noche tuvo que pasar algo para que me descontrolado bebiendo y debía de averiguarlo.
Me levante como pude del suelo, mi cuerpo se sentía raro pero podía seguir adelante y mire hacia la habitación.
- ¿Estamos en tu habitación, Mabel?- pregunto viendo un stand de purpurina y manualidades. Ella gira hacia mi alrededor, viendo el lugar confusa para luego mirarme.
- Si, ¿te gusta?- pregunta sonriendo.
-Esta bien pero no es mi estilo- digo mirándole con una cara neutral mientras me buscaba mi bolso.- Pero ¿qué pensara tu novia de que haya dormido contigo?- pregunto en plan broma, cambiando de tema.
- No importa-
Derrepente me asalto, debajo de las mantas de Mabel aparece la cabeza de una chica de melena lacia azabache un poco despeinada. Esta se acomoda en su sitio, revelando su identidad.
- Espera, ¿Sandy?- digo asombrada mirándola.
- Es Candy pero te lo perdono por ser mi futura cuñada- dice mientras se ponía las gafas que se encontraban en la mesilla de noche.
- Perdón, pero ¿has estado aquí todo el rato?- pregunto nerviosa.
- Correcto- responde sonriéndome.
-¿Y has escuchado...?-
-¿Como Mabel te llamaba Paz? Si pero no te preocupes, Mabel y yo nos contamos de todo y le prometí que no se lo diría a nadie- dice mientras se abrazaba a esta y le daba un beso en la mejilla de forma cariñosa.
- Gracias por guardarme el secreto, no quiero que nadie más sepa quien soy por el que dirán- digo cogiendo mi móvil de debajo de la cama y a punto de irme para dejarlas sola.
- No es problema, eso ya lo has echo tu- dice tranquilamente, lo que hace que me pare en alto delante de la puerta.
-¿Qué?-
-¿No te acuerdas? Vaya- comenta Mabel saliendo de la cama y acercándose a su armario a coger ropa para cambiarse.
-¿A que te refieres con que no me acuerdo?¿Qué hice?- pregunto nerviosa mirando a la pareja que actuaba tranquilamente.
- Anoche cuando te encontré ibas muy mal por algo que no sabemos y cuando estábamos a punto de meterte en el saco para que te durmieras, decidiste llamar a Dipper por llamada pero como te habrás enterado este estaba cao en su habitación por lo que salió el contestador- dijo Mabel con naturalidad mientras se probaba unos pantalones cortos rotos.
- ¿Pero como lo llame si no tengo su numero agregado al teléfono?-digo confusa mirando el suelo.
- Yo te lo di.-
- ¿Porqué hiciste eso?-pregunto sorprendida.
-Sabes muy bien que soy partidaria de vuestra relación y borracha das unos respuestas muy convincente- dice sonriéndome.
- No tenemos nada, ¡no hay nada!- digo a Mabel mientras me acerco a ella desesperada a que me creyese, aunque sabia que lo que decía no era del todo verdad.
- Eso no decías anoche cuando lo llamaste- suelta Candy que se había terminado de vestir mientras nosotras hablábamos.
- ¿Como? Dime que estáis bromeando y que no solté nada que me deje en evidencia o peor- suplico esperando que el Karma no me hubiera jugado una mala pasada.
- Dependiendo de lo que tu consideres tu dejar en evidencia o peor.-
- Confesar mis sentimientos o mi identidad a una persona que tengo mucho aprecio pero que no me corresponde- digo esperanzada, esperando a que alguna de las presentes me revelara mis pecados de borracha.
- No se, ¿Mabel que dices?- pregunta Candy confusa sin saber que responderme.
- Mmmm... creo que si- dice Mabel mirándola dudosa.
-¿Como que crees?¿Lo hice o no?-pregunto aun nerviosa más todavía.
- Es que has dicho "a una persona que tienes mucho aprecia pero que no te corresponde" y no se si mi hermano no te corresponde. Pero si no lo fuera, entonces si, lo hiciste- me explica sentándose sobre su cama con las piernas cruzada en una pose de indio, apoyándose tranquilamente en un peluche almohada.
Juro que me acaba de dar un mini-paro cardíaco y ver mi vida pasar por delante de mis ojos a la vez, estaba perdida, la vida había acabado para mi. Debía de escaparme antes de que Dipper despierte de la resaca, no podía verlo a la cara, sentía un miedo y vergüenza de solo pensar en ver su cara preciosa de nerd.
- Debo irme- solamente digo mientras recojo mi cargador y mi móvil.
- ¿A donde vas?- pregunta Mabel viéndome apresurada.
- Debo de huir, no estoy lista para afrontar la verdad- digo saliendo de la habitación y buscando mis cosas para meterlas de nuevo en las maletas. Entonces escucho los paso de Mabel y Candy corriendo hacia donde estaba alarmadas, impidiéndome que me fugara.
-Ni te atrevas, loca. Estas exagerando la situación- dice Mabel sacando ropa mientras yo buscaba  más cosa por meter.
- No estoy exagerando, me voy- digo decidida a seguir mi plan de huida.
- No puedes irte, no tienes a donde ir- comenta Mabel preocupada.
- A donde sea, a Las Vegas o París, donde sea menos aquí- digo nerviosa, estaba pensando mi huida con la marcha.
A continuación soy parada por los hombros por una Candy que no había comentado nada en lo que había entrado para retener mi huida, mirando me con unos ojos serios y una sonrisa tranquila que me preocupaba.
- Paz, calma. Estamos en el siglo XXI, la gente no mira sus mensajes de voz ya, ahora dejan audios de voz. Así que deja empacar la maleta y tomemos este día para bajar la resaca, ¿de acuerdo?- me tranquiliza mientras me rodea en su brazos en un gesto tranquilizador.
- De acuerdo. Creo que he exagerado un poco, es decir, ¿qué probabilidad hay que mire los mensajes de voz?- en lo que termino de hacer esa pregunta retorica, aparece el rey de roma (Dipper) en un aspecto desaliñado de su habitación.
- Buenos días, chicas.-
-Buenos días- respondemos todas en coro mirándolo curiosas.
- Mabel ¿me prestas tu cargador de móvil? Creo que me olvide de empacar el mio y necesito mirar algo del móvil pero no tengo batería como ya habrás supuesto- pregunta mientras se dirigía a la cocina a servirse una taza de café.
- De acuerdo- dice Mabel pasando al lado de el para prepararse unos cereales azucarados, mientras que Candy y yo simplemente tomamos un poco de café que había preparado Dipper.
- Gracias hermana- dice contento.
- ¿Y que es lo importante que tienes que mirar?- pregunto yo curiosa por saber.
- No es nada, se suponía que la universidad llamaría a mi teléfono para hablar de unas cosas de mi carrera pero no creo que el móvil este cargado para cuando llame. Así que tendré que revisar mi buzón de voz- dice tranquilamente a lo que sorbe su café.
En ese momento, Candy, Mabel y yo escupimos lo que estábamos bebiendo/comiendo en ese momento con la sorpresa, casi atragantando nos a la vez, haciendo que Dipper nos mirara curiosos por nuestra reacción.
-¿Qué os pasa esta mañana? Estáis muy raras, ¿he dicho algo mal?-pregunta Dipper.
- ¿Qué? No es eso, es solo que no es muy anticuado eso de mirar el buzón de voz. Osea,¿quién mira el buzón de voz en la actualidad? ¿A que si chicas?- digo buscando apoyo de las chicas, las cuales asintieron.- ¿Lo ves? Muy raro- digo finamente mientras me limpio el resto de café que había quedado en mi cara cuando escupía.
- Bueno yo miro esos mensajes, me parecen muy importantes, nunca se sabe cuando dejaran de existir las cosas- dice dejando su taza en el fregadero y marchándose a su habitación.-Nos vemos luego chicas- se despide entrando de nuevo a su habitación.
Asegurándome que había pasado un tiempo y que no nos escuchaba, me levante rápidamente de la mesa y volví a mi plan de huir. A lo que una Mabel salvaje salta sobre mi y me derriba sobre el suelo.
- ¡Dejame Mabel!- le grito mientras intento soltarme de su agarre de boa constrictor.
- ¡No te dejare! Debes afrontar la realidad a la cara, es ahora o nunca- dice agarrándome más fuerte que antes.
- ¡Nunca!-
Debido a nuestra pequeña pelea y los gritos de desesperados de Candy por que dejemos de pelear, Dipper se asoma de nuevo al pasillo alarmado por el escándalo.
-¿Qué esta pasando aquí?- dice separando a Mabel de mi, dejándome así libre de su agarre.
-¿Pasar? No esta pasando nada. ¿Verdad, Elise?-pregunta Mabel mirándome fijamente.
- Verdad- contesto sujetándole la mirada.
- ¿Entonces porque peleabais?-
- Estábamos decidiendo quien te acompañaría a comprar la pintura para las paredes y por supuesto a perdido Elise- contesta rápidamente Candy con una sonrisa tranquila.
- De verdad que no hacia falta que os pelearais para decidirlos, sois muy raras- dice Dipper desapareciendo de nuevo de la sala. En cuanto cierra la puerta, miro enfadada a Candy.
- ¿Por qué has dicho eso?- pregunto.
- Porque es parte de un plan que se me ha ocurrido ahora mismo- dice sonriéndome a lo que mi cara de enfado pasa a ser de confusión.
-¿Tu plan?-
- Mi plan- me afirma esta con la cabeza mientras bebía su café de vuelta.
-¿Y de que trata este plan tuyo?- pregunto mirándola seriamente con los brazo cruzados.
- Mi plan consiste en coger su móvil, en lo que vosotros estáis comprando la pintura a lo que tu lo distraerás un buen rato para que nosotras podamos borrar tu llamada y el registro de su móvil. Así no sabrá que anoche le confesaste tus sentimientos borracha- dice finalmente dejando su taza vaciá sobre la mesa.
- ¿Y como harás para que se deje su móvil en casa? No crea muy descuidado para dejárselo.-
- Mi querida Northwest, eso déjalo en nuestra manos. Conozco a mi hermano a la perfección, se que decir para que no se lo lleve- dice Mabel astutamente mientras imita que lleva una pipa en la mano y fuma de esta.
