severacausaperdida - Tumblr blog

severacausaperdida · 1 year

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Mi diario

Cuando estaba pequeña tenia un diario, no sé de quien fue la idea de darme un diario donde expusiera todos mis sentimientos y mis ideas. Recuerdo "esconderlo" entre mi ropa para que no lo leyeran, claro ahora que lo pienso, creo que nunca estuvo fuera del alcance de mi madre si quizo leerlo, o de mi hermana o mi padre. Teníamos un solo closet donde todos guardábamos nuestra ropa, y estaba en la única recámara de nuestra casa, donde todos dormíamos.

No recuerdo cuándo, a que edad, ni porque le di el diario a mi abuela para que lo guardara. No sé cuantos años pasaron de eso, ya que he tratado de recordar porque se lo di y no sé la respuesta. Pudo tener el diario por años, tal vez otras personas lo leyeron, nunca lo sabré y creo que al final no importa.

Tenia alrededor de 35 años cuando lei los pensamientos que tenia a los 9 - 10 años, y lo único que puedo pensar al leerlo es que todos mis miedos se volvieron realidad. Una vez más olvide lo que escribí y no he hecho nada para que los miedos de esa niña no se les estrellaran en la cara.

Todo mi niñez fui la niña chaparrita y gorda, siempre comparada con su hermana delgada. Y uno de mis miedos era seguir engordando. Imagino que al oír a mis padres siempre discutir por dinero, darme cuenta que éramos pobres y aunque no lo sabíamos teníamos muchas limitaciones y carencias, creo que uno como niño lo sabe solo que no piensa en ello.

Hoy a mis casi 40 años, leo mis miedos y veo como todos ellos se hicieron realidad. Tenia miedo a engordar, y hoy estoy en mi peso máximo, nunca he pesado tanto como ahora y veo como mi cuerpo esta deforme. Tenia miedo a no tener dinero, y mi situación económica en este momento es la peor que he tenido, estoy en un limbo laboral, tengo mas de 30 mil en deudas y no sé como salir de esto. Siempre he tenido miedo a terminar sola, a no ser digna de que alguien me quiera y que nadie quiera estar conmigo. Y ahora una vez más alguien me ha dicho que ya no me quiere, que ya no quiere estar conmigo y que no lo hago feliz.

Me odio a mí misma, porque tenia miedos específicos y no hice nada para evitarlos. Siempre hago lo mismo, nunca hago nada para mejor algo en mí, como podría alguien quererme, como podría alguien estar enamorado de mi. Ahora soy una señora gorda, pobre y sola. Mis miedos se hicieron realidad. Deje que mis miedos se hicieran realidad, no puedo culpar a más nadie que a mí.

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severacausaperdida · 1 year

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Mi primer beso...

Otra vez me remonto a mi primaria, donde jugaba con Barbies que tenían sexo con Ken, y veía dibujos animados con mi hermana. Donde siempre me sentí tan minúscula e invisible.

Al colegio llego una chica extranjera, y a todos les gustaba la chica nueva, sus comidas diferentes, ropa y su acento. Rápidamente y sin quererlo me hice parte de ella, ya que tenia mi nombre y usamos nuestros apodos para qué nos diferenciaran. Ella se hizo buena amiga, estábamos todo el tiempo juntas, jugábamos y compartíamos muchas cosas.

Ese año también llego un profesor nuevo, joven, varón a diferencia de todas los demás que eran maestras. A mí me pareció normal, nada interesante en él, tal vez porque mi interés estaba en el sobrino de mi vecina. Así fue, hasta que mi amiga me confeso que el profesor nuevo le gustaba. Ahí, todo cambio para mí. El profesor se volvió mi obsesión. Participaba en sus clases, lo ayudaba a limpiar y a borrar el tablero, escribia su nombre infinitas veces. Quería que todo el tiempo me tomara en cuenta para cualquier cosa, y me molestaba si escogía a otras u otros estudiantes. Soñaba con él, y lo buscaba todo el tiempo en la escuela para encontrármelo casualmente.

Como muchas cosas de mi infancia, no recuerdo todo y muchas cosas se han olvidado, no sé si es porque escojo no recordarlas o porque las he bloqueado de mi memoria.

