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James Baldwin.

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Es nuestro aniversario

15 marzo 2024

Escribir es como amar, primero gozo delirante, luego gozo mecánico y al final... sufrimiento, pero por eso se escribe, por eso se ama... a pesar de todo

Querido Juan,

Este día te he tenido más presente que de costumbre y, para mi sorpresa, hoy es 15 de marzo: nuestro aniversario. Vine al Café Dantés a escribirte, mientras consumo un blondie y un cafecito, como tanto disfrutábamos juntos. He tenido tantos momentos rondando por mi cabeza y te percibo a mi lado. Ayer, estuve en un estado entre dormida/despierta y te juro, que en ese instante sentí que me abrazabas en mi cama, como solías hacerlo. Y quise regresar a ese lugar.

Mi espíritu me dice que la conexión que tuvimos, jamás va a desaparecer. Has sido el amor de mi vida, quien vino a revolucionar mi existencia y con el que disfrutaba hasta de los problemas, porque tú estabas conmigo. Y es que contigo aprendía sobre ciencia, sobre teorías conspirativas, sobre los mejores lugares para comer enchiladas suizas o milanesas empanizadas. Podíamos hablar sobre arte, viajar al pasado a través de la historia, admirar la capacidad del ser humano para adaptarse a condiciones deportivas, o simplemente reírnos de tiktoks todos torpes. No eras indispensable en mi vida, pero la llenaste de pasión y energía.

Tantos eventos han pasado en los últimos 4 meses que siempre fuiste el primero en el que pensaba para compartir todo pero tu ausencia ha hecho más presente el amor que tuvimos. Mientras escribo esto, intento llamarte con el pensamiento y saber donde estás, para abrazarte y besarnos por una última vez.

Ayer me dijo un ave que volara hasta desintegrarme, que la distancia no es cansancio, es fuerza, eres tú

Mis emociones no tienen estructura hoy. Solo siento el amor pero tampoco olvido lo que me llevó a tomar mi decisión de separarnos. ¿Fueron diferencias en nuestros tiempos o prioridades? Yo sé que jamás fue un problema por falta de amor, pero yo sentía tanta prisa, Juan, por estar juntos, casarnos, tener una familia y estar solo tú y yo. ¿fue mi error no ceder el tiempo? No, en eso sigo firme, que yo tenía que ser dura, como un cimiento, para nuestra familia, porque no quería verte como un padre viejo. Con todo respeto, me da mucha felicidad ver al Guille y Claudia como padres. Pero aunque se sientan jóvenes, tarde o temprano, la factura de la edad les va a llegar y no tendrán la misma energía para ver a Vera crecer. Sentí tanto miedo que entendí que no quería eso para mi vida: yo quiero una familia, que pudiéramos ver crecer juntos, pero eso ya no va a pasar… Cada quien eligió sus prioridades y fue ahí donde nos dijimos adiós. Pero parte de mi se pregunta… ¿realmente tenemos que desaparecer de nuestras vidas? Extraño tu presencia, Juan, y dudo que alguien pudiese ocupar tu lugar: eres un hombre ÚNICO y después de vivir una experiencia contigo, es imposible encontrar otra igual. Puedo vivir sin ti, pero siempre vas a estar en mi vida, como un recuerdo de algo hermoso que tuvimos…

Siempre tuya,

March

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Para Juan,

Ya casi pasan 3 meses desde la última vez que nos vimos, que hablamos y que nos dijimos adiós. Hasta hoy es que puedo escribir, porque escribir implica ponernos un espejo y organizar los pensamientos y emociones que rondan en la cabeza. No quería sentarme con ellos otra vez, pero en los últimos días te he pensado y sentido tanto, Juan, desde un lugar de mucho amor y agradecimiento. Estoy escuchando uno de los discos de Manuel Medrano, de los cantantes súper cursi, pero que cada letra y canción me recuerdan a ti…

Que difícil es vivir sin ti, Juan. Cada despertar es un recordatorio de tu ausencia: hay días más llevaderos y otros en los que desearía que regresaras a mi vida. No solo eras mi novio, eras mi mejor amigo, mi guardián, el ser al que más admiraba en mis días… Hay momentos en los que, como un reflejo, menciono tu nombre con emoción o pienso en hablarte, para compartir mi día, los aprendizajes, los miedos, los obstáculos a los que me he enfrentado. Ha pasado tanto en estas últimas semanas, situaciones que jamás me imaginé que pasarían en mi vida y, si sigues leyendo estas publicaciones, me encantaría que supieras. En las últimas semanas, mis padres han decidido poner en venta la casa, lo cual ha sido un gran golpe para mi hermana y para mi. Además de ello, hace un par de semanas, mi hermana, mamá, hermano y yo percibimos una nueva presencia en la casa. No era mi abuelo, sino un ‘ente femenino’ porque fue la primera vez que escuchado que ‘eso’ mencionara mi nombre. Tuvimos que hacer una limpia y desde entonces, la casa ha regresado a su vibra normal.

