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𝐓𝐡𝐞 𝐟𝐢𝐫𝐬𝐭 𝐭𝐢𝐦𝐞 𝐌𝐚𝐠𝐧𝐮𝐬 𝐚𝐧𝐝 𝐀𝐧𝐚𝐬𝐭𝐚𝐬𝐢𝐚 𝐦𝐞𝐞𝐭.

Anna's starter to Magnus Sigurdsson

𝖠𝗉𝗋𝗂𝗅 𝟥𝟢, 𝟣𝟫𝟣𝟪. 𝖱𝗎𝗌𝗌𝗂𝖺.

—Tendrás suerte, Nastia —La zarina rio. A través del coche tomó la muñeca de su hija menor y le colgó un hilo de perlas negras—. Es la noche Walpurgis.

—No creo en las brujas —replicó la rubia-, tampoco tú deberías. Una sonrisa incrédula se formó en los finos labios de la gran duquesa, como si quisiera probarle a su madre que dejaba atrás los cuentos de terror que solían asustarla. Intercambiaron miradas un par de segundos, hasta que Anastasia negó con la cabeza.

—¿Y si se 𝐫𝐨𝐛𝐚𝐧 mi corazón? —reprochó.

Después de presentarse en sociedad en el invierno, la menor de las hijas del zar tenía que cumplir con las absurdas reglas de convivencia que, impuestas por su madre, le impedían divertirse ahora que era una mujer. Tenía prohibido hablar si no se le dirigía la palabra, no podía despegarse de sus acompañantes y, Dios jamás lo permitiera, bailar sin una invitación formal; por lo que las veladas eran largas, aburridas y, sobre todo, insoportables. Anastasia se rehusó a convivir bajo los designios de su madre y evitó cualquier evento social hasta que fue imposible porque era presa de rumores como que estaba embarazada o que tenía un dedo demás en la mano izquierda.

La noticia de que a la gran duquesa se le forzaría a aparecer en el inicio de la temporada del Ballet Imperial corrió rápido y todos los ojos de San Petersburgo acogieron a la rubia en el Teatro Mariinski. Más allá de su pequeña comitiva —que consistía en su madre y su hermana mayor, Olga—, el escrutinio social y la novedad obligaban a Anastasia a ceder ante los ojos hambrientos de ella: era un lobo disfrazado con la piel de una dama, un vestido púrpura, perlas y guantes largos.

Se escondió en su palco para evitar el silencio de seguir a su madre, o peor, a los pretendientes de su hermana mayor. A media luz, Anastasia utilizó sus binoculares para observar a aquellos que tomaban su lugar entre las filas de platea, estudiaba sus rostros, leía sus labios en busca de algo sobre sí, no obstante, sólo podía retener con claridad un nombre que se repetía como plegaria: "Príncipe 𝐒𝐢𝐠𝐮𝐫𝐝𝐬𝐬𝐨𝐧". Lo buscó entre la multitud según los murmullos, pero todos los rostros le parecían familiares, pensó que tal vez era un fantasma propio del viejo teatro y la idea hizo que la piel se le erizara.

—Es "Sueño de una noche de verano" —susurró Olga, después tomó lugar en frente de su hermana—, pensé que en tu honor harían Coppelia, saben que es tu favorito. —El ballet lo han dedicado a otro príncipe, te dije que tendrías suerte málenkaya —replicó la zarina.

 Tras el acto inicial, Anastasia abandonó su lugar cerca de su madre con la excusa de acudir al llamado de su tía paterna, Xenia. Se dio el lujo de sentir que la suerte la bendecía y no escuchó las claras indicaciones de su hermana antes de salir del palco; el respiro de libertad le supo a gloria y se permitió quitarse los guantes mientras vagaba por las grandes escaleras y volvía al vestíbulo. No tenía idea de dónde ir, no quería ir a ningún lugar. Sin embargo, a pesar de que el estruendo del segundo acto tomara lugar, otra melodía se aseguraba de hacerse escuchar, era un piano y Anastasia no dudó en seguir su rastro.

Tan pronto estuvo en frente de la puerta francesa esta se abrió, como si la estuvieran esperando, Anastasia no reconoció al hombre que tocaba pero sí a las mujeres que le acompañaban. Se puso sus guantes y se pellizcó las mejillas en busca de un rojo natural, no podía permitirse más escándalos y entonces, entró al salón que solamente se alumbraba por velas.

—Gran duquesa —musitó una de ellas y ambas procedieron a hacer una reverencia, el hombre no dejó de tocar—, ¿está perdida? —Tal vez —susurró—, pero creo que el prodigio me ha llamado. La rubia se acercó al piano por la cola y no le quitó la mirada de encima a los dedos del joven que con vehemencia se movían.

Magnus Sigurdsson reply.

El pianista era un jovencillo ruso que no debía superar los quince años, Magnus estaba seguro de eso. Era un niñito, aunque su mirada, sus expresiones y su habilidad para tocar el piano le hicieran ver como todo un hombre que había vivido años y años entregado a la música. El nombre de dicho pianista era 𝐕𝐥𝐚𝐝𝐢𝐦𝐢𝐫 𝐇𝐨𝐫𝐨𝐰𝐢𝐭𝐳 ¹, o eso decía en la orilla de las hojas de su cuaderno de partituras. No obstante, Magnus sentía una creciente necesidad de averiguar más sobre él; lo había estado observando desde el rincón del salón, con demasiada atención y fascinación, mientras pensaba en un millón de cosas en torno suyo (𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘱𝘰𝘳 𝘦𝘫𝘦𝘮𝘱𝘭𝘰, 𝘦𝘯 𝘭𝘢𝘴 𝘧𝘰𝘳𝘮𝘢𝘴 𝘥𝘦 𝘦𝘹𝘱𝘭𝘰𝘵𝘢𝘳 𝘦𝘭 𝘵𝘢𝘭𝘦𝘯𝘵𝘰, 𝘰 𝘥𝘦 𝘭𝘭𝘦𝘷𝘢𝘳𝘴𝘦𝘭𝘰 𝘢 𝘴𝘶 𝘱𝘳𝘰𝘱𝘪𝘰 𝘱𝘢𝘭𝘢𝘤𝘪𝘰), y así se había mantenido hasta que el movimiento de las puertas abriéndose le generó distracción.

«Gran duquesa» dijo una de las mujeres que, manteniendo una distancia razonable, estaba entre el séquito de doncellas que rodeaban al pianista. “𝑃𝑜𝑏𝑟𝑒 𝑝𝑖𝑎𝑛𝑖𝑠𝑡𝑎, no pudo evitar pensar Magnus después. «¿Está perdida?» prosiguió la doncella.

Magnus reconoció a la duquesa, no porque la doncella hubiera mencionado su título, sino porque era conocedor de la belleza rusa de la que se hablaba tan seguido. 𝐀𝐧𝐚𝐬𝐭𝐚𝐬𝐢𝐚 era motivo de cotilleo y de habladurías en cada evento social, y todo porque siempre generaba sospecha e intriga. Él no podía siquiera negar cuánto disfrutaba escuchar sobre todas las suposiciones que hacían de la duquesa porque no se dejaba ver en publico tan seguido, o al menos no antes de diciembre, tras haber “debutado” en sociedad. Además, Magnus también reconoció a la duquesa porque, si bien, antes había estado en los mismos lugares que ella (𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢 𝘴𝘦 𝘱𝘳𝘦𝘴𝘦𝘯𝘵𝘰́ 𝘧𝘰𝘳𝘮𝘢𝘭𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦, 𝘯𝘪 𝘴𝘦 𝘭𝘦 𝘢𝘤𝘦𝘳𝘤𝘰́), ahora sus intereses eran diferentes.

La doncella no dijo ni una palabra más, y nadie se vio distraído. Magnus agradeció el hecho de que guardaran silencio, porque él más que todos en esa sala sabía cuánto podía apreciar el joven Vladimir el silencio a excepción de las notas musicales. Sin embargo, su atención ya no se dispuso a regresar al pianista, sino a quedarse sobre la duquesa, misma que lo hizo preguntarse qué estaba haciendo ella ahí, y por qué.

En el gran auditorio del teatro ya había dado inicio la función de la noche, 𝐴 𝑀𝑖𝑑𝑠𝑢𝑚𝑚𝑒𝑟 𝑁𝑖𝑔𝘩𝑡'𝑠 𝐷𝑟𝑒𝑎𝑚 ², y si no estaba equivocado —y no lo estaba— todavía no habían transcurrido ni veinte minutos como para gozar de un tiempo para refrescarse. Él no había tenido la cortesía de entrar, pese a que estaban ofreciendo la función en su honor, pero ver a la duquesa ahí, definitivamente le otorgaba a ella la osadía de haberse salido a mitad de acto, a conciencia de que las miradas estaban sobre ella. Ese atrevimiento que parecía poseer, empujó a Magnus a salir del rincón para posicionarse a su lado, en todo tiempo viendo directo al piano.

—Duquesa —susurró con su voz gruesa y profunda. Su brazo se flexionó y su antebrazo quedó levantado de modo que su mano (𝘲𝘶𝘦 𝘱𝘰𝘳 𝘤𝘪𝘦𝘳𝘵𝘰, 𝘤𝘢𝘳𝘦𝘤𝘪́𝘢 𝘥𝘦 𝘨𝘶𝘢𝘯𝘵𝘦) se extendió hacia ella como una implícita invitación a que la tomara para guiarla fuera de ahí.

Con una inclinación de cabeza Magnus se disculpó con el resto de doncellas y dirigió a la duquesa hacia la salida del salón por las mismas puertas por donde había entrado hacía unos segundos.

Una vez que el sonido del piano —tanto como de la orquesta que provenía del auditorio— fue disminuido, Magnus se puso justo frente a la rubia y acercó su mano hacia sus labios, dejando un beso suave y casto sobre sus dedos.

—Creo que no nos conocemos —le dijo justo después, fijando sus ojos que en esa noche brillaban en un azul intenso, en los de ella—. Soy 𝐌𝐚𝐠𝐧𝐮𝐬 𝐒𝐢𝐠𝐮𝐫𝐝𝐬𝐬𝐨𝐧 —le sonrió, pero manteniendo aquel toque misterioso y enigmático en su expresión—. Me parece que no debe deambular sola por el teatro. Entiendo si realmente se perdió, pero su guardia, ¿dónde está?

Y pese a mostrar preocupación —una muy fingida, por cierto—, el príncipe Sigurdsson no pudo sentirse más suertudo esa noche por haberse encontrado con la duquesa, teniéndola para “él solo” con tal facilidad.

——— 𝟣. 𝖵𝗅𝖺𝖽𝗂́𝗆𝗂𝗋 𝖲𝖺𝗆𝗈́𝗂𝗅𝗈𝗏𝗂𝖼𝗁 𝖧𝗈́𝗋𝗈𝗐𝗂𝗍𝗓 𝖿𝗎𝖾 𝗎𝗇 𝗉𝗂𝖺𝗇𝗂𝗌𝗍𝖺 𝗒 𝖼𝗈𝗆𝗉𝗈𝗌𝗂𝗍𝗈𝗋 𝗋𝗎𝗌𝗈 𝗇𝖺𝖼𝗂𝗈𝗇𝖺𝗅𝗂𝗓𝖺𝖽𝗈 𝖾𝗌𝗍𝖺𝖽𝗈𝗎𝗇𝗂𝖽𝖾𝗇𝗌𝖾. 𝖲𝗎 𝗍𝖾́𝖼𝗇𝗂𝖼𝖺 𝗅𝖾𝗀𝖾𝗇𝖽𝖺𝗋𝗂𝖺 𝖽𝖾𝗌𝗍𝖺𝖼𝗈́ 𝗉𝗈𝗋 𝗅𝖺 𝖾𝗑𝖼𝗂𝗍𝖺𝖼𝗂𝗈́𝗇 𝖾𝗆𝗈𝖼𝗂𝗈𝗇𝖺𝗅 𝗒 𝗌𝗎 𝗋𝗂𝗊𝗎𝖾𝗓𝖺 𝗍𝗈𝗇𝖺𝗅, 𝖺𝖽𝖾𝗆𝖺́𝗌 𝖽𝖾 𝗌𝗎 𝗏𝗂𝗋𝗍𝗎𝗈𝗌𝗂𝗌𝗆𝗈 𝗂𝗇𝖼𝗋𝖾𝗂́𝖻𝗅𝖾 𝖾 𝗂𝗇𝖼𝖺𝗇𝖽𝖾𝗌𝖼𝖾𝗇𝗍𝖾 𝗒 𝗉𝗈𝗋 𝗌𝗎 𝗀𝗋𝖺𝗇 𝗂𝗇𝗏𝖾𝗇𝗍𝗂𝗏𝖺 𝗉𝗂𝖺𝗇𝗂́𝗌𝗍𝗂𝖼𝖺.

𝟤. 𝖠 𝖬𝗂𝖽𝗌𝗎𝗆𝗆𝖾𝗋 𝖭𝗂𝗀𝗁𝗍'𝗌 𝖣𝗋𝖾𝖺𝗆 𝖾𝗌 𝗎𝗇𝖺 𝗈𝖻𝗋𝖺 𝖾𝗌𝖼𝗋𝗂𝗍𝖺 𝗉𝗈𝗋 𝖶𝗂𝗅𝗅𝗂𝖺𝗆 𝖲𝗁𝖺𝗄𝖾𝗌𝗉𝖾𝖺𝗋𝖾 𝖾𝗇 𝟣𝟧𝟫𝟧.

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𝐓𝐡𝐞 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞 𝐚𝐧𝐝 𝐡𝐢𝐬 𝐛𝐮𝐭𝐥𝐞𝐫.

𝖩𝗎𝗅𝗒 𝟣𝟩, 𝟣𝟪𝟥𝟢. 𝖫𝗈𝗇𝖽𝗈𝗇, 𝖤𝗇𝗀𝗅𝖺𝗇𝖽. 𝑅𝑒𝑎𝑑𝑖𝑛𝑔 𝑠𝑒𝑡𝑡𝑖𝑛𝑔.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝑇𝑜𝑐 𝑡𝑜𝑐 𝑡𝑜𝑐. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀La ruidosa, intensa y efusiva melodía que provenía del interior de la habitación a la que habían llamado opacó —más no silenció— el sonido del golpe de la puerta. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀En el interior de dicha habitación, justo en el centro de la sala, había un órgano de la época hecho de la más costosa y maciza madera, y lo acompañaba un banco de asiento de terciopelo rojo sobre el que Magnus Sigurdsson se encontraba sentado. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝑇𝑜𝑐 𝑡𝑜𝑐 𝑡𝑜𝑐, insistieron de nuevo. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Los dedos agiles, veloces y habilidosos del príncipe se movían sobre las teclas blancas y negras del instrumento, y con las puntas de sus zapatos pisaba los pedales del mismo, según lo requería. Sobre las teclas se encontraba el atril en donde un libro de partituras estaba abierto; las orillas de las hojas poseían un tono amarillento, todavía más oscuro que el color hueso del papel y, además, llevaba abierto en las mismas páginas más de tres días, pues Magnus ni siquiera las necesitaba; de hecho, muy probablemente, ni siquiera se trataban de las partituras de la melodía que estaba tocando en esa hora. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝑇𝑜𝑐 𝑡𝑜𝑐..., el golpe se paró en seco. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El par de puertas se abrieron de improvisto y el mayordomo se asomó por la hendidura creada, permaneciendo con sus manos enguantadas sobre las manijas de ambas puertas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Majestad —habló en voz alta, deseando llamar la atención de su amo. ⠀ ⠀

⠀⠀⠀⠀⠀⠀Magnus ni siquiera levantó la mirada. De hecho, no se distrajo en ningún momento de su actividad, tocando con una exagerada entrega, pese a saber que el lacayo lo miraba fijamente. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀ Tenía su mente, sus sentidos y todo su esfuerzo concentrado en tocar. De hecho, era tanto su frenesí que tenía la espalda un poco encorvada al estar ensimismado sobre el piano y su rostro estaba tan cerca de las teclas que podía sentir su respiración como un roce sobre sus dedos danzarines. Era evidente que estaba muy ocupado y que por ningún motivo quería ser interrumpido. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Ese momento era su momento; su tiempo; su golpe de inspiración; la manera en la que su ser interno le hablaba. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Pero el mayordomo, que sentía confianza con el príncipe, se dejó ver desesperado y exasperado. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Lord Moulin está en la entrada, joven Sigurdsson. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝘑𝘰𝘷𝘦𝘯 𝘚𝘪𝘨𝘶𝘳𝘥𝘴𝘴𝘰𝘯; la mente de Magnus se dividió entre las notas de los acordes, y la atención hacia el mayordomo al que se 𝘢𝘵𝘳𝘦𝘷𝘪𝘰́ ¹  a mirar —aunque sin levantar la cabeza— ante tal osadía, pues aquel le llamaba siempre por sus títulos, y lo trataba con respeto, a menos que la paciencia lo tuviera colmado. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Y claro que estaba colmado, pues el mayordomo odiaba la música y Magnus llevaba horas dándole vueltas a la misma composición: en primera, porque su alma lo exigía; y en segunda, definitivamente porque le divertía mucho hacer llegar al mayordomo a esos extremos, brindando con su malhumorada reacción que el príncipe deseara seguir haciendolo. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El mayordomo tensó la mandíbula y Magnus pudo jurar que vio de reojo cómo agarró con más fuerza las manijas de las puertas, esperando una respuesta. Literalmente, sólo una respuesta, porque no había más que una respuesta posible, y esa debía ser positiva en todos los aspectos posibles. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Que se vaya —le contestó al cabo de segundos, con simplicidad, y no lo volteó a ver de nuevo. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El mayordomo abrió sus ojos más de lo normal, indispuesto a decirle “váyase” al vampiro Moulin —o a un vampiro cualquiera—, pues él no era más que un hombre ordinario y los viejos dioses bien sabían que quería seguir viviendo. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀A Magnus se le hizo aún más divertido reconocer y oler el temor del mayordomo a causa del vampiro, que de él mismo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Trabajas para lord Moulin ahora? —le preguntó en voz alta, sobre la música, con el mismo tono juguetón, pero con un atisbo de desafío. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El mayordomo no encontró ninguna gracia en la pregunta, y menos en la insinuación. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Él insiste. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El príncipe lo volvió a mirar y, con los ojos bien abiertos, dejando ver un intenso verde en sus pupilas, dijo como si fuera muy obvio y estuvieran perdiendo el tiempo: ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Muy bien, entonces que no se vaya. ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El mayordomo asintió, satisfecho, cerrando las puertas tras desaparecer, y Magnus continuó tocando con energía.

——— 𝟣. 𝖲𝖾 𝖽𝗂𝖼𝖾 "𝖺𝗍𝗋𝖾𝗏𝗂𝗈́" 𝖺𝗅 𝗁𝖾𝖼𝗁𝗈 𝖽𝖾 𝗊𝗎𝖾 𝖬𝖺𝗀𝗇𝗎𝗌 𝗁𝖺𝗒𝖺𝗌𝖾 𝖽𝖾𝖼𝗂𝖽𝗂𝖽𝗈 𝖺𝗉𝖺𝗋𝗍𝖺𝗋 𝗅𝖺 𝗆𝗂𝗋𝖺𝖽𝖺 𝖽𝖾 𝗅𝖺𝗌 𝗍𝖾𝖼𝗅𝖺𝗌 𝖽𝖾𝗅 𝗉𝗂𝖺𝗇𝗈 𝗒 𝖽𝖾 𝗌𝗎𝗌 𝗉𝗋𝗈𝗉𝗂𝗈𝗌 𝖽𝖾𝖽𝗈𝗌, 𝗉𝖺𝗋𝖺 𝗆𝗂𝗋𝖺𝗋 𝖺𝗅 𝗆𝖺𝗒𝗈𝗋𝖽𝗈𝗆𝗈. 𝖸 𝗇𝗈 "𝖺𝗍𝗋𝖾𝗏𝗂𝗈́" 𝗉𝗈𝗋 𝖿𝖺𝗅𝗍𝖺 𝖽𝖾 𝗏𝖺𝗅𝗈𝗋.

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#kennoah

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Historia de Lilith.

26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. 28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.

En el génesis, durante el sexto día de la Creación, Dios creó al hombre y a la mujer y les puso por nombre Adán, que significa varón, y Lilith, que significa aliento. Sin embargo, Lilith cometió dos transgresiones tan terribles que le valieron su expulsión no sólo del Paraíso, sino de la historia oficial de la humanidad: su nombre fue borrado de la Biblia, dando pie a un futuro donde nunca existió.

En los primeros tiempos, Adán estaba entusiasmado con ella, pues la veía como una mujer que representaba todo un desafío. Pero después se cansó de tener que reflexionar, negociar y llegar a acuerdos en los que en ocasiones —según él— salía perdiendo.

—Adán, déjame estar encima de ti —Lilith le pidió en cierta ocasión (no siendo ésta la primera vez) mientras mantenían relaciones sexuales. Como lo era —casi— siempre, ella permaneció recostada en el césped, viéndolo a la cara—. No es justo que tú seas el único que pueda sentir placer. Ahora es mi turno, sabes lo que quiero y de lo que tengo ganas.

No era la primera ni la última vez que Lilith lo pedía, pues se resistía a reconocer a Adán como superior, pero sí era la sexta vez consecutiva en la Adán se lo negaba. Fue por esa época que él se tomó muy en serio el “dominen sobre los peces del mar, las aves del cielo y a todos los seres vivientes que se muevan en la tierra”, comenzando a infligir su dominio sobre su mujer.

—No puedo permitirlo —le contestó, pensando en que Lilith se estaba volviendo muy demandante—. Tu lugar pertenece abajo mío. Fuiste diseñada para amarme desde esa posición.

Esas diferencias que surgían cada vez más pasaron en convertirse en constantes discusiones en donde él se imponía y ella se interponía, pues Adán se rehusaba a ceder el mando y su gobierno ante las exigencias de Lilith, y especialmente, se rehusaba a desobedecer el mandato que Dios le había dado.

Lilith era hermosa, vital, inquieta, inquisitiva, libre, y no disimulaba su risa cuando Adán, un poco torpe, sufría inocentes accidentes al caer de los árboles, hacía gestos exagerados tras comer algo que no era de su completo agrado, o provocaba que los animales lo persiguieran en los prados y laderas. Ante cada suceso, Lilith siempre lo miraba con diversión y burla, y eso atribuía al enojo y frustración de Adán.

¿Cómo se puede reír de mí? Estoy hecho a imagen y semejanza de Dios, y Dios es perfecto, Dios todo lo hace bien. Si se burla de mí, ¡se burla de Dios! pensaba.

Cansado, hastiado y desanimado de no poder mantener relaciones sexuales con Lilith sin que tuvieran que discutir en cada ocasión, Adán externó su sentir a Dios, suplicándole por algo de ayuda ya que se encontraba desesperado, así que Dios decidió visitar a Lilith cuando ésta se encontraba apartada de su compañero, paseando entre los árboles de granadas en el huerto.

—Lilith, ¿por qué tratas a tu marido de esa forma? —le preguntó.

—¿Tratarlo como, Señor? —ella también preguntó.

