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prvlogue:

     ¿Que si estaba aterrada? Oh, en efecto, el temor y la incertidumbre la estaban carcomiendo por dentro. Sin embargo, Miyuki, famosa por su fuerte y hostil temperamento, no transmitía aquel temor a modo de lágrimas y fragilidad. Claro que no. En cambio, se convertía en una bestia arisca y malhumorada, queriendo desatar un reino de caos y destrucción sobre el primero que se le cruzara por el frente. Con eso en mente, que aquel grosero muchacho—seguramente menor que ella—tuviese el atrevimiento de abandonarla en medio de una ciudad desconocida era, por supuesto, motivo más que suficiente para hacer a su sangre hervir. ¿Cómo podría ella arreglárselas por su cuenta? Su permiso para quedarse en los Estados había expirado hacía dos días, apenas podía manejar el idioma y, lo más importante, ¡la habían culpado por un crimen que no cometió! Insólito. Si bien nunca gozó de instintos asesinos, en ese mismo instante quería sacarse un zapato y clavar su tacón en el ojo del chico; tampoco tenía muchas ganas de querer recordar su rostro. “¿Cómo esperas… Como esperas tú que yo sobreviva aquí, sola?” Luchaba para expresarse correctamente, haciendo gestos exagerados con sus manos a medida que buscaba las palabras acertadas. “Mira, yo tengo—tengo dinero.” Luego de abrir la boca, volvió a cerrarla en una mueca. No quería que lo interpretara como un ‘puedo arreglármelas con mis ahorros’, si no más bien como un ‘tengo dinero y puedo dártelo si me eres de utilidad’. “Mis ahorros, puedo sacar todos mis ahorros y así tendremos comida y cosas por unas semanas.”

   Aaron estaba improvisando lo mejor que podía. Si bien no podía decirse que siempre había estado del buen lado de la ley, esto iba más allá de todo lo que conocía o había experimentado en el pasado. Sabía entonar palabras dulces cuando se trataba de salvarse el trasero después de conducir más allá del límite de velocidad, o de convencer a un oficial de que definitivamente tenía la edad para tomar, o de salir ileso después de haber sido encontrado teniendo sexo en público (dentro de un auto, pero aún así). El punto era que no se consideraba un novato en lidiar con la autoridad, el problema era que en este caso se trataba de un homicidio de primer grado. Según el estado de California eso quería decir de 25 años a toda la vida en prisión. 

   Aaron inhaló profundamente, trayendo el dedo pulgar de la mano izquierda a su boca, mordisqueando la uña en un acto nervioso. - “ ¿Qué mierda vamos a hacer con dinero cuando tenemos a toda la agencia policíaca de California oliéndonos el trasero? ” - Volvió el rostro desde el asiento del conductor mientras le hablaba, la mano derecha presionando el volante. - “ Estar juntos no va a traer más que sospechas de que conspiramos juntos para matar a ese hombre. ¿Sabes como le llaman a eso? Asesinato premeditado. ” - El área de descanso se mostró frente a ellos en aquel momento y el muchacho buscó un lugar vacío con la mirada para estacionar el auto. No tenía un plan aún, pero su mente estaba maquinando a todo lo que daba, pensando en posibles maneras de salirse del aprieto. Era creativo, eso sí, sólo necesitaba algo de tiempo. Aaron se recordó a sí mismo que tiempo era lo menos que tenía. - “ Bájate del auto. ” - Pronunció con la voz ronca que tenía, después de haberse detenido. Sin si quiera despedirse de la extraña o mirar atrás, se bajó del auto y empezó a caminar en dirección al área de comidas.

