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prozesa · 3 months

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🔴 Viaje a Marte [ 🎬 DOCUMENTAL ]

Viaje a Marte. ¡Hola a todos! Hoy, nos embarcamos en una emocionante aventura hacia el cautivador reino de Marte. Antes de aventurarnos en la vastedad del espacio, sumerjámonos en la rica tapicería cultural tejida en torno a este fantástico planeta. Marte, con su tono rojizo, ha sido durante mucho tiempo una musa para narradores, artistas y soñadores. En antiguas mitologías, a menudo se asociaba con la guerra y fue nombrado en honor al dios de la guerra. Este enigmático planeta rojo ha encendido la imaginación de escritores que han imaginado épicas historias ambientadas en sus paisajes oxidados e inspirado a músicos que han compuesto sinfonías que resuenan con el espíritu de exploración. En la era moderna, se ha convertido en un icono del ingenio humano y un punto focal para la exploración científica. A pesar de sus duras condiciones, nuestra fascinación nos ha impulsado a emprender numerosas misiones con el objetivo de desvelar sus secretos. En este video, reflexionaremos no solo sobre los desafíos que nos esperan, sino también sobre las posibilidades que Marte alberga para el futuro de la humanidad. ¡Comencemos! El documental: https://youtu.be/2qb9MermF9Q Viaje a Marte: Conoce tu destino: Antes de embarcarnos en nuestro viaje cósmico, familiaricémonos con nuestro destino. Marte es el mundo vecino de la Tierra y un objetivo tentador para la exploración humana. Es el cuarto planeta desde el Sol, y estoy seguro de que todos nosotros hemos soñado con ir allí, al menos una vez en nuestra vida. Pero ¿qué distingue a Marte de nuestro propio planeta azul? Bueno, en primer lugar, Marte tiene una atmósfera muy fina, unas 100 veces menos densa que la de la Tierra. Esto significa que estar parado en la superficie marciana se sentiría como estar en la cima de una montaña muy alta en la Tierra. Pero los desafíos no terminan ahí. Con solo alrededor del 38% de la gravedad de la Tierra, un paseo por Marte sería una experiencia notablemente más ligera. Ahora, ¿por qué importa esto para la posible habitabilidad humana? Imagine el impacto en el cuerpo humano: músculos que se adaptan a la gravedad más baja, posibles cambios en la densidad ósea y el ajuste general a un entorno gravitacional diferente. Curiosamente, tenemos algo para combatir la baja gravedad. Los astronautas podrían participar en rutinas de ejercicio más rigurosas y específicas para combatir la pérdida de masa muscular y densidad ósea. Esto podría incluir entrenamiento de resistencia especializado, pesas y ejercicios cardiovasculares para mantener la salud general y la fuerza física. Otra solución podría ser crear gravedad artificial en hábitats marcianos. En la Tierra, se han establecido experimentos para replicar las condiciones gravitacionales experimentadas en Marte. Uno de estos experimentos es el Simulador de Gravedad de Marte, que se parece mucho a los simuladores de gravedad lunar utilizados durante la era Apolo pero está diseñado específicamente para las condiciones marcianas. Este simulador permite a los investigadores evaluar la capacidad de maniobra de los astronautas en una gravedad que es aproximadamente el 40% de la gravedad de la Tierra. Además, ayuda a estudiar los cambios en los patrones de marcha para estas condiciones. Al probar varios estilos de locomoción basados en las imágenes de las filmaciones del alunizaje del Apolo, los científicos determinaron el patrón de marcha más efectivo para el movimiento bípedo humano en la gravedad marciana. A medida que aspiramos a establecer Marte como un posible segundo hogar, comprender desafíos como estos se vuelve esencial. Sin embargo, no hay necesidad de preocuparse, ya que la humanidad no está adentrándose en estos territorios inexplorados sin guía. Al igual que en la exploración de Venus, los astrofísicos actúan como nuestros detectives cósmicos, empleando herramientas y naves espaciales avanzadas para desentrañar los misterios del Planeta Rojo. Misiones como el Rover Perseverance en curso y la próxima misión Mars Sample Return están a la vanguardia de la exploración marciana. Perseverance se desplaza diligentemente por la superficie marciana, buscando signos de vida antigua y recolectando muestras que algún día podrían regresar a la Tierra. En el futuro, el programa Artemis tiene como objetivo devolver a los humanos a la Luna, actuando como una piedra angular para futuras misiones tripuladas a Marte. Estos esfuerzos, junto con el conocimiento adquirido de los exploradores robóticos, allanan el camino para el objetivo final: la colonización humana de Marte. Una declaración notable proviene de Elon Musk, fundador de SpaceX, quien ve a Marte como una posible copia de seguridad para la humanidad. Dijo: "Creo que hay un fuerte argumento humanista para hacer que la vida sea multiplanetaria para salvaguardar la existencia de la humanidad en caso de que ocurriera algo catastrófico". Si bien estas misiones brindan información valiosa, el viaje no termina ahí. La búsqueda de conocimiento continúa con misiones planificadas como Starship de SpaceX, que se concibe para transportar humanos a la superficie marciana. Con cada misión, nos acercamos más a desentrañar los misterios de Marte y comprender los desafíos y posibilidades que nos esperan. Razones para ir a Marte: Tal vez te preguntes qué podría motivar a la humanidad a aventurarse hacia los desafíos de Marte, un mundo que parece inhóspito para nuestra existencia. Sin embargo, ocultos dentro de los misterios marcianos se encuentran razones convincentes que hacen de esta frontera roja una perspectiva tentadora para futuras exploraciones y asentamientos. Marte es como una cápsula de tiempo cósmica, conservando los secretos de la formación de nuestro sistema solar. Adentrarse en sus capas geológicas podría desentrañar historias de climas antiguos y las fuerzas que dieron forma no solo al Planeta Rojo, sino también ofrecernos información sobre el drama cósmico más amplio que se desarrolló hace eones. Más allá de las páginas de la historia planetaria, Marte plantea desafíos únicos que, una vez superados, podrían redefinir nuestras capacidades en el espacio. La tenue atmósfera marciana, aunque es una barrera para la habitabilidad humana convencional, proporciona un campo de pruebas para tecnologías cruciales para viajes espaciales sostenibles. Las innovaciones desarrolladas aquí podrían revolucionar nuestro enfoque para vivir y prosperar en el vacío del espacio, extendiendo nuestro alcance a otros cuerpos celestes. Crucialmente, Marte es un punto focal en nuestra búsqueda de vida más allá de la Tierra. Misiones recientes como el rover Perseverance están equipadas con instrumentos de última generación para detectar signos de vida microbiana antigua en la superficie del planeta. El potencial descubrimiento de vida extraterrestre, incluso en sus formas más simples, remodelaría nuestra comprensión de los orígenes de la vida en el universo. Por otra parte, Marte alberga la promesa de recursos inexplorados. El suelo marciano contiene elementos esenciales, como el nitrógeno, vital para el apoyo a la vida. Los recursos hídricos en Marte, ricos en deuterio, ofrecen no solo un potencial combustible para futuras misiones, sino también un activo crucial para la sostenibilidad de colonias humanas, mientras que el regolito, o suelo, podría utilizarse como material crudo para la construcción. Tecnologías como la impresión 3D podrían utilizarlo para crear estructuras, hábitats e incluso herramientas, reduciendo la necesidad de transportar materiales de construcción desde la Tierra. Y por supuesto, no olvidemos a nuestra estrella, el Sol. Si bien la luz solar es menos intensa en Marte debido a su mayor distancia del Sol, sigue siendo una fuente de energía viable y sostenible. Desafíos del viaje: Ahora que estamos fijando nuestra mirada en Marte, exploremos la audaz travesía que nos espera. En primer lugar, consideremos la nave espacial. Navegar hacia Marte exige una nave capaz de soportar las inclemencias del espacio profundo, la radiación cósmica y la prolongada duración del viaje. Los ingenieros trabajan sin descanso en el diseño de naves que puedan resistir el vacío del espacio, brindando un refugio seguro para la tripulación valerosa ante la vasta extensión cósmica. Una de estas naves ya se encuentra en construcción: Starship de SpaceX. Este es un barco diseñado con el objetivo específico de permitir la exploración y colonización humana de Marte. Anteriormente conocido como el BFR (Big Falcon Rocket), Starship es un componente crucial del Sistema de Transporte