fxckthehell

[fxckthehell]

lunes 10 de febrero del 2003.

09:38 pm

mi nombre es a—, creo que eso no importa. mi familia son los johnson, una familia que recibió una mala reputación gracias a mis padres. pero posiblemente la persona que esté leyendo estas palabras se pregunte, ¿qué hace un niño de apenas cinco años escribiendo un diario tan profundo? pues sólo quería una manera de desahogarme y no encontré algo mejor que esto.

bueno, en el vecindario nos conocen como una familia desunida y con hijos desdichados. y así es, mi hermano breáux y yo somos los que cumplen con todas las tareas de la casa pues mis padres no son lo suficientemente responsables como para hacerse cargo ellos mismos.

desde que nací, tuve que soportar ver cómo mi hermano era maltratado por no cumplir con todos los deberes de casa en un solo día, ¿y quién podría teniendo unos padres como los míos? pero por si no bastaba, cuando cumplí los tres años también tuve que hacerme cargo de las cosas en el hogar.

las reglas en casa eran muy estrictas para nosotros: si no cumplías con todos tus deberes en el tiempo indicado, golpe. si dejabas tus deberes por algo menos importante, golpe. si no cumplías con los "favores" de tus padres, golpe.

fue tanto así que ahora se hizo costumbre tener una nueva cicatriz cada día, parecían adornos que podíamos tener únicamente mi hermano y yo.

hace tres días cumplí cinco años y les rogué mucho a mis padres para que me dejaran ir al kinder. accedieron con la condición de que me quedará hasta altas horas cumpliendo con los deberes de casa, cosa que prometí. que ingenuo.

al dia siguiente fui al kinder con mi padre el cual ni siquiera se despidió o me dijo "suerte en tu primer día, campeón" como suelen hacerlo algunos padres con sus hijos. pero no importaba, estaba tan emocionado que entré con las piernas flaqueando.

al llegar al salón de clases, la maestra mcgreedy me recibió cálidamente y me pregunté por qué ella no fue mi madre.

como todo niño en su primer día, la maestra me presentó ante los demás y todos me miraban cono si nunca hubieran visto a un pequeño niño rubio con grandes mofletes.

a la hora del receso, estaba muy emocionado por conocer a nuevas personas pero un grupo de niños me encerró en el salón de clases, tiraron mis cosas al suelo y luego me dijeron "defiéndete, nena". yo no sabía qué hacer entonces pues nunca en mi vida había peleado con alguien, ellos sólo se rieron y comenzaron a golpearme, tirándome al suelo y pateándome al punto de romper mi brazo. tuve que decirle a la maestra que me había caído pues no quería tener más problemas con esos niños.

al regresar a casa, mi madre comenzó a gritarme por mi aspecto: destrozado y vergonzoso. mi padre se le unió ¿y saben qué fue lo que recibí? burlas. burlas por no poder defenderme y por mi hueso roto. me castigaron y fui a mi habitación a contener el llanto que amenazaba con salir hasta que mi hermano breáux entró y me ayudó con el yeso que había comprado en caso de emergencias (por si mis padres se pasaban con los golpes)

sentí dolor no sólo porque me acomodó el hueso sino también por pensar que por una única vez podía alejarme de todos los abusos. mi hermano me sugirió esta idea de escribir todo lo que siento para no terminar rompiendo todo lo de mi cuarto o haciendo algo peor.

y así fue, ahora estoy aquí con un brazo vendado y escribiendo algo que para un niño de cinco años debería ser prohibido. no importa, al menos tengo a breáux el cual me apoya siempre como si fuera mi ángel guardián.

hasta aquí esta anécdota, supongo que mañana volveré para escribir más cosas y contar sobre mi segundo día de clases.

—el pequeño johnson.