Que pasa si digo que ya no puedo más, que cada día siento que me desgasto física y mental, que la monotonía me consume poco a poco haciéndome sentir un tanto vacía...
Cada puto minuto que pasa me cuestiono mi maldita existencia, es una agonía y sólo quiero llorar, estoy cansada de estar tan llena de absolutamente nada, cansada de estar cansada, cansada de ser nada en esta vida tan vacía.
Me siento tan vacía y dañada, me siento tan inservible, tan humillada, tan sucia, tan pisoteada... pero, eso sí, finjo porque no quiero hacerle daño a la gente que quiero, prefiero que me masacren a mí.
Cartas desde el Maltrato --Roberto Martínez Guzmán
Aquí voy de nuevo, tengo que obligarme a levantarme de mi cama y comer para no preocupar a nadie mientras que lo que yo pienso y siento no importa. Trato de no llorar con cada bocado que entra a mi boca; esto es tan difícil, realmente no tengo apetito ni fuerzas para masticar, lo único que siento es la depresión que me consume por dentro. Pero en fin, nunca importa lo que yo siento, sólo lo que los demás quieren.
Lo siento por todo lo que dije, hice o no hice, no hay forma de reparar ninguno de mis errores y lo he admitido, pero no quiere decir que no lo intenté, pero no quisiste ver eso, y está bien, tu odio y rencor dominan sobre todo y es mi culpa, lo lamento, y sin ti mi vida no tiene sentido, así que para ahorrarte sufrimiento, saldré de tu vida de la forma en que sé que te ayudará a estar en paz.
Hay veces donde simplemente me siento y lloro....Por todo. Por nada.
Porque al parecer es algo que pasa sin planearlo, espontáneo; simplemente me brotan las lágrimas y me desbordo. Me pierdo entre los sentimientos y no puedo parar.