Tumgik
r-tierno · 5 years
Text
LECTURAS con Tania Solomonoff
Fotos Prensa TNA Cervantes/ En el marco de su presentación en el encuentro Volumen. Escena Editada realizado en Argentina, hablamos con la performer argenmex.
Tumblr media
En la Sala Trinidad Guevara del TNA Teatro Cervantes de Argentina, un grupo de personas se descalza y se acomoda en los laterales del cubículo rectangular. En el centro, dos cuerpos se funden como uno: de allí comenzará a reconstruirse la pieza Lectura, de la artista argentina radicada en México, Tania Solomonoff.
Hacia el final de la sala, contra la pared, se proyectan imágenes de archivo. Son fotos de Tania y su familia durante el proceso de emigración de Argentina a París (exiliada por la dictadura militar argentina de 1976), su vida en Mozambique y su llegada a México. Su padre, quien participó en la pieza al igual que su hermana Analía como una incorporación in situ, recita palabras que escribió en aquella época, contando las emociones y los avatares de una familia en continuo viaje por el extranjero.
¿Qué es volver? Se pregunta la artista en el texto inicial. Y de aquí se despliega un abanico de experiencias, lugares, objetos, que fueron y siguen siendo el ejercicio mismo de la identidad. Una identidad individual como la de Tania, que comparte con seres que la han rodeado durante su vida y que expone públicamente sabiéndose parte de una memoria colectiva, traspasando los límites de la subjetividad (o más bien extendiéndolos) para encontrarse con los otros, que en su propia individualidad serán interpelados y atravesados por esta Lectura colectiva.
Tumblr media
En el piso, un despliegue de figuras realizadas con papel y cartón negro que Tania y Analía van acomodando geométrica y desordenadamente. Una casa se vislumbra, círculos, cuadrados, figuras amorfas que recuerdan el arte africano.
Lectura tuvo, en esta ocasión, un proceso de tres días, ya que antes de la presentación de la pieza la artista realizó dos encuentros a modo de ‘activación con el público’, para dialogar con la población local y dejar que ésta atravesara la pieza.
“Es la primera vez que hice activación con el público, por este desplazamiento de territorio y para dar tiempo de ver cómo la pieza se desplegaba en Volumen, en el espacio específico de la Sala Trinidad Guevara, y con las aportaciones de mi padre y mi hermana. Me parecía muy abrupto llegar y montar algo en un lugar donde no había un dialogo mínimo construido, entonces decidí tomar estos tres días in situ”, explicó Tania.
La pieza, presentada en Volumen. Escena Editada, tuvo sus inicios en México: “Yo estaba volviendo de una residencia en Argentina donde había hecho una investigación de archivo, y en mi regreso a México empecé a pensar qué me había atraído del texto y la textualidad. Me di cuenta que ese material era, por un lado, el cuento y la escritura, por parte de mi madre, y trazos más territoriales, de construcción de espacio, de parte de mi padre. Decido entonces hacer este cruce de archivos restaurando todo, la salida del país, la separación de la familia, el divorcio de mis padres, y deposito una serie de fragmentaciones y me doy al juego de empalmarlas en tiempo real tipo collage, dejando que las imágenes vengan, los recuerdos, y así nació”.
Ya has presentado esta pieza en México, ¿qué te resignifica presentarla en Argentina?
TS: Me resignifica en muchos sentidos, uno porque es una pieza donde interviene la familia local, a la que puedo convocar en el país a donde voy, en este caso mi hermana y mi papá. Hay un ajuste interno en la pieza, que tiene que ver con acercarnos entre sí y recomponerla con aportaciones corporales, conceptuales y por supuesto de historia de vida. Por otro lado, este es un proceso que se va continuando y desarrollando en tiempo real a medida que va sucediendo la obra, y ahí también hay un reajuste que se hace antes, durante y después.
También el situarlo en la Ciudad de Buenos Aires, en el contexto de Volumen, en una invitación de Gabriela (Halac). Por un lado, sí me siento extranjera en varios sentidos, en términos del contexto escénico ya que no tengo establecidos diálogos muy cercanos con la comunidad teatral o las producciones e investigaciones que se hacen, entonces hay una pregunta de cómo insertar la obra. También me pregunto quién es ese otro que va a recibir la pieza. La pregunta ¿qué es volver? queda resonando, y la deposito en la acción de la pieza, en todo el proceso de deconstruirla y ajustarla in situ, y ahora estoy sintiendo ese eco. Por ejemplo, hay una clara diferencia entre presentarla en México o en Argentina. Increíblemente, aquí muchos argenmex aparecieron, gente que vivió en África y París por el exilio y también gente que no salió o pertenece a otra generación pero que sin duda vivió o le tocó por algún lado esa época.
Este trabajo es en torno a la identidad, ¿qué temáticas se han desprendido de este eje?
TS: La pregunta como tema identitario surge del tema del cuerpo, me sitúo constantemente en este lugar/territorio, construcción de sentido, en la experiencia concreta y sensible que puede ser esta corporalidad/cuerpo, que se vuelve lo permanente, lo que siempre está. Vengo de la danza, de lo coreográfico, y también de una vida nómada, entonces a partir de esta mirada, me doy cuenta que quiero pensar lo identitario, qué somos, de qué estamos hechos, cómo resonamos, dependiendo de cómo estamos situados, hacia dónde transitamos, qué tipo de lenguaje desarrollamos o improntas tenemos, y entonces el tema de la identidad es un eje.
La identidad es un tema que nos atraviesa a todos y todas, ¿cómo ha sido la devolución del público?
TS: No suelo lanzar el tema literalmente. Son temas que resuenan desde lo arquetípico y desde lo actual muy concretamente, están ahí emergiendo de a poco, en el tejido del discurso de la obra, y la gente los va leyendo, los va identificando, y siento (no siempre), que se abre un diálogo. Hay una devolución de la experiencia y de la resonancia que tienen que ver con el estar, estar ahí. Lo que es interesante es que de alguna manera golpea sensiblemente a quien está. Tiene que ver casi con un tema vibratorio, y ahí viene un trabajo corporal para los que estamos y el que está como público. En ese sentido todos somos testigos. Un tema con el que trabajo mucho es cómo el cuerpo se vuelve canal, cómo asumir que soy y somos canal de la información que está llegando, que se está convocando, de la información del lugar que a veces está bloqueada y que ese bloqueo es parte. Pero sí sentir que está circulando información y que todo lo que se está organizando, en realidad, está articulando esa capacidad de comunicarnos. La resonancia, la conexión es desde el estar.
Hay una intención en el trabajo de Solomonoff, de ‘graficar’ la memoria. En este sentido, el recurso corporal es muy sutil, y mucho más presente está lo objetual, invitando a una activación desde lo visual y material, con algunos destellos de nostalgia (que pareció tener lugar en esta ocasión quizá por la presencia de su familia más cercana), y una relación con la voz y las palabras. Parte de la pieza también es la lectura del cuento Por qué el Conejo tiene las orejas largas, de Zoraida Vásquez, madre de Tania.
Como un dibujo, como un mapa, la artista va construyendo esta memoria a partir de su propia subjetividad, pero también desde el intercambio sensible y vibratorio con el público. En definitiva, pensar quiénes somos, cómo y de qué manera nos situamos es parte inevitable de nuestra existencia, un continuo proceso que no cesa y que compartimos desde nuestra individualidad como seres sociales.
Tania Solomonoff es Miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte del FONCA, cuya primera etapa es De lo que estamos hechos. Archivo renovado, “una revisión de archivo de obra y procesos creativos, con una selección y resignificación del material”. El resultado de este trabajo, que la artista crea entre México y Argentina, tendrá su exposición tentativamente en diciembre en México. Su participación en Volumen. Escena editada fue gracias al apoyo del FONCA, Teatro Nacional Argentino – Teatro Cervantes y de la Embajada de México en Argentina.
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
Jazmín García Sathicq lleva a escena CERCA DE LOS CUERPOS, LO SAGRADO
La obra es un proyecto becado por el Fondo Nacional de las Artes que indaga sobre el concepto de lo sagrado. Estreno el 18 de octubre en La Grieta de la Ciudad de La Plata.
Tumblr media
Fotos de Juan Araya/ El título quizá tendría que haber sido esta cita de la dramaturga y directora platense Jazmín García Sathicq: “la historia del teatro platense es la historia del teatro independiente”, y en esa historia ella es, sin duda, una de las actuales exponentes. Con más de 20 años de trayectoria, una vida dedicada al teatro (empezó a los 7 años), Sathicq emprende una vez más el  arte de montar una obra: Cerca de los Cuerpos, lo sagrado, de su autoría y dirección. 
El proyecto comenzó con la lectura de Poética de lo sagrado (Colihue, 2015), de Adolfo Colombres, que llevó a la autora a realizar una investigación acerca de la noción de lo sagrado en distintas culturas, y de allí “pensarlo en el hoy, en el hombre y la mujer contemporánea, para repensar la vida en relación a lo sagrado y lo profano”, aclara. 
Se trata de una obra que si bien contiene lo teatral, plantea un acercamiento a la temática desde lo performático y lo visual, apelando a la creación de imágenes sonoras, corporales, visuales, que interpelen al espectador desde el imaginario y desde su propia noción de lo sagrado. “La idea es que puedan replantearse su cosmovisión, su visión de lo sagrado, su cultura, su forma de ver y pensar el mundo y las cosas. Si bien hay historia, hay personajes, no es narrada de una manera clásica ni convencional”. 
Cerca de los cuerpos, lo sagrado, tiene diseño y realización sonora de los músicos performers Vladimir Zegarra, Loren Schaller Aramburú y Bernardo Bergsztein. Un despliegue de diversos instrumentos en escena logra crear una sensación de ritual, el espacio como ‘templo sagrado’.
Tumblr media
Si bien solemos asociar lo sagrado a lo religioso, la dramaturgia pretende ir más allá y abordar el concepto desde el ser, despojado de género y condición social, ir por fuera de los sistemas religiosos y alcanzar una consciencia y exploración sobre la existencia. Sobre esto, Sathicq expresó que en la investigación previa encontró una forma de pensar lo sagrado: “Lo sagrado es una forma de ver al mundo. Cuando uno cree que la vida, la naturaleza, las personas, tienen un lugar de vínculo directo con el sentido de la existencia y del mundo empieza a significar todo de otra manera. No tiene que ver con lo religioso en sí, en cuanto a creer que existe un dios, sino empezar a conectar con la vida, la naturaleza, y los otros, de la manera que eso cobre una entidad sagrada para uno”. 
Tarea complicada para estos tiempos donde, si bien existe una conexión, cada vez es menos palpable y relegamos a una pequeña pantalla la cálida y a veces incómoda tarea de mirarnos a los ojos. “Es un interés poner en juego en la obra esto que dice Adolfo Colombres sobre la época del vacío, el concepto de vaciamiento, que está relacionado con este hombre posmoderno que se basa solo en lo racional y va creando una distancia con los seres y su sentido de vida, se va aislando. Él dice que esto no es casual, es producido, con el objetivo de que cada vez las personas se vinculen menos, sueñen menos, como un debilitamiento de la esencia del vivir del hombre”, comentó Jazmín.  
¿Qué balance podés hacer de todo este tiempo haciendo teatro?
El teatro es inagotable, no basta la vida de uno para encontrar exactamente la definición de qué es. Sí el sentido, porque tiene que ver con una búsqueda existencial dentro de un lenguaje que siempre está de la mano con los temas que te interpelan, que te atraviesan, en la búsqueda de un lenguaje poético, con un resultado estético pero a la vez metafórico que hable de lo que uno quiere hablar, entonces es todo un universo que se pone a disposición de la creación para encontrar sentido a la vida, a las cosas. Creo que ese es un gran lugar de aprendizaje sobre la vida, usando el hecho teatral.
¿Cuáles siguen siendo las dificultades de encarar un proyecto teatral?
Por un lado los artistas tenemos un ímpetu de hacer y vamos a seguir haciendo sea favorable o no el lugar de la política cultural que se le da al teatro y a la promoción del mismo, y por otro lado son hechos que desfavorecen o favorecen la producción. Hay una realidad política y económica que influye, estamos viviendo en crisis hace varios años ya, con toda la inflación que hay lo primero que suelen recortar las personas es el tiempo ocio, para el disfrute, el placer, y en eso entra la cultura, dejan de ir al teatro, de ver música, de escuchar poesía y se apoyan más en los dispositivos tecnológicos que son aparentemente de menor gasto pero el costo que se llevan es otro.
¿Crees que existe una forma del teatro platense?
Algo muy propio es la producción autogestiva, prácticamente no hay lugares oficiales de producción, si bien está la Comedia de la Provincia son pocos los espectáculos al año que genera, entonces la mayor producción es de teatro independiente. Eso es lo más importante, la historia del teatro platense es la historia del teatro independiente. Tiene siempre un compromiso político, un compromiso en la búsqueda del propio lenguaje, de crear nuevas formas, nuevas estéticas y que abarca un gran panorama de diversidad de propuestas, no sólo en géneros y estéticas, sino también en teatro para chicos, adultos, etc.
¿Por qué crees que el público debería ver esta obra?
Está bueno pensar para qué va uno a ver arte, en búsqueda de qué. Y creo que ahí está la propuesta, poder encontrarse con un lugar mucho más sensorial, existencialista, con un sentido de belleza que atraviesa las afectaciones humanas en cuanto a las sensibilidades, pero que busca una transcendencia para buscar el sentido. Esperaría que puedan encontrase como seres sensibles sintiéndose atravesados y que se vayan con muchas preguntas acerca de su vida.  
Forman el elenco de Cerca de los cuerpos, lo sagrado les performers, bailarinas y bailarines, actores y actrices: Laura Belmonte, Renée Zgainer, Jésica Alegría, Nahuel Ortiz, Alejandro Labaronne y Jonatan Anaquín. El vestuario y escenografía es de Pheonia Vélez y Sofía Camparo; diseño y realización sonora de los músicos performers Vladimir Zegarra, Loren Schaller Aramburú y Bernardo Bergsztein; asistente de dirección Mariano De Castro; dramaturgia y dirección de Jazmín García Sathicq.
Estará los días 18, 19 y 20 de octubre en La Grieta, y luego tendrá funciones en la Sala 420 y El Dínamo.
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
“Me interesa escribir desde el material que brinda lo real”: Entrevista con Giuliana Kiersz
Apoyada por BECAR Cultura, la dramaturga argentina se encuentra realizando un trabajo de investigación sobre manifestaciones públicas en México y dictará el taller Encuentros de escritura a partir del territorio, en la Colonia Roma de la CDMX.
Tumblr media
Entre Xalapa y la Ciudad de México, Giuliana Kiersz (Buenos Aires, 1991) transita y descubre un territorio desde una perspectiva particular: las manifestaciones públicas y artísticas en México. ¿Cómo nos organizamos, cómo nos pensamos y cuándo salimos a la calle? Se pregunta. Se trata de un trabajo in progress, apoyado por BECAR de la Secretaría de Cultura de la Nación Argentina, que luego del trabajo in situ dará como resultado una pieza escrita, que hasta el momento la autora llama Manifestaciones.
“Me interesa pensar en cómo nos organizamos socialmente ante un montón de cosas que están sucediendo en el mundo, de qué forma protestamos. Las formas de organizarse fueron cambiando, pero no tan rápido como las estrategias neoliberales de derecha capitalistas, por ejemplo. Entonces el proyecto trabaja un poco sobre eso, cómo nos organizamos y también sobre qué relación tiene el arte en eso, una como artista qué hace, cómo trabaja su obra, sobre qué territorios”, explica.
Giuliana Kiersz es autora de obras como El fin, que obtuvo X Premio Germán Rozenmacher a la Nueva Dramaturgia organizado por el Centro Cultural Rector Ricardo Rojas y el Festival Internacional de Teatro de Buenos Aires; Isabel I, publicada por Editorial INTeatro; B, llevada a escena en el II Ciclo de Dramaturgia Contemporánea escrita y dirigida por Mujeres del INBAL; El día que ella dijo que había matado al perro agarré el auto, entre otras.
En su regreso a México para la segunda etapa de la investigación sobre manifestaciones, la dramaturga estará brindando el taller Encuentros de escritura a partir del territorio, los días 8, 9 y 10 de octubre, de 18 a 20 horas en We Are Todos, en la Colonia Roma de la Ciudad de México.
¿Cómo surge la idea de trabajar sobre el territorio?
GK: Cuando en México empecé a trabajar con Gabriela Román, que está en el Ciclo de Dramaturgia Contemporánea escrita y dirigida por Mujeres, hicimos una cartografía sobre nuestras vivencias como mujeres en Ciudad de México y en Buenos Aires, un mapa gigante con relatos de cosas que nos hubieran pasado, y empecé a trabajar en territorio, cosas que suceden ahí y cómo abordar un territorio. Me interesa escribir, no sólo desde lo que pasa adentro y las propias ideas, sino con lo que pasa afuera y el material que brinda lo real.
