#avenidas torrenciales
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Piqueto y las avenidas torrenciales [Video] | #EDUCACIÓNAMBIENTAL
Piqueto nos guía en un recorrido por los métodos de investigación y las medidas preventivas de los riesgos por avenidas e inundaciones, que tanta importancia tienen en nuestro país y en general en el Mundo.
El martillo Piqueto es un personaje de animación 3D creado por el IGME para la divulgación de las Ciencias de la Tierra.
Piqueto nos guía en un recorrido por los métodos de investigación y…
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Lluvias torrenciales inundas las calles de Puebla
Lluvias torrenciales inundas las calles de Puebla
De nuevo, las fuertes lluvias causaron estragos en Puebla capital luego de que algunas avenidas sufrieran inundaciones.
Además, los encharcamientos provocaron que automóviles se quedaran varados, así como peatones que iban por las zonas.
Por ejemplo, la calle 14 oriente quedó bajo el agua, cerca de Casa Aguayo, según reportes de los vecinos del lugar.
También en la colonia 10 de mayo se…
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La reducción de riesgos es cuidado de la vida
Aunque ya no ocupa espacio en los noticieros, avanza con determinación la atención de las afectaciones por el desbordamiento de la quebrada La Agudelo en El Retiro, que se presentó como consecuencia de las fuertes lluvias y que inundó buena parte del municipio y afectó las vías de acceso. Allí, con la declaratoria de calamidad pública y el trabajo del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres, se atiende la situación y se busca que no se repitan escenas como las vividas, que por fortuna no dejaron pérdidas humanas.
Tuve la ocasión de acompañar a esta comunidad, como lo hemos hecho en Dabeiba, Briceño, Giraldo, Ituango y otras poblaciones en las que la temporada de lluvias ha generado emergencias significativas. En todas ellas ha sido fundamental el trabajo en unidad, la coordinación de las autoridades locales y la población con las autoridades departamentales y los organismos de socorro. Hemos sumado capacidades y concertado actividades para superar el momento de emergencia, pero claramente nos falta mucho trabajo y muchos esfuerzos en materia de prevención y buenas prácticas para evitar que los riesgos se materialicen.
En El Retiro hablamos de afectaciones en 138 inmuebles, la mayoría viviendas, en distintos sectores como El Pino, Martín Pescador, Macedonia, Cantaleta y La Fe. En todos ellos se mantiene, además de las tareas de recuperación, el monitoreo y la coordinación interinstitucional, para evitar sorpresas como las de la madrugada del miércoles pasado. Pero es indispensable el compromiso de las comunidades, quienes habitan cerca de las laderas o de los afluentes, son quienes mejor conocen sus condiciones y pueden advertir sus cambios, además, son los primeros responsables de su protección y cuidado.
Sí, aunque suene demasiado obvio, hay que decir que reducir los riesgos es cuidar y proteger la vida. Y cada vez debe ser mayor nuestro empeño en esa dirección, como lo propuso el gobernador Aníbal Gaviria con la declaratoria de emergencia climática y la definición de acciones concretas para revertir los daños sobre el planeta que habitamos, para proteger nuestro entorno.
En eso no hay esfuerzos pequeños, todo suma y todo aporta. Lo mismo los comportamientos individuales y cotidianos que las grandes campañas. Por eso hacemos llamados constantes e invitaciones puntuales para ayudar a mejorar prácticas y conservar el planeta, proteger la biodiversidad y garantizar condiciones dignas de vida para todos.
Así, por ejemplo, se promueve la conformación de Consejos Regionales de Gestión del Riesgo de Desastres, como el que avanza en su materialización justamente con todos los municipios que hacen parte de la jurisdicción de Cornare, 23 del Oriente antioqueño, 2 del Nordeste y 1 del Magdalena Medio. Ellos acudieron al llamado del Dagran porque entendieron que UNIDOS es más fácil y que es más fácil proteger la vida que lamentar pérdidas.
Es la primera experiencia en el país que se pone en marcha precisamente para coordinar y articular acciones que permitan encaminar los esfuerzos a reducir las condiciones de riesgo y por esa vía proteger la vida de los habitantes, no de un municipio, sino de una subregión completa. Un ejemplo que debería ser replicado en otras zonas del departamento, porque las amenazas no conocen de fronteras. Por ejemplo, las cuencas sobrepasan los límites municipales, incluso los departamentales, lo mismo que el efecto de las avenidas torrenciales, los deslizamientos y las inundaciones.
Si se trabaja como región, desde la unidad, los esfuerzos serán mejor dirigidos y la protección de la vida más efectiva. Esta experiencia piloto en el Oriente, involucra acciones de respuesta, planeación, atención y prevención, así como de fortalecimiento de la capacidad instalada. Y aumentar capacidades es disminuir riesgos, reducir la probabilidad de que las amenazas se materialicen, proteger la vida. Ojalá el ejemplo cunda.
Luis Efe Suárez.
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La torrenciales lluvias dejaron provocaron inundaciones en la ciudad de Xalapa, capital del estado de Veracruz, donde calles, avenidas, barrios y hasta plazas comerciales quedaron bajo el agua.
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Viernes, 17 de agosto
Ayer finalmente no llovió. Pero esta tarde vuelven a amasarse nubarrones negros por el perímetro del cielo, y hace cierto bochorno. Son esos días de «quiero y no puedo» de agosto, en los que no sabe si llover, o llover donde estás tú, o no. Y cuanto más quieras que llueva menos es probable que ocurra (hay un tipejo ahí arriba dirigiendo los movimientos y operaciones... «El fulano asfixiado de ahí abajo necesita un chaparrón como agua de mayo, o mejor dicho de agosto... ¡A ese, ni una gota! ¡Y si tiene sed, polvorones!» Y la tormenta se desplaza hacia otro vecindario...).
