Tumgik
taewjim-blog · 7 years
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Nada más te faltó bloquearme en Spotify.
G-Yunga.
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taewjim-blog · 7 years
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Me gusta la noche porque de lo negro que estoy, me puedo esconder entre las sombras y hacerla de ninja.
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taewjim-blog · 7 years
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the moment they won their first daesang
edit: this post is getting a ton of notes so imma take this opportunity to say that if you see this post and like it maybe check out my account and give me a follow bc im a new blog and id definitely appreciate it thanks
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taewjim-blog · 7 years
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TEAM WORK MAKES THE DREAM WORK
BTS | RAP MONSTER
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taewjim-blog · 7 years
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No me enamore...
Me enamoré de un alma muerta.
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taewjim-blog · 7 years
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4: Capítulo: 4 "Acorralda"
Grité en su dirección una y otra vez para que se detuviera, pero el en cambio solo abrió sus ojos y pestañeo dos veces antes de estrellar por última vez su puño contra la pared. Pues dirigió su mirada hacía donde me encontraba dejándome totalmente petrificada al ver su golpeado rostro. Cuando nuestras miradas conectaron lo vi apretar sus puños, su quijada y cerrar los ojos con tanta fuerza que temí por el. Volvió a abrirlos después de segundos largos - o al menos eso pensé yo-, y me miró seriamente para volver a perderse por donde había venido. Había algo extraño en aquel chico, algo en su mirada que me intimidaba hasta cortarme la respiración. ** La parda alfombra de hojas secas caídas de los árboles alineados a ambos lados, hacía que el camino hacia la escuela fuera un poco más entretenido. Las repentinas ráfagas de viento hacían bailar mi cabello . Me fijé en una sombra que había pasado por alto poco antes y vi que algo se agitó detrás de mi llamando mi atención al instante. Me di la vuelta encontrándome al instante con Cristian. Con un sabor amargo en la boca, tome uno de mis auriculares y lo aleje de mi oído derecho. -Carajos pensé que eras James - farfullé con disgusto. Después de haberle visto ayer y que el mismo me mirara de aquella manera no quisiera encontrármelo nuevamente, bueno, no por dos o tres días. -¿Estás bien?- preguntó Cristian. - lo siento, pensé que eras un amigo.- suspiré. -Ah, yo.. -La sonrisa se le desvaneció en cuestión de segundos y fue sustituida por una expresión neutra.- ¿dijiste James? -Si, bueno.- dije sacudiendo la cabeza con cierta diversión. .- El chico misterioso de ojos claros que golpea paredes y dice cosas raras. (Y te lleva a salones abandonados)- anadi para mi misma. -¿me puedes decir su nombre?- preguntó apretando sus dientes. -Mm si.- le dije.- se llama James- reí. -No, eso no ¿sabes sus apellidos?- preguntó tomándome del brazo y sujetándolo con mucha fuerza. -Cristian me estás lastimando.- le dije, pero no me soltó.-Solo me sé su nombre, ademas ¿por qué tanto interés en saber sus apellidos?.- le pregunté tratando de soltarme. -olvídalo- dijo soltando mi brazo y comenzando a caminar. Me dio la impresión de que Cristian solo evitaba mis preguntas, de modo que volví a repetirla mientras seguía sus pasos. -Oye, te hice una pregunta- le dije agarrando su cremallera. Cristian se detuvo rápidamente y me dio un fuerte manotazo para que soltara de ella lo cual me sorprendió. -Escúchame Elisha, solo olvídalo- dijo volviendo a caminar. Los siguientes minutos fueron torpemente silenciosos mientras intentaba llegar a la escuela en la compañía de Cristian, hasta comenzaba ser incómodo, pero al menos podía fingir estar concentrada en observar la carretera. Cuando llegamos al instituto Cristian lo siguió