—Despreciando su amor, Lilith. Has generado en él emociones que lo mantienen desanimado y en soledad. Eres su ayuda idónea; una mujer diseñada para hacerle compañía, respétalo, amarlo y honrarlo.

—Pero Dios, lo único que yo le pido es que me deje estar sobre él algunas veces. ¿Por qué debo estar siempre abajo?

—Porque tú eres su mujer, y él es tu cabeza.

—Tengo mi propia cabeza, Padre.

—Debes someterte a tu marido, Lilith —Dios le advirtió—. Yo te lo he ordenado para que sea esta la forma en la que lo honres, así como le he ordenado a él ser tu abrigo, tu protector y tu proveedor, siendo esa la forma en la que él debe honrarte a ti. Adán es un buen muchacho, tan sólo mira qué paciencia te tiene, es momento de que comiences a obedecerlo.

—¡¿Obedecerlo?! —Lilith se sintió menospreciada—. ¿Someterme a ese “buen muchacho”? —Entre más lo pensaba, más se enfurecía—. No lo haré, Dios. Adán y yo somos iguales, fuimos creados del mismo barro, por tus mismas manos, así que deberíamos poder hacer lo mismo. No me siento y no soy inferior, ni débil, ni dependiente; soy una mujer integra y como tal, quiero gozar, como Adán, de la vida y de todo lo que ésta implica, incluidos la sexualidad y el erotismo.

—Eres hija mía, creación mía. Te amo y sólo quiero lo que es bueno para ti, y esto es bueno para ti, Lilith. Pero no puedo permitir que siga tu desobediencia.

—¡¿Desobediencia?!

—Le diré a Adán que te de un tiempo, pero en unos días volveremos a hablar tú y yo, y me dirás tu postura.

Dios cumplió con su parte, le brindó a Lilith algunos días de calma, pero aun así era difícil ignorar los lloriqueos de Adán, así que, cansada de la situación, Lilith se dijo a sí misma que el Paraíso no tenía nada de maravilloso, y decidió abandonarlo sin sentir pizca de remordimiento o culpa alguna, pues el pecado todavía no existía.

Evidentemente, no había lugar ahí para dos iguales, así que ella prefirió su libertad antes que someterse y renunciar a sí misma, así fuera a vivir en una caverna, pues eso era mil veces mejor que la vida en un Paraíso que la obligaba a callar su propio deseo.

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𝗡𝗲𝘄𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗼𝗺𝗯𝘀 (𝗌𝖾𝖼𝗈𝗇𝖽 𝗉𝖺𝗋𝗍).

ㅤ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝗞𝗮𝗶𝗮 𝗢𝗰𝗮𝘀𝗶𝗼 dejó de observar por la ventanilla del taxi en el que iba montada, y posó la vista en la pantalla de su dispositivo móvil para revisar el mapa —𝘢𝘶𝘯𝘲𝘶𝘦 𝘤𝘰𝘯𝘰𝘤𝘪́𝘢 𝘣𝘪𝘦𝘯 𝘭𝘢 𝘳𝘶𝘵𝘢. Según la aplicación, estaba a dos minutos de su destino; ¿su destino? 𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿 𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿𝘏𝘢𝘣𝘭𝘢𝘴𝘵𝘦 𝘤𝘰𝘯 𝘦́𝘭? —le preguntó 𝗩𝗶𝘁𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮 𝗩𝗮𝗿𝘀𝗮𝗼𝘂𝗱, su mejor amiga, quien estaba del otro lado de la línea telefónica. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—No, todavía no. Ya casi, estoy llegando —respondió Kaia. ⠀ Era inevitable que la conversación llegara a esa pregunta porque, a fin de cuentas, ella debía aprovechar el viaje que le había surgido a Estados Unidos para, así, cerrar 𝒆𝒔𝒆 asunto del que Vittoria hacía alusión. Lo cierto era, sin embargo, que contactar a Trevor se había vuelto casi imposible, y aun más a través de la distancia, orillándola a recurrir a una visita física para que, de una vez por todas, pudiera darle la inevitable noticia: estaba embarazada, y el bebé era suyo. Y, si bien, visitar a Trevor no era el motivo ni la razón principal de su estadía en New York, sí era, definitivamente, una forma en la que el universo le estaba diciendo que hiciera las cosas bien; que Trevor tenía derecho de saber que sería padre, y pretender huir de esa realidad no era sensato, ni correcto; ni siquiera cuando Trevor no tenía ni la menor idea de lo que le deparaba en el futuro. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Ya llegué —le avisó a Vittoria—. Te llamo después para contarte todo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝘝𝘢, 𝘣𝘦𝘣𝘦́. 𝘊𝘶𝘪́𝘥𝘢𝘵𝘦. ⠀ Kaia le pagó al taxi, se bajó del auto y se adentró al ya conocido 𝐹𝑟𝑎𝑛𝑘’𝑠 𝐵𝑎𝑟 donde hacía gigs en las noches de música en vivo desde hacía algunos años. En una de esas noches, justamente, conoció a Trevor, quien por mero gusto y placer se sentaba en la barra del bar o en una mesa con sus amigos, y se ponía a beber. Desde entonces era uno de los lugares recurrentes de ambos; ahí y así empezó su amistad. ⠀ Kaia sabía que hoy Trevor se encontraba en el bar porque 𝗘𝗹𝗹𝗲, la mesera, había compartido esa información con ella. Lamentablemente Elle no había podido hacer más por Kaia, porque 𝗙𝗿𝗮𝗻𝗸, su jefe y el dueño del bar, había comenzado a creer que le gustaba Trevor, y Elle sabía que, si seguía insistiendo, no habría forma de negarlo; aunque claro, a Elle no le gustaba Trevor, al menos no hasta donde Kaia sabía. ⠀ Ya que era la última noche de Kaia hasta dentro de tres semanas, ella tenía que tomar una decisión: hablar, o aplazar la noticia hasta verse obligada a dar la información; y claro, debía tomar en cuenta que, de aplazarlo, volvería a batallar para encontrar a Trevor, quedándole como último recurso contactar a 𝗝𝗮𝗺𝗲𝘀, el hermano mayor de éste (𝘤𝘰𝘯 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘯 𝘯𝘰 𝘵𝘦𝘯𝘪́𝘢 𝘶𝘯𝘢 𝘣𝘶𝘦𝘯𝘢 𝘳𝘦𝘭𝘢𝘤𝘪𝘰́𝘯 𝘯𝘪 𝘦𝘭𝘭𝘢, 𝘯𝘪 𝘛𝘳𝘦𝘷𝘰𝘳, 𝘺 𝘳𝘦𝘢𝘭𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘯𝘢𝘥𝘪𝘦). ⠀

La puerta del bar se abrió dándole la 𝗯𝗶𝗲𝗻𝘃𝗲𝗻𝗶𝗱𝗮 𝗮 𝘂𝗻𝗮 𝗽𝗲𝗰𝗮𝗱𝗼𝗿𝗮 más. 𝐹𝑟𝑎𝑛𝑘’𝑠 𝐵𝑎𝑟 estaba concurrido para tratarse de un domingo a las diez de la noche, sin embargo, Kaia no tuvo dificultad alguna para ubicar a Trevor en las mesas; para ella, él sobresalía un poco del resto de personas, especialmente por ser una cara muy conocida, aunque no se acercó a él de buenas a primeras, pues, de repente, experimentó una oleada de nerviosismo que creyó superado desde que aceptó que sería madre. En cambio, lo que hizo fue escabullirse hacia la barra, saludó a Frank, después a Elle, quien estaba rellenando tarros de cerveza, y le pidió a la segunda un vaso con agua para relajarse un poco. Una conversación superficial sobre la vida, y entonces se puso de pie de una vez por todas: decidida, se abrió paso entre las mesas y personas, y se mentalizó con que debía terminar con 𝒆𝒔𝒐 ya. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ——— 𝖳𝗂𝗍𝗅𝖾: 𝗡𝗲𝘄𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗼𝗺𝗯𝘀 (𝗌𝖾𝖼𝗈𝗇𝖽 𝗉𝖺𝗋𝗍). 𝖣𝖺𝗍𝖾: 𝗙𝗲𝗯𝗿𝘂𝗮𝗿𝘆 𝟮𝟲, 𝟮𝟬𝟮𝟯. 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸, 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸. 𝖯𝗋𝖾𝗏𝗂𝗈𝗎𝗌 𝗉𝖺𝗋𝗍. | 𝖭𝖾𝗑𝗍 𝗉𝖺𝗋𝗍. 𝖬𝗎𝗌𝖾: #𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 𝖮𝗍𝗁𝖾𝗋 𝖼𝗁𝖺𝗋𝖺𝖼𝗍𝖾𝗋𝗌: #𝗝𝗮𝗺𝗲𝘀𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 𝖢𝗁𝗋𝗈𝗇𝗈𝗅𝗈𝗀𝗒: 𝗟𝗶𝘃𝗲 𝗮𝗻𝗱 𝗹𝗲𝘁 𝗹𝗶𝘃𝗲. 𝖶𝗋𝗂𝗍𝗍𝖾𝗇 𝖻𝗒 Kaia Ocasio. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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𝗡𝗲𝘄𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗼𝗺𝗯𝘀 (𝖿𝗂𝗋𝗌𝗍 𝗉𝖺𝗋𝗍).

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⠀ ⠀ ⠀ Leer las enormes letras en color rojo neón, que decían 𝗕𝗔𝗥, hizo sentir a 𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿 𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 como en casa. Él conocía ese bar desde hace muchísimos años, y era uno de sus lugares favoritos para pasar el rato cuando estaba en la isla de Manhattan. En el interior del bar, justo en el lobby de la entrada, había un nuevo letrero colgado en la pared, mismo que hizo al hombre sonreír con un aire de diversión: ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝕊𝕀ℕℕ𝔼ℝ𝕊 ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ 𝕎𝔼𝕃ℂ𝕆𝕄𝔼 ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿En serio, 𝗙𝗿𝗮𝗻𝗸? —le preguntó al dueño del bar, un señor que rondaba los cincuenta años, y que —𝘢𝘶𝘯𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘰 𝘦𝘳𝘢 𝘷𝘪𝘦𝘫𝘰— ya tenía el cabello blanco (𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘢𝘭 𝘮𝘦𝘯𝘰𝘴 𝘵𝘦𝘯𝘪́𝘢 𝘤𝘢𝘣𝘦𝘭𝘭𝘰). ⠀ Frank, quien estaba detrás de la barra de bebidas, alzó la mirada y, sin dejar de hacer lo que estaba haciendo (𝘴𝘦𝘤𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘷𝘢𝘴𝘰𝘴 𝘤𝘰𝘯 𝘶𝘯 𝘵𝘳𝘢𝘱𝘰 𝘣𝘭𝘢𝘯𝘤𝘰), sonrió alegremente siguiendo la dirección del pulgar de Trevor que apuntaba hacia el letrero. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Qué? —contestó, volviendo a sonreír—. ¿No te gusta que te den la bienvenida a un lugar que te llama justo como lo que eres? —le preguntó con el afán de molestarlo. Trevor no pudo evitar reírse del comentario, pero no tenía nada para decir, pues esa definitivamente era una verdad: era un pecador, pero ¿quién no? ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Hace mucho que no te veía por aquí, Parker —dijo después—. ¿Qué te trae a la ciudad? Trevor se sentó en uno de los taburetes libres y con un asentimiento de cabeza agradeció que Frank le extendiera una cerveza. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Cortesía de la casa. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Negocios, entre otras cosas —dijo Trevor, después le dio un sorbo a la cerveza—. No estaré mucho, quizá un par de días antes de volver a la ruta que me lleva al otro lado del país. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Tu hermano estuvo aquí ayer. ⠀ Trevor frunció el ceño y ladeó la cabeza. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿James? —preguntó, con evidente sorpresa, aunque muy extrañado. ⠀ 𝗝𝗮𝗺𝗲𝘀 𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 era el hermano mayor de Trevor, y, a decir verdad, 𝐹𝑟𝑎𝑛𝑘’𝑠 𝐵𝑎𝑟 no era el tipo de lugares que él frecuentara, o al menos hasta donde él lo conocía, lo que no era mucho, pues tenían muy mala relación. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Max —dijo Frank. ⠀ Aquello fue todavía más raro para Trevor, quien seguía con las cejas juntas y la frente arrugada. 𝗠𝗮𝘅𝘄𝗲𝗹𝗹 𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 era su hermano menor, y tampoco frecuentaba lugares como 𝐹𝑟𝑎𝑛𝑘’𝑠 𝐵𝑎𝑟, a menos que fuera para pedir trabajo, pero ya que Trevor no lo veía por ningún lado… ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Seguro que era Max? ⠀ Frank alzó la vista, ligeramente ofendido, pero con el gesto cómico. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Estoy viejo, pero no estoy ciego. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Lo siento, Frank, pero es que hasta donde sabía, Max estaba en algún lugar de Nevada. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Quizá te estaba buscando, o a tu otro hermano. ⠀ Trevor se quedó reflexivo y volvió a beber de la cerveza que le habían regalado, pensando en Maxwell. ⠀ Ninguno de los hermanos Parker lo habían tenido fácil en la vida, pero definitivamente Max era el que más había llegado a sufrir las consecuencias de la muerte de una madre, y el desinterés de un padre. Era muy posible que el menor de los hermanos estuviera en algún problema, y se encontrara en New York buscando a James, porque eso debía ser, James podía brindarle apoyo económico, o cualquier tipo de apoyo en realidad, más que Trevor. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Por cierto —Frank irrumpió sus pensamientos—, ¿te acuerdas de Elle? —Con un movimiento de cabeza, Frank la señaló. Trevor se volvió para mirar a la mesera que estaba trabajando en las mesas del fondo. Tenía los cabellos rojos, y un uniforme muy sugerente. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Ha estado preguntando por ti desde hace días, con mucha insistencia. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Qué querrá? ⠀ Frank rio como si la pregunta fuera muy tonta, y la respuesta muy clara. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Tu número. Creo que le gustas. ⠀ Trevor dejó de mirarla, se levantó tranquilamente del taburete, y dejó la botella vacía sobre la barra. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Espero que no se lo hayas dado. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—No, pero más vale que hagas algo al respecto, porque si me lo vuelve a pedir, se lo voy a dar —amenazó a Trevor. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—También me da mucho gusto verte, Frankie. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¡Ah! —El dueño del bar llamó la atención de Trevor antes de que éste se alejara del todo, en dirección a una mesa en el fondo del bar—. Elle está atendiendo tu mesa, por cierto. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ——— 𝖳𝗂𝗍𝗅𝖾: 𝗡𝗲𝘄𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗼𝗺𝗯𝘀 (𝖿𝗂𝗋𝗌𝗍 𝗉𝖺𝗋𝗍). 𝖣𝖺𝗍𝖾: 𝗙𝗲𝗯𝗿𝘂𝗮𝗿𝘆 𝟮𝟲, 𝟮𝟬𝟮𝟯. 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸, 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸. 𝖭𝖾𝗑𝗍 𝗉𝖺𝗋𝗍. 𝖬𝗎𝗌𝖾: #𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 𝖮𝗍𝗁𝖾𝗋 𝖼𝗁𝖺𝗋𝖺𝖼𝗍𝖾𝗋𝗌: #𝗠𝗮𝘅𝘄𝗲𝗹𝗹𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 #𝗝𝗮𝗺𝗲𝘀𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 𝖢𝗁𝗋𝗈𝗇𝗈𝗅𝗈𝗀𝗒: 𝗟𝗶𝘃𝗲 𝗮𝗻𝗱 𝗹𝗲𝘁 𝗹𝗶𝘃𝗲. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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ㅤ ⠀ ⠀ 𝐁𝐑𝐀𝐇𝐀𝐌 𝐉𝐎𝐍𝐄𝐒. Born on March 2, 1964 (20 years old) in London, England. Lives in Lancaster, England. Enneagram type 8w7. 𝗣𝗮𝗿𝘁-𝘁𝗶𝗺𝗲 𝘄𝗼𝗿𝗸𝗲𝗿 𝗶𝗻 𝗮 𝘀𝘂𝗽𝗲𝗿𝗺𝗮𝗿𝗸𝗲𝘁; 𝗮𝘀𝗽𝗶𝗿𝗶𝗻𝗴 𝗺𝘂𝘀𝗶𝗰𝗮𝗹 𝗮𝗿𝘁𝗶𝘀𝘁 𝗶𝗻 𝘁𝗵𝗲 𝗽𝗿𝗶𝘃𝗮𝗰𝘆 𝗼𝗳 𝗵𝗶𝘀 𝗯𝗲𝗱𝗿𝗼𝗼𝗺. ⠀ ⠀ ⠀ La familia Jones, compuesta por un matrimonio que se dedica a la caza de tesoros y a la arqueología, decide mudarse a la vieja residencia que había pertenecido desde generaciones atrás a la familia Jones, ubicada a las afueras de Lancaster, Inglaterra. La residencia, que lleva el nombre de Jones Manor, ha estado deshabitada durante mucho tiempo debido a todos los rumores que afirmaban que la casa se encontraba embrujada, para el matrimonio Jones no son más que viejos cuentos... Cierta noche, los miembros más vulnerables y jovenes (es decir, los hijos del señor y la señora Jones: Braham, Jayden y Ellie) empiezan a ser victimas de las misteriosas entidades que habitan en los terrenos familiares. ⠀ ⠀ ⠀ • Father — Joseph Jones [---] 41 / available. • Mother — Emma Jones [---] 38 years old / available. • Sister — Ellie Jones [---] 17 years old / available. • Brother — Jayden Jones [Finn Wolfhard] / Milus. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝖨𝗇𝖿𝗈𝗋𝗆𝖺𝖼𝗂𝗈́𝗇 𝗋𝖾𝗌𝗎𝗆𝗂𝖽𝖺 𝗒 𝗉𝗋𝗈𝗏𝗂𝖼𝗂𝗈𝗇𝖺𝗅. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝖯𝗋𝗈́𝗑𝗂𝗆𝖺𝗆𝖾𝗇𝗍𝖾 𝖾𝖽𝗂𝖼𝗂𝗈́𝗇 𝖾𝗑𝗍𝖾𝗇𝖽𝗂𝖽𝖺. ⠀ ⠀ ㅤ

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ㅤ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 📂⠀𝗧𝗥𝗘𝗩𝗢𝗥⠀𝗣𝗔𝗥𝗞𝗘𝗥. 𝗉̵𝗋̵𝗈̵𝖿̵𝗂̵𝗅̵𝖾̵ | 𝖽̵𝖾̵𝗌̵𝖼̵𝗋̵𝗂̵𝗉̵𝗍̵𝗂̵𝗈̵𝗇̵ | 𝗋̵𝖾̵𝗅̵𝖺̵𝗍̵𝗂̵𝗈̵𝗇̵𝗌̵𝗁̵𝗂̵𝗉̵𝗌̵ | 𝗋̵𝖾̵𝖼̵𝗈̵𝗋̵𝖽̵ | 𝖽̵𝖾̵𝗍̵𝖺̵𝗂̵𝗅̵𝗌̵ | 𝗇̵𝗈̵𝗍̵𝖾̵𝗌̵. ⠀⠀¹⠀⠀⠀⠀⠀⠀²⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀³⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⁴⠀⠀⠀⠀⠀⁵⠀⠀⠀⠀⠀⁶ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝗣𝗥𝗢𝗙𝗜𝗟𝗘⠀/⠀𝖽̵𝖾̵𝗌̵𝖼̵𝗋̵𝗂̵𝖻̵𝖾̵ 𝗂̵𝗇̵ 𝖺̵ 𝗌̵𝗁̵𝗈̵𝗋̵𝗍̵ 𝖺̵𝗋̵𝗍̵𝗂̵𝖼̵𝗅̵𝖾̵. ˑ¹ ——————————————————————————— ⠀ ⠀ Full name: 𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿 𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿. Nickname(s): 𝗧, 𝗧𝗿𝗲𝘃. Birthdate: 𝗔𝘂𝗴𝘂𝘀𝘁 𝟬𝟳, 𝟭𝟵𝟵𝟭. Place of birth: 𝗠𝗮𝗻𝗵𝗮𝘁𝘁𝗮𝗻, 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸. Place of residence: 𝗕𝗿𝗼𝗼𝗸𝗹𝘆𝗻, 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸. Occupation: 𝗦𝘁𝗿𝗲𝗲𝘁 𝗿𝗮𝗰𝗲𝗿 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗮𝗿𝘁𝗲𝗻𝗱𝗲𝗿. Civil status: 𝗦𝗶𝗻𝗴𝗹𝗲. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝗗𝗘𝗦𝗖𝗥𝗜𝗣𝗧𝗜𝗢𝗡⠀/⠀𝗋̵𝖾̵𝗉̵𝗋̵𝖾̵𝗌̵𝖾̵𝗇̵𝗍̵𝖺̵𝗍̵𝗂̵𝗈̵𝗇̵ 𝗈̵𝗋̵ 𝖺̵𝖼̵𝖼̵𝗈̵𝗎̵𝗇̵𝗍̵ 𝗈̵𝖿̵ 𝖺̵ 𝗉̵𝖾̵𝗋̵𝗌̵𝗈̵𝗇̵. ˑ² ——————————————————————————— ⠀ ⠀ Nationality: 𝗔𝗺𝗲𝗿𝗶𝗰𝗮𝗻. Citizenship: 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸𝗲𝗿. Gender: 𝗠𝗮𝗹𝗲. Height: 𝟭.𝟴𝟬 𝗺𝘁𝘀. Eye color: 𝗚𝗿𝗲𝗲𝗻. Hair color: 𝗕𝗿𝗼𝘄𝗻. Enneagram type: 𝟵𝘄𝟴. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝗥𝗘𝗟𝗔𝗧𝗜𝗢𝗡𝗦𝗛𝗜𝗣𝗦⠀/⠀𝗍̵𝗁̵𝖾̵ 𝗌̵𝗍̵𝖺̵𝗍̵𝖾̵ 𝗈̵𝖿̵ 𝖻̵𝖾̵𝗂̵𝗇̵𝗀̵ 𝖼̵𝗈̵𝗇̵𝗇̵𝖾̵𝖼̵𝗍̵𝖾̵𝖽̵. ˑ³ ——————————————————————————— ⠀ ⠀ 𝕠⠀𝗝𝗮𝗺𝗲𝘀 𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿. C36 years old / NPC. ⠀⠀⠀𝗘𝗲𝗹𝗱𝗲𝘀𝘁 𝗯𝗿𝗼𝘁𝗵𝗲𝗿. 𝕠⠀ 𝗞𝗮𝗶𝗮 𝗢𝗰𝗮𝘀𝗶𝗼. 25 years old / Kaia Ocasio. ⠀⠀⠀𝗙𝗿𝗶𝗲𝗻𝗱, 𝗼𝗰𝗰𝗮𝘀𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹 𝗹𝗼𝘃𝗲𝗿, 𝗺𝗼𝘁𝗵𝗲𝗿 𝗼𝗳 𝗵𝗶𝘀 𝗳𝘂𝘁𝘂𝗿𝗲 𝗰𝗵𝗶𝗹𝗱. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝗥𝗘𝗖𝗢𝗥𝗗⠀/⠀𝗉̵𝗂̵𝖾̵𝖼̵𝖾̵ 𝗈̵𝖿̵ 𝖾̵𝗏̵𝗂̵𝖽̵𝖾̵𝗇̵𝖼̵𝖾̵ 𝖺̵𝖻̵𝗈̵𝗎̵𝗍̵ 𝗍̵𝗁̵𝖾̵ 𝗉̵𝖺̵𝗌̵𝗍̵. ˑ⁴ ——————————————————————————— ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor es un hombre que no ha tenido la vida nada sencilla: sus padres fallecieron cuando él tenía doce años, y junto con su hermano mayor, James, entra en el sistema de adopción, pasando por diferentes hogares temporales durante su adolescencia. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Cuando su hermano alcanza la mayoría de edad, no duda en abandonar el sistema y encargarse de sí mismo, velando por sus intereses y objetivos. A Trevor se le hace saber que en cuanto su hermano consiga un empleo o un lugar dónde vivir, éste podría pedir su coustodia y le sería concedida, pero James nunca lo hace, y, de hecho, deja de procurar a su hermano. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor sufre a raíz del abandono, y cuando él llega a la mayoría de edad, lo primero que hace es ir a buscar a su hermano, pero su relación nunca vuelve a ser igual. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Obligado por la vida, Trevor Parker busca un empleo para sobrevivir, y así es como llega a su actualidad, siendo un hombre que vive de las apuestas y de la mala fortuna de otros. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝗗𝗘𝗧𝗔𝗜𝗟𝗦⠀/⠀𝖺̵𝗇̵ 𝗂̵𝗇̵𝖽̵𝗂̵𝗏̵𝗂̵𝖽̵𝗎̵𝖺̵𝗅̵ 𝖿̵𝖾̵𝖺̵𝗍̵𝗎̵𝗋̵𝖾̵, 𝖿̵𝖺̵𝖼̵𝗍̵, 𝗈̵𝗋̵ 𝗂̵𝗍̵𝖾̵𝗆̵. ˑ⁵ ——————————————————————————— ⠀ ⠀ •⠀El nombre del bar en el que Trevor trabaja es "The Black Rock".⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝗡𝗢𝗧𝗘𝗦⠀/⠀𝖺̵ 𝖻̵𝗋̵𝗂̵𝖾̵𝖿̵ 𝗋̵𝖾̵𝖼̵𝗈̵𝗋̵𝖽̵ 𝗈̵𝖿̵ 𝖿̵𝖺̵𝖼̵𝗍̵𝗌̵, 𝗍̵𝗈̵𝗉̵𝗂̵𝖼̵𝗌̵, 𝗈̵𝗋̵ 𝗍̵𝗁̵𝗈̵𝗎̵𝗀̵𝗁̵𝗍̵𝗌̵. ˑ⁶ ——————————————————————————— ⠀ ⠀ Face claim: 𝗔𝗮𝗿𝗼𝗻 𝗧𝗮𝘆𝗹𝗼𝗿-𝗝𝗼𝗵𝗻𝘀𝗼𝗻. Hashtag/code: #𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 Chronology: (pendiente). ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 📁 ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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Maxwell Anderson

MAXWELL ANDERSON.