Bueno. Seguiremos aguardando la descarga. Igual llega en el momento menos esperado. Yo lluvia en agosto, en Madrid, recuerdo que ha habido, en años pasados, con cierta frecuencia. De hecho tengo un poema que así se titula: «Lluvia en agosto». Se escribió en 2004, estando yo en el barrio de Peñagrande. Fue un verano atípico, suavecito —después del de 2003, que rompió todos los récores de abrasador calor que se recuerdan—, y tuvimos tres días seguidos, allá por la mitad del mes, de lluvia mansa y buena. No fueron tormentas, ni se trató de diluvios torrenciales; no, fue lluvia benéfica y tranquila, traslúcida y primaveral, con abundantes arcoíris y las calles llenas de ligeros paraguas de bolsillo, de alegres colores, que flotaban abiertos en el aire, sobre las cabezas de los felices transeúntes, como pétalos levemente mojados o alas de mariposa... Tengo una imagen concreta en la memoria, y es estar en la cafetería Manila, en el centro comercial La Vaguada, viendo repicar las pizpiretas gotas de lluvia por los amplios ventanales del establecimiento...
La cafetería Manila ya no existe; fue cerrada hará un par de años, y sustituida por un outlet de ropa...; con lo cual desapareció también la animada terraza, y se extinguió una significativa porción de vida y bullicio humanos, que animaban esa parte de la avenida Monforte de Lemos (en la salida que daba a esa vía se ubicaba —y debía de llevar décadas allí— la mencionada cafetería). Ahora esa entrada del recinto comercial está seca y limpia y barrida y muerta, y se ha convertido en un aséptico y estéril rincón urbano más, hostigado en verano por el inclemente sol y azotado en invierno por el gélido viento. Supongo que de lo que se trataba era precisamente de eso: «¿Pulular por la calle? ¿Reunirse? ¿Tomar café? ¿Hablar con los vecinos, saboreando una cañita, alrededor de una mesa? ¿FUMAR? ¡Ni lo sueñe! ¡Aquí se viene a comprar, oiga!»... Y otro espacio de interacción social de barrio que fenece...
El Manila no es que fuera nada del otro mundo. No hablamos de la Côte d’Azur, no sé si me explico. Pero me gustaba; e iba con frecuencia. Muchas eran las mañanas en las que me dejaba caer por allí, hacia las once, a tomarme un café y un pinchito... Los montaditos eran muy buenos. ¡Y la ensaladilla! La ensaladilla rusa era de primera... Aparte de que el personal, en su conjunto, era amable, servicial, simpático y eficiente... Esa cafetería tenía muchísimo movimiento; debían de trabajar unas ocho personas, como mínimo, a tiempo completo en el establecimiento. Digo ocho, pero es posible que fueran hasta doce. En el Manila daban menú del día, y a la hora de comer se llenaba hasta arriba. ¡Y eran muchos metros! Toda esa gente se quedó en la rúe, me imagino; no sé si con indemnizaciones... Sin trabajo se quedaron, desde luego; y buena parte del personal consistía en profesionales de los de antes..., «vieja escuela»; nada de jovencitos torpes e inexpertos, sin media idea de nada.
Todo pasa, y se muere... ¡Ríos son nuestras vidas, que van a parar al mar! Ya lo dijo hace siglos el gran Jorge Manrique. Por eso mismo existe el arte; por eso mismo existe la literatura: para recobrar, proustianamente, el tiempo y los mundos idos. Yo ahora recuperaré aquí, por si alguien se queda con las ganas de mojarse o remojarse, aquellos deliciosas duchas celestes agosteñas de hace en este momento, más o menos justamente, catorce años... Imagínenme en aquel fresquito cubículo de Peñagrande (descrito a todo esto con detalle en el largo prólogo de mi reciente antología Algo más épico sin duda), en el lado oeste de las afueras de Madrid, contemplando el lejano perfil empañado del viejo Guadarrama y deleitándome con el espectáculo de las finas gotas de lluvia que iban bañando los rosales en barbecho de los jardines de las casas circundantes; allí me verán, espero, si cierran los ojos tras leer estas líneas y hacen un pequeño esfuerzo...
LLUVIA EN AGOSTO
Cae la lluvia
sobre Madrid
como una mano mansa
cuyos dedos
tamborilearan
suavemente
sobre la tapa cerrada de un piano.
Y apenas
termino de escribir
las líneas que anteceden
cuando una impertinente musa
asoma de improviso la cabeza
y se permite señalar
que esa primera estrofa
es sencillamente surrealista.
¿Qué tendrá que ver
—me ha preguntado—
la lluvia con los dedos;
Madrid con la tapa de un piano?
No lo sé. Pero no creo
que a nadie le quite eso el sueño.
Voy a darle a la musa
un billete de veinte
y a pedirle que se marche a paseo.
Este momento es uno de esos
que no se pueden compartir.
• • •
«Vista cenital» de la cafetería Manila · Madrid, Nochebuena de 2013
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Intensa lluvia inunda vivienda en colonia Campesina
Una familia residente de la colonia Campesina, reportò la inundaciòn de su vivienda ubicada justo en la calle Corona Imperial y Avenida Zarco.
Vecinos de la colonia Campesina expresan se muestran preocupados, pues con las torrenciales lluvias que se registraron durante estos dìas, se ha detectado un socavòn en el patio de la familia afectada.
Uno de los moradores de la vivienda expresa que le preocupa su vivienda y lo que dentro de ella tienen, pues es fruto del trabajo de varios años.
Se puede ver que dentro de su casa hay casi metro y medio de altura de agua y aunque han tratado de resguardar lo más posible sus pertenencias, temen perderlo todo.
Debido a lo grave de la inundación el personal de Protecciòn Civil solicitó refuerzos, para realizar las maniobras necesarias para desazolvar el drenaje, causa de la inundación en la vivienda y a la vez despejar el agua de la misma.
Finalmente se les dio la recomendación a los vecinos que le den el mantenimiento necesario a las alcantarillas y evitar que se vuelvan a tapar.
La entrada Intensa lluvia inunda vivienda en colonia Campesina se publicó primero en .
