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culturacalle33 · 6 years

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EN EL CERTAMEN JUVENTUD 76 EN DON BOSCO ¡Ricardo Arjona, triunfante!

LA NACIÓN/por los colegios PÁGINA 15

LA PÁGINA DEL COLEGIO SAN SEBASTIÁN

EN EL CERTAMEN JUVENTUD 76 EN DON BOSCO

¡Ricardo Arjona, triunfante!

Entrevista a: Eduardo F. Pérez Rodas.

El pasado 17 de agosto, Ricardo Arjona M. trajo un laurel más para nuestra querida casa de estudios, pues, fue como representante del colegio al festival de la canción que se realizara en el colegio “Don Bosco” en su certamen JUVENTUD ‘76.

La XXV promoción felicita a Ricardo por el triunfo obtenido en esta difícil rama. A continuación lo entrevistaremos para que nos cuente cómo llegó a dicho certamen de la canción Juventud ’76.

- ¿Cuál es tu nombre completo?

- Edgar Ricardo Arjona Morales

- ¿En qué grado estudias?

- Primero básico sección “B”.

- ¿Qué edad tienes?

- Doce años cumplidos.

- ¿Cómo fue que tú llegaste a dicho concurso de la canción?

- Fue gracias a la XXV Promoción la cual me dio la oportunidad de cantar en la celebración del día de la madre, y gusté, entonces el maestro Marroquín me informó del concurso que se efectuaba en el colegio “Don Bosco” y que yo iría en representación del colegio a dicho concurso

- Cómo se llama la canción con que obtuviste el primer lugar?

Gracias Al Mundo

-Quién es el compositor de dicha canción?

La canción es mía, pues es el reglamento de dicho concurso.

- ¿En qué te inspiraste para componerla?

- En conclusión en todos aquellos países que brindaron ayuda a nuestra patria en los momentos de dolor después del pasado cuatro de febrero.

- ¿Cómo te sientes después de haber obtenido el primer lugar en ese certamen?

- Orgulloso de haberles ganado a tantos jóvenes, que en realidad son promesas de la canción nacional, pero en ningún momento los menosprecio si no los admiro, más que todo contento de haber traído al colegio el primer lugar.

- ¿Qué es lo que más anhelas en tu vida?

- Que la juventud no vaya creciendo por aquel mal camino que ha desviado a tanta juventud que pudo haber llegado a ser un valuarte de nuestra patria y llegar a cultivarme más en el arte de la música.

- ¿Quién te acompañó en dicho concurso en la música?

- Pues yo lo hice acompañándome de mi guitarra.

- ¿Tocas otro instrumento además de la guitarra?.

- Sí, la flauta, melódica, piano.

Para finalizar la entrevista nos pide que quiere despedirse con unas palabras para la gran familia del colegio “San Sebastián”.

- A pesar de ser el primer año que me encuentro dentro de esta gran familia de San Sebastián, les dedico este triunfo, pues me siento muy contento dentro de dicha familia.

A continuación les damos la letra de la canción:

GRACIAS AL MUNDO

La naturaleza que ayer nos dio el pan

Hoy se ensañó en nuestro suelo

Llenando de luto y miseria los campos

Un trágico cuatro de febrero

Cuando los niños de mi patria en un sueño profundo y feliz despertaron

Al alba tiñendo de sangre los pueblos más pobres de mi Guatemala

Caminante no hay camino,

se hace camino al andar

construyamos nuestra patria

para un mañana mejor.

Salvador, Honduras, Nicaragua,

Costa Rica, Panamá

Y Sur América, hermanados por el trágico suceso

Nos tendieron la mano en franca ayuda

El pueblo Charro y Norteamérica

Difícilmente podremos olvidarlo con tractores, viviendas y alimentos

Invadieron la tierra del quetzal

Caminante… Bis

Ejércitos sin armas nos mandó el pueblo

Dinámico del tío Sam.

Ayuda de Europa, África y Asia tampoco se hizo esperar.

Caminante… Bis.

Hablado:

Gracias, gracias amigos del mundo,

Gracias por curar nuestras heridas Guatemala recordará

#CultuRa #BuscandoElPepelCrepé #MundoArjona #infomundoarjona #ricardoarjona #MuseoItinerante #museogRAfía #MemoriaHistórica #CircoLaDespedida #CircoSoledad

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culturacalle33 · 6 years

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RICARDO ARJONA SE AVENTURA NUEVAMENTE EN ESPAÑA

La relación Ricardo Arjona/España se da desde antes de ser concebido: “Yo Nací en Cádiz, España, en el año de 1855…” es la frase con que inicia un intento suyo por hacerse de una autobiografía.