FB CODE: #𝖬𝖠𝖷𝖠𝖭𝖣𝖤𝖱𝖲𝖮𝖭

Maxwell “Max” Daniel “Dan” Anderson. Born on june 25, 2000 (22 y.), in London, England. Lives in Monterey, California. Ocupatión: Photographer. Zodiac sign: cancer. Enneagram type: 7. Marital status: single. SN: @𝚖𝚊𝚡𝚠𝚎𝚕𝚕𝟸𝟶𝟶𝟶

⠀●⠀ FEATURES AND CHARACTERISTICS

Mide 1.80 metros de altura, tiene ojos color hazel, y cabello lacio.

Espontaneo, positivo e hiperactivo.Por su hiperactividad siempre transmite alegría, felicidad y buen humor aunque en su interior no sea así.

Aprecia la libertad tanto en su vida propia, como en la de la gente que lo rodea. Social. Extrovertido.Tiende a la dispersión. Emprendedor entusiasta. De mente rápida y ágil. Se caracteriza por la búsqueda del placer compulsivo e inmediato, ya sea en forma de experiencias y actividades, de fiestas, de conocer nuevas personas, o desarrollar excitantes motivaciones. Le cuesta comprometerse, especialmente en pareja, y cuando lo hace es curioso y le gusta explorar todos los terrenos al máximo y pasárselo bien evitando una vida excesivamente rutinaria.

En su peor momento puede reflejar ira, y una exigencia constante en sí mismo. En su mejor momento puede ser alguien con una mayor sobriedad, independencia y observación que los demás.

Amante del café, obsesionado con la fotografía, adicto al basketball y apasionado por el diseño mobiliario.

⠀●⠀ABOUT HIM

Su padre, David Anderson, fue un famoso jugador de fútbol, actualmente retirado, que dedica su tiempo de jubilación a vivir como un digno millonario en Monterey, California, junto con su esposa, Victoria Anderson (Órleans de soltera), una famosa diseñadora de modas de alta costura que sigue ejerciendo.

Maxwell nació en el seno de una familia estable en todos los sentidos, y fue el primogénito entre cuatro hermanos: Ross, Charlie y Helen por debajo.

Aunque nació en Londres, su familia se mudó a Vancouver, British Columbia, cuando él tenía 12 años, en el 2012.

Conoció a Maeve Betancourt en las vacaciones de primavera del 2017, e inició una relación amorosa con ella en octubre de ese mismo año.

A principios de Enero del 2018, Maeve le confesó que le estaba siendo infiel, y la relación terminó, cortando él todo tipo de contacto con ella cuanto pudo. Como consecuencia, Maxwell sufrió algo de depresión, y su personalidad se vio muy afectada.

Se graduó de la secundaria en mayo del 2018 y pese a la constante presión de su padre por hacerlo asistir a Harvard u Oxford, Max no aplicó a ninguna universidad ya que no tenía claro que quería hacer con su vida.

Tras graduarse, Maxwell se fue a Londres junto con su mejor amigo, Scott Willingham, para hacer un famoso viaje de “mochilazo”.

Los Anderson se mudaron en Marzo del 2020 a la ciudad de Monterey, California, en Estados Unidos.

Maxwell, junto con Scott, abrió una cafetería ubicada sobre uno de los muelles, sobre el mar.

⠀￨⠀𝖬𝗈𝗋𝖾 𝖽𝖾𝗍𝖺𝗂𝗅𝖾𝖽 𝗂𝗇𝖿𝗈𝗋𝗆𝖺𝗍𝗂𝗈𝗇, 𝖺𝗇𝖽 𝗀𝖺𝗉𝗌 𝗂𝗇 𝗍𝗁𝖾 𝗌𝗍𝗈𝗋𝗒, 𝗐𝗂𝗅𝗅 𝖻𝖾 𝗍𝗈𝗅𝖽 𝗍𝗁𝗋𝗈𝗎𝗀𝗁 𝗐𝗋𝗂𝗍𝗂𝗇𝗀.

●⠀ RELATIONSHIPS

David Anderson — 𝑓𝑎𝑡ℎ𝑒𝑟. [David Beckham].

Victoria Anderson — 𝑚𝑜𝑡ℎ𝑒𝑟. [Victoria Beckham].

Ross Anderson — 𝑏𝑟𝑜𝑡ℎ𝑒𝑟. [Romeo Beckham].

Charlie Anderson — 𝑏𝑟𝑜𝑡ℎ𝑒𝑟. [Cruz Beckham].

Helen Anderson  — 𝑠𝑖𝑠𝑡𝑒𝑟. [Harper Beckham].

Maeve Betancour — 𝑒𝑥𝑔𝑖𝑟𝑙𝑓𝑟𝑖𝑒𝑛𝑑 [Nicola Peltz].

Scott Willingham — 𝑏𝑒𝑠𝑡 𝑓𝑟𝑖𝑒𝑛𝑑.

Imogen Wallace — 𝑓𝑟𝑖𝑒𝑛𝑑. [Sydney Sweeney].

⠀●⠀ LINKS

Chronology.

Universe U01.

—— 𝘛𝘩𝘪𝘴 𝘤𝘩𝘢𝘳𝘢𝘤𝘵𝘦𝘳 𝘪𝘴 𝘰𝘳𝘪𝘨𝘪𝘯𝘢𝘭. 𝘈𝘴𝘴𝘰𝘤𝘪𝘢𝘵𝘦𝘥 𝘸𝘳𝘪𝘵𝘪𝘯𝘨𝘴 𝘮𝘢𝘺 𝘤𝘰𝘯𝘵𝘢𝘪𝘯 𝘛𝘞, 𝘥𝘪𝘴𝘤𝘳𝘦𝘵𝘪𝘰𝘯 𝘳𝘦𝘲𝘶𝘦𝘴𝘵𝘦𝘥. 𝘈𝘷𝘢𝘪𝘭𝘢𝘣𝘪𝘭𝘪𝘵𝘺 𝘵𝘰 𝘸𝘳𝘪𝘵𝘦 𝘢𝘯𝘥 𝘳𝘦𝘭𝘢𝘵𝘦 𝘴𝘵𝘰𝘳𝘪𝘦𝘴. ——

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ 𝗙://𝗺𝗼𝗼𝗻𝘀𝗵𝗮𝗱𝗼𝘄.𝘁𝘅𝘁 𝑏𝑦 𝑁ø𝑘𝑘𝑒𝑛.

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𝐌𝐀𝐆𝐍𝐔𝐒𝒱𝐸𝑅𝒮𝐸

ㅤ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀Una vez, en una noche de invierno, frente a una chimenea en una bonita mansión en un pueblo de Inglaterra, me preguntaron cuál era la 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐝𝐞 𝐦𝐢 𝐯𝐢𝐝𝐚, y yo amablemente se las conté. Puesto que la noche apenas comenzaba y nadie tenía prisa por irse, no escatimé en detalles. Comprendía bien una cosa: 𝘦𝘭𝘭𝘰𝘴 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘣𝘢𝘯 𝘱𝘳𝘦𝘱𝘢𝘳𝘢𝘥𝘰𝘴 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘭𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘦𝘴 𝘥𝘪𝘳𝘪́𝘢, 𝒑͟𝒆͟𝒓͟𝒐͟ 𝒚͟𝒐͟ 𝒔͟𝒊́ 𝒆͟𝒔͟𝒕͟𝒂͟𝒃͟𝒂͟ 𝒑͟𝒓͟𝒆͟𝒑͟𝒂͟𝒓͟𝒂͟𝒅͟𝒐͟ 𝒑͟𝒂͟𝒓͟𝒂͟ 𝒄͟𝒐͟𝒎͟𝒑͟𝒂͟𝒓͟𝒕͟𝒊͟𝒓͟𝒍͟𝒐͟. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀"𝙉𝙤, 𝙥𝙚𝙧𝙤 𝙚𝙣 𝙨𝙚𝙧𝙞𝙤, ¿𝙦𝙪𝙞𝙚́𝙣 𝙚𝙨 𝙈𝙖𝙜𝙣𝙪𝙨 𝙎𝙞𝙜𝙪𝙧𝙙𝙨𝙨𝙤𝙣?" cuestionaron después, cuando hube terminado y los troncos en el fuego se volvieron ceniza, y las flamas parecían prontas a extinguirse. ⠀ ⠀⠀⠀Ese grupo de hombres y mujeres aristocraticos me habían escuchado durante más de dos horas, y habían permanecido expectantes, emocionados, interesados. Sus suspiros, sus jadeos, sus exclamaciones de alivio y suspenso, y el brillo en sus ojos, nada de eso podía falsificarse: mi voz los había engatuzado, mis historias los habían hipnotizado, todo al nivel de no recibir interrupción alguna hasta haber llegado a narrar mi actualidad: un joven sentado en una cálida sala, contando la historia de su vida. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀"𝙀́𝙨𝙖 𝙚𝙨 𝙢𝙞 𝙫𝙚𝙧𝙙𝙖𝙙𝙚𝙧𝙖 𝙝𝙞𝙨𝙩𝙤𝙧𝙞𝙖, 𝙮 𝙚́𝙨𝙚 𝙨𝙤𝙮 𝙮𝙤" les dije con bastante firmeza. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀"𝙏𝙞𝙚𝙣𝙚𝙨 𝙪𝙣𝙖 𝙢𝙚𝙣𝙩𝙚 𝙞𝙣𝙘𝙧𝙚𝙞́𝙗𝙡𝙚, 𝙈𝙖𝙜𝙣𝙪𝙨. 𝙉𝙞 𝙝𝙖𝙗𝙡𝙖𝙧 𝙙𝙚 𝙩𝙪 𝙞𝙢𝙖𝙜𝙞𝙣𝙖𝙘𝙞𝙤́𝙣 𝙮 𝙩𝙪 𝙝𝙖𝙗𝙞𝙡𝙞𝙙𝙖𝙙 𝙫𝙚𝙧𝙗𝙖𝙡. 𝙏𝙪 𝙫𝙞𝙙𝙖 𝙚𝙨 𝙪𝙣 𝙢𝙞𝙨𝙩𝙚𝙧𝙞𝙤, 𝙪𝙣𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙨𝙚 𝙫𝙪𝙚𝙡𝙫𝙚 𝙘𝙖𝙙𝙖 𝙫𝙚𝙯 𝙢𝙖́𝙨 𝙙𝙚𝙡𝙞𝙘𝙞𝙤𝙨𝙤 𝙘𝙪𝙖𝙣𝙩𝙤 𝙢𝙖́𝙨 𝙡𝙤 𝙤𝙘𝙪𝙡𝙩𝙖𝙨. 𝘿𝙚𝙗𝙚𝙧𝙞́𝙖𝙨 𝙚𝙨𝙘𝙧𝙞𝙗𝙞𝙧 𝙪𝙣 𝙡𝙞𝙗𝙧𝙤 𝙨𝙤𝙗𝙧𝙚 𝙚𝙨𝙖𝙨 𝙝𝙞𝙨𝙩𝙤𝙧𝙞𝙖𝙨 𝙩𝙪𝙮𝙖𝙨, 𝙚𝙡 𝙢𝙪𝙣𝙙𝙤 𝙩𝙚 𝙡𝙤 𝙖𝙜𝙧𝙖𝙙𝙚𝙘𝙚𝙧𝙞́𝙖". ⠀⠀⠀⠀⠀⠀"𝙏𝙖𝙡𝙚𝙣𝙩𝙤, 𝙢𝙪𝙘𝙝𝙖𝙘𝙝𝙤: 𝙩𝙞𝙚𝙣𝙚𝙨 𝙙𝙚 𝙨𝙤𝙗𝙧𝙖". ⠀⠀⠀⠀⠀⠀"𝙎𝙤́𝙡𝙤 𝙨𝙚́ 𝙦𝙪𝙚 𝙣𝙚𝙘𝙚𝙨𝙞𝙩𝙤 𝙢𝙖́𝙨 𝙙𝙚 𝙚𝙨𝙤". ⠀ ⠀⠀⠀No me creyeron, asumí con una sonrisa misteriosa, y no los culpé porque quizá tampoco yo me hubiera creído. Un escritor comprimido puede narrar una mentira con la misma convicción que la verdad, provocandote emociones y compasión, y no por el afán de mentir, sino por el afán de llevarte a indagar en tu mar emocional; eso le apasiona a los escritores y narradores, las reacciones del público. ⠀ ⠀⠀⠀No les dije nada más esa noche, dejandolos ir a dormir convencidos de que no era más que un joven con mucha imaginación. ¿𝐿𝑜 𝑒𝑟𝑎? ⠀ ⠀⠀⠀Mi comprensión seguía siendo tan correcta como al principio, y mis intenciones también, así que tiempo después decidí seguir el consejo que esos buenos amigos me habían dado: escribir un libro. Escribí varios libros, cuentos, historias. 𝐄𝐬𝐜𝐫𝐢𝐛𝐢́ 𝐦𝐢 𝐯𝐢𝐝𝐚, desde el comienzo hasta el momento antes de decidir escribir un libro, y se lo di a conocer al mundo sin creer que eso me llevaría a donde estoy ahora. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀𝐌𝐀𝐆𝐍𝐔𝐒 𝐒𝐈𝐆𝐔𝐑𝐃𝐒𝐒𝐎𝐍. /@mgnssgrdssn. ⠀⠀⠀⠀Bd. October 23, 1991. Et. 8. Zs. Scorpio. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀B. 𝐋𝐨𝐧𝐝𝐨𝐧, 𝐄𝐧𝐠𝐥𝐚𝐧𝐝. — L. London, England. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀W͟r͟i͟t͟e͟r. 𝐴𝑛𝑑 𝑎 ℎ𝑜𝑠𝑡 𝑜𝑓 𝑜𝑡ℎ𝑒𝑟 𝑡ℎ𝑖𝑛𝑔𝑠. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝑆ℎ𝑎𝑙𝑙 𝑤𝑒 𝑤𝑟𝑖𝑡𝑒 𝑡𝑜𝑔𝑒𝑡ℎ𝑒𝑟?⠀⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ 𝐌𝐀𝐆𝐍𝐔𝐒𝒱𝐸𝑅𝒮𝐸/. Cada álbum llevará el título de la historia a desarrollarse (como si fuera un libro) y contendrá a una versión del personaje principal, 𝐌𝐚𝐠𝐧𝐮𝐬 𝐒𝐢𝐠𝐮𝐫𝐝𝐬𝐬𝐨𝐧, adaptada a la época. 𝘓𝘰𝘴 𝘔𝘢𝘨𝘯𝘶𝘴 𝘥𝘦 𝘵𝘰𝘥𝘰𝘴 𝘭𝘰𝘴 𝘶𝘯𝘪𝘷𝘦𝘳𝘴𝘰𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘢́𝘯 𝘥𝘪𝘴𝘱𝘰𝘯𝘪𝘣𝘭𝘦𝘴 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘳𝘰𝘭𝘦𝘢𝘳, 𝘦𝘯𝘭𝘢𝘻𝘢𝘳 𝘵𝘳𝘢𝘮𝘢𝘴, 𝘰 𝘴𝘪𝘮𝘱𝘭𝘦𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘥𝘪𝘴𝘧𝘳𝘶𝘵𝘢𝘳 𝘦𝘯 𝘭𝘦𝘤𝘵𝘶𝘳𝘢. También habrán otros personajes, aparte de Magnus y sus variantes, disponibles para roles, conversaciones, enlazar tramas, etc. [ver en el segundo comentario]. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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Mosaic of ancestors.

ㅤ ⠀ ⠀ Boston, Massachusetts. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Abuelo Linus, ¿estás bien? —preguntó el pequeño Acker con un tono de voz entristecido. ⠀⠀⠀El niño estaba sentado en el borde de la esquina de la cama de la habitación, viendo como su abuelo pasaba los extremos de la corbata que se había puesto alrededor del cuello por un lado y por otro. Acker no había pasado por alto la expresión que dominaba en el rostro avejentado de su abuelo: estaba disperso, pensativo, y el brillo en su mirada estaba ausente, sin embargo sí le estaba poniendo algo de atención. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Sí —contestó Linus Sigurdsson con suavidad—. Estoy bien, hijo. ¿Tú cómo estás? —Le lanzó una mirada a través del espejo, interesado en conocer la reacción y la respuesta del niño ante la pregunta. Para Linus, y para cualquiera, no era un secreto que Acker había terminado afectado tras la muerte de Viktor Sigurdsson hacía un día. ⠀⠀⠀Acker bajó la mirada hasta el suelo y se encogió de hombros guardando silencio. Lo cierto era que no sabía cómo estaba, y a sus cinco años, mucho menos sabía cómo explicarlo. Sus pies se mecieron desganados, rozando con las puntas de sus zapatos recién lustrados el piso. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Hey...—Linus terminó de formar el nudo y se dio media vuelta para acercarse hasta la cama. Sus manos se apoyaron sobre los delgados y pequeños muslos de las piernas de su nieto, y él se puso de cuclillas en el intento de igualar su tamaño al verlo a los ojos con ese profundo amor y ternura que Acker le provocaba—. Es difícil, lo sé, pero Viktor jamás habría querido que lo recordaras con esa tristeza de tus ojos, Acker. ⠀⠀⠀Acker levantó la mirada muy apenas. Sus ojos se habían cristalizado y las lagrimas se contenían en el borde de los mismos. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—No estoy triste porque lo esté recordando —susurró sin dejar de sonar sensible y respetuoso—. Estoy triste porque no lo voy a volver a ver. Era mi mejor amigo. ⠀⠀⠀Acker se lanzó a los brazos de su abuelo sin pensarlo, y le rodeó el cuello escondiendo su cabeza entre el espacio hueco que sus brazos dejaron contra la garganta de Linus. Linus le rodeó el cuerpo y lo estrechó contra su pecho, y pronto le acarició la espalda brindandole el consuelo que necesitaba. Las lagrimas de Acker no se contuvieron ni un segundo más, pero debía ser la quinta o sexta vez que lloraba en un lapso de 20 horas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Está bien, amor. Tienes todo el derecho, yo también lo voy a extrañar, y yo también estoy triste por su ausencia. ⠀⠀⠀Pero lamentablemente Linus no podía decir más. ⠀ ⠀⠀⠀Linus Sigurdsson amaba a su padre, siempre lo amó, y siempre lo amaría, sin embargo su relación con él nunca fue tan buena o tan cercana como la que su nieto Acker, o incluso como la que su hijo Magnus habían creado con él. 𝐋𝐚𝐬 𝐜𝐨𝐬𝐚𝐬 𝐡𝐚𝐛𝐢́𝐚𝐧 𝐬𝐢𝐝𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐩𝐥𝐢𝐜𝐚𝐝𝐚𝐬; 𝐡𝐚𝐛𝐢́𝐚𝐧 𝐬𝐢𝐝𝐨 𝐨𝐭𝐫𝐨𝐬 𝐭𝐢𝐞𝐦𝐩𝐨𝐬. Cuando Acker se tranquilizó un poco y aflojó el abrazo al que se había aferrado, Linus le besó la mejilla y la frente, y se puso de pie nuevamente, pero se quedó mirando hacia un punto fijo en las paredes de la habitación. No podía dejar de pensar en que Acker acababa de decir que su bisabuelo había sido su mejor amigo. No podía dejar de pensar en que su propio padre se había robado todo el amor y el afecto de su hijo y de su nieto, y la peor parte, no podía culparlo porque él siempre había puesto sus barreras. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀«𝑇𝑎𝑙 𝑣𝑒𝑧... 𝑇𝑎𝑙 𝑣𝑒𝑧 𝑎𝑢𝑛 𝑛𝑜 𝑒𝑠 𝑑𝑒𝑚𝑎𝑠𝑖𝑎𝑑𝑜 𝑡𝑎𝑟𝑑𝑒» pensó. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Grandpa —la vocecita del pequeño Acker se oyó una vez más. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Sí? —Linus, sin ser del todo conciente, había vuelto a poner las manos en el nudo de su corbata y se la estaba ajustando, pero su mirada seguía perdida en sus pensamientos. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿𝑺𝒆𝒓𝒂́𝒔 𝒎𝒊 𝒏𝒖𝒆𝒗𝒐 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒐?—preguntó esperanzado. ⠀⠀⠀Linus alzó las comisuras de sus labios involuntariamente, y sonrió con la mirada sintiendo un calor en el pecho; un sentimiento de seguridad, de familiaridad, de amor. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Sí, campeón. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Lo olvidaré? Al abuelo Viktor... ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—No, claro que no. No lo olvidarás, ni lo reemplazarás. Yo seré tu nuevo mejor amigo e intentaré ser tan grandioso como él, pero nunca seré él. ⠀⠀⠀«𝑁𝑢𝑛𝑐𝑎 𝑛𝑎𝑑𝑖𝑒 𝑠𝑒𝑟𝑎́ 𝑒́𝑙». ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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NEWS AND BOMBS 3.

