La esencia de las telenovelas latinas radica en la matriz socioeconómica de la región. La profunda desigualdad y la falta de acceso a bienes y servicios básicos suele ser el desencadenante de las tramas en torno a las heroínas de clases populares. En La Usurpadora, por ejemplo, Paulina no hubiera accedido a suplantar a Paola si su madre enferma hubiera tenido cobertura médica o su salario como empleada de un hotel de lujo le permitiera acceder a ese servicio. Así como tampoco, si la policía no criminalizara la pobreza.
representación de los obreros en las novelas: además de la romantización de la relación trabajador-patrón (patroncito) típica de las novelas, es común ver "buenos y leales" trabajadores que no acceden a la jubilación y mueren en el puesto
A diferencia de otras villanas cuya obsesión es el amor del galán, Paola antagoniza porque desea disfrutar de la vida, viajando y teniendo amantes. Solo rivaliza por su marido cuando su patrimonio económico peligra. Mientras el resto de las villanas se pasan la novela inventando complots para arruinar a la heroína, Paola pasa la mayor parte de la trama de vacaciones con sus amantes. Paola, reina y soberana de las villanas.