Hubo una pérdida reciente, alguien falleció en un accidente y eso trajo mucho caos en nuestra calle. Debido a esa muerte, unos vecinos que estimaba mucho, vinieron a la casa a gritarme, decir que fue mi culpa, y que me iban a demandar. Nada de eso ha procedido (gracias a Dios) pero, me detonó una paranoia que ocasionó mucho miedo al salir a la calle.

Salí con alguien, pero no fue un lugar cómodo para mi. Quería verte y sentirte a través de él y ese fue mi error. Es por ello que he decidido cancelar ese proceso de ‘retomar las salidas’. Confirmo que no quiero estar con alguien que no seas tú… Eres un hombre único y has sido el amor de mi vida.

Por último, pero no menos importante, existe la posibilidad que la próxima semana me operen. Todo ha sido muy rápido, pero he recibido mucho apoyo y me siento tranquila de este procedimiento. No soy fan de estar en el quirófano otra vez, pero es una única oportunidad.

Creo que esos han sido los eventos más relevantes de este 2024. En todos ellos he querido tu presencia, pero estoy haciendo las paces con esta nueva vida que tenemos. No sé si sepas, pero he seguido al pendiente de tus publicaciones en Facebook. Me hace muy feliz sentir que tengo oportunidad de conectar contigo y reírme de todo lo que compartes. Ver tus fotos jugando basquet me llenan de mucha alegría y cuando subes tus videos como locutor o platicando de tu día, sonrio al imaginar la calidez de tu voz. Me he dado cuenta que, si existe un ‘lugar de paz’ al que podemos acudir en nuestra mente cuando algo difícil se presenta, tú eres ese lugar. Hay momentos en los que tengo miedo, me siento vacía, pero cierro los ojos y recuerdo tu mirada tan cálida y tus labios diciendo ‘ hola corazón’. Te fantaseo en tus visitas a mi casa, cuando tenías esas conversaciones largas con mi padre en la cocina, o cuando veíamos Netflix en la sala… Te imagino platicando conmigo en mi cuarto, entre una mezcla de abrazos y besos tan mágicos que solo tú tienes.

Tú me hacías tan feliz y en este momento de introspección, entiendo que la decisión que tomé fue tan difícil. Mi sueño era compartir mi vida contigo. Pero igual era un sueño para mi aprovechar cada momento que tuviera contigo, porque sentía el tiempo encima de mi. La ‘presión’ de casarnos, de vivir juntos, era porque percibía que el tiempo nos alcanzaba y no te quería imaginar viviendo todo tan mayor. Pero igual te percibía con mucha calma, queriendo tener a todos ‘felices’ entre tus padres y a mi, que no estábamos avanzando. Sé que no estaba en tu control la situación familiar que tenías, y jamás te voy a reclamar nada de eso, pero el tiempo nos ganó… Yo ya no quería esperar más para poder tener nuestra vida juntos, solos, como una familia. Pero tú requerías esa espera y ahí fue cuando ya no pude avanzar más. Te pido una disculpa si te lastimé al no poder esperar, pero era más mi dolor de saber que la vida que quería tener, no iba a estar ahí conmigo.

En fin, creo que ya estoy divagando… Es retador escribirte porque una parte de mi se emociona mucho al imaginar que volvemos a hablar y escucho tu voz. Pero otra parte de mi, la realista, sabe que difícilmente eso va a suceder. Siempre te voy a extrañar mucho, Juan… fuiste LA persona que revolucionó mi vida. Gracias por regalarme tu amor todos los días, ha sido lo más hermoso que alguien me ha regalado. Te seguiré sintiendo en mis recuerdos, en mi sueños. Te seguiré llamando en cada recuerdo, esperando que te encuentres con bien y que sepas, que nuestro amor jamás se va a ir.

Un abrazo,

Marianna

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Día 14 Enero 2025

*suena Running Up the Hill* de fondo.

Hola, quisiera presentarme otra vez. Mi nombres es Marianna, tengo 30 años y disfruto mucho los momentos de instrospección. Hoy encontré el espacio perfecto para obligar a mi lindo trasero a sentarse y dedicarse un tiempo a escribir. Esta actividad ha sido una que practico desde que estaba en la secundaria, pero tengo la teoría que, desde que se crearon las redes sociales, mi capacidad de concentración ha disminuido. Cosa que no me preocupa porque, como mujer adulta que ya soy, tengo la capacidad de auto-regularme, o eso creo.

Después de casi 1 año que me llevó terminar un libro, fue que decidí retomar estas actividades que tanto disfrutaba, pero que no implicaban un reforzador inmediato. Porque, oh querido lector, la tecnología ha impactado enormemente y cambiado la forma en la que nos relacionamos. Por ejemplo yo, una Marianna que require validación externa, debido a la depresión que tengo, encontré cierta ‘adicción’ a sentirme parte de la vida de mis seguidores. Debido a esa recompensa y liberación de dopamina inmediata, se me ha dificultado despegarme del celular y completar actividades como lo son escribir, resolver problemas o hasta incluso leer.