- Vale pero si no funciona vuestro plan, el plan b será Las Vegas, ¿entendido?- digo dirigiéndome al cuarto de baño a cambiarme.
- No hará falta el plan b, estamos segura de lo que hacemos- dice Mabel antes de que cerrara la puerta.
Decidí ponerme unos mayas negras de deporte junto con una camisa de tirantes blanca con un estampado de Florida colorida y unas deportiva. Aunque el interior del apartamento se encontraba fresco, el ambiente de fuera era bochornoso. En cuanto salí del baño, Dipper ya me estaba esperando en la sala para marcharnos.
- ¿Vamos?- me pregunta en cuanto me ve venir hacia el, yo solamente asiento con la cabeza, a lo que el salía por la puerta del apartamento yo le lanzaba una mirada nerviosa a Mabel y Candy que se traducía a "espero que lo consigáis". Mientras bajábamos los dos piso, ninguno de nosotros hablo y estaba nerviosa. ¿Por qué no me habla? ¿Aparte de la llamada de voz, hice algo más que no me acordara? ¿Es por eso que me emborrache al principio?
Muchas preguntas se acumulaban en mi cabeza mientras nos dirigíamos hacia su coche. Al entrar a este y ponernos en marcha, él rompe el silencio entre nosotros.
- Tenemos que hablar sobre anoche- dice así derrepente, mi corazón se para y mis oídos dejan de escuchar mi respiración. Lo sabía.
Me giro lentamente sobre el asiento, dispuesta a saltar del coche pero Dipper se adelanta a mi y cierra de golpe las puertas del coche. Estaba atrapada, no había salida.
- Se que no quieres hablar sobre eso pero es algo que debemos aclarar para que sigamos con nuestras vidas- continua diciendo mientras yo evitaba mirarle, no me atrevía.
-¿No me vas a responder? Lo entiendo, no hace falta. Solo quería decirte que entiendo que tengas tus motivos para no decírmelo, en fin, nos hemos encontrado hace poco y es muy difícil que te abras a una persona que no conoces apenas.-
Madre mía, lo sabe. Voy a buscar precios de apartamentos en Francia.
- Así que espero que me perdones por pensar y comentar lo que te dije la otra sobre tus padres- dice derrepente Dipper, sacándome de la depresión en la que me estaba sumergiendo.
-¿Perdón?-dije mirándolo confusa a Dipper, quien me miraba igual de reojo mientras conducía.
- Si, ¿no te acuerda? Dije sin pensar que deberías haber enfrentado hace tiempo a tus padres, al parecer mi comentario te molesto mucho, porque te fuiste enfadada a otro lado. Me había pasado un poco con los tragos de tequila, pero ya sabes como es Tío Stan, ¿verdad?- dice finalmente Dipper.
Ahora mismo me importaba menos el tema de mis padres, Dipper no sabia sobre mi secreto. Era un milagro que tuviera aun tiempo para recuperar la llamada.
- No me acuerdo mucho de anoche, pero tienes razón, debía haber afrontado a mis padres y no debía haberme enfadado por tu opinión. Gracias- digo intentado tranquilizarlo con mi respuesta.
- Aun así me siento mal, ¿ te parece bien que te lo compense con helado en el Greasy's Dinner después de comprar la pintura?- dice mirándome sonriente mente, a lo que le sonreí de vuelta.
- ¿Y qué pasa con Mabel? Nos estará esperando para pintar- digo curiosa.
- Eso mi querida Elise, no importa-
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------
Queridos lectores, lamento la tardanza del capítulo, he estado ocupada con la matricula de la universidad. Como leéis, así que a partir de ahora a adelante intentare subir capitulo cada domingo, alternando entre semanas. Dependiendo si tengo trabajos o exámenes pero ten por seguro que no dejare sin finalizar este fanfic, estoy comprometida para acabarlo.
---
Espero que os haya gustado con quien he emparejado a Mabel, quería hacer algo innovador y no hacer el cliché de emparejarlo con Gideon, aunque no tengo problema con este ship. Estoy segura que en un futuro donde este fanfic este acabado y tenga tiempo, decidiré hacer un one-shot de Dipcifica en el que Mabel salga con Gideon.
2 notes · View notes
treeofliferpg · 5 years
Text
Ideas de rol: Criminales
Como siempre, recordar que el staff de ToL no ha redactado este texto, solo lo hemos traducido para que llegue a más personas. El autor original es @diegoalvesisgod, en su tumblr podéis encontrar el post original así como en este mismo tumblr bajo la etiqueta “idioma original”. 
Descargo de responsabilidad: Todos estas ideas son mías y las ofrezco de forma gratuita. Solo quiero saber si las escribes porque quiero leerlas. ¡Disfruta!
1: Me estás estrangulando y hay un arma presionada contra mi sien, no debería sentir lo que siento por eso, pero no puedo evitarlo, joder.
2: Vine a hacer un trato con una pandilla turbia y ahí estás, atado y magullado, genial, ahora tengo que hacer un trato sobre ti para poder sacarte de allí.
3: Me entregaste a la policía y fui a la cárcel, pero sigues diciendo que fue por mi propio bien, ¿estás hablando en serio? Además, ¿por qué no puedo odiarte?
4: Mi jefe me ordenó que te llevara al desierto y te matara allí, maldita sea, deja de llorar, es muy patético, no, no te voy a dejar ir, estás loco, oh Dios, para, estás empezando a ponerme en los nervios y ... ¿estoy empezando a sentir pena por ti?
5: Mi jefe me ordenó que te llevara al desierto y te matara allí, pero no tienes ni idea y sigues hablando de nuestro futuro, detente, no puedo soportarlo.
6: Soy un sacerdote y tú eres el único que viene a confesar sus pecados todas las semanas, hijo. ¿Podrías ir a la policía? Ya he oído hablar de asesinatos, también, deja de decir cuánto amas mi voz, está bien, me hace sentir muy incómodo.
7: Te mantengo cautivo y se supone que debo alimentarte, te juro que si intentas morderme otra vez, te daré un puñetazo en la cara.
8: Te mantenemos cautivo y te cuido, tuve que irme, ahora he vuelto y no estás en el estado en que te dejé, ¿qué demonios te han hecho?
9: Soy una prostituta y tú un policía, me diste tu número de teléfono hace un año durante una investigación en esta área y lo siento, sé que son las 2 am pero estoy en un verdadero problema y ¿podrías venir y ayudarme?
10: Te he secuestrado y estoy tratando de filmar un vídeo muy amenazador en el que pido un rescate, pero sigues riendo y, al parecer, tendré que amordazarte, estúpido idiota.
11: Mis compañeros criminales finalmente decidieron matarte, pero después de las semanas de mantenerte cautivo, me encariñé contigo. Estaba tratando de mantenerme tranquilo, pero cuando te acercaron el arma a la cabeza, me miraste y me susurraste que no tenías miedo, y perdí la cabeza.
12: Soy un policía, te encontramos en un callejón oscuro durante mi patrulla y pensé que estabas muerta, pero luego me agarraste la mano, qué demonios, me asustaste mucho.
13: Nos tomaron como rehenes juntos y sigues con planes locos para escapar, solo cállate, estás delirando y eso me molesta.
14: Hola, soy tu compañero de celda, bienvenido al infierno. Oh ... maldita sea, no deberías ser como en un niño, eres un maldito bebé, ¿estás bien, quieres que te abrace?
15: Estoy huyendo, me metí en tu coche, te apunté con un arma y te grité que manejaras pero, oh Dios mío, eres el peor conductor del mundo, estoy jodido.
16: Estoy en Starbucks pidiendo café a altas horas de la noche, tú eres el barista y por qué demonios me miras así, oh mierda, no me di cuenta de que tenía sangre en mi ropa.
17: Accidentalmente fui testigo de tu secuestro, no soy un héroe, pero agárrate fuerte, voy al rescate.
18: Te mantengo cautivo, pero estás realmente enfermo. Demonios, te necesito vivo. No puedes morir. ¿Qué te pasa? ¿Es neumonía o qué? ¿Qué se supone que debo hacer? ¿O necesito robar una farmacia ahora?
19: Soy un policía, te resistes al arresto y ahora estoy prácticamente sentado sobre ti tratando de esposarte y ... ¿estás realmente riendo?
20: Escucha, estaría bien si solo entraras en mi apartamento y me robaras mis cosas, pero lograste matar a mi hámster en el proceso, ahora voy por ti, bastardo, ¿me oyes?
50 notes · View notes
kaori-angel · 5 years
Text
🐰 d a n t e + á n g e l 🐱
Tumblr media
¡Hyuuung! Ah, no puedo creer que hoy se cumple un mes más a su lado ㅠㅠ. Se siente como si fuese mucho más ¿no? Tantos días juntos y aún nos esperan muchos más. Creo que ya le he dicho demasiadas cositas en nuestras conversiones de cada día, y por ello, este pequeño regalito quiero utilizarlo sólo para darle las gracias, hyung bonito. Y aquí es cuando usted se preguntará "¿Las gracias por qué? " pero, aunque no lo crea, hay muchas razones por las que puedo agradecerle el haber llegado a mi vida.
Desde que usted está aquí, a mi lado, desde ese primer día que comenzamos a hablar, ya me estaba haciendo sonreír. Sí, ese mismo día donde hablamos sobre qué tan cómodo sería dormir en una laptop, usted ya había empezado a hacer mi vida mejor. Desde hace varios días he pensado en el impacto que tuvo usted en mi, cuando me siento en medio del patio en la escuelita, bajo el sol, y viendo los rostros ya sólo conocidos de gente que me hizo tan infeliz antes... Y ahora nada de eso está. Ni un poquito de tristeza, aún cuando los fantasmas del pasado me atormentaban cada noche y hacían el momento de dormir algo horrible. Ahora incluso los sueños feitos parecen haberse ido por completo, en aviones de papel rosas como siempre le digo.
Tumblr media
Y sin más preámbulos, me gustaría comenzar por agradecerle el siempre estar ahí para mi.