ㅤ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Lenguas en duelo, labios uniéndose. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Las manos inquietas de Kaia acariciaron el torso desnudo y fornido del hombre, delineando los músculos tensos del pecho y del abdomen, hasta que finalmente terminó por rodearle el cuello y acariciar parte de su espalda con cierta desesperación. Quiso cerrar las piernas, negarle el paso hasta su coño si no le permitía chupársela un rato más; si no le permitía retirar con la lengua los restos de semen que quedaron en su verga, mezclado a su saliva, pero Trevor tenía otros planes. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Con la mano derecha, Trevor tomó su verga, demasiado dura y demasiado dispuesta, para haber acabado de eyacular, y posicionó su glande en la entrada resbalosa del coñito de Kaia. Interrumpió el beso para bajar la mirada y ver lo que hacía: presionó su erección entre sus pliegues, tras haber corrido el diminuto hilo de sus bragas hacia un lado, deslizó el pene por toda su vulva, y finalmente la penetró de una estocada, sin aguardar a que su cuerpo se adaptara, entrando con facilidad al ir bañado de su semen y de la saliva de ella. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia apenas pudo procesarlo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¡𝗖𝗮𝗯𝗿𝗼́𝗻! –gimió de forma audible, en su lengua materna, sin poder contenerlo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor la había penetrado de una estocada, abriéndose pasó en su interior con cierta brusquedad —incluso con la buena lubricación—, pero no le dio tiempo de adaptarse al grosor de su verga, por lo que experimentó un golpe doloroso —aunque delicioso— al recibirlo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Ese descuido, esa hambre animal que les nublaba la mente era la responsable del embarazo. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor la comenzó a follar con fuerza, moviendo su cadera de atrás hacia adelante con un movimiento rápido, profundo, e inclinó el torso hacia adelante para pegarse a Kaia, volviendo a tomar uno de sus pezones entre los dientes, dejando que el otro rebotara contra su cara en cada penetración. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Estaba frenético. Desesperado. Nunca la había deseado tanto, y podía notarse. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia le clavó las uñas en la espalda, se presionó contra su cuerpo y se contrajo al levantar la pelvis contra el hombre en un intento inconsciente de no poner ninguna distancia entre sus sexos. Extasiada, se aferró al castaño. Sentía el calor quemarle desde dentro, la excitación agolparse en oleadas de placer directamente en el vientre bajo. Disfrutó de la calidez de su boca contra el pezón sensible. No se veían desde diciembre, era evidente que iban a follar de esa forma tan necesitada. Se movió contra Trevor, apoyó la cabeza en su hombro y así mismo enterró los dientes en su carne para ahogar los sonidos repetitivos de su garganta. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗣𝘂𝘁𝗮 𝗺𝗮𝗱𝗿𝗲, ¡𝗮𝘀𝗶́! —gimoteó. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Entonces alguien tocó la puerta con insistencia. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia guardó silencio de repente, y ante un nuevo golpeteo, soltó una risilla. Trevor clavó la mirada en los ojos oscuros de Kaia, casi pudiendo ver el reflejo de sí mismo en ellos, y en esa complicidad la dejó a cargo de darle una respuesta a la mujer que insistía desde el otro lado de la puerta. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜𝘀 𝗼𝗰𝗰𝘂𝗽𝗶𝗲𝗱!—gritó, enterrándole las uñas a Trevor ahora en la espalda baja como advertencia de que no podía parar—. 𝗛𝗮𝗿𝗱𝗲𝗿, 𝗜 𝗰𝗮𝗻 𝘁𝗮𝗸𝗲 𝗶𝘁 —pidió en un susurro directamente en su oreja. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El susurro caliente y anhelante de Kaia en su oído fue otro motivo para seguir follando en ese baño, dispuesto a recibir el regaño que le daría Frank al terminar todo aquello, pues no era la primera vez que lo hacía, y no sería la primera vez que el dueño del bar le reclamaría por darle esa reputación a sus sanitarios. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor inclinó la cabeza hacia abajo y rozó sus labios en el hombro desnudo de la joven. Con la nariz rozó su piel, aspirando su aroma tan familiar y delicioso, y siguió hasta hundir el rostro en su cuello, comenzando a besarla con succiones que seguro al día siguiente dejarían sus huellas violáceas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗞𝗲𝗲𝗽 𝗺𝗼𝗮𝗻𝗶𝗻𝗴 𝗳𝗼𝗿 𝗺𝗲, 𝗹𝗶𝘁𝘁𝗹𝗲 𝘀𝗹𝘂𝘁—le pidió, enronquecido. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El hombre colocó ambas manos en el trasero femenino, bajo la tela del vestido que estaba corrugado en su cintura, y estrujó sus glúteos amansándolos con fuerza. Sus palmas palparon sus nalgas perfectamente y enseguida las presionó para que su cuerpo se recorriera más hacia el borde y él pudiera arremeter mejor. Gemidos profundos escapaban de su boca, contra el oído de Kaia, cada vez que su glande llegaba a tocar su punto G y su cuerpo entero experimentaba esa ola eléctrica viajando por sus venas. Cuando su cadera empujaba hacia atrás, deslizando gran parte de su polla hacia afuera, no podía evitar pellizcarle el trasero ante la desesperación y el placer que le recorría por las sensaciones en su frenillo. El sonido dominando el cuarto del baño era el de sus pelvis chocando; el de sus testículos rebotando contra el comienzo de sus glúteos cada que se clavaba entero en su vagina; el de las respiraciones agitadas y el del chasquido que hacían las tetas de Ocasio entre sí. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor salía de ella con la verga brillando por la mezcla de sus fluidos, y aunque Kaia intentaba mantenerse lo más callada que podía, no le era posible. Estaba ahogada en la desesperación, su cuerpo pedía a gritos un orgasmo que la mujer se regaló sin dudar: coló la diestra entre sus cuerpos, dos dedos directamente en su clítoris. Acarició la zona hinchada por la excitación, estimulando con movimientos circulares, rápidos, que, en conjunto a las embestidas rudas y profundas, la empujaron al éxtasis. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀La puerta volvió a tocar. Era la misma chica de hacía minutos. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor, exasperado, levantó la cabeza y la giró en esa dirección: ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗙𝘂𝗰𝗸 𝗼𝗳𝗳, 𝘄𝗼𝗺𝗮𝗻. 𝗪𝗲 𝗮𝗿𝗲 𝗶𝗻 𝗺𝗶𝗱𝗱𝗹𝗲 𝗼𝗳 𝘀𝗼𝗺𝗲𝘁𝗵𝗶𝗻𝗴 𝗵𝗲𝗿𝗲 —le gritó, con una voz que delataba que estaba en pleno acto sexual. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia se contrajo debido a los espasmos, todos los músculos de su cuerpo tensándose y aligerándose, trató de cerrar las piernas, pero de todas formas un par de gotas cayeron de su vagina. Por si fuese poco, de su garganta escapó un gemido elevado, que se mezcló a la voz masculina al intentar ahuyentar a la mujer fuera del baño. Aunque no pretendía hacer aquello, sí eso no le dejaba claro las razones por las que no podría entrar, entonces nada más lo haría. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Al volver su atención a Kaia, Parker le sonrió con diversión y dejó de moverse poco a poco, pero permaneció dentro de ella. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗧𝘂𝗿𝗻 𝗮𝗿𝗼𝘂𝗻𝗱, 𝗯𝗲𝗮𝘂𝘁𝘆; 𝗜 𝘄𝗮𝗻𝘁 𝘁𝗼 𝘀𝗲𝗲 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗽𝗲𝗿𝗳𝗲𝗰𝘁 𝗹𝗶𝘁𝘁𝗹𝗲 𝗮𝘀𝘀 𝘄𝗵𝗶𝗹𝗲 𝗜 𝗳𝘂𝗰𝗸 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗷𝘂𝗶𝗰𝘆 𝗽𝘂𝘀𝘀𝘆, 𝗮𝗻𝗱 𝘆𝗼𝘂 𝗺𝗼𝗮𝗻 𝗺𝘆 𝗻𝗮𝗺𝗲, 𝗹𝗼𝗼𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗮𝘁 𝗺𝗲 𝗶𝗻 𝘁𝗵𝗲 𝗳𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗺𝗶𝗿𝗿𝗼𝗿. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Dio medio paso atrás, su verga se deslizó hacia afuera y aguardó por el movimiento de Kaia, mientras él se empezaba a masturbar con la diestra. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia temblaba ligeramente. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Se bajó del lavabo, levantó el vestido hasta la mitad de su cuerpo y le dio la espalda, inclinándose sobre la superficie lo suficiente para que su culo quedará alzado. En el espejo podía ver su expresión deseosa. Le abrió las piernas, contoneó las caderas y posicionó ambas manos en sus nalgas, separándolas en medio de un breve masaje para darle la vista perfecta de su coño desde aquella posición. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗧𝗵𝗶𝘀 𝗶𝘀 𝘄𝗵𝗮𝘁 𝘆𝗼𝘂 𝘄𝗮𝗻𝘁? ⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El hombre deslizó su pulgar sobre el contorno inferior de sus labios borrando el rastro de saliva que le quedó entre tantos besos. Su mirada ahora estaba clavada en el trasero empinado, puesto para él, y no pudo ver otra cosa que no fuera el pequeño culo como si le llamara a probarlo; y no sólo el culo, el coño mojado le hacía agua la boca. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor se soltó la verga y puso las manos justo donde Kaia tenía las suyas, corriéndolas para ser él quien mantuviera sus glúteos separados (ella apoyó sus manos sobre el lavabo). Flexionó las rodillas, se puso de cuclillas, y con las piernas femeninas unidas, acorraladas entre sus rodillas, no tardó en pegar el rostro en su trasero. Su lengua salió de la boca y se ensanchó al pegarse a su culo. Parker relamió la entrada del pequeño orificio cerrado y presionó con la punta de la lengua en un intento de penétratela. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia bajó la mirada y cerró con fuerza los ojos, entregándose a la cálida sensación que se expandía por su cuerpo ante la humedad de aquella lengua peligrosa en el pequeño orificio, que se dilató ligeramente ante el contacto. Entonces un nuevo gemido brotó de su garganta y el vaivén de sus caderas fue instantáneo en el intento de frotarse un poco más contra la boca ajena. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia apretó las manos en puños, arqueó la espalda con suavidad y tiró la diestra hacia atrás, colocándola en la cabeza de Trevor para mantener su cara enterrada entre sus piernas tanto como le fuese posible. Su clítoris se encontraba sensible, y todavía apenas perceptibles temblores atacaban sus piernas, pero era riquísimo.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿 —advirtió, tensándose ante la idea de que tuviese intención de penetrarla por detrás en ese instante, en ese sitio. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Antes de alejarse, Trevor le escupió sobre el ano, le separó las nalgas con más fuerza esperando que así su diminuta entrada se abriera un poco más para dejar entrar a su saliva, y después descendió hasta su coño, absorbió los fluidos que emanaban de él, y siguió cuesta abajo hasta que tuvo su clítoris en el interior de la boca. Trevor lo succionó, lo mamó y después le besó los labios mayores como si de su boca se tratara, dejando que su lengua se moviera libremente entre sus pliegues húmedos. Finalmente, poniéndose de pie, acomodó la verga deslizándose de vuelta al interior de su vagina. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗙𝘂𝗰𝗸, 𝗞𝗮𝗶𝗮; 𝘆𝗼𝘂 𝗵𝗮𝘃𝗲 𝗮 𝗯𝗲𝗮𝘂𝘁𝗶𝗳𝘂𝗹 𝗮𝘀𝘀. —La nalgueó con fuerza del lado izquierdo, y pronto empezó a follarla, empujándola contra el lavabo en cada estocada. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗟𝗼 𝘀𝗲́ —respondió en tono divertido al que siguió una breve risa que se apagó tan rápido como apareció, dando un respingo por la nalgada. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia se encontraba en un estado de desesperación difícil de describir, pero era imposible solo quedarse quieta y recibir lo que Trevor le daba, estocada tras estocada. Por eso, presionaba las nalgas contra su pelvis con cada impacto. Y aunque quería mantenerse lo más callada posible, no pudo, pues gemía por lo bajo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor la sujetó de la cadera y presionó sus pulgares sobre sus glúteos, aferrándose a ella mientras su pelvis marcaba un vaivén rápido y profundo. ��⠀⠀⠀⠀⠀—𝗗𝗼 𝘆𝗼𝘂 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝗺𝗲 𝗳𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝘆𝗼𝘂 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝘁𝗵𝗮𝘁, 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝘆𝗼𝘂'𝗿𝗲 𝗮 𝘀𝗹𝘂𝘁?—Le tomó del cabello y lo estiró para que su cuello se pronunciara. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Él le vio la cara a través del espejo, donde además podía disfrutar de la vista de sus tetas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Profundo, rápido, enloquecedor. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Ella le dedicó una sonrisa que era todo menos amable; cargada de malicia y complicidad compartida. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗠𝗲 𝗲𝗻𝗰𝗮𝗻𝘁𝗮 —respondió, encontrándose con sus ojos. Y no mentía, le ponía muchísimo que la llamara de esa forma mientras embestía contra ella.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗧𝗵𝗮𝘁 𝗶𝘀 𝘄𝗵𝗮𝘁 𝘆𝗼𝘂 𝗮𝗿𝗲; 𝗮 𝗱𝗶𝗿𝘁𝘆 𝗹𝗶𝘁𝘁𝗹𝗲 𝘀𝗹𝘂𝘁 𝘄𝗵𝗼 𝗹𝗶𝗸𝗲𝘀 𝘁𝗼 𝗴𝗲𝘁 𝗳𝘂𝗰𝗸𝗲𝗱 𝗶𝗻 𝘁𝗵𝗲 𝗯𝗮𝘁𝗵𝗿𝗼𝗼𝗺?—cuestionó con el tono autoritario y excitado. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¡𝗦𝗶́! —confirmó jadeante. Una fina capa de sudor le perlaba la piel y se le había corrido un poco el maquillaje de los ojos. La imagen en el espejo iba muy acorde con las palabras del castaño y que ella confirmaba: una zorra a la que le gustaba ser follada en el baño de un bar—. 𝗠𝗮𝗸𝗲 𝗺𝗲 𝗰𝘂𝗺 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝘁𝗵𝗲 𝘀𝗹𝘂𝘁 𝘁𝗵𝗮𝘁 𝗜 𝗮𝗺—pidió, a sabiendas de que estaba en realidad muy cerca de alcanzar un segundo orgasmo. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El hombre acabó inclinándose encima de ella de modo que, por la posición, las penetraciones se volvieron más profundas y exactas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Le dio otra nalgada, dejando que el glúteo rebotara contra su mano, y luego le acarició la espalda completa hasta colarse hacia el frente, cogiendo una de sus tetas. Entre sus dedos apretó su pezón, y comenzó a amasar el pecho entero sin dejar de embestirla. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El sudor le recorría la espalda, el pecho, las piernas. Estaba ardiendo. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗖𝗼𝗺𝗲 𝗼𝗻 𝗯𝗮𝗯𝗲, 𝗜 𝘄𝗮𝗻𝘁 𝘆𝗼𝘂 𝘁𝗼 𝗰𝘂𝗺 𝗼𝗻𝗲 𝗺𝗼𝗿𝗲 𝘁𝗶𝗺𝗲 𝗼𝗻 𝗺𝘆 𝗰𝗼𝗰𝗸. 𝗖𝘂𝗺 𝗳𝗼𝗿 𝗺𝗲. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El hombre gruñó desde lo profundo del pecho. Sujetó con más fuerza las caderas femeninas y enterró los pulgares en la carne de sus nalgas, ejerciendo presión para separarlos y permitir que ante su vista se lucieran el coño mojado que se comía su verga en cada estocada que propiciaba, y su pequeño culo que se dilataba un poco cada vez que su verga iba de salida, y se contraía cuando entraba. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Sin dejar de follarla, dejó caer un hilo de saliva en su trasero y el líquido transparente se deslizó en la línea que separaba sus glúteos, centrándose en su ano. Una fuerte nalgada vino después, y satisfecho de notar que había quedado la marca en su piel, Trevor se volvió a inclinar sobre el cuerpo femenino aplastándola —controladamente— contra la barra de los lavamanos. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Casi con obediencia, la mujer se entregó al placer y aunque el tiempo no era medido en esos instantes, pronto se vio sobrecogida por una oleada de calor extraordinaria en la que se tensaron y relajaron los músculos por la llegada del orgasmo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀ Kaia se irguió un poco, queriendo fundirse y huir de Trevor en partes iguales, presionando su cuerpo al de él, tirando un brazo hacia atrás y poniéndolo en uno de sus muslos, para apartarlo o sostenerse. Ni siquiera sabía. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Y cuando aquello cesó, se inclinó hacia delante, apoyándose del lavabo una vez más, el corazón palpitándole con desenfreno. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗗𝗮𝗺𝗻 —buscó su mirada en el espejo una vez más—. 𝗔𝘄𝗲𝘀𝗼𝗺𝗲 𝗯𝗶𝗿𝘁𝗵𝗱𝗮𝘆 𝗴𝗶𝗳𝘁. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜'𝗺 𝗴𝗹𝗮𝗱 𝘆𝗼𝘂 𝗹𝗶𝗸𝗲𝗱 𝗶𝘁—comentó contra su oído, rozándole con la barbilla el hombro, pero le sostuvo la mirada en el reflejo del espejo—, 𝗯𝗲𝗰𝗮𝘂𝘀𝗲 𝘁𝗵𝗲𝗿𝗲 𝗮𝗿𝗲 𝗻𝗼 𝗿𝗲𝘁𝘂𝗿𝗻𝘀 —le guiñó el ojo, luego le soltó una de las caderas para tomarle el cabello y hacerle la cabeza hacia atrás. Consiguió besarla en los labios, mordisqueando los de ella con un deseo que evidentemente no se saciaba, y terminó metiéndole la lengua en la boca, acallando cada sonido proveniente de su garganta mientras él no dejaba de cogerla. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀“...𝙗𝙚𝙘𝙖𝙪𝙨𝙚 𝙩𝙝𝙚𝙧𝙚 𝙖𝙧𝙚 𝙣𝙤 𝙧𝙚𝙩𝙪𝙧𝙣𝙨” Kaia quiso carcajearse ahí mismo, la ironía de las palabras considerando que todavía él no sabía el significado que tendrían, le parecieron demasiado graciosas y de no ser por cómo se encontraron sus bocas, se hubiese reído. En cambio, sus lenguas y labios se rozaron con hambre, con una necesidad latente. Jadeó contra su boca, extasiada. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀De pronto, Trevor detuvo el vaivén de su cadera, quedándose clavado en el interior de la vagina, y sintió cómo los muslos de sus piernas temblaron. Esa sensación desesperante, pero deliciosa, ascendió por sus ingles en cuestión de microsegundos, hasta repercutir en sus testículos, en su verga, en la glande, y en la pelvis; un espasmo que tensó completo el cuerpo del hombre y que lo obligó a dejar de besar a Kaia para sostener su peso con sus propias manos, mismas que se apoyaron a los costados de la mujer, sobre la barra. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia veía al hombre a través del espejo, con el labio inferior atrapado entre los dientes por cada golpe fuerte en su interior, pero encantada de ser testigo del placer apoderándose de sus facciones. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Él se volvió a mover contra ella, fuerte pero lento, hasta que en uno de los movimientos su miembro resbaló hacia afuera y se deslizó entre sus nalgas. Trevor enderezó la espalda, bajó la mirada hacia el punto de unión de sus cuerpos y, pellizcando el trasero de la morena, se vino tal y como prometió. El semen salió de su verga, impactando en la piel de su espalda baja, en su culo, y llenando su coño. El líquido se deslizó lentamente, como queriendo buscar la manera de entrar en ella, y Trevor soltó el aire que estaba conteniendo. ⠀

⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗢𝗵 𝗴𝗼𝗱, 𝗜 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗹𝘆 𝗺𝗶𝘀𝘀𝗲𝗱 𝘁𝗵𝗶𝘀 —admitió, y se pasó las manos por el rostro para remover algunas gotas de sudor—. 𝗬𝗼𝘂 𝗮𝗿𝗲 𝘀𝗼 𝗳𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗱𝗲𝗹𝗶𝗰𝗶𝗼𝘂𝘀, 𝗮𝗻𝗱 𝘀𝗹𝘂𝘁𝘁𝘆, 𝘂 𝗸𝗻𝗼𝘄 𝘁𝗵𝗮𝘁? —cuestionó, sonriente, pero agitado, y dejó caer la cabeza hacia atrás buscando reponerse poco a poco. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗬𝗲𝘀, 𝗜 𝗸𝗻𝗼𝘄 —contestó Kaia con una sonrisa dibujada en su rostro. Llevó los dedos hasta su boca, chupando la mezcla de fluidos en estos—. 𝗦𝗼 𝗮𝗿𝗲 𝘆𝗼𝘂 —concluyó, demasiado satisfecha. También lo había extrañado—. 𝗡𝗼𝘄 𝗹𝗼𝗼𝗸 𝗳𝗼𝗿 𝗽𝗮𝗽𝗲𝗿; 𝗰𝗹𝗲𝗮𝗻 𝗺𝗲 𝘂𝗽 𝗯𝗲𝗳𝗼𝗿𝗲 𝗙𝗿𝗮𝗻𝗸 𝗰𝗼𝗺𝗲𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗸𝗶𝗰𝗸𝘀 𝘂𝘀 𝗼𝘂𝘁—pidió, todavía inclinada sobre el lavabo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗔𝗵, 𝘆𝗲𝘀, 𝗼𝗳 𝗰𝗼𝘂𝗿𝘀𝗲: 𝗜 𝗴𝗲𝘁 𝘆𝗼𝘂 𝗱𝗶𝗿𝘁𝘆, 𝗜 𝗰𝗹𝗲𝗮𝗻 𝘆𝗼𝘂, 𝗿𝗶𝗴𝗵𝘁? —preguntó con el tono bromista mientras se sacudía la polla para quitarse los excesos, y luego tomaba una toalla del dispensador para pasarla por el tronco de su miembro, secándolo. Una vez seco, desechó la toallita y se metió la verga en el pantalón, acomodándose el bóxer antes de abrocharse. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗢𝗯𝘃𝗶𝗼𝘂𝘀. 𝗜𝗳 𝘆𝗼𝘂 𝘀𝘁𝗮𝗿𝘁 𝗶𝘁, 𝘆𝗼𝘂 𝗳𝗶𝗻𝗶𝘀𝗵 𝗶𝘁 —respondió con el mismo tono relajado. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia se quitó las bragas por completo, húmedas tras el encuentro, luego coló dos dedos entre los pliegues de su coño, recogiendo así un poco del líquido blanquecino. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Trevor se volvió a acercar a Kaia aprovechando que su culo seguía empinado, y presionó la palma de su mano contra su coño chorreante; con los dedos le volvió a masajear el clítoris con una lentitud intencional, y cuando se sintió mojado retiró la palma llevándola hasta la boca de la mujer. Junto con los dedos de ella, él le metió los suyos que también iban empapados, y sonrió al espejo al ver cómo ella se tragaba su semen. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗬𝗼𝘂 𝗮𝗿𝗲 𝗮 𝘃𝗲𝗿𝘆 𝗴𝗼𝗼𝗱 𝗴𝗶𝗿𝗹. 𝗔𝗻𝗱 𝗻𝗮𝘀𝘁𝘆 𝘁𝗼𝗼. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia dio un pequeño respingo ante el nuevo contacto. Sensible como se encontraba le tomó ligeramente desprevenida, pero le gustó. De sus labios escapó un suave suspiro, cerró incluso los ojos disfrutando aquellas lentas caricias que terminaron demasiado pronto. Buscó a Trevor en el espejo casi con reprimenda, sin embargo, recibió sus dedos en el interior de la boca muy a gusto. Lamió los restos de semen, succionando de forma sugerente y juguetona hasta que los dejó limpios, mojados solo por su saliva. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜 𝗮𝗺 —confirmó. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Finalmente, Trevor tomó un par de toallas y empezó a limpiarle la espalda, después las nalgas, y al final el culo y el coño lo mejor posible. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀— 𝗹𝗲𝘁'𝘀 𝗴𝗼 𝘁𝗼 𝗺𝘆 𝗹𝗼𝗳𝘁 —dijo después—. 𝗪𝗲 𝘁𝗮𝗸𝗲 𝗮 𝗯𝗮𝘁𝗵, 𝗯𝗲𝗰𝗮𝘂𝘀𝗲 𝘄𝗲 𝗰𝗹𝗲𝗮𝗿𝗹𝘆 𝗻𝗲𝗲𝗱 𝗶𝘁, 𝗮𝗻𝗱 𝘄𝗲 𝗵𝗮𝘃𝗲 𝘀𝗼𝗺𝗲𝘁𝗵𝗶𝗻𝗴 𝘁𝗼 𝗲𝗮𝘁, 𝗱𝗼 𝘆𝗼𝘂 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝘁𝗵𝗲 𝗶𝗱𝗲𝗮? ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El muchacho abrió el grifo para lavarse bien las manos, y aprovechó para enjuagarse la cara. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Kaia se lavó las manos. No tenía su pequeño bolso con ella, lo había dejado tras la barra con toda la confianza del mundo, así que no podía retocarse el maquillaje o limpiarse con las toallitas húmedas que siempre cargaba para emergencias, sino que hizo lo que pudo con las toallas de papel para limpiarse el sudor del rostro y el maquillaje corrido. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Quería orinar, pero no le atraía la idea de hacerlo allí, a pesar de todo. Entonces al terminar se bajó el vestido, acomodándolo de manera perfecta sobre sus curvas como si aquel desesperado encuentro no hubiese sucedido. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀Una vez lista, dio media vuelta para encarar a Trevor y besarlo por unos segundos, con más calma. Se aprovechó que tenía toda su atención en la unión de sus labios para meterle las bragas en el bolsillo derecho del pantalón, casi como un regalo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀— 𝗜 𝘁𝗵𝗶𝗻𝗸 𝗶𝘁'𝘀 𝗮 𝗴𝗼𝗼𝗱 𝗶𝗱𝗲𝗮. 𝗜'𝗺 𝗵𝘂𝗻𝗴𝗿𝘆 𝗮𝗻𝗱 𝗜 𝘄𝗮𝗻𝘁 𝘁𝗼 𝘂𝘀𝗲 𝘁𝗵𝗲 𝘁𝗼𝗶𝗹𝗲𝘁 —confesó alejándose hacia la puerta—. 𝗦𝗲𝗲 𝘆𝗼𝘂 𝗼𝘂𝘁𝘀𝗶𝗱𝗲 —musitó girando el pomo. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀La mujer que antes tocaba ya no estaba, por supuesto. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀No había nadie en el pasillo y se escabulló como si nada para buscar sus pertenencias e irse. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ——— 𝖳𝗂𝗍𝗅𝖾: 𝗡𝗲𝘄𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗼𝗺𝗯𝘀 (𝗍𝗁𝗂𝗋𝖽 𝗉𝖺𝗋𝗍). 𝖣𝖺𝗍𝖾: 𝗙𝗲𝗯𝗿𝘂𝗮𝗿𝘆 𝟮𝟲, 𝟮𝟬𝟮𝟯. 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸, 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸. 𝖯𝗋𝖾𝗏𝗂𝗈𝗎𝗌 𝗉𝖺𝗋𝗍 | 𝖭𝖾𝗑𝗍 𝗉𝖺𝗋𝗍. 𝖬𝗎𝗌𝖾: #𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 𝖢𝗁𝗋𝗈𝗇𝗈𝗅𝗈𝗀𝗒: 𝗟𝗶𝘃𝗲 𝗮𝗻𝗱 𝗹𝗲𝘁 𝗹𝗶𝘃𝗲 (𝗉𝖾𝗇𝖽𝗂𝗇𝗀 𝗅𝗂𝗇𝗄). 𝖢𝗈𝗅𝗅𝖺𝖻𝗈𝗋𝖺𝗍𝗂𝗈𝗇: Kaia Ocasio. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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NEWS AND BOMBS 2.

ㅤ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀El click del pestillo se oyó primero. Como segundo, el impacto del golpe de la espalda de Kaia al chocar contra la puerta en cuanto Trevor la arrinconó con su propio cuerpo y unió sus labios a los de ella, con una urgencia palpable. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia atrpó sus labios sin chistar, uniéndose en ese beso que no tardó en encenderla como gasolina, encontrándose presa de la misma urgncia que él. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor pudo sentir las caricias de Kaia por todos lados, descuidadas, desesperadas, pero él se concentró en besarla con viveza, sujetandole la cabeza con las dos manos mientras se le pegaba, haciendola sentir contra su vientre la erección que se le había formado bajo el bulto del pantalón. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia hizo la cabeza hacia atrás, buscando respirar, y Trevor aprovechó ese momento para inclinar el rostro hacia su cuello, aspirar el olor de su perfume, y colocar las manos en las caras traseras de sus muslos, alzándola del suelo. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia enganchó las piernas a la cintura de él, y los brazosa su cuello. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀— 𝗨 𝗵𝗮𝘃𝗲 𝗻𝗼 𝗳𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗶𝗱𝗲𝗮 𝗵𝗼𝘄 𝗺𝘂𝗰𝗵 𝗜 𝗻𝗲𝗲𝗱𝗲𝗱 𝘆𝗼𝘂, 𝗴𝗶𝗿𝗹 —dijo Trevor antes de morderla y estirarle el labio con fuerza—. 𝗖𝗮𝗻 𝘂 𝗳𝗲𝗲𝗹 𝗵𝗼𝘄 𝗵𝗮𝗿𝗱 𝘆𝗼𝘂 𝗽𝘂𝘁 𝗺𝘆 𝗱𝗶𝗰𝗸? ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor comenzó a besarle el cuello, después se encaminó hacia su clavícula, y no se detuvo hasta llegar al centro de sus pechos volubles y redondos. Su boca se abrió hasta meterse uno dentro, usando su lengua ancha para humedecer la tela y sentir el pezón a través de la misma. Con ayuda de una de las manos tiró del vestido de Kaia hacia abajo, para liberar por completo una de sus tetas, y, entonces sí, empezó a mamar de aquel pezón con devoción, hundiendo la cara en la carnosidad de su busto. ⠀⠀⠀⠀⠀El embarazo había convertido a Kaia en un caos de hormonas y, si por naturaleza poseía unos pezones sensibles, en su nuevo estado aquello se había duplicado. Experimentó una oleada de placer intensa que la hizo gemir por lo bajo mientras se presionaba contra el hombre y lo buscaba con un movimiento de caderas. Para este punto el vestido ya se le había levantado lo suficiente; con las piernas rodeando las caderas masculinas, los muslos le quedaron totalmente al descubierto exponiendo sus bragas diminutas, esas que muy apenas le cubrían el pubis y el coño, pero no sus nalgas. Sus nalgas estaban completamente desnudas, ataviadas sólo de un trozo de tela que se escondía entre sus glúteos. ⠀⠀⠀⠀⠀Apesar del placer que recibía, Kaia se las arregló para poner en duda las palabras de Trevor: ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗬𝗲𝗮𝗵? 𝗕𝗲𝗳𝗼𝗿𝗲 𝗼𝗿 𝗮𝗳𝘁𝗲𝗿 𝗚𝘄𝗲𝗻? ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗪𝗵𝗮𝘁? —Trevor preguntó, notablemente confundido, acompañado de una mueca que lo evidenció por si no había sido claro. «¿𝑄𝑢𝑒́ 𝑡𝑖𝑒𝑛𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑣𝑒𝑟 𝐺𝑤𝑒𝑛 𝑒𝑛 𝑡𝑜𝑑𝑜 𝑒𝑠𝑜?» pensó—. 𝗔𝗿𝗲 𝘆𝗼𝘂 𝗷𝗲𝗮𝗹𝗼𝘂𝘀, 𝗞𝗮𝗶𝗮? —le preguntó. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor no pudo evitar sentir un poco de inquietud al respecto. Kaia y él no se celaban, o bueno, no desde que había quedado en claro cuáles serían sus posiciones, y de eso ya había pasado un tiempo considerable. ⠀⠀⠀⠀⠀La pregunta le arrancó una risita a la mujer, quien supo perfectamente cómo accionar para desquiciar y distraer a Trevor: coló la diestra en el pequeño espacio entre sus cuerpos para desabrocharle el pantalón, y, sin más, metió la mano para apretar en medio de caricias la dura erección sobre la tela del bóxer. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜'𝗺 𝗻𝗼𝘁 𝗷𝗲𝗮𝗹𝗼𝘂𝘀 —afirmó con seguridad, y era cierto, pero necesitaba saber esa historia completa porque ahora las dudas la asaltaban. Además, le encantaba sentirse y saberse especial, que como ella no había ninguna otra. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia dejó de engancharse a su cintura. Con los pies en el suelo, empujó a Trevor con ambas manos para no ser su prisionera y, a pesar de la diferencia de tamaño, logró ser ella la que lo obligara a intercambiar lugares. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗪𝗵𝘆 𝘆𝗼𝘂 𝗱𝗶𝗱𝗻’𝘁 𝘁𝗲𝗹𝗹 𝗺𝗲? —cuestionó, trayendo el tema de vuelta, sin embargo, no se quedó quieta. ⠀⠀⠀⠀⠀Era una hija de puta, lo tenía clarísimo, y en ese momento a Trevor tampoco le quedó duda. Kaia pretendía que él le respondiera mientras se encargaba de su erección, así que le bajó el pantalón y el bóxer lo suficiente para dejar su verga en libertad, y se apropió de su miembro para masturbarlo sin pena; no fue lenta, apretaba constantemente mientras movía la mano a un ritmo considerable. ⠀⠀⠀⠀⠀Contra la puerta, Trevor cerró los ojos oscuros y se mordió el grueso labio inferior preso de la manera en la que ella lo comenzaba a masturbar. Su verga erguida palpitaba contra su tacto. Sus testículos estaban tensos, calientes, y mientras ella deslizaba la mano hacia arriba y abajo, masajeando su tronco y su frenillo, él dejaba que su cuerpo cediera ante las primeras gotas de líquido preseminal que ayudaron a que se lubricara. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗕𝗲 𝗰𝗮𝗿𝗲𝗳𝘂𝗹 𝘄𝗶𝘁𝗵 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗮𝗻𝘀𝘄𝗲𝗿, 𝗼𝗻 𝘁𝗵𝗮𝘁 𝗱𝗲𝗽𝗲𝗻𝗱𝘀 𝘄𝗵𝗲𝘁𝗵𝗲𝗿 𝘆𝗼𝘂’𝗹𝗹 𝗳𝗲𝗲𝗹 𝗵𝗼𝘄 𝘄𝗲𝘁 𝗜 𝗮𝗺 𝗼𝗿 𝗻𝗼𝘁 —advirtió—. 𝗜 𝘄𝗮𝗻𝘁 𝘁𝗼 𝗸𝗻𝗼𝘄. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor era un hombre alto, de espalda ancha y cintura un poco más estrecha. Tenía los músculos de su cuerpo bien definidos, y no era secreto que le gustaba pelear, aunque no tenía necesidad exactamente. Fuerza y control no le faltaban, agilidad tampoco. En un rápido movimiento cogió a Kaia del cabello, girando una vez la muñeca para que su cabello le diera vuelta en la mano, y una vez que estuvo bien sujeto, lo jaló hacia atrás para que su cabeza se reclinara, de modo que su cuello delgado quedó expuesto. Trevor la acercó tanto a su rostro que su aliento le rozó en los labios. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗬𝗼𝘂 𝘄𝗮𝗻𝘁 𝘁𝗼 𝗸𝗻𝗼𝘄?—alzó las cejas—. 𝗧𝗵𝗮𝘁'𝘀 𝘄𝗵𝗮𝘁 𝘆𝗼𝘂 𝗹𝗶𝗸𝗲? 𝗧𝗼𝗿𝘁𝘂𝗿𝗲 𝘄𝗵𝗶𝗹𝗲 𝗜 𝗳𝘂𝗰𝗸 𝘆𝗼𝘂? —La miró fijamente, fascinado, y después bajó la mirada hacia sus tetas descubiertas: preciosas, perfectas, casi jugosas—. 𝗧𝗵𝗶𝘀 𝗶𝘀 𝘁𝗵𝗲 𝗽𝗹𝗮𝗻... —Trevor comenzó a empujarla, con su cabello, hacia abajo, obligandola a que se pusiera de rodillas. Al tenerla ahí, a su merced, cubrió la muñeca de la joven con la mano que él tenía libre, y la obligó a seguir masturbándolo de arriba a abajo, lentamente, pero haciendo que ella misma comenzara a dirigir el glande de su erección hacia su rostro. Trevor sonrió con un gusto palpable al ver como su polla, gruesa, dura, húmeda, tenía la misma longitud que aquella bonita cara, y de pronto se olvidó el plan.

⠀⠀⠀⠀⠀Kaia fue obediente; lo tenía frente a su cara, imponente y duro, tentándola como a una desgraciada. Se le hacía agua la boca con tenerle allí, pero mucho más por la actitud que tomaba, queriendo dejarle claro que él mandaba. ¿Lo hacía realmente? Kaia estaba doblegada ante él, excitada a más no poder por el gran control que tenía en ella. ⠀⠀⠀⠀⠀Al soltarle la muñeca, Trevor le acarició la línea de la mandíbula y se detuvo en su barbilla. Su pulgar le rozó el labio inferior, luego se recorrió hacia su mejilla, y después su dedo índice se fue introduciendo en su boca suavemente. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia cerró los ojos ante las caricias recibidas en la cara, con la boca bien abierta cerró los labios alrededor del dedo y succionó con la misma diligencia con la que pronto chuparía su miembro. ⠀⠀⠀⠀⠀Para Kaia, Trevor estaba buenísimo, eso no era un secreto. A veces él era un idiota, pero en su mayoría tenía una personalidad demasiado compatible con la propia. Juntos eran una buena mezcla, y a nivel sexual eran incluso mejor. Trevor, Tre o «T», como a ella le gustaba llamarlo, sabía cómo ponerla en su sitio, pero también sabía en cuáles momentos dejarse poner en el suyo. ⠀⠀⠀⠀⠀Ese no era uno de esos. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗦𝗵𝗶𝘁, 𝘆𝗼𝘂'𝗿𝗲 𝗮 𝗳𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗯𝗲𝗮𝘂𝘁𝘆 —murmuró él, un poco hipnotizado por ella, muy cerca de perder por completo la noción de a dónde quería llegar con toda esa tortura. ⠀⠀⠀⠀⠀Con el índice bien adentro de la boca de Kaia, oprimiendo la yema en la lengua femenina, ejerció fuerza con el pulgar y el dedo medio, encajándolos en donde los hoyuelos femeninos se marcaban, sobre sus mejillas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜 𝘄𝗶𝗹𝗹 𝗱𝗲𝗰𝗶𝗱𝗲 𝘄𝗵𝗮𝘁 𝘁𝗼 𝘁𝗲𝗹𝗹 𝘆𝗼𝘂, 𝗱𝗲𝗽𝗲𝗻𝗱𝗶𝗻𝗴 𝗼𝗻 𝗵𝗼𝘄 𝗺𝘂𝗰𝗵 𝗜 𝗰𝗮𝗻 𝗳𝗲𝗲𝗹 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗹𝗶𝘁𝘁𝗹𝗲 𝗺𝗼𝘂𝘁𝗵 𝗮𝗻𝗱 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗽𝘂𝘀𝘀𝘆, 𝗞𝗮𝗶𝗮 𝗢𝗰𝗮𝘀𝗶𝗼. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor se inclinó para acercarse a su rostro, sacó el índice de su boca y al tenerla formando una O con los labios, le escupió en el interior y se enderezó, acomodando contra su arco de cupido la punta de su glande. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia no lo esperaba. De verdad, no esperaba que le escupiera en la boca y aquello la descontroló terriblemente. Estaba demasiado excitada, podía sentir la ansiedad en el coño, hambriento de atención. No hubo espacio para las oposiciones, aunque eso no significaba que iba a ceder tan fácil. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia sonrió abiertamente antes de dejar una suave succión en el glande. No tragó, más bien jugó con su saliva mezclándose con la contraria, y, mientras con la diestra mantenía el miembro donde ella quería, le escupió para lubricar mejor. Dejó que el líquido se deslizara un poco por la longitud del tronco, y con la mano terminó por esparcirla. No fue mucho tiempo, pero de todas formas lo hizo esperar por ella, por su boca.⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗖'𝗺𝗼𝗻 𝗯𝗮𝗯𝘆 𝗴𝗶𝗿𝗹, 𝘁𝗲𝗹𝗹 𝗺𝗲 𝗵𝗼𝘄 𝗯𝗮𝗱𝗹𝘆 𝘆𝗼𝘂 𝘄𝗮𝗻𝘁 𝗶𝘁. ⠀⠀⠀⠀⠀Esa mujer iba a terminar matándolo un día de esos, y Trevor no pondría objeción alguna ante la pura idea de fallecer entre sus brazos, contra sus pechos desnudos, o tendido a su lado en la cama, exhausto luego de habérsela follado en ese baño. ⠀⠀⠀⠀⠀Sería una buena muerte, estaba seguro. ⠀⠀⠀⠀⠀No fue fácil para Kaia mantenerse quieta, solo usando la mano para masturbarlo cuando ansiaba tanto llenarse la boca de él. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜 𝘄𝗮𝗻𝘁 𝗶𝘁 𝘀𝗼 𝘀𝗼 𝗯𝗮𝗱 —confesó finalmente. ⠀⠀⠀⠀⠀Sacó la lengua, y lamió la circunferencia de aquella punta. Luego un beso, como si se tratara de sus labios, para entonces abrir finalmente la boca y llevarse al interior los primeros centímetros de su verga. La abordó caliente y húmeda en un vaivén de cabeza que no tardó en agarrar ritmo. ⠀⠀⠀⠀⠀Perdió el rumbo de la discusión, y le restó toda la importancia que podían tener los detalles que quería saber, porque la calentura era mayor a su curiosidad. Incluso envió al fondo de su mente cualquier cosa relacionada al embarazo y la noticia que debía darle, pues sus pensamientos, sus deseos y anhelos eran sólo sexo. ⠀⠀⠀⠀⠀Con la boca tan llena de su polla no necesitaba pensar en ninguna otra cosa. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor le soltó el cabello en el momento en el que sintió cómo su verga se hundía, lentamente, en la tibieza de su boca. La soltó para poder flexionar los brazos y cerrar las manos en puños fuertes que se presionaron contra sus sienes por un instante. Con los ojos cerrados y la mandíbula tensa, dejó escapar un profundo jadeo de placer. ⠀⠀⠀⠀⠀Inhaló con profundidad hasta que los músculos de su cuerpo completo se definieron, y fue exhalando cuando aquellos labios femeninos, tan suaves y gruesos, se empezaron a deslizar a lo largo de su polla, dejando rastros de su saliva en su tronco. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia chupaba, lamía y abarcaba con codicia tanto como podía meterse a la boca en cada bombeo. Respiraba por la nariz, manteniéndose tan constante como le era posible sin que el aire le faltase tanto. Estaba hambrienta, y no le avergonzaba dejarlo ver. ⠀⠀⠀⠀⠀Levantó la mirada al rostro masculino; sus ojos ardían dominados por la lujuria que recorría cada centímetro de su cuerpo. ⠀⠀⠀⠀⠀A propósito, para enloquecerlo con la vista que le ofrecía en aquella posición. La mujer aprovechó la libertad de sus manos para bajarse un poco más el vestido, liberando ambos pechos de la presión de la tela y así, masajear, apretar con necesidad hasta pellizcarse los pezones erguidos provocándose una oleada de placer deliciosa que repercutió en su coño. ⠀⠀⠀⠀⠀Le tentaba la idea de acariciarse mientras se la chupaba. ⠀⠀⠀⠀⠀Le encantaba hacerle orales, empaparle la verga con su saliva y chupársela de tal forma que Trevor no pudiera hacer otra cosa más que entregarse a ella por completo. ⠀⠀⠀⠀⠀Entonces, tomó el control de la situación al colocar ambas manos en los torneados muslos masculinos para usarle de apoyo y meterla toda hasta su garganta unos segundos. Su nariz rozando el pubis hasta que se apartó por completo, tomando aire con cierta urgencia. Los unía un hilillo de saliva desde el glande hasta su lengua. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗙𝘂𝗰𝗸 —exclamó Trevor, al dominar un poco más la oleada de placer que se apoderó de él. ⠀⠀⠀⠀⠀Inclinó la cabeza hacia abajo y clavó la mirada en la escena que sucedía ante sus ojos. ⠀⠀⠀⠀⠀Pronto, el hombre sonrió con satisfacción y lujuria, y regresó una de sus manos a la cabeza de Kaia, acariciando sus cabellos para hacerlos hacia atrás; poco después la volvió a coger de la nuca y la empezó a guiar en los movimientos para hacer que empezara a tragarse su verga más rápido y con más profundidad. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗢𝗽𝗲𝗻 𝘄𝗶𝗱𝗲𝗿 𝘁𝗵𝗮𝘁 𝗳𝗶𝗹𝘁𝗵𝘆 𝗺𝗼𝘂𝘁𝗵, 𝗽𝗿𝗲𝗰𝗶𝗼𝘂𝘀 —ordenó. Kaia relajó los músculos, obediente abrió más la boca y se dejó guiar al ritmo que el hombre imponía con las caderas—. 𝗗𝗼 𝘆𝗼𝘂 𝗹𝗶𝗸𝗲 𝘀𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗺𝘆 𝗯𝗶𝗴 𝗰𝗼𝗰𝗸 ? —Con la mano libre, el neoyorquino apoyó la palma contra su pelvis y rodeó con el dedo índice y pulgar la base de su erección, como si fuera un anillo, y se apretó con firmeza, sacudiendo su miembro dentro de la cavidad bucal femenina. Con sus tres dedos restantes se apretó los testículos, y ante la concentración de calor y sensibilidad en la zona, ese impulsó a ser quien empezara a mover la cadera para follarle la boca. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia esbozó una sonrisita. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜 𝗹𝗼𝘃𝗲 𝘀𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗱𝗶𝗰𝗸 —confesó agitada. ⠀⠀⠀⠀⠀Llevó diestra a la base del pene, apartando la de él porque le correspondía a ella encargarse de su placer; él solo debía disfrutarlo. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia ejerció presión con los dedos, masturbó un poco y sacó la lengua para darle unos nuevos golpecitos a ésta, con la polla. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀— 𝗬𝗼𝘂 𝗹𝗼𝘃𝗲 𝘄𝗵𝗲𝗻 𝗜 𝗳𝗶𝗹𝗹 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗺𝗼𝘂𝘁𝗵 𝘄𝗶𝘁𝗵 𝗺𝘆 𝗱𝗶𝗰𝗸, 𝗱𝗼𝗻'𝘁 𝘆𝗮'? 𝗨 𝘄𝗮𝗻'𝘁 𝗺𝗲 𝘁𝗼 𝗰𝘂𝗺? 𝗮𝗵? —Trevor incrementó el vaivén, respirando agitadamente, mientras sus oídos se deleitaban con el sonido que su saliva causaba en cada embestida, aunado al de sus huevos rebotando contra la barbilla de la joven. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗖𝘂𝗺 𝗶𝗻 𝗺𝘆 𝗺𝗼𝘂𝘁𝗵, 𝗧, 𝗽𝗹𝗲𝗮𝘀𝗲 𝗽𝗹𝗲𝗮𝘀𝗲 𝗽𝗹𝗲𝗮𝘀𝗲. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia besó a lo largo del tronco mientras masturbaba con más insistencia usando las manos. Su saliva había hecho el trabajo perfecto al lubricar, mojándole los dedos. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia acercó el rostro hasta sus testículos, y no lo dudó para llevarlos también a su boca; lamió, beso y succionó sus huevos uno a uno mientras continuaba subiendo y bajando con los dedos con diligencia, ejerciendo especial presión en la punta. ⠀⠀⠀⠀⠀Estaba siendo poco cuidadosa en el acto, evidenciando el placer que experimentaba al realizarlo. ⠀⠀⠀⠀⠀Saberse complacida la llenaba de orgullo. No era presumida, de hecho, como muchos aspectos de su vida, Kaia era reservada con su vida sexual independientemente de lo coqueta que en ocasiones podía ser o lo que su apariencia podía dejar ver. Sin embargo, era plenamente consciente de que follaba bien, muy bien. Y le encantaba pedirle que la llenara de semen porque la complacía sin problema, cediendo al encanto y habilidad de su boca morbosa. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗙𝘂𝗰𝗸, 𝗜 𝗱𝗼 𝗹𝗼𝘃𝗲 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗰𝗼𝗰𝗸 —jadeó. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor no se consideraba a sí mismo un hombre egocéntrico. Si se ponía a pensar, la verdad era que estaba muy conforme con su apariencia y con saberse deseado por las mujeres, pero no era algo en lo que estuviera pensando todo el tiempo. Sin embargo, a la hora del sexo, Trevor era tan vanidoso como todos, y le llenaba de orgullo saberse capaz de complacer a una mujer, especialmente a una mujer con necesidades intensas; a una mujer como Kaia. Eso lo revitalizaba. De una forma, se sentía poderoso, y ese poder se extendía por todo su cuerpo, llenándose de vigor y energía. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝗜 𝗳𝘂𝗰𝗸𝗶𝗻𝗴 𝗸𝗻𝗼𝘄 𝗶𝘁, 𝗴𝗶𝗿𝗹 —respondió, sin evitar sonreír con burla, y endureció aún más las piernas hasta que los músculos de sus glúteos se pusieron duros también. ⠀⠀⠀⠀⠀A Trevor le estaba costando mantener la respiración. Estaba necesitado, urgido, y Kaia lo estaba enloqueciendo al saber exactamente cómo mamársela, cómo tocarlo, y cómo perturbar su calma. ⠀⠀⠀⠀⠀Su temperatura corporal iba en incremento. Desesperado, el americano se quitó su camiseta gris y la lanzó hacia la fila de lavabos. Sus brazos musculosos y su torso completo quedaron visibles en su totalidad, acompañado de un par de tatuajes en forma de líneas que descendían desde sus caderas hasta el pubis, remarcando la V de su abdomen. ⠀⠀⠀⠀⠀Como Kaia, Trevor también tenía sus pequeños pezones erguidos, y sintió placer cuando deslizó las palmas por encima de éstos, bajando por su abdomen hasta tener las puntas de los dedos rozando con los vellos de su pelvis. ⠀⠀⠀⠀⠀No iba a resistir más. ⠀⠀⠀⠀⠀No quería. ⠀⠀⠀⠀⠀Pegó la nuca a la puerta, otra vez, y con los ojos cerrados se entregó al elevado éxtasis concentrado en su zona íntima. Entre las manos, la boca, los labios —donde fuera que su verga estuviera siendo deleitada— se sacudió, vibró, se estremeció, y se dejó ir. La garganta se le marcó de venas, y el movimiento de su manzana de adán al tragar saliva fue demasiado lento, simultaneo al chorro de semen que salió de la punta de su glande, directo a la perfecta boca femenina. ⠀⠀⠀⠀⠀La chorreó una vez, pero ante sus caricias, un segundo chorro salió, caliente y espeso, que pronto se mezcló con su saliva. Las gotas que siguieron saliendo, más pequeñas, escurrieron hacia el piso y hacia las tetas redondas de la mujer, contrastando de una manera exquisita contra su tono más moreno de piel. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor se inclinó hacia adelante y rodeó la garganta de Kaia con la mano derecha. La puso de pie de un movimiento y la atrajo hacia sus labios para volverla a besar con el intenso deseo desenfrenado al que había sucumbido. Le metió la lengua hasta la garganta y la fue empujando a los lavabos, donde al chocar la alzó del piso y la sentó en el borde. No dijo nada. No pudo. Su cabeza sólo podía pensar en una sola cosa y eso era en el coño caliente y mojado de la latina. Deseaba comérsela, lamerle el clítoris y tentar con su culo, pero eso tendría que esperar. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ——— 𝖳𝗂𝗍𝗅𝖾: 𝗡𝗲𝘄𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗼𝗺𝗯𝘀 (𝗌𝖾𝖼𝗈𝗇𝖽 𝗉𝖺𝗋𝗍). 𝖣𝖺𝗍𝖾: 𝗙𝗲𝗯𝗿𝘂𝗮𝗿𝘆 𝟮𝟲, 𝟮𝟬𝟮𝟯. 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸, 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸. 𝖬𝗎𝗌𝖾: #𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 𝖢𝗁𝗋𝗈𝗇𝗈𝗅𝗈𝗀𝗒: 𝗟𝗶𝘃𝗲 𝗮𝗻𝗱 𝗹𝗲𝘁 𝗹𝗶𝘃𝗲 (𝗉𝖾𝗇𝖽𝗂𝗇𝗀 𝗅𝗂𝗇𝗄). 𝖢𝗈𝗅𝗅𝖺𝖻𝗈𝗋𝖺𝗍𝗂𝗈𝗇: Kaia Ocasio. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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NEWS AND BOMBS.