Pero no todo es negativo, ya que somos seres humanos, y como gran especie que somos (cuf cuf) tenemos conciencia y la capacidad de cuestionar/regular nuestros instintos. No es tarea sencilla pero tampoco imposible. Solo se requiere de tiempo, diseñar una estrategia, reconocer los obstáculos y mantener la motivación constante. ¿ De donde surgen estos pasos? Pues del libro Mindset The New Psychology of Success de Carol S Dweck. Probablemente este texto no sea el major, pero de él estoy aprendiendo a enfocarme en una actividad, dar estructura a mis pensamientos y ejercitar mi mente.

¿Por qué quiero ejercitar mi mente y controlar mi addicción a las redes? Porque tengo una famosa crisis en mis 30s: estoy soltera, sigo viviendo con mis padres, tengo una beagle medio loquita y no sé que hacer de mi vida. Mi sueño era casarme, formar una familia y ser el prototipo de una madre ‘perfecta’ pero todo eso cambió cuando entendí que el amor de mi vida, Juan, no deseaba tanto ese plan como yo. Y ojo, él no es el malo de la historia, solo tenía prioridades diferentes a las mías… Después de casi 5 años de relación, un anillo de compromiso devuelto, varias horas de llorar y ponerme borracha, aquí estoy sentada en la asotea de mi casa, en pijamas un domingo a las casi 3pm.

No todo ha sido malo, por fin encontré un trabajo estable, que me paga bien, no me explota y mi equipo me motiva a hacer mis responsabilidades. El año pasado me metí a un equipo de corredores, porque es parte de las crisis cuando no estas casado, con éxito profesional o hijos, buscando un nuevo propósito de vida. Resulta ser que me ha ido bastante bien y ¡fui capaz de correr 2 medio maratones y hacerlo bien! Regresé a terapia debido a mi duelo de rompimiento con Juan y a tomar antidepresivos/ansiolíticos y pues esos espacios me han permitido reconectar conmigo otra vez.

Este 2024 comenzó rudo porque me enfermé con una gripa muy incómoda, estoy saliendo con un chico pero la cosa va RE MAL, mi perrito mató al gato de la vecina que se metió a la casa y mis padres se quieren ir a Monterrey. Se ha ido medio rudo pero creo que esa GRAN sacudida es la que me recordó que estoy sola, claro, tengo a Cristo y mi fé pero me refiero a que solo cuento conmigo para hacer las cosas. Es por eso que este año me voy a enfocar a mi y a cuidar estas esferas:

Física

Mental

Espiritual

Emocional

Profesional/ financiera

Yup, eso implica que me voy a cuidar mucho más físicamente porque si quiero ser la mejor versión de mi estado físico para correr un maratón. Voy a cuidar mi parte mental retomando ejercicios que permitan ejercitar mi cerebro. Ya no lo puedo dejar tan descuidado porque sigue siendo un músculo y no quiero debilitarlo. Además, quiero recuperar esa adrenalina y emoción que me daba el aprender temas nuevos. Por ello seguiré leyendo, escribiendo y ocasionalmente resolviendo rompecabezas. En el área espiritual, quiero cuidar y mejorar mi relación con Dios. Quiero que sepa que lo busco, que lo necesito y que es el origen de mi ser. Para ello, seré más constante en leer la Biblia, ir a los cultos y tener mis oraciones para hablar con él. De forma emocional, seguiré asistiendo a mis terapias y consultas de psiquiatra. De verdad me quiero esforzar para eliminar los problemas de insomnio que tengo, mejorar y perdonar la relación que tengo con mi mamá y sentirme mejor. Por último, de la profesional si me gustaría mejorar mis habilidades para dar un mejor servicio, es un poco imponente, pero podría traer por ahí un beneficio económico.

Y pues así me encuentro, mi querido lector. No soy la versión que imaginaba de mis 30s pero hay algo dentro de mi, un impulso que está emocionado de poder usar esta libertad para sanar, perdonar y seguir adelante con mi vida. Hay duelos y obstáculos por delante, pero me siento lista y capaz de enfrentarlos. Creo que esa Marianna de hace 10 años estaría muy feliz de ver la seguridad que estamos recuperando.

Saludos,

March

#Spotify

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Octubre es mes de la salud mental y en la empresa donde trabajo, crearon un buzón para compartir las historias. Esta es la mía

Es difícil sentarse y dedicarse unos minutos a ser vulnerable. Pero siento que, al contar mi historia, le recuerdo a alguien que tener una enfermedad mental no define quiénes somos y que no estamos solos porque esto es más común de lo que pensamos.

Esta historia comienza con una niña de 7 años, que desde que tiene memoria, ha sido más sensible de lo normal. Recuerdo preocuparme en exceso o ser capaz de sentir por completo la tristeza de quienes me rodeaban. Poco iba a saber que, desde entonces, tendría una lucha constante con las enfermedades mentales.

