Eres aquel sentimiento de paz que trasmite el mar, como aquella sinfonía que generan las olas entre la arena. Un espectáculo entre tanta monotonía, mi canción favorita, eres para mí, como esos deseos que siempre soñé.
Mi mar de hace algunos años, quiero pedirte perdón por ser tan dura contigo. Por exigirte tanto y por dar todo de ti a los demás; así tú te quedarás sin nada. Perdóname por reprimir tanto dolor y sufrimiento. Por siempre intentar complacer a los demás y dejarte a un lado. Te quiero abrazar mi mar, quiero decirte que te ames; ámate tanto que no dejes que nadie se aproveche de tu bondad, de tu calma. Pese a la inmensidad, el caos o la tormenta siempre estuviste allí ante las adversidades y es de admirar.