El 20 de noviembre de 1989, es la fecha en que parte de Guatemala buscando compartir su música con nuevos públicos, en nuevos escenarios. Su Destino: España. Sin embargo, una primera parada obligada en México lo hace permanecer en ese país más de lo esperado en donde, y sin saberlo, se iniciaría la consolidación de la carrera artística que inició en su país natal años atrás….

Para 1993 yo tenía muy arraigada la costumbre de regalarme algún disco los días de pago. Me encantaba caminar hasta una tiendita en la calle Velarde del Malasaña en donde ya me conocían y me recomendaban muy buena música. Una tarde-noche de aquellas llegué, como era mi costumbre, y compré varios discos. Irónicamente no recuerdo de qué artistas. La chica del mostrador me entregó mi compra en una bolsita que dejaba ver que había un disco que no era mío, así que lo tomé para hacerle ver el error. Cuando se lo ofrecí, ella me dijo con cierta indiferencia: “es un obsequio por tu compra, un promocional para algunos clientes frecuentes”. Le agradecí el obsequio y me lo llevé a casa. No era algo tan extraño, aunque sentí que era más por deshacerse del material que por agradarme. Ya en el autobús me invadió la curiosidad y lo saqué. El disco de vinilo de 45 rpm estaba dentro de una funda en la cual aparecía la foto del artista en una pose varonil con la guitarra al hombro: Ricardo Arjona “Primera Vez”. Luego, al voltearlo, descubrí que la disquera era mexicana, Sony Music Ent. y que había sido dirigido y realizado por el artista, cosa que me gustó. Los cantautores me han gustado siempre, los prefiero a los intérpretes (una cosa mía). Lógicamente extraje el disco con cuidado, no sin antes alzar la vista y percatarme del lugar por el que iba. No faltaba mucho para llegar a mi destino pero quise ver un poco más y deslicé con cuidado aquella pieza de vinilo, con un sticker amarillo que tenía los detalles de la obra, básicamente, los mismos de su funda más la frase “promocional, prohibida su venta”. Coloqué todo en su lugar y me preparé para bajar del autobús. Ya había anochecido y quería llegar pronto a casa.

Después de la cena solía encender el tocadiscos y disfrutar de la música que había adquirido. Tenía mucha seguridad de que el disco que me habían obsequiado no provocaría nada en mí y quedaría por allí medio abandonado, así que decidí escucharlo primero para quedarme disfrutando de los demás. La aguja cayó y los surcos en el disco fueron soltando de a poco la música y la voz que la acompañaba…

“Despacio comienzo en tu boca, despacio y sin quitarte la ropa, mi cama no merece tu cuerpo, virgen como el amazonas, mucho para un lobo cazador, pero ideal para el amor…”

Fue algo extraño pero con la canción sonando me transporté mentalmente a algunos años atrás y la voz que inundó mi apartamento fue tomando el rostro del chico aquel junto al cual hice promesas de amor eterno que no cumplí. Ese desconocido revivió en mí momentos casi olvidados, como si conociera lo vivido, como si entendiera mi historia…

Unos días más tarde regresé a aquella tienda de discos buscando el Lp descrito en la parte posterior de la funda de “Primera Vez”: Animal Nocturno era el título y la chica de la tienda, un poco extrañada, me dijo que no lo tenían, pero que vería si podía conseguirlo. Tuve que hacer dos o tres visitas más para obtenerlo. La chica me recibió con una sonrisa y me lo entregó. Era la misma portada pero al voltearlo pude leer el nombre de los 11 temas que contenía. La rutina fue la misma y escuchar el disco completo fue genial. Lo escuché hasta el cansancio, pero no solo eso. Me di a la tarea de averiguar más, sin embargo, poco o nada se sabía de este cantautor guatemalteco. El disco sufrió el desgaste normal del uso que le di y un día cualquiera mi novio apareció por la puerta con una cajita y una sonrisa de misterio. Al mostrarme su contenido dejó ir una frase de advertencia: “para esto tendrás que saltar a la nueva era y comprarte un reproductor nuevo”. Así llegó la versión en cd de aquel disco que llegué a amar y con el cual me llegué a identificar tanto…