En secundaria fue cuando tuve mi primera expresión de que algo estaba mal. Recuerdo que me sentía tan vacía, con poco sentido de estar presente, que tuve un periodo de ‘no hablar’. Fue tal ese periodo, que en mi casa me apodaron ‘la mudita’. Mis amigas se preocupaban por mi, pero no encontraba propósito de hablar, más allá de cuando me preguntaban algo en clase o en mi casa. Desconozco cuanto tiempo pasé en ese tiempo estancada, me sentía sola, pero de alguna forma encontraba siempre un lugar en donde refugiarme. Encontré un refugio en mis clases de ballet, con la compañía de mis hermanos, en mis perritos y en los libros de Michael Ende, Lemony Snicket y C.S. Lewis. Mi periodo de ‘no hablar’, por suerte, duró un par de meses.

Pasaron unos años y mi oscuridad reapareció en la prepa. Fue raro, porque yo estaba feliz de iniciar la prepa en una nueva escuela, tenía a mi primer novio, me iba bien en la escuela y me sentía feliz en las clases de ballet. Pero la sensación de vacío se expresó otra vez y ahora fue a través de la comida. Nunca me imaginé que se expresaría de esa forma, pero de forma sutil, dejé de comer ciertos alimentos, mis porciones de alimentación disminuyeron y conocí el mundo de las calorías. Mi mamá cuenta que la anorexia se detonó a partir de mis clases de ballet, pero yo siento que siempre estuvo ahí y solo decidió salir cuando vio que la felicitaban por bajar de peso. La realidad es que necesitaba aprobación, quería sentir que tenía control en mi vida, cuando afuera percibía que todo estaba en caos. Así fue como, sin saberlo, desarrollé anorexia y de haber pesado 60kg ya con una estatura de 168, terminé pesando 47 kilos. El dejar de comer era una adicción para mi porque me sentía fuerte, en mi mente me decía ‘mira el gran control que tienes y decidiste no comerte esa rebanada de pastel y aún así puedes bailar y rendir bien en clases’.

No tengo muy claro cuánto tiempo estuve en ese mundo, pero creo que duré un año así hasta que mis padres, muy preocupados, se acercaron conmigo y expresaron su temor a que algo malo me pasara. Ahí fue cuando comenzaron mis primeras visitas al psicólogo y le pude poner palabras a lo que tenía: depresión crónica. Con forme fui creciendo y avanzando en terapia, entendí que esta fue una condición con la que nací y que me hacía mucho más sensible al exterior y que, si no lo monitoreaba, podía tener picos de depresión mayor. Al inicio tenía mucho miedo, porque sentía que estaba sola y que nadie me iba a poder salvar de esa oscuridad que siempre buscaba salir. Han de saber que cuando tienes depresión, la mente borra ciertos momentos de tu vida, como mecanismo de cuidado. No recuerdo bien que vivía en ese entonces o lo que me llevó a tener mi primer intento suicida, pero le agradezco a Dios haber fallado. Pensar en ese día, me da miedo, porque no puedo explicar el dolor que sentía: nadie elige morir decisión propia. En lo personal, siento que algo se desconectó por completo en mi mente, en mi alma, y nada más importaba ya. Recuerdo estar sola en mi casa, ni mis padres ni hermanos estaban en casa. Como si estuviera en automático, fui al cuarto de mis padres, tomé una corbata de mi padre y me encaminé a decir adiós a todo…

Yo creo que tengo un ángel guardián que me ha cuidado todo este tiempo, porque fallé y el nudo que hice, se deshizo. Fue así como me solté en llanto y sentí un gran terror: por más que mi mente me dijera que no valía la pena vivir, yo si quería seguir luchando.

Y así es como retomé las visitas al psicólogo y al psiquiatra. Han de saber que todo esto era nuevo en mi familia. Se desconocía del tema y nos daba miedo. Recuerdo que mis hermanos menores tenían miedo de que algo me pasara y, llegué a sentir culpa de no poder ser un buen ejemplo de fortaleza para ellos. Tuve otras recaídas, viví lo que fue un estado catatónico, otros picos de depresión mayor, varias visitas al psiquiatra y psicólogo.

Hasta llegar a mi presente. Mi oscuridad no se ha ido, pero ya hice las paces con ella y hasta he tenido espacios donde me siento a platicar con ella y recordarle que no está sola, que cuido de ella. Fueron varios años, pero para la salud mental no hay una fecha exacta de ‘recuperación’. Lo que sí les puedo compartir es que ahora soy una persona mucho más fuerte, capaz de levantar la voz ante injusticias, que sabe defenderse, que sabe el gran valor que tiene y que hay mucho amor a su alrededor. Todo esto lo pude ver gracias a la terapia y los medicamentos que he tomado. Hoy soy más fuerte que nunca. Me permito ser vulnerable, pero me recuerdo que eso no es todo lo que tengo. Nuestras herramientas siempre van a ser las personas que amamos, las actividades que nos llenan de vida, expresar lo que sentimos en un espacio seguro como la terapia y recordar que los medicamentos son como ese ‘boost’ que complementa todo.