Interplanetario de SpaceX. El sistema se concibe como un sistema completamente integrado de nave espacial y cohete capaz de transportar a un gran número de pasajeros y carga a destinos más allá de la Tierra, incluido Marte. Una de las características clave de Starship es su capacidad de reutilización. Tanto las etapas primera y segunda del cohete están destinadas a ser completamente reutilizables, lo que reduce significativamente el costo de los viajes espaciales. Esta reutilización se espera que haga que las misiones a Marte frecuentes y rentables sean más factibles. Pero esto no es todo el cuento. La arquitectura de Starship incorpora el reabastecimiento en órbita. Esto significa que se pueden lanzar múltiples Starships a órbita, y sus tanques pueden ser reabastecidos en el espacio antes del último impulso hacia Marte. Esta capacidad extiende el alcance y la capacidad de carga de la nave espacial. Starship está destinado a ser lanzado sobre el propulsor Super Heavy, que también es reutilizable. El Super Heavy proporciona el impulso inicial necesario para propulsar Starship a la órbita, después de lo cual regresa a la Tierra para su reutilización. El 18 de noviembre de 2023, el cohete bifase despegó del sitio de lanzamiento de Starbase de SpaceX cerca de Boca Chica, Texas. Ascendiendo aproximadamente a 90 kilómetros sobre la superficie de la Tierra, el vuelo planeado de 90 minutos tiene como objetivo la exploración espacial. Sin embargo, el propulsor Super Heavy de primera etapa, crucial para la misión, ejecutó una maniobra de separación clave de su etapa central pero, lamentablemente, explotó sobre el Golfo de México poco después del desprendimiento. Simultáneamente, el propulsor principal de Starship continuó su viaje al espacio. Aproximadamente 10 minutos después del despegue, el control de la misión de SpaceX informó una pérdida de contacto inesperada con la nave. A pesar de este revés, se ha logrado un progreso notable en comparación con una prueba anterior del 20 de abril, donde la nave espacial se desintegró menos de cuatro minutos en un vuelo planeado de 90 minutos debido a complicaciones desde el principio. SpaceX ha reconocido problemas con algunos de los 33 motores Raptor del Super Heavy durante el ascenso, y el cohete propulsor de la etapa inferior no se separó como estaba previsto de la etapa superior Starship, lo que provocó la terminación del vuelo. Pero dejemos de lado los cohetes. Hablemos de otro desafío que los humanos podrían enfrentar en su viaje a Marte. A diferencia de un paseo rápido alrededor de la cuadra, este es una expedición prolongada que requiere una planificación metódica de cada recurso. Desde combustible y aire hasta alimentos, la nave espacial debe ser un ecosistema autosuficiente, asegurando el bienestar de la tripulación durante todo el viaje y la misión en la superficie marciana. Además, el tiempo se convierte en un factor crítico. Esta misión abarca meses, atravesando el océano cósmico, calculando trayectorias y abordando los desafíos físicos y psicológicos de un viaje espacial prolongado. Los astronautas que se embarcan en un viaje espacial de larga duración deben estar equipados para manejar los desafíos mentales y físicos que acompañan el viaje. Esto hace necesaria la implementación de sistemas de soporte vital resilientes y un apoyo psicológico integral. La NASA participa activamente en estudios y simulaciones para obtener información sobre las barreras psicológicas asociadas con los viajes espaciales prolongados, con el objetivo de desarrollar estrategias que ayuden a los astronautas a cultivar la resiliencia mental necesaria para el viaje cósmico. Si eres psicólogo, esta es una oportunidad única para contribuir con tu experiencia y hacer un impacto significativo en este campo. También, la radiación espacial es un desafío persistente. Marte carece de una magnetosfera protectora, exponiendo a los astronautas a niveles más altos de radiación cósmica de la que se experimenta en la Tierra. Esta mayor radiación plantea posibles riesgos para la salud y requiere soluciones de blindaje innovadoras para salvaguardar el bienestar de la tripulación durante el viaje y su estancia en Marte. Una propuesta de solución para la protección contra la radiación es el uso de campos magnéticos artificiales. Esta tecnología, si se implementa con éxito, podría crear un escudo magnético alrededor de la nave espacial, desviando los rayos cósmicos dañinos y proporcionando un entorno más seguro para la tripulación. Vida en Marte: Consideremos la posibilidad de que todo salga según lo planeado. La tripulación llega con éxito a Marte, superando desafíos cósmicos y embarcando en un nuevo capítulo de la existencia humana. Al pisar la superficie rojiza, ¿qué les espera en este mundo lejano y cómo se compara con las comodidades familiares de la Tierra? En primer lugar, se despliega el paisaje marciano, un lienzo cautivador pero hostil de colores, cañones vastos y volcanes. Es un terreno que evoca tanto asombro como un sentido de aislamiento. Olvídate de la exuberante vegetación y los ríos; el Planeta Rojo ofrece una belleza cruda y agreste, en marcado contraste con los paisajes terrestres que apreciamos. Ahora, la realidad se hace presente. Marte es un planeta frío, seco y con una atmósfera delgada, lo que presenta su propio conjunto de desafíos. A diferencia de las selvas tropicales y los ecosistemas vibrantes de la Tierra, presenta un entorno desolado con mínimos signos de vida. La perspectiva de crear espacios habitables en este terreno árido exige tecnologías avanzadas y hazañas de ingeniería. Uno de los desafíos diarios sería el clima marciano. Marte experimenta tormentas de polvo frecuentes, algunas de las cuales pueden envolver todo el planeta durante meses. Estas tormentas, con vientos que alcanzan velocidades de más de 97 kilómetros por hora, plantean desafíos logísticos para equipos que funcionan con energía solar y podrían limitar las actividades al aire libre. Estrategias de mitigación del polvo serían esenciales para mantener el funcionamiento del equipo y garantizar el bienestar de los habitantes. Hablando de tormentas de polvo en Marte, ¿sabías que el rover Opportunity fue realmente MUERTO por una de ellas? Aquí te explicamos lo que pasó. Por lo general, los rovers marcianos dependen de la energía solar, y la NASA no anticipa su supervivencia durante un invierno marciano. Sin embargo, una estrategia de supervivencia implica estacionarse en una inclinación durante los meses fríos y optimizar la exposición al sol en sus paneles solares. Los vientos marcianos, sorprendentemente robustos, despejan constantemente los paneles del polvo. Sin embargo, esta estrategia no siempre produce el resultado deseado. En junio de 2018, la NASA reveló que Opportunity entró en modo de "suspensión" durante una tormenta de polvo considerable, obstruyendo la luz solar y agotando las baterías del rover. Esto condujo a un estado de "falla de baja potencia", que requirió varios días para superar. A pesar del optimismo inicial, funcionarios de la NASA informaron en octubre de 2018 que el rover no se había recuperado de los efectos de la tormenta. Marte ofrece un ciclo día-noche más similar al de la Tierra, con un día que dura aproximadamente 24,6 horas. Sin embargo, las frías temperaturas del Planeta Rojo, que van desde una media de menos 62 grados Celsius hasta puntos más cálidos cerca del ecuador, requieren hábitats especialmente diseñados para proporcionar un ambiente de vida cómodo. Las fuentes de energía, como las tecnologías solares avanzadas o otros métodos sostenibles, serían críticas para mantener una temperatura adecuada y un suministro de energía. La buena noticia es que en Marte, el sueño de cultivar cultivos se convierte en realidad, aunque dentro de entornos controlados. Los hábitats marcianos probablemente incorporarán sistemas hidropónicos o aeropónicos para cultivar alimentos, superando las limitaciones del suelo marciano. Esto, sin embargo, plantea preguntas sobre la sostenibilidad y la gestión de recursos, ya que cada gota de agua y nutrientes se convierte en una mercancía preciosa. En esencia, la vida en Marte sería una danza intrincada entre la adaptabilidad humana e la innovación tecnológica. Desde adaptarse a la menor gravedad hasta navegar las tormentas de polvo omnipresentes, cada día en el Planeta Rojo traería nuevos desafíos que exigen soluciones creativas. Es un viaje hacia lo desconocido y un paso hacia la posibilidad de crear un segundo hogar para la humanidad en los vastos confines de nuestro hermoso universo. Te puede interesar: - ⏱️ Viajando por el Tiempo - 🚗 13 Vehículos Asombrosos con la mejor tecnología Read the full article