#{ aaron: int } #{ c. miyuki } #disculpa la demora corazón <3 #ese gif de yoongi me mata siempre #se ve todo badass lmao

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writer in the dark

#{ inspo } #{ quotes }

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evphoniious:

La muchacha tuvo que reprimir el reflejo de rodar sus ojos cuando la profesora mencionó la razón del cambio de dinámica de su clase, decir que la materia no le interesaba era una gran subestimación, si Saskia hubiera podido escoger sus materias, la presente habría sido una de las últimas en su lista – la única razón por la que no renegaba del todo y no intentó cambiarse de clase siendo porque suponía que el conocimiento de su padre podría serle útil. De cualquier manera, sus esperanzas respecto a la materia se esfumaron cuando mencionó el trabajar en parejas, ¿no era algo de público conocimiento que ese tipo de asignaciones no funcionaban? Al menos para ella era así, siendo demasiado quisquillosa e impaciente como para trabajar en grupo terminaba haciendo casi todo por su cuenta, además de tener que pasar por situaciones como la actual donde no sabía con quien trabajar al no conocer a nadie y ver que su compañero de banco se había volteado, probablemente para ponerse de acuerdo con alguien más para trabajar. Genial, esperaré a que se me acerque alguien sin pareja, entonces, pensó la rubia, careciendo de ánimos para buscar ella misma compañero para el proyecto se limitó a garabatear distraída en su cuaderno.

Alzó la mirada de su dibujo cuando alguien llamó su atención, su ceja arqueándose cuando vio quién se sentaba a su lado, por más que no lo conociera personalmente habían coincidido en un par de clases en el pasado y honestamente, era difícil no prestarle atención al moreno cuando era tan atractivo. “Eh, no, en realidad no… ¿Supongo que tú tampoco?” su ceño se frunció levemente al escuchar las palabras que abandonaron su boca, Obvio que no tiene, ¿por qué otra razón te lo preguntaría? “Quiero decir, podemos trabajar juntos… soy Saskia, por cierto.” se volteó en su lugar para poder observarlo mejor mientras agregaba aquello, si bien dudaba que él no la conociera ( así como ella sabía quién era él ), era la primera vez que hablaban y suponía que no estaba de más ‘presentarse’.

  A Blaine le pareció tierno el dilema que se mostraba en el rostro de la rubia, cuando había caído en cuenta que le estaba pidiendo ser su compañera de trabajo. Eso era lo peligroso de las chicas lindas como ella, pensó en aquel momento, sacando su celular de la bolsa del pantalón en dónde lo tenía; eran tiernas hasta haciendo las cosas más triviales. - “ Saskia. Mi nombre es Blaine. ” - Asintió, como si estuviera conociendo el nombre de la muchacha por primera vez y estuviera probando qué tal sonaba desde sus labios. - “ Hemos compartido clases antes, ¿no? Puedo jurar que te he visto...por ahí. ” - Blaine juró en ese momento que un premio por mejor actuación tenía que serle otorgado allí mismo, mientras pretendía que la rubia había sido otra cara más en el pasillo, mientras pretendía que no había un mensaje gigante (y muy permanente) en la pared del baño de hombres de su autoría. - “ ¿Me darías tu número? Creo que sería más fácil para mantenernos en contacto, dado que vamos a tener que reunirnos con frecuencia. ” - Le ofreció su teléfono, cejas alzadas levemente en pregunta. Hasta ahora que lo decía en voz alta era que la realidad del asunto se asentaba: iban a tener que compartir gran parte de su tiempo juntos y honestamente Blaine no sabía como sentirse al respecto. Es decir, no había un sólo hombre en toda la secundaria que se quejaría por pasar un par de horas a la semana con una de las chicas más calientes de toda la escuela; pero por otro lado, Blaine no la conocía realmente. Por todo lo que él sabía,Saskia terminaba siendo un dolor en el trasero y todo el semestre se iba a la mierda.

#{ blaine: int } #{ c. saskia } #blaine lowkey pidiendole el numero con otras intenciones lmao #ese gif de zayn cuando segui en 1D TRIGGERED me jaja

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Dua Lipa - Genesis

#{ inspo }

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🌷 a flower for all my followers. you’re doing so good, i’m so proud of you

#@all of you

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  》 “ Tonight, you and I, we can make our escape from the choices we                                                        made. So let’s run for our lives, cause baby we’re criminals. ” 