Hoy elijo vivir, con todo y la depresión o ansiedad con la que vivo, porque sé que todas esas caídas, me dejaron enseñanzas y me permitieron recuperar el control de mi vida. La salud mental es algo más complejo de lo que creemos: al inicio pensaba que era estar siempre feliz pero ahora entiendo que significa entender la gama de emociones que tenemos y a ver nuestro ser y el de otros, desde un lado más humano. Porque todos cargamos con una lucha, pero algunos lo expresamos más que otros.

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Una prueba + March, de todo lo que eres capaz de hacer. Estoy orgullosa de ti :)

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Septiembre 17, 2023. Re-apareciste

Some things, once you’ve loved them, become yours forever. And if you try to let them go, they only circle back and return to you. They become part of who you are.”

-Kill Your Darlings

Esas palabras las encontré un par de días después de que volvimos a hablar. En mi opinión, reflejan el amor tan raro y único que compartimos. Mientras escribo estas palabras, escucho a Caifanes, acción que hacía cuando no sabía de ti pero quería sentirte cerca. Y es bonito, porque ya no los escucho desde un lugar de tristeza, sino desde uno lleno de amor. Para escribir este texto, revisé aquellas palabras que te dediqué durante nuestra separación porque siempre tuve presente nuestro amor. ¿cuáles son las razones por las que te amo? Es complejo hacerlo, porque limito un amor que va más allá de lo que das, sino de lo que eres. Te amo porque cada que escucho una canción del soundtrack de Interstellar o de Caifanes, llego a sentir tus brazos alrededor de mi, de esa forma mágica que solo tú lo logras. Amo como, en casi 5 años, no sabía lo que era un hogar, mi refugio, hasta que tú le diste razón de ser.

A veces pienso que te lloré tanto en tu ausencia, porque todo el amor que tenía a ti, se transformó en vacío y esa pasión no quiso dejarme. Te amo por todas las cartas, correos y palabras que me dedicas, porque una conversación a tu lado es una gran aventura. ¿será que nuestras almas se conocían desde antes y por eso disfrutamos tanto algo tan sencillo como hablar?

Entre uno de mis textos, compartí sobre un sueño que tuve donde regresabas a mi vida y fue un sueño que gocé con todo mi ser, pero al despertar, tu ausencia fue un golpe a mi realidad. Extrañaba escucharte, sentir tu bondad y amor. Extrañaba nuestras conversaciones entre cada salida al café. Extrañaba aprender y admirar tu ser. Pero en ese ‘extrañar’, estaba la ausencia de todo lo que amo de ti. Amo verte jugar basquet con tu equipo y que me acompañes a pasear a los perros. Amo sentir tu cuerpo cerca del mio y que tus labios acaricien los míos.

Dios, la vez que te volví a besar, me perdí en tu sabor y calidez, porque tus besos son de lo que más amo. Como la canción de Taylor Swift, no estaba lista a tener un último beso. Pero como adolescente enamorada, he recuperado todo tu ser. Te amo a ti, Juan, por quien eres. Por esa capacidad que tienes de ver por los demás, porque eres un guardián, por tu valentía y capacidad de dar amor. Amo la amistad que le diste a mi padre y la mano que siempre le diste a mi familia. Amo los videos que me compartes, porque siempre me hacen reir o reflexionar. Amo que en ‘momentos sencillos’ se vuelven una gran aventura. Amo que puedo ser yo, sin necesidad de ser o dar algo a cambio, porque me amas solo por existir y ¿ a caso existe regalo más hermoso que un extraño te ame más allá de sangre, economía, cuerpo o intelecto?

Si me preguntas qué amo de ti, Juan, es tu alma. Todo aquello que tú dices que te hace ‘extraño’ es lo que amo de ti. Esa alma libre, leal, fuerte y apasionada. Sentir tu cuerpo otra vez cerca del mío, me regresó el gusto de vivir y luchar. Porque antes, solo sobrevivía. Pero ahora quiero vivir, quiero crecer y compartir todo lo que soy contigo.

Te amo Juan. Nuestro amor siempre va a regresar a nosotros.

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“Some things, once you’ve loved them, become yours forever. And if you try to let them go, they only circle back and return to you. They become part of who you are.”

-Kill Your Darlings

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Julio 16: esta medalla va por ti

Intenté escribirte Juan, pero la ansiedad y el miedo han estado muy presentes hoy. Ayer fue el medio maratón y lo logré, justo como lo creías. Pero no estuviste ahí. Un día después de eso, tengo tantos sentimientos mezclados y que quiero evitar sentir. Soñaba, que serías una sorpresa y me esperarías al final de la meta como lo hiciste en otras carreras. Fantaseaba con encontrarte al final y mandar a volar todo lo que ha dolido estos meses, con tal de poder besarte y abrazarte. Pero nada de eso pasó y fue un recordatorio más que ya no me quieres en tu vida: ni para celebrar logros. Ahora entiendo que estoy en esa lista tan pequeña de personas que no quieres más en tu vida y que te vale si nos atropella un Metrobús o nos ganamos la lotería. Me duele escribir esto y hacer las paces con que, de un día para otro, decidiste irte y además, borrarme por completo de tu vida. Ya ni siquiera soy el recuerdo que tienen los fantasmas, ya no soy nada.