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muyactual · 3 months

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🔴 Viaje a Marte [ 🎬 DOCUMENTAL ]

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rodadecuia · 4 months

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#CORRIDAESPACIAL #MISSÃOÀLUA #NASA #PEREGRINE1

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veintitresmillonesdehistorias · 4 months

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martes 2º enero 2024, Beijing, 8.57am.

#72.780 — Un anciano astronauta viaja a un muy lejano planeta y allí se encuentra con un planeta idéntico a la tierra, idéntico en todo, hasta el punto de que puede ir a visitarse a sí mismo. Se convierte en un escritor de éxito pero su alcoholismo acaba por matarlo.

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house-of-hope · 8 months

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LISTA DE LIVROS

× LITERATURA Todas as Pessoas Boas Daqui - Ashley Flowers A Mandíbula de Caim - Torquemada

× PROJETOS 7+1 Passos para conquistar tudo o que mais sonhou - Luiz Hota O Poder da Ação - Paulo Vieira Decifre Seu Talento - Paulo Vieira e Deibson Silva Mapa da Coragem - Fabiane Maimone Saída de Mestre - João Cristofolini e Eduardo Cosomano 12 Princípios para uma Vida Extraordinária - Paulo Vieira A Síndrome da Boazinha - Harriet B. Braiker O Ato Criativo - Uma forma de ser - Rick Rubin Desinvente - Cassio Grinberg TED - Falar, Convencer, Emocionar - Carmine Gallo Se Liga na Psicologia - Globo Livros Você Tem Mais Influência do que Imagina - Vanessa Bohns Ensino Híbrido - Lilian Bacich Elementos de Direito Civil - Christiano Cassettari Desenvolvimento Humano - Diane E. Papalia e Gabriela Martorell A Jornada do Escritor - Christopher Vogler Castro Alves - Deus, Universo, Amor e Liberdade - Evandro de Andrade Guerra Mostre Seu Trabalho - Austin Kleon × COLEÇÕES O Grande Livro de Matemática do Manual do Mundo O Grande Livro de História do Manual do Mundo O Grande Livro de Ciências do Manual do Mundo Coleção - As Grandes Ideias de Todos os Tempos Coleção - Eurekka × QUADRINHOS Astronauta Parallax - Danilo Beyruth Astronauta Magnetad - Danilo Beyruth Astronauta Singularidade - Danilo Beyruth

×INFANTIS O Poder da Ação para Crianças - Maurício de Sousa e Paulo Vieira Como Cuidar do seu Dinheiro - Maurício de Sousa e Thiago Nigro O Livro Perigoso para Garotos - Conn Iggulden e Hal igguden Histórias de Aventuras Espaciais - Um especial Disney O Livro de Atividades dos Garotos - Publifolhinha

#todoshoh #meusp

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notasfilosoficas · 1 year

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“Los perdedores viven en el pasado. Los ganadores aprenden del pasado y disfrutan trabajando en el presente hacia el futuro”

Denis Waitley

Es un orador, escritor y consultor norteamericano nacido en San Diego California en 1933.

Es autor de un célebre programa de liderazgo y superación personal, que ha dado a conocer a través de conferencias, libros, videos, cintas de audio, y colabora como consultor en varias empresas líderes, así como apoyo a personas, atletas, familias y estudiantes para mejorar su rendimiento. Ha apoyado a políticos, astronautas del programa Apollo y ganadores del Súper Bowl.

Estudió en una academia naval de los Estados Unidos, y ha publicado varios libros entre los que se destacan, Semillas de grandeza y Psicología del ganador.

Su madre trabajaba en una fábrica y su padre en un almacén después de haber servido en la Segunda Guerra Mundial. Cuando él tenía 10 años, sus padres se separaron y tuvo poco contacto con su padre desde entonces.

Asistió a la Academia Naval de los Estados Unidos en Annapolis y se convirtió en aviador naval después de graduarse. Waitley recibió su licenciatura en ciencias de la Academia Naval.

Después de dejar la Marina, Waitley se convirtió en representante de relaciones públicas financieras para una empresa de electrónica. Mas tarde, Jonas Salk un investigador médico y virólogo estadounidense, (principalmente reconocido por su aporte a la vacuna contra la poliomielitis), le ofreció un trabajo para recaudar fondos en el Instituto Salk de Estudios Biológicos.

En 1976, Waitley grabó algunas de las cintas de audio que se convertirían en The Psychology of Winning en una iglesia local. Lanzó el programa de audio en 1978, que vendió más de 2 millones de copias y generó $ 100 millones en ventas.

Durante la década de 1980 hasta la de 2000, Waitley publicó más de 15 libros como Seeds of Greatness, The Winner's Edge y Empires of the Mind, y a la fecha ha vendido más de 10 millones de audios en 14 diferentes idiomas.

Waitley también fue miembro fundador del Consejo Nacional para la Autoestima y ex presidente de psicología del Consejo de Medicina Deportiva del Comité Olímpico de EE. UU.

Fuentes Wikipedia, oceano.com.mx y deniswaitley.com

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sencilla-mentelibros · 8 months

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Cuentos de la Luna Nueva

¡Holi! Hablemos un rato de «Cuentos de la Luna Nueva».

He estado dándole vueltas al asunto desde que lo empecé a leer: ¿Cómo hablar de una compilación de cuentos? Más aún, como hablar de un «ejercicio literario» — como la contraportada bien enuncia — , en donde algunos cuentos giran en torno a un tema, y otros en torno a otro. Por ejemplo, quiero contarles que este libro me pareció un muy buen compañero, que algunas lecturas me parecieron muy críticas, otras muy ingeniosas, otras esperanzadoras y otras bastante bien escritas; pero sin que sea necesario hablar de todos los textos. Al mismo tiempo, quiero trasladarles el estado en el que me dejó después de leerlo, sin que tenga que escribir más de lo necesario.

Debo decir, que al comprar este libro me fui en la chicahuita, porque al ver el nombre de David Escobar Galindo en la portada junto a otros tres escritores; mi mente por alguna razón maquinó que debían ser todxs salvadoreñxs. Si han leído otras reseñas mías, sabrán que estoy iniciándome en literatura salvadoreña y que no tengo muchos referentes. Entonces, puesí, yo veá, eso pensé. No me juzguen por mucho tiempo. El problema fue que solo leí la contraportada. Ni siquiera abrí el libro para ver que lo primero que te dicen es la procedencia de los autores. Resulta que los otros autores son españoles :).

En fin, nada, pasó. Hablemos un poco de los cuentos y del libro.

Intentar hacer una reseña de «Cuentos de la Luna Nueva» es como intentar hacer una reseña de 40 pinturas diferentes después de ir al museo, en un solo texto. Pero ¿quién dijo miedo?