Debo confesar que los primeros días que comentábamos a hablar, tenía mucho miedo. Miedo porque usted era tan bonito y yo ya lo quería tanto, que realmente me aterraba la idea de que usted decidiera irse de un momento a otro como tantas veces me había ocurrido en el pasado con distintas amistades, porque creo que he tenido mala suerte en ello. Pero usted no se marchó, jamás lo hizo, y hoy cumple un mes más a mi lado, lo cual aún me impresiona mucho. Agradezco cada día despertar sabiendo que tengo un niño precioso sólo para mi, y espero ansioso el llegar de la escuelita sólo para hablar con usted. Incluso me dio una motivación permanente para realizar mis deberes u u. Tenía una vieja costumbre de buscar un hecho impresionante para poder llegar a fin de mes sin perder las fuerzas, contaba los días para lo que fuera, algún evento, una visita a la librería, un programa, una película, lo que fuera con tal de que eso me diera ánimos para pensar "bueno, falta poquito para ello, debo seguir..." pero ya no lo hago más, porque sé que cada día llegaré y mi principal motivación e inspiración estará esperándome para preguntarme cómo me fue o para hablarme de todo lo que le ocurrió en el día. Y por muy pesados que sean los días, llego con un calorcito bonito en la pancita porque usted me hace compañía siempre u u♡.
Tumblr media
También, quiero agradecerle el siempre mimarme aún cuando puede llegar a ser molesto que sea tan meloso.
Usted jamás se ha negado a mis cariñitos, y vaya, tiene una paciencia gigantesca conmigo cuando se trata de ello fkdñ u u. Incluso me deja refregar mi carita en la suya en busca de mimos, como todo un gatito y sus manitos siempre están dispuestas a hacerme nanai. Jamás había sido un gatito taaan feliz, y mimado también. Pero he de admitir que me gusta mucho ser el gatito bebé mimado de hyung u u. Todo el mundo necesita que lo cuiden de una forma, y creo que yo encontré la mía, entre sus brazos, con sus manitos en mis orejitas. Aunque antes me daba tanta vergüenza mostrar mi lado felino en público porque creía que me iban a ver feito, usted me aceptó incluso con ello y me mostró que no era malo ser así u u♡.
Tumblr media
Gracias, hyung bonito, por todas las meriendas de leche de fresa y galletas. Por todas las veces que se ha quedado conmigo aún después de haber estado estudiando para un examen o aunque yo demore por la misma razón. Por compartir su tiempo conmigo aunque ambos sabemos que el último año de escuelita es el más difícil y el que nos da menos tiempo libre. Por quedarse hasta el último suspiro antes de caer dormidito en la madrugada, o desearme buenos días al despertar.
Tumblr media
(+) Incluso, gracias por soportar todas las veces que me quedo dormidito antes que usted sin querer KDKFÑ u u. Me llena el corazoncito de amor saber que aún cuando tenemos horarios tan diferentes, usted sigue queriendo estar conmigo u u.
Tumblr media
Y sobretodo, gracias por ser usted, el amor de mi vida.
Cada pequeña cosita que lo hace ser usted, es lo más bonito del mundo para mi.
Felices tres mesesitos, hyung bonito, el tercero de muchos más que tendremos, es una promesa por la garrita🐾💖.
Lo amo infinitamente, de aquí a la luna a pasito de caracol y más allá, y dando varias vueltitas como dice usted u u. Y estoy muy seguro de que será así el resto de mis días💕.
Tumblr media
undefined
youtube
1 note · View note
patriciavazqucz · 3 years
Photo
Tumblr media
𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝟒. 𝐓𝐇𝐀𝐓 𝐌𝐎𝐌𝐄𝐍𝐓 𝐖𝐇𝐄𝐍 𝐒𝐇𝐄 𝐌𝐄𝐓... 𝐓𝐇𝐄𝐌                  Bʏ﹕ DʏɪɴɢSᴡᴀɴ (@PatriciaVazqucz)
𝐏𝐚𝐫𝐭𝐞 𝟏
Ser abogada a menudo traía ciertas dificultades. En aquella ocasión me habían asignado un caso que parecía tan simple como respirar. Varios testigos habían señalado al hombre que esperaba entre rejas por prisión preventiva temiendo que pudiese salir del país. El caso había empezado a ser mediático porque se trataba ni más ni menos que uno de los hombres más importantes dentro de la mafia oculta en los vertederos de aquella ciudad que parecía luz y color a simple vista.
Giulio, ese era su nombre. Giulio Bowman.
—¡Ven aquí, preciosa! —gritó uno de los recluso que estaban en el patio.
Rodé los ojos para intentar controlar las ganas de mandarle al diablo. Sabía que algunos de esos hombres podían llevar más de cinco años sin ver a una mujer, los había que hasta veinte, pero no era mi problema. Había los suficientes chanchullos allí dentro como para que pudiesen lograr conseguir amantes a precios razonables para ellos. Era horrible que fuese así, pero entre las admiradoras y las prostitutas que sabía que metían allí dentro podían estar servidos. Por no hablar que muchos de ellos terminaban descubriendo otras inclinaciones sexuales dentro de aquella cárcel.
El mundo que se escondía allí dentro era tan oscuro y dolía. Si por mí hubiese sido cambiaría todo y haría lo posible para evitar muchos comportamientos, pero a menudo las autoridades de lugares como aquel preferían hacer la vista gorda pese a que se les pagaba por lo contrario.
Fui dirigida hasta una sala y esperé con paciencia, sentada al otro lado de una mesa, a que apareciese mi nuevo cliente. Saqué un cuaderno y mi pluma preferida. Tendría que tomar notas, eso lo sabía.
La puerta se abrió con un sonido horrible y primero apareció un agente antes de aquel que era mi cliente. Me revolví en el asiento por instinto. Jamás había visto a un hombre tan intimidante. Sus ojos de un azul claro que lograba dejar sin sentido, se posaron en mí al sentarse al otro lado de la mesa. Apoyo sus manos esposadas sobre la misma y pude distinguir la desesperación escrita en todo él. Era como si todo aquello le estuviese consumiendo, pero no era la primera vez que veía a personas fingir que no habían hecho nada antes de confesar sus fechorías delante de mí por pura necesidad, porque debía saber cómo ayudarles sin sorpresas. No me dejaba llevar por los ojitos de cachorrito desde hacía años.
Alto, cabello moreno desordenado y una tez con cierto color propio de quien se bronceaba a menudo, todo un hombre atractivo a simple vista, ese era mi cliente.
—¿Giulio Bowman? —pregunté con el tono de negocios que siempre usaba para estas reuniones. No había lugar para las emociones—. Soy Patricia Vázquez su abogada de oficio.
—Gracias por haber venido.
—Es mi trabajo. Dígame, señor Bowman. ¿Cuál es su versión de todo esto? De lo que se le acusa.
—Soy inocente. No he hecho nada de todo lo que dicen que hice.
Dejé la pluma sobre el cuaderno y cuadré mis hombros sabiendo que iba a ser algo tedioso si se cerraba en banda ante la posibilidad de ser «inocente».
—Señor Bowman, permítame recordarle que a mí no tiene que mentirme. No tiene que decir que no ha hecho algo si lo ha hecho. Aunque me gustaría saber cómo explicaría que hubiese dos testigos que le describen a la perfección, que no tienen ninguna clase de conexión entre sí y que tienen el beneplácito de la policía —musité antes de darle una pequeña sonrisa intentando que fuese esclarecedora, para hacerle sentir que en realidad no había nada que temer por ser sincero.
—Yo no lo hice —repitió antes de tragar con dificultad. Pude distinguir en él que había algo más que no quería decir, algo que haría mucho más complicado mi trabajo si no lo soltaba con facilidad.
—¿Mantiene que es inocente? ¿Esa es la premisa con la que debo ir? —pregunté más para mí misma que para que él me respondiese.
—Se lo suplico, sáqueme de aquí.
Su mano se deslizó hacia la mía por encima de la mesa y sentí una electricidad en forma de cosquilleo que me recorrió entera de los pies a la cabeza.
—Veré lo que puedo hacer para conseguirle la libertad bajo fianza. Pero no parece nada fácil —musité antes de quitar la mano de su camino aunque me había gustado el contacto.
—Gracias…
Esas fueron las primeras palabras que conseguí cruzar con mi cliente. Una vez dentro del coche que me sacaría de aquella maldita cárcel para no regresar con facilidad. Intenté saber cuáles eran mis propias impresiones. Era el mejor actor del mundo si me estaba engañando porque parecía tan sincero cuando hablaba de que era inocente. Sin embargo, ¿por qué motivo le señalarían a él esos dos testigos? Era cuanto menos extraño, muy extraño y no pensaba perder el tiempo. Había que averiguarlo en algún momento si eso lograba esclarecer parte de lo que ese hombre decía. La información era poder en mi profesión.
Al llegar a casa tuve un gran trabajo por delante. Averigüé quienes eran los testigos, así que tenía un par de nombres más con los que debía hablar, pero tenía que investigarles, no me servía tan solo con centrarme en mi cliente y en sacar  todos sus trapos sucios que probablemente llevaría mucho más tiempo si escondía la verdad con unos ojos de cachorrito de ser el jefe de una mafia.
Me quité los zapatos agotada y llena de papeles mientras pensaba en Giulio. Su mirada, la forma en que me había tocado. Recordaba haber sentido eso una vez hacía mucho tiempo. Cerré mis ojos y pude distinguir los suyos azules logrando que algo en mi interior se revolviese con una fuerza inusitada.
Busqué en los archivos que tenía conmigo la fotografía de Giulio y mordiendo mi labio inferior me obligué a dejarla nuevamente entre los papeles antes de irme a dar una ducha y dormir durante todas las horas que pudiese. El despertador siempre sonaba demasiado pronto y había acostumbrado mi vida a un ritmo de trabajo ajeno por completo a todo lo que me había visto obligada a dejar atrás.
Al día siguiente tenía claro mi objetivo. Tenía que conseguirle la libertad bajo fianza a mi cliente. Sería algo complicado, pero no me decían que era una de las mejores abogadas del mundo solo por sonreírle a todos y dejar que me diesen palos sin tener un mínimo de idea de derecho. La mayoría de hombres se sentían intimidados cuando les ganaba en su campo de batalla, pero para mí era un subidón de adrenalina que solo podía conseguir igualar alguno de esos momentos en los que era yo misma mandando al diablo a los hombres que intentaban propasarse conmigo. El miedo que había experimentado tiempo atrás se había transformado en patadas en las pelotas y en una gran y constante puesta a punto de técnicas de defensa personal que me habían dado una nueva vida.