¿Qué antecedentes encontraste de este tipo de investigación?
GK: Hay muchas obras de artistas que se hicieron dentro de las manifestaciones y para manifestarse, como acá (Arg.) durante la dictadura por ejemplo. No me interesaba generar una obra en la manifestación sino ver cómo de repente alguien dice ‘bueno voy a dejar de estar en mi casa y voy a salir a la calle’, cuándo se activa ese algo de la responsabilidad social. Es una búsqueda totalmente poética, cero académica, voy haciendo entrevistas muy subjetivas, para ver desde dónde surge el deseo de salir a decir lo que piensas o a encontrarte con personas que piensan lo mismo, desde un lugar más individual pero en relación con el colectivo. Por eso fui a manifestaciones con las que concordaba y otras con las que no concordaba nada, pero me parecía llamativo, cómo alguien que durante muchísimos años no salía a manifestarse y de repente sucede y sale, ¿y por qué sale en ese momento?
¿Qué resultados has tenido hasta ahora?
GK: Ahora tengo un primer texto que llamo Manifestaciones, una mezcla entre lo que me decía la gente que entrevistaba, organizaciones políticas, personas que me encontraba, y cosas que me pasaban a mí. Quiero corregirlo y reescribirlo. Estoy en la búsqueda de respuestas, y a partir de lo que sucedió decidí hacer un recorte. Me encontré con personas muy diferentes, entonces ahora tengo ganas de ver sobre qué apunto, si en organizaciones que están hace muchos años o sobre manifestaciones efímeras, esto es más lo que me interesa, no tanto las organizaciones que están hace muchos años generando una estructura, sino esas manifestaciones que suceden de la nada, como fue acá (Arg.) el Ni una menos. Qué sucede cuando alguien se da cuenta lo que se está sintiendo, canaliza eso y sale a la calle.
Durante este proceso, Giuliana Kiersz también realizó un trabajo en conjunto con la directora mexicana Martha Rodríguez para el IV Ciclo de Dramaturgia Contemporánea escrita y dirigida por Mujeres, organizado por INBAL. La obra se llamó Antes de que suban los mares y aborda el posible fin del mundo, en una pieza apocalíptica que emana de un sentimiento (y realidad) generacional que se anticipa y dice ‘no hay futuro’. Sobre esto, Kiersz destacó que hay una parte real y otra ilusoria, generada por las políticas capitalistas que nos contraen en una crisis constante. Sin embargo, en Chiapas, al conocer la comunidad zapatista, se dio cuenta que otro mundo es posible. Esta ampliación de la realidad, de la perspectiva, es lo que le interesa a la autora del trabajo en territorio.
¿Te interesa transmitir este mensaje a tu generación?
GK: Me pasa mucho que quiero conocer otras formas, por eso trabajo mucho en territorio, me interesa ver qué otras formas existes más allá de las nuestras, de mi forma de pensar como argentina, joven de Buenos Aires, ver que hay un mundo afuera. Esto que sentimos, que no se puede cambiar la realidad, tiene que ver con ampliar la perspectiva, hay otras cosas, en México está pasando esto, en Berlín esto, en Buenos Aires están pasando otras cosas, muchas veces marginadas, no entran en el sistema del mercado del arte más conocido. Trabajar en territorio para ver qué otras cosas pueden pasar y ver otras formas de contar la realidad.
Y otras formas de construir la identidad…
GK: Sí, la construcción es desde dónde hablas, porque pienso en algo como la literatura o el teatro y hay algo de como si fuera ‘universal’, y no hay nada universal ¿qué es lo universal? como si un extraterrestre pudiera entenderlo, como una pretensión ambiciosa de hablar desde la verdad, y ya sabemos que no existe una verdad, siento que hay algo de la posverdad que también nos atraviesa, que solo podes hablar desde tu lugar y desde lo que a vos te pasa, con el afuera también, podes hablar desde problemas internos sobre una realidad, que igual va a ser una construcción subjetiva. Hay algo de eso que es un acierto, me siento mucho más cerca cuando alguien me habla desde su lugar y no tanto de lo que ‘es’.
Para participar del taller Encuentros de escritura a partir del territorio pueden escribir a [email protected] o dirigirse a We Are Todos, Tabasco 242, Col. Roma, CDMX.
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
Llega a México el stand up argentino PERSONA
Tendrán funciones el 4 y 5 de octubre en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris. Ironía, acidez, honestidad brutal, en un show que reflexiona sobre los prejuicios y la diferencia de género. Hablamos con una de sus creadoras y actriz, Vanesa Strauch.
Tumblr media
Qué difícil encontrarse con un buen stand up. Ahora que las mujeres no nos reímos de cualquier cosa, que ya se nos fueron las ganas de complacer, y que nos dimos cuenta que algo no andaba bien en la sociedad (y no éramos nosotras), qué difícil encontrar un humor acorde a esta nueva etapa. Lo último feminista que vi fue Monólogos de la vagina, y ya está demodé. El show Persona no sólo te hace reír porque te identificas, además tiene eso que admiro del teatro: te transforma, te pone incómoda… sentada en una butaca tuviste un viaje sin retorno.
Integrado por Malena Pichot (Estupidez compleja, Netflix), Ana Carolina, Vanesa Strauch y Charo López, Persona viene triunfando en distintos escenarios del mundo. Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, España, Alemania y ahora México, forman parte del recorrido que hicieron estas standuperas feministas y poco convencionales para llevar su mensaje al mundo.
“Estamos muy ansiosas, nos llegan las noticias de México y tenemos muchas ganas de estar ahí haciendo nuestro aporte, que son los chistes”, comentó la actriz Vanesa Strauch en entrevista desde Argentina para Cartelera de Teatro.
Un show de stand up, un musical hipócrita, elucubrado para que la audiencia se esfuerce en un nuevo ejercicio de comprensión. Un ejercicio basado en la idea fundamental de que quienes se atreven sobre el escenario no son mujeres, son personas. Bajo esta descripción, las actrices desembarcan en la tierra azteca para pararse arriba del escenario y contar su verdad (y la de muchas).
“Cada una trabaja con un tipo de humor, somos cuatro feministas pero por nuestra manera de pensar está tomado de formas muy distintas, unas con más ironía, otras con autocrítica, y eso es lo interesante del show, que durante una hora y veinte ves cuatro versiones de la realidad pero con los mismos principios. Tenemos un final muy divertido, muy ecléctico”, anticipa Vanesa.
Este divertido (y reflexivo) show lleva ya cinco años en las tablas. Comenzaron en un escenario íntimo, en El Universal Espacio Cultural de Buenos Aires, y en poco tiempo alcanzaron a dar funciones en otros teatros para el doble de público. Ahora, el próximo 4 y 5 de octubre, estarán en uno de los recintos más importantes de la Ciudad de México.
“Yo siempre le hablo a una, hay una energía que como actriz tenés que tener encima, la proyección es otra en un escenario grande, y te digo la verdad, es más fácil hacer reír a mil quinientas personas que a diez. Nosotras tenemos una carrera que durante muchos años tuvimos que hacer reír a diez. Sí te pasa que después de haber hecho reír a mil quinientas quedas como si te hubiese pasado un camión por encima, porque la energía es otra”, comentó la actriz.
Esta trayectoria les dio un back up de material interesante para poder preparar su show en México. En el caso de Vanesa, su monólogo reflexiona sobre el mandato social de la maternidad y los prejuicios con los que debemos lidiar si elegimos no ser madre. “También cuento mis años de rock y droga, porque ahora a la vista soy como una señora muy concheta (fresa) rubia, y también es muy divertido que sepan lo que fui. Son cuatro monólogos muy honestos, hay observación pero es más de autocrítica, desde una perspectiva de género, porque pensamos así desde que nos levantamos hasta que nos acostamos”.
Lo interesante del humor es cómo nos hace reflexionar: en la superficie nos despierta la risa, pero bajo aquel destello de gracia a veces vemos emerger una verdad para nada alegre, sobre todo para las mujeres: el machismo y la violencia de género.
“Hay gente que con el tono serio no quiere saber nada, se asusta, no le interesa lo que tenemos para decir. En cambio, si se lo decís mientras se están riendo te prometo que van a reflexionar mucho más, porque a la vez se van a estar riendo de ellos, y después se van acostar y van a pensar ‘mirá lo que hice, casi violo a alguien’. El humor es una herramienta muy importante, por eso yo me enojo cuando la gente que hace humor se ríe del oprimido, el humor homofóbico me rompe la cabeza, me genera odio, tienes una herramienta súper poderosa, ¡úsala para el bien!”, destacó la actriz.
Anduvieron por todo el mundo, ¿cómo fue la experiencia con los diferentes públicos?
VS: Muy buena siempre, con públicos muy distintos, hay machismo en todos los países lamentablemente, no es que vas a uno y no saben qué estamos diciendo, es lo mismo en todos lados. En algunos países no están acostumbrados a que las mujeres se paren y digan esas cosas. En España por ejemplo, que hay mucho machismo y hay un feminismo muy interesante, se sorprendían y nos decían cómo todavía no nos habían matado con este show… y hay gente que nos lo dice en serio ‘dicen cada cosa’…. a veces se sorprenden de cosas que en Argentina no, porque las venimos peleando y diciendo, como lo del aborto, que hay una lucha muy importante. En otros no, aunque haya una ley, por eso hablamos de los prejuicios, no es solo que el aborto sea legal seguro y gratuito, es que la persona que aborte no sea castigada por la sociedad. Pero bienvenidas siempre, nos fue bien y no es una cosa egocéntrica, es de agradecimiento. Tenemos éxito porque los malos existen en todo el mundo, ojalá algún día podamos hacer chistes sobre las suegras.
¿Qué les interesa hacer reflexionar?
VS: No creo que pueda hacer reflexionar a una sociedad, me caería de los nervios en el escenario. Hace poco vi un reality que se llama Made in México y me quedé flasheada, todas chicas muy fresas, divinas, y la preocupación de las cuatro era casarse, y eran cuatro chicas inteligentes, y es un programa de este año. El reality que llega al mundo es de la mujer que se quiere casar, acá también pasa eso. Nosotras hicimos una serie que se llama Tarde baby, que es muy linda y la ponemos en Internet, porque nadie nos va a venir a poner plata para lo que nosotras queremos decir, eso pasa en Argentina, en México y en todos lados.
Además de tu monólogo en referencia a la (no) maternidad, ¿qué otros temas aborda el show?
VS: Mi visión es tener la libertad de ser o no ser madre. Después tenemos a Charito López que fue madre hace dos años, que habla de lo difícil que es ser mamá, es muy interesante. Ana Carolina tiene toda una visión de la teoría queer que es increíble, comparte con el público lo que es ser lesbiana, los miles de prejuicios y lo que sucede; Malena (Pichot) que como todo el mundo sabe es una genia del humor, súper ácida, te dice las cosas más tremendas, te reís y se te cae un lagrimón, todo desde la visión feminista, porque también hay que seguir la lucha, nos ha pasado que terminamos de hacer un show y vienen al camarín a decirnos que desaparecieron una chica, hay un grado de acidez que tenemos que manejar las cuatro para poder salir al escenario.
¿Por qué la gente tiene que ir  a ver Persona?
VS: Primero por la situación que hay en Argentina, que no sabemos si vamos a estar vivos el año que viene, así que aprovechen que vamos a estar por primera y quizá única vez en México. Es una producción nuestra, que la hacemos con mucho amor por ganas de estar en allá, no es una situación fácil. Segundo, no se pierdan el mejor show del mundo, de las cuatro mejores comediantes, de verdad vamos con mucho amor y tenemos mucho para decirles, entre risas.
Persona se presentará por  el próximo 4 y 5 de octubre en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, ubicado en Donceles 36, Centro Histórico. 
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
“Tenemos que seguir fortaleciendo redes”: México participa en VOLUMEN. ESCENA EDITADA
Fotos: Cortesía Prensa TNA Teatro Cervantes/ Con el apoyo de la Embajada de México en Argentina y el INBAL, editoriales independientes y artistas mexicanas participaron del encuentro en el país sureño, con idea y curaduría de Gabriela Halac y colaboración de Ariel Farace, en el TNA Teatro Cervantes.
Tumblr media
Ediciones El Milagro, Teatro Sin Paredes, Escenología Ediciones, Textos de La Capilla, Lagartijas Tiradas Al Sol, Ediciones Godot y Paso de Gato, son las editoriales que estuvieron presentes en la tercera edición de Volumen Escena Editada, de la mano de la Embajada de México en Argentina y con el apoyo de la Coordinación Nacional de Teatros del INBAL.
“Volumen es una feria muy especial, porque rebasa lo que sería una típica feria del libro, claramente hay un sesgo temático hacia las artes escénicas, pero no solo eso, más bien Volumen pretende ser un encuentro donde se cruzan diferentes líneas de pensamiento”, comentó Diego de la Vega, encargado de Cooperación Internacional y Asuntos Culturales de la Embajada de México, en entrevista para Cartelera de Teatro.
Como explica su texto curatorial, Volumen Escena Editada, es un encuentro de artistas y editores de distintas partes del mundo, que abordan la relación entre el libro y la escena contemporánea. En esta ocasión la reflexión partió de la expresión “El cuerpo es un texto que se resiste a la publicación”, a propósito de Heiner Müller sobre el trabajo de Pina Bausch.
“Me parece muy interesante que el subtítulo de Volumen, es muy revelador en el sentido de cómo los libros pueden ser también perfomáticos, cómo se vacían hacia lo escénico pensado en un sentido mucho más amplio, pero también cómo algunas veces lo escénico, lo que sucede en un teatro, puede tener salida en un publicación, en un texto”, destacó De La Vega.
Tumblr media
Por otro lado, el encuentro contó con la presencia de Tania Solomonoff, performer argenmex, quien presentó su pieza Lectura, en una versión argentina de la que participaron su padre y su hermana. También se presentó el libro La realidad intenta parecerse, de Mario Bellatín, de la colección del TNA, como resultado del taller Danza sin movimiento, que el autor realizó en la edición Volumen 2018.
En este sentido, De la Vega aclaró que existe un esfuerzo por parte del gobierno de México por apoyar el intercambio de artistas, logrando insertar una mirada mexicana desde la escena y apoyando el diálogo entre ambos países.
“Hay una gran atracción entre los creadores escénicos entre uno y otro país. En principio me parece que son más los argentinos que van hacia México, acá viene mucha gente a formarse, estudiar, y luego regresan, entonces en México se conoce más lo que están haciendo los creadores contemporáneos de acá. Es parte del esfuerzo que estamos haciendo que se muestre en la escena no solo nombres consagrados, sino lo que están haciendo creadores más jóvenes, o que no necesariamente han estado bajo las candilejas, pero que hacen cosas muy interesantes, mucho más reflexivas”.
Sobre las editoriales mexicanas, el Agregado Cultural expresó que “el stand es muy interesante y creo que eso les gusta mucho acá, si bien hay una producción importante de dramaturgos mexicanos, hay muchísimo de teoría y de traducción que se hace en México, que ayuda a retroalimentar un espacio de pensamiento mucho más amplio”.
Por último comentó: “Entonces estoy convencido de que tenemos que seguir fortaleciendo estas redes, que siga habiendo desplazamiento entre uno y otro país, si bien es difícil porque estamos a más de siete mil kilómetros de distancia y esto requiere de la presencia viva de nuestros cuerpos, no hay que cesar en el esfuerzo de buscar otras formas de apoyar el intercambio, como se da también en el cine, la plástica, donde yo veo que hay cada vez más gente que tiene un pie puesto en uno y otro país, van y vienen, porque las dos sociedades tenemos muchas cosas que decirnos, muchas vivencias que si bien hablamos la misma lengua, son muy distintas y tenemos universos muy diferentes”.
Volumen. Escena Editada se realizó los días 23, 24 y 25 de agosto en el TNA Teatro Cervantes, ubicado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Además de la venta y exposición de libros, el encuentro aborda lecturas performáticas, talleres y espacios de reflexión donde circulan distintas perspectivas y se tejen redes que propician la colaboración. Contó con la presencia de representantes de México, Chile, Uruguay, España, Brasil y Argentina.
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
Plataforma Internacional para las Artes Escénicas PANORAMA SUR
En el marco de la octava edición de Panorama Sur, un proyecto de THE – Asociación para el Teatro Latinoamericano, Goethe-Institut y Siemens Stiftung con sede en Argentina, se presentaron exponentes de una nueva generación de dramaturgos y dramaturgas mexicanas.