Iniciemos con el título general del libro, que es sugerente, porque a mí me hace pensar en si son cuentos que se cuentan en noches de luna nueva o si son cuentos que me cuenta la luna nueva, por ser de su pertenencia. Por ahí y ella que nos ve desde por allá tiene muchas cosas que contar. La portada, aunque más enigmática para mí, con una ilustración de Roberto Vargas, nos muestra a una chica con traje de astronauta, leyendo los cuentos de la Luna Nueva sentada en un columpio, a la luz de la noche y bajo las estrellas. Por ahí es parte del ejercicio ecléctico. Me gustó.

De hecho, la estética del libro, de cómo viene presentado: sus colores, sus imágenes, el estilo de la letra y su organización también hacen que sea un gusto abrir sus páginas. Al leerlo te das cuenta sin duda, que es un ejercicio literario. He visto similares ejercicios de Cuentos para el Andén (CpA) y Cuentos como Churros, si la memoria no me falla. El libro básicamente se divide en 10 temas o palabras clave, alrededor de las cuales, el autor da rienda suelta a su pluma. Por ejemplo, está el subtítulo o subcapítulo «Café», entonces Galindo, Alejandro, Ángela y Alfredo nos presentan con un cuento en torno al café. Es un ejercicio que debe ser muy entretenido. Al final de cada cuento, está el detalle de sus nombres que te hace sentir como que acabás de leer un recado o una carta y que a mí me provocaba sorpresa por saber que un texto que me gustó mucho era de una u otra persona.

Los cuentos son tan variados que, dentro de un mismo tema puede haber cuentos que te provoquen diferentes sentimientos. Tal vez uno te hace sentir muy triste y a la vez te brinda esperanza, tal vez otro te hace sentir miedo, tal vez otro es más cómico. Por ejemplo, uno de mis favoritos se llama «La Carta» y en él, un niño pequeño, tiene noción de que es ser malo y de qué es ser realmente malo. Es decir, lo sabe y cada una de sus acciones puede calificarlas como tal. A mí, por ejemplo, eso me causó miedo. El romper con la inocencia del diálogo interno del niño, como algo desconocido. Por otro lado, por ejemplo, el que más me gustó se llama «Diario de una cortina» y es lo más ingenioso que leí en este libro. Tiene comedia, pero también tiene una fuerte crítica a cómo se gestiona la contaminación y la basura. Está por ejemplo «Un sorbito de aguapanela para la lluvia», que me causó muchísima tristeza. Así, cuento por cuento vas sintiendo y reflexionando sobre el mensaje. Eso es lo que más me importa, el cambio que me genera leer un cuento.

A veces, sin embargo, no es así. A veces me elude la intención del autor. ¿Qué quiere decirme?, ¿cuál es el punto? A estos textos yo los he calificado más como pasajes descriptivos, en donde se cuenta una escena, pero no hay una emoción generada o el desenlace te deja como, ajá… y entonces…, donde realmente ves el valor del cuento desde una perspectiva diferente. Hay varios de estos cuentos en el libro. Y ahora que lo pienso, son una especie de respiro. No se puede estar sintiendo todo el tiempo, tampoco. Algunos de ellos son «Cuando las letras hablan», «El pozo de Asdrúbal» y «Un cuento de las mil y dos noches».

Los cuentos no son infantiles. Lejos está el espíritu del «érase una vez» — conste que no digo que todos los cuentos que empiezan así son infantiles — . Están dirigidos para público adulto y alguno que otro es un tanto picaresco. Sus personajes son mayoritariamente humanos y varían en los ambientes de sus narraciones. Algunos serán insólitos, otros sorprendentes. Otros serán fantásticos, otros menos. Pero todos los cuentos que están escritos en este libro, los volvería a leer.

Y, es que, a mí, me encantan los cuentos. Los cuentos, los relatos cortos y los microrrelatos, a mí, me hacen feliz. No sé exactamente cuál es la diferencia entre cada uno. Lo que sí sé es que, si es conciso y me hace sentir o reflexionar, bienvenido es. Por eso es que, si a vos te gustan los cuentos, te quiero dejar con esta tabla resumen en donde he calificado cada cuento por tema — según mi preferencia personal — y he definido cuál más o menos es el sentimiento principal de lo que ocurre. Espero les sirva de incentivo para ir y conseguir el libro que está bien chivo. Conste que todos me gustaron, pero me pareció un ejercicio interesante jugar con los datos. Ver cuáles temas o sentimientos me gustaron más, de quién son, cuál es el porcentaje de terror que traía este libro, etc.

Finalmente, quiero hacer una aclaración innecesaria. Veo que la mayoría de cuentos con clasificación D son de David Escobar Galindo, y esto no quiere decir que no me guste cómo escribe. Se ve que tiene un manejo impecable del idioma y tal vez en otros géneros como el lírico podría interesarme más. De todas maneras, una también cambia y por ahí no soy su público, por ahí después, en una releída me gusta más, por ahí si alguien me explica el cuento la cosa cambia. No sé. Lo que quiero decir es que la calificación va más bien por gusto personal, no es que no me haya gustado del todo y no se desanimen en aventurarse con un libro de él. Quizá por ahí y yo también lo hago en el futuro.

Fecha de publicación original: febrero 21, 2022

#Cuentos de la luna nueva #Literatura Salvadoreña #Cuentos #Ejercicio literario #Libros #Reseña #Opinion #español

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claudiosuenaga · 2 years

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Antonio de Jesus: Um escritor de ficção científica injustiçado e perdido no futuro

Por Cláudio Tsuyoshi Suenaga

Entre tantos escritores talentosos, desconhecidos e esquecidos porque jamais publicados ou bem divulgados, Antonio de Jesus (1949-2002) sem dúvida foi um dos mais injustiçados. Em 1986, seu primeiro e único livro, Deuses: Temíveis Guerreiros Cósmicos,[1] era lançado pela pequena e amadorística Editora Soma,[2] de Guido Fidelis e Torrieri Guimarães, já condenado a ser ignorado e desprezado devido à completa ausência de um esquema de distribuição. Encontrei o livro por acaso no ano seguinte em um atacado de livros na Avenida São João em meio a outros em oferta e liquidação a um preço aviltantemente baixo.

A fotomontagem da capa de Durval Mokarzel Guimarães ostentava sobre um fundo estrelado, na parte superior, a sonda Voyager I[3] indo em direção a galáxia do Sombreiro ou NGC 4594,[4] na parte central um microcomputador da época[5] “teclado” por um ET chifrudo que sai do canto inferior esquerdo e encimado por um cérebro humano flutuando no interior de um monitor transparente. À primeira vista, e até pelo título, pensei tratar-se de uma obra na linha dos deuses astronautas, logo desmentido pela contracapa que esclarecia e confundia ao mesmo tempo, dadas as disparidades:

“Em ficção científica: Discos voadores, origens e consequências; Alecrin: o 10º planeta do sistema solar e seus temíveis habitantes; Dilúvio e destruição de Sodoma e Gomorra; Asteroide: Antigo planeta dos Deuses destruído por armas jamais imaginadas pelo homem; Cérebro Humano: 90% afetado por bactérias enviadas de outro planeta, enfim a restauração após o apocalipse; Cidade do futuro e sistema metroviário; Telepatia, o novo sistema de comunicações de massas; Contração do Universo: tudo em chamas em suas marchas fúnebres em busca do nada. Fora de ficção científica o leitor irá encontrar o máximo em violência urbana. Cortiço Urbano: tragédia e humor; A morte o antídoto de um veneno chamado Vida; E outras estórias regionais paulistanas.”