al salón de natación mientras que yo fui directamente al salón de Historia. Lo primero que hice al sentarme en la silla fue mirar hacia la ventana e imaginar miles de historias y ni hablar del reloj colgante junto a la pizarra; lo observaba a casa cinco segundos!. Cuando por fin toco el timbre fui directamente a la biblioteca. Tomé una bocanada de aire para llenar mis pequeños pulmones. Ojala hayan traído la siguiente saga de mi libro favorito, pensé. Abrí las grandes puertas de la biblioteca atrayendo varias miradas por el chirrido de esta y cabizbaja fui en busca de un libro interesante que leer. Dios si lo han traído!, pero que monada, pensé al ver la portada negra brillosa. Con una sonrisa lo tomé y fui directo a por una silla. Estoy loca de leerlo. En cuanto me senté, le eché una rápida mirada al chico que estaba al frente y me sorprendí al ver que era James. Intente leer, pero no podía.. es mas ni siquiera podía concentrarme, no dejaba de pensar en que demonios hacia el aquí. A lo mejor esta leyendo ¿no crees? No, a lo mejor solo esta aquí por el aburrimiento. ... ¿que me importa lo que el haga aquí? Me levanté de la silla y fui a decirle a una de las encargadas que me lo llevaría. Si quería leerlo debía ser en casa. Sonó el segundo timbre, lo que significaba que faltaban unos pocos minutos para llegar al salón. Corrí como alma que lleva el diablo con el libro en la mano. Cuando por fin entre al salón de cálculo me sentí muy cansada. Bueno, siempre lo estaba. Estuve en todas las clases observando mis hermosos dedos, estornudando y tratando algo muy extremo>> no dormirme. Más tarde de mi última clase que parecía no querer llegar, me encontré con Cristian sentado bajo las ramas de un árbol al lado del salón de ensayo. Ni me le acerque, solo pasé por su lado como si no existiera. Todavía estaba muy enojada con el. Sentí su mirada en mi espalda, pero ni me inmute en girarme e ir a saludarle al revés seguí caminando con mas seguridad hacia el carro de mi tía. ¿Saltarme la última clase no sería tan malo verdad? *** -Así que..¿te dejó por Karen?-preguntó Camila mi tía, conduciendo. Golpeó el botón de la radio encendiéndola al instante, y la música contemporánea llenó el aire. -Si, pero ya era hora de que terminara con el, era muy estúpido- rodeé los ojos. -Bueno , a lo mejor no lo quiso hacer - río. Cerré los ojos e intenté no pensar en mi humillante fracaso con mi anterior pareja. -Venga tía eso que se lo diga a la abuela, además ya han pasado dos años desde que termine con el dejemos eso en el pasado- reí. -¿como va yendo tus clases ?- preguntó cambiando drasticamente de tema pasándome un cono de helado. Había olvidado lo delicioso que era el helado. Aunque, comer helado siempre había sido recompensado con un agudo, dolor frío de cabeza , pero no hoy. -Ya que preguntas me está yendo bastante bien, sin embargo, debo estudiar un poquito más. -Bueno, y dime ¿aquí quieres que te deje?- preguntó mirando con desconfianza el lugar. -Si, tranquila- sonreí.- le diré a papá que pasaste por la escuela. Ah!, mañana habrá una cena estas invitada. -Ok te veo mañana traviesa.- me dijo. Bajé del auto y con mucho cuidado cerré la puerta. Ya es un poco tarde. Después de ir con la tía de compras y a comer en su casa nos tomo la tarde. Ya son las seis de la tarde y se esta haciendo muy oscuro. Papá debe estar preocupado. -Ahora somos tu y yo- le hablé al helado. Estoy loca. Comencé a caminar por los senderos oscuros. Sentí como alguien o algo me vigilaba. Tuve que adentrarme por un callejón, era el camino mas rápido para ir a casa. Debía avanzar por que si se ponía mas oscuro no podría llegar a tiempo. Soy toda una miedosa. Vi una sombra agitarse a mis espaldas. Me contuve y seguí callada. Apenas y respiraba. Cuidadosamente busque con una sola mano una pequeña linterna que papá me había regalado el semestre pasado. Sostenía la linterna de modo que no se moviera, tratando de mantener con toda la firmeza posible la luz. No quiero morir así, pensé. Si es un violador me matara.. Mi corazón latía