Tumblr media
Dirigido por Alejandro Tantanian y Cynthia Edul, Panorama Sur es un espacio de creación y formación para dramaturgos organizado en la Ciudad de Buenos Aires, que ha logrado posicionarse como una plataforma de intercambio entre autores de todo el mundo.
Se trata de una ventana al universo de la futura dramaturgia mundial, en un encuentro que a través de seminarios, conferencias, workshops y espectáculos pretende generar un diálogo entre creadores para una reflexión sobre las artes contemporáneas.
En este espacio, que tuvo figuras destacadas internacionales como los performers Ivo Dimchev y Radouan Mriziga, se presentó un ciclo de conferencias performáticas bajo la consigna ¿Cómo llega lo nuevo al mundo?, destacándose la participación de nuevos autores y autoras mexicanas, entre ellos José Emilio Hernández, Ana Lucía Ramírez (Las chicas del Carrer Notariat 10), Estefanía Norato (La gota y el mar), Diego Alba (Los gatos me vieron huir) y Cynthia Fernández Trejo.
Como explica el texto de Panorama Sur, la pregunta “¿cómo llega lo nuevo al mundo?” constituye uno de los ejes de trabajo actuales del Goethe-Institut. Lo “nuevo” siempre ha sido sinónimo de progreso para la sociedad, pero las sucesivas crisis dan cuenta de lo limitado del sistema en que vivimos, que actualmente se ha convertido en un proceso acelerado de descarte, donde “lo nuevo” tiene corta vida, y el miedo al fracaso y la extinción de la humanidad están más latentes que nunca.
En este marco de reflexión, pudimos apreciar las lecturas de las dramaturgas y actrices mexicanas Ana Lucía Ramírez, que integra el Foro Área 51 de Xalapa, Veracruz, y Estefanía Norato, ganadora del Premio de dramaturgia joven Vicente Leñero 2017 por La gota y el mar, que participaron junto a exponentes de Colombia, Argentina, España, Cuba, entre otros.
Tumblr media
¿Qué pudieron destacar de este encuentro? ¿Por qué les parecía importante estar acá?
Ana Lucía: lo más importante es la construcción de redes que se genera con los mismos compañeros, y también se me hace importante por Alejandro Tantanian, conocer la dramaturgia que se hace acá en Argentina, el quehacer teatral de la ciudad y poder tener cercanía con un autor que me interesaba.
Estefanía: Lo que más me llevo de este seminario Panorama Sur es la convivencia entre autores de varias partes del mundo, justo hoy cerró el taller y Alejandro Tantanian nos decía que el propósito era crear redes y vínculos entre los países, esperando que en un futuro podamos irnos de residencia al país de alguien más. Este año tuvimos la suerte de ser un grupo muy unido, desde el principio hubo un genuino interés por la dramaturgia del otro y eso es muy valioso.
¿Qué pudieron reflexionar sobre cómo llega lo nuevo a mundo?
Ana Lucía: Lo que yo plantee en mi lectura fue cómo transformamos lo antiguo, lo que es nuevo en realidad no es nuevo, es solo un tratamiento de lo que ya existe, más bien lo nuevo es cómo modificas eso que ya tienes, cómo lo transformas para seguir en el futuro. Por mi momento de vida, lo que me interesa es indagar en mi pasado, mis orígenes, que me llevan a un punto que yo no conozco, que sería lo nuevo, una indagación de todo mi proceso de vida y origen para poder construir lo que soy en el presente y lo que seré en el futuro.
Estefanía: Se me hacía un tema un poco abstracto, después me puse a pensar en la escritura, luego a nivel humano, y lo que reflexioné fue que hay cosas que se van renovando con el paso del tiempo y las grandes eras de la humanidad, sin embargo hay algo que siempre impera: lo humano, y es lo que conecta a todos, nacemos, morimos, tenemos ansias de cosas nuevas, todos en algún momento rechazamos la novedad y nos quedamos con algo que nos significa, y sobre eso reflexioné, sobre cómo la vorágine de lo nuevo convive con algo que va a ser muy permanente, lo humano.
Aquí hay gente de todo el mundo… ¿Qué temas o formas teatrales comparten como generación?
Ana Lucía: Los temas son muy diversos y muy ricos. Lo que te permite Panorama Sur es tener todo un abanico del quehacer que se hace en cada país, hay gente de Uruguay, obviamente Argentina, México, que es un país muy grande, donde también hay diferentes voces y necesidades. Hay gente de Bolivia, España, y los intereses son muchísimos, diversos, así como las voces y las plumas, todas muy interesantes, que van desde una cosa más de teatro de autor, de una voz mucho más desestructurada, unas que son de largo aliento, textos más para niños, temas como el narcotráfico  o costumbristas. Lo que he encontrado son muchas situaciones que en apariencia son cotidianas, como el amor, las situaciones familiares, pero tratadas desde otro punto. Hay muchos que escriben desde el absurdo también.
Estefanía: Cosas que noto en común es que hay muchos que ya no están buscando el eje dramático, están experimentando otras teatralidades como el biodrama, la escritura que tiene más que ver con lo performático, las distopías, este anhelo de un mundo post apocalíptico, el humor tirado a lo absurdo, que lo noté en textos de Argentina y Colombia, cómo se burlan de su realidad violenta a través del absurdo para hacernos reflexionar. Noto también un eje de la violencia en sus diferentes manifestaciones, que todos los países latinoamericanos hemos vivido, como el narcotráfico en México y Colombia, en Ecuador las catástrofes naturales, en Cuba la dictadura, en Argentina el levantamiento en contra de la violencia de género. Hay escrituras más desestructuradas, que tiran como a un proceso de pensamiento actual que es mucho más rápido, todo es más ágil y la dramaturgia se vuelve más ágil para el espectador actual.
Esto que comenta Estefanía, sobre un futuro apocalíptico, fue algo muy marcado en la conferencia y en las distintas dramaturgias performáticas. La temática de la nueva generación de creadores y creadoras parece estar atravesada por un existencialismo que se construye no desde el miedo a un futuro incierto, sino ya desde una aceptación de la finitud humana. Algo que da un resultado polémico: libertad versus pesimismo de época.
Sobre la forma en que se escribe y expone la dramaturgia, Ana Lucía comentó que “en Argentina, lo que veo que me empezó a interesar es más una escritura mucho más de búsqueda, quitando el personaje entendido como tal, algo más experimental y llevado hacia lo performático. En México creo que es un teatro que por alguna razón todavía no nos hace eco”.
Panorama Sur se realizó del 15 de julio al 2 de agosto y este año tuvo el apoyo del Centro Cultural San Martín, el Centro Cultural Kirchner y el Teatro Nacional Argentino – Teatro Cervantes.
Para conocer más sobre esta plataforma y su convocatoria pueden dirigirse a www.panoramasur.com.ar o a www.goethe.de/buenosaires
1 note · View note
r-tierno · 5 years
Text
Realizan el 1° Encuentro de Festivales Iberoamericanos de Artes Escénicas EFíbero
Fotos Cortesía EFíbero/ Se trata de un proyecto del Programa Iberescena, que pretende ser un espacio de encuentro y discusión para analizar e implementar políticas y acciones que mejoren el desarrollo de festivales iberoamericanos de artes escénicas. Hablamos con su impulsor, Marcelo Allasino, presidente del Consejo Intergubernamental Iberescena y director del Instituto Nacional de Teatro de Argentina INT.
Tumblr media
EFíbero es un espacio de reflexión, análisis y debate en torno a la gestión de festivales de artes escénicas de toda la región de habla hispana, que tuvo su primera edición en vivo a principios del mes de julio, en la Casa Victoria Ocampo, en la Ciudad de Buenos Aires. Participaron al menos catorce países, que también forman parte del Programa Iberescena, que promueve la actividad artística a través de becas e intercambios.
De México, participó el Festival Internacional de Teatro Universitario FITU, de la UNAM, junto a festivales que se realizan en Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay, Panamá, Costa Rica, Salvador, España, Argentina, entre otros.
“Este encuentro respondía a una necesidad compartida por parte de los países que formamos el programa, acerca de que no hay espacios de discusión y análisis de la problemática de los festivales. Notamos que hay una gran proliferación del mercado, hay instancias dónde generar rondas de negocios, espacios de exhibición para espectáculos que pretenden girar,  más no había una instancia de reflexión sobre el por qué, para qué y de qué modo los festivales de artes escénicas operan en este contexto tan particular del siglo XXI y tan cambiante, entonces surge por esa necesidad”, explicó Marcelo Allasino, también director de teatro y creador del Festival de Teatro Rafaela, que se realiza hace más de 20 años.
EFíbero tuvo seminarios, mesas de discusión, plataforma de exhibición de artistas, y se destacó la presencia de Faith Liddell, productora y ex directora de los Festivales de Edimburgo; Mateo Feijoó, director de Naves Matadero- Centro Internacional de Artes Vivas de Madrid; y Carmen Romero Quero, creadora y directora de Fundación Teatro a Mil, del Festival Internacional Santiago a Mil. El encuentro además cuenta con una plataforma virtual activa y próximamente editará junto a la Universidad Nacional de Buenos Aires UBA un libro con las temáticas y conclusiones planteadas.
Uno de los temas que se abordó en las mesas de discusión fue el análisis de las políticas públicas que se aplican en los países para acompañar el desarrollo de los festivales de artes escénicas, y en este diagnóstico se reflexionó acerca de cuáles eran los modelos más desarrollados o avanzados.
“Compartimos el caso que ocurre en Argentina, hay una política de estado para proteger el desarrollo del sector, no solo de festivales, sino de la producción y las salas, gracias a la Ley Nacional del Teatro, que permitió la creación del Instituto Nacional del Teatro desde hace más de 20 años. Compartimos el modo en el cual, a través de distintas líneas de subsidios, el instituto acompaña la organización de casi 180 festivales en todo el país”, comentó el Presidente del Programa Iberescena.
Actualmente, se acaba de aprobar la Ley de Fomento de Artes Escénicas en Chile y en Uruguay hay un proyecto similar que ya está encaminado. En este marco legal, la producción y el desarrollo del sector se reproduce de una manera más estable y prolongada en el tiempo, como es el caso de Argentina.
Por otro lado, en el 2017 el INBAL de México celebró un acuerdo de cooperación con el INT de Argentina, lo que brindó un marco para realizar acciones que permitieran el intercambio y la colaboración en la producción de artes escénicas. Sin embargo, en la transición de gobierno este acuerdo ha quedado algo paralizado.
“México tiene una tradición muy importante en el hacer, en la circulación y el intercambio del teatro. Es un país que integra el programa y nos quedamos un poco con las ganas de la participación mexicana en términos de representantes, en este cambio de gestión no hubo una propuesta contundente en el encuentro. Entiendo que hay una mirada del intercambio internacional que está un poco restringida en esta nueva etapa”, expresó Allasino.
Otro de los ejes tratados en EFíbero fue sobre políticas y estética, y modelos de financiamiento, “un tema que preocupa mucho y genera interés, sobre todo porque en el encuentro había festivales de mucha trayectoria, de gran envergadura, y otros que son más jóvenes, más emergentes y que intentan aprender de esos modelos”.
En este sentido, el encuentro tuvo participación del sector privado, del cual Allasino expresó que “hay intereses que se complementan, y una gran necesidad de generar sinergias para complementar los esfuerzos, y es el único modo que se puede plantear para lograr una acción transformadora a nivel social. Este encuentro fue bastante ejemplificador de esas miradas, porque había tanto representantes de distintos gobiernos como proyectos independientes, pero para mí lo más importante es sumar esfuerzos más que chocar”.
Tumblr media
Sobre la (no) crisis del público teatrero
Un tema que siempre ronda en las entrevistas y en los espacios de reflexión sobre la actividad teatral es, por supuesto, el público. En algunos países la crisis económica se traduce en las butacas vacías, como el caso de Argentina que ha sufrido una baja del 40% de espectadores, pero también hay una necesidad de crear ‘nuevos públicos’, con políticas culturales que apoyen esta formación.
¿Es un momento difícil para las Artes Escénicas?
Marcelo Allasino: En nuestro país (Argentina) es un momento muy particular por la crisis económica que estamos sufriendo, eso afecta a este sector como a tantos otros, sin embargo creo que hay una pulsión en la creación que se manifiesta con más intensidad y nuevas ideas justamente en los momentos de crisis. En un enfoque regional, se están dando manifestaciones en algunos países que generan una alerta, se está dando en el mundo algo que tiene que ver con un cambio de paradigma, y se evidencia en situaciones donde quizá hay un retroceso en cuanto a cuestiones que creíamos ganadas en derechos, libertades, diversidad… de repente aparece Bolsonaro en Brasil y pareciera que retrocedemos 50 años. Creo que es un fenómeno que indica que realmente hay algo profundo que está cambiando y esa reacción al cambio es lo que se está evidenciando, con más intensidad en algunos países. Quienes apostamos por la creación y las manifestaciones de la cultura tenemos que entender que es un momento difícil y hay que estar precavidos, defendiendo y cuidando aquello que hemos conquistado.
¿Crees que es necesaria la formación de ‘nuevos públicos’?
Yo creo que hay un público cada vez más creciente, que ha ido despertando su interés y se ha ido formando, y de la mano de ese público ha crecido mucho la producción, hay un interés mayor de gente que se vuelca al arte, que quiere producir… lo comparo con 20 años atrás y hay mucho público exponencial. También hay públicos con nuevos intereses, otras expectativas, muy joven, que está atento a las pulsiones del diálogo con la tecnología y la cosa en vivo, entonces eso va marcando un nuevo rumbo.
Sin embargo esa misma tecnología puede generar salas vacías…
Las realidades son diferentes y es relativo, depende de donde uno lo vea. Yo creo que en las últimas décadas hubo un gran acercamiento de la creación hacia los espacios educativos, en Argentina por ejemplo los niños en las escuelas primarias y secundarias hoy en día tienen la posibilidad de tomar contacto con muchas posibilidades expresivas. También creo que si no hay un público que crece de la mano de eso, hay que ver qué estamos creando los artistas, hay una crisis de creación también, hay compañías que siguen creando del mismo modo que hace 20 años cuando hoy el escenario cambió y el público es otro. Yo estoy convencido de que hay un público que fue creciendo, se fue formando y educando y que quizá no le termina de interesar mucho lo que se está produciendo hoy, puede pasar por ahí también. Esto en relación al deseo de ir o no al teatro, la crisis económica es otro tema, en cuanto a quién puede o no pagar hoy una entrada.
¿Ya sabemos algo del próximo encuentro de EFíbero?
No, por ahora no. Esta fue una experiencia piloto, teníamos deseos de que resultara intenso, productivo, valioso, y terminó siendo eso, queríamos ver cómo se daban las dinámicas respecto a las actividades que propusimos, el alcance que le dimos y en todos esos aspectos estuvo súper bien. Creo que EFIbero está pensado como un encuentro de los festivales de toda la región, quizá se podría dar cada dos años, y entre medio hacer unas versiones más pequeñas en cuanto al alcance geográfico, pensar en hacer encuentros para los festivales de Argentina, los de Brasil, o Centroamérica, así pueden participar más festivales cercanos al sitio donde se haga.
Para conocer más sobre EFíbero pueden dirigirse a www.efibero.org
1 note · View note
r-tierno · 5 years
Text
Teatro de Quimeras presenta EL PESCADOR Y LA PETENERA en Argentina
Fotos: Marco Lara/ La compañía conformada por el dramaturgo Martín López Brie y la actriz Sofía Beatriz López, pone un pie en el país sureño con este unipersonal de teatro de máscara que rescata el son tradicional mexicano.
Tumblr media
Hace 15 años, en el año 2004 para ser exacta, el argentino Martín López Brie (Premio Nacional de dramaturgia INBAL por El sapo y las minas de mercurio, y mejor director en la ACPT por la misma obra) y la actriz mexicana Sofía Beatriz López dieron inicio al Teatro de Quimeras, un proyecto oriundo y residente de la Ciudad de México que propone un teatro de autor, en espacios íntimos y con una especial cercanía con el público. El próximo sábado se presentan por primera vez en Argentina con la obra El Pescador y La Petenera, en el espacio de La Carpintería, ubicado en el barrio Balvanera de Buenos Aires.
“Estamos contentos porque los lenguajes de la compañía y las búsquedas artísticas se han depurado y creo que cada vez lo hacemos mejor”, comentó López Brie en entrevista para Cartelera de Teatro desde Argentina y aclaró que hacen “un teatro para poca gente”, motivo por el cual sus obras se han presentado en espacios chicos, alternativos, como Foro El Tejedor o Teatro El Milagro. Su última obra en CDMX, sin embargo, fue en el Teatro Benito Juárez, con un texto pensado para un formato mediano, El sapo y las minas de mercurio, doblemente premiado por el INBAL y la ACPT.