Mientras desayunaba, llamé a mi padre. Escuché los tonos de llamada y sonreí cuando el buzón de voz con su voz me dio la bienvenida. Podía escuchar la vibración del teléfono que tenía en la habitación contigua, pero era un pequeño ritual, algo que necesitaba hacer. Su voz era lo único que siempre había logrado calmarme desde que tenía uso de razón.
—Te quiero mucho, papá —susurré al teléfono después de que la señal me hubiese indicado que podía dejar el mensaje.
Cerré mis ojos rememorando esos momentos de risas mientras me cogía en brazos siendo una niña y me hacía volar como si fuese un avión, algo que siempre había querido ser desde pequeña. Yo no quería ser princesa, no quería ser modelo o profesora, tampoco ser jugadora de fútbol. Yo quería ser un ave o un avión, volar hasta que me doliesen las mejillas por el frío. Ese había sido siempre mi sueño.
Me terminé de arreglar y después de salir de mi apartamento, me puse el manos libres para llamar a mi ayudante.
—¿Peter? —pregunté sabiendo que esa voz soñolienta solo podía ser suya.
—Buenos días, jefa.
—Buenos días, ¿estás en la oficina? —Abrí la puerta de mi vehículo pese a que sabía que no estaba allí, podía escucharle azorado al otro lado de la línea. Seguro había vuelto a quedarse dormido. Ni tan siquiera sabía en esos momentos porqué le tenía como ayudante, pero había muchas cualidades que Peter tenía y que el resto no—. No hace falta que me mientas. Te quiero allí en como muy tarde media hora, ¿me has oído?
—Sí, jefa.
—Y vente preparado para trabajar. Hoy tenemos que conseguir la libertad bajo fianza de un cliente.
Colgué antes de arrancar el vehículo y ponerme en marcha por las ruidosas calles de una ciudad que jamás descansaba. No importaba lo que ocurriese, siempre tenía algo, lo que fuese, que la hacía sentir como si no durmiese, como si toda la población se dividiese las tareas entre los diferentes horarios y así media ciudad estaba despierta por las mañanas y la otra por las noches. Demasiada gente, de todos modos, para poder transitar sin atascos. Lo que siempre le causaba sorpresa a todos los visitantes es que ni tan siquiera se trataba de aquellas que tenían la fama, como Nueva York.
Mi oficina era un despacho no demasiado grande que había podido pagar gracias al duro trabajo que siempre me había llegado en forma de encargos que a la mayoría de abogados prefería dejar a un lado. Pese a que éticamente me lo recriminaba, había tenido que defender a toda clase de idiotas que sabía culpables, pero había que pagar las facturas y la única manera era permitiéndose dejar la ética y los valores personales en el suelo. Por horrible que pareciese y me pesaba que así fuese, había logrado dar la vuelta a la tortilla a casos que deberían haber terminado en cárcel. Casos que aún llegaban a mi mente por la noche y me causaban pesadillas. Familias destrozadas llorando que sabían que aquel había sido el culpable de la muerte de su familiar y yo había encontrado la manera de que las penas fuesen mucho menores o, incluso, de encontrar el modo para que ese ser pudiese estar en libertad. Aún derramaba lágrimas por ellos aunque no lo supiese nadie.
Aparcar siempre era algo de locos, así que los mejores amigos para los aparcamientos eran el tiempo y sabérselas todas. Por eso, en un solar que llevaba años desocupado, mi coche había estado esperándome durante jornadas maratonianas de trabajo. Por suerte para mí ningún policía había decidido multarme aún.
Entré en mi despacho y suspiré al ver en el suelo cartas. Esas cartas no las mandaban los carteros nunca, que siempre dejaban el correo en el buzón de manera próliga sino que se trataba de cartas amenazadoras que solía mandar a la papelera porque había dejado a un lado las ganas de enfrentarme a insultos de toda clase solo por hacer mi trabajo.
Recogí los cinco sobres. Sin embargo, antes de tirar uno, distinguí que tenía una letra manuscrita en el sobre. Diferente a todos los demás. Lo cogí con curiosidad y sopesé bien si podía haber algo peor que amenazas allí dentro. Lo pesé con los dedos, pero no parecía tener nada extraño y apretando un poco parecía que había solo un par de hojas dentro como mucho.
Me aventuré a abrir el sobre y en cuanto lo hice, encontré que había una hoja, efectivamente. Doblada. La desdoblé y algo cayó de su interior.
«Úselo para la fianza de Giulio Bowman».
Eso era todo lo que había escrito en el papel. Me incliné para recoger lo que se había caído y distinguí un talón al portador de una cifra tan grande que jamás había visto tanto dinero en mi vida. Diez millones. Eso era lo que había escrito con tinta negra. Sabía que era la fianza que le había impuesto el juez a Giulio, pero había creído que de alguna manera podía lograr que bajasen el precio de la misma. Ahora mismo no tenía que conseguir nada. Tenía todo en la palma de mi mano. Pero, ¿quién podía pagar tanto dinero por la libertad de un culpable? ¿Quizá sus compañeros de la mafia? No me olía nada bien.
0 notes
leavesofdust · 3 years
Text
Antes de responderle lee ésto
Uno vive cosas y piensas que el tiempo sana las heridas pero no hacen más de que sólo se te olviden, que te duelan menos. Pero no quiere deceri que no te duela, con él eh vivido cosas bonitas pero es momento de ser realista y dejar de vivir en un sueño idealista, y ser tanto honesta cómo valiente de lo que siento. Hay cosas que siempre dolerán y hay cosas que siempre me disgustarán. Antes de hablarle, antes de responderle lee esto. Por qué si, no tengo con quien hablar de esto, estoy sola y lo sé, puedo pasar el día sin comer nada, sin hacer nada y nadie sabrá, él podrá venir, podré poner una sonrisa falsa, un máscara con maquillaje y ropa para que no se note lo mal que estoy pero al final del dia estoy sola, y a decir verdad creo que me gusta estar sola, me gusta tener mi espacio, claro me encantaría tener con quien compartir mis momentos, mi día, mis angustias, mi decisiones, alguien que me aconseje conociéndome realmente, sabiendo mi historia, lo que quiero y lo que soy y lo que quiero ser. 
Pasé por una etapa muy insegura en la relación que pensándolo bien no sé si fue a causa de todo lo que traía cargando o por él, y sinceramente creo que son ambas. Por que si, en éste camino no todo ha sido desdicha, me ayudo bastante en conocerme en conocer mis límites, y los límites que jamás deben de ser, aprender a poder sobrellevar todo yo misma. Antes pensaba que nuestras discusiones eran debido a que era insegura, que no confiaba en el, que no tenía seguridad en cuanto a mi persona y que me iba al extremo inmediatamente razones por las cuales en cierto momento justificaba siempre tu manera de ser explosiva, pues quien no se iba a cansar de estar con una persona así.. pero ahora es totalmente diferente, la inseguridad ha mejorado demasiado, me sé levantar yo sola y puedo arreglar mi desmadre yo sola, me puedo controlar yo sola; establecí una confianza en él en no ser tan obsesiva celosa que sé todo lo que implicaba; en realidad considero que mejore en bastantes aspectos. Y ahora sin existir éso te desespero en demasía, antes justificaba tu desesperación, que te hartaras por mi culpa, por simplemente ser yo, pero debo de confesar que me faltaba inteligencia, pero simplemente me domina por completo, llegó un punto donde simplemente me calla y no hace más que no escucharme de no hacer nada simplemente no hablar, y no lo entiendo, pero si soy honesta con su comportamiento con todas las personas es así, se estresa se enoja y no habla con nadie, es agresivo frente a todos “me ahorcaba de niña para que estés al pendiente” tenía tanta razón lo que me dijo su hermana, con su mamá es igual, y dice que el problema soy yo,  pero no creo, considero que él es así, y realmente no soporto que sea sangre tan pesada porque yo simplemente no sé que hacer, éso me cansa. 
El otro aspecto es de que simplemente desde que inicio nuestra relación no hablamos, no salimos sólo, muy pocas veces salimos y discutimos la mayoría de las veces, debo de ser honesta que siento las cosas forzadas cuando salgo con él, simplemente no fluyen, y me siento nerviosa de hablar de temas. El conmigo a mis ojos hace ver cómo si fuera un ser muy maduro y estricto y que emite su pensar pero a decir verdad en situaciones difíciles no habla, no externa no dice lo que se opina, y simplemente se encapricha, del aspecto del dinero yo sé que no es por lo interesada porque realmente no es por eso, es porque me estresa que no lucha por lo que quiera y si, también me enseñó a que es bueno darse sus lujos y vivir el ahora pero él se va al completo extremo, tiene 28 años y no tiene nada que ofrecer, sigue viviendo casa de sus papas, y realmente si, el tiempo pasa muy rápido y ahora que sucedió lo de su papá no pienso en alguna otra realidad de la que fue, fue lo que fue, y ya. Sin embargo, lo que importa es lo que se esta haciendo ahorita, lo que se esta haciendo desde que falleció, y lamentablemente es una excusa porque desde antes no hacía nada, y eso simplemente, me asusta que yo tenga que presionarlo para hacer todo que no de la cara que no se mantenga en empleos, simplemente, así como él no fue mi niñero cuando me ponía mal, yo no voy a ser su niñera mucho menos para presionarlo, si quiere vivir conmigo que ponga, nos vamos a mitades, cuanto pones tu, cuando pongo yo. Porque regreso a lo mismo no es cuestión de dinero, es cuestión de actitud es cuestión de su enorme conformismo.
Recuerda todas las veces que se río de ti, pensando que exageras que no son válidos tus sentimientos, que simplemente no vale lo que dices
Recuerda las veces que exploto, las veces que golpeó en la casa, que te aventó que te ahorcó. 
Recuerda todas las veces que simplemente LE VALÍA y se iba cuando tu estabas sola, cuando terminaban, en su casa a mitad de la noche.
Recuerda todas las veces que intentabas hablar con él y simplemente él se desesperaba y no quería hablar más del tema. 