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PROTECCIÓN CIVIL DE CUERNAVACA TRABAJA LAS 24 HORAS DEL DÍA *Continúa dando respuesta a reportes ciudadanos por incidencias provocadas por el temporal de lluvias Ante las torrenciales lluvias, personal de la Subsecretaría de Protección Civil de Cuernavaca (SPC) a cargo de Gonzalo Barquín Granados, trabaja de manera permanente las 24 horas del día, para brindar atención oportuna a la ciudadanía ante las inclemencias del tiempo. Dentro de estos auxilios se encuentra el reporte de árboles en riesgo de caer, en la calle Del Artista de la colonia La Pradera, donde los cuerpos de rescate y emergencias observaron tres árboles de las especies hule, jacaranda y ciruelo con demasiado follaje, por lo que se entrevistaron con vecinos del lugar para turnar dichos servicios a el área de protección ambiental. En la avenida Tecolote en Lomas de Atzingo, a las 09:45 se acudió a una denuncia por árbol en peligro de colapsar, siendo un árbol de Laurel, mismo que presentaba exceso de follaje, por lo que se recomienda la poda de reducción de copa y se turna a protección ambiental. Personal de la Subsecretaría de Protección Civil de Cuernavaca realizó el retiro de panales de avispas, el primero en una lámpara de las canchas de básquetbol de la Unidad Morelos, colonia Flores Magón y el segundo en la Avenida Vicente Guerrero, condominio maderas de la colonia Maravillas. De igual manera en la calle Leandro Valle de la colonia La Selva, se atendió el reporte de un registro de agua en mal estado, mismo que se encuentra dañado por lo que se acordonó el área y se solicitó el apoyo e intervención de SAPAC. La Subsecretaría de Protección Civil de Cuernavaca, continuará al pendiente de todos los llamados de apoyo de la población, a través del número de emergencias 7773121274, además de que se estarán realizando patrullajes de supervisión y prevención. https://www.instagram.com/p/CFm7j2CntiF/?igshid=8quxr79m4i1m
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Derrumbes de tierra, rocas y un árbol caído | Lluvias en Acapulco
] ACAPULCO. * 26 de agosto de 2020.
| Gobierno de Acapulco.
Derrumbes de tierra y rocas en dos puntos de la avenida Escénica y la caída de un árbol en Costa Azul, son las incidencias causadas por las lluvias registradas en Acapulco en las últimas horas.
La Coordinación General de Bomberos y Protección Civil (CGPCyB) de Acapulco, informó en su reporte matutino que este miércoles por efecto de la onda tropical número 31, sistema que recorrerá el sureste de México, se producirán lluvias puntuales torrenciales en Guerrero y puntuales intensas en Oaxaca, Chiapas, Veracruz y Puebla.
El titular de la CGPCyB, Cuauhtémoc Gayosso Pérez, explicó que arribó al puerto el subdirector de Emergencias de la Dirección General de Protección Civil del Gobierno Federal, Juan Manuel Arze Ortega, para coordinar labores de emergencias, ante el desarrollo ciclónico que se presenta actualmente en el Pacífico y que representa un riesgo para los estados de Oaxaca y Guerrero.
“Estamos trabajando de manera muy coordinada, muy estrecha con el Gobierno Federal y con el Gobierno Estatal, son acciones preventivas y vienen a sumarse a los esfuerzos que en un momento dado el municipio está implementando ya como protocolo", comentó el funcionario.
Gayosso
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𝗔𝗽𝗼𝘆𝗮 𝗔𝘆𝘂𝗻𝘁𝗮𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗗𝗲 𝗖𝗼́𝗿𝗱𝗼𝗯𝗮 𝗔 𝗙𝗮𝗺𝗶𝗹𝗶𝗮𝘀 𝗔𝗳𝗲𝗰𝘁𝗮𝗱𝗮𝘀 𝗣𝗼𝗿 𝗜𝗻𝘂𝗻𝗱𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 El Ayuntamiento de Córdoba a través de la Dirección de Desarrollo Social que dirige Mariana Solís Reyes y el departamento de Trabajo Social del DIF acudieron este día en apoyo de 4 familias que se vieron afectadas por las torrenciales lluvias de días pasados en una vecindad en el cruce de la calle 25 y avenida 33. Mariana Solís señaló que acudieron en apoyo de estas personas por indicaciones de la alcaldesa Leticia López Landero y del presidente del DIF Isaac Luz López, para llevarles colchones para reponer los que se les echaron a perder por el desbordamiento del río y que inundó las viviendas hasta por metro y medio de altura con aguas negras, así como una despensa y cono de huevo. Señaló Mariana Solís, que como parte de las indicaciones de la alcaldesa, también acudió personal de Obras Públicas para supervisar las afectaciones a una barda que se cayó por la presión del agua y que era la que protegía estas viviendas de este tipo de inundaciones, misma que verán la forma de reponer, ya con las indicaciones técnicas y de seguridad apropiada. https://www.instagram.com/p/CCrC60whdPa/?igshid=yt8vht37c8dk
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El verano en Guadalajara consiste de mañanas vaporosas, un sol descomunal al mediodía y tardes con diluvios torrenciales. El paisaje vespertino de junio, julio y agosto es un perpetuo gris que da fondo a la urbe. Charcos donde había baches, tráfico y las masas huyendo del agua pintan una escena de desastre, pero nos acostumbramos y unos tres muertos, perdón… meses después, vuelve la calma.
Viejos ríos que corrían por el valle de Atemajac renacen, desafiando toda estructura edificada encima de ellos. Los cerros reverdecen, el pasto salta de las banquetas, los baldíos son praderas de color esmeralda, vegetación por doquier. Lluvias gentiles la mayor parte del tiempo, de vez en cuando tormentas de proporciones bíblicas. Hay pretextos para juntarse, parar las actividades y ver resguardados, el regalo de la lluvia. Pero la vida bajo el libre mercado no tiene pausas y aunque la naturaleza mande otro mensaje seguimos caminando.
Es fácil para un melancólico de alma evocar recuerdos de tiempos más coloridos durante los meses de aguas. Las tardes eran de recalentar comida con los camaradas y preparar los tragos, conversando y mirando el río que se formaba allá en la avenida. Los pequeños se carcajeaban y algunos mayores la pasan realmente mal. La lluvia parecía recordar a la gente su condición de mortales.