“El sapo y las minas de mercurio fue la primera obra con escenografía, juegos visuales, ese universo que uno se puede sentar a contemplar, más allá de lo que cuentan los actores, un dispositivo escénico que narra desde lo visual. La puesta en el Benito Juárez funcionó muy bien en ese sentido, porque permitió que la gente desde la comodidad de su butaca pudiera disfrutar de esta historia grandísima, sobre época. Veía como el público asentía con la cabecita, se da otra relación, diferente a la de El Pescador y La Petenera, donde la cercanía con el público es fundamental para que la obra suceda”, comentó Sofía Beatriz López.
El Pescador y La Petenera tiene música original del músico Gabriel Rojas, y deriva de un proyecto más ambicioso que comienza con Así 3, creado por Rojas y su grupo Púrpura de cascabel, apoyado por el FONCA, que tiene como objetivo explorar las raíces del son tradicional mexicano, el estilo jarocho y su mezcla de origen africano, en un disco orientado al público infantil. De allí se desprende este proyecto, teatral y musical, La isla de los nahuales, escrito por Martín López Brie, donde El Pescador y La Petenera forma parte. Esta última fue pensada estética y escénicamente por Sofía, a partir de un proyecto becado que desarrolló sobre la máscara teatral y su doble uso para realizar un personaje femenino y otro masculino.
“Ese es el detonador estético de la obra, ver si pasa eso con el público, si puedes ver este rostro que es el mismo: una mujer y un hombre. Tomé el son de La Petenera y Martin escribió el texto, dos monólogos para hacer a la sirena y el pescador. Hicimos una selección de los sones mexicanos que hablan de las peteneras, que actualmente también las cantan las mujeres, antes las cantaban solo los hombres, los marineritos, que veían a estas mujeres que no eran mexicanas, que andaban de noche y hacían cosas prohibidas, y que se relacionan con las moras, las judías, y las gitanas de Europa. Con esos elementos, Gabriel compuso la música y yo fui componiendo la parte escénica, que busca recuperar el teatro tradicional oriental, donde el actor y su vestuario es la escenografía de la obra”, explicó la actriz.
Tumblr media
El Pescador y La Petenera es una obra muy íntima que, aunque suene cursi, llega al corazón del espectador, no sólo por la historia que cuenta, atravesada por problemáticas sociales actuales, sino por la interpretación de Sofía que, junto a la música en vivo de Gabriel, puede cambiar de piel sin que notemos esa transición, yendo de sirena a pescador de una forma tan sutil que finalmente terminas identificándote con ambos personajes, desde la deconstrucción de género que propone por lo bajo, y desde la empatía que produce la historia, dulce y desgarradora a la vez.
El trabajo con máscaras en escena suele ser de impacto, una técnica que bien lograda nos lleva a mundos oníricos, a la vez que nos devuelve a algún tipo de fuente terrenal, sagrada, donde un fogata interna de enciende albergando un ritual que yace en lo subterráneo, que se despierta, y parece haber estado allí por siempre. Recuerdo Yahualli, de Veró Albarrán, o escenas de Andares, de Makuyeika Colectivo Teatral dirigida por Héctor Flores Komatsu. “El teatro es un espacio para que imagines, ese es su valor, permite contarnos cosas y vernos de otra manera”, dice Sofía Beatriz.
“Como compañía sí nos importan los temas sociales y políticos, esta historia no tenía como objetivo dirigirla hacia allá, pero se colaba mucho la cuestión social. Cuando la escribía me pasó que los amantes de la sirenas empezaron a ser representantes de una etapa de la modernidad, de la colonización de las Américas por ejemplo, y dejé que pasara. Eso empezó a sacar una serie de cosas que tienen que ver con cómo nos miramos a nosotros mismos, cómo vemos al colonizador europeo y cómo se teje esta historia moderna de América. Después viene el pescador, que es la contraparte, y se empezó a colar la situación social del país en el que vivimos, la violencia, la migración, el asunto de que una mujer no tenga más opción que irse a un burdel para salir de pobre, etc.”, explicó Martín sobre el texto y su proceso.
El público mexicano ha logrado conectar con esta obra, que ya de por sí es muy mexicana, por lo tradicional de la música, su historia y el humor. Como explica Gabriel Rojas “la obra toca fibras muy profundas, todo el mundo habla de que mueve muchas cosas, te pone a pensar, y salen muy emocionados. La calidad poética del cuerpo, la expresión corporal junto con la música ha dado ese resultado, que además está muy bien equilibrado con los momentos de humor”.
Tumblr media
“Lo que el mercado no quiere ver, desaparece”: compañías a la deriva
Teatro de Quimeras no es un caso aislado en la necesidad de recursos, muchas compañías independientes sufren este conflicto interno y externo donde la lucha siempre es, en principio, económica. Tantos años de teatro no han podido generar una estructura que permita que los y las artistas puedan vivir de ello, y actualmente el salvavidas llamado subsidio está siendo recortado, achicando las posibilidades de democratización de la actividad.
“Es un poco frustrante la dificultad de sostener la compañía a lo largo del tiempo y en las circunstancias de nuestros países. Somos necios e insistimos en tomarnos tiempo para los procesos y no hacer obras al vapor sino dedicarle el tiempo que cada proyecto se merece, eso significa que no tenemos mucha producción, por lo tanto los ingresos son pocos para la compañía”, comentó Martín al respecto y agregó sobre las nuevas políticas de subsidios que “había una serie de vicios donde los subsidios quedaban acaparados por ciertos grupos. Eso no significa que tengan que desparecer, sino que hay que optimizar y abrir el abanico, de hecho hacen falta más subsidios para que alcance para más y circule mejor, si no empieza a caer sobre los discursos artísticos una censura que nadie ejerce más que lo económico, se ejerce desde el mercado, y lo que el mercado no quiere ver, desaparece”.
Sin embargo, como expresó Sofía Beatriz López, “haciendo teatro se genera una felicidad que quieres que toda la gente la viva, más que por qué la gente no va al teatro tenemos que pensar por qué nosotros queremos seguir haciéndolo y seguir invitando a la gente, y es porque los artistas seguimos encontrando cosas muy importantes para seguir y eso es lo que sería increíble seguir compartiendo”.
Gabriel, por su parte, advirtió que esto es algo que se da en todas las artes, “el estado de las cosas en la música es igual, para lo que no es comercial, haces tu proyecto y te da mucha satisfacción artística y posibilidades de expresarte pero no se conjuga la parte económica, casi siempre terminas poniendo dinero, y te da la sensación de que lo lograste, pero la impotencia de que no puedes vivir de eso”.
“Estamos en un momento en que se hace como un cono, donde solamente las personas que tienen un subsidio familiar o amigos con negocios, generan las condiciones para hacer teatro profesional. Nosotres por la trayectoria que tenemos, podemos seguir haciéndolo, pero tengo compañeres jóvenes que se salen de la universidad y no tienen opciones de trabajo, entonces ya no hacen teatro nunca más. Y eso es grave, porque el imaginario teatral será solo aquel que funciona para el universo comercial, el que no tiene preguntas”, agregó Sofía.
¿Creen que hace falta más unión en el ambiente teatral para poder lograr mejores condiciones?
Martín López Brie: Desde el punto de vista de los funcionarios mexicanos ‘somos el gremio más organizado’ (risas). En cine están todos peleados, igual que en teatro, pero logran luchar por intereses muy concretos. Existe cierta unión porque los teatreros estamos acostumbrados a trabajar en equipo, no es difícil juntarnos para hacer algo, pero también siento que hace falta mucha discusión política y analizar nuestra situación laboral, la importancia de lo que hacemos y para quién, hay un montón de supuestos, lugares comunes que alguien nos dijo alguna vez, ‘si tu obra es buena se va a vender’, y no es así, la realidad dice otra cosa, hay muchas obras buenas que no se venden. Muchas cosas malas que se venden porque hacen promoción, esas cosas no están bien analizadas, entonces a la hora de organizarnos, todos llegamos con ideas cruzadas, no hay claridad, ni por qué pedir lo que queremos pedir.
Gabriel Rojas: Después de 30 años de un sistema neoliberal, estamos con un gobierno de izquierda, se está terminando la luna de miel, y hay muchas críticas, porque hay muchos recortes, pero creo que hay que darle más tiempo, es contradictorio porque por un lado no dejamos de ser un país en desarrollo, hay otras prioridades, la violencia, la corrupción que se está combatiendo, pero también una de las formas de combatir es con el arte, no tiene sentido quitarle recursos. Hay mucha discusión actualmente en el ambiente artístico por todo esto, porque de un gobierno de izquierda se espera un apoyo a la cultura. Yo tengo confianza en que el gobierno lo tiene claro, pero que ahorita llegaron con muchos problemas que atender.
El arte es una trinchera, siempre lo ha sido, nunca ha podido congeniar con el mercado, y esto es porque históricamente sus objetivos son bien diferentes. La esperanza suele estar puesta en un estado que medie entre la sociedad y un mercado agresivo, que lo regule, y que apoye la creación de una sociedad que si no se expresa queda prisionera de un juego de poder que solo divierte a los de arriba, y explota a los de abajo.
Algo así explicó López Brie: “Una de las cosas más interesantes que tiene el arte es que ofrece cosas que el mercado no quiere, hace ver cosas que no serían vistas de otra forma, y ahí es donde hay una oportunidad para cambiar los imaginarios, las formas de pensar, crear una extrañeza ante las cosas del mundo como son, si eso no aparece, solo queda el teatro comercial, miramos lo que nos quieren hacer ver”.
El Pescador y La Petenera se presenta en Buenos Aires, Argentina, el sábado 20 de julio, a las 22:45 hrs. en La Carpintería.
2 notes · View notes
r-tierno · 5 years
Text
Plataforma MÉXICO AL SUR: nace un nuevo puente creativo con Argentina
En el marco de los encuentros de mercados de industrias creativas, GIRART en Córdoba y el MICA en la Ciudad de Buenos Aires, productores y artistas mexicanos, en su mayoría independientes, llegaron a Argentina para dar forma a esta iniciativa que ya plantea un nuevo encuentro a principios del 2020 en la UNAM.
Tumblr media
Plataforma México al Sur, es una iniciativa que surgió en Mercado GIRART de las Artes Escénicas y la Música de Argentina, un encuentro que se realiza en la Ciudad de Córdoba, Argentina, desde el año 2010, organizado por GIRART, Puerta al Mundo y la Asociación Teatro La Cochera. Su objetivo es abrir un espacio donde organizadores, productores, y espacios culturales puedan conocer propuestas artísticas y así propiciar el desarrollo y circulación a nivel internacional.
“El mercado es un espacio de encuentro, lo que se crea entre el artista y el programador es único, es como la primera cita de amor. Eso es GIRART, donde se reúnen dos necesidades, la de un artista que desea proyectar su trabajo a nivel internacional y la de un productor o un programador de una sala que viene a encontrar una propuesta artística para satisfacer una audiencia de su país o región”, explicó Marcelo Castillo, director del GIRART, en entrevista para Cartelera de Teatro.
Con relación a las artes escénicas, participaron del encuentro los mexicanos y mexicanas Evoé Sotelo, directora de Danza UNAM; Alicia Laguna, productora y co-directora de Teatro Línea de Sombra; el productor Claudio Sodi; el director y productor Sebastián Sánchez Amunátegui; la bailarina y coreógrafa Jessica Sandoval; y el agregado cultural de la embajada mexicana en Argentina, Diego de la Vega.
Si algo sorprendió este año en el GIRART y el MICA, mercado organizado por el Ministerio de Educación, Ciencia y Cultura de la Nación Argentina en la Ciudad de Buenos Aires, fue la falta de participación del gobierno federal mexicano, que en ediciones anteriores había tenido sus representantes en primera fila. Esto al menos fue lo que destacaron los productores y directores mexicanos, que consideran necesaria esta alianza para poder desarrollar productivamente la Plataforma México al Sur.
“Fue muy sorpresivo que no hubiera nadie del gobierno, solo la UNAM, y personas independientes. Esto es fundamental para que se construya de forma más sólida y con otros mecanismos. La austeridad está pasando en todo el gobierno y están cambiando las cosas, antes el 100% del teatro bueno era de gobierno”, comentó el director Sebastián Sánchez Amunategui, quien estuvo presente en ambos encuentros. En este sentido, aclaró, se habló de “líneas temáticas, lo que se necesita para poder circular, preocupaciones prácticas, guías de operación y no se perdió tiempo en politiquerías”.
Evoé Sotelo por su parte comentó que “fue muy desconcertante el que no haya representantes de México de la federación, extrañamos la asistencia de funcionarios de la Secretaria de Cultura, es importante que se incorpore el gobierno federal, que pueda existir una forma de estar vinculados a estas instancias para poder apoyar el proyecto de México Sur”.
La idea de esta plataforma, como explicó Alicia Laguna, es “acercar a los artistas de México al Cono Sur y viceversa”, y comentó que en el encuentro “surgió la necesidad de trabajar sobre estrategias específicas para lograr una circulación e intercambio entre nuestros países, que es por demás decir nos unen muchas cosas como la lengua, ciertas expresiones y los formatos de producción, pero que geográficamente nos encontramos alejados y tal vez también por la falta de políticas públicas específicas para estos fines. De ahí que vimos la necesidad de hacer un llamado a las autoridades de cultura de México para poner atención a esta iniciativa y unirse al trabajo en conjunto con todos los actores que estuvimos presentes. Pensamos que puede ser muy enriquecedor en muchos aspectos en el desarrollo, difusión, producción y creación en las artes escénicas de ambas regiones”.
Marcelo Castillo, director del GIRART, aclaró que si bien la participación de México este año ha sido muy particular, entiende que el país se encuentra en una “transición”, y por ello emitieron un comunicado firmado por los presentes para pedir se acerque la Secretaría de Cultura a esta iniciativa.
“Hay ciertos mercados que son muy fértiles para la circulación de Argentina como es México, es un gran mercado, tiene un volumen territorial y movimientos de espacios y festivales muy amplio. Pero México mira mucho a Europa, no mira a Latinoamérica. La idea es que empiece a mirar a Latinoamérica y para eso vamos acercarlos. De eso se trata la plataforma, de acercar la producción de México al Sur, y que la producción del Sur se acerque a México, trayendo todas aquellas organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, que propicien la circulación de las artes escénicas y música en México”, explicó.
En el encuentro se definieron pasos a seguir para continuar pensando y concretando esta iniciativa. Evoé Sotelo, en representación de Danza UNAM, comentó que propuso un coloquio, a realizarse en febrero en las instalaciones de la Universidad, donde se reúnan representatividades de cada país, para discutir sobre temas de producción, circulación distribución de arte curaduría, etc. “Sería la ocasión para invitar a los representantes de la cultura aquí en México, a la embajada, acercar el proyecto de manera más puntual a quienes necesitamos que lo conozcan e invitar al ambiente independiente que es muy amplio y participativo”, expresó.
“La Plataforma México al Sur es un proyecto urgente, que desea caminar, hubo oportunidad de discutir y llevar adelante un proyecto intensivo que dio como resultado una estrategia para circulación de artes escénicas de México al Cono Sur y viceversa. Es un proyecto que tiene muchas posibilidades en el caso de que tengamos éxito, uniendo los esfuerzos de cada país podríamos generar una circulación muy interesante que podría dar como resultado un fortalecimiento de la producción escénica de todos los países involucrados”, concluyó Sotelo.
Los primeros pasos ya están dados, y aunque la Plataforma México al Sur podría ser llevada a cabo por sectores privados, que son en gran medida los que participaron, la presencia del gobierno siempre garantiza más oportunidades, para los artistas y para la asistencia del público. En principio, al menos, ya están echadas las redes para esta nueva unión entre latinoamericanos.
1 note · View note
r-tierno · 5 years
Text
“Este proyecto es de todas las mujeres”: Crece TEJIENDO REDES
La iniciativa nació a partir del encuentro de mujeres mexicanas en Argentina y este año tiene sede en la Ciudad de México con actividades programadas durante todo el año. Hablamos con una de sus creadoras, la directora de teatro Faviola Llamas.
Tumblr media
Tejiendo Redes es un proyecto que, tal como su nombre lo indica, tiene como objetivo principal tejer una red de jóvenes mujeres hacedoras de teatro, de entre 25 y 35 años. Esta conexión primero se está dando en Argentina y México, pero la idea, según comentó una de sus creadoras, Faviola Llamas, es lograr que crezca a nivel mundial, que estés donde estés, si haces teatro, tengas un grupo de contención y apoyo para el intercambio y la creación.