Recuerda todas las veces que te dijo que tenías mierda en la cabeza y que sólo chingaba y chingaba.
Recuerda todas las veces que ignoró que llorabas. 
Recuerda que te dijo que no podías tener hijos de manera natural.
Recuerda cuando te dijo “Quierete un poco”.
Recuerda cuando le pediste dinero que te debía y te lo metió por la boca.
Recuerda tu estrés por que se enoje. 
Recuerda tu incomodidad con él y tus papás. 
Recuerda tu sentimiento de soledad. 
Recuerdas sus pocas ganas de seguir adelante, su flojera. 
Pero sobre todo recuerda lo que tu permitiste, lo que fomentaste, lo que perdonaste, lo que hiciste, lo que dijiste, y lo que no dijiste. Cómo no tener autoestima y ningunearte frente a otra persona, debes de dejarlo de hacer, golpearte por ansiedad, empujar por desesperación, contar tus secretos y tus mayores miedos a una persona que no sabes que te va a decir cuando estés enojada, por no hacerte valer frente a alguien, por rogar, por hincarte, por bailar al son de alguien mas que no aporta ni un peso a lo que se consume en tu casa pero si te dice que quiere comer. Por ponerte en bandeja de plata, por interponer la felicidad de alguien más que la tuya, por destinarle tanto tiempo, dinero a una familia que no es la tuya, por que al final del día ésa familia no es tuya..
0 notes
blossomsmind · 3 years
Text
Querido diario...
Tumblr media
Martes 12 de marzo de 2013:
Hoy Martha, mi terapeuta, me dijo que tenía que llevar un diario para poder expresar mis sentimientos sin la necesidad de hablarlos con otra persona, así que supongo que ésta es mi presentación; querido diario, no creo que esto vaya a funcionar, se lo dije a Martha, sé que esto es simplemente una pérdida de tiempo, pero ella insiste en que me va a ayudar a descubrirme, lo cual no tiene sentido alguno, yo ya me conozco, ¿Cómo no me conocería? soy yo.
Viernes 15 de marzo de 2013:
Querido diario, ¿no te cansa tener la misma rutina todos los días?, porque a mi sí, todos los días es exactamente lo mismo: levantarte, darte una ducha, arreglarte para ir a ese trabajo que tiene años que no disfrutas más, escuchar a tu jefe quejarse por centésima vez de lo mucho que odia tener hijos, regresar cansado y con menos esperanzas de poder hacer algo mejor con tu vida, comer la comida china que está a dos cuadras de tu departamento y que en estos últimos meses es lo más cercano que tienes a una comida casera, dormir menos de cuatro horas diarias debido a que la cantidad de trabajo extra que te ofreciste a hacer para ver si así te daban el aumento que tanto deseabas, pero que al final se lo terminaron dando a Garret, ¡oh! no me hagan empezar con Garret, lleva dos meses trabajando en la compañía y desde que llegó ha sido el centro de atención, todo el mundo lo ama, bueno todo el mundo menos yo. No es que tenga celos, ni nada por el estilo, es que simplemente no entiendo qué le ven, ellos ven a un hombre servicial y muy trabajador, mientras que yo veo a una persona doble cara que se roba el crédito por el trabajo que hace el pasante. Querido diario ¿por qué siempre las personas como Garret son las que les va mejor?
Lunes 18 de marzo de 2013:
Querido diario, creo que la falta de sueño me está empezando a afectar, todo estaba normal hasta que llegué al trabajo, al principio pensé que era una broma de la oficina, pero cuando le pregunté a Sara por qué todos estaban usando orejas de conejo, me vio tan raro, de seguro ahora piensa que soy un lunático. Me di cuenta que no era una broma cuando salí de la oficina a comprar mi café favorito en la cafetería de enfrente, al entrar vi como todas las personas de la fila tenían orejas de conejo, voltee y las personas que estaban ahí sentadas también las tenían, hasta la amable muchacha de la caja, que siempre me cobra menos por mi café, las tenía. Toda la gente que pasaba por la calle tenía unas orejas de conejo,  pero eso no es la parte más loca, al ver mi reflejo en el vidrio yo también tenía unas, querido diario te puedo jurar que al salir por la mañana del departamento no las tenía.
Martes 19 de marzo de 2013:
Querido diario, iba a contarle a Martha lo ocurrido ayer pero me dio miedo que pensara que me estoy volviendo loco, aunque no lo dudaría, cosas extrañas me siguen pasando, cosas que podría jurar que no estaban empezaron a aparecer, por ejemplo, ahora tengo un perro, así como lo lees, me desperté y ahí estaba en mi cama, un pastor alemán dormía con toda tranquilidad, nunca lo había visto antes así que pensé que sería de algún vecino del edificio, pero al acercarme pude notar que en su placa estaba mi nombre y número de teléfono, junto con mi dirección, no voy a mentir cuando digo que me caí del susto, me caí tan fuerte que tire las cosas que estaban en mi mesa de noche y fue justo ahí, cuando una fotografía mía cayó sobre mi cabeza y pude ver que en la foto estaba con el perro en algún tipo de maratón, el problema es que yo no corro y mucho menos tenía un perro hasta el día de hoy.
Miércoles 20 de marzo de 2013:
Querido diario, hoy que desperté el perro ya no estaba, ¿habrá sido un sueño?, pero claro que no fue un sueño, porque lo sentí tan real, lo pude tocar, sentir su suave pelaje y aún puedo recordar su olor, sin duda su shampoo era de coco y vainilla, mi olor favorito. Y el perro me tenía tanto cariño, como si lo hubiera tenido por años, la verdad es que cuando me levante y no lo vi, sentí como que una parte de mí me hiciera falta. Querido diario ¿acaso me estoy volviendo loco?
Domingo 24 de marzo de 2013:
Querido diario, debo confesar que estos últimos días no me he sentido como yo mismo, me siento perdido, como si esta no fuera mi vida. He descubierto que me gustan cosas que antes odiaba, ahora sé hablar italiano, no tengo ni la menor idea de dónde vino esto pero el otro día estaba viendo una película y no me dí cuenta que estaba en italiano, fue hasta que terminó que caí en cuenta que lo había entendido todo, jamás he tomado clases de italiano. Otra cosa extraña es que mi vecina de al lado, Jazmin, no para de insistir que vaya a su casa a tomar té como de costumbre para que hablemos de nuestros gatos, mientras ellos juegan, pero querido diario yo no tomo té y tampoco tengo un gato llamado Rogelio.
Martes 26 de marzo de 2013:
Querido diario, hoy sin duda alguna puedo confirmar que he perdido la cabeza, como todos los martes fui a mi terapia con Martha y al llegar a su edificio ya no estaba, me encontré con una tienda de zapatos y al preguntarle a un trabajador me dijo que ese lugar nunca había sido un edificio y mucho menos una clínica mental y que la única Martha que conocía era su tía segunda. Querido diario ya no sé qué es real y qué no lo es, al llegar a mi casa busqué el nombre de Martha en Google y resulta que es una tenista profesional, no mi terapeuta con la que he ido durante seis años. Todo mi mundo se está poniendo de cabeza, esto no puede estar pasándome en realidad, todo es un sueño, estoy seguro de que solo tengo que irme a dormir, mañana despertaré y todo será como siempre y podré hablar con Martha y ella me ayudará, si, eso es, todo será mejor mañana.
Miércoles 27 de marzo de 2013
Querido diario no era un sueño…
0 notes
lavidadearchie · 6 years
Text
Vol 1. Capítulo 5. ¿Qué pasó con él?
Algo que siempre odié de la ciudad eran los autobuses contaminantes, llenos de gente, mi hermano solía decir que son un unificador social, todas las personas sin importar su clase social lo usan, te vuelve igual, algo así sucede con la muerte, cuando mueres te unificas con el resto, te vuelves igual a los demás, eso si cruzas al otro lado, si te quedas aquí en el limbo… bueno… pues eres diferente, invisible, intangible, sin dolor ni frío pero con un gran vacío, más si moriste joven como yo y mis amigos.
Han pasado cuatro días desde que por mi culpa murieron Sergio, Naomi y Roxana, localizamos a sus familias y pudimos acompañarlos a sus respectivos funerales para despedirse de sus seres queridos y de sí mismos. Fueron en diferentes lugares y días, hoy era turno de Sergio; Chema y Eddy estaban hartos de ir a funerales, pude notarlo en sus expresiones, así que como me sentía responsable, porque de hecho lo era, me ofrecí a acompañar a Sergio a su funeral. Roxana también quizo venir, no tuve inconveniente, después de todo iban en el mismo salón de clases, le vendría bien una cara conocida en esta situación difícil.
Por su lado Eddy y Chema quisieron hacerle el rato ameno a Naomi así que fueron al zoológico, como muertos que somos tenemos entradas gratis a todos lados y Naomi siempre quizo estudiar medicina veterinaria y evidentemente amaba a los animales así que de inmediato adoptó a Gafe como un amigo animal muerto para una chica cariñosa muerta, perfecta combinación.
Sergio murió usando sombrero, playera blanca, un saco casual gris y su mochila, debo confesar que se veía muy atractivo y Roxy, la clásica chica popular, inteligente y fresa, no me caía mal pero no es el tipo de personas con las que sueño hablar. Ella usaba unos jeans, una blusa azul turquesa sin mangas y un suéter negro. Caminábamos hacia una parada de autobús para abordarlo y por un momento ser iguales a los vivos.
-Archie, tengo miedo, no soportaré ver a mi familia sufriendo- dijo Sergio secando sus lágrimas. -No es tan malo como parece, mi funeral fue tranquilizador- dijo Roxy para calmarlo. -El mío también lo fue, tú relájate- respondí. Él sonrió. -¿Por qué estamos aquí Archie? Es decir, los demás que murieron en la explosión cruzaron- se quejó Sergio. -La vida y la muerte son como un sistema, funciona en armonía, pero todo sistema tiene fallas, nosotros somos producto de esas fallas. Se cayó el sistema en nosotros- respondí agobiado- Ustedes tienen suerte, es decir, yo morí sin que nadie me ayudará a entenderlo, sin que nadie me explicara o me acompañara a mi funeral- -Ósea, mátate, eso no me hace sentir mejor- exclamó la “tierna” Roxy. -A mí sí- respondió Sergio- Debió ser angustiante no saber que hacer o a donde ir, estar solo-
Llegamos a la parada, esperamos unos pocos minutos y llegó el autobús, subimos y ahí estábamos, tres fantasmas imperceptibles para los vivos viajando a un cementerio en al sureste de la Ciudad. Veintidós minutos después habíamos llegado al panteón. Era muy frío y triste.