Mi día empezaba a las 7 de la mañana con el sonido del aire entrecortado cuando los coches pasan a cierta velocidad. Del silencio al torbellino de autos y camiones en cuestión de minutos, la ciudad se había despertado. La calle que en las tardes se volvía río daba paso a la ruta 636, motores desgastados frenando para dar la parada y volviendo a acelerar, gente colgada de los tubos dispuesta a continuar la danza de lo cotidiano.
Agua en la cara, domar los cabellos de león, ponerse el traje de Godínez y bajar a desayunar. No había nada preparado, ni mamá para ayudar, era uno o nada. A veces despertaba el compañero de casa y con su buen ánimo habitual hacía sonar la música desde su cuarto, poniendo la fiesta en pleno amanecer de lunes.
Ya asomaba el sol. Leche, un pan tostado con mermelada y una manzana. Cerraba la puerta y arrancaba. Caminar al trabajo por calles que no eran las de la infancia, había que encontrar belleza en lo de siempre, como una cuadra arbolada de ficus y la noble luz de la mañana. Paso firme, recto hacia el estadio de Beisbol, doblar a la derecha y seguir hasta “La curva”. Llegando a Laureles tomar alguna ruta con dirección al Periférico.
Pensamientos de ansiedad, otros de hastío, pero un optimismo general, no tenía ni idea de cómo sería el día pero había que vivirlo uno por uno y todo iba a salir bien. Unas horas de servidumbre, intrigas y drama y en la tarde volver al hogar a recargar baterías. Bajar del camión y volver devorando una bolsa de tacos dorados del Pechugón bajo el inclemente sol veraniego de las 3.
A esa hora la casa solía estar sola, algunas veces llevaba compañía, hay que dejar algo a la imaginación. Había que ir a la escuela más tarde. No molestaba, sentía como que iba a una tardeada de esas inocentes de primaria. Nunca pude tomarme en serio la universidad, y hoy pago en abonos chiquitos esa actitud. Eran diez minutos de una marcha sublime bajo las nubes que empezaban a apoderarse del cielo zapopano.
Cada día era distinto, en todos había gente nueva, como si mi recién adquirida independencia transmitiera una energía positiva, una atracción que me ponía buena gente enfrente. Pasaban más cosas, buenas y malas, salían viajes improvisados a la playa, probé sustancias y me di el peor viaje de la vida durante media hora que pasó como diez. Los pilares de la dieta, pizza, tacos y cerveza.
Se fueron las lluvias y nos alcanzó otro ciclo escolar. Ya no podía seguir con media carrera cursada y seguía el drama en el trabajo porque habemos personas nacidas para crearlo. Ya no había depósito semanal para pagar la aventurita en la casa amarilla y tocaba la vuelta al hogar familiar, tragando a gotitas el orgullo y un buen trozo de mi autoestima. Muchas dudas sobre la carrera, el futuro, después llegó la gran depresión, el punto de quiebre para cuestionar todo lo que se hizo mal, pensamiento, palabra, obra y omisión.
Tal vez a todos les ha pasado por la mente la idea de que fueron mejores hace tiempo y que el crecer sólo decoloró una personalidad ambiciosa e imprudente que se salía más con la suya. Para mí el verano, los tres climas en un solo día, las lluvias, el verde que brotaba de las banquetas y las calles que se volvían ríos, cada vez que regresan, me recuerdan a ese personaje fanfarrón que desconocía el miedo. A la sensación de expectativa y genuina felicidad de cada viernes, cuando insertaba la tarjeta en el cajero y aparecían unos pesos más para agarrar la fiesta.
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QUE ES UN DIQUE Y PARA QUE SIRVE
El término se emplea para nombrar a la estructura que se construye con el objetivo de contener el agua, impidiendo su paso.
Los diques pueden construirse de manera perpendicular o paralela al curso de agua que se pretende contener. Puede ser natural o construido por el hombre; de tierra, mampostería de piedra, hormigón u otro material que pueden levantarse para prevenir inundaciones en zonas aledañas, encajonar un flujo de agua para que avance más rápido o resguardar un área de la acción de las olas.
DIQUE DE GAVION
Un dique de mampostería gavionada está formado por piedra y malla de alambre galvanizada de triple torsión formando jaulas. Esta tipología de dique, se suelen destinar para cauces en los que el lecho, está formado por material granular con poca coherente (margas, arcilla, arenas, …). Se convierte en un conjunto sólido, cuya base se adapta a los asientos diferenciales producidos, sin presentar ningún tipo de daño en el mismo dada su flexibilidad.
COMO SE REALIZAN LOS DIQUES GAVIONADOS
El replanteo de un dique bien sea del tipo que sea, siempre es la misma. Comprobar la altura útil en la cerrada y que haya espacio suficiente para la longitud de la balseta. Intentar que la ubicación del dique en el cauce, no esté en una alineación curva y que el terreno donde se vayan a encajar los estribos, no sea material de relleno, ni sea un mogote (montículo) que posteriormente se venga abajo.
Es necesario comprobar que la altura del futuro dique marcado en los planos del proyecto, cumpla con la altura real que existe entre la base del lecho del cauce y su cota mayor. Si la altura del cuerpo del dique es superior, será necesario modificar y reubicar unos metros aguas arriba o aguas abajo. En los casos en los que en dicha rambla no sea posible, como última solución, disminuir alguna de las plantas del dique (posteriormente será necesario comprobar en gabinete el caudal máximo de avenida de esa rambla para un dique menor). También es importante verificar que la longitud de la balseta se adecua al cauce de la rambla.
La excavación se inicia normalmente con el cajeo de la cimentación y muros laterales. A continuación, se comienza la excavación de los empotramientos laterales (llamadas “entras” coloquialmente), y la propia cimentación. Es común excavar las “entras” de las primeras plantas (debido a la altura) y luego la cimentación. La excavación de los empotramientos de las últimas plantas y aletas, se suelen ejecutar una vez realizadas las anteriores ya en gavión.