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⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Sinners Welcome? Really, 𝗙𝗿𝗮𝗻𝗸? —𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿 𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 miró a Frank, el dueño del bar en el que acababa de entrar, con una sonrisa burlona en los labios. ⠀⠀⠀⠀⠀Frank alzó la mirada sin dejar de hacer lo que hacía (secar vasos con una toalla blanca) y sonrió en el segundo en el que vio al muchacho. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Qué? ¿No te gusta que te den la bienvenida llamándote como lo que eres? —preguntó de vuelta, siguiendo el hilo de su burla, y luego se carcajeó junto con Trevor—. Hace mucho que no te veía por aquí, Parker. Toma… —Frank se quedó con uno de los vasos limpios en la mano y lo llenó de cerveza oscura directamente de la manguera del barril, y después lo puso sobre la barra—, la primera corre por mí, como bienvenida. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor no tardó en darle un buen trago a la bebida, agradeciendo segundos después. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Alguna novedad, Frank? ⠀⠀⠀⠀⠀El dueño del bar, un hombre canoso que, para sorpresa de todos, era realmente joven al rondar por los cincuenta años, se encogió de hombros y negó. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Nada. Ah bueno, sí. —Ladeó la cabeza en dirección a una de las meseras, y levantó las cejas de manera sugerente. Riven lo siguió con la mirada, confundido, y se quedó viendo a la joven a la que se refería—. 𝗘𝗹𝗹𝗲 ha estado preguntando por ti desde hace unos días, con mucha insistencia. Creo que le gustas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Elle? —repitió, dudoso e incrédulo, y negó. Trevor conocía a Elle lo suficiente para saber que Frank debía estar equivocado—. No te creo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Es verdad, muchacho. Hasta me pidió tu número, y se lo di, pero nos dimos cuenta de que ya no tienes el mismo teléfono que tenía agendado. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor sonrió con un poco de pena e incomodidad, y bebió de la cerveza para terminársela. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Tuve problemas, pero te dejaré mi nuevo número antes de irme. Iré a las mesas, los chicos me están esperando. Ah, y Frank, aun así, preferiría que no le dieras mi teléfono a Elle. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Me parece bien, muchacho. Ah, y Trevor —Frank imitó el mismo tono que él—, Elle es la mesera que está atendiendo a tu mesa hoy. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿𝘏𝘢𝘣𝘭𝘢𝘴𝘵�� 𝘤𝘰𝘯 𝘦́��? —preguntó 𝗩𝗶𝘁𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮 𝗩𝗮𝗿𝘀𝗮𝗼𝘂𝗱, la mejor amiga de Kaia. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—No, todavía no. Ya casi, estoy llegando —contestó Kaia. ⠀⠀⠀⠀⠀Era inevitable que la conversación en esa llamada llegara a esa pregunta porque, a fin de cuentas, Kaia Ocasio debía aprovechar el viaje que le había surgido a Estados Unidos para cerrar 𝒆𝒔𝒆 asunto. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia dejó de observar por la ventanilla del taxi en el que iba montada, y posó la vista en la pantalla de su dispositivo móvil para revisar el mapa —aunque conocía bien la ruta. Según la aplicación, estaba a dos minutos de su destino; ¿su destino? Trevor Parker. ⠀⠀⠀⠀⠀Contactar con Trevor se había vuelto imposible, y aun más a través de la distancia, orillando a Kaia a recurrir a una visita física para, de una vez por todas, dar la inevitable noticia: estaba esperando un hijo que era de él. Y aunque ir a verlo no había sido su objetivo principal para viajar a la Gran Manzana, valía la pena intentar encontrarlo. Kaia quiso pensar que quizá esa era la forma en la que el universo le estaba diciendo que hiciera las cosas bien; que Trevor tenía derecho de saber de ese bebé. Pretender huir de esa realidad no era sensato ni correcto, ni siquiera cuando Trevor no tenía ni la menor idea de lo que le deparaba en el futuro; el hombre ni siquiera se las olía. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Ya llegué —avisó Kaia a Vittoria—. Te llamo después para contarte todo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—𝘝𝘢, 𝘣𝘦𝘣𝘦́. 𝘊𝘶𝘪́𝘥𝘢𝘵𝘦. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia pagó el taxi, se bajó del auto y se adentró al ya conocido 𝐹𝑟𝑎𝑛𝑘’𝑠 𝐵𝑎𝑟 donde hacía gigs en las noches de música en vivo desde hacía algunos años. En una de esas noches Kaia conoció a Trevor, quien por mero gusto y placer se sentaba en la barra del bar o en una mesa con sus amigos, y se ponía a beber y a escuchar la música cada noche que no se encontraba metido en el club en el que él trabajaba, en Brooklyn. Desde entonces era uno de los lugares recurrentes de ambos; ahí empezó su amistad. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀Elle no había tenido éxito en conseguir el nuevo número telefónico del americano para compartirlo con Kaia, pero sí había podido decirle que esa noche estaba en el bar. Esa noche —la última de Kaia en New York hasta dentro de tres semanas— Kaia tendría que tomar una decisión: hablar, o terminar aplazando la noticia hasta verse obligada a tener que recurrir a otras opciones menos agradables, como contactar al doctor Parker, el hermano mayor de Trevor (con quien no tenía una buena relación ni ella, ni él, y realmente nadie) por no haber querido contactarlo antes. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀Frank’s Bar estaba concurrido incluso para tratarse de un domingo a las diez de la noche. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia no tuvo dificultad alguna en ubicar a T; para ella sobresalía un poco entre el resto por ser una cara conocida. Sin embargo, no fue directo hasta él de buenas a primeras, pues de repente experimentó una oleada de nerviosismo que creyó superado desde que aceptó que sería madre. En cambio, se escabulló hacia la barra, saludó tanto a Frank, como a Elle, y le pidió a la segunda un vaso con agua para relajarse un poco. Una conversación superficial sobre la vida, y entonces se puso de pie de una vez por todas. Decidida, se abrió paso entre las mesas y personas, y se mentalizó con que debía terminar con 𝒆𝒔𝒐 ya. ⠀

⠀⠀⠀⠀⠀Trevor Parker estaba de pie, dándole la espalda, y no se imaginaba ni un poco que su querida amiga estuviera en la ciudad, y mucho menos en ese mismo bar, en ese momento. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia se puso detrás de él y llamó su atención poniéndole la mano en la cintura como si fuese a abrazarlo. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor experimentó un breve sobresalto, en cuanto sintió el contacto físico en su cintura, que pasó desapercibido —excepto para Kaia. ⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀Él y todos sus amigos se encontraban alrededor de una pequeña mesa alta circular, y Trevor justamente estaba hablando de su más reciente conquista y ruptura cuando aquella mano lo distrajo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Pareces celebridad últimamente, con lo difícil que es contactarte —comentó Kaia, interrumpiendo la conversación en la mesa. Su voz no era un reproche serio, aunque sus palabras eran verídicas. ⠀⠀⠀⠀⠀Todo sucedió demasiado rápido. Antes de siquiera poder voltear para ver, la voz femenina y familiar ya le hablaba en el oído, y las expresiones de sus amigos —sonrientes y gustosas— le confirmaban su sospecha: debía ser Kaia. No, más bien, era Kaia. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Sí? ¿Tú crees? —respondió Trevor con ese tono juguetón y ladeó el torso dando medio paso a un lado para darle lugar a la joven en su derecha, aunque su brazo no se resistió a abrazarla de costado, atrayéndola a su cuerpo de manera afectiva. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor sentía un aprecio inexplicable por esa latina: era su amiga, su amiga en toda la extensión de la palabra, o eso vivía creyendo él. Y, además, le daba de los mejores polvos de la vida; ni cómo negarlo. ⠀⠀⠀⠀⠀Una sonrisa se dibujó en los labios carnosos de Kaia, y estando ya lado a lado, pegada a Trevor, saludó con un beso en la mejilla. Fingir calma se le daba bien. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Hola, Trev. Hola, chicos —añadió. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—La mismísima 𝗞𝗮𝗶𝗮 𝗢𝗰𝗮𝘀𝗶𝗼, ¿qué te trae a New York? —preguntó 𝗕𝗿𝗶𝗮𝗻, uno de los amigos de Trevor. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Well… —Kaia frunció la nariz y los labios en una mueca mientras movía la cabeza ligeramente de un lado a otro con inseguridad, como si no estuviese convencida de que responder. ⠀⠀⠀⠀⠀Trevor bufó, como si la pregunta fuera obvia, y con su mano libre se apuntó a sí mismo a la altura del pecho. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Es obvio, Brian. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia rodó los ojos, pero permaneció sonriendo. Lo cierto era que no era del todo mentira, aunque lo negó con la misma vibra relajada del encuentro. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Lo que te deje dormir de noche, mi amor —comentó, dejando unas palmaditas en el pecho de Trevor. ⠀⠀⠀⠀⠀Los muchachos se rieron con aquel tono de "𝘺𝘢 𝘲𝘶𝘪𝘴𝘪𝘦𝘳𝘢𝘴" que hizo que el neoyorquino pusiera los ojos en blanco. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia también se echó a reír y permaneció a lado de Trevor, con el brazo rodeando su cintura de forma cariñosa. Ella se sentía muy a gusto con él, con sus amigos incluso, con quienes siempre pasaba un buen rato. No obstante, seguía nerviosa; tenía un nudo en el estómago que, a pesar de disimular, seguía tan pesando como en el momento en el que apareció. Confiaba en Trevor, le quería muchísimo, era su amigo por encima de muchas cosas y, aun así, tenía miedo de decirle. ⠀⠀⠀⠀⠀No sabía por qué, considerando que estaba, desde el primer momento, dispuesta a cuidar ese bebé sin ayuda. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¡Elle! —Trevor dejó de abrazar a Kaia, alzó el brazo en el aire y cuando obtuvo la atención de Elle, prosiguió—: ¡Trae dos cervezas más! —Elle asintió, y el castaño miró de nuevo a la chica a su lado—. No te veo desde hace... ¿dos meses? ¿Por qué te desapareciste tanto? —cuestionó, intrigado, y al parecer sus amigos también querían saber, ya que de pronto todos se quedaron en silencio, con los ojos puestos en Kaia. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Yo me desaparecí? Tengo días llamándote y buscándote, tú nada de aparecer. ¿Qué le pasó a tu teléfono? O a tus redes, me dejaste un mensaje de cumpleaños en Instagram y ni así logré hablar contigo —le reprochó casi como una novia. Se dio cuenta de que toda la mesa estaba con los ojos en ella y no pudo evitar contener una sonrisa por lo chismosos que terminaron siendo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Ah, sí... sí. Lo siento por eso —empezó a responder, aun cuando Kaia seguía hablando. ⠀⠀⠀⠀⠀Uno de los amigos de Trevor bebió un buen trago de su tarro de cerveza, y luego abrió no pudo evitar comentar: ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—A su teléfono no le pasó nada. A sus redes sí. ⠀⠀⠀⠀⠀Las risas burlonas dieron a entender que conocían el contexto, pero nadie decía nada más. O al menos no hasta... ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Siempre le dijimos que no empezara a salir con la rubia hija de papi que lo sedujo en una fiesta hace un mes. Es decir...—𝗦𝘂𝘁𝘁𝗼𝗻, un afroamericano, miró a Kaia mientras le seguía contando—, está muy buena, pero no para salir con ella. Aquella mujer está loca, todos lo sabemos. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Todos menos Trevor —dijo 𝗛𝘂𝗱𝘀𝗼𝗻 entre dientes, aguantándose la risa. ⠀⠀⠀⠀⠀Por alguna razón que hasta el ese momento Trevor todavía no había entendido, era cómo todos podían tener una confianza demasiado grande hacia Kaia. Le hablaban como si fuera parte del grupo, como si fuera uno más de ellos. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia no sabía si era resultado del alcohol o si era solo cuestión de confianza, pero la información que estaba recibiendo le hizo levantar las cejas. Se sentía como aquel miembro del grupo que había faltado a un par de reuniones y al regresar se le ponía al corriente de todo lo sucedido. En otro momento, aquello le hubiese arrancado una carcajada, buscaría saber más detalles con una sonrisa que sabía pondrían a Trevor en una posición un tanto incómoda. Sin embargo, solo intercambiaba miradas con el grupo de hombres con la curiosidad marcada en su rostro por razones completamente distintas a las que ellos imaginaban. Kaia contuvo el impulso de colocarse la mano en el vientre, todavía plano. La pesada sensación en su abdomen iba a hacerla vomitar. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Damn, man, tienes que decir siempre todo lo que tienes en la lengua, ¿no? —se quejó Trevor, pero no estaba verdaderamente molesto. En realidad, estaba más avergonzado—. Gwen ya no me va a buscar, creo que al fin entendió el mensaje. —Sin tener algo más que añadir, bebió de la cerveza que Elle acababa de dejarle, y le puso la otra enfrente a Kaia, pues era para ella. Hudson, Brian y Sutton se miraron entre ellos, y contuvieron la risa, pero aun así uno de los tres murmuró: ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Le quedó claro porque cerraste todas tus redes y cambiaste tu número, pero en cuanto sepa cómo volver a contactarte, estás muerto, man. ⠀⠀⠀⠀⠀Después de eso, Trevor se quedó callado, incómodo, y con ganas de ahorcar a sus amigos, pero se dedicó a beber de su cerveza hasta que se terminó. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia notó en Trevor algo más que incomodidad por los comentarios, y quería saber al respecto, así que lo intentaría... ⠀⠀⠀⠀⠀Rechazó la cerveza asignada a ella, pasándola a Sutton, a quien tenía en frente del otro lado de la mesa. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Ya me tomé una —mintió—, entonces Chloe —repitió, como si con esto lo guardase en su memoria para más tarde—. ¿Qué significa eso, Brian? ¿Terminaron o no? Cuéntamelo todo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Apenas llegaste hoy? —Trevor se volvió a Kaia, preguntándole aquello de improvisto, muy decidido a cambiar el rumbo de la conversación—. Justo estábamos hablando de planear algo para mañana, ¿te apuntas? Ya sabes... —las manos de Riven formaron una especie de ovalo imaginario—, pizzas, cerveza de barril, some chicks, if u know what I mean. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Yeah, man —añadieron sus amigos, a los que al parecer les seducía la idea más que a Kaia, ¿y cómo no? ⠀⠀⠀⠀⠀A Kaia le tomó un momento responder, naturalmente, y se pasó las manos por el largo cabello oscuro. Para la latina los planes sonaban bastante bien, podía quedarse un día más, sin embargo, no lo decidiría hasta más tarde. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Les cuento que —hizo énfasis en el plural—, no voy a poder. Lo siento, chicos. Mañana me voy a Madrid otra vez, solo estaba por mi cumpleaños. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Está bien, Kaia, no hay problema. Pero si decides quedarte, podemos usar de excusa tu cumpleaños para que la fiesta se salga de control —dijo alguien. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Claro que, si nos acompañas, mis ojos van a ser absolutamente para ti, babe. U have my word —Trevor alzó la mano, prometiéndolo, pero con la otra mano tomó la de Kaia suavemente, rozando sus largos dedos entre los de ella antes de enlazarlos. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia bajó la mirada a sus manos, el roce de sus dedos despertando un cosquilleo que le subió por todo el brazo. Se quedó prendada de sus dedos ahora entrelazados y por ese ínfimo momento, se olvidó del resto de hombres escuchando. Era natural el coqueteo entre ellos, ni siquiera era algo que planearan, solo salía de forma natural. Levantó los ojos hasta los de él: ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Convénceme y me quedo. ⠀⠀⠀⠀⠀Muy lentamente la comisura derecha de los labios de Trevor se elevó formando una sonrisa ladina, maliciosa, cargada de perversión. Eran las palabras que estaba buscando; las palabras que lo hacía despertar ese instinto animal que sentía hacia Kaia de manera involuntaria. «𝑂𝘩, 𝑛𝑜 𝑑𝑒𝑏𝑖𝑠𝑡𝑒» le quiso decir, pero confío en que sus ojos lo expresaron a la perfección, pues estos casi le brillaron. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Tengo un regalo de cumpleaños para ti, de hecho —murmuró en un tono bajo, esperando que fuera lo suficientemente íntimo, pero las risas de sus amigos de fondo seguían entrometiéndose. ⠀⠀⠀⠀⠀Kaia disfrutaba de las caricias sugerentes que Trevor le regalaba. No eran roces inocentes, aunque lo parecieran, no cuando en los ojos de ambos brillaba algo más oscuro y denso. Un fuego pasional que se encendía con la facilidad de un mechero. Por supuesto, iban a ignorar la conversación sobre la mujer, para hacer lo de siempre: ceder a las ganas y comerse. ⠀⠀⠀⠀⠀Era una excusa para no hablar lo demás. ⠀⠀⠀⠀⠀Lo aceptó por el momento. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Y qué tienes para mí? —preguntó, haciéndose la tonta con una sonrisa juguetona que todos reconocieron, porque ahí tanto ella como los demás presentes sabían lo que significaba. No era secreto que follaban incluso después de intentar ser algo más, tampoco lo ocultaban. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—No lo tengo aquí. —Ya que aun la tenía de la mano, Trevor le dio un tirón y empezó a caminar hacia el fondo del bar, dirigiéndose a uno de los pasillos que llevaban a los baños. ⠀⠀⠀⠀⠀Apenas ingresaron al cuarto, éste cerró la puerta aprovechando que la última chica acababa de salir. El click del pestillo se oyó primero, y como segundo fue el golpe de la espalda de Kaia contra la puerta en cuanto Trevor, preso del deseo, la arrinconó... ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ——— 𝖳𝗂𝗍𝗅𝖾: 𝗡𝗲𝘄𝘀 𝗮𝗻𝗱 𝗯𝗼𝗺𝗯𝘀 (𝖿𝗂𝗋𝗌𝗍 𝗉𝖺𝗋𝗍). 𝖣𝖺𝗍𝖾: 𝗙𝗲𝗯𝗿𝘂𝗮𝗿𝘆 𝟮𝟲, 𝟮𝟬𝟮𝟯. 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸, 𝗡𝗲𝘄 𝗬𝗼𝗿𝗸. 𝖬𝗎𝗌𝖾: #𝗧𝗿𝗲𝘃𝗼𝗿𝗣𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿 𝖢𝗁𝗋𝗈𝗇𝗈𝗅𝗈𝗀𝗒: 𝗟𝗶𝘃𝗲 𝗮𝗻𝗱 𝗹𝗲𝘁 𝗹𝗶𝘃𝗲 (𝗉𝖾𝗇𝖽𝗂𝗇𝗀 𝗅𝗂𝗇𝗄). 𝖢𝗈𝗅𝗅𝖺𝖻𝗈𝗋𝖺𝗍𝗂𝗈𝗇: Kaia Ocasio 𝖺𝗇𝖽 𝖵𝗂𝗍𝗍𝗈𝗋𝗂𝖺 𝖵𝖺𝗋𝗌𝖺𝗈𝗎𝖽. ⠀ ⠀ ⠀ ⠀ ㅤ