-Amigos, hay algo que no les conté de mi familia, verán, son cristianos y conservadores… Papá tuvo problemas con el alcohol hace un tiempo y temo que haya recaído por mi muerte… lo que intento decir, preferiría ir sólo al velatorio, no me gustaría que conocieran a mi familia en estas condiciones- confesó Sergio. -Adelante, no tengo problema- dije. -Sí, yo me quedaré con Archie, ve- contestó Roxy.
Y así Sergio entró al velatorio mientras Roxy y yo dábamos una vuelta por el frío panteón, la temperatura era baja a pesar de que era medio día.
-Es un tipo extraño ¿no?- dijo Roxy para romper el hielo. -No, me agrada, esta asustado, yo aún estoy asustado- confesé. -¿Qué se siente ser el famoso “Loco de la Avenida Reforma”?- -No empieces con eso- dije mientras reía. -Crea fama y échate a dormir… Algo así me decía mi abuelo- -Lamento mucho que hayas muerto tan joven, eres muy bonita… Eras, es decir sigues siéndolo pero…- -¿Me estás coqueteando? Porque si estuviera viva no funcionaria, pero como estoy muerta… No. Tampoco funcionó, preferiría besar al rarito de Sergio- dijo burlona. -No, yo no te quise coquetear, es que, bueno no solía tener amigos y nunca tuve… ya sabes un noviazgo y…- -Espera un momento- me interrumpió- ¿Estás tratando de decirme que eres virgen?- -Eh, sí, bueno una vez, en los vestidores… está bien morí virgen-
Roxy comenzó a reír como si no hubiera un mañana.
-Que dulce y gracioso- -Niña, tengo 17 años era perfectamente normal ser virgen- -No, yo empecé en la secundaria a los 15, vaya que eras un ñoño, me caes bien- dijo.
Caminamos un largo rato, pasaron al menos dos horas hasta que decidimos sentarnos en frente de un mausoleo.
-Nunca pensé que morir significara deambular eternamente por el mundo- dijo ella viendo las estatuas de ángeles del mausoleo. -Bien, las cosas no siempre son como nos gustaría que fueran. Somos muertos vivos, vivos ya muertos, muertos que viven en la vida o quizás vivos que viven en la muerte- -Que confuso- respondió Roxy -Un amigo escritor me dijo una vez: la muerte siempre te alcanza, no hay forma de ganarle- -Eso lo han dicho muchas personas tontuelo- -Hay que estar medio muertos para disfrazarnos ante ella… Si le pierdes el miedo a la muerte no te lleva, a esos se los lleva alguien más, pero si estás medio viva la muerte te deja y si te deja nadie más vendrá por ti. La muerte no es mediocre ¿sabes? No se lleva vidas a medias, a esos los deja desamparados, ella sólo se lleva a los vivos enteros para presumirlos como trofeos- -Ya te entiendo, estamos vivos a medias- -Exacto, por eso la muerte no nos asecha, huye de nosotros- -¿Siempre estaremos medio muertos?- dijo ella mirándome a los ojos. -No lo sé, Chema y Eddy tampoco lo saben. Lo que nos pasó te pasó a ti también-
Ella me miró profundamente a los ojos.
-Archie…- Susurró y luego me besó. No supe que hacer, pero pude sentir su energía, pude sentir vida fluyendo a través de mí.
-¿Interrumpo algo?- dijo Sergio que se había aparecido enfrente de nosotros. -No, nada- dije mientras apartaba a Roxy de mí. -Perdón, nos dejamos llevar, fue emocionante ¿no es cierto Archie?- -Ahh, bueno… Fue mi primer beso post-mortem- dije confundido- ¿Qué pasó, todo bien?- -No, nada está bien, estoy muerto, se supondría que iría a la universidad, que tendría una familia y que envejecería… mis padres están deshechos, quiero ir a casa con ellos- -No te lo recomiendo- le dije- Yo… bueno, duele menos si no los ves sufrir- -¿En serio?- dijo él. -No estoy seguro- respondí. -Bueno, no sé ustedes pero me gustaría alejarme de éste lugar tan deprimente- dijo Roxy. -Nuestra casa es otro panteón, donde está enterrado Archie y sus amigos ¿Qué más da?- replicó Sergio enojado. -No, conozco un lugar donde pasar la noche- dije.
Después de abordar el transporte público llegamos a la Catedral de la Ciudad de México, la que está a un costado del zócalo.
-Archie, no soy religioso como mis padres pero ¿vamos a pasar la noche aquí?- preguntó Sergio. -En el techo en realidad, hay una vista asombrosa-
Atravesamos la puerta y subimos las escaleras del campanario, eran las siete de la tarde y ya estaba obscuro. La iglesia puede ser un lugar aterrador. Finalmente subimos al campanario y llegamos al techo de la catedral.
-Solía venir a los recorridos guiados por el campanario- dije explicando como había encontrado ese lugar. -Es hermoso, pero ¿y los demás?- preguntó Roxy -Estarán bien sin nosotros- respondió Sergio, tenía razón.
Esa noche hablamos, bailamos, reímos y también lloramos, fue como si nos hubiéramos puesto borrachos pero sin beber alcohol, dijimos como nos sentíamos ahora que estábamos muertos y las cosas que hubiéramos hecho para que no ocurriera. La vida no es justa, la muerte tampoco lo es, a decir verdad ni siquiera debería existir la palabra justicia, es una utopía creer en la justicia, éramos unos adolescentes, nos merecemos una explicación, no una eternidad fastidiada llena de incertidumbre y vacío.
A la mañana siguiente regresamos a nuestro hogar, el cementerio y ahí estaban Naomi, Eddy y Chema, éste último corrió hacia mí y me abrazó en forma de saludo.
-¿Dónde estuvieron? Me preocupé- dijo Eddy mientras nos saludaba. -No queríamos pasar la noche en el cementerio- intervino Roxy. -De hecho es lo que queríamos decirles- dijo Chema- Ya no tenemos que vivir en el cementerio, creemos que es hora de un cambio- -¿En serio?- pregunté. -Sí- dijo Naomi- Mis padres tienen un departamento vacío en el sur de la ciudad, nunca lo ocupan, está literalmente vacío pero no es un triste cementerio- -Vaya, me encanta la idea- exclamó Roxy muy emocionada. -Pues vámonos de una vez- dijo Chema con alegría. -¿Dónde está Gafe?- pregunté. -Descuida ya está en el departamento, le gustó mucho el lugar- dijo Naomi. -Vaya gracias Nao- dije.
Nos pusimos en marcha al lugar, todos estaban muy tranquilos e incluso emocionados por la mudanza, todos excepto Eddy.
-¿Qué ocurre Eddy?- le pregunté. -No te asustes, no lo debe saber nadie, pero Andrés nos está siguiendo- -¿El asesino, quien se convirtió en insecto de la muerte?- pregunté. -Sí, ese, está detrás de nosotros, vamos, has algo bueno y desaste de él- me dijo, yo acepté.
Me aparté un poco del grupo y lo vi, estaba unos metros tras de nosotros, volaba en círculos, le ordené que se fuera, incluso le grité pero sólo lograba ahuyentarlo un rato, volvía después de unos minutos.
Finalmente llegamos al lugar. Era un edificio de ocho pisos, nuestra nueva casa estaba en el segundo. El departamento no era demasiado grande pero parecía acogedor e iluminado, después de todo no necesitamos el baño, ni la cocina, más bien queríamos la sensación de tener una casa y no “vivir” en la calle. Cuando entré mi gato estaba allí.
-¡Gafe! Te extrañé loco- -Ahora tu casa tiene fantasmas- le dijo Chema a Naomi y todos reímos.
El día llegaba a su fin, Naomi, Sergio y Roxana estaban caminado por un parque cercano al edificio, Chema, Eddy, Gafe y yo decidimos subir al roof garden para ver el atardecer.
-Si he de vivir muerto una eternidad no tendría mejor compañía que ustedes- dijo Chema. -Yo me alegro de no estar sólo y tenerlos a ustedes, muchas gracias por recibirme a mí y a ellos- dije. -Oye, nada de sentimentalismos esta noche que estamos celebrando- dijo Eddy.
De pronto llegó Andrés, volaba en nuestras cabezas y comencé a gritar.
-Largo maldito asesino, vete de aquí, no molestes más- -Archie creo que…- interrumpió Eddy. -¿Sabes qué? Baja y yo mismo te aplastaré- le gritaba. -¡Archie cállate!- dijo Eddy- ¿No lo ves?-
Andrés voló sobre Chema y se posó en su mano.
-¿Eddy?- dijo Chema nervioso. -Tranquilo Chema, un insecto es una invitación, puedes cruzar- dijo Eddy con lágrimas en los ojos. -¿Qué, pero por qué yo?- preguntó Chema. -Tú moriste primero, es tu turno, es hora de un cambio- respondió Eddy. -Pero sólo hay uno, no me iré sin ustedes- -No dejes ir esta oportunidad, podrás estar con el abuelo, la abuela, tu amigo Tony el vecino y mamá y papá- le dijo Eddy mientras lo abrazaba. -¿Pero tú y la tía Ursula y Archie y Gafe y Naomi y los demás? Yo los quiero, no me quiero ir Eddy- dijo llorando. -Yo me quedaré y cuidaré de ellos, date prisa-
El insecto se metió en la mano de Chema y una luz iluminó el cielo. Yo me quede sin palabras por un momento, cuando comprendí que Chema se iba para siempre lo abracé muy fuerte y le dije que lo quería.
-Fuiste como mi hermano menor campeón, te quiero- le dije. -Yo a ti- me dijo mientras se disolvía.
Eddy y yo nos quedamos en el techo del edificio hasta que se perdió en el cielo del atardecer. Luego nos abrazamos y lloramos de alegría, Chema había logrado cruzar.