Una mañana, no sé si durante el recreo, la salida o entre clases, mi maestro de alrededor de 25 años, encerrados en su salón de clases, me dijo que yo era muy "madura para mi edad", que le gustaba hablar conmigo y compartir esos pequeños ratos. Yo, en mi cabeza estupida de 10 años, pensaba que me decía esas palabras porque yo le gustaba mas que mi amiga, que tal vez estaba enamorado de mí. Que "YO" había ganado su amor. Qué ingenua se puede ser, tal vez diría inocente, pero no fue la inocencia lo que me llevo a "desarrollar mi plan" para seducir al profesor. No sé que fue, tal vez mi baja o inexistente autoestima, mi necesidad de ser querida o mi necesidad de ser notada por otros.

En fin, un día de esos, mientras los demás niños estaban en otros salones, y yo encerrada con él hablando de todo y de nada, ese hombre mayor me beso en la boca. Yo solo recuerdo que me asuste, no pude besarlo de vuelta, no sabia qué hacer, no sabia como besar, pero no me moví. Fue una sensación de vulnerabilidad, pero a la vez pensaba si el también la había besado a ella (mi amiga). No tengo otro recuerdo de ningún otro beso, ni otra situación con él a escondidas en su salón.

Luego de eso, mi preocupación creció, yo estaba consciente de que "nuestro" amor no podía ser, nadie lo iba a aceptar, por supuesto que mis papas no lo iban a hacer, pero que pasa si los papas de ella sí? Como podía yo convencer a mis papas de aceptar esa relación? Siempre tuve presente que tal vez él conocería otra mujer, como si yo a esa edad fuera una, y el desistiera de lo nuestro, porque era mas fácil con ella.

No perdimos el contacto, ya que siempre me llamaba a mi casa aun en vacaciones, ya que en esos tiempos no habían celulares, y hablábamos bastante. Yo cambie de escuela, y las llamadas siguieron. Hasta una vez me escape y fuimos a comer a un pequeño restaurante que a él le gustaba. Yo tenia 13 años. No sé como acabaron los contactos, yo me obsesione con otro y ese fue el final de esa historia.

Más de 10 años después, lo encontré una tarde, claro, el se veía igual, más viejo pero reconocible. Yo por mi parte cambie desde mis 13 a los 31. Él me miro, se quedo pensativo como que le parecí familiar, pero no me hablo.

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severacausaperdida · 1 year

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El inicio de todo lo que esta mal…

Ahora recuerdo, que a la edad de 8 o 9 años, ya estaba interesada en tener la atención de hombres, aun no descubro porque, tal vez fue que como persona nunca he desarrollado la autoestima. Tal vez es trabajo de tus padres ayudarte o enseñarte, tal vez era mi deber en la adultez y ha sido MI trabajo inconcluso.

El primer recuerdo de esto es que el sobrino de una de mis vecinas estaba interesado en mi niñera. Ella era una mujer negra de 25 años, de senos y nalgas grandes pero firmes, delgada donde importa y gruesa donde necesita; aunque no era bonita y por lo que puedo pensar ahora, no muy interesante, pero eso no importaba, porque aunque fue mi niñera favorita, yo la veía como competencia para la atención de este chico, que por cierto rondaba la edad de ella, tal vez unos años mas.

Cuando salimos en las tardes, tal vez orquestado por ellos 2 para verse, tal vez por casualidad, y se ponían a hablar, yo siempre los interrumpía, yo siempre quería opinar y decir lo que pensaba. Ahora me parece que hacia el ridículo con mis comentarios que tal vez como adultos ellos hablaban con otro sentido. Eso me recuerda cuando una vez mis tias hablaban de los "peos vaginales" y yo con menos de 10 años quise dar mi opinion de lo que era o como podia ocurrir. Claro, ellas se rieron y me dijeron si eso puede ser, pero su risa causo algo en mí que me hizo entender que no sabia realmente lo que ellas hablaban y me causo vergüenza, al punto que hoy lo recuerdo.

Esta fue la primera vez que me pregunte: que tiene ella que no tenga yo? Porque ella y no yo? Es ella mejor que yo? Qué puedo hacer, como puedo moverme/verme como ella? Que hay de malo conmigo que él no me quiere?

Estas preguntas, sobre lo que me falta como mujer para atraer y mantener un hombre han sido una constante en mi vida incrementándose con la edad.

Siempre me he sentido como que no soy suficiente para que nadie se quede conmigo, para que nadie me pueda amar, creo que no merezco que alguien me quiera. Paso mis días comparándome con otras, pensando que si tuviera sus cuerpos, o su rostro, o su personalidad, yo seria feliz y alguien podría amarme.

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