Lo más complicado es la ejecución de los retranqueos:
Como criterio general, la cimentación estará a 1,00 metro a partir del punto más bajo del lecho del cauce. Posteriormente se iniciará la excavación de la balseta y cajeo de los muros laterales. La excavación del contradique se ejecutará lo último.
En cuanto a la profundidad del empotramiento en los estribos, dependerá del terreno, pero como norma general, se excavarán unos 2,00 metros por planta. Si se trata de terreno de tránsito unos 1,50 metros, y si es un estrato rocoso con un metro es más que suficiente. La excavación de dichas “entras” es escalonada formando así las distintas banquetas que soportarán las diferentes plantas de los gaviones.
Cada planta medirá un metro menos (en longitud) que la que le precede, retranqueándose 80 cm. aguas abajo y 20 cm. aguas arriba. Después se procede a la excavación y cajeo de la balseta y muros laterales. Normalmente la profundidad de la balseta es de 60,00 cm. La cota superior de la balseta estará a nivel con la cota superior de la cimentación. La anchura de la balseta debe medir exactamente igual a la anchura de la cimentación.
Es necesario verificar la profundidad de la cimentación en varios puntos por si fuese necesario nivelar mejor. Es un error muy común dejar 60-80 cm. de profundidad, que para un ojo no muy acostumbrado pasa inadvertido. Además los tacos de los gaviones miden un metro de altura por lo que deben encajar perfectamente quedando estos “embebidos” en el terreno.
En ocasiones el nivel freático es elevado y surge empantanando la cimentación. En estos casos, será preciso bombearlo o encauzarlo mediante una zanja. Para poder trabajar, también es común “encachar” toda la base de la cimentación mediante piedras para que el terreno sea más estable y se pueda empezar a trabajar.
La excavación de los empotramientos de los estribos es algo más complicado que la cimentación. Un palista experimentado no debería tener ningún problema, pero como en todo siempre existen deficiencias. Por ello, se debe verificar primeramente la alineación de las “entras” una enfrentada a la otra. Geométricamente se comprobará la altura de las banquetas de cada planta (aprox. de un metro) y los retranqueos siendo esto muy importante. Esto es un error clásico que normalmente se corrige en el 60 por ciento de los diques.
Aguas abajo no se deben cometer muchos errores ya que es ahí donde los estribos empujan al terreno como consecuencia de la fuerza del agua. Hay que pensar que en un dique los esfuerzos soportados se reparten en la cimentación y en los estribos. Además de actuar como muros de gravedad, van “anclados” al terreno mediante estos estribos.
Lo primero que se ejecuta es la cimentación. Se colocan las mallas de gavión y después se van cosiendo con el material previamente colocado. Los gaviones en principio se deben coser como “tacos” por separado y también en conjunto.
Una vez formado el cimiento el cual debe quedar encajado en el terreno, se continúa con la primera planta. Esta es la única planta que no lleva retranqueo con respecto a la que le precede (la cimentación), pero sin empotramiento lateral. A partir de aquí es importante cuidar el aspecto de las caras vistas. Es necesario a la hora de ejecutar las diferentes plantas, hacer hincapié en que todos los tacos deben estar atirantados, alineados y aplomados, formando así geometrías regulares.
Una vez ejecutada la primera planta, se continuará con la segunda, tercera, y así hasta llegar a las aletas (últimos tacos de gavión). Todas llevan el mismo retranqueo y su correspondiente empotramiento. Normalmente, la última planta suele tener dos metros de longitud.
Para que, en época de aguas torrenciales, por las ramblas circule el agua y no se desborde y anegue los terrenos colindantes, he pensado poner una compuerta al dique para que tenga paso el agua con más facilidad y cuando se necesite retener el agua se pueda cerrar.
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SOLUCIONES AL PROBLEMA DEL AGUA
LA DESALOBRADORA
Los agricultores de El Ejido están de enhorabuena. Sobre todo, aquellos que tienen sus cultivos en las inmediaciones de la Balsa del Sapo. Una desalobradora evitará que el agua, que actualmente vierten al mar y que se filtra desde el acuífero, inunde sus cultivos. Tampoco se llenarán de agua salada ni sus viviendas ni los comercio.
Los proyectos para llevar agua desalada tanto a los grifos de los almerienses como a los cultivos de la provincia.
Se trata de dos proyectos de conducciones desde la desaladora de Carboneras, que suponen un importante avance de cara a la puesta a pleno rendimiento de la planta, y el de la desalobradora de la Balsa del Sapo, en el Campo de Dalías.
Esta actuación no solo beneficiará a los ejidenses, los agricultores de La Mojonera, Vícar y Roquetas de Mar también podrán aprovechar el agua desalada que sale de la Balsa del Sapo en Las Norias, partiendo de la infraestructura existente en el entorno de la Balsa del Sapo.
El objetivo del proyecto consiste en realizar las actuaciones necesarias que permitan garantizar el control de niveles de agua de la Balsa del Sapo. También el aprovechamiento de los excedentes de agua de la balsa para riego, previa desalobración de los mismos, y para enviarlos a las balsas de la comunidad de regantes Sol y Arena.
Igualmente se dirigirá el agua de rechazo y los posibles sobrantes por exceso de nivel de las balsas a la conducción que conectará con el emisario existente de la Romanilla. Sin duda uno de los objetivos más importantes es el mantenimiento del entorno ecológico creado en la zona. Y es que, aunque parezca obra de la naturaleza, la balsa surgió fruto de las extracciones de tierra que los agricultores necesitaban para sus cultivos, y de ahí surgió un espacio natural que está protegido debido a la diversidad de aves y plantas que existe.
El estudio de impacto ambiental para la desalobradora de la Balsa del Sapo ya lleva más de un año "a exposición pública".
Mientras tanto las zonas colindantes siguen anegándose cada vez que llueve a pesar de que las obras se declararon "urgentes" en dos ocasiones.