demasiado de rápido. Sentí algo frío tocarme los pies. El pánico paralizó mi sangre y mis pensamientos. Una tension electrifica mis manos, y sentir el metal frio de la linterna no me tranquilizaban para nada. Respira despacio Elisha, a lo mejor solo era un gato, pensé tratando de tranquilizarme. Sacudí la cabeza de un lado a otro y baje la linterna, pero en cuanto lo hice me vi hechada en el suelo con una herida en la rodilla. La punzada de dolor parece querer matarme, pero olvidando la sensación me levante como pude y trate de buscar entre la oscuridad la linterna . A mi espalda, una pequeña carcajada corto el silencio del pequeno callejon. -¿Sabes quién soy?- me preguntó dejando su aliento caliente en el cartílago de mi oreja. Me sorprendí. -Sí, si se quién eres- conteste con la voz un poco temblorosa. -¿y no te da miedo saber que soy? -Ahora la voz se escuchaba de nuevo frente a mí pero más cerca. -Me da más miedo el saber porque yo y que quieres de mi- Conteste conteniendo mis ganas de llorar. Sus brillantes ojos rojos que me sostenían con tanta intensidad, despertaban una tormenta de sentimientos. Incluso en este momento de extremo peligro, el deseo. -¿por qué tú? Es una muy buena pregunta. Tu querida Elisha eres mi tua cantante y a la única a la cual le puedo sustraer sangre. Espere días y semanas ya no puedo mas. Aunque estuviera muy oscuro lo pude sentir sonreír. Fue un momento, un parpadeo y termino, tenían de un segundo a otro lagrimas que parecían pesadas, y lo estaban, cuando sentí mi propia sangre. -Esto solo acaba de comenzar- susurro. No debí irme por aquí
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taewjim-blog · 7 years
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3: Capítulo: 3 "Sangre Acumulada"
"Nuestro peor problema de comunicación, es que no escuchamos para entender, si no que escuchamos para contestar". ________________ Mi respiración batallaba contra mis tejidos al igual que el corazón con su danza y mis pensamientos contra las terribles pesadillas. –¡Elisha!– aquellas manos pequeñas aferradas a mis dos mejillas me hicieron volver a la realidad. – Cris... –¿Estás bien?– me interrumpió temblando. –Yo, ¿qué pasó? –Te encontramos tirada donde era el salón de química .– me explicó acomodando un trozo de cabello detrás de mi oreja. "Mi nombre es James mucho gusto" aquel pequeño recuerdo vino a mi como el polvo. Me tensé por completo al recordar la  linda sonrisa de aquel chico y su pequeño libro. A pesar de que el miedo se retorcía en mi interior como un gusano siendo aplastado, sacudí mi cabeza con mucha energía. –Lo siento es que fui allí a estudiar y me quede dormida.– mentí. – no me vuelvas a hacer esto– dijo envolviéndome entre sus brazos. –Lo siento, juro que no lo volveré a hacer. –Eso espero- dijo dejando un casto beso en mi frente. –Quiero preguntarte algo, ¿quién rompió las reglas?, o sea ayer tu... –Joven ya debe retirarse yo me encargo de ella– me interrumpió la enfermera mientras sacaba por los hombros a Cristian.–y usted vaya vistiéndose, tendremos una agradable charla.– me señaló. Carajos.. *** – acuérdate de tomar dos pastillas azules y una roja.– me gritó la enfermera antes de pasar aquellas aburridas y ridículas  puertas. Estuve dos horas en aquel lugar desde que la enfermera sacó a patadas a Cristian. Gracias a Dios por que salí de aquel lugar, por qué si no ¡ja! me volvería totalmente loca.  Solté un suspiro mientras bostezaba a la vez encontrándome justo en ese momento a Fleur junto a la puerta de la sala de ensayo, charlando con Cristian a la sombra de un árbol de ramas bajas. —¡te lo dije mil veces Cristian!, ayer estuve con  Jane estudiando.– dijo Fleur rodando los ojos. —Claro, Jane se llama Mark desde ayer ¿no?– preguntó Cristian rodando los ojos. Percibí  rápidamente el sarcasmo  en la voz de Cristian al decir: "Mark"    y unas ganas ridículas de echarme a reír se alborotaron en mi garganta. Fleur entornó los ojos y me lanzó una mirada penetrante con un simple significado, "c á l l a t e y ayúdame ", pero no pude evitar dejar  escapar un par de carcajadas las cuales  treparon por mis paredes y salieron a los oídos de todos los presentes.  