Dos años después, en 1995 recibí una llamada de la tienda de discos. Cristina, la chica de la tienda me contó que había recibido un nuevo disco de Ricardo Arjona: Historias de un Animal Nocturno, encontró un sitio en mi casa, un lugar de honor entre mis discos consentidos. Aquel trabajo, según pude descubrir poco después, contenía temas del Animal Nocturno que ya tenía y de los discos Historias y Si El Norte Fuera El Sur que se editaron únicamente en América. Tiempo después, cuando la globalización me permitió compartir esta pasión por el trabajo de aquel guatemalteco con gente de otras latitudes, supe que este disco solo se había editado en España y con esto empezó a surgir la esperanza de poder verlo alguna vez en vivo. “Sigue intentando entrar en España” me dije y sentí que pronto lo lograría…

Mi entorno cercano estaba cansado de Ricardo Arjona. Fue casi imposible enganchar a mis amistades de la forma en que yo lo estaba. Algunos sintieron gusto por algún tema en particular. Otros, se emocionaron por un tiempo pero lo dejaron atrás, pero nadie compartía mis sentimientos. Fue la apertura de las comunicaciones digitales la que me permitió encontrar cómplices, incluso en mi propio país. Gente que se emocionaba hasta la locura como yo.

Cuando Andrés me llama un día del año dos mil, para contarme que Arjona había estado en Barcelona rodando el video de una canción llamada “El Problema” no lo podía creer. “Mi novia me avisó” me dijo, y yo, entre emocionada y frustrada le dije “¡¿otra vez?!” Apenas podía creer que Arjona había estado nuevamente trabajando en España, tal y como cuando dos años atrás, supimos que el video del tema “Cuando” fue rodado también en la misma ciudad española. ¡Que ganas de ser adivinos y poder llegar a presenciar aquellos eventos!…

Andrés Núñez era un chico de Aranjuez. Sí, como el concierto de la canción. Nos conocimos por internet, (¡maravillosa la tecnología!) Este chico sabía tanto de Arjona que me dejó impresionada. Nos hicimos buenos amigos y pudimos compartir emociones comunes: En 2003 vimos emocionados su participación en el programa Música Sí. Todos veíamos que él seguía intentándolo. Llegó promocionando un disco que nos encantó, Santo Pecado. “Siempre llegamos tarde”, siempre nos enteramos que “estuvo” y “participó”… Siempre en pasado. ¡Fue frustrante! Mientras, veíamos que en América había convivencias, conciertos, firmas de autógrafos. ¡Dios! ¡Que ganas de que pasara eso en España por una vez!

El tiempo no pasaba tan rápido y era a veces inevitable caer en el conformismo: escuchar los mismos discos, las mismas canciones. Pero me gustaba pensar que España no quedaba en el olvido para Arjona y que constantemente nos mandaba guiños para hacernos saber que seguíamos entre sus metas a alcanzar, como en el 2007, que hizo aquel dueto de “Sin Daños A Terceros” con Marta Sánchez. ¡Dios! ¡Qué versión!

Este tipo no para de hacer cosas que me gustan. Se me hizo religión visitar una o dos veces por semana el café que quedaba a unas calles, en el barrio Corralejos. Allí podía pagarme un tiempo para usar una computadora con servicio de internet y buscar las novedades de Ricardo. Sí. Ricardo, porque lo hice mi amigo, mi biógrafo personal, sin que él lo sepa. En América siempre había noticias, siempre se enteraban antes que nadie de las cosas por venir. Mi amiga Aura me escribía con regularidad para compartir información, intercambiar emociones o simplemente ponernos al día con nuestras vidas. Después de casi 4 años de espera supe que Ricardo por fIn tendría un material para España. “Dicen que habrá una versión para España de Adentro…” “Y si ché, conozco algunas chicas que están buscando información como locas y en cuanto sepan algo yo te escribo, tenés que estar pendiente de mí….”