Do espaço sideral, da ficção científica e ufologia aos protocolos literais da mais crua e ingente realidade das periferias paulistanas: tão atordoante salto não se via desde Matadouro 5 (Slaughterhouse-Five, lançado em 1969), de Kurt Vonnegut Jr. (1922-2007). A apresentação de Torrieri Guimarães patenteia que essa sua capacidade de transitar entre assuntos antitéticos e extremados deve-se mesmo às suas qualidades intrínsecas:

“O bom contista conhece-se pela agilidade da narrativa, pelos altos voos da imaginação e pela originalidade de suas histórias – entre outros preceitos. E aqui está um contista que reúne esses dons, capaz de levar o leitor pelos insólitos caminhos da ficção científica e de trazê-lo de volta aos problemas do cotidiano, à luta comum de todos nós, ao drama dos humilhados e ofendidos. Antonio de Jesus surpreende quando penetra fundo no magma social, revelando o sofrimento de trabalhadores arrastados à favelização, à indigência e à morte. De bancários, abnegados e heroicos e suas péssimas condições de trabalho. De famílias que sofrem a violência urbana. Mas também comove e encanta quando aborda as aventuras de jovens ou a coragem de um pai em defesa do filho. Aí está um autor novo, com o vigor de um veterano.”

A narrativa que faz transparecer o clima vigente à época – diga-se de passagem, incomparavelmente melhor do que o de hoje –, é por vezes entrecortada por observações filosóficas pungentes acerca dos aspectos mais terríveis da existência, um reconhecimento cruel do realismo, do que a vida de fato é. No conto “O grande cortiço”, lemos: “Na verdade ninguém respeita a pessoa humana. Sempre que alguém demonstra respeito por alguém, normalmente este alguém é mais forte de alguma maneira, fisicamente ou monetariamente, mas isso isoladamente não faz parte da dignidade humana, isso são condições secundárias indiferentes da natureza humana.”[6] Em “A garrafada”, temos que “O mundo dos fracos é triste e desumano, pois só os fortes querem levar vantagem. Aos fracos, resta apenas a servidão. Ninguém respeita ninguém, apenas tem medo do que possa acontecer-lhe.”[7] Em “O estupro”, ficamos com a constatação de que “O Homem nascia com o alvorecer da violência, agora na aurora da mesma o homem é a própria vítima. Continuarão se matando entre si, numa sociedade malformada, onde todo mundo quer usufruir de todos os benefícios das invenções humanas. Só pode dar nisso: a violência é o troféu de honra ao mérito pelas suas próprias criações.”[8]

O breve texto “Contração do Universo”, que reproduzo abaixo na íntegra, é uma das mais belas e poéticas “visões” já tidas sobre o Apocalipse, a atestar uma tremenda paixão pela astronomia:

“A fina garoa caía lentamente sobre minha cabeça (era o começo do apocalipse) formando uma camada espessa sobre meus cabelos. Chuvas de verão se aproximavam fortemente, molhando todo meu corpo. No inverno a tempestade vinha forte, acompanhada de trovões e mortíferos relâmpagos, derrubando tudo que estava em sua frente. A tempestade se aproximava mais e mais, feroz inimiga. Meu corpo ficava mais pesado, meus passos já eram lentos e minha força, menor. Cada vez menor: era a atmosfera que se contraía. As nuvens já estavam próximas, a lua crescia e cada vez ficava maior e a velocidade aumentava para fugir da Terra. Via-se a Lua passar no céu como um cometa, e cada vez mais perto e mais veloz. A água estava mais pesada, as ondas do mar acabaram e a tempestade cessava: tudo se contraía. Não se ouvia mais o murmurar da relva saudando o Sol pelo seu sorriso, nem os lírios do campo nem as rosas nos jardins. O Sol aproximava-se queimando tudo em sua volta. A água que caía das nuvens agora era tão quente que chegava a ferver. De além do infinito apareciam galáxias jamais vistas ou imaginadas. Andrômeda vinha ao meu encontro, Alfa de Centauro estava ali. A estrela de Barnard vinha vindo. Lobo 359 ajudava a queimar-me. Sírio bem próxima: era um pesadelo. Hidra já devorava Prócion e em suas funestas marchas em círculos ameaçava Kapteyn. Van Maanen juntava-se a Altair para juntas lançarem seus raios mortais sobre mim. O pulsar do meu coração agora era mais fraco, agora tudo no Universo era mais fraco: tudo se contraía. Minha alma e meu corpo estavam aprisionados pelo Universo marchando sobre mim com sua força incontida. As Plêiades mais rápidas devoravam todas as outras estrelas em sua marcha em minha direção. Não falarei de Arcturo, Vega, Capela, Aldebarã e Canopo. Alfa do Cisne já vem com Beta. Ó Antares! por que queres ver meu fim? Rigel e Danebo já se lançam com Cão de caça sobre mim. Meu sangue petrificara-se, meu corpo não se mexia mais. Agora o corpo e a alma juntavam-se para sempre. Estava comprimido dentro do Universo. Mundos paralelos se uniam ao meu. Todas as dimensões juntavam-se e vinham ao meu encontro para devorar-me. O pulsar do meu coração estava cessando. Agora só latejava na última agonia do corpo, enquanto a vida se esvaía lentamente. Estava no centro do universo que se fechara sobre mim sem piedade. Agora tudo era menor do que uma bola de bilhar. Minha alma sentia, agora sozinha, o peso da solidão. Não sentia mais as dores do corpo. Estava vagando agora dentro de vários universos que se uniram em suas marchas para o nada. Agora eram menores que o minúsculo pólen de unia flor. Minha alma não sentia mais nada: o Universo sumira.”[9]

São os dois contos iniciais de ficção científica, todavia, que mais cativam pela inventividade, especulação e humor sutil. Vejamos a introdução de “Deuses, Temíveis Guerreiros Cósmicos”, que confere título ao livro:

“Não são deuses, apenas astronautas. Não vieram de outras galáxias distantes a velocidades inconcebíveis, devorando espaços imensuráveis. São oriundos do próprio sistema solar e nunca ultrapassaram a velocidade da luz dentro da própria Via Láctea, por não ser possível. Seus habitantes são hábeis navegadores cósmicos. Sua posição no sistema solar é a mais próxima possível da Terra. Seu nome é Alecrin e fica apenas a meia elíptica da própria Terra. O mesmo é diametralmente oposto à Terra com relação ao Sol. Alecrin possui as mesmas proporções do nosso planeta: tamanho, gravidade, distância do Sol, velocidade de translação, dia, mês, ano e por incrível que pareça a raça tem alguns traços semelhantes aos dos terrestres. São pouco menores que os terráqueos e são megacéfalos, enquanto a pele é branco-esverdeada. O aprendizado das crianças, na maioria das vezes, é nas próprias naves. Seus mestres são eletrônicos. A nave Epsilon viaja rumo à Terra levando no seu interior dois tripulantes. Um é o comandante da nave, o outro é aluno e filho do mesmo. Este tipo de nave é conhecida aqui na Terra como Disco Voador.”[10]

A premissa de Alecrin, “a apenas a meia elíptica da própria Terra” e “diametralmente oposto à Terra com relação ao Sol”, é a emulação de um conceito interessante, mas superado pelas explorações espaciais e observações telescópicas, da existência de um outro planeta com as mesmas dimensões e características da Terra a orbitar, exatamente com a mesma velocidade, do outro do Sol. O filme de ficção científica que melhor explorou esse conceito, acrescido ao de uma Terra paralela “replicada” ou “espelhada”, foi o cult britânico de 1969 Doppelgänger, também intitulado Journey to the Far Side of the Sun (Viagem ao Outro Lado do Sol), concebido, roteirizado e produzido pelo casal Gerry e Sylvia Anderson [os criadores das séries Thunderbirds (1965-1966) e Space: 1999 (1975-1977)], dirigido por Robert Parrish e estrelado por Roy Thinnes, o protagonista da série The Invaders (Os Invasores, 1967-68). Em Doppelgänger (termo alemão que significa “duplicata” ou “uma cópia de si mesmo” e que remete à lenda de que se você encontrar seu doppelgänger é o momento de sua morte), uma missão conjunta NASA-EUROSEC (Conselho Europeu de Exploração Espacial) envia no ano de 2069 (ying-yang e alusão sexual ao mesmo tempo) uma nave com dois astronautas para investigar um planeta em uma posição paralela a Terra atrás do Sol, o qual se revela uma cópia reflexa da Terra onde todos os aspectos da vida são idênticos e correm de maneira simultânea, mas ao contrário.