Mis pies crujieron sobre las hojas secas en cuanto me acerqué a Cristian con dos pequeñas lágrimas. Cristian miró a Fleur y pude divisar como retorció sus labios con disgusto. No podía culparlo: ¿quién quería estar al lado de la gran Becca Fleur sin molestarse?. –¿cuando dejaran de pelearse ustedes dos?– pregunté abrazándolos. –Cuando ella deje de mentir y acepte que me a dejado plantado cuando se supone que ayer estudiáramos para física y cuidáramos a mamá – habló Cristian.–. Además, ¿que te dijo la enfermera?. –Nada importante ya sabes, "timati esti y esti"– reí. –deberías cuidarte más y no dormirte en salones abandonados– me regaño Fleur mientras que yo solo asentí esforzando una sonrisa. Fleur es la hermana menor de Cristian y también una muy buena compañera mía. –¡ya, ya dejen de regañarme!–grité riendo.– iré a casa. La enfermera dijo que debía de dormir. –Yo te llevaré. –No –Vamos Elisha yo no tengo nada que hacer– dijo Cristian. –Bueno, está bien. –¡Esa es mi chica!– gritó Cristian tomándome de la cintura para seguido colgarme en su ancho hombro. –¡Adiós!- gritó Fleur riendo. Aléjate de él Elisha. *seis minutos después* –Ya llegamos– me notificó Cristian deteniendo el auto. –Lo sé– me reí– Oye Cristian, ayer entraste a mi cuarto y susurraste un "Rompió la regla" y yo– trague hondo.–. Quiero saber de qué hablabas. Cristian se salió riendo y se bajó del carro. Lo vi rodearlo con una pequeña sonrisa. –olvídate de eso, lo siento mucho si te preocupe– habló abriendo la puerta. –Está bien– reí.– que tengas un lindo día. –Oh y si lo tendré– me guiñó un ojo.– hoy iré a la casa de Stephanie– movió sus cejas de arriba a bajo. –¡Oh Dios mío Cristian!– grite golpeando su pecho.– Eres un asqueroso. –Ve a dormir pequeña.– dijo besando mi frente y rápidamente rodeando su propio carro para perderse entre las grandes casas del lugar. *** Hace alrededor de 3 horas, (desde que Cris me dejo) escuché un grito del otro lado de la casa. Me levanté con mucho cuidado y fui a revisar de dónde provenía. En vez de hacer lo inteligente y continuar durmiendo, fui a investigar. Salí de la cama, cruzé el vestíbulo, e hice mis cosas en el baño; con las luces encendidas, por supuesto. Apagué las luces y volví a mi habitación. Traté de obligarme a volver a dormir, pero no pude. Ya iban a hacer las tres de la madrugada. Bajé las escaleras sin provocar algún ruido que pudiera despertar a papá y abrí la puerta principal recibiendo de golpe un viento frío. Necesito olvidarme de muchas cosas , pensé. Me senté en las escaleras que quedaban un poquito más al frente de la puerta e inicié una pequeña conversación conmigo misma. Yo: ¿como puedo olvidarme de todo esto? Yo: llamando a Cristian Yo: Ggg Cristian está con Stephanie no lo interrumpiré. Yo: Debes hacerlo Yo: ¡No, cállate! Dejé de "hablar" conmigo misma cuando divisé una sombra pasar rápido, después también pude divisar un rostro muy conocido para mi. Era el chico que me pregunto por mi nombre en aquel viejo salón. Lo vi golpear la pared con los puños hasta que sus nudillos brillaron con su sangre. Me estremecí al ver que cada vez de sus manos brotaba más sangre. –¡Hey!. **** Solo eres una maldita zorra Elisha.
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taewjim-blog · 7 years
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2: Capítulo: 2 "James"
Estaba durmiendo cuando un ligero ruido me despertó…al principio no sabía lo que era, pero pensé que era papá. Volví a dormir, porque suponía que era el quien había entrado  tal vez a tomar algo de mi habitación, pero comencé a ponerme nerviosa cuando el ruido se intensificó. Los pasos empezaron a sentirse más cerca de mi cama y tres suspiros en mi cara, pero de repente no se oyó nada. Un grito se estremeció por mis labios al sentir dos fuertes brazos rodearme, pero rápidamente desaparecieron como pólvora por unos largos dedos y una colonia bastante conocida para mi gusto.