Para ese año, era mucho más fácil cruzar el charco cibernéticamente y tener detalles. Mi amiga Cristina, encontró trabajo como gerente en una de las tiendas de El Corte Inglés después de que aquella tiendita de vinilos cerrara sus puertas un tiempo atrás. En 2007 me pidió pasar a la tienda a verla porque la tenía muy abandonada. “¡Como el Arjona ese no tiene nuevos discos, tú no asomas las narices tía!” me dijo en tono molesto, así que aprovechando mi día libre, les pedí a Lucía y Pablo que me acompañaran. Mis hijos también amaban la música. Aunque a Lucía no le agradaba nada mi obsesión por Ricardo, me complacía y aceptaba mis locuras. Pablo era todo lo contrario. Había crecido escuchando al guatemalteco y se había identificado con muchos de sus temas. Era mi cómplice en casa y gracias a él podía yo flipar cuanto quisiera con Ricardo. Entramos a la tienda y de inmediato Lucía desapareció en la sección donde podía encontrar los éxitos juveniles del momento. Pablo me acompañó a saludar a Cristina, quien nos hizo señas de acercarnos hasta el mostrador donde estaba organizando el material nuevo. “Mírame, sacando del horno los pasteles” me dijo. “Esto recién llegó a la tienda y hay que organizarlo y tú deberías ayudarme” mientras me daba un abrazo fuerte. De inmediato se volteó y busco en una de las cajas un disco. En verdad que los ojos se me pusieron como platos. Solté un grito que hizo voltear a varios clientes de la tienda. ¡No lo podía creer! Cristina me había dicho que no tenía noticias de una edición para España del disco Adentro a pesar que hubo un video con la chica Chenoa que recién surgía de Operación Triunfo. La verdad es que no dio pie con bola en los medios, así que imaginé que no habría disco, sobre todo después de que saliera en América 2 años atrás. En ese 2007 salía en el continente americano “Quién Dijo Ayer” el que tuvo también su versión especial para España pero hasta 2008, con una portada distinta y con algunas diferencias. Una era justamente el dueto con el argentino “Sandro” pues venía en éste, una versión solo con la voz de mi Ricardo querido. La apertura del mercado me tenía muy feliz, porque aquél sufrimiento para conseguir algún disco cada vez era menor. Mis amigos me ayudaban a conseguir los que salían en América, aunque salieran un poco más caros de adquirir y había concluido que él no nos olvidaba… Siempre había “alguito” para España, para compensar su ausencia.

Para ser sincera, todos los seguidores en España teníamos pocas o nulas esperanzas de verlo en vivo, a menos que nos hiciéramos de muchísimos Euros para viajar al nuevo continente. No crean, la idea me revoloteaba más de una vez en la cabeza y habría sido la caña! Pero ya con una familia y otras responsabilidades era mucho más complicado. Fue por eso que cuando salió el 5to Piso todo fue normal. Nos enloquecimos porque fue un discazo!!! Pero cuando Lucía entró del Cole agitada gritando “¡Mamá, mamá! ¿Qué no te has enterado aún? ¡¡¡Que Arjona viene a dar conciertos a España!!!”

La regañé. Me sentí molesta porque pensé que estaba de coña y es que después de esperarlo por 16 años era difícil creer algo así. ¡Pero era cierto!! Al poco rato recibí llamadas y mensajes. ¡Era increíble el revuelo! Se me quemó la comida y fui un completo desastre todo el día. Simplemente no podía concentrarme en nada. Resulta que por alguna razón, Arjona se asocia con la entidad encargada del turismo en Guatemala y organizan todo para que por fin, él cante en España. ¡¡Era para no creerlo!! Arjona en España. Venía a Tenerife, Sevilla, Barcelona y por supuesto Madrid. Pude notar al pasar los días que no solo el grupo de españoles que le seguíamos estaba entusiasmado sino la comunidad latina en el país y claro, Arjona es ARJONA en América y ¿quién se pierde un show de él?

¡Dios! Esos días fueron tremendos… ¡me preparé tanto! Me sonreía el doble. No. ¡El triple de veces al día! incluso me puse a dieta. Quería verme como la Bailarina Vecina que vivía en el piso de arriba, el tiempito que vivió en España y por supuesto, sin yo estar enterada de tal acontecimiento, ¡como siempre! Y pensaba llorar a mares con Nadie Sabe A Dónde Va, que compuso inspirado en los acontecimientos del 11 de marzo del 2004, en donde perdí a mi querido Andrés y a su novia.