Esta idea nació de la creadora escénica Susana Meléndez y la directora Faviola Llamas, que lejos de su tierra natal, se conocieron en el país sureño, Argentina, mientras cursaban sus maestrías. “Fui a Tandil (Provincia de Buenos Aires), que es donde estaba estudiando ella, y empezamos hablar de hacer algo para que se conozcan las mujeres artistas”, cuenta Faviola en entrevista para Cartelera de Teatro. “Las dos estamos muy influenciadas por nuestra tendencia política y filosófica, de trabajar con nuestro cuerpo y crear espacios para nosotras. Decidimos trabajar con dramaturgas y directoras, fuimos uniendo ideas, e hicimos el primer encuentro de jóvenes”.
Este primer encuentro, apoyado por la embajada mexicana en Argentina, se realizó el año pasado en la Ciudad de Buenos Aires, y se presentaron tres textos de dramaturgas mexicanas (seleccionadas mediante convocatoria), dirigidas por directoras residentes en Argentina de distinta nacionalidad. Fue el primer paso de lo que ya está ocurriendo este año, una Red Activa de conversatorios y talleres en el Teatro El Milagro (CDMX) que se realiza cada mes con temáticas diferentes.
“A partir del primer encuentro nos dimos cuenta que tienes que estructurar las ideas, necesitamos propiciar el encuentro, que esta lectura realmente suceda. Creamos una Red de Contención, que la hacemos por primera vez este año, que consiste en que directoras y artistas de diferentes disciplinas tengan conversatorios, que se genere esa plática, sobre el teatro y las artes”, explica Llamas. Esta Red de Contención se realizará del 27 de septiembre al 18 de octubre, previo al II Encuentro de Lecturas Dramatizadas, y tendrá como invitadas a la investigadora Fernanda del Monte, las artistas visuales Mónica Mayer y Karen Cordero, las directoras Lydia Margules y Carmen Ramos, y las artistas Alicia Lagunas y Mariana García Franco.
Tejiendo Redes actualmente es llevado adelante por un equipo permanente, conformado por Susana Menéndez y Faviola Llamas en la dirección artística, Berenice Nava en la producción artística, Natalí Stein en la producción ejecutiva y Itzel Lapizco en asistencia de dirección.
Lo interesante de este proyecto es que plantea un esquema horizontal, no sólo pretende acercar y unir a mujeres dentro del quehacer teatral, sino que pone el foco en crear una base donde las futuras generaciones puedan aprovechar este recorrido, apelando a una forma basada en la colaboración para ganar espacios, puestos, y desechando la competitividad que nos impregna el sistema capitalista, sobre todo al género femenino.
“Existen recorridos hecho por mujeres que nos han facilitado el camino, nosotras queremos facilitarle el camino a las futuras generaciones, y que también ellas vayan por más. La sociedad nos enseña mucho a competir, y son tan pocos los puestos de poder que tienen las mujeres que vemos a otra mujer como una amenaza. Esto es ‘estamos juntas, vamos por estos cinco puestos más’, es facilitar el trabajo. Cuando cumplamos los 35 años ya no entramos en la convocatoria de Tejiendo Redes, entonces la idea es dejarle el espacio a otras mujeres. Este proyecto nació, pero no es nuestro, sino de todas las mujeres alrededor”.
Otra de las iniciativas que pretende llevar adelante este proyecto, es la descentralización de los encuentros, que normalmente se realizan en las colonias más transitadas de la Ciudad de México, “Fuimos sumando otros espacios, la idea es salir de la zona centro, salir de la Condesa y la Roma, sumar otro tipo de espacios, como la Casa de Cultura de UAEMex, en Tlalpan, donde este año serán las lecturas dramatizadas”.
¿Cómo funciona la red? ¿Han recibido apoyo?
Hay gente más grande que nos ha ayudado un montón, nuestras juradas son gente más grande y eso tiene que ver con romper con esa estructura piramidal, de acercarnos a personas que tienen un recorrido y que realmente son muy amorosas, somos todas personas. Hemos encontrado también hombres que nos han ayudado con este proyecto, el agregado cultural de la embajada, Diego de la Vega, abrazó el proyecto y nos ayudó a realizar el encuentro en el Centro Cultural 25 de Mayo (Ciudad de Buenos Aires).
Este año vamos hacer Tardes de té, entre mujeres, quien quiera sumarse es bienvenida, vamos a estar buscando apoyo entre artistas, va a tener un costo, pero es para fondear y crear recursos, en nuestra sede, la Casa de Tlalpan.
Hoy vemos muchas más mujeres creadoras en el teatro, ¿crees que existe una temática o forma de creación específica del género?
La expresión de líneas temáticas es diferente, es decir, nada de lo que es humano es ajeno a las personas, como decía Shakespeare, pero las temáticas sí se abordan diferente, no es lo mismo que una mujer hable de la trata de mujeres, a que lo haga un hombre. Un hombre tendría que cuestionarse sus privilegios para poder llegar a la raíz, y una mujer debe cuestionarse sus privilegios también y desde dónde escribe, los elementos que te vas cuestionando van creando otro tipo de estética y discurso.
¿Cómo te imaginas un mundo donde la mujer no esté reprimida, y tenga toda su fuerza de creación?
Una utopía. Falta mucho tiempo, el otro día leía una estadística y decía que faltan 400 años para que se empiece hablar de equidad de género. Se están rompiendo estructuras pero que se vienen rompiendo desde los años 50, hace muy poquito. Dentro de las mujeres existen otro tipo de presiones, no es lo mismo ser una mujer blanca que negra, a ser una mujer indígena, dentro de cada sociedad y qué tipo. El capitalismo influye mucho, tu nivel adquisitivo, es romper y cambiar una estructura que hemos tenido por muchos siglos. Actualmente existe un boom del feminismo, y hay que buscar espacios y ganarlos, y no perder lo que ya tenemos. Aun así sigue siendo una cosa no tan frecuente y violenta, por eso se ve este boom, porque no es normal.
¿Cómo se ven a futuro?
La expectativa más grande es efectivamente crear una red. Que realmente un día estés en un café en alguna parte del mundo y que puedas tener  mano a la dramaturga mexicana, y que se vaya generando esta cosa, de armar encuentros. Que se conozca el trabajo de diferentes territorios y mujeres. Esto genera intercambio cultural, y te da una perspectiva del discurso generacional que estamos teniendo.
El encuentro de Tejiendo Redes, será Red Activa, en el Teatro El Milagro, ubicado en la Colonia Juárez, bajo la temática Iluminadoras, el próximo 20 de mayo a las 18:oo horas.
1 note · View note
r-tierno · 5 years
Text
Comienza el VABIEKA, Festival Internacional de Payasas
La cita es en Puebla del 23 al 26 de mayo, en un encuentro que reúne a payasas de todo el mundo.
Tumblr media
En su segunda edición, el Festival Internacional de Payasas, Vabieka, viene cargado de muchas propuestas llevadas adelante por mujeres clown y payasas, que durante mucho tiempo han estado invisibilizadas, en un arte que, como tantos otros, ha puesto a la mujer en un papel secundario. Con más de 60 propuestas presentadas en la convocatoria, el encuentro autogestionado ya alista las calles y los foros de la ciudad de Puebla, para albergar artistas de Brasil, Argentina, Costa Rica, España, Colombia, y por supuesto, México.
Como explicó su creadora y organizadora Karen Tlahuizo, en entrevista para Cartelera de Teatro, este encuentro fue inspirado a partir de la unión con la productora cultural Verónica Pérez, quien ya tenía experiencia en la organización de festivales de circo y clown y con el apoyo de la ya reconocida clown mexicana, Darina Robles Pérez, llevaron adelante el primer encuentro en el 2018.
“Convoqué a Verónica para hacer el festival, y el tema del feminismo estaba en nuestra mente, entonces decidimos hacer un festival de mujeres. Nos vino bien la idea, no había un festival, era una propuesta nueva y la sorpresa fue que hay un chin.. de payasas, en esta segunda edición se han sumado muchísimas, con las propuestas que llegaron, si no fuera por el dinero, tendríamos festival para un mes”, expresó la organizadora.
Si bien en un principio el objetivo principal era visibilizar el trabajo de las mujeres dentro de la comicidad y la payasería, en esta segunda edición, el planteamiento viene también por el ejercicio de la técnica y la profesionalización, que dentro del género femenino cuenta con exponentes de mucha trayectoria y alto nivel de formación.
“Hay una invitación a reflexionar desde nuestro ser mujer, y desde la sociedad, cómo estamos sumergidas allí. No me interesaba tanto hacer una exhibición de talentos de mujeres, sino un encuentro, donde se junten mujeres de trayectoria y otras emergentes. Podemos retroalimentarnos entre nosotras. El festival se agrandó, hoy tenemos a 21 compañías y más de 25 payasas”, cuenta Karen.
Por otro lado, el festival pretende acercar al público a la payasería desde un lugar diferente. Como público estamos acostumbradas a que este tipo de eventos traigan consigo una exposición o una participación forzada en el espectáculo, algo que la mayoría siente como invasivo y fuera de lugar en muchas situaciones, sobre todo las mujeres, teniendo en cuenta que generalmente las dinámicas del juego están atravesadas por las diferencias de género.
Al respecto, Karen expresó que “aquí en México, culturalmente el payaso es este personaje grotesco, invasivo, misógino, clasista y todo eso. Hay un público al que no le agrada este personaje, entonces al escuchar el nombre de payasa, hay prejuicios muy grandes. Primero que al decir payaso o payasa, nos referimos a un público infantil, como si solo pudiéramos trabajar para los niños, es una imagen infantilizada de la técnica. El otro tema, es el referente cultural de ser un personaje invasivo, entonces hay gente que no tolera ese tipo de espectáculo, por miedo a que los expongan o se burlen”.
El Vabiekafest se realiza anualmente, y trae consigo otros proyectos, como Las noches de payasería, que se realiza una vez al mes en Puebla, “con el objetivo de seguir con el público que ya estamos formando y seguir mostrando el trabajo de las mujeres payasas”, expresó su fundadora y agregó“hay muchas mujeres que vienen a México, es también una oportunidad para las payasas viajeras e internacionales, ya somos el contacto, nos buscan y organizamos. Nuestro deseo es poder moverlo a otras ciudades”.
México como lugar de encuentro y organización
Lo fue siempre, México siempre ha sido un referente de arte Latinoamericano. Será su importante cultura nativa, y también es el gran receptor que ha sido históricamente de inmigrantes. Si quieres conocer el mundo, la tierra mexicana sin dudas es uno de los primeros eslabones.
El Vabieka no es la excepción, pero además trae esencialmente un objetivo de doble raíz: por un lado la reivindicación de la mujer en el arte, en el marco del contexto y la lucha actual por la equidad, y por otro, la reivindicación de esta rama del teatro, el clown, la payasería, que siempre ha tenido que luchar por ganarse un lugar dentro de las palabras mayores.
La clown Alicia Olea, argentina radicada en Costa Rica, estará participando del encuentro con una puesta en escena junto a Irene Gutiérrez (la payasa Pepa), y brindará un taller sobre ‘Cómo montar un espectáculo en la calle y no morir en el intento, basado en un libro de su autoría que abarca técnicas y modos de producción callejera.
“Con respecto a todo el arte, la visibilización principalmente fue de los hombres, es muy fuerte cuando las mujeres nos ponemos en el escenario, diciendo lo que opinamos, mostrando lo que somos. Siempre fue limitado este campo para nosotras, sobre todo en el humor, porque los hombres no daban los espacios, y las mujeres mismas no nos sentíamos tan graciosas. Es súper importante que en distintas partes del mundo se estén generando espacios donde las mujeres están tomando el escenario desde el humor y que esté pasando en México, donde el machismo es muy alto, que las mujeres se organicen y armen un festival solo de payasas es un gran movimiento para la ciudad de Puebla”, expresó la artista.
La primera experiencia del Vabieka fest, alentó a muchas mujeres de otras latitudes a sumarse a esta iniciativa, que más allá de ser un espacio para exponer sus obras, genera un encuentro y un intercambio muy nutritivo: “La expectativa principal es esto de encontrarnos muchas payasas, poder compartir, me da mucha ilusión poder charlar con otras que hacen lo mismo que yo en otros lugares. Hace muchos años vengo investigando el humor y la mujer, y para mi es súper importante porque es parte de la información que necesito para seguir con este trabajo, ver  cómo ven el hecho de ser payasas, qué pasa con los varones, porque hay una cuestión también adentro del gremios con esto de que las mujeres nos empoderemos y tomemos espacios, y no pueden entender que sólo necesitamos juntarnos porque durante mucho tiempo ni siquiera sabíamos que existiera otra que hiciera eso, las redes nos ayudan un montón. Encontrarnos y vernos las caras, contarnos historias y vivencias de ser payasas me ilusiona”, comentó al respecto Olea
Durante el encuentro habrá conferencias, talleres, espectáculos, todos de entrada libre y gratuita con colaboración a voluntad. “Las artes son un derecho, por eso las propuestas son abiertas al público en general, sin costo y entrada libre, a la gorra. Como organización no tenemos fondos y respaldo que nos ayude a cubrir vuelos, transporte, este es el primer donativo que hacen las payasas, con el simple deseo de mostrar su arte a la comunidad”, expresó Karen Tlahuizo.
Ya es sabido que la risa libera, transforma el dolor, la tristeza, ayuda a sanar. Pero más aún: hay una fuerza liberadora que genera este encuentro femenino, se siente la presencia de mujeres artistas y el aire huele a libertad, a equidad, y todo desde el amor. Algo así expresó Alicia Olea: “El clown o la payasería permite liberarnos y ser nosotras, sobre todo a las mujeres, que el deber ser siempre fue tan fuerte, esto de que nos dicen todo el tiempo cómo tenemos que vernos, qué decir y qué pensar. Virginia Imaz, una payasa de España, dice que una mujer que se libera desde la risa libera a todas las demás. Yo, mujer, poniéndome en el escenario, voy a vibrar esa liberación con las otras, al reconocer eso me da mucha más fuerza para seguir haciéndolo, es una sanación para todas”.
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
“El arte nos acerca de una forma más profunda”: Entrevista con Violeta Luna
La artista mexicana, radicada en California, se presenta en Argentina antes de participar en México del encuentro El mundo al revés: Humor, ruido y performance. Hablamos con ella de su arte, el feminismo y el efecto  antinmigrantes que emana del poder.
Tumblr media
Radicada en California, Estados Unidos, la actriz mexicana Violeta Luna forma parte del Proyecto Magdalena: Red Internacional de Mujeres en Teatro Contemporáneo, que en sus múltiples desprendimientos, del 1 al 12 de mayo estará realizándose el VI Encuentro Festival Magdalena 2ª Generación, con sede en Argentina, y la participación de artistas de varios países del mundo bajo el concepto Mujer, Teatro y Banquete.
“Magdalena 2da generación es parte de esta red pero fue una iniciativa de Ana Woolf (actriz argentina) para crear otro espacio donde un grupo de mujeres más jóvenes, de otra generación, tuvieran un encuentro, sobre todo en la parte sur del continente. A mí me parece un esfuerzo importante, crear un espacio de mujeres ya implica varios esfuerzos, porque hay pocos espacios, y también en cuestión de las temáticas que se hablan, de las búsquedas, el encuentro como posibilidad de diálogo, de amistad, para seguir estrechando lazos”, explica la actriz para Cartelera de Teatro.
En este marco, la actriz de performance presenta su obra NK 603: Acción para performer & e-Maiz, que trata el tema de la monopolización de las semillas en México, y Para aquellas que no están más, junto a las artistas brasileras Stela Fisher y Leticia Oliveras, que aborda la temática del femicidio. Dos obras que marcan el acento de Luna, comprometida desde su arte con las causas sociales de su país natal y del mundo.
Formada en actuación en la Ciudad de México, Luna es artista asociada de los colectivos de performance con sede en San Francisco La Pocha Nostra y Secos & Mojados. Es miembro de la Asociación Nacional de Artes y Culturas Latinas (NALAC), y entre sus obras más importantes se destacan Frida, Apuntes sobre la Frontera y Réquiem por una tierra perdida, que será presentada en junio en la Ciudad de México en el marco del encuentro El mundo al revés: Humor, ruido y performance, donde también brindará una charla junto a dos académicas abordando temas de narcopolítica.
Es interesante pensar el proceso de Luna desde su migración, ya que si bien lleva muchos años radicada en California, la actualidad y las nuevas políticas han atravesado su arte y resignificado su presencia en el país extranjero.
¿Cómo ha influido en tu proceso artístico el hecho de ser una mujer extranjera en Estados Unidos?