                                                                                          ⇢  [ @prvlogue ] ჻

     Aaron se había metido en muchas situaciones arriesgadas antes, peligrosas incluso, pero esta se llevaba el premio como la mejor sus hazañas. Desde hace un par de horas era un criminal frente a los ojos del estado de California, un asesino a sangre fría, y cuando decidió subirse a su auto, un fugitivo. Había estado manejando por dos horas seguidas, alejándose lo más que pudiese de San Francisco, el lugar que lo vio crecer. Tampoco estaba solo, y cada ciertos minutos volvía la atención a su derecha, a la chica que lo acompañaba y su cómplice en el crimen que supuestamente había cometido. No tenía un plan, estaba conduciendo a ciegas, considerando sus opciones - mas bien las pocas que tenía - para sacarse a si mismo del lío en el que se había metido. Había escuchado a alguien decir que la suerte consistía en estar en el lugar adecuado en el momento adecuado. Aaron consideraba que si aquello era cierto, debía tener una maldita mala suerte. - “Escucha.” - Empezó a decir cuándo se habían detenido en un semáforo en rojo, el sonido de su pulgar chocando contra el volante indicando que estaba ansioso. - “No sé quién eres ni me interesa. Estás por tu cuenta cuando lleguemos al lugar de descanso un par de minutos de aquí.” - Había una parada a poca distancia de dónde se encontraban para comer o rellenar el tanque del auto, de la cual Aaron prefería salir solo. - “Yo no te conozco ni tu a mí. Si alguna vez viste mi rostro, se te olvidó. ¿Entiendes? ”

#{ aaron: int } #{ c. miyuki } #no sé que tal quedó #espero que no muy mal :C #me dices cualquier cosa corazón #<3

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Concept: two friends (m/f, m/m or f/f) they work at a hotel. And they get into all kinds of shenanigans together. Stay in empty suites together. They use the pool during after hours. The boss is out on business trips most of the time so they are in charge of keeping things in order when really all they’re doing is basically living for free and meeting people who stay the night/weekend/or however long. Just crazy fun that sometimes lands them in trouble (they witness things that they wish they hadn’t)(they find money to go out on fancy dates)(they meet people of all kinds)

Bonus:they might have a crush on each other and during their adventures, these crushes only grown with time.

#{ Wishlist }

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la vie en rose // édith piaf 

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evphoniious:

Unas suaves risas escaparon de los labios de Saskia por su respuesta, aliviada al saber que no era la única nerviosa en ese momento - más allá de que según él tuvieran distintas razones, aunque podía sentirse relajándose de manera natural en su compañía, casi olvidando lo sucedido la última vez que se vieron. “Puedes tranquilizarte, mis expectativas no son demasiado altas, ya sabes… por si resulta ser un desastre.” Su tono era ligero, manteniendo una sonrisa en su rostro dejando claro que era una broma mientras esperaba su bebida observándolo recorrer su cocina. “Muchas gracias caballero.” replicó, sus ojos brillando con diversión al recibir el vaso que le ofrecía, rozando los dedos del ajeno de manera distraída al hacerlo antes de beber un trago del cristalino líquido; lo observaba en silencio mientras dejaba el vaso a medio beber sobre la mesada, disfrutando del delicioso aroma que los envolvía proveniente de la cocina. Cuando él la llamó se permitió alzar una ceja mientras una sonrisa aparecía en su rostro dándole una expresión juguetona, sin demorarse en obedecerlo y acortar el espacio entre ellos. “¿Estás seguro que no me intoxicará eso, cierto?” utilizó un tono desconfiado mientras de manera inconsciente una de sus manos tomaba su brazo con delicadeza antes de separar sus labios para permitirse probar un poco de la salsa que Blaine le ofrecía. Saboreando la misma, no despegó su mirada de él en ningún momento, en especial cuando la sonrisa volvió a sus labios. “Está deliciosa Blaine, creo que puedo resistir un poco más de picante, para la próxima.” le halagó relamiendo sus labios en caso de que hubiera quedado algún restante de la salsa en los mismos sin intención de volver a poner distancia entre ellos.