Veo tus publicaciones en Facebook y tu vida va estable. Tienes el básquet y a tu equipo. Tienes las salidas con tus amigas que ‘no te abandonan’ pero que jamás supe de su existencia durante casi 5 años que estuvimos juntos. Te quedaste con Ana, la única de mis amigas ( examigas) que no borraste de tu vida. Publicas videos raros, que no tienen nada que ver con tu vida, solo para entretenerte, y constantemente cambias tu foto de perfil.

Mientras escribo esto a las 10 de la noche, escucho la banda sonora de Interstellar, esa película que conocí gracias a ti y que me hace viajar a tus brazos. No entiendo. No entiendo nada de la vida en estos instantes y como, en cuestión de segundos o minutos, las personas que más amas, desaparecen o cambian sus prioridades. No sé si leas esto o tan siquiera muestres interés en lo que pienso o hago. Solo quiero expresar que, aunque sea productiva y tenga logros, por adentro, realmente, siento que me estoy muriendo de tristeza. Tengo tanta tristeza y no entiendo de donde sale tanta. Supongo que el amor que te tenía se convirtió en un dolor que me persigue en las noches. Quiero evitar a toda costa sentir el dolor y miedo que tengo ahorita mientras escribo este texto, pero necesito que salga de mi mente. Ya no te tengo, para platicar, reflexionar y soñar de la vida. Ya solo tengo mi soledad y fingir que todo está bien para que mi familia no sufra. No vivo, solo estoy, sumergida en dolor.

Y es que hace unos días aprendí que soy más resistente de lo que creía. Fui capaz de soportar una tina con hielo, algo que parece mundano, pero para mi fue incómodo. Y ahí estuve: 10 minutos, sin sentir el cuerpo, llorando, porque pensaba en ti y en tu ausencia.

Hoy iba a ir a tu casa, Juan, a regresar tus cosas, pero cuando vi el reloj en mi cuarto, el miedo me congeló y no me pude mover ni salir de casa. Tengo miedo de llegar a tu casa, encontrarte y ver en tus ojos que ya no hay ni un pedacito de nuestro amor. Creo que prefiero crearme esta fantasía entre palabras y canciones, pensando que algo dentro de ti sigue sintiendo amor hacia mí. Pero eso ya no está, se fue, desde el momento que decidiste borrarme de tu vida y ahora soy un recuerdo atormentado. Ya no quiero fingir que estoy bien… no lo estoy. Fueron casi 5 años de estar a tu lado, amar cada parte de tu cuerpo y mente, pero que, de un día para otro, decidió alejarse y decirme que no me quería ver. Tengo poca esperanza de la vida y que las cosas mejoren. Quizá, lo que realmente necesito en este duelo, ante tu pérdida, es ser transparente y que todos sepan.

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Julio 12, 2023

Tengo un nudo en la garganta, que en cada día que pasa, va creciendo, porque tiene todas las palabras que desearía compartirte pero que ya no tienen lugar para ser escuchadas. Por eso te escribo, los momentos que la tristeza me gana ante tu ausencia. Deseaba una vida a tu lado y eso desapareció de un día para otro. Veo tu vida a través de las fotos que compartes y me duele ver aquellas mujeres a las que enalteces por estar contigo. ¿Por qué no me platicabas de ellas cuando estuvimos juntos? ¿Por qué pareciera que estas mejor sin mi? Tal vez ese es mi gran dolor: tener que aceptar que no somos lo mejor para la persona que amamos y que están mejor sin nosotros. Tal vez por eso te deshiciste de mis cosas tan rápido, me borraste de tu vida y dejé de existir. Pero leo tus cartas, los correos y los mensajes que me enviabas y siempre me decías que tu vida sería vacía sin mi. Me hacías sentir amada, deseada, importante y protegida. Pero todo eso se desvaneció y ahora se queda en una memoria.

Ayer te soñé y amanecí triste. En mi sueño, regresabas a mi vida y era como si mi alma y pasión por vivir regresara a mi. Te abracé y besé como si solo existiera ese momento, ese momento en el que me quería quedar para siempre. Ambos fuimos tan felices, llenos de amor y alegría de reconectar. Pero fue solo un sueño y al despertar, tu ausencia fue un golpe a mi realidad. Extraño escucharte, sentir tu bondad y amor. Extraño nuestras conversaciones entre cada salida al café. Extraño aprender y admirar tu ser. Extraño verte jugar basquet o pasear con los perros. Extraño sentir tu cuerpo cerca del mio y que tus labios se sientan junto a los mios. No estaba lista para que el amor de mi vida se fuera y se quedara como un recuerdo.