Creo que fue una de las decepciones más grandes de mi vida, cuando apenas unos días antes del concierto en Madrid tuve que ser hospitalizada por un problema en la matriz. Ni siquiera puedo recordar el dolor físico, antes y después de la operación, como el dolor emocional que me dejó tener que faltar a algo que esperaba hacía más de 15 años! Me deprimí y odié a todos aquellos que sí fueron, incluso chicos adolescentes, hijos de amigos míos que hablaban de lo espectacular que fue. El doctor me dijo que la depresión era algo natural al perder mi matriz, pero yo sé que no. Pasé de estar cabreada a estar inmensamente triste; no quería nada y hasta Paula tenía detalles “arjonaenos” conmigo. En esa época se la pasaba tan activa en el internet buscando cualquier noticia que me alegrara. Se metían a cuchichear con Pablo, confabulando cosas para hacerme feliz. Poco hubo para eso. Apenas la transmisión de la gala de los Premios Cadena Dial del cual Ricardo había obtenido un galardón. Se me hizo un nudo en la garganta cuando fue otra persona quien lo recibió en su nombre, pues Ricardo tenía a su padre con serios quebrantos de salud. Ya sabíamos de ello. El rumor estaba de que era grave y ese rumor por desgracia fue cierto y concluyó con que el señorón falleció… Era tiempo de dejar de lamentarse por lo que no se pudo y agradecer por la vida y por la oportunidad que seguramente vendría muy pronto.

Como si fuera parte de mi familia o un amigo cercano, el dolor de Arjona por la pérdida de sus seres queridos fue mi dolor también, claro en menor grado. Me hizo valorar a mis hijos que se comportan como mis padres. Ya universitarios e independientes, eran mi orgullo: Pablo, fiel seguidor de nuestro guatemalteco consentido vivía al día con su carrera y se la daba de evangelizador ante sus amigos y familia, incluso mucho más de lo que en su momento hice yo. Su hermana al contrario es más de la música anglo y no para en un artista más de algunos meses. Seguí la gira “Viaje” por todas las redes sociales, suspirando y llorando al imaginarme allí. En 2015 tuve un “alegrón” cuando se rumoreó que venía y cerraba aquí esa gira, pero no pasó de eso y no fue sino hasta el 2017 que supimos de forma “oficial” que venía nada menos que a iniciar la gira del nuevo disco Circo Soledad a España. Esta vez hasta mis hijos se unieron a la fiesta, hicimos todos los arreglos. Nos informamos y nos preparamos nuevamente, pero no para recibir la terrible noticia de que se cancelaba. Mis hijos decidieron cenar en la casa esa noche. Tal vez creyeron que me tiraría de la ventana o algo similar, pero no. Me dirigí al tocadiscos que compré hace un par de años, (¡que ironía!) y que uso más que cualquier otro aparato que reproduzca música en la casa. Está justo en la esquina donde entra la mejor luz de la ventana pero sin que pegue el sol directo. Ahí hay una lámpara de pie que conseguí en una venta de garage que imagino es de los 80’s o 90’s y mis preciosos vinilos de Arjona, al lado, en una caja de madera hecha a medida, con tapa, para que nada los dañe. Abrí la tapa y saqué mi vinilo Circo Soledad. Lo coloqué y cenamos en silencio. Mi familia sorprendida y yo con una sonrisa de satisfacción: “Sé que algún día lo veré, solo debo esperar el momento y este disco es tan increíble, que compensa la nueva decepción…”

Siento la mano de Lucía tomando mi mano derecha y la de Pablo la de la izquierda, “Están sudadas ¿o son las mías?” Esta vez no me puse a dieta y apenas unos minutos antes de salir de casa me percaté que no tenía maquillaje, ni pancarta, ni camiseta, solo tengo en mi bolsa tres tickets para la sección más cercana. Mis hijos me acompañan. Ellos las pagaron. Y parada en la fila, veo sin ver las emociones, las sonrisas, los selfies que se toma la multitud a mi alrededor. Los chicos me ven sin decir nada y yo los veo siendo niños, bailoteando con “No me importa nada” y me veo a mí, llorando a moco tendido mientras friego los platos con Sin Daños A Terceros y siento este momento como un castillo de cartas que con la más leve brisa se desbarataría. No me atrevo a sentir. Estoy petrificada esperando que algo me arruine otra vez el momento, pero no… se escucha un murmullo y una algarabía que me saca de mi transe y unos metros adelante de nosotros, se abren las puertas y caminamos hacia un destello de luces. A los lejos, llega el murmullo de música y al atravesar el umbral del WiZink Center me encuentro de frente, por fin, el Circo Soledad ante mí. Ya las palabras sobran. Solo sé que estoy aquí y él estará aquí, tras 25 años de espera por “Primera vez”…

Fuente Fotografía: @CultuRa_Calle33

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