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𝗠𝗜𝗖𝗛𝗔𝗘𝗟 𝗞𝗢𝗕𝗘 𝗣𝗔𝗟𝗠𝗘𝗥

ㅤ⠀𝗠𝗜𝗖𝗛𝗔𝗘𝗟 𝗞𝗢𝗕𝗘 𝗣𝗔𝗟𝗠𝗘𝗥.June 16, 2197. 𝟤𝟧 𝘺𝘦𝘢𝘳𝘴 𝘰𝘭𝘥.Born and lives in Los Angeles, California.𝖯𝗈𝗋𝗇𝗈𝗀𝗋𝖺𝗉𝗁𝗂𝖼 content creator. Hacker. Street racer. Dealer.@mikeypalmer.⠀⠀Michael formó parte de la M.A.N.W.O. (Military Army of the New World Order) a sus veintiun años de edad. Su titulo como militar le abrió las puertas de un mundo lleno de excesos, lujos y privilegios y, para los 25 años, le dio también la oportunidad de poder vivir como un hombre de alta sociedad.Con un alto rango en la M.A.N.W.O., el ejército le dio la oprtunidad de vivir eternamente a cambio de que usara sus años venideros sirviendo a la nación. Michael aceptó, sometiendose así al programa E.L.D.B. (Eternal Life—Disposable Bodies).Con dinero, carros del año y fines de semana otorgando las mejores fiestas de la ciudad, Michael se hizo popular y aclamado entre los de su "clase". Conoció a mucha gente importante, pero también conoció a personas poderosas, ¿y el poder no es —casi— siempre sinonimo de peligro?Malas decisiones, malos pasos, ser expulsado del ejército y una gran ambición lo llevó a tener que dejar una sociedad primermundista, teniendo que poner en práctica toda su astucia y conocimiento para seguir manteniendo el ritmo de vida al que por tantos años se había acostumbrado.Ahora, con 125 años de vida, Michael usa su nombre Kobe para llevar acabo todas sus transacciones y negocios. Vive en las ciudades terrestres, y se codea con las ciudades subterraneas y aereas, dependiendo el negocio que esté llevando a cabo, y quién lo solicita.⠀⠀——𝗢𝗿𝗶𝗴𝗶𝗻𝗮𝗹 𝗰𝗵𝗮𝗿𝗮𝗰𝘁𝗲𝗿 belongs to the original 𝗨𝗩𝗦-𝟭𝗔 universe.𝗧𝗶𝗺𝗲 𝗽𝗲𝗿𝗶𝗼𝗱: Year 2323.𝗚𝗲𝗻𝗿𝗲: Acción. Bélico. Ciberpunk.⠀⠀⠀⠀⠀Ciencia ficción. Drama. Gore.⠀⠀⠀⠀⠀Futuristico.𝗖𝗹𝗮𝘀𝘀𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝘁𝗶𝗼𝗻: NC-17.⠀⠀⠀ㅤ

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𝗟𝗲𝘃𝗸𝗶𝗻 𝗜𝗻𝗻𝗼𝗸𝗲𝗻𝘁𝗶𝗲𝘃𝗶𝗰𝗵 | Fantine pt.2 noche del tren

ㅤ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝗟𝗲𝘃𝗸𝗶𝗻 𝗜𝗻𝗻𝗼𝗸𝗲𝗻𝘁𝗶𝗲𝘃𝗶𝗰𝗵. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝐅𝐀𝐍𝐓𝐈𝐍𝐄 (𝗉𝖺𝗋𝗍 𝟤). ⠀⠀⠀⠀𝖩𝖺𝗇𝗎𝖺𝗋𝗒, 𝟣𝟫𝟧𝟧. ⠀⠀⠀⠀𝖯𝖺𝗋𝗂𝗌, 𝖥𝗋𝖺𝗇𝖼𝖾. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝖯𝗋𝖾𝗏𝗂𝗈: bit.ly/3DfRmH6 ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Lev Lavery. —El nombre se escurrió de los labios de Fantine, seguido de una sonrisa coqueta y picarona. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Una cosa era definitiva: aquella jovencita no estaba pensando las cosas con claridad. Tal vez el frío había entumecido su cerebro y atrofiado su uso de razón, ¿no? ¿Qué otra explicación podía existir para que de buenas a primeras decidiera seguir a ciegas a un completo desconocido? ¡Y peor aún! ¿Por qué había subido a ese taxi sin pensar en las consecuencias? ¿Podría ser que Fantine se había cautivado por la simple presencia de una criatura como Levkin Innokentievich? No sería la primera vez que un ser humano siente inexplicable atracción por él, pero incluso Levkin se había sorprendido demasiado al ver que con Fantine no habían bastado más que unos minutos para tenerla a su merced. ⠀⠀⠀⠀Lo que Levkin no sabía era que Fantine estaba hecha una tormenta por dentro. Venía huyendo de su casa, de todo lo que le pesaba en los hombros; buscaba alejarse del presente, de sus conocidos, de sus amigos, y probar con desesperación un mundo donde sintiera que, al menos por un día, no existía. Fantine encontró esa oportunidad en el perfecto desconocido que la abordó fuera de la estación del tren, y que le ofreció una aventura de tres días. Tres días era un buen tiempo para descansar de responsabilidades y obligaciones, de toma de decisiones y de explicaciones. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿A dónde me llevas? —le preguntó, con expectativa y emoción. ⠀⠀⠀⠀Levkin ladeó la cabeza para verla bien: los ojos, los labios, y los ojos de nuevo. Tenía un brazo descansando sobre sus hombros, manteniéndola pegada a su cuerpo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Importa tanto? —respondió en un susurro, a escasos centímetros de su rostro. Su mano libre se acercó a su cara y con el pulgar le acarició una de las mejillas suavemente; sus ojos azul verdosos volvieron a descender hacia sus labios y Fantine lo notó, porque de inmediato soltó una risilla baja, nerviosa, y aceleró el pulso. Ese era el momento: Levkin la tenía en su punto más débil, casi derretida entre los dedos, así que empezó a hablarle profundamente, en un susurro tan bajo que ella no pudo diferenciar si lo estaba oyendo en su mente, o si de verdad estaba hablando—. 𝑆𝑜́𝑙𝑜 𝑑𝑒́𝑗𝑎𝑡𝑒 𝑙𝑙𝑒𝑣𝑎𝑟, 𝐹𝑎𝑛𝑡𝑖𝑛𝑒. —Ella empezó a asentir, embobada—. 𝑁𝑜 𝑣𝑎𝑠 𝑎 𝑛𝑒𝑐𝑒𝑠𝑖𝑡𝑎𝑟 𝑛𝑎𝑑𝑎 𝑚𝑎́𝑠 𝑚𝑖𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑠 𝑒𝑠𝑡𝑒́𝑠 𝑐𝑜𝑛𝑚𝑖𝑔𝑜. —Su pulgar llegó hasta el mentón femenino y la atrajo con suavidad para sellar sus palabras con un beso que empezó suave. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Fantine debía estar soñando por la forma en la que de pronto se sintió: como si estuviera flotando en una nube. ¿Se había muerto? Quizá, en algún punto dentro del tren, se había ahogado con su saliva al dormir; esas cosas pasaban, ella había leído artículos del tema hacía un tiempo. O tal vez el tren había sufrido algún accidente y al bajar, Levkin era el ángel que la llevaba camino al cielo, o al infierno, o al mismísimo intermedio donde no existía el bien o el mal. Y si era la vida real… Bueno, si era la vida real, sencillamente no se sentía como tal. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Estaba atraída a él, y ahora sentía un deseo creciente e incontrolable por entregarse en cuerpo y alma. Lo quería, quería que le quitara la ropa en ese momento y que la 𝖿𝗈𝗅𝗅𝖺𝗋𝖺, como si existiera una urgencia de sentir que le pertenecía, y por eso el beso que había iniciado calmo, ella lo intensificó. Sus labios rojos y gruesos se movieron más rápido; Levkin le correspondió, como era de esperarse, pero ella no encontró satisfacción: perdió todo el pudor y toda conciencia para darse cuenta de que el taxista intercambiaba miradas con Levkin Lavery, incluso mientras éste le mordía los labios y le sujetaba de uno de los muslos. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀

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𝗟𝗲𝘃𝗸𝗶𝗻 𝗜𝗻𝗻𝗼𝗸𝗲𝗻𝘁𝗶𝗲𝘃𝗶𝗰𝗵 | 𝐇𝐎𝐓 𝐃𝐎𝐆𝐒 𝐅𝐎𝐑 𝐃𝐈𝐍𝐍𝐄𝐑.

ㅤ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝗟𝗲𝘃𝗸𝗶𝗻 𝗜𝗻𝗻𝗼𝗸𝗲𝗻𝘁𝗶𝗲𝘃𝗶𝗰𝗵. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝐇𝐎𝐓 𝐃𝐎𝐆𝐒 𝐅𝐎𝐑 𝐃𝐈𝐍𝐍𝐄𝐑. ⠀⠀⠀⠀𝖩𝖺𝗇𝗎𝖺𝗋𝗒 𝟮𝟬𝟮𝟮. ⠀⠀⠀⠀𝖭𝖾𝗐 𝖮𝗋𝗅𝖾𝖺𝗇𝗌, 𝖫𝗈𝗎𝗂𝗌𝗂𝖺𝗇𝖺. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ʀᴏʟ ᴘʀɪᴠᴀᴅᴏ—Rowan Mayfier. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ 𝟭𝟮:𝟬𝟴 ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀El agua de la torrencial lluvia había conseguido empapar la ropa de Levkin tan sólo en los cortos trayectos de traslación del aeropuerto al taxi y del taxi a la entrada de 𝐿𝑎𝑣𝑒𝑟𝑦 𝐻𝑜𝑢𝑠𝑒. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀La famosa 𝐿𝑎𝑣𝑒𝑟𝑦 𝐻𝑜𝑢𝑠𝑒, tan imponente y preciosa por donde se le viera, pero tan olvidada y descuidada que daba lástima. La hierba estaba crecida y se desbordaba por la cerca de hierro negro que rodeaba el terreno de la casa y, ni hablar de los maceteros puestos en el balcón, plantas, ramas, flores secas y marchitas, y enredaderas que invadían gran parte de los muros y las barandas. ⠀⠀⠀⠀Levkin no quería imaginar lo que podía esperarle dentro, pues tenía más de veinte años de no pisar aquel suelo. La última vez había ido acompañado de su hermana menor, Svetlana, y se habían quedado un mes en 𝐿𝑎𝑣𝑒𝑟𝑦 𝐻𝑜𝑢𝑠𝑒 por asuntos 𝑝𝑜𝑙𝑖́𝑡𝑖𝑐𝑜𝑠, si se le podía llamar de esa forma a las conspiraciones contra la humanidad. Pero desde entonces ni siquiera habían procurado su digno mantenimiento. Levkin recordaba haber llegado a observar cartas por parte de los arrendatarios de New Orleans en el escritorio de su padre de la residencia en Maine, hacía algunos años, en las que demandaban que la casa debía verse limpia al estar ubicada en 𝐺𝑎𝑟𝑑𝑒𝑛 𝐷𝑖𝑠𝑡𝑟𝑖𝑐𝑡; pero tal como 𝐿𝑎𝑣𝑒𝑟𝑦 𝐻𝑜𝑢𝑠𝑒, esas cartas se habían apilado y empolvado en alguna esquina del escritorio de roble. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¡Joven Edmond! —El grito de una mujer se oyó desde antes de que la puerta principal se abriera. ⠀⠀⠀⠀Bajo el umbral de la puerta estaba ella, Tamara Lafayette. Lucía diferente gracias a las facturas que los años habían cobrado; su rostro estaba muy maduro y tenía arrugas en la piel; había aumentado de peso; su cabello ya poseía algunas hebras blancas por la vejez, pero seguía teniendo ese brillo en la mirada y en la sonrisa, como si le causara genuina felicidad volverlo a ver. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¡Tamara Lafayette! —exclamó Levkin en la entrada, bajo el techo del pórtico en donde finalmente se había resguardado de la lluvia. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Venga, entre, entre. —Tamara mantuvo la puerta principal abierta hacia adentro, y la segunda puerta de malla mosquitera abierta hacia afuera—. Estoy por meter a lavar todas las sábanas sucias que cubrían los muebles. Si me da su ropa mojada, la sacaré de la secadora en un rato. ⠀⠀⠀⠀Levkin sonrió, cálido y familiar, y se inclinó para saludar a la mujer. Ésta lo abrazó con un brazo, como si se tratara de un hijo recién llegado luego de una temporada fuera de casa, y le palmeó la espalda. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Cuántos días planea quedarse? —preguntó con cierto entusiasmo. ⠀⠀⠀⠀Aunque el muchacho había conocido a la ahora señora Lafayette cuando ella era cinco años más grande de lo que él aparentaba, había de admirar que el respeto nunca había sido un problema. Ella parecía haber comprendido, desde el primer momento, que, aunque él parecía joven, era mayor. Nunca hizo preguntas; al menos no preguntas peligrosas, porque justo en ese momento la señora ansiaba saber cuántos días estaría Levkin en la ciudad, cosa que al ruso tomó en curva. No lo había pensado, y si se ponía a pensar en eso (valga la redundancia), tampoco lo sabría en ese instante. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—No lo sé —contestó con franqueza—. ¿Días? ¿Semanas? —Empezó a caminar por el largo pasillo que lo llevaba a la estancia central en donde unas inmensas escaleras de mármol blanco y descanso negro, en forma de caracol, tenían su lugar—. Un tiempo indefinido, querida Tamara. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀La señora Lafayette había empezado a trabajar para los Innokentievich (𝘮𝘢́𝘴 𝘤𝘰𝘯𝘰𝘤𝘪𝘥𝘰𝘴 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘭𝘰𝘴 𝘓𝘢𝘷𝘦𝘳𝘺 𝘥𝘦𝘴𝘥𝘦 1905, 𝘤𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘳𝘰𝘯 𝘢 𝘕𝘦𝘸 𝘖́𝘳𝘭𝘦𝘢𝘯𝘴), a los 33 años de edad. Era la sobrina de la anterior ama de llaves de la familia (𝘲𝘶𝘪𝘦𝘯 𝘦𝘳𝘢 𝘭𝘢 𝘩𝘪𝘫𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘩𝘪𝘫𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘱𝘳𝘪𝘮𝘦𝘳𝘢 𝘢𝘮𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘭𝘢𝘷𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘢𝘣𝘪́𝘢𝘯 𝘵𝘦𝘯𝘪𝘥𝘰), y sabía el secreto sobre la naturaleza de su ser, pero nunca abrió la boca. Los Innokentievich, o bien, los Lavery tampoco la cuestionaron; los Lafayette, desde un comienzo, encontraron la protección que necesitaban al estar bajo el techo de Levkin y su familia, y tal vez por eso su agradecimiento y devoción se habían extendido a través de los años. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Fuera como fuera, la actual señora Lafayette no había dudado en acudir a 𝐿𝑎𝑣𝑒𝑟𝑦 𝐻𝑜𝑢𝑠𝑒 cuando recibió la llamada de Levkin, dos días antes, y desde entonces ella, su hija (a quien Levkin todavía no tenía el honor de conocer) y su esposo, se habían dedicado a limpiar la casa por dentro. ⠀⠀⠀⠀El señor Lafayette era un albañil; sabía de electricidad, plomería y carpintería, y por su servicio el ruso le había pagado por anticipado una generosa cantidad de dinero; ahora la casa contaba con corriente eléctrica, luz, agua, gas y un diagnóstico de tuberías que habría que renovar pronto. Aquel hombre trabajador había tenido la intención de podar el pasto crecido y darle una presentación decente a la fachada, pero la lluvia del día los había sorprendido desde muy tempranas horas, a lo que había tenido que abstenerse. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Por cierto… —La voz del ruso, que hablaba en un perfecto inglés británico, se volvió más fuerte al haberse alejado de la mujer que estaba cerrando la puerta—. ¿Dónde está tu esposo, Tamara? Le quiero decir que no se preocupe por la fachada de la casa. No quiero que se corra la voz de que un Lavery está en la ciudad. No todavía, al menos. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝟭𝟵:𝟰𝟳. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀[𝗶𝗠𝗲𝘀𝘀𝗮𝗴𝗲: 𝗟𝗲𝘃𝗸𝗶𝗻]: ¿𝙽𝚘𝚜 𝚟𝚎𝚖𝚘𝚜 𝚊 𝚕𝚊𝚜 𝟾:𝟹𝟶? 𝙻𝚊 𝚕𝚕𝚞𝚟𝚒𝚊 𝚑𝚊 𝚊𝚛𝚛𝚞𝚒𝚗𝚊𝚍𝚘 𝚎𝚕 𝚙𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎 𝚕𝚊 𝚙𝚊𝚛𝚛𝚒𝚕𝚕𝚊 𝚎𝚗 𝚎𝚕 𝚓𝚊𝚛𝚍𝚒́𝚗, 𝚙𝚎𝚛𝚘 𝚜𝚎 𝚖𝚎 𝚑𝚊 𝚘𝚌𝚞𝚛𝚛𝚒𝚍𝚘 𝚙𝚛𝚎𝚙𝚊𝚛𝚊𝚛𝚝𝚎 𝚘𝚝𝚛𝚊 𝚌𝚘𝚜𝚊. 𝙿𝚘𝚛 𝚌𝚒𝚎𝚛𝚝𝚘… 𝚕𝚊 𝚌𝚊𝚜𝚊 𝚙𝚘𝚛 𝚏𝚞𝚎𝚛𝚊 𝚜𝚎 𝚟𝚎 𝚖𝚊𝚕. 𝙼𝚞𝚢 𝚖𝚊𝚕. 𝙽𝚘 𝚓𝚞𝚣𝚐𝚞𝚎𝚜 𝚊 𝚞𝚗 𝚕𝚒𝚋𝚛𝚘 𝚙𝚘𝚛 𝚜𝚞 𝚙𝚘𝚛𝚝𝚊𝚍𝚊. 𝙻𝚊 𝚙𝚞𝚎𝚛𝚝𝚊 𝚎𝚜𝚝𝚊𝚛𝚊́ 𝚊𝚋𝚒𝚎𝚛𝚝𝚊, 𝚎𝚗𝚝𝚛𝚊 𝚍𝚒𝚛𝚎𝚌𝚝𝚘, 𝚙𝚛𝚘𝚋𝚊𝚋𝚕𝚎𝚖𝚎𝚗𝚝𝚎 𝚜𝚒𝚐𝚊 𝚎𝚗 𝚕𝚊 𝚌𝚘𝚌𝚒𝚗𝚊 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚌𝚞𝚊𝚗𝚍𝚘 𝚕𝚕𝚎𝚐𝚞𝚎𝚜. 𝙻𝚘𝚌𝚊𝚌𝚒𝚘́𝚗 𝚊𝚍𝚓𝚞𝚗𝚝𝚊. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝟮𝟬:𝟮𝟰. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀El antiguo tocadiscos estaba desempolvado y puesto en acción; de él se reproducía el álbum 𝑾𝒊𝒏𝒆𝒍𝒊𝒈𝒉𝒕 de 𝐺𝑟𝑜𝑣𝑒𝑟 𝑊𝑎𝑠ℎ𝑖𝑛𝑔𝑡𝑜𝑛 𝐽𝑟.¹ y la melodía resultaba armoniosa para oídos de Levkin, que tampoco podía dejar de escuchar la llovizna del exterior de la residencia. De vez en vez, cuando había viento, las gotas chocaban en los vidrios de las ventanas junto con algunas de las ramas de los árboles y arbustos trayendo algo de paz en el hombre, quien gozaba de los sonidos espeluznantes. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Con agilidad y sencillez, Levkin permanecía de pie frente a la estufa y movía con la diestra una pala dentro de un sartén, revolviendo un guiso de cebolla caramelizada, champiñones, tomate y pimentones. De su hombro izquierdo colgaba una pequeña toalla blanca doblada en dos, misma que usaba en ocasiones para limpiarse los dedos. Además de la toalla, llevaba encima un delantal negro para proteger su vestimenta (𝘱𝘢𝘯𝘵𝘢𝘭𝘰́𝘯 𝘯𝘦𝘨𝘳𝘰 𝘥𝘦 𝘷𝘦𝘴𝘵𝘪𝘳 𝘺 𝘤𝘢𝘮𝘪𝘴𝘦𝘵𝘢 𝘯𝘦𝘨𝘳𝘢 𝘥𝘦 𝘢𝘭𝘨𝘰𝘥𝘰́𝘯 𝘧𝘢𝘫𝘢𝘥𝘢) de cualquier mancha que pudiera causarse. ⠀⠀⠀⠀Apagó el fuego de la estufa en cuanto el guiso estuvo listo, y cogió la toalla de su hombro para dejarla reposar en la superficie de la mesa. Justo a un lado de la estufa, pero a la altura de su cabeza, estaba el horno que tenía la luz interior encendida: Levkin observó la comida desde la ventanilla rectangular, pero por la consistencia visual del queso que se estaba gratinando sobre las salchichas y el pan de los 𝐻𝑜𝑡𝑑𝑜𝑔𝑠 𝐺𝑜𝑢𝑟𝑚𝑒𝑡, decidió dejarlos en el calor unos minutos más. Miró la hora en el reloj de plata que envolvía su muñeca izquierda, y se quitó el delantal dejándolo colgado en el lugar que le correspondía. ⠀⠀⠀⠀Al salir de la cocina conectó con el comedor: un espacio amplio, con mesa alargada y capacidad para ocho personas, pero él sólo preparó dos lugares: la cabeza y el asiento a la derecha. Acomodó un par de cubiertos, servilletas, platos, y añadió un par de copas junto con la botella de vino tinto con la que acompañarían la cena. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝑅𝑖𝑛𝑔-𝑟𝑖𝑛𝑔-𝑟𝑖𝑛𝑔. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀La alarma del horno pilló. El joven regresó a la cocina, tomó la toalla de la mesa camino hacia el platillo principal, y sin más abrió la puerta tomando con la mano que tenía la toalla la charola. Pudo haber metido las manos al calor directamente; tenía la resistencia para ello, pero se había acostumbrado tanto a las acciones que lo hicieran ver como un humano, que ni siquiera había sido consiente de cómo hacía lo que hacía. ⠀⠀⠀⠀Los olores en conjunto que la carne de la salchicha y el queso desprendieron, hicieron que Levkin inspirara profundamente. Su estómago rugió con fuerza, pero él negó para sí mismo y llevó directamente la comida a la mesa donde cenarían; justo en ese momento escuchó cómo la puerta de la casa se abría. ⠀⠀⠀⠀Era Rowan, finalmente. Es decir, 𝑑𝑒𝑏𝑖́𝑎 𝑠𝑒𝑟𝑙𝑜. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Avanza por todo el pasillo y da vuelta a tu izquierda. —Le indicó desde la distancia, aun sin verla, dándole el camino directo al comedor—. Ponte cómoda, siéntete como en tu casa. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ —— ¹. 𝖶𝗂𝗇𝖾𝗅𝗂𝗀𝗁𝗍 𝖺𝗅𝖻𝗎𝗆 𝖻𝗒 𝖦𝗋𝗈𝗏𝖾𝗋 𝖶𝖺𝗌𝗁𝗂𝗇𝗀𝗍𝗈𝗇 ��𝗋 ( t.ly/u_Fo ). ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ㅤ  