Los medicamentos me tienen sedada pero mi cabeza me duele todos los días. Pienso en ti, quisiera poder invocar a tu alma y que quisiera visitarme por las noches. Estoy luchando contra esta depresión que es tan destructiva, porque no me quiero morir, Juan, pero acostumbrarme a vivir sin ti, no sé como sobrevivir eso. Dicen que el duelo no va lineal y que es una mezcla de días buenos y días difíciles. Es un hecho que mi duelo ha sido una montaña rusa, pero la tristeza está siempre ahí. No importa si corro todos los días, si ‘aparento’ que todo va bien, todo es un acto, porque tengo que convencerme que si puedo vivir sin ti. Pero no lo quiero y jamás lo voy a querer. Porque has sido el amor de mi vida y siempre vas a ocupar ese lugar.

#Youtube

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El último beso que le di a la persona a quien no habría dejado de besar en mi vida. Eso es poesía.

Serás esa poesía y abismo por el resto de mi vida. Hoy es 14 de junio del 2023 y cumplimos 1 mes desde que desapareciste de mi vida.

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28 mayo, 2023

Hoy me arreglé, me peiné y tuve tantas ganas de escribirte y compartirte la emoción de este gran logro, pero luego recordé que mi recuerdo te lastima y que por eso me borraste de todos lados, no pude evitar llorar en el camino de regreso a casa….

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Ayer te volví a pensar

26 de mayo del 2023

Y, ¿sabes? Recordé que fuiste parte de mi vida y, me dolió. Aún me duele recordar tu voz y tu sonrisa cuando me mirabas…. Me duele recordar que eras tú mi lugar seguro, y ya no estás. Escucho esa canción de caifanes que me recuerda a ti…. Y todavía te lloro.

Fue hasta hoy que agarré valor para dedicarte estas palabras y tener tan presente a alguien que queda como recuerdo. Van 12 días desde la última vez que hablamos, pero en mi mente ha sido una eternidad ya que estabas presente en cada esquina de mi vida: blancos, negros y grises. Ahora solo me queda este gran hueco, de todo lo que puse en ti y ahora me toca cuidar. No te voy a mentir, me he abandonado mucho en estos días y creo que ha sido parte de mi duelo. Esta falta de ti y la tristeza que tengo, me hace sentir cerca de ti y de todo lo bueno y hermoso que viví a tu lado. No quiero perder eso y que se quede en un recuerdo. No, todavía…

Además, no puedo guardar ni un gramo de odio o resentimiento hacia el hombre que amó cada demonio y ángel de mi vida. Pero ya no hay vuelta atrás. Sé el hombre que eres y que difícilmente volveré a saber de ti. Es por ello, que deseo con todo mi corazón, que en algún momento de tu vida te encuentres con estas palabras y que sepas que siempre habrá amor en mi corazón hacia ti. Gracias por todo lo que me permitiste crecer y refugiarme a tu lado. En su debido momento, lo prometo, te regresaré tus cosas. Pero por ahora, las quiero tener conmigo y revivir lo que tuvimos. Te sueño. Te recuerdo. Te lloro. Te añoro. Te amo. Te viví con toda mi alma y fue lo mejor que hice en mi vida. Gracias a este dolor, sé lo tan valioso que tuve a tu lado y lo libre que fui.

Con mucho cariño,

Marianna

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“When we are no longer able to change a situation, we are challenged to change ourselves.”

Viktor Frankl

By Marianna

Viktor Frankl was a neurologist, psychiatrist, and Holocaust survivor who is well known for his research and development of logotherapy. I learned about his experience and therapy when I read his book ‘Man’s Search for Meaning’ during my college years. Since this month has been difficult for my mental health, Viktor is a writer and survivor that I admire a lot.

Viktor Frankl was born in 1905 in Vienna. He studied medicine at The Vienna University and became interested in psychology while working in his clinics. During WWII, his wife, parents, and Frankl, were deported to concentration camps. For more details, I highly recommend his book as his narrative is admirable and he was the only one to survive. His experiences during this time influenced his therapeutic approach and had a great impact on the field of psychology.

After the war ended, he returned to Vienna and began creating his psychotherapy: Logotherapy. This therapy seeks to find a patient’s purpose in life, even while suffering, by focusing on values and reaching meaningful goals. Viktor’s research had a significant impact on psychology as he was one of the first health professionals to recognize the importance of meaning and purpose in life. His approach and theories have been applied to different psychological disorders and helped treat depression, anxiety, and addictions.

Frankl’s life and work serve as inspiration and reminder of the power of meaning and purpose and how this reflects the strength of the human spirit. As we continue to face challenges in our own lives, we can look to his teachings as a source of guidance.

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I did it, first 10km :)

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No todo es tan negro como imaginaba

20 de mayo del 2023

Estudié psicología, pero realmente entiendo el impacto de la profesión al ser una paciente. Desde que comenzó el 2023, he sido más constante en mi proceso terapéutico y lo veo reflejado en mis pensamientos. La vida sigue presentando los obstáculos de años anteriores: dinero, conflictos, sueños pausados… pero ahora tengo unos lentes que me permiten ver mejor la vida que tengo y la libertad que existe de elegir. En estas últimas semanas, he comprendido que yo siempre he tenido la libertad y el poder de elegir cómo enfrentarme a la vida, escogiendo un camino de agradecimiento y perdón. 