Mi trabajo se politizó. Si bien anteriormente mis temas eran de justicia social, el hecho de ser inmigrante, y ahora mexicana, con estas narrativas que vienen desde los políticos antinmigrantes, cargadas de xenofobia y racismo, en donde ser inmigrante implica ser criminal, ser ilegal, una no puede vivir separada de esas narrativas. Se dice que nosotros no cruzamos la frontera, la frontera nos cruzó, porque las familias se dividieron, femicidio, narcotráfico, migración, son temas que involucran a las dos naciones, este es el lugar desde donde me interesa hablar, porque soy un ser dividido por estas dos naciones, porque quizá me reconozco menos en el México que dejé, pero tampoco me puedo asumir acá como americana, porque a mí se me sigue viendo como una inmigrante, no voy a pertenecer, entonces desde ese estado intermedio yo articulo mi trabajo, y siempre me interesa complejizarlo desde cómo las políticas que se articulan desde Estados Unidos, impactan a las políticas y formas no solo de México, sino de toda Latinoamérica.
Los femicidios en Juárez, pues fue en torno a las maquilas que surgieron con ese tratado de libre comercio donde de pronto, Ciudad Juárez fue un laboratorio económico, y esa maquila abría la posibilidad de que las mujeres que iban a migrar desde Centroamérica a Estados Unidos decidieran quedarse en México en ese trabajo esclavo, vendido como un trabajo donde iban a ganar y a dar casitas, y ahí se empieza a generar una violencia estructural social tremenda. Como creadora no puedo dejar eso desapercibido, me interesa hablar de los puntos que nos hermanan, de los puntos de desencuentro, y en cómo afectan.
¿Cómo crees que impacta el performance en el público? Es un arte muy politizado…
Mi lenguaje es el teatro performativo, este teatro más expandido, que se vincula más con las artes vivas. El performance trata de compartir diálogos mucho más horizontales, el público es también actor dentro del performance, tiene una responsabilidad, un papel activo, hay momentos en que se abre ese espacio de interactividad, donde el público ya no es un ente pasivo, y cualquier decisión que toma de participar y cómo participa es también la obra, puede intervenir. El performance siempre ha emergido como un espacio de resistencia, si bien ahora se ha institucionalizado, hasta dan becas, antes no formaba parte del mainstream, creo que es una práctica muy potente, sobre todo porque también esta utilizada dentro del activismo.
¿Cuál es la importancia de este festival, donde se teje una red de mujeres?
No es tanto un festival, siempre lo denominan como encuentro, porque tiene más profundidad en el sentido de que no solo vas y presentas tu trabajo, sino es esta posibilidad de intercambio, de feedback, y el contexto enriquece mucho estos encuentros porque está la posibilidad de conocerse con las artistas locales, y de alguna manera eso es el espejo para mí de ver qué es el país, a través de las obras de las mujeres del lugar, desde los diálogos que una establece con las artistas locales.
¿A qué te remite la consigna del encuentro, Mujer, Teatro y Banquete?
La palabra banquete siempre me remite a algo delicioso que se va a probar, el hecho mismo de que ese banquete va a estar contenido por la presencia femenina y el lenguaje va a ser el teatro, pues es algo en lo que me veo reflejada. El banquete te da la noción de una gran variedad y la posibilidad de apetitos creativos, me estimula mucho el nombre por los tiempos tan convulsionados que estamos viviendo donde es importante festejar ciertas cosas que han ido como respuestas a problemas, en este caso problemas que enfrentamos nosotras como mujeres. Darle este toque festivo me da el sentido de esperanza, como mujeres siempre tenemos esa posibilidad de tejer y de que la alegría no nos la van a quitar, la posibilidad de reunión y de festejar es posible.
¿Cuáles son las obras que presentarás?
Yo llevo una pieza que está relacionada con la comida, con el maíz transgénico, cómo ha afectado a nuestros pueblos estas políticas voraces de las corporaciones, de querer implantarse no solo en términos de expropiación de recursos naturales, sino inclusive en cosas que afectan culturalmente. En México decimos que somos mujeres y pueblos del maíz, tratan de patentizar una semilla que fue una ingeniería de nuestros pueblos para alimentarnos, no solo el cuerpo, sino también el alma.
Otra obra que vamos a compartir es Para aquellas que no están más, un proyecto que hice con el Colectivo Rubro Obsceno de Brasil, que son Stela Fitcher y Leticia Olivares, y esta pieza fue una colaboración que surgió en el 2005 y que ha tenido encarnaciones, pero el tema central son los feminicidios, que para mí es el estado ultimo del que deriva esta violencia hacia las mujeres, esta violencia que se vive en parejas, doméstica, porque la mayor de las veces los femicidas son familia cercana a la víctima.
Tumblr media
Las mujeres hemos tenido diferentes expresiones de lucha, hace poco en México explotó el #metoo, y muchos artistas de renombre fueron señalados, ¿Qué opinas de este movimiento?
Yo creo que cualquier movimiento que hable de un abuso de poder es importantísimo, y sobre todo en el contexto de las mujeres. Si bien se han logrado muchos espacios, por todas las luchas que han hecho nuestras compañeras anteriormente, hay mucho trabajo por hacer, creo que el movimiento #metoo ha tenido un impacto grandísimo porque las mujeres nos hemos quitado el miedo de decir. Yo me formé en México en el teatro, y era constante el acoso, porque sabemos que en México la mayoría del poder está en manos de hombres, porque son dramaturgos, directores… el actor o las actrices son vistas como objetos, instrumentos de trabajo, y por lo tanto se las trataba de esa manera.
Creo que es importante el haber conseguido ese espacio, en donde compañeras, compañeres, trans, homosexuales, pueden decir que eso está sucediendo, y no porque tú tengas el poder y seas un creativo con fama tienes el derecho sobre mi cuerpo. Yo sé que ha causado grandes polémicas, gente que conozco ha estado involucrada, pero es importante que haya una repercusión, que se les señale, porque eso tiene que parar, no es posible que la mujer no pueda tener espacios seguros, es constante el acoso desde que sale de la casa, caminar a la estación del bus, y luego llegar a un espacio que tiene que ser seguro, como la escuela, el trabajo, tener que seguir con ese temor no puede ser. Me parece genial y sobre todo que haya surgido en teatro porque era un espacio donde todo estaba permisible, y era muy difícil denunciar porque estaba en juego tu integridad, los proyectos, el miedo ha sido un instrumento de control fuertísimo. Me parecen muy fuertes las mujeres que hicieron su reclamo, y las redes sociales son herramientas muy útiles.
Violeta ¿crees que en los tiempos que vivimos hoy, acelerados, donde todo parece efímero, ha cambiado el papel del arte? ¿Qué función tiene hoy en día?
Siempre he considerado al arte como una herramienta de transformación social y de sanación, y creo que ahora desde el activismo por ejemplo, estamos hablando ya del artevismo, porque llega de otra manera, toca de forma más sensible a la gente, que percibe muchas más referencias cuando se encuentra a través de un poema, una obra de teatro, una pieza musical, allí hay más posibilidades de llegar a la gente. Son esfuerzos continuos, una cuando está creando, a veces es la posibilidad de poder restituir o resarcir algunas cosas, pero también hay otras que no podemos cambiar como artistas, quizá nosotras como personas hablamos de micro políticas, pero en un entorno mayor se genera un cambio. Es una herramienta fuerte, accesible, es necesario seguir apostando para que el arte esté en las escuelas, en la formación de las niñas y niños, para que sea más integral la formación y sea un medio importante desde el que se pueda hablar, sin duda el arte nos acerca de una forma más profunda.
Violeta Luna se estará presentando hasta el 12 de mayo en Argentina y luego estará en México del 9 al 15 de junio en el encuentro El mundo al revés: Humor, ruido y performance, organizado por el Instituto Hemisférico de Performance y Política de la Universidad de Nueva York, en colaboración con dependencias de la Universidad Autónoma de México UNAM y el Instituto Nacional de Bellas Artes INBA.
2 notes · View notes
r-tierno · 5 years
Text
“El teatro es tracción a sangre”: Entrevista con Lía Jelín sobre TOC TOC
Cuando Lía Jelín quiso montar Toc Toc en Argentina, ningún productor le abrió las puertas, no les gustaba la obra. Entonces llamó a Morris Gilbert, y a las dos semanas estaba en la escena de México esta historia que ya tiene ocho años de éxito. El texto es del francés Laurent Baffie, quién la escribió a partir de su propia experiencia, como  forma de catarsis.
Tumblr media
“Cuando la leí no podía creer, primero el tema, completamente nuevo, hablar de gente que tiene trastorno obsesivo compulsivo era difícil, no sé si el autor se dio cuenta, pero yo en la obra encontré A puerta cerrada de Sartre, Esperando a Godot, de Beckett y descubrí que tenía un zig-zag muy especial, no se instalaba nunca, si entraba en una zona de dolor se salía con un chiste, y cuando la cosa era muy chistosa, se entraba en una zona de dolor”, expresó la directora en entrevista para Cartelera de Teatro.
La obra fue traducida por Jorge Schussheim, y como si el éxito fuera poco, fue vista por Carlos Rottemberg, empresario teatral argentino, en un teatro de Santa Fe de CDMX y enseguida se comunicó con Lía para montarla en Argentina. Hoy se considera una de las comedias más vistas en la calle Corrientes de Buenos Aires.
Toc Toc narra el encuentro de cinco pacientes en la sala de espera del psiquiatra, que quedó demorado en un vuelo. Los protagonistas sufren un trastorno obsesivo compulsivo (toc), que será un problema a la hora de relacionarse en la espera, y esto nos dará una construcción de situaciones graciosas, tragicómicas, que hacen estallar de risa al público, pero también logra hacernos reflexionar sobre la enfermedad, sus causas y consecuencias, algo que se verá reflejado hacia el final. Es muy probable que salgamos del teatro reconociendo nuestros propios toc.
“Esta obra está apoyada en la angustia, no la trabajé como algo chistoso, lo que hace reír es la angustia, no la broma”, explica Jelín.
Luego del estreno en 2011, la directora nos platicó que la obra no siguió sus lineamientos durante tres años, y por eso ahora reestrenaron ya con su presencia y la de Mauricio Galaz como director residente.
El elenco del montaje que se presenta de viernes a domingos en el Nuevo Teatro Libanés, lo conforman alternando funciones Lola Cortés, Faisy, Silvia Mariscal, Ricardo Fastlicht, Omar Medina, Mario Alberto Monroy, Dari Romo, Pedro Prieto y Sandra Quiróz.
“En México son muy disciplinados, y tienen mucha movilidad, no se quedan en una obra, estrenan, se quedan dos meses, se van. Tienen muchísimo humor, un humor distinto, allá no se pueden decir malas palabras. Ellos tienen albures, el doble sentido, un albur es algo que se dice con doble sentido, son especialistas en eso”, comenta la directora que también tiene en cartel Confesiones de Mujeres de 30 en el Teatro Fernando Soler.
Una vez Sofía Gala (actriz argentina) dijo que teatro era lo mejor que sabías hacer, ¿es lo que más te gusta?
Yo te puedo contar que mi mamá me llevaba al Colón al aire libre cuando tenía 6 años, que quedaba en el Parque Centenario, todo lo que se daba en el Colón se daba al aire libre, todas las óperas, los ballet. A los 9 años decidí que quería ser bailarina, hacía teatro en la terraza de mi casa, ponía la colcha de la cama de mi mamá, yo vivía en Av. Warnes y Honorio Pueyrredón, jugábamos en la calle. El teatro siempre ha sido mi destino, primero como bailarina, y luego (después de muchos años de psicoanálisis), pude acceder a los textos. Mi primera dirección integral fue en el año 73, El gran soñador, danza teatro, y desde ahí no paré más, fracasos, fracasos, fracasos… éxitos.
¿Te queda algo por hacer? ¿Qué obra aún no te has dado el lujo de dirigir?
Varias cosas, La escuela de los bufones, de Michel de Ghelderode, un texto extraordinario. Después tengo una versión libre de Shakespeare, que en el último Festival Shakespeare lo hice como lectura, es una obra de 5 horas, y lo achiqué en una hora y media. Después la quise hacer en algún teatro y no me permitieron, Shakespeare es Shakespeare, no sé qué está pasando, hay mucho prejuicio con el teatro comercial, yo he hecho de todo.
Hay una crisis de público, en Argentina y en México, ¿qué crees que está pasando con el teatro?
El teatro no puede morir, nunca. Es tracción a sangre, no es celuloide, no es un beso a través de un vidrio como la televisión, es sangre, sudor y lágrimas, y la identificación que hay con el actor es fundamental, es un imponderable, igual que la lectura. La gente joven no lee y no sabe lo que se pierde, esa cosa imponderable que hay entre el autor y al lector, donde se describe una situación y debe ser imaginada, eso acelera y hacer crecer las neuronas. “Y así… abrió la puerta, y en ese preciso momento se oyó un ruido”… hay que imaginarlo, eso hace que uno se vuelva más inteligente, como escuchar Mozart. El único pecado del teatro es aburrir, es lo peor. Puede hacer llorar, hacer reír… pero aburrir no.
¿Cuándo fue la última vez que te sorprendiste en un teatro?
Cuando vi Los vecinos de arriba, en México, dirigida por un gran director, me quedé sorprendida de la lectura que tuvo, porque yo la vi acá (Argentina) y me pareció una comedieta infecta, y allá estaba puesta que los vecinos de arriba eran la fantasía de la pareja de abajo, no existían, ellos creían escuchar que hacían el amor todo el día, que la pasaban genial y no había nadie arriba. No es una gran obra, pero es una obra inteligente, donde ellos a través de esa fantasía logran separarse y vivir un poco mejor. Eso me encantó, hay muchos textos que me sorprenden.
Creo que no entendí lo que significaba que ‘el teatro esté vivo’ hasta que conocí a Lía Jelín. Con sus 80 años, la directora de Toc Toc es una mujer muy delgada, bajita, de ojos claros, piel muy blanca y cabello rojizo, con una alegría corporal y sonora que hacía mucho no veía ni escuchaba, ni siquiera de alguien joven. Esa noche vi la obra de Baffie y me reí mucho. Al finalizar la función los actores hablaron al público, presentaron a Morris Gilbert que se encontraba allí y saludaron a Lía Jelín. La gente aplaudía y se paraba, todos y todas éramos parte de ese encuentro, y había felicidad en la sala, que estaba repleta, la gente la había pasado bien y se sentía viva. Como diría Lía, a menos que te aburra (que siempre podemos levantarnos e irnos), el teatro siempre nos dará un momento especial.
1 note · View note
r-tierno · 5 years
Text
“El teatro tendría que ser una necesidad”, la CTP presenta LA ESPERA en Argentina
Con más de 10 años de historia, La Compañía de Teatro Penitenciario sale por primera vez de México para llevar su arte y experiencia hacia otras latitudes.
Tumblr media
En el marco del Festival Itinerante de Teatro Latinoamericano FITLA, la Compañía de Teatro Penitenciario (CTP) viajó a Argentina presentando su obra La Espera, una pieza de teatro testimonial, construida con las experiencias de algunos miembros de la CTP y ensambladas por Conchi León en la dramaturgia.
“La compañía ha podido desarrollar la fuerza para multiplicar este proyecto en otros centros penitenciarios. Este viaje a Argentina significa, en la trayectoria de la compañía, la primera vez que estamos fuera del país, nuestra primera invitación. Eso es posible por la fuerza de la experiencia y todo el equipo que hay detrás”, explica Valeria Lemus, Coordinadora de la programación de El77 Centro Cultural Autogestivo (CDMX).
En la CTP se desprenden dos alas, una compañía formada dentro del penal Santa Marta Acatitla, que ya cumplió diez años y la componen al menos 35 personas, y otra externa de ocho años, que nace con el objetivo de continuar la labor teatral una vez que las personas privadas de su libertad salen del penal. Esta última, actualmente de gira en el país sureño, la forman Antonio Hernández, Javier Cruz, Ismael Corona y Eduardo Sixto Escobar.
Este proyecto de impacto social es una iniciativa del Foro Shakespeare, dirigido por la actriz, productora y directora Itari Marta, que ha logrado sustentarse y hacer la base suficiente como para replicar el modelo en otros centros penitenciarios de México, actualmente en el Cevareso   Santa Martha Acatitla, donde la población reclusa tiene aproximadamente entre 18 y 35 años.
En Argentina, la CTP presentó su obra, que ya lleva más de 80 funciones en su país de origen, en el Penal N°46 de San Martin, Provincia de Buenos Aires, y estarán dando funciones en un penal de la Provincia de Córdoba, en la Ciudad de Paraná, y en el Teatro del Centro Cultural 25 de Mayo, en plena capital porteña. “Es bonito lo que tiene La Espera, muchos textos son tristes, alegres, tiene de todo, hacemos sentir muchas emociones. Lo vimos acá en Argentina, nos extrañó los chavos, todos callados escuchando, teníamos solo uno que se quería fugar, ni aplaudió, pero ahí estaba, sentado. Se trata de compartir las herramientas de teatro”, expresó el actor Javier Cruz.