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝗥𝗼𝘄𝗮𝗻.

——January, 2022. New Orleans, Louisiana, Mayfair House. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝟏𝟗:𝟏𝟓 ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀Rowan se probó el último de los tres vestidos que había elegido para la velada. Era inusual que tuviese tantos dilemas sobre su vestimenta, pero algo parecía haberle llevado al camino de la indecisión aquella noche. Tal vez se debía a una pesada jornada en el hospital, en donde las últimas semanas estuvo dividiendo su tiempo entre atender a sus pacientes y dotarse de paciencia para no entrar en conflicto con sus colegas. Otro asunto era los problemas familiares y por supuesto, sus propios dilemas, aunque no quería pensar demasiado en ello. Necesitaba relajarse y pasar una noche agradable en compañía de alguien que no fuera de su entorno cercano. ⠀⠀⠀⠀ Observó el reloj que colgaba de la pared, a un lado del enorme espejo del armario-vestidor. Habían pasado alrededor de veinticinco minutos desde que empezó a alistarse y debía apresurarse o de lo contrario, llegaría tarde. Se posó frente al reflector una vez más, mirando los detalles del vestido, ese que recordaba haber utilizado para un evento social cuando solía trabajar en San Francisco, pero que jamás había vuelto a usar. Era una pieza sobria y elegante a su criterio. Le llegaba debajo de las rodillas, ajustado a su figura, de color vino, con algunos detalles en negro. Sí, definitivamente ese era el vestido perfecto para una cita, los otros lucían muy llamativos y a Rowan lo que menos le gustaba era llamar la atención. ⠀⠀⠀⠀ Dio media vuelta para ir hacia el tocador, sin imaginar que casi chocaría contra él. De no haber sido por las hábiles manos que sujetaron su cintura, se habría caído de culo contra el suelo. ⠀⠀⠀⠀—Ese vestido asienta bien en tu figura, querida mía. ⠀⠀⠀⠀—Gracias, pero no es necesario que me sigas sosteniendo —respondió con tranquilidad. ⠀⠀⠀⠀Lasher sonrió y de inmediato se alejó, permitiendo que siguiera su camino hacia el tocador en donde tomó asiento. Observó ambos reflejos en el espejo, él la miraba fijamente. ⠀⠀⠀⠀—Ya sé que deseas acompañarme, es tu deber hacerlo, pero esta vez te quedarás aquí. ⠀⠀⠀⠀ El demonio asintió, aunque le conocía tan bien que lograba saborear su disgusto ante la negativa. ⠀⠀⠀⠀—Como desees, Rowan. Estoy bajo tus órdenes —respondió—. Sin embargo, debo preguntar algo al respecto. ⠀⠀⠀⠀¿Sabes con quién irás a cenar? Nueva Orleans es un sitio encantador, pero peligroso para personas con tanto… poder —añadió acercándose peligrosamente—. Ella sonrió con ironía. ⠀⠀⠀⠀—¿Existe acaso alguien más con algún motivo para dañarme? —comentó aplicando un poco de labial sobre sus labios. ⠀⠀⠀⠀—El mal está en todos lados, querida —espetó burlón, seguido de una carcajada. Había utilizado la misma frase que Carlota el día en que llegó a Nueva Orleans, advirtiéndole sobre los peligros a los que podría enfrentarse. ⠀⠀⠀⠀ Un toque en la puerta desvió su atención de la conversación. Para el momento en que se volvió nuevamente hacia el espejo del mueble, Lasher ya se había desvanecido. ⠀⠀⠀⠀—¡Adelante! ⠀⠀⠀⠀ Una mujer de mediana edad, se asomó a través de la puerta.⠀⠀⠀⠀—Señora, lo que pidió ya está listo. El señor Jenkins ha preparado el coche —avisó Delphine, el ama de llaves—. ⠀⠀⠀⠀—Gracias, Delphine. Bajaré en un momento. ⠀⠀⠀⠀ La joven terminó de arreglarse, cepillando la espesa cabellera que dejó suelta. Para complementar el atuendo, optó por unos botines oscuros, ya que afuera llovía a cántaros. Si se ponía zapatos abiertos, lo más seguro es que sus pies terminarían empapados. ⠀⠀⠀⠀ Antes de salir de la habitación, tomó su bolso, abrigo y móvil, el cual revisó al observar brillar la pantalla. Era un mensaje de Levkin. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝟏𝟗:𝟒𝟕. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀[𝗶𝗠𝗲𝘀𝘀𝗮𝗴𝗲: 𝗟𝗲𝘃𝗸𝗶𝗻]: ¿𝙽𝚘𝚜 𝚟𝚎𝚖𝚘𝚜 𝚊 𝚕𝚊𝚜 𝟾:𝟹𝟶? 𝙻𝚊 𝚕𝚕𝚞𝚟𝚒𝚊 𝚑𝚊 𝚊𝚛𝚛𝚞𝚒𝚗𝚊𝚍𝚘 𝚎𝚕 𝚙𝚕𝚊𝚗 𝚍𝚎 𝚕𝚊 𝚙𝚊𝚛𝚛𝚒𝚕𝚕𝚊 𝚎𝚗 𝚎𝚕 𝚓𝚊𝚛𝚍𝚒́𝚗, 𝚙𝚎𝚛𝚘 𝚜𝚎 𝚖𝚎 𝚑𝚊 𝚘𝚌𝚞𝚛𝚛𝚒𝚍𝚘 𝚙𝚛𝚎𝚙𝚊𝚛𝚊𝚛𝚝𝚎 𝚘𝚝𝚛𝚊 𝚌𝚘𝚜𝚊. 𝙿𝚘𝚛 𝚌𝚒𝚎𝚛𝚝𝚘… 𝚕𝚊 𝚌𝚊𝚜𝚊 𝚙𝚘𝚛 𝚏𝚞𝚎𝚛𝚊 𝚜𝚎 𝚟𝚎 𝚖𝚊𝚕. 𝙼𝚞𝚢 𝚖𝚊𝚕. 𝙽𝚘 𝚓𝚞𝚣𝚐𝚞𝚎𝚜 𝚊 𝚞𝚗 𝚕𝚒𝚋𝚛𝚘 𝚙𝚘𝚛 𝚜𝚞 𝚙𝚘𝚛𝚝𝚊𝚍𝚊. 𝙻𝚊 𝚙𝚞𝚎𝚛𝚝𝚊 𝚎𝚜𝚝𝚊𝚛𝚊́ 𝚊𝚋𝚒𝚎𝚛𝚝𝚊, 𝚎𝚗𝚝𝚛𝚊 𝚍𝚒𝚛𝚎𝚌𝚝𝚘, 𝚙𝚛𝚘𝚋𝚊𝚋𝚕𝚎𝚖𝚎𝚗𝚝𝚎 𝚜𝚒𝚐𝚊 𝚎𝚗 𝚕𝚊 𝚌𝚘𝚌𝚒𝚗𝚊 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚌𝚞𝚊𝚗𝚍𝚘 𝚕𝚕𝚎𝚐𝚞𝚎𝚜. 𝙻𝚘𝚌𝚊𝚌𝚒𝚘́𝚗 𝚊𝚍𝚓𝚞𝚗𝚝𝚊. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ Estuvo a nada de responder con uno de los stickers guardados en su galería, pero prefirió escribirle. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝟏𝟗:𝟒𝟗 ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀[𝗶𝗠𝗲𝘀𝘀𝗮𝗴𝗲: 𝗥𝗼𝘄𝗮𝗻]: 𝙹𝚘𝚍𝚒𝚍𝚊 𝚕𝚕𝚞𝚟𝚒𝚊, 𝚊𝚛𝚛𝚞𝚒𝚗𝚘́ 𝚗𝚞𝚎𝚜𝚝𝚛𝚊𝚜 𝚑𝚊𝚖𝚋𝚞𝚛𝚐𝚞𝚎𝚜𝚊𝚜, 𝚙𝚎𝚛𝚘 𝚍𝚎𝚜𝚌𝚞𝚒𝚍𝚊, 𝚝𝚎𝚗𝚐𝚘 𝚝𝚊𝚗𝚝𝚊 𝚑𝚊𝚖𝚋𝚛𝚎 𝚚𝚞𝚎 𝚌𝚘𝚖𝚎𝚛𝚎́ 𝚕𝚘 𝚚𝚞𝚎 𝚜𝚎𝚊 𝚚𝚞𝚎 𝚑𝚊𝚢𝚊𝚜 𝚙𝚛𝚎𝚙𝚊𝚛𝚊𝚍𝚘.⠀⠀⠀⠀𝙾𝚑, 𝚢 𝚗𝚘 𝚝𝚎 𝚙𝚛𝚎𝚘𝚌𝚞𝚙𝚎𝚜, 𝚖𝚒 𝚌𝚊𝚜𝚊 𝚎𝚜𝚝𝚊́ 𝚎𝚗 𝚌𝚘𝚗𝚍𝚒𝚌𝚒𝚘𝚗𝚎𝚜 𝚜𝚒𝚖𝚒𝚕𝚊𝚛𝚎𝚜, 𝚓𝚊𝚓𝚊𝚓𝚊. 𝚃𝚎 𝚟𝚎𝚘 𝚎𝚗 𝚖𝚎𝚍𝚒𝚊 𝚑𝚘𝚛𝚊. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ Respondido el mensaje, bloqueó la pantalla del teléfono y lo guardó en su bolso antes de abandonar la habitación. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀𝟐𝟎:𝟏𝟗 ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀—Señora, ¿está segura que es aquí? —dudó el chofer. ⠀⠀⠀⠀ El auto se había detenido frente a 𝑳𝒂𝒗𝒆𝒓𝒚 𝑯𝒐𝒖𝒔𝒆, una propiedad conocida en el barrio de 𝑮𝒂𝒓𝒅𝒆𝒏 𝑫𝒊𝒔𝒕𝒓𝒊𝒄𝒕 por tener un aspecto bastante descuidado a diferencia de las casas aledañas. ⠀⠀⠀⠀—Sí, es Lavery House, entonces es aquí. Ya sabía que tenía un poco de descuido, su propietario no viene hacer mucho. ⠀⠀⠀⠀—Oh, bueno… ¿Desea que la espere? Podría aparcar cerca de aquí y… ⠀⠀⠀⠀—Roger, está bien, estaré bien, ¿sí? —la doctora esbozó una sonrisa tranquilizante hacia el hombre de semblante preocupado que la observaba por el espejo retrovisor.—Sabes que puedo cuidarme sola. Es más, toma el resto de la noche libre, ve a casa y mañana nos vemos a la hora de siempre. ⠀⠀⠀⠀—¿Y quién pasará por usted cuando termine? ⠀⠀⠀⠀—Tal vez regrese caminando, sabes que disfruto de los paseos nocturnos —expresó con seguridad— Anda, ve. Dale mis saludos a Rose. ⠀⠀⠀⠀Jenkins suspiró rendido, algo muy característico en él. Formaba parte del personal de la Familia Mayfair hacía más de veinte años. Era un buen hombre que vivía junto a su esposa Rose, que antes hubo trabajado para la casa, pero por problemas de salud tuvo que abandonar su empleo. Era el chófer principal de la casa y se encargaba de llevar a Deirdre a sus citas médicas, o realizar algunos recados que Carlota, quien entonces tenía la responsabilidad del hogar, le indicara. ⠀⠀⠀⠀ Ahora que ella estaba viviendo en la ciudad y era la delegada familiar, Roger se encargaba de transportarla al trabajo o a donde lo desease. En los pocos meses que tenían de conocerse, se formalizó entre ellos un vínculo cálido, parecido a la relación entre un padre e hija. Por esa razón se miraba tan inseguro al dejarla a los pies de una casa en paupérrimas condiciones. ⠀⠀⠀⠀ Seguía lloviendo cuando Rowan bajó del auto con su bolso, un canasto que desprendía un agradable olor a horneado —si se acercaba lo suficiente—, y un paraguas. ⠀⠀⠀⠀Caminó directamente hacia la entrada, escuchando como el motor del vehículo que le había transportado se alejaba lejos del lugar. Cuando estuvo bajo el techo que daba al recibidor, cerró el paraguas y lo ubicó a un lado de la entrada sin ganas de empapar más el mosaico ajeno.Tocó la puerta una primera vez, pero al parecer la lluvia no dejó que su llamado fuese escuchado, por lo que se atrevió a mover el pestillo que no tenía seguro, algo bastante común en las casas de 𝑮𝒂𝒓𝒅𝒆𝒏 𝑫𝒊𝒔𝒕𝒓𝒊𝒄𝒕. ⠀⠀⠀⠀ Entró casi de inmediato, resguardándose de la tormenta que afuera seguía cayendo. Sus ojos escudriñaron el sitio que, para su sorpresa, lucía distante de la parte exterior. No como una casa moderna en sí, más bien, como una propiedad que se estaba reformando poco a poco, en especial por el olor a pintura fresca. ⠀⠀⠀⠀ La voz de Levkin la sacó de sus pensamientos cuando le escuchó vociferar en tono alto desde un punto de la plana baja. ⠀⠀⠀⠀”Tiene acento británico", se dijo a sí misma a su vez, avanzando hacia el punto de donde provenía la voz masculina, sin dejar de observar el interior de la vivienda. La mayoría de los objetos eran de aspecto antiguo, lo sabía porque en su hogar se veía lo mismo. ⠀⠀⠀⠀ El olor a ahumado se coló por sus fosas nasales, haciéndole suspirar de tan agradable que se sentía. Avanzó un poco más hasta que lo vio. Estaba de pie, muy cerca del horno, vistiendo en su totalidad de negro, con un delantal puesto, luciendo como todo un hombre hogareño. ⠀⠀⠀⠀ No pudo evitar la sonrisa que en su rostro se formó, porque su cita lucía muy bien. Solo esperaba no haberse ruborizado, en su pálida piel se notaría rápido. ⠀⠀⠀⠀—Buenas noches, chef. Espero no haberle de interrumpir en sus labores, pero me temo, he traído esto —levantó el canasto que colgaba de su brazo izquierdo, señalándolo—. ¿En dónde lo dejo? ⠀⠀⠀⠀Rowan dio un par de pasos, a su vez observando la fina, pero antigua fachada de la cocina hasta quedar frente a su anfitrión. ⠀⠀⠀⠀—Por cierto, es un placer conocerte, finalmente, Levkin. Me gusta tu casa —añadió extendiendo su mano libre—.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝗟𝗲𝘃𝗸𝗶𝗻 𝗜𝗻𝗻𝗼𝗸𝗲𝗻𝘁𝗶𝗲𝘃𝗶𝗰𝗵.

ㅤ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀El sonido de los tacones contra el parquet color hueso, cada vez más cerca, hizo saber a Levkin que la mujer estaba a nada de llegar a su presencia, sin embargo estaba a media labor y no podía dejar suspendida en el aire su tarea, sólo por voltear a recibir de una manera más digna a su cita de esa noche, por lo tanto, el ruso sujetó con firmeza el mango del sartén (𝘲𝘶𝘦, 𝘢𝘶𝘯𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘳𝘢 𝘱𝘦𝘴𝘢𝘥𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘦́𝘭 𝘳𝘦𝘴𝘶𝘭𝘵𝘢𝘣𝘢 𝘭𝘪𝘷𝘪𝘢𝘯𝘰) y lo ladeó empujando con una cuchara de madera todo lo que se había guisado; los champiñones, la cebolla, los pimientos morrones y el tomate rojo quedaron en el interior de un recipiente circular de porcelana, apto para mantener los alimentos calientes. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Estoy por terminar —contestó con calma al oír las que fueron sus primeras palabras. ⠀⠀⠀⠀Y así fue: el sartén y la cuchara fueron directamente a la tarja, y entonces se pudo dar media vuelta para vislumbrar a Rowan por completo. ⠀⠀⠀⠀En su rostro se pintó una enorme sonrisa, verdaderamente alegre y encantada. Rowan era preciosa. Sus fotos definitivamente no le hacían la justicia mínima. Y sus ojos… ni hablar de sus ojos; ahora entendía por qué le decían que parecían aterrados, pero a él le parecieron dos enormes zafiros, únicos y profundos; oscuros y a su vez, luminosos. La admiró lo que consideró aceptable antes de pasar sus verdes ojos a la canasta que prendía de su brazo. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Yo me hago cargo. ⠀⠀⠀⠀Antes de acercarse se limpió las manos con la toalla que le había servido de apoyo durante la última hora. Después rodeó la mesa central a la que comúnmente se le llamaba isla de la cocina, y llegó a ella extendiendo uno de sus brazos para quitarle el peso de la canasta. Cuando estuvo bien sujeta en su puño el olor del interior se desprendió y él inspiró usando la otra mano para levantar la tela que cubría lo que fuera que había ahí, que olía delicioso. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—¿Será que me harás comer el postre antes de la cena? —cuestionó con cierto tono juguetón, dejó la canasta en paz y alzó la mirada para encontrarse con la de Rowan. Ella era alta, y aún así Levkin le sacaba media cabeza—. Déjame decir que te ves absolutamente deslumbrante. Y ese color que estás usando… —Presionó sus labios gruesos hasta formar una línea, e hizo un gesto de antojo—. El guindo es mi predilecto. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Sin más, se dio media vuelta y caminó para poner la canasta en la superficie de la isla. Cuando volvió a Rowan, el muchacho colocó la palma de su mano contra su espalda, muy cerca de la curva baja, y con suavidad ejerció presión para guiarla, junto con él, hacia el comedor. ⠀⠀⠀⠀Levkin no sabía de espacios personales. Más bien, al creerse dueño del tiempo y del espacio, no conocía los límites, y menos cuando algo era de su interés. ⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—La casa es muy vieja —empezó a decir—. Pero gracias. Hace dos días empezaron a limpiarla y darle los retoques necesarios para hacerla ver decente para hoy, pero creo que tendré que cambiar muchas cosas si planeo instalarme por aquí algún tiempo. —Innokentievich soltó a la doctora y se colocó detrás de la silla de la derecha arrastrándola lejos de la mesa para que pudiera tomar asiento—. No quiero modificar su esencia, y me gustan todos los accesorios antiguos que posee, pero si te hablo de todo aquello que no se ve… —Negó y volvió a la cocina, solo, para ir por el recipiente circular donde estaba el guiso. Tras regresar recorrió la silla de cabecera en donde él se sentaría, y el recipiente lo colocó en la mesa, a un lado de los humeantes horneados 𝐻𝑜𝑡𝑑𝑜𝑔𝑠—. Con decirte, me di un baño hace unas horas, y la casa entera hizo chirridos y ruidos extraños por todos lados. ⠀⠀⠀⠀Antes de él mismo tomar asiento, tomó la botella de vino, la abrió con la misma simpleza con la que podría estar destapando alguna botella de agua, y empezó a servir el par de copas. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀—Por cierto, Rowan… —cuando terminó de servir su copa, que fue la última, dejó el vino a un lado y la tomó entre los dedos—, … para mí también es un placer conocerte al fin, así que salud por eso. —Ladeó su copa hacia ella en un brindis, y le dio un corto sorbo al delicioso vino tinto cultivado y preservado en una antigua bodega inglesa, hasta que él lo trajo consigo. ㅤ