-¿A dónde fue?- -No lo sé- respondió.
Pasaron un par de horas y bajamos al nuevo departamento, todos nos preguntaron por Chema y les contamos, parecía que había esperanza en su mirada, esperanza del descanso o de cruzar o avanzar ¿pero a dónde? En la madrugada salí del edificio para estar sólo, me senté en las escaleras a ver el cielo junto a Gafe. Una estrella fugaz pasó.
-Un mal rato ¿eh?- dijo Sergio que estaba tras de mí. -Es sólo que no dejo de perder a las personas que me importan- dije con lágrimas en los ojos. -Tú me importas ahora, eres parte de mi familia- dijo mientras se sentaba junto a mi- y también te debe importar Eddy, Naomi y es evidente que te importa Roxana- -Ella me besó, en realidad no me gusta- dije entre suspiros. -¿En serio?- -Sí en serio, en realidad nunca me gustaron las mujeres, pero no importa somos fantasmas ahora- -¿Los fantasmas se enamoran?- preguntó. -No lo…- respondí hasta que me besó, fue una sensación gratificante, tampoco supe que hacer, pero pude sentir su energía y vida fluyendo a través de nosotros como latidos de corazón, latidos de vida, fue armónico y me sentí seguro. -¿Que fue eso?- pregunté sonriente- ¿Por eso te enojaste cuando me encontraste con Roxana?- -¿Te diste cuenta? Rayos, perdón, esto fue una mala idea- dijo. -No lo creo- respondí y lo volví a besar.
La muerte es impredecible incluso te sorprende cuando ya estás muerto, pero hay algo que no muere: el amor, y no me refiero a un noviazgo sino al amor que dejas sembrado en las almas de los demás. Todavía en las noches recuerdo a Chema y cuando él está de buen humor manda una estrella fugaz como para decirme: ¡Hey! Estoy bien, deja de preocuparte. Pero sigo preguntándome casi todas las noches: ¿Qué pasó con él?
2 notes · View notes
laliofficial · 3 years
Text
Lali saca sorpresivamente su cuarto disco, Libra: "Hay que hacer un trabajo fino para no repetirse"
"Desde los madriles". Lali es pura sonrisa. Y nervios. Y ansiedad. Y muchas ganas de hablar de lo que mantuvo guardado bajo siete llaves: Libra, su cuarto álbum que está viendo la luz este jueves por la noche y que la encuentra firme y segura sobre los pilares de la música que ella describe como pop urbano.
"Ladrón", su feat. con Cazzu es la canción que su discográfica -Sony- elige para golpear fuerte y a la mandíbula. Un video clip con estética "black & white" las reúne edición mediante, no solo porque la canción fue registrada a la distancia sino también por cómo debió filmarse el video, con Lali en su debut como directora desde Madrid y Cazzu haciendo su parte desde Buenos Aires.
"Ya te voy a encontrar pa' meterte preso", canta una Lali intimidante que juega "a ser una diva de las de antes". Desde la apuesta sonora, cubierta por el trap en algunos pasajes y por el reggaetón en buena parte del álbum, queda en claro que con este, su cuarto disco, va de lleno a meterse en la elite de la música latina.
En la nueva era del single ya conocimos cuatro de las canciones que integran el disco: "LALIGERA", "Lo que tengo yo", "Fascinada" y "Como así", con CNCO. Ahora se suman el corte y videoclip que acaban de estrenarse, "Ladrón" y tres colaboraciones más: "No puedo olvidarte", con Mau y Ricky, "Pa que me quieras", con Noriel y la sorpresa que cierra el disco: "Una esquina en Madrid", que Lali compuso con Fito Páez.
Platinada, con el look de la serie de Netflix que está filmando en Madrid, Sky rojo, vía zoom Lali -así, a secas en el mundo de la música- habla de "la línea de pensamiento" de esta nueva etapa. "Me di cuenta que reinventarse es una tarea muy difícil y que a veces se subestima el término. Cada vez admiro más a los artistas que se reinventan de un disco a otro y un poco me puse a prueba para lograrlo".
¿Por qué Libra? Porque es su signo, claro, pero también por otras razones. "Por la búsqueda del equilibrio, de la balanza. Tiene que ver con que fueron dos años de trabajar canciones en los que busqué precisamente el equilibrio. Las comparaciones suelen ser mala onda, para mí. Es raro comparar y compararse con un buen momento que tuviste y querer replicarlo. No solo es tonto sino que no es real. Pero sí tenés que hacer un trabajo fino para no repetirte. No es comparar con lo que hiciste antes sino ir hacia lo que vos consideres evolución, y todo este pensamiento le dio el sentido al cuarto disco: hacerme cargo que hago un estilo musical que es el pop urbano, pero tratando de que suene personal, que cuando vos escuches una canción del disco la sientas Lali. Esto que dicho parece fácil, en realidad es una búsqueda ardua.
Tumblr media
En el comienzo Lali es trap. "Traigo todo lo que trae la noche, yo soy cara, soy tu derroche", canta desafiante en "Eclipse". El amor cruza todo el disco. A veces es correspondido, a veces es sólo pulsión sexual, a veces es un arma que puede ser letal, pero siempre es un imán para entrar y salir del juego que propone Libra. Las letras son largas, como las respuestas de su protagonista. "Hay mucha letra. Es algo que a veces se critica pero yo soy pro letra y eso es porque hablo mucho. Soy de charlar mucho y en las canciones me pasa lo mismo. Es verdad que a veces las canciones necesitan respirar un poco. "Eclipse" es una canción que surgió en Miami, donde trabajé gran parte de este disco con Rafa Arcaute, el productor del álbum, no solo el productor general sino el productor de esta canción junto a Julio Reyes, que es un compositor que trabajó con Alejandro Sanz y Shakira, pero que también puede hacer estos universos más hiphoperos, bases más traperas que son una novedad para mí. Ésta y "LALIGERA" te llevan a un sonido diferente de lo que yo hacía. Y a nivel letra y melodía es donde yo más aprieto. "Eclipse" me parece súper pop: el arreglo vocal, la melodía, el estribillo, los versos, una intención muy femenina y una base muy violenta y más trapera que lo que suelo hacer. Esa fusión define lo que pasa en el disco en general.
-Hablando de trap, en "Ladrón" cantás con Cazzu y además hacés tu debut como directora en el videoclip.
-Pesada como soy siempre participé de los procesos creativos y me metí tímidamente en la dirección, pero lo que me pasó esta vez es que como soy la que lleva la idea de lo que quiero rodar, mi equipo me incentivó: "estás presentando la idea, la tenés clara, lo querés hacer en blanco y negro, dirigilo vos". Y lo hice. Yo soy respetuosa de estos lugares de tanto talento y creatividad, donde hay gente que se dedica a hacer esto muy bien. Yo no me pongo en ese rol sino en estar delante de cámara, pero esta vez tomé el desafío. Particularmente esta idea la tenía muy en la cabeza. Quería jugar con el imaginario de las divas de antes y qué es ser una diva hoy. Para mí Cazzu es una diva y yo cuando estoy haciendo mi movida musical me siento una diva. A nivel visual, con la ropa, juego a ser una diva pop. Es un lugar que me gusta, me divierte. La estética black & white no está muy usada en el género urbano. Cazzu se ve distinta, yo me veo distinta y a la vez somos nosotras al cien por ciento.
-¿Cómo fue ese rodaje a la distancia, con Cazzu en Buenos Aires y vos en Madrid?
-Yo estaba con un rodaje nocturno de la serie en España. Acá eran las 3 de la mañana y Cazzu estaba rodando en Argentina. Tenía conexión directa y en un monitor veía lo que se iba haciendo en Buenos Aires. Iba hablando con Cazzu, preguntándole cómo se sentía. Una genia total que se prestó. Le encantó la canción. Hay algo similar en nuestra forma de ser. Tenemos una cosa imborrable: el barrio. Dos pibas de barrio que nos hemos ganado el lugar que tenemos desde un espacio genuino, una búsqueda sincera de lo que somos y lo que queremos hacer.
-En este disco usás el lenguaje caribeño propio de la música urbana. Dos de las canciones se llaman "Bailo pa mi" y "Pa que me quieras", además de las expresiones que incluís en las letras. ¿A qué se debe?
-Hay algo que me pasa naturalmente y debo confesar que como argentina le tenía miedo en los discos anteriores, o por lo menos no me hallaba en ese mood de cambiar modismos, pero es verdad que te pasa cuando empezás a fusionarte mucho con otros artistas y productores. Este es el primer disco que trabajo casi canción por canción con productores distintos. Fui estudio por estudio entre Los Ángeles, Madrid, Miami, Buenos Aires. Gente de México y de Colombia se sumó a la producción y, de repente, abrís el abanico de modismos, formas. Para mí fue muy enriquecedor dejar de tenerle miedo a eso y abrirme a un público más grande que es el de Latinoamérica. Si bien somos todos hermanos y parte de lo mismo, fusionar mi manera con la de otro, si queda cómoda y no suena forzada tiene sentido y fue un lindo proceso abrazar esas ideas: "Bailo pa mi", "Pa que me quieras", son frases que incorporé muy naturalmente trabajando en estudios con colegas de otros lados. Fue un disco que me abrió mucho la cabeza y en la manera de escribir ni hablar. Naturalmente no me sale a mí decir "pa que me quieras", pero al jugar con lo melódico encontrás que estas cosas están buenas.
Tumblr media
-Recién contabas que en un descanso del rodaje de Sky rojo seguías con atención la filmación del video de "Ladrón" en Buenos Aires. ¿Qué dicen tus compañeros?
-No lo pueden creer. Todos hacemos muchas cosas pero principalmente son actores y su actividad es interpretar. Me ven a mí mientras esperamos que acomoden una luz con el teléfono arreglando una movida de la música, escuchando un track que me mandan y me dicen: "Tía te juro no puedo creer que te da la energía pa todo". Y la verdad es que cuando te apasiona algo le ponés el tiempo que no tenés. Me gustaría que se note que no me da lo mismo, me gusta que esté bueno, que represente y cuente algo lo que hago. No saco un cuarto disco porque tengo que hacerlo, sino porque me apasiona. Me interesa seguir entregando material nuevo, porque soy culo inquieto, como diríamos en Argentina. Me gusta mucho, mi trabajo es una bendición. De muy pequeña mi padre me dijo que la mayoría de la gente trabaja de lo que puede.