–Shhh, cállate o tu padre me matará.
Dios mío
—¿¡Estás loco?!, casi me das un paro cardíaco— susurre molesta al notar a Cristian entre la oscuridad.
–Shhh – volvió a cubrir mi boca.
Aléjate de él Eli
Podría haber jurado que oí una voz metálica y delgada en mi oído. Dirigí una mirada inquisitiva a mi amigo. Oí como con enojo decía: “Es él … ”, fue todo lo que sus delgados labios deletrearon mientras que nos miramos durante un minuto. Cristian se volteó hacia la puerta con una sonrisa y un comentario jocoso de un nombre raro en sus labios.
–¡¿Que está pasando?!– le pregunté soltándome de su agarre.
–¿Con quién estuviste mientras yo estaba en el vestidor?–. Preguntó.
–Con nadie.
–¿estás segura?– insistió nuevamente.
–Si estuve sola y…– quedé a mitad de mi oración al recordar al chico junto al árbol de manzano.– bueno, había un chico y…
–¡Lo sabía!– gritó enojado.– rompió las reglas.
–¿de que estás hablando?– pregunte confusa.
–Es mejor que me vaya– susurró.–. Duérmete, Elisha.
-Oye, pero…
Cuando intente acercarme salto por la venta  y me dejo allí parada  toda exhausta. ******
Eran casi las cinco; El corto día se acercaba y la luna empezaba a llenarse de sombras, mientras que los ruidos curiosos -los pasos apagados y la voz rasposa de papá habían sido perceptibles todo el día.
–Elisha , báñate. Los golpes de papá en la puerta me hicieron saltar de la cama y caer al frío suelo.
El día ya a empezado
Con los ojos rojos me metí a la bañera. Con un poco de cansancio me quite la camisa, los pantalones, las bragas y la pequeña cadena que mi madre,  estando viva, me regalo.  Sabía que tenía que avanzar para llegar a el instituto rápido. Mi día había empezado con más retraso de lo normal por culpa de Cristian y sus bipolaridades. Tenía muchas ganas de saber el porque de su intrusión en mi habitación y sus ataques de ira tan repentinos.
–¡Elisha debemos irnos!.
Salí del baño como alma que lleva al diablo mientras tropezaba con cada cosa que se cruzaba en mi camino…solo sé que caí sin previo aviso.
–malditasea
Volví a ponerme en pie y me seque lo más rápido que pude.
Será un largo día … *****
La puerta se abrió a tal punto que azoto la pared con fuerza, y una cara miró hacia fuera, un rostro más joven que el del profesor, pero con algo de enojo. Respiré con normalidad al saber que no era el y guarde mi teléfono.
Ya es hora..
Cuando intente entrar unos brazos delgados me atraparon adentrándome a otro salón.
–¿que mierda?…
–¿como te llamas?
El chico misterioso se volvió hacia mi con una sonrisa en sus labios. El tono en el cual me pregunto era mucho más inequívocamente genuino, de modo que yo  sonreí confusa.
–Hola,…. ¿quién eres?– le pregunté.
–Mi nombre es James mucho gusto.– sonrió.
–Esto es raro, bueno, mi nombre es Elisha Adam.
El sin decir nada solo sonrió y se giró mientras se ponía en camino con su pequeño libro el cual no me di cuenta que lo llevaba desde el principio, se detuvo junto a la puerta, y cuidando de el libro mirando hacia la nada… se giró a verme y desapareció.
¿Qué diablos pasó aquí?
Intenté caminar, pero así mismo como lo intenté me derrumbé en el suelo como peso muerto y con un grito atorado en mi garganta. Mi mejilla había empezado a arder más fuerte que ayer. ___________ Escóndete Elisha que el jamás te encuentre»
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taewjim-blog · 7 years
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¡INTENTA RECORDAR JANE!
- ¡Intenta recordar Jane!-, grito para sí misma mientras ahogaba sus penas con el poco alcohol que le había tendido el barman hacía ya varios minutos.