     Blaine se sentía mejor, escuchando a Saskia hacerle comentarios con su humor de siempre. Sonrió ampliamente, observándola por encima del hombro y asintiendo. - “Si resulta ser un desastre, te debo otra cena entonces. En un restaurante, claro está.” - Si su “yo” de un año atrás lo viera preparando una cena por sí solo que no fuera una sopa instantánea y una cerveza barata, se estaría riendo a carcajadas. - “Y si no, pues, no sólo me llevo la fama y la gloria, pero te toca a tí cocinarme a mí. ¿Suena como un trato justo?” - No estaba seguro de que fuera a aceptar, pero de pronto había caído en la cuenta de que después de aquella reunión no tendrían demasiadas excusas para verse de nuevo. Sin embargo, Blaine siempre se había considerado una persona muy creativa. Mantuvo sus ojos sobre la muchacha mientras probaba la salsa, buscando en su rostro alguna expresión de disgusto. Estaba seguro de que la salsa estaba rica, para qué se iba a mentir a sí mismo, pero al mismo tiempo buscaba la aprobación de la rubia. Cuando por fin la obtuvo, sus hombros se relajaron a sus lados, complacido consigo mismo. - “Lo tomaré en cuenta, para la próxima.” - Repitió sintiendo una de las comisuras de sus labios levantarse en diversión. No sabía por qué pero la promesa de volver a compartir tiempo juntos lo hacía sentir cálido por dentro. Blaine agotaría todas las recetas que conocía y hasta las que no, si eso significaba poder verla aunque fuera por un par de horas. Fue en ese momento que cayó en cuenta de lo cerca que estaban, cosa que no se había repetido desde el beso que ninguno de los dos había mencionado hasta ahora. - “Tienes..” - Blaine bajó la mirada hasta sus labios y con el dedo pulgar limpió una mancha de salsa imaginaria de la comisura de los mismos con suavidad. Estaba acercándose demasiado al fuego, lo sabía bien, el problema era que nunca había sido de los que les daba miedo quemarse. 

#{ blaine: int } #{ c. saskia } #plss ese give me dio muchos feelssss porque así me los imagino en este momento <333

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KAI posing for W KOREA

#{ jae }

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red moodboards: all too well

i’d like to be my old self again, but i’m still trying to find it

#{ inspo }

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evphoniious:

La noche anterior, las intenciones de la rubia habían sido las de levantarse bastante temprano con el fin de tener suficiente tiempo para prepararse para el comienzo de clases al día siguiente y llegar a tiempo, pero como cada vez que planeas algo con anterioridad, no salió como esperaba; en primer lugar, se quedó dormida por lo que tuvo el tiempo que planeaba, limitándose a vestirse, peinarse y maquillarse en tiempo récord y llevando su smoothie para desayunar en el camino - algo que también se atrasó puesto que su padre decidió ocupar a su chofer para que lo llevara a la empresa. Sí, no parecía ser su día. Como si aquello fuera poco, en cuanto llegó al establecimiento y recibió su horario lo comparó con el de sus amigas y descubrió que apenas compartía un par de clases con ellas, dejando escapar un bufido de molestia y resignación se dirigió a su primera clase, Gobierno y política de Estados Unidos. Mi día en verdad no podría ir mejor, pensó con sarcasmo dirigiéndose al aula asignado. ¿De qué le serviría esa clase de todos modos? Todo lo que necesitaba saber sobre el gobierno y la política de su país estaba a un click de distancia… o a un oído de distancia, si tenía a su padre cerca. Poniendo su mejor cara entró a la clase instantes antes de que la profesora llegara, ocupando el primer lugar libre que encontró, echándole un rápido vistazo al muchacho a su lado quien parecía bastante poco interesado en la clase aunque para ser honesta no podía culparlo, siendo que ella tampoco estaba muy entusiasmada por la misma por lo que se limitó a terminar de beber su batido hasta que la profesora llegó y lo hizo a un lado prestándole atención a la ajena.