“Lo que tiene esta obra es que cada quién escribió su texto, y a través de esta experiencia empezaron los recuerdos, utilizamos mucha utilería, trompos, armas y juguetes tradicionales de México, entonces hacemos referencia a los recuerdos, partimos de eso para abrir experiencias propias. Lo que hizo Conchi como dramaturga es tejer estas historias para crear el texto”, explica Ismael Corona sobre la obra.
¿Cómo fue el proceso de creación de La espera? ¿De qué nos habla?
Javier: El ser humano siempre va esperando algo en la vida. Nosotros hablamos de qué hacíamos antes de llegar a la cárcel, qué hacíamos cuando llegamos a la cárcel, qué perdimos, qué encontramos, y qué hacemos saliendo, todos delinquimos, cometimos un delito o una mala decisión, estuvimos encerrados veintiséis, quince años, y mucha gente sale y vuelve a delinquir, nosotros gracias al teatro y gracias a la Compañía y el Foro Shakespeare decidimos seguir haciendo teatro. Hoy delinquimos en el escenario, no vivimos de otra cosa más, nunca nos imaginamos estar arriba de un escenario.
Ismael: La Espera te mueve fibras sensibles, al hacerla nos empezamos a exorcizar de lo que íbamos contando, tuvimos que ir recordando, esto te vuelve abrir imágenes, no sabes qué es verdad y qué es mentira. Nos va sanando. En lo personal, en este montaje me costó volver a reabrir esas imágenes.
Antonio: Como dicen mis compañeros, es algo muy difícil porque volvemos a nuestras propias vivencias, y cuesta trabajo sacarlo, no es fácil hablar de mi niñez, cómo era mi vida, el tropiezo que tuve, es difícil expresarlo, transmitirlo, y que la gente lo sienta. Ahora que lo presentamos en la prisión, muchos internos se identificaron. En mi caso hay gente que no le da importancia a las madres, cuando uno está del otro lado, te das cuenta lo que significa un hijo o una madre. Cuando tenemos un fracaso es cuando realmente uno valora a nuestros seres queridos, hay muchos compañeros que pierden a sus madres estando en prisión, hay gente que no lo soporta, llegando al suicidio.
¿Este proyecto de la CTP los ayudó a sanar, perdonarse y seguir adelante?
Javier: Creo que este proyecto reforzó lo que ya nos pasaba dentro de la cárcel. Estamos convencidos de hacer teatro, puedes estar por compromiso, por agradecimiento, o simplemente por estar, pero el teatro, así como tú le das, te da. Uno piensa que está subsanado, pero no, sino no nos quedaríamos con la emoción, y es bonito enfrentarse a eso, que eres un ser humano y sientes, no eres un hombre de madera, como mucha gente que sale de la cárcel, que son niños de piedra. A lo mejor dentro de prisión sí, pero el teatro nos ha ayudado a darle la vuelta a eso. Tienes ganas de llorar, llora, tienes ganas de reír, ríe, no te reprimas. Nos gusta hacer teatro y de eso vivimos.
Ismael: A mí me ayudó a librarme de lo carcelario, porque sales con una idea de que eres un ex convicto. Escribir y escucharte te ayuda a desprenderte de cosas. Ya no estoy en esa zona de confort de ser un ex convicto, ya me desprendí, mi trabajo es más difícil porque el personaje eres tú, es indagar en la herida, hay heridas que se van subsanando, pero es cómo controlas esa emoción y cómo la dominas para producir arte. Tiene tintes de ficción, sí, pero para eso usamos el trompo, para que tú espectador te lleves en la cabeza girando qué es verdad y qué es mentira, qué te llevas y qué no para tu vida.
Valeria: El hacer teatro ofrece alternativas de lo que se puede hacer, tratamos de quitar la idea de que el teatro es una terapia, una diversión, porque es otra alternativa de hacer tu vida. Sí es un entretenimiento para un cliente, pero para quien lo hace no puede ser una terapia, tu zona de escape. Buscamos que para quien ejerce en la Compañía lo vea así, y justo hay compañeros que salen y por haber pasado por la compañía entienden que hay otras alternativas y ya no delinquen.
¿Cómo hizo la Compañía para separar eso? Porque ustedes, supongo, también han tenido un proceso interno, psicológico…
Javier: El modelo que hemos creado viene incluido algo de rasgos psicológicos pero dirigido hacia la actividad teatral, yo recuerdo que Itari cuando llegó nos dijo que nos iba a dar herramientas que nos iban a servir tanto para la vida como para el trabajo. Y la verdad sí, viene incluido, te va disfrazando una parte psicológica conforme va el teatro. Todo el equipo de trabajo hemos insistido en que el teatro es un trabajo como cualquier otro, hay gente que lo toma como una diversión, y el teatro tendría que ser una necesidad.
Valeria: Hacer teatro no es algo que se pueda dar por hecho, no significa que por actuar seamos grandes actores, todos los días es hablar con uno mismo y cuestionarse la misma cosa, si ese día pasa algo en nuestro ser, nos confronta a tal nivel que la función puede salir muy bien o lo podemos negar a tal punto que el mensaje sea otro, por eso es muy difícil, si solo tuviéramos seguridad no tendríamos nada que decir. Por ejemplo tenemos una obra que habla sobre feminismo y no significa que estas cuatro personas entendamos qué es ser feminista o ser machista. Reconocemos un universo de esas cosas, que nos revela cosas, para que el espectador también se revele con nosotros.
¿Qué respuesta han tenido del público?
Antonio: Hay mucha gente que hace reflexión, gente que no le da importancia, es como todo. Hay gente, como un hijo, que entienden el consejo, si no lo quieren ver así no van a entender la obra, y así como entraron, van a salir, sin un poco de reflexión.
Valeria: No estamos hablando de un estilo o estética de interpretación, estamos buscando como compañía la mejor forma de decirnos la verdad en el escenario. Hemos aprendido y lo que esta Compañía decidió hacer es ponernos la verdad, no nos podemos traicionar, es una cosa de disciplina y constancia, y está la parte psicológica, que ha tenido que ver con ser lo más honestos con nosotros mismos.
Ismael: Sabemos dividir la persona del personaje, no buscamos la perfección, pero si la perfeccionabilidad de cada montaje, de cada función. Con La Espera nos volvemos un espejo para el espectador, con solo vernos a los ojos.
¿Qué han podido reflexionar sobre las cárceles, y lo que hay que cambiar?
Javier: Lo sabíamos desde que estábamos adentro, el sistema está corrupto, empapado de todo lo oscuro que tiene el ser humano, aun estando ahí adentro tenemos la posibilidad de estar o no dentro de ese sistema, pero te terminas metiendo para que no te coma la cárcel, es una forma de sobrellevar tu cárcel. Siempre va a ser así, ha cambiado para bien, ojalá cambiara más, hay muchas actividades.
Antonio: Siempre va a existir la ignorancia, si no tienes esa enfermedad de la pregunta vas a seguir con tu ignorancia, y al sistema penitenciario le conviene que no avances, porque al fin de cuentas es un negocio, mientras más gente ignorante tengan adentro mejor. En mi caso, el teatro me está ayudando a conducirme a pensar las cosas dos veces, porque si yo no me hago por el lado bueno, voy a estar con mi ignorancia, que me va a traer más errores.
¿Se veían en Argentina?
Javier: Cuando empezamos no nos veíamos ni en un escenario, no pensamos que iba a cerrar el Foro Shakespeare, no pensamos que íbamos a tener un Centro Cultural, que íbamos a ir a Chihuahua. ¿Qué pensamos de Argentina? Pues que hay muchos argentinos que dicen que Maradona y Messi son los mejores futbolistas, yo no creo eso (risas). Pensamos que no nos iban a entender por las palabras, pero tenemos la misma religión, podrá ser otro acento pero decimos lo mismo, igual que en la cárcel, es el mismo código. Nos felicitaron, nos aplaudieron, mucha gente nos quiere ir a ver al Teatro 25 de mayo y eso nos llena de nervios, de miedo, pero es enfrentarlo, estamos subidos en el caballo, hay que montarlo y vamos. Es eso, compartir lo que nos han enseñado.
¿Cómo se ven en un tiempo?
Javier: Lo digo por todos, por los treinta y tantos que están con nosotros, vamos a seguir haciendo teatro, porque nos ha enseñado a ser, lo sabemos hacer bien, a base de constancia y trabajo. Lo más fácil es quitarle a alguien sus cosas, subir a un carro y venderte. ¿Y qué es lo más difícil? No hacerlo. Nosotros estamos de ese lado, queremos estar tranquilos, no deberle nada a nadie, sin delinquir fuera del escenario. ¿Dónde me veo en un tiempo? Quiero hacer una obra para inaugurar el Foro Shakespeare.
Ismael: Es expandirnos como virus, estamos haciendo réplica en el Cevareso. Hoy fuimos y dejamos una semillita en la cabeza de los compañeros argentinos. Hay una frase de La Espera que decía Héctor: “La diferencia es que afuera en libertad, cada quién escoge su celda y el nombre que quiere ponerle”.
Cansados por el largo viaje, pero contentos, la CTP no sólo vive un sueño, sino que lo alimenta y lo reproduce. De norte a sur se va expandiendo este ‘virus’ que ayer parecía una experiencia única y hoy es una posibilidad para cientos de personas que pueden encontrar en el quehacer teatral una alternativa de vida. Qué suerte que existe el teatro independiente, los nichos que pretenden hacer algo más que entretener, y que funcionan como motor del cambio social.
1 note · View note
r-tierno · 5 years
Text
“Esto va a retornar a las salas”: Mirta Romay nos habla de TEATRIX
Con más de cien obras en cartelera, la plataforma Teatrix busca expandirse en otros países. Hablamos con su creadora sobre las contradicciones del medio y el potencial que significa para el arte teatral.
Tumblr media
Hace ya cuatro años, la empresaria argentina Mirta Romay lleva adelante un proyecto muy arriesgado: una plataforma de streaming de obras de teatro. Teatrix se ha convertido en un foco de atención para empresarios del teatro, que buscan expandir sus producciones e ir más allá del escenario.
Por supuesto, muchas dudas surgen alrededor de este proyecto, sobre todo ante los ojos de los teatreros: ¿Sigue siendo teatro? ¿Dejará la gente de ir al recinto por verlo en una pantalla? Sobre esta última, en lo que lleva de vida esta plataforma, los números indican un crecimiento que no ha sido a costa del público presente en las salas, sino que se refleja en lugares donde el teatro, en este caso el que se realiza en Buenos Aires, Argentina, no llega fácilmente.
“Las nuevas tecnologías lo que hacen es una enorme democratización y accesibilidad. Junto con eso, la gente va cambiando su paradigma, vamos cambiando nuestra subjetividad, y queremos formar parte, queremos estar integrados e incluidos, y el teatro en ese sentido ha sido siempre de una elite económica, incluso hasta geográfica, ya que hay que estar cerca de los centros de producción teatral para poder consumir teatro”, explica Mirta Romay, hija del reconocido empresario teatral y de medios argentino Alejandro Romay.
Es decir, que al contrario de quitar público presente, Teatrix amplía el público teatrero, distribuyendo un valor cultural que podría verse reflejado en unos años en las salas. “Me parece que el teatro puesto a disposición del público grande es revolucionario, puesto a nivel de los docentes, es más que revolucionario. Uno de los déficit más grande que tiene nuestro sistema educativo y el de muchos países que he podido visitar es, justamente, la espesura cultural del docente. Lo que yo veo es revolucionario, otros lo ven desde su negocio, se preguntan si esto no sacará público al teatro tradicional, o si no quemará las obras, muy por el contrario, porque lo que tenemos por experiencia es que algo que entra en el circuito de los medios se potencia, lo que hace es desarrollarlo, ayudarlo a crecer”, expresa.
Por otro lado, sobre la primera duda planteada, en cuanto a si una obra grabada y reproducida por un servicio streaming sigue siendo teatro, la respuesta, desde el punto de vista del llamado acontecimiento teatral, es no. El crítico e investigador Jorge Dubatti ha señalado que estas plataformas son ‘aliadas’ del teatro, pero que ‘no son teatro’, ya que el teatro implica un convivio, una presencia física para que el acontecimiento teatral suceda.
Mirta Romay, por su parte, expresó al respecto que “el productor teatral invierte mucho dinero en la promoción de sus obras, en un sector de la población, pero deja con ganas a muchos otros. Con esta plataforma das accesibilidad a esos otros, son tenidos en cuenta, ese es un aspecto que hasta ahora no se desarrolló. Muchas producciones, por un tema de costos, no pueden salir girar, o giran sin toda la escenografía, o con algunos actores. Dar la posibilidad de ver el original de ninguna manera quita las ganas de ir a ver la obra, al contrario, yo creo que igual pasa con la música, después querés ir a verlos”.
Cuando iniciaste en Argentina, ¿cómo fue el trato con los productores y creadores? ¿Lo vieron como una competencia al principio?
Claro, esto pasa en cada mercado. Después se diluye, y es justamente el punto que estoy trabajando, porque se vuelve a repetir en el nuevo desembarco. Yo imagino esta empresa con Argentina, México y España, esto no quita que no pueda haber otros países, pero me parece que la producción grande está en estos tres países, con público teatrero fuerte y cultura del teatro. El empresario teatral es un hombre que yo llamo analógico, que por su trabajo, sus vínculos y lo que él hace todo el día no está en contacto con la enorme transformación de los medios, la ve obviamente, todas son personas muy informadas, pero una cosa es verla y otra es detectar qué significa eso para la gente.
El teatro tiene un valor que nos pone en contacto con nosotros mismos, con el otro, que nos da profundidad, una corriente contraria a la banalización, a la cosa más superficial que proponen de alguna manera los medios. Entonces te apalancas en un gran aparato de distribución como es hoy las nuevas tecnologías, pero estas distribuyendo un alto valor cultural, emocional y de contacto con la propia subjetividad. Esa combinación me parece muy potente y muy sanadora para las épocas en que vivimos. Todo esto no está en la cabeza de los empresarios, porque los empresarios teatrales están metidos en otra cosa, no quieren meterse en ese mundo, el tema es que tienen que saber que de ese complejo mundo de la tecnología nos ocupamos nosotros, el productor teatral solo tiene que producir muy buenos títulos.
Es algo nuevo para el medio, y ahora también lo empezó hacer Netflix ¿Cómo crees que va a repercutir en Teatrix?
Yo creo que va a ser bueno, porque esto deja de ser algo heroico para ser algo que claramente es una oportunidad que hay que aprovechar. Tenemos un crecimiento ya desde hace dos años del 6% mensual, la gente está muy agradecida, esa es la palabra. El interior de nuestro país no llega a ver el teatro de Buenos Aires, que es el teatro de mayor producción, con los actores que ellos conocen y valoran. Entonces les estas dando accesibilidad a esta cuestión cultural bajo este formato, que obviamente no es lo mismo que el presencial, pero mucha gente es lo único que puede ver, y estos sistemas de suscripción son económicos, permiten esta accesibilidad y permiten que el lenguaje teatral, que es totalmente distinto al cinematográfico, se perpetúe y crezca, se promocione.
Es como si el teatro se pusiera al nivel del cine, de la televisión, hablando de masividad, algo que por ahí no vimos en el teatro…
Justamente lo que decía la gente de Netflix es que el teatro iba a volver a estar en lugares que había perdido, me parece muy interesante porque esto va a retornar a las salas, estoy segura, hoy no tiene una masa crítica para que eso ocurra, obviamente, pero si sumamos México, España, si seguimos creciendo se va a dar una masa que va a potenciar las salas, más temprano que tarde eso va a ocurrir, y estamos en un modelo de aceleramiento, los tiempos son muchos más cortos de lo que creemos.
A la hora de hablar con productores y creadores, con todos los que tienes que ponerte de acuerdo, ¿cuáles son los beneficios que le propones?
Tenemos un vínculo asociativo, imaginé esta empresa con una figura legal nueva, que ningún medio la tiene, yo me asocio, les proponemos una sociedad. Lo que hacemos, visto comercialmente, es crear una segunda ventana teatral, de comercialización de la obra de teatro, una ventana que busca posicionar el teatro argentino, quizá pronto al teatro mexicano, en otras latitudes, hay una sinergia, una intención de llevar el teatro de cada región y que se expanda.