Habían pasado ya cinco días desde que el gran incidente paso, desde que su padre había sido terriblemente asesinado y en el cual había sido investigada de pies a cabeza ya que ella había sido la única sobreviviente a tal acto. Jane había hecho un gran intento por recordar lo sucedido, pero la gran cantidad de alcohol en su cuerpo hacia todos los grandes intentos en muchos fallidos. El débil llanto hizo acto de presencia al recordar la terrible escena en donde ella misma había despertado. Jane no soporto más así que decidió tenderle el vaso de cristal al barman con la paga saliendo del lugar tambaleándose de aquí a allá. Choco con muchas personas, pero solo con una se tropezó.
- ¿Jane?, ¡Oh dios! ¿¡Estas bien?!- le preguntó la persona de cara borrosa. Por su voz Jane pudo detectar que era su mejor amigo Alex. Esta lo abrazo fuertemente y comenzó a llorar sobre su hombro dejando caer algunas lágrimas. – tranquila todo estará bien.- Alex la tranquilizó moviendo su mano sobre su espalda de ella creando una pequeña caricia.
- El lo  asesino Alex, lo asesino- finalizó, con voz temblorosa. Alex con un suspiro entre sus labios la llevo a casa donde estaria “sana” y “segura”. – Jane, aleja tu agarre de mi… ¡JANE!
-    ¿No recuerdas nada más?- preguntó el detective apuntando algunas cosas en su desgastada libreta.
-    Es mejor que digas la verdad, ¿entendiste?-dijo uno de los oficiales entrecerrando los ojos.- ¿Cómo puedo saber que esto tu no lo planeaste?.
-    ¿Acaso crees que yo planeé esto?-río Jane levantándose del asiento.- ¿Acaso cree que yo mate a mi padre y a mi amigo dos o cinco días después?.
-    Puede, además, hemos encontrado huellas de usted en el cuerpo del señor y su amigo.- hablo el oficial mientras sacaba unos largos papeles y un bolso plástico con algo diminutivo en el para desplazarlo sobre la mesa.
-    ¿Ah si?- preguntó desorientada y río.-, que tonta soy- se golpeó la frente.- ¿no cree que estuve allí con el y que  hubo una mini fiesta?, por dios no pensaba que fueran tan tontos.- estalló en carcajadas.
-    ¡Ten más respeto niña!- gritó el detective.
-    Escúcheme detective  allí dentro había una mini fiesta, estábamos pasándola bien padre e hija.- sonrió.- Era una fiesta y bebimos mucho. Estuve con mi papá todo el tiempo es obvio que el cuerpo de el tenga mis huellas. Lo siento por  haberles fallado, pero no soy la asesina.- finalizó. – Además, Alex me había llevado a casa y después se fue… sólo eso recuerdo.
-    Eso no lo sabemos todavía- dijo el oficial.
-    Oficial encontramos esto en la cartera de la señora Adams la madrastra de Jane- entró un chico al cuarto con un bolso plástico que contenía una cuchillo y tenia escrito “Evidencia” en letras grande. El oficial tomo el bolso y resopló.
- Esto obtiene la sangre de los dos hombres. Bueno, deténganla, tenemos a la asesina.- resopló el oficial mirando todavía con desconfianza a Jane.
- vamos señorita - habló el abogado de Jane tomándola por los hombros.
El rostro de Jane se descompuso y comenzó a “llorar”.
Jane había recordado..
….
¿Quién lo diría?, La madastra más calladita era la asesina.  Ella fue  como un estúpido grano en el trasero. ¿Saben? De los que pueden matarte, pero cuando se emborrachó me puso todo fácil. No podría haber sido más difícil al principió. Un recuerdo dibujo una sonrisa en el rostro de Jane, no estaba asustada, al final de cuentas ella si era quien había asesinado a su padre, pero parece que su madrastra fue más estúpida.
Perfecto día. Para un perfecto asesino.
-    ¿Nos vamos Señorita? Lo siento mucho por dudar de usted - le dijo el oficial.- Tu, Marcus vigíla a su madrastra y ponle esto- le dijo al otro oficial pasandole unas esposas y siguiendo al abogado.
-    Claro además,  en realidad mi nombre es Jazmín, Jane me lo decía solo mi padre y también Alex.- Jane le tendio la mano con una sonrisa observando su vena.