Pelo diálogo mantido entre Épicro, o filho do comandante, e o computador da nave que lhe ministrava aulas durante a viagem, ficamos sabendo que:

a luz quando viaja livre da gravidade desenvolve maior velocidade e que quando não está sob a influência de campos gravitacionais, chega a atingir mil vezes sua própria velocidade;

Deus quer dizer “ser andante”, pois deriva da palavra Déu, seu planeta de origem naquele aglomerado de asteroides entre Marte e Júpiter;

Deus passou a ser a designação genérica a todos seres oriundos do cosmo ou algo superior a eles;

foram eles que instituíram as primeiras normas aos primitivos terrestres;

os deuses eram exímios navegadores cósmicos e temíveis guerreiros e que todas as raças tinham que se submeter a eles, e quem se recusasse a cumprir suas exigências era destruído;

o povo de Épicro devia muito a eles, e que tudo que tinham havia sido legado por eles;

eles navegavam por toda a galáxia, instruindo e criando leis para o bem comum dos nativos, fazendo experiências genéticas em animais e transformando os escolhidos em seres dominantes;

um dia eles partiram para a galáxia de Virgem, mais precisamente para um gigantesco planeta que gira em torno de Spica (estrela principal da galáxia);

nossa galáxia gira em torno de Virgem (em um maroto trocadilho sexual complementar com Spica), juntamente com inúmeras galáxias, formando nosso aglomerado nebuloso, e todos os aglomerados nebulosos giram dentro do Universo;

eles travaram uma acirrada batalha e destruíram uma colônia avançada virginiana;

os virginianos os perseguiram por todo o Universo até que finalmente destruíram seu planeta de origem entre Marte e Júpiter;

os virginianos vieram até Alecrin onde também os afugentaram;

sem tempo de completarem o trabalho, os deuses fugiram, prometendo aos terrestres que voltariam;

até os dias de hoje os virginianos os perseguem para eliminar seu cerne do Universo, motivo pelo qual jamais retornaram ao nosso sistema solar;

Serafim era a designação hierárquica no topo da qual se encontrava o Deus supremo, o comandante-geral do planeta, seguido pelos altos comandantes, pelos Querubins e assim por diante;

no comando de uma nave cósmica o comandante também recebia a designação de Deus (por ser a autoridade máxima da nave);

na Pré-história uma nave contendo milhões de bactérias colidiu com a Terra e contaminou todos os seres vivos do planeta;

as bactérias resistiram a todos os tipos de drogas, e na tentativa de salvar a raça humana, conseguiram isolá-las em algumas pessoas, o que os levou a orientá-las separando os puros para depois provocar o Dilúvio na esperança de salvar a raça;

separaram Noé e seus parentes, guiando-os e orientando-os na construção da arca;

o Dilúvio havia sido provocado com várias naves distribuídas na atmosfera, as quais combinaram os gases existentes transformando-os em água até a Terra ficar totalmente coberta;

quando todas as formas de vida foram eliminadas, o processo foi invertido;

as mesmas naves distribuídas por todo o planeta decompuseram a água nos gases anteriores, daí porque a água do mar é salgada;

na terceira geração verificaram que os micróbios haviam criado resistência, pelo que foi preciso um novo método de isolá-los, até que o conseguiram definitivamente, tendo então de separar as pessoas escolhidas, pelo que destruíram Sodoma e Gomorra, onde estava o grande foco da praga;

séculos depois os micróbios começaram a minar a resistência de todos e evoluíram com as novas condições do planeta, alojando-se em uma parte do cérebro, no que se tornou impossível combatê-los;

a missão ora em curso visava destruir toda forma de vida na Terra e semear uma “raça totalmente pura” antes que alcançássemos outras civilizações nos sistemas próximos, propagando assim os micróbios naqueles povos;

só 10% de nossos cérebros funcionam porque foi afetado pelas bactérias;

a eliminação definitiva delas, para que sejamos tão inteligentes quanto eles, é um processo demorado que levará cerca de um milhão de anos, já que o cérebro vai sendo restaurado lentamente, de geração em geração; que a nova destruição iria ser feita mediante a eliminação do Cinturão de Van Allen, sem o qual os raios ultravioletas do Sol nos matarão em poucos dias;

quando tudo estiver acabado, esterilizarão todo o planeta de modo a evitar a proliferação de alguma forma de vida resistente, para só depois reconstituírem o Cinturão de Van Allen; que quando tudo estiver cientificamente controlado, trarão para cá os novos espécimes da raça pura, ao que a Terra voltará ao estágio propício para a nova vida.[11]

O melhor conto do livro é “Perdido no Futuro”, o relato de uma viagem no tempo que se realiza fortuitamente por meio de uma dobra ou buraco de minhoca que se abre em pleno trecho do túnel da linha norte-sul do Metrô de São Paulo. Geraldo de Mello, um pacato e típico jovem cidadão paulistano, casado, morador da zona sul, sai pela manhã para levar um presente à sua mãe (aniversariante naquele dia), que residia a um quarteirão da última estação do metrô (Santana):

Foto de Derli Barroso para a Companhia Metropolitana de São Paulo-Metrô – 20 anos: 1968-1988. Publicação da Assessoria de Comunicação Social do Metrô, Secretaria de Transportes do Governo do Estado de São Paulo.

“Ele entrou no primeiro carro do metrô. Logo que partiu, ficou olhando para a estação, instintivamente, como se estivesse olhando para o vazio. O percurso era feito em vinte minutos. Chegou no ponto final e saiu calmamente. Chegou na roleta de saída, passou despreocupado, sem se importar com a presença dos outros passageiros (se é que existia algum). Subiu as escadas que davam acesso à rua da residência da senhora sua mãe e, logo que chegou lá em cima, ficou atordoado ao olhar para os lados. Ficou boquiaberto ao ver no lugar da rua, uma enorme avenida de calçadão com gigantescos edifícios. Os carros em tráfego eram poucos. Todos desconhecidos. Os emblemas eram das fábricas conhecidas, as placas eram da própria cidade, mas os carros que ele estava acostumado a ver não viu nenhum. Era assustador e ao mesmo tempo fascinante, ver aquela enorme avenida com automóveis de todas as marcas e diversos formatos. Olhou para um ônibus que passava, o mesmo era constituído de dois andares. Em seguida outro. Logo, outro e mais outro. Não pôde contar a quantidade. Ônibus com dois andares! Incrível! Como é que eu nunca li nos jornais nem vi na televisão que lançaram aqui estes ônibus. Os ônibus também eram sanfonados. Sanfonados era comum, mas com dois andares nunca! Olhou para cima e percebeu que o sistema de contato elétrico era diferente (igual ao dos trens elétricos). Tentou contar os andares de um edifício mas não foi possível: 100, 200, 300, 400? Não era possível contar. Logo percebeu que todos tinham a mesma altura.”[12]

Fotos de Derli Barroso para a Companhia Metropolitana de São Paulo-Metrô – 20 anos: 1968-1988. Publicação da Assessoria de Comunicação Social do Metrô, Secretaria de Transportes do Governo do Estado de São Paulo.