La empresa además invierte en la filmación, en la adquisición del cliente, y  sobre todo una inversión muy importante en la plataforma y todo lo tecnológico. Hoy no hay que pensar solamente con la cabeza en la plataforma web, sino en la articulación con todos los dispositivos móviles y los sistemas de transmisión por Smart tv, eso significa haber hecho acuerdos con cada una de las marcas.
Una obra de teatro es un producto mucho más sensible, ¿qué tan difícil es grabar?
Esto es lo que más me divierte, crearle un lenguaje audiovisual al teatro. Después de cuatro años que ya estamos, hemos desarrollado ese lenguaje. Mucha gente todavía no entró a la plataforma y no sabe cómo filmamos. Cuando les decimos cómo, se dan cuenta de que tiene mucha calidad, y que sí se puede ver, hay un prejuicio que es que el teatro no se puede filmar, y yo vengo de una familia en la que se filmaba el teatro, mi papá hacia teatro y lo filmaba, lo llevó a la televisión abierta, en los años ’60 y ’70, para mí era lo más normal.
Y hemos visto teatro en el cine también…
Sí, hemos visto teatro en el cine e incluso en México tuvieron su período importante de la televisión con teatro, donde se transmitía y hacía teatro. Ha sido todo tan acelerado lo que hemos vivido en los últimos años, la televisión, el cable, los nuevos sistemas, que nos olvidamos de los orígenes, en los orígenes estaba el teatro, tengo un recuerdo muy vívido, así que cuando salí con esto era todo muy normal, una continuidad de mi vida, la gente me decía que estaba haciendo algo totalmente disruptivo, novedoso, me encanta ponerme esas cucardas pero la verdad para mi es una continuidad, lo que ha cambiado es el medio, y cómo nos acercamos al público.
La televisión abierta dejó de hacer teatro porque se volvió muy competitiva, los contenidos había que llevarlos a un grupo muy grande de gente, lograr masificarlo, y para eso hubo un cambio muy importante en los modelos de producción y en los contenidos que se seleccionaban. No era suficiente el público para los que tenían la grilla de un canal de televisión que competía con otro  por una tanda publicitaria. Fue perdiéndose esa costumbre, pero no quiere decir que el nicho del teatro no exista, que el deseo de ver teatro no exista, es más chico, sí. Acá hay un proyecto que me parece revolucionario en cuanto a llevar esta cosa sensible como dijiste, a todas las personas, porque de eso nos nutrimos y la gente se enferma cuando no puede ponerse en contacto consigo misma, el actor te ayuda a pensar, el texto, hay pensamiento que circula en cada una de las obras.
¿Cómo filman cada obra?
Hay todo un protocolo de filmación, se estudia el texto, la puesta, se habla con el director, y luego de ese proceso, habiendo hecho una filmación a una cámara y un análisis de los distintos planos, de cómo se va a contar la historia y cuántas cámaras necesitamos, filmamos en función, porque el actor trabaja para el público, y ahí es muy interesante ver la entrega que el actor hace, estas capturando en ese único momento maravilloso la situación, y esa pequeña desprolijidad que puede haber, que pueda ser letal para un cineasta, en el teatro es lo que pasa, es esa cosa que ocurre ahí, luego nosotros editamos las cámaras, corregimos algunas cosas, hacemos postproducción de sonido y de color, y recién ahí la obra puede estar puesta a disposición del público.
¿Ya empezaron hacer producciones propias?
Empecé a pensar en producciones propias pensando con la cabeza de la gente, ellos quieren y tienen el recuerdo de títulos que no fueron filmados, y creo que es interesante pensar en reponer algunos títulos que fueron muy exitosos, con grandes actores, porque no hace falta que la producción esté mucho tiempo en cartel, creo que con tres meses podemos tener una buena obra asentada, que el público que la quiere ver la vea, filmarla, y guardarla.
Están creando una memoria del teatro…
Estamos creando una memoria del teatro, sí, está bueno esto de la memoria, porque tiene un papel fundamental en el desarrollo de una persona, de una sociedad, sino detrás hay un vacío, y ese vacío se siente existencialmente, entonces me parece bueno apoyarnos en lo que se hizo en materia cultural y de producción teatral, que las nuevas generaciones entren a Shakespeare de otra manera, atravesados por lo cultural actual, me parece que nos alimenta mucho. Yo creo que la innovación es eso, volver hacia atrás para traer algo con otra mirada, entonces nada se pierde, se está transformando y estamos creciendo evolutivamente en situaciones disruptivas.
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
Un adelanto de lo que será SPEED THE PLOW, de DAVID MAMET: Entrevista con DANIEL VERONESE
El director argentino será el encargado de llevar adelante la versión de Speed the Plow, de David Mamet, por primera vez en Latinoamérica. Estreno el 16 de agosto en el Telón de Asfalto.
Tumblr media
De la mano de La Rama de Teatro y En Llamas Producciones, el director y dramaturgo argentino Daniel Veronese (El Test, ¿Quién le teme a Virginia Woolf, Mujeres soñaron caballos) desembarca en México con un nuevo proyecto: Speed the Plow, una obra del dramaturgo norteamericano David Mamet, escrita en los años 80 y estrenada en Broadway en 1988.
La obra original estuvo protagonizada por Joe Mantegna, Ron Silver y… ¡la gran Madonna! Así es, aunque no iba a ser la actriz original, el ícono pop consiguió el papel del único personaje femenino, Karen, y se subió al escenario de Broadway para demostrar su talento como actriz. Las críticas la acribillaron, pero la taquilla explotó.
Recientemente, el mismo papel fue interpretado por actrices como Lindsay Lohan (2014), Rose Byrne (2016), y en agosto se suma a la lista la actriz mexicana Ximena Romo (Dogville), acompañada en el elenco por Arturo Barba y un actor por confirmar.
Bien, ¿de qué trata la obra? Es una sátira al mundillo hollywoodense, su entramado de lógica superficial y la carrera de ascenso sin ningún tipo de moral. La obra narra una historia con tres personajes: Bobby Gould, un ejecutivo recientemente ascendido en un Estudio de Hollywood, quien recibe de su socio de muchos años, Charlie Fox, un proyecto que podría ser un éxito. Karen (Ximena Romo) es una simple recepcionista sin ninguna ambición aparente, y será blanco de una apuesta entre los socios.
“Había leído y querido montar esta obra hace años. No pude. Volvió a ofrecérmela mi amigo productor Arturo Barba y me sumé al proyecto casi sin pensarlo”, comentó Daniel Veronese en entrevista para Cartelera de Teatro, y adelantó que el acento en su versión de la obra “está puesto en la dinámica, en la perversidad dramatúrgica de Mamet, con la que me siento muy cómodo y atraído”.
Las más actuales versiones de Speed the Plow (como la realizada en el 2016 en el Roslyn Packer Theatre de Australia) han recibido algunas críticas, ya que el texto parece no haber superado el paso del tiempo. Sobre esto, el director aclaró que pretende hacer una “espléndida obra de teatro en 2019, escrita en los ochenta, pero con una potencia muy actual”.
Por otro lado, se ha comentado un tono sexista en el diálogo, algo que no encaja con el contexto actual. “Cuando entro a montar una obra siento que no debo imponerme leyes sociales, ni formas teatrales (ni modernas ni antiguas), debo primero conocer los secretos de la telaraña que va a aprisionar los sentidos del espectador. Lo explícito y lo secreto. Soy una persona muy a favor de las igualdades de todo tipo. Pero a priori no sé qué va a resultar, ni sé si esta obra sirva para hablar de eso (el género). Por ahora solo veo palabras y estructuras dialogales. Eso con respecto a todos los personajes. Me comprometo, sí, a hacer una obra de teatro atractiva, que emocione, que intente que el espectador se sienta un poco mirado, un poco hablado. Pero lo que vaya a resultar de ese encuentro entre obra y platea es impredecible”, expresó Veronese sobre este punto.
Ya hemos visto algunos intentos trillados y algo fallidos sobre Hollywood en la escena mexicana, pero sin duda el hecho de que sea un texto de Mamet y esté reversionado por Veronese suma un atractivo; y por qué no adelantarse, una calidad garantizada en el escenario. Ximena Romo ya demostró que puede hacerse de papeles de mujeres aparentemente frágiles y, también, que no le tiene miedo a los pomposos nombres de actrices que traen consigo los personajes.
Por su parte, Daniel Veronese ya tiene gran trayectoria en la escena mexicana, como director y como dramaturgo, y a su vez transita sin problemas por teatro independiente y el comercial.  Las obras, escritas por él, que han sido recientemente montadas son El líquido Táctil (2016), dirigida por Boris Schoemann, y Luisa (2015), dirigida por Angélica Rogel. La última obra que dirigió en el país fue El Test, del autor catalán Jordi Vallejo Duarri.
“He hecho producciones independientes con las que me sentí muy cercano emocionalmente. En México hay un material potente, fácil de hacer estallar. Hay pólvora, solo hay que acercar el fósforo”, comentó sobre la escena mexicana y concluyó, en relación al trabajo con actores y actrices nacionales, que “en general, y en todos los países, encuentro actores de todas las categorías. Quizás lo más llamativo aquí en un determinado rango de actores fue encontrarme con gente muy atrapada por la televisión y sus compromisos, situación que entorpece el trabajo teatral, o que al menos hace que no sea tan fluido como debería ser. No es una crítica, es una realidad. Algo que ahora está empezando a pasar en Argentina también”.
Speed the Plow se presentará con un nombre en español, aún por confirmar, y tendrá su estreno el 16 de agosto en el escenario del Telón de Asfalto.
0 notes
r-tierno · 5 years
Text
Presentación de LOS OBJETOS VIVOS, ESCENARIOS DE LA MATERIA INDÓCIL, de Shaday Larios
La teórica mexicana, especialista en Teatro de objetos documentales, presentó su libro Los objetos vivos, escenarios de la materia indócil (Editorial Paso de Gato) en la Universidad Nacional de las Artes de Argentina UNA.
Tumblr media
Acompañada en la mesa por Javier Swedzky y Liliana López, el pasado 1° junio, la realizadora e investigadora Shaday Larios, presentó su libro Los objetos vivos, escenarios de la materia indócil, de la editorial mexicana Paso de Gato, en el marco del Laboratorio de teatro de objetos documentales que la autora realizó para la Especialización en teatro de objetos, interactividad y nuevos medios, postgrado de la UNA, único en Latinoamérica específico de esta técnica.
Como explicó su autora, el trabajo fue resultado de su tesis doctoral en Artes Escénicas que realizó en Barcelona, dirigida por el maestro catedrático Miguel Morey, sumando una investigación y testimonios de artistas que Shaday recopiló e incluyó en el libro.
El actor y titiritero Javier Swedzky comentó que “hay muy pocos trabajos orientados a teorizar los objetos en la escena. Shaday hace un estado de las cosas y trata de dar un paso más allá, y básicamente lo da retomando a De Chirico. Por otro lado, el libro está orientado a contar experiencias de creadores latinoamericanos, eso es algo importante, ver qué está pasando por América Latina en el universo objetual”.
En el 2016, Shaday presentó junto a Jomi Oigor, una pieza experimental llamada La máquina de la soledad, que se creó a partir del encuentro de un tesoro en un mercado de pulgas de la Ciudad de México: una valija con más de 600 cartas de amor. Todo un universo allí conservado, del cual los autores rescataron y crearon una especie de homenaje al objeto-carta, al correo postal. Algo así también sucedía con Las Cartas de Frida, la ópera de toilette escrita por Marcela Rodríguez a partir de las cartas encontradas en un baño de la Casa Azul.
De eso se trata el teatro de objetos: el universo conservado, la subjetividad del objeto inmóvil pero también la travesía de un pasado que se vuelve presente a través de la materia, se recicla. Los objetos vivos, escenarios de la materia indócil  “es un libro que en el gran fondo tiene una reivindicación para el teatro de objetos, desea que a partir de esta visión antropológica, de esta asociación con la cultura, la filosofía, y varias fuentes que se tocan aquí, se conceda un nuevo lugar, este umbral entre lo inerte y lo vivo, quisiera conceder ese espacio de complejidad a ese instante”, expresó la autora.
El libro contiene testimonios y análisis de obras de artistas contemporáneos, como del argentino Emilio García Wehbi, procesos de creación de la propia autora, referencias y citas a diferentes autores pictóricos, filósofos, como Tadeusz Kantor, Schopenhauer, Nietzsche, Heidegger, que ayudan y dan un marco a esta reivindicación que Larios plantea, y que también deja muchas preguntas y caminos por recorrer, ya que abre un universo, sobre todo teniendo en cuenta la posición y función actual de lo material, la digitalización y las nuevas generaciones de artistas del teatro de objetos.
“El libro tiene una voluntad pedagógica muy fuerte, los que damos clases y amamos lo que hacemos depositamos un afecto y una voluntad pedagógica amorosa, una ternura radical que quiere infiltrarse dentro del discurso para que llegue a los demás a partir de un conjuro de las palabras, que pasa por el recuerdo, recordar es volver a pasar por el corazón, hay un conjuro ahí metido que tiene que ver con esta voluntad pedagógica de que sea escuchado, rallado,  modificado, en la práctica del pensamiento”.
En este sentido pedagógico, la autora creó por ejemplo el término mnemobjeto, en relación a los objetos que despiertan una memoria colectiva, sobre todo en lugares y contextos en los que se ha tenido la intención de borrar sucesos, clausurarlos. Me viene a la mente, en otra línea del arte, la exposición de “Autores Ideológicos”, en el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti de Buenos Aires, donde se expone un auto Ford Falcon, desarmado y pintado de blanco, como símbolo de la complicidad civil con la dictadura militar argentina de los años 70, un auto que entró en el mercado como de uso ‘familiar’, y luego fue usado por la policía y grupos paramilitares para el secuestro de personas. Cada vez que vemos un Falcon en Buenos Aires, vemos a 30 mil desaparecidos.
“El ultimo capítulo intenta conceder desde diferentes lugares esta reivindicación, el objeto como portador de otra política de la memoria, el teatro objeto como abordaje de problemas muy contemporáneos, el aspecto de la digitalización, la ausencia material, hemos visto cómo van desapareciendo los objetos, qué pasa con ese reciclaje material, ahí hay un campo de abordaje súper interesante. Qué pasa en zona de conflicto, donde no hay cuerpo, qué pueden hacer allí los objetos, qué pasa con los restos de residuos después de una catástrofe, hay un rastro de posibilidades”, explica Larios.
Liliana López, investigadora y docente del departamento de Artes Dramáticas del IUNA, presente en la conferencia, expresó a propósito del contenido del libro que “analizar los objetos que están cuando nosotros ya no estemos nos desafía a pensar nuestra propia finitud. ¿Serán los mnemobjetos que consagren algo de nuestra existencia? De ahí la importancia de entrenar la mirada del artista y de los otros ocasionales espectadores para ayudar a percibir ese umbral entre la basura y la eternidad”.
Los objetos vivos, escenarios de la materia indócil, es sin dudas un libro que se recomienda, no sólo a los artistas y quienes trabajen sobre esta técnica, sino al público en general, como método de reflexión sobre nuestra realidad, el presente, en un trabajo que la autora calificó de ‘vivo’: “no pretendo la teoría como clausura, sino como una brújula que viene de un cuerpo que escribe. Soy un cuerpo escritorio, me están pasando muchas cosas, yo quería que el libro transmitiera eso, que se viera que soy un cuerpo que está ahí escribiendo, no distanciarme de la teoría, todo lo contrario, me relaciono con la cita, citar es un posicionamiento, un acto político, es una manera de ver, de reapropiarte del  conocimiento y para mí era muy importante que se manifestara, que ese tejido fuera visible, la forma en que esto está hecho es lo que me importa”, expresó Shaday.
Por otro lado, la autora hizo una comparación entre Europa y Latinoamérica en relación al Teatro de objetos, de lo cual rescató que vivimos procesos culturales totalmente diferentes. La diferencia económica entre ambos continentes hace que en Latinoamérica pensemos el objeto desde un lugar de urgencia, de necesidad, mientras que en Europa existe una cultura del descarte, de renovarse todo el tiempo, y esto se refleja en el teatro de objetos.
“Son procesos culturales diferentes, acá por la supervivencia, la violencia que hemos sufrido, las desapariciones, los procesos migratorios, las carencias, la precariedad, nos hacemos otras preguntas, en cambio allí hay un exceso, un desecho, siempre se renueva, porque hay una idea del presente continuo. La cultura de objetos está bueno para ver cómo nos relacionamos con esa materialidad, lo bonito de esto son los contextos, el laboratorio de acá fue muy distinto al de Barcelona, siempre la cultura material revela algo del lugar, y es muy bonito lo que sucede, los objetos hablando de nosotros, en la manera que los poseemos”, concluyó.
1 note · View note