       Blaine no tenía opiniones fuertes sobre el gobierno. Razón por la cuál era probable que nada de lo que decía la profesora le era de interés. Tenía la noción de que la política era cómo los deportes en ese aspecto, o eres apasionado al respecto o nada en absoluto. Su afición se desviaba más hacia contar historias, pues siempre pensó que el mundo podía verse desde un millón de perspectivas. Ese último pensamiento se resumía en que la aburrida clase sobre el gobierno estadounidense no estaba necesariamente desafiante para su creatividad. - “No sé que les han dicho de mi clase, pero he decidido cambiar la metodología porque sé que la mayoría de ustedes les interesa cerca de nada mi materia.” - Blaine levantó la mirada de la aburrida superficie de madera para observar a su profesora con una expresión que no significaba más que duda, sintiéndose completamente aludido con el comentario. - “Van a trabajar en parejas para desarrollar un proyecto cuya duración es de todo el semestre. Consiste en...” - Bueno, no era eso genial. Tal vez Blaine no tenía opiniones fuertes sobre el gobierno, pero sí las tenía sobre los trabajos en grupo. - “...desarrollar un diario de eventos actuales. Cada semana cada pareja va a escoger un evento en la televisión o las noticias de carácter político o gubernamental que considere sea de relevancia para el país. Lo van a comentar juntos y van a escribir un ensayo de cómo consideran que dichos eventos tienen significancia para sus vidas o las vidas de personas que conocen. Puntos extra si relacionan el evento con otro de índole parecida que haya ocurrido en el pasado.” - Blaine podía escuchar los murmullos de sus compañeros indicando la formación de las primeras parejas, por lo que se dispuso a revisar la clase con la mirada, suponiendo que debía haber alguna otra persona en una situación similar a la suya. Y luego... la vio.

  Blaine respiró profundo, maldiciendo mentalmente porque no había notado la presencia de la chica hasta ahora, cuando justamente se veía como un niño de preescolar buscando a un amigo con quién jugar legos. La historia había sido así: Blaine había escrito “SASKIA NASSER IS HOT AS FUCK” en el baño de hombres justo antes de salir a vacaciones. Lo había hecho a forma de broma, lo de escribirlo porque lo de caliente era cierto, pensando que el marcador que usaba era de pizarra y no permanente. Ahora el mensaje lo observaba cada vez que iba a mear, las letras ahora corridas dando a entender que alguien había intentado borrarlo pero sin éxito. Respiró profundo considerando sus opciones, las cuales parecían acabarse entre más personas se unían para empezar a hablar del famoso proyecto. - “Uh..” - Salió de entre sus labios, tocándole levemente el hombro a la rubia. - “Disculpa, ¿tienes pareja?”-

#{ blaine: int } #{ c. saskia } #no sé pero a mí me parece que eso le pasa por andar rayando paredes cuando no debe #lmao

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#{ nana }

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                                                                   ⇢  [ @evphoniious ] ჻                               ♡ “ When I first met you I didn’t know how lucky I’d just become. ” ♡

     Blaine estaba cuestionando seriamente la necesidad de la educación secundaria. Se encontraba en el lado de la clase que acostumbraba siempre, lejos del escritorio del profesor pero cerca de la puerta para entrar y salir rápido sin tener que tener interacciones sociales innecesarias. Ese era el lugar que escogía durante sus clases de la mañana, al menos, en aquellas horas cuando su cuerpo estaba despierto pero parecía que su cerebro no había recibido el memo aún. Era un pecado, a los ojos de Blaine, levantarse y ser productivo tan temprano, cuando ni siquiera el mismísimo sol se había dignado a aparecer entre las nubes. Esa maravillosa mañana de Lunes le daba la bienvenida a su primer período, y por ende su primera clase del año escolar: Gobierno y política de Estados Unidos. Booyah.

     Irónicamente, Blaine tenía la costumbre de ser de los primeros en llegar a sus clases, así que se encargó de evaluar a sus nuevos compañeros con la mirada, la goma de máscar que se estaba comiendo haciendo un sonido “pop” mientras soplaba y desarmaba bombas con los labios. Habían rostros conocidos y otros no tanto, pero en realidad no le importaba demasiado porque si todo salía de acuerdo con sus planes, sería una clase magistral y tranquila. Algo así como: entra, escucha la materia del profesor y sale. O en el lenguaje de Blaine Millard: entra, toma una siesta de dos horas para recuperar las horas perdidas de sueño y sale. Simple.

    Abandonó la inspección de sus pares para ver por la ventana mientras la clase terminaba de llenarse. Voces y risas empezaron a llenar el salón de clases, hasta que la campana de la secundaria sonó indicando que las lecciones estaban por empezar. Blaine se quitó el gorro de la sudadera tan pronto el sonido de tacones indicó que la profesora había llegado. Cruzando los brazos, se dispuso a escuchar las instrucciones de quién sería su némesis personal por el resto del semestre.

