Observo la luna , mientras dejo que la soledad que tanto evito durante el día , me llene y me acompañe. Observo la luna perdida en mi propia imaginación, en mi propio mundo, pienso y analizo lo que siento y lo que anhelo. Mirándo la luna que tan lejana , esta noche parece estar tan cerca , el frío que produce no me hace querer ir adentro , por que el frío externo es fácil de soportar comparado con el que llevo en el alma. Observo lo lejos que se encuentra de mi y aún así su presencia me hace compañía en esta noche tan silenciosa y tan solitaria , este sentir hace mi mente viaje a lugares mejores , provoca que mi corazón llore lo que necesita llorar , invita a mi alma a seguir creyendo en que de alguna manera todo estará bien.