A um transeunte, Geraldo perguntou quantos andares exatamente tinha o edifício, ao que ouviu como resposta que “Qualquer criança sabe que todos têm 480 andares!” Ao sacar um cigarro e pedir que lhe acendesse, o transeunte olhou para o maço de cigarros, e, com um ar de espanto, perguntou-lhe onde o havia comprado, pois que aquele cigarro era de fumo e não era mais fabricado. O transeunte informou ainda ao atônito Geraldo que aquele cigarro pertencia agora ao “museu do cigarro”: “Sim, museu de cigarro! Além desta marca ainda há outras lá expostas com a história dos cigarros nocivos e de muitos pacientes que vieram a morrer de câncer e de outras doenças originadas por este e outros cigarros lá expostos”. Perguntado pelo transeunte se ele residia naquela cidade, Geraldo respondeu: “Absolutamente! Eu nasci aqui em 05-09-1998.” O transeunte “esboçou um pequeno sorriso e disse: Nós estamos no ano 2101. Isto quer dizer que o senhor tem exatamente 103 anos.”[13]

Geraldo entrou em um bar e pediu uma água mineral. O atendente disse-lhe que não havia água mineral, ao que ele pediu uma Coca-Cola: “Coca-Cola? o que é isso? Ele não discutiu, virou as costas, foi para uma praça próxima e sentou-se em um banco. Nisso vem um robô com um talão de notas. E com voz metálica disse: São Cr$ 1,00 (Um Mundi) = (nova moeda vigente no século vinte e um). É um mundi a taxa para sentar. Favor facilitar o troco.” Sem ter um mundi, Geraldo levantou-se do banco e resolveu voltar para casa, pois já era quase hora do almoço.[14]

A caminho do metrô, ouviu um barulho no ar e viu “um objeto com o formato de dois pratos, um em cima do outro, cujo diâmetro era superior a 300 metros”, parecido com “um disco voador que os antigos diziam que viam. Era um disco cheio de janelinhas com luzes piscando como um luminoso de propaganda. Ele não se conteve e perguntou a um moleque” o que era aquilo. O moleque lhe respondeu: “É um ônibus espacial. Por que, o senhor nunca viu?” Geraldo confirma nunca ter visto, e o moleque do futuro não perde a oportunidade para tirar um sarro de sua cara. “O senhor é desse planeta?”, pergunta a Geraldo, que comete o erro de responder que não. “Então deixa eu adivinhar! Bem! pela sua pergunta o senhor tem que ser do planeta Hidhi do sistema Hotha. Neste caso o senhor é um idiota, ra, ra ra ra ra ra. Enquanto o moleque saía rindo, Geraldo ficava olhando o mesmo afastar-se, com vontade de torcer-lhe o pescoço”.[15] Geraldo põe-se novamente a caminho do metrô, e ao chegar lá

“…viu uma placa de bronze escrito, indicando através de uma seta: metrô do século vinte. Visite os museus ao lado das estações. Cr$ 1,00 (um mundi a entrada). Mais adiante tinha um robô de pé próximo à catraca que ele tinha passado há pouco tempo atrás, e um guichê ao lado. Ele puxou uma nota de mil cruzeiros e deu para o robô-caixa. Logo em seguida veio a negativa: ‘Este dinheiro não vale. Foi recolhido em 10-09-2050’. Geraldo voltou e logo viu em frente no outro lado da avenida uma agência bancária. Ele atravessou, entrou na agência, dirigiu-se ao caixa e perguntou: É possível trocar esta nota? O caixa disse: Não podemos trocar. Este dinheiro só é comercializado no Banco do Brasil.”

Geraldo dirige-se então ao Banco do Brasil no nº 100 da mesma avenida, e ao mostrar a nota para o gerente, este lhe pergunta onde o havia conseguido. “Ele ia contar a estória real, mas logo lembrou que o gerente ia chamá-lo de louco ou, quem sabe, talvez chamar a polícia para prendê-lo.” Geraldo diz que a nota havia sido deixada como herança pelo seu pai e é certificado de que ela vale um milhão de mundi.[16]

“Geraldo saiu dali com aquela fortuna sem saber ao certo o seu valor real. Comprou a entrada, entrou no metrô, olhou para todos os lados e observou: era igualzinho. A estação era a mesma que ele tinha passado há algum tempo para ir à casa de sua mãe. Este metrô agora funcionava como coisa do passado. Não servia mais de condução, devido à sua lentidão e barulheira. Mas ainda andava por todas as estações com toda eficiência para o qual foi criado no seu século, mostrando aos habitantes da época como era a condução no passado. Todos os povos que saíssem de um extremo ao outro da cidade tinha que tomá-lo obrigatoriamente. Aquele metrô agora era para levar os turistas às estações-museus históricos da cidade, das quais ele fazia parte. Tudo que era obsoleto, agora estava exposto ao longo dos 40 km. Este museu histórico mostrava todas as invenções primordiais da raça humana, até o momento atual. Contava a história também do sistema de comunicações, desde os tambores da selva até a comunicação telepática em todos os detalhes. Quando Geraldo chegou à estação começou observar um aparelho quase igual a uma televisão, cujas proporções eram de dois metros de largura por quatro de comprimento, sendo que embaixo havia teclas com todas as letras do alfabeto e números de l a 0. Ao lado estava escrito Monitorfone.”[17]

O aparelho lhe permitia obter todas as informações que quisesse em poucos segundos pelo preço de um mundi. A imagem de um homem aparentando uns 50 anos apareceu no monitor e passou a lhe responder as perguntas. Quis saber quando ele próprio, nascido em 05-09-1998, havia falecido. “Nisso, Geraldo começou a ouvir um barulho rápido dentro da máquina. Um barulho de algo passando entre alguma coisa metálica.”

Após fornecer informações adicionais que o diferenciassem de homônimos, ficou sabendo que havia sido dado como desaparecido em 10-05-2019, ou seja, no mesmo dia em saíra para levar o presente à sua mãe. Quis saber em seguida sobre sua esposa Conceição de Mello e seus possíveis descendentes, ao que lhe foi informado que ela havia falecido em 16-12-2022, deixando um filho por nome Geraldo de Mello Jr. “Geraldo não aguentou a notícia, saiu pulando como um louco. ‘Não é possível! incrível! Eu deixo um filho no mundo! O que eu mais queria era vê-lo! Mas, como? Não posso voltar para o passado, mas se eu pudesse, ah! Meu Deus, ajude-me!’ ”.

O homem no monitor seguiu informando que seu filho havia se casado com Fátima Jouliete, com quem havia tido um filho de nome Geraldo de Mello Neto, formado em telepatia pela Faculdade de Telecomunicação Cósmica e que havia trabalhado em uma base militar na Lua como engenheiro de telecomunicação telepática. Por aqueles dias já estava aposentado e residia na Rua Antares, nº 6, no Centro. Curiosamente, descobri que esta rua não fica propriamente no Centro de São Paulo, mas próxima à Rodovia Presidente Dutra em São José dos Campos, sendo a via principal da Avenida Andrômeda, de onde saem também as ruas Sírius, Plêiades, Polar, Altair, Regulus, Gemini, Castor e Cefeu.

O homem no monitor completou informando que a frequência telepática de seu neto, que tinha quatro filhos com identificações idênticas, podia ser obtida em “dados adicionais”. Geraldo solicitou em dados adicionais a frequência telepática dele, mas não o obteve porque sua frequência telepática era confidencial e ele só podia receber mensagens através do Ministério de Defesa Galáctica e ainda “só em caso de invasão alienígena nos limites de segurança intergaláctica.”[18]