El único medio con el que se cuenta ahora para prevenir y paliar daños, son 4 bombas de agua, no dan abasto, no son una solución, son un remedio temporal, y poco eficiente, según se quejan los vecinos de la zona.
Dadas las abundantes y continuas lluvias, el humedal ha subido mucho su nivel y ello a pesar de que todavía no ha recibido toda el agua que se filtra desde la sierra, ya que está en una zona endorreica. La abundancia de agua hace peligrar aves, bienes, y lo más grave es que no se puede descartar peligro para las personas ante una posible avenida, ya que son más de 30 ramblas las que vierten sus aguas en la zona.
En los últimos años, la desalación del agua ha ido ganando protagonismo como método para abastecer a la población, especialmente, en zonas donde este recurso básico escasea. Gracias a la investigación y al desarrollo tecnológico, se ha avanzado mucho en el desarrollo de plantas para convertir el agua salada en agua potable.
Sin embargo, el agua dulce, es un bien escaso que se reduce a casi un 3 % del volumen total de agua del planeta. Si de este porcentaje excluimos el agua que se encuentra en fase sólida, solo el 0,26 % del agua del mundo es de baja salinidad y procede de ríos, lagos y acuíferos; esta agua es de la que disponemos de forma natural para nuestro consumo y el de otras especies. La desalación es una solución para solventar problemas de abastecimiento de agua en distintas regiones del mundo y una gran oportunidad para utilizar las vastas cantidades de agua salada del planeta.
La desalación puede aplicarse tanto a agua de mar como a agua salobre, dando lugar a dos tipos de desalación. Las desaladoras, por un lado, obtienen agua apta para el consumo humano mediante el tratamiento del agua de mar. Las plantas desalobradoras, por su parte, son desaladoras de aguas subterráneas salobres o de aguas superficiales salobres. La peculiaridad de la llamada agua salobre es que típicamente contiene menores niveles de iones cloruro y sodio que el agua de mar, pero una mayor concentración de otros iones como calcio, magnesio, sulfatos y bicarbonatos; siendo su salinidad mucho menor a la marina. Las aguas salobres presentan, por lo tanto, una salinidad intermedia entre el agua dulce y el agua del mar.
Dentro del proceso para potabilizar el agua salada, existen varios métodos, siendo la ósmosis inversa el más utilizado, principalmente porque en comparación con los procesos térmicos, requiere menor consumo de energía y menor espacio físico.
Su funcionamiento consiste en hacer pasar el agua salada por una membrana semipermeable, que permite el paso de moléculas de agua mientras que rechaza las especies iónicas disueltas, produciendo una corriente prácticamente libre de sales que se denomina permeado y una corriente que contiene una mayor concentración de sales (salmuera) que cuenta con aquellas sales que han sido rechazadas por la membrana de ósmosis inversa, esta corriente suele denominarse rechazo.
La presión necesaria para que ocurra este proceso depende de la cantidad de sales disueltas y el porcentaje de recuperación que se quiera obtener. Por ejemplo, la presión de operación para desalar agua de mar es de 60 bar (o superior) mientras que la presión de operación de una desalobradora puede estar por el orden de los 21 bar, dependiendo de la salinidad de la alimentación y del porcentaje de recuperación deseado.
Por esta particularidad, las plantas desalobradoras consumen una menor cantidad de energía que las plantas desaladoras de agua de mar. Por eso la energía que consuman es energía renovable de las placas fotovoltaicas instaladas en la misma planta.
LAS COMPUERTAS EN LOS DIQUES
El proyecto incluye, además de la propia planta desalobradora, medidas destinadas a garantizar el control del bombeo de la Balsa del Sapo con el fin de garantizar un mantenimiento sostenible de los niveles, la elevación del agua tratada a las balsas de la comunidad de regantes mediante las conducciones existentes y la evacuación del agua al mar mediante un emisario marino que ya existe.
En la época de sequía, para retener el agua en las ramblas, se construirán diques gavionados con compuertas, para que el agua se filtre y rellene los acuíferos. Y en tiempo de lluvias torrenciales, para que no se desborden las ramblas por los laterales e inunde todo lo de alrededor, se abrirían las compuertas.
COLECTORES PERMEABLES
Un túnel de desagüe para la Balsa del Sapo solucionará el problema.
La construcción de este túnel de desagüe de la Balsa del Sapo de gran envergadura sería la única solución definitiva para evitar las inundaciones en el entorno de este humedal.
Esos colectores, en vez de ser de PVC, se realizarán con un material poroso o con perforaciones, para que cuando pase el agua se vaya filtrando, poco a poco, poder rellenar los acuíferos inferiores de forma natural.
ZONA DE OCIO
Para que la gente de los alrededores y las personas que vayan a visitar la zona, que disfrute de la fauna y flora de la Balsa del Sapo, se realizará un merendero con vistas al humedal y se pondrán barcas de recreo para ver la naturaleza de los alrededores.
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La reducción de riesgos es cuidado de la vida
Aunque ya no ocupa espacio en los noticieros, avanza con determinación la atención de las afectaciones por el desbordamiento de la quebrada La Agudelo en El Retiro, que se presentó como consecuencia de las fuertes lluvias y que inundó buena parte del municipio y afectó las vías de acceso. Allí, con la declaratoria de calamidad pública y el trabajo del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres, se atiende la situación y se busca que no se repitan escenas como las vividas, que por fortuna no dejaron pérdidas humanas.
Tuve la ocasión de acompañar a esta comunidad, como lo hemos hecho en Dabeiba, Briceño, Giraldo, Ituango y otras poblaciones en las que la temporada de lluvias ha generado emergencias significativas. En todas ellas ha sido fundamental el trabajo en unidad, la coordinación de las autoridades locales y la población con las autoridades departamentales y los organismos de socorro. Hemos sumado capacidades y concertado actividades para superar el momento de emergencia, pero claramente nos falta mucho trabajo y muchos esfuerzos en materia de prevención y buenas prácticas para evitar que los riesgos se materialicen.