–Mucho gusto jazmín, vamos debes descansar..
Jane río en su mente. como suele ocurrir en estos casos La asesina aveces suele ganar.
A veces solo hay que dejarlo ir, a veces solo hay que saber contenerse y a veces solo hay que dejarlo morir en lo más profundo de nuestra mente.
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taewjim-blog · 7 years
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1: Capítulo: 1 "El chico del árbol"
Ya he resistido todo un año desde aquel incidente que no resultó ser mi funeral, cosa que realmente agradezco, al igual que aquella cicatriz que causó alguna ves dolor. El recuerdo de ser arrastrada por aquel gran lobo me hizo temblar, ya se me era imposible ocultar el terror que me causaba. Yo sé lo que vi y mis ojos no mienten; aquel lobo era más grande de lo normal, era una cosa sobrenatural…
–¡Elisha!– aquella mano casi pequeña dando vueltas a mi alrededor me hicieron volver a la realidad.
–Lo siento mucho, Cristian, ¿qué decías? – le pregunté sacudiendo mi cabeza, borrando todo recuerdo malo de aquella noche.
–te estaba diciendo que, ¿si me podrías acompañar a comprar un sándwich en la esquina?– sonrió.
Asentí dándole mi mejor sonrisa. Cristian a sido mi mejor amigo desde que llegue a aquí, desde que llegue a este pueblo, desde que llegue a Chicago. Sus fracciones asiáticas daban un toque de amabilidad en el, al igual que sus pequeños y achinados ojos. Todo lo que recuerdo posteriormente a mi reencuentro con Cristian puede definirse como imposible. Fue como un sueño totalmente ajeno a la realidad o la cordura. No sé cómo nos empezamos a hablar y menos como comenzamos a ser amigos, solo sé que cuando desperté el ya estaba ahí.
–hoy trajeron cinco libros nuevos a la biblioteca.
Después de oír aquellas palabras el jugo de manzana salió disparado por mi nariz sin ningún tapujo, Cristian, hizo el típico sonido de asco, mientras que yo trataba de poder respirar y toser al mismo tiempo; ¡hay libros nuevos!.
–mierda Cristian, ¿no podías esperar a que tragara por completo el estúpido jugo?.
–lo siento, pero no.
Cuando ya pude respirar normalmente tomé mi mochila y me la coloque en el hombro izquierdo.
–debemos irnos vamos para Educación Física– le dije mientras le pasaba su bulto.
–vamos… **
–¡Te dije que no derramaras ese liquido señorita Adams!– el grito del profesor casi me deja sorda.
–lo siento mucho, pero usted me dijo alto y claro que lo derramara en este.
–¿me está llamando mentiroso? O peor ¿sordo?
Ay no, aquí vamos
– No profesor solo que ya sabe…– con los nervios de punta y mis tartamudeos quise darme una buena cachetada.
–lo que mi amiga quiere decir profesor Chermin es que usted le dijo que lo derramara en el vaso azul, pero como ya ve entendió otra cosa.– me sentí aliviada al oír la voz de Cristian.
–espero que esto no se repita, por favor  limpia todo esto y cámbiese de ropa.
Al ver cómo aquellos pies re gordetes salieron de la cancha un suspiro de alivio estremeció mis labios: al menos, seguía viva y no en detención.
–debías ver tu cara Elisha.
–¡cállate!, casi muero de los nervios– le dije y soltó una gran carcajada que hasta creo que se escucho en Irlanda.
–vamos, quiero darme un buen baño y cambiarme esto– habló estirando su camisa hacia enfrente.
Con su ayuda,  me levante del suelo y cada uno nos fuimos a nuestro respectivo vestidor. Mis pies crujieron sobre las ramas secas cuando pase por este.
–dibisti vir ti cari– imite a Cristian un poco enojada. Me di la vuelta para tomar mi bulto, pero me encontré a un chico observándome con la espalda reclinada contra el árbol de manzano, se quedó mirándome durante unos instantes y se fue; sus ojos esmeraldas me perseguían.
Se me cortó el aliento cuando sentí mi mejilla arder y deje escapar un gemido ronco.
Te veré pronto Elisha. __________________
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