#{ blaine: int } #{ c. saskia } #listo babe blaine aun no se da cuenta que la bebé de sas va a ser compañera suya #se va a morir cuando sas lo enfrente por lo del baño

[n0cturno-blog1]

evphoniious:

“Hola, Blaine.” respondió la rubia con una pequeña sonrisa incómoda en sus labios mientras le entregaba los postres y su chaqueta, cayendo en cuenta que en su mini discurso se había saltado el saludarlo; claramente sus nervios le estaban jugando en contra, si apenas llegando ya se saltaba detalles como aquel no quería imaginar si con el correr del tiempo los mismos aumentaran. “¿Qué tal estás?” cuestionó aún sonriendo, cruzándose de brazos a la altura de su pecho al no saber qué hacer con sus manos ahora vacías mientras se adentraba en el apartamento, escuchando la voz del contrario se ocupó recorriendo el lugar con su mirada como intentando grabar el espacio en su memoria, al fin y al cabo era la primera vez que lo visitaba y no negaría que una parte de ella aún esperaba la llegada de ese día para conocer el piso del moreno. Dejando su bolso y abrigo junto a la chaqueta que él había dejado sobre el sofá pensó por unos segundos en la respuesta a su pregunta. “Un poco de agua está bien, gracias.” aceptó con un encogimiento de hombros que claramente él no podría ver; debatiéndose entre quedarse allí o no escogió por seguir al chico a la cocina, quedándose en la entrada de la misma. “Me alegra ver que tu piso no ha sufrido ningún incendio aún.” Comentó utilizando un voz juguetón echándole un rápido recorrido al espacio con sus ojos como buscando un matafuego usado o algo por el estilo; obviamente lo hacía para jugar con él, aún cuando le gastaba bromas poniendo en duda sus hablidades culinarias ella en realidad le creía cuando le decía que en verdad estaba aprendiendo y sentía curiosidad por descubrir qué tan bueno era.

- “Nervioso.” - Respondió sinceramente, pero dejando su rostro relajarse en una sonrisa. - “Es la primera vez que pruebas mi comida y tengo que dar una buena impresión, ¿no?” - Lo cierto era que Blaine tenía mil y una razones más para estar nervioso que la cena, dado el desenlace del último encuentro que habían tenido. Era obvio que había una atmósfera tensa entre los dos, pero suponía que con el pasar de las horas - y la ausencia de Luca - podrían sentirse un poco más cómodos el uno con el otro. Al fin y al cabo siempre había sido así. - “Agua será.” - Respondió desplazándose al refrigerador como lo hacía de costumbre, su memoria muscular localizando una botella de agua fría en un par de segundos antes de colocarla sobre la encimera para servir el contenido en un vaso. Le tendió el vaso a la rubia, haciendo contacto visual por primera vez y sonriendo con gracia. - “Aquí tiene, señorita.” - Alzó las cejas en diversión, para después tomarse el resto del agua en la botella de un sorbo, suponiendo que algo del líquido frío le vendría bien para contraatacar la garganta reseca que traía. La cocina olía bien, si el mismo podía decirlo, con ese pensamiento se dispuso a darle algo de espacio a Saskia, decidiendo acercarse a la estufa para remover con una cuchara el platillo que se encontraba cocinando a fuego lento. - “Énfasis en aún.” - Sonrió, enseñando los dientes blancos y espolvoreando alguna especia en la sartén. - “Tan sólo espero que no pase hoy, me gusta mantener los incendios a un mínimo cuando tengo visitas.” - Blaine sentía su cuerpo relajarse desde ya, lo cuál era una buena señal. - “Ven aquí.” - La llamó, inclinando el torso para buscar una cuchara que tan pronto encontró, acercó a la sartén para recoger un poco de la salsa rojiza que se encontraba cocinando. La colocó frente a su rostro para soplar, colocando la mano que no sostenía la cuchara debajo en caso de que hubiera algún derrame. - “Dime qué te parece. Se supone que sea picante, pero esta está ligera porque no sabía qué tanto picante puedes aguantar.” - Se acercó, ofreciéndole la cuchara a la chica.

#{ blaine: int } #{ c. saskia } #listoooo #siento la sexual tension creciendo desde ya pero pueda que sea yo y mi paranoia lmao