En El Retiro hablamos de afectaciones en 138 inmuebles, la mayoría viviendas, en distintos sectores como El Pino, Martín Pescador, Macedonia, Cantaleta y La Fe. En todos ellos se mantiene, además de las tareas de recuperación, el monitoreo y la coordinación interinstitucional, para evitar sorpresas como las de la madrugada del miércoles pasado. Pero es indispensable el compromiso de las comunidades, quienes habitan cerca de las laderas o de los afluentes, son quienes mejor conocen sus condiciones y pueden advertir sus cambios, además, son los primeros responsables de su protección y cuidado.
Sí, aunque suene demasiado obvio, hay que decir que reducir los riesgos es cuidar y proteger la vida. Y cada vez debe ser mayor nuestro empeño en esa dirección, como lo propuso el gobernador Aníbal Gaviria con la declaratoria de emergencia climática y la definición de acciones concretas para revertir los daños sobre el planeta que habitamos, para proteger nuestro entorno.
En eso no hay esfuerzos pequeños, todo suma y todo aporta. Lo mismo los comportamientos individuales y cotidianos que las grandes campañas. Por eso hacemos llamados constantes e invitaciones puntuales para ayudar a mejorar prácticas y conservar el planeta, proteger la biodiversidad y garantizar condiciones dignas de vida para todos.
Así, por ejemplo, se promueve la conformación de Consejos Regionales de Gestión del Riesgo de Desastres, como el que avanza en su materialización justamente en el Oriente antioqueño. Allí las 26 alcaldías y Cornare acudieron al llamado del Dagran porque entendieron que UNIDOS es más fácil y que es más fácil proteger la vida que lamentar pérdidas.
Es la primera experiencia en el país que se pone en marcha precisamente para coordinar y articular acciones que permitan encaminar los esfuerzos a reducir las condiciones de riesgo y por esa vía proteger la vida de los habitantes, no de un municipio, sino de una subregión completa. Un ejemplo que debería ser replicado en otras zonas del departamento, porque las amenazas no conocen de fronteras. Por ejemplo, las cuencas sobrepasan los límites municipales, incluso los departamentales, lo mismo que el efecto de las avenidas torrenciales, los deslizamientos y las inundaciones.
Si se trabaja como región, desde la unidad, los esfuerzos serán mejor dirigidos y la protección de la vida más efectiva. Esta experiencia piloto en el Oriente, involucra acciones de respuesta, planeación, atención y prevención, así como de fortalecimiento de la capacidad instalada. Y aumentar capacidades es disminuir riesgos, reducir la probabilidad de que las amenazas se materialicen, proteger la vida. Ojalá el ejemplo cunda.
Luis Efe Suárez.
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Un muerto en Tafalla por unas lluvias torrenciales que triplicaron lo previsto
Graves daños en varias localidades navarras por la repentina avenida del río Cidacos
http://www.miblogdenoticias1409.com/2019/07/un-muerto-en-tafalla-por-unas-lluvias.html#more
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Festival Nuestro 2019: eclecticismo, género y ansias de renovación
Si hubo tres factores que destacaron durante esta nueva edición del Festival Nuestro fueron el eclecticismo sonoro, la fuerte presencia del inmenso talento femenino local y regional y las sinceras intenciones de renovación. Crónica de una jornada en la que el tradicional festival argentino se animó a (mucho) más.
Mientras amenaza de lluvias torrenciales parecía muy lejana y la humedad se adueñaba de una jornada que prometía ser extensa e intensa, las puertas de Tecnópolis se abrieron para dar comienzo a una nueva edición del Festival Nuestro. Uno de los festivales más importantes del país, que logró en estos años volver a consolidarse y que probó encuentrarse en un muy sano y valiente proceso de renovación.
Dividido en tres escenarios principales (Afuera, Adentro e Íntimo), el Festival Nuestro 2019 se puso en marcha con un breve y poderoso show bajo techo de Luceros El Ojo Daltónico. Exponentes centrales del rock barrial post-Cromañon, agitaron a sus fanáticos con fuego guitarrero y una base cancionera muy fuerte que gira alrededor de temáticas como la familia, el barrio, el desamor, las traiciones y la resiliencia. Bajo un radiante sol y en una atmósfera muy relajada, Ainda Dúo –una de esas bandas imposibles de catalogar por su versatilidad– volvió a demostrar que merece horario central: su flow cálido, entre blusero y jazzero, inundó la avenida central del predio y tuvo en el magnetismo de Esmeralda Escalante el liderazgo perfecto; siempre navegando bajo una pátina contundente de indie pop y psicodelia, animándose también por momentos al funk clásico desde un bajo muy virtuoso y al rockabilly amable desde la velocidad en las seis cuerdas de Yago Escrivá.
La atención no tardó en dirigirse una vez más al micro-estadio de Tecnópolis, ya que Jeites volvió a renovar esa sana costumbre de aumentar las revoluciones al máximo a pura alegría, mestizaje sonoro y desprejuicio. La vibra festivalera se instaló de manera definitiva, todo al ritmo del más puro ska-reggae, quedando la propuesta potenciada por el muy buen sonido que ofreció el escenario techado. La huella de Latinoamérica quedó por completo desandada durante una ecléctica presentación, jugando los argentinos por momentos con el sonido rioplatense, el folklore y el carnavalito.
Luego de superar algunos problemas en el sonido que retrasaron el inicio de su show en el Escenario Afuera, los Militantes del Clímax volvieron a probarse como un número clave para cualquier festival. Acompañados por muchísimas personas, pusieron la rueda en marcha con su cruza entre la crudeza del arrabal, el hip hop de la vieja escuela y la black music originaria. Emergiendo de las profundidades de la tierra, atacando desde la realidad del barrio al injusto sistema, estos exponentes de la música urbana argentina se unieron al público en una celebración por completo abierta y liberadora. Una reivindicación de la fiesta en el barrio, de lo real por sobre lo artificial (“Se llama diversión, no, no está en la televisión, se encuentra en las esquinas o trepándose a un tablón”), que vio colisionar de frente a la velocidad del funk con el ritmo más cadencioso del hip hop originario.