Impedido de contatar seus próprios descendentes, Geraldo quis saber “sobre corpos em mudança de tempo sem considerar espaço”, ao que lhe é informado laconicamente que “há apenas teorias a esse respeito. Não há até o momento caso consumado, mas há leves evidências a respeito do caso. Trata-se de segurança de Estado.” Quis saber também “sobre toda transformação da cidade nestes últimos 100 anos”, ao que lhe é explicado que “toda a cidade foi derrubada e em seu solo foi construída uma plataforma de ferro e concreto armado, com uma espessura de 20 metros, e em cima dessa plataforma foram edificadas as novas habitações atuais, de modo que, se houver terremoto, as bases sólidas aguentarão os edifícios. Estes edifícios foram construídos com a mesma altura: 480 andares. Há uma praça central de onde saem todas as avenidas principais. […] Os ferros (para construir toda esta cidade de ferro e concreto) vieram dos asteroides, pois ainda existem asteroides que podem fornecer ferro para nosso planeta tanto quanto o peso do mesmo. O cimento também pôde ser extraído dos asteroides.” Quanto ao novo sistema de transportes urbanos, lhe foi explicado que “o novo metrô funciona por dentro dos edifícios, sendo que as estações são dentro dos próprios edifícios”, de onde os passageiros sobem e descem por meio de “grandes elevadores com capacidade para 300 pessoas cada um, sendo que cada edifício-estação tem em média 30 elevadores. Há cinco linhas de metrô dentro dos edifícios no sentido sul e no norte a mesma quantidade nos edifícios em frente. Estes metrôs funcionam em todas as grandes avenidas que saem da praça central e dirigem-se para todos os pontos cardeais. Ainda há os metrôs circulares distantes uns dos outros apenas um quilômetro. Todos andando dentro dos edifícios.” Com isso, os automóveis haviam se tornado desnecessários dentro da cidade e o seu uso agora era restrito. “Somente algumas pessoas devidamente autorizadas pelo governo podem usá-los. Porém há as auto-estradas onde qualquer cidadão pode usar seu carro para se locomover para outras cidades ou estados.”[19]

Sem saber para onde ir, “Geraldo ficou pensativo […] Agora era um rico homem, mas sem a coisa mais importante: a família. E além disso era um homem estranho para quem quer que fosse. Pertencia ao século anterior e não poderia viver normalmente até que assimilasse a nova época. Os Robôs chegaram e disseram: ‘Acabou a visita a esta estação. Tempo esgotado, senhores’. Geraldo foi junto com os outros para a próxima estação que agora era a central. Ao chegar na estação central, saiu e entrou na cidade para não mais sair.”[20]

Histórias sobre viagens no tempo não constituem propriamente novidade desde pelo menos A Máquina do Tempo (1895), de H. G. Wells, mas o conto de Antonio de Jesus destaca-se por estar repleto de elementos originais e de antecipações (ou profecias) que se cumpriram de maneira quase exata ou aproximada.

O movimento antitabagista move campanha implacável pela proibição total do fumo (do cigarro, não da maconha e de outras drogas, cujo consumo, paradoxalmente, vai sendo descriminalizado em todas as partes), enquanto leis antitabagistas draconianas impostas pela OMS [Organização Mundial da Saúde (World Health Organization), subordinada à ONU] vão banindo os fumantes que ainda restam para guetos cada vez mais restritos, tudo, claro, em nome da saúde.

O “monitorfone” assaz se parece com os atuais terminais de internet espalhados por todos os cantos, prontos a oferecer as informações de que necessitamos. O “barulho rápido de algo passando entre alguma coisa metálica” que saía de dentro da máquina faz lembrar o ruído feito pelos HDs de nossos computadores (infelizmente ainda não totalmente silenciosos), principalmente quando exigimos que acessem ao mesmo tempo várias áreas da memória.

O maior acerto de Jesus, contudo, foi o de ter previsto a adoção de uma moeda única mundial, que ele chama ainda mais acertadamente de “Mundi”, isso em uma época em que pouco ou nada sabíamos acerca da Agenda e dos planos globalistas. Longe de ser uma teoria conspiratória, o fato é que em novembro de 2011 a Conferência da Organização das Nações Unidas para o Comércio e Desenvolvimento [The United Nations Conference on Trade and Development (UNCTAD)], aventou abertamente a possibilidade de substituir o euro e o dólar por uma moeda global única. Houve até quem sugerisse na internet que essa moeda viesse a ser chamada, aliás muito apropriadamente, de “Mundi”! Um dos argumentos da ONU a favor da moeda global única é o de que ela protegeria os mercados emergentes da especulação financeira. A UNCTAD aventou ainda a hipótese da criação de um banco central global. Uma economia global unificada é um passo fundamental para a implantação definitiva de um Governo Único Mundial.

Entrevista com Armandina de Jesus, viúva de Antonio

Tarde demais, infelizmente, é que consegui localizar o paradeiro da ex-esposa de Antonio, a cabeleireira Armandina de Jesus, então com 53 anos, a quem entrevistei em 15 de março de 2003. Recebi então a triste notícia de que Antonio havia falecido exatamente nove meses antes, no dia 15 de junho de 2002, em decorrência de problemas causados pelo fumo. Quanta ironia. Antonio era um fumante inveterado e, como vimos, previu acertadamente que o cigarro seria banido no século XXI.

Armandina contou-me que Deuses, Temíveis Guerreiros Cósmicos foi escrito entre o final dos anos 70 e a primeira metade dos 80 e publicado às próprias expensas de Antonio, que em meio a muitas dificuldades teve de custear a impressão e cuidar da distribuição. Armandina ajudou a distribuir os livros em algumas livrarias (entre eles as da Rua Barão de Itapetininga), embora, como ela declinou, “sem muita esperança”. Já os livros que ficaram disponíveis no atacado da Avenida São João em sistema de consignação, foram para ali levados por Antonio. “Era preciso ficar verificando se estava vendendo ou não, e como estávamos com uma série de outros problemas, fomos deixando para trás”, lamentou Armandina, e ainda mais pelo prejuízo financeiro amargado, já que sobraram mais de mil exemplares.

Em suma, Antonio não obteve retorno nenhum. “Cada um vem ao mundo pra passar o seu pedaço, então vai fazer o quê?”, resignou-se Armandina. Antonio cursara até o segundo grau e sua formação era basicamente a de um autodidata. “O negócio dele era ler, ler, ler e escrever. Ele passava o tempo todo lendo. Gostava muito de ficção científica, ufologia e coisas exóticas, estranhas. O sonho dele era se tornar um grande escritor, mas como não deu certo, ficou magoado”, contou Armandina. Antonio teve de limitar-se a seu comércio de materiais de construção na rua Dr. Aureliano Barreiros, próxima à Rua Sabbado D’Ângelo, em Itaquera.

Em 1997, o casal se separou e Antonio passou a viver sozinho em uma residência na Estrada Itaquera-Guaianazes, no mesmo bairro. Armandina revelou que o conto sobre a viagem no tempo pode ter sido baseado nas regressões hipnóticas que Antonio costuma fazer. Segundo ela, ele havia feito cursos de regressão e aplicava em si mesmo o que aprendera a fim de saber sobre suas vidas passadas. Mas o que, afinal, vidas passadas teriam a ver com o futuro que tão bem previra? Eis uma questão que só Antonio de Jesus poderia ter respondido.

Notas

[1] Jesus, Antonio de. Deuses: Temíveis Guerreiros Cósmicos, São Paulo, Editora Soma, s.d.

[2] Então sito à rua Bráulio Gomes, 141, 8º andar, Praça da República, Centro de São Paulo.

[3] Lançada em 1977 e que deixou o sistema solar em 2013 tornando-se a primeira a chegar ao espaço interestelar, carregando consigo um disco de cobre revestido de ouro contendo mensagens e gravações para outras civilizações

[4] Galáxia espiral em formato de chapéu rodeado por um disco achatado, a 28 milhões de anos-luz de distância, descoberta em 1781 pelo astrônomo francês Pierre François André Méchain (1744-1804).

[5] Parecido com o console de um Codimex CD-6809, o primeiro dos clones de TRS Color fabricados no Brasil, baseado no esquema original do TRS-80 Color Computer da Tandy, com espantosos 32 Kb de RAM.

[6] Jesus, Antonio de, op.cit., p.43.

[7] Ibid., p.60.

[8] Ibid., p.86.

[9] Ibid., p.26-27.

[10] Ibid., p.7.

[11] Ibid., p.7-16.

[12] Ibid., p.17-18.

[13] Ibid., p.18-19.

[14] Ibid., p.19-20.

[15] Ibid., p.20.

[16] Ibid., p.20-21.

[17] Ibid., p.21-22.

[18] Ibid., p.22-24.

[19] Ibid., p.24-25.

[20] Ibid., p.25.

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