 Entiendo que la perfección es una ilusión pero que puedo ser disciplinada y crear algo muy bonito. Estoy en un proceso de eterno entendimiento y veo con mayor claridad la escala de grises. Hoy fue un día retador: de hacer las paces con los errores que he cometido y reconocer que soy capaz de salir adelante. No soy la más habilidosa al volante pero asumo la responsabilidad que conlleva un coche. Hoy también fue un día especial, porque ante todo, sentí paz y pude descansar. Disfruté de la calma en la mañana y cada acto que tuve que tomar, lo disfruté.

 Que curiosa es la vida, en la cual no tenemos control de lo que nos sucede y a pesar de ello, podemos levantarnos y elegir cómo actuar. Este año, me propuse correr un medio maratón y en ese proceso ando: disfrutando, y a veces padeciendo, mis carreras. Porque un proceso no se puede disfrutar todo el tiempo, simplemente lo vives un día a la vez y lo aceptas. Me gusta llegar a ese estado donde estoy aceptando lo que se presenta en mi vida. Porque cargar con el control, es una tortura.

 El amor es lo que me mantiene motivada estos días. Pensar en Juan hace que todo tenga sentido y que valga la pena. Ambos hemos enfrentado tantos retos en los últimos 4 años, y aunque no hemos logrado todo lo que queremos, nos tenemos y con toda la seguridad de mi ser puedo decir que nos amamos con una pasión que lo puede todo. Tener amor en mi vida, es lo que me permite levantarme todos los días.

 Gracias, querida Marianna, porque esta es una publicación imperfecta, pero es un recordatorio de que esta noche, te fuiste a dormir con mucho amor en tu corazón. Hoy termino el día sintiendo orgullo de quien soy y de lo que he dado a las personas que se cruzan en mi vida. Hoy eligo ir a dormir con paz, sabiendo que siempre he sido suficiente, soy capaz de hacer lo que me propongo y soy muy amada. Esto es todo lo que necesito

[suigenerismarch]

Seleccionar modo: Sobrevivir

Hoy fue un día muy demandante en el trabajo y apenas encuentro motivación para escribir esto. Porque, aunque usted también lo ha vivido, el trabajo en una oficina te absorbe por completo. Hoy sentí mucha demanda y un par de horas después de haberme desconectado de la laptop, me quedé en un viaje: ¿cuántos años llevas viviendo en modo supervivencia? porque es real que, desde que terminé los estudios, no he encontrado un balance o emoción de trabajar. Me pueden cancelar y decir que así es la vida y no queda de otra pero realmente creo que es alarmante toda la vida que dejamos en un trabajo que ya lo tenemos normalizado. ¿o tal vez seré yo que soy demasiado ‘sensible’ y percibo estas realidades de forma diferente? A mi responsabilidad y lado lógico le cuesta entender que descansar y disfrutar de mis tardes es igual de válido que cumplir en una empresa global.

Pero luego regresan estas inseguridades donde ‘tengo que demostrar mi valor al ser la más productiva’ lo cual se va acumulando en angustia y luego en un cansancio eterno. Debido a la pandemia y el tiempo que pasamos en cuarentena, mi consciencia normalizó aún más el trabajar varias horas. Pero ahora que este 2023 promete regresarnos a la ‘normalidad’, me cuesta el doble de energía hacer cosas que me hagan sentir bien a mi.

¿cómo me di cuenta de esto? uno de mis grandes referentes fue la comida. La comida ha sido en recurso que me ha permitido encontrar alivio ante tanta situación de alerta. Siempre ha sido así pero del último año para acá, siento que se ha extendido por completo a ser un mecanismo de alivio inmediato. Desafortunadamente, esto ha causado un ciclo de culpa en mi, donde, mi dismorfia me describe de formas desagradables y mi angustia se dispara.

Decidí escribir esta publicación como un diálogo conmigo misma donde me gustaría ser más compasiva conmigo y recordarme que estoy en modo supervivencia. Es por ello que necesito conectar otra vez con todas esas actividades que me hacen sentir viva y en conexión con mi alrededor porque la comida no puede seguir siendo lo único o las redes sociales. La inmediatez de estos 2 ha creado una adicta que se está enfrentando a sentir incomodidad otra vez. Yo creo que eso explicaría el dolor insoportable que sigue en mi espalda o el cansancio inexplicable que me llena en las mañanas.

Querido lector, sí es que hay alguien aquí que me lee, te agradezco y felicito por el logro que has alcanzado al completar esta lectura. La realidad es que creo, que al igual que yo, somos varios los que sentimos este modo supervivencia en nuestra mente, pero simplemente no encontramos las palabras para expresarlo con alguien más. Yo siento que al escribir textos como éste, una versión mía del futuro (mucho más compasiva espero) lea esto y se sienta acompañada otra vez. Porque somos varios buscando sobrevivir y es imposible tener esa vida perfecta que tantos medios nos han vendido. Seguiré aquí escribiendo mis elocuencias y aceptando esta incomodidad que me toca vivir. Porque vida perfecta no hay, solo me queda la gente que amo y lo que nuevo que pueda aprender.