Bien pegada a la fiesta guitarrera de Cruzando El Charco, la imponente Francisca Valenzuela mostró sus dotes de estrella pop bajo un cielo que comenzaba a cubrirse. Fue muy extraño que la cantante chilena no tuviese tanto público, quedando en evidencia que muchas veces la agenda de los medios especializados y la de los espectadores no suele ser la misma. Magnética, carismática y por completo electrizante, Valenzuela trajo a nuestro país una intrigante combinación de latin pop, rock suave, funk futurista y hip hop 2.0, siendo su muy ajustada banda capaz de alternar sin problemas entre la balada pop clásica y la distorsión total de géneros más potentes.
No hay mucho más que se pueda decir respecto de Estelares. Sus más de veinte años de brillante carrera los avalan, así como también lo hace su oficio, talento y maleabilidad artística. Características que los convierten en número central de cualquier festival sin importar ni el día ni el horario. Ante una multitud, los oriundos de La Plata sacaron a relucir todo su poder cancionero, construyendo un setlist acelerado que no obvió ningún clásico. Fueron de la partida“Rimbaud”, “Ella Dijo” junto a Edu Schmidt de Árbol al violín, “Alas Rotas”, “Es El Amor”, “Aire”, “Un Día Perfecto” y “El Corazón Sobre Todo”, además del estreno en vivo de su nuevo tema, “Ríos de Lava”. Dicen que Frank Sinatra está en él: Manuel Moretti, quien a pura bohemia es junto a Andrés Calamaro el último crooner del rock en español, lideró la carga conmoviendo tanto en la potencia como en la intimidad, montado sobre el impecable andar de una banda siempre precisa y haciendo de cada una de las experiencias vividas una canción difícil de olvidar.
Con el panorama más tranquilo en el exterior, mientras el Chango Spasiuk rescataba y renovaba nuestra más profunda tradición musical, Monsieur Periné trajo su fusión experimental al corazón del Festival Nuestro. La políglota Catalina García hipnotizó a todos con la profundidad, variedad y suavidad de su voz, siendo su magistral ensamble el que desarrolló una extraña y funcional combinación entre la sonoridad melódica africana y las raíces continentales tanto de América Latina como de Europa.
Reflejando la imagen inversa, Juana Molina mostró sus anchas espaldas, siempre flanqueada por la precisión y vertiginosidad de Diego López de Arcaute en la batería y la profundidad de Odín Schwartz en bajo y teclados. Logrando sintetizar sus variados y complejos universos sonoros, Juana mostró cuales son los ingredientes perfectos para el crimen: espiritismo rock, folklore 2.0, EDM experimental, post-punk, thrash-pop, funk, rock de garage y mucha new wave británica, todo ello bajo su muy brumosa aura y una estructura sonora de elite.
El larguísimo show que dio Las Pastillas del Abuelo los encontró –como siempre– arropados por un estadio repleto hasta la última butaca, sacando también ellos a relucir el innegable poder de la canción en una clave mucho más rockera y blusera. A bordo de su clásica crudeza guitarrera (sazonada con chacarera, folklore y murga), sin esquivarle nunca a la dura realidad que azota a nuestro país, la banda del Piti Fernández enardeció a las masas a puro frenetismo, navegó entre el nostálgico océano de banderas e hizo saltar y cantar a todos como si no hubiese mañana.
Lo hecho por Nathy Peluso sin dudas merece un análisis aparte, siendo Dancing Mood la siguiente banda en este sinuoso recorrido: el cierre del Escenario Adentro estuvo en manos de la máquina del beat local, quedando el aire tomado por severas e imbatibles dosis de funk, ska jamaiquino, rocksteady y reggae roots. Liderada por el legendario Hugo Lobo en la trompeta, la más grande big band nacional y popular dejó en claro que desde la técnica más depurada también se puede hacer latir el corazón de lo popular.
Frente a un sinfín de pañuelos verdes, Miss Bolivia volvió a interpelar a sus todos los presentes desde la lucha: utilizando el cuerpo y su filosa lengua como armas contra el prejuicio y el machismo imperante, la cantante hizo hervir el Escenario Afuera con una lista preparada para matar a pura cumbia y reggaetón. Luego de que Dak1llah llevase adelante un muy concurrido show a puro freestyle e improvisación en el Escenario Íntimo, el grand finale quedó en manos de El Kuelgue: número más que probado, el conjunto de Julián Kartún es capaz de rondar el reggae (“Circunvalación”), dialogar íntimamente con el pop clásico (“En Avenidas”) y abrazar también a otros géneros lindantes entre sí como el hip hop, el rap y el jazz. Muchísima gente acompañó el número final del Festival Nuestro 2019, confirmando el exponencial crecimiento de una banda que ha sabido cómo adaptarse a los variados gustos de su creciente base de fanáticos y que no deja de mostrar una saludable vocación experimental a la hora de crear.
En pleno debate por el necesario reconocimiento hacia las artistas mujeres en la escena musical emergente y mainstream y también cuando se discute la poca creatividad que tienen los organizadores de los principales festivales nacionales a la hora de conformar sus grillas, el Festival Nuestro se plantó con total firmeza y dejó en claro que su intención es progresar de forma genuina. Género, eclecticismo sonoro y ansias de renovación, las tres características de una propuesta que lanzó todos los papeles al aire con un inesperado y elogiable golpe sobre la mesa.
Por Rodrigo López Vázquez
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#Venezuela Torrenciales lluvias afectó varios sectores de la ciudad de Ojeda en la costa Oriental del lago
#Venezuela Torrenciales lluvias afectó varios sectores de la ciudad de Ojeda en la costa Oriental del lago
Torrencial aguacero afectó varios sectores de Ciudad Ojeda, en la Costa Oriental del Lago, dejando varias calles y avenidas completamente anegadas, hasta el momento no se reportan daños materiales ni víctimas.
Muchas avenidas de Ciudad Ojeda están colapsadas como consecuencia de las fuertes lluvias en la localidad, las avenidas Bolívar y Vargas lucen como ríos tras la intensa precipitación.
El…
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