-Hace un tiempo dijiste que querías dedicarte toda la vida a esto en referencia a la música, pero está claro que la actuación va a seguir de manera paralela, ¿no?
-Naturalmente mi camino con la actuación siempre fue muy genuino. Siempre tenía la suerte que me llegaba un guion, una propuesta para actuar, pero si no lo sentía, si no era algo que me dejara un aprendizaje podía pasar de esa oportunidad y abrazar mi otra actividad, que es la música. La música te lleva mucho tiempo. Justo con esta serie estoy desde hace un año, pero normalmente con una ficción o una peli podés estar un par de meses. La música, en cambio es todos los días. Mi elección siempre fue abrazar más la música que la actuación, pero cuando apareció esta oportunidad de hacer Sky rojo, una propuesta tan grande de Netflix España, con un nivel de producción increíble y con Vancouver, la productora de La casa de papel -con todo lo que representa la serie a nivel mundial y ni hablar en Iberoamérica-, lo tomé como una gran oportunidad. Es la posibilidad de hacer un personaje principal acá en España, con actores que admiro, con la experiencia de rodar como lo hacen acá, que no tienen nada que envidiarle a las mejores producciones del mundo... imaginate que estoy abrazando las dos actividades mucho y me siento afortunada.
-¿Cómo es trabajar con Alex Pina?
-Es abrumador ver lo claro que tiene todo. Imagino yo que cuando uno hace un éxito mundial tan grande, después hacer otro tan seguido debe ser... supongo que se te llena el culo de preguntas. Pero esta gente va a tope, como dicen acá en España. El nivel de perfeccionismo de Alex y su equipo es tremendo. Hacemos secuencias que son de un nivel de producción enorme. Es una serie muy comprometida, tiene mucha acción. Los personajes están muy vívidos, son muy fuertes. Requiere de mucha energía, pero si Alex Pina siente que la secuencia no está lograda se hace de vuelta todo y eso no es solo una cuestión de que Netflix apuesta a vos y te da el dinero, sino que tiene que ver con una cuestión artística de mucha convicción sobre lo que querés hacer. Estoy aprendiendo mucho de cómo trabajan acá, de cómo trabaja Alex Pina. En todas sus series nunca fue por lo obvio y creo que lo mismo va a pasar con Sky rojo. Con sus series logra una cosa icónica.
-¿Ya viste algo de la serie?
-No vi todo el resultado pero lo que pude ver no se parece a ninguna serie, y tiene mucha personalidad lograr algo así. Es el objetivo principal de cualquier creador pero no todo el mundo lo logra. Alex y Vancouver tienen eso y Netflix está encantado según nos cuentan. Va a ser un lanzamiento mundial. Imaginate lo que significa. Esta oportunidad es enorme para mí. Estoy muy agradecida.
-Es un rol y una temática que no habías abordado antes.
-Tal cual. Son tres chicas víctimas de trata que se escapan de su proxeneta. Es una serie que se mete en un universo en el que no se mete todo el mundo, menos el mundo del mainstream. Es una serie, no es un documental sobre la trata de mujeres, pero sí habla sobre eso. Tiene acción, entretenimiento a full; pasa todo lo que tiene que pasar para que te enganches y sea una gran ficción, pero estamos hablando de algo real que se suele acallar y que pocos se quieren embarrar las patas para hablar de este tema. La trata no es solo lo que pasa dentro de un club nocturno. Cuando vamos por la calle vemos todo el tiempo carteles de lugares clandestinos y nadie hace mucho al respecto. Hay gente que de pronto no vuelve a su casa, queda encerrada, le roban el pasaporte. Chicas que van engañadas creyendo que van a tener un trabajo... Hay mil historias y algo interesante de la serie es que no quieren imponer una visión. Tiene todas las aristas abiertas: el pensamiento de un proxeneta, de una persona que llegó engañada, de una persona que sí va a trabajar de la prostitución pero se encuentra con su no libertad. Nuestros personajes sufren diferentes cosas a medida que avanza la serie. Es muy interesante, a la gente le va a impactar.
La canción que cierra Libra es una suerte de bonus, un regalo que no está lejos de la idea sonora y de producción del álbum. "Una esquina en Madrid" se llama y tiene la particularidad de estar coescrita con otro argentino que supo vivir el día y las largas noches de la capital española: Fito Páez. "Fue una maravilla, qué te voy a decir. Yo estaba acá en el departamento, en Madrid, un poco nostálgica, empezando el año en el que iba a cumplir 29, rozando los 30. Es un momento maravilloso de la vida, pero fuerte para alguien que trabaja desde los 10 años. ¡Puta! Mirá todo el agua que pasó bajo el puente. De una manera muy natural me puse a escribir la canción en un balconcito que tengo, literalmente en una esquina de Madrid y al día siguiente, con la relación que había generado con Fito cuando me invitó a cantar en su concierto y a grabar en su disco, le escribí. Ya veníamos teniendo conversaciones sobre mi proceso creativo, le había mandado las canciones, él las había escuchado y comentado. Tener a alguien tan maravilloso como Fito cerca te nutre por todos lados, es un regalo. Le mandé esta letra muy tímidamente y al día siguiente él me respondió con un video sentado al piano y buscando la melodía. Me puse a llorar instantáneamente. "Yo te lo hago, me encanta lo que escribiste", me decía bien a su estilo. Enseguida empezamos a trabajar con Diego Olivero, su productor. Le puse la voz en un estudio de Madrid y trabajamos a distancia y así quedó esta canción que para mí es la frutilla del postre, por eso es la que cierre Libra. No solo porque para mí es ultra especial sino también porque a nivel sonoro esta canción te coloca en otro lado. Es un gran cierre y un privilegio tenerlo a Fito.
Tumblr media
-Suena a himno de los 80...
-Esas fueron las palabras de Fito. "Este tiene que ser tu himno", me dijo y desde ese lugar se la produjo. Todo el proceso fue increíble, las charlas con él, entender cómo él ve la música, aprender de lo que me decía con respecto a mi música, a mi manera de escribir, a mi manera de hacer lo que hago. Y cada vez que escucho la canción me pasa algo muy fuerte.
-De Europa llegan a diario las noticias de la segunda ola de la pandemia. ¿Cómo lo estás llevando?
-Esto no lo conté nunca hasta ahora, tampoco me pareció con toda la información que hay. Yo he pasado el Covid estando acá en España. No me puedo ni quejar, hay gente que pierde la vida y otra que la pasa muy mal. Yo tenía los síntomas obvios que nos dicen que podemos tener. Fueron dos semanas en las que se paró el rodaje. Obviamente tenían que testear a todos mis compañeros. Yo tuve un seguimiento médico hasta que di negativo y pude volver al rodaje, así que puedo con muchas comillas, porque hay gente que se le está yendo la vida, decir que lo he pasado y que eso también me colocó en un lugar de mucha conciencia. Parece una obviedad pero no: todavía nos cuesta hacernos cargo que esta locura nos está abordando y nos vino a cachetear a todos por igual, porque no discrimina. Sí nos coloca en un lugar de ser conscientes de que por más que yo tenga la suerte de tener un servicio médico y pasarla lo menos mal que la pude pasar, si los hospitales se quedan sin espacio un médico tiene que decidir a quien atender, y eso sería un drama social, un horror, porque estamos hablando de quién tiene más valor que quien, mas influencia que quien. Eso sería otro drama por encima de este drama que es el virus. Lo hablo con mis amigos jóvenes, todos extrañamos la joda, vernos. Yo tengo un sobrino de cinco meses que no conozco y hay gente que lo vive dramáticamente. Yo lo vivo con mucho respeto, cuidándome, intentando hacer lo que nos cuentan que hay que hacer, porque a la vez estamos todos aprendiendo. Y ahora en España, particularmente, parece que estamos en marzo de vuelta.
Tumblr media
-¿Cómo se vive eso?
-Con mucha frustración. La sensación de bajón es incareteable. Se siente en la calle, en los trabajos, entre amigos. Hay una energía muy dark. Tengo la suerte de dedicarme al arte y que eso me distraiga mucho y encima tengo la suerte a diferencia de un montón de colegas míos de seguir trabajando. El rodaje sigue con todos los cuidados y protocolos a rajatabla. Tenemos que estar muy agradecidos porque el mundo está parado. Actores, músicos, todo mi equipo de trabajo en la Argentina, mis hermanos tampoco están laburando. Intento ayudar lo más que puedo a los míos, a los que tengo cerca. Es una cuestión social, de ser consciente que no me puede chupar un huevo lo que está pasando. Cuesta darse cuenta que es real, parece una película de los gringos del fin del mundo. Pero no es el fin del mundo. Hay que ir hacia adelante y tratar de que el cachetazo duela lo menos posible. No nos queda otra, no es muy discutible.
Antes del cierre hay tiempo para algo más, parea indagar en su vida sentimental y en el anuncio tiempo atrás de su ruptura con Santiago Mocorrea. "Es un lugar rarísimo poner un tuit para aclarar. Creo tener una intimidad y una vida en casa cuidada y es mía, no la vendo, no la regalo y es mía. Es raro informar algo tan personal, pero dadas las circunstancias que sabemos cómo funcionan estas noticias, no quería por respeto a los cuatro años de relación con Santi, que entre nosotros está todo más que bien y hay muchísimo amor, que se escribiera cualquier cosa. Quería informarlo e intenté que fuera lo más genuino posible. Era algo que veníamos macerando desde hace tiempo por razón obvia. Mi trabajo en España se extendió por el Covid, a la serie le falta mucho para terminar porque estamos rodando dos temporadas juntas y la lógica de nuestra dinámicas nos ha llevado a esta decisión. Él trabaja mucho y yo también. Es una decisión tomada con amor, aunque parezca una locura. Terminamos muy bien y estamos súper conectados".
https://www.lanacion.com.ar/espectaculos/musica/lali-nid2506587?utm_source=dlvr.it&utm_medium=twitter
0 notes