EL PP HACIENDO EL RIDICULO EN EUROPA | El PP haciendo el ridículo más espantoso en Europa, a esta parlamentaria la expulsan por buscar su minuto de gloria.
Son un lastre para este país y una vergüenza en el extranjero. Video publicado por Activista
“Y pasas, y siento que el aire se estremece, y todo yo, inmóvil, soy deseo y angustia y necesidad de ti.
¿Por qué eres tan hermosa? ¿Te acunaron en versos? ¿Leche de flor bebiste? ¿Quién te modelo sobre mi corazón, quién te tatuó sobre mis ojos?
Apareces en mi vida, de repente, como coronando un ideal, como concretando a todas las mujeres que he deseado, y no puedo dejarte ir, ni puedo detenerte. Te llamo, sí, te llamo y no me escuchas. Desde mi corazón te llamo; arrojo mis ojos a tu paso; trato de alcanzarte con mi silencio, inútilmente. Siempre ha sido ligera y fugitiva, ajena e imposible.
Pero no puedes dejar de ser mía en ese instante en que pasas. Te poseo con todos mis anhelos, con todos mis sueños, y basta la fugacidad de tu presencia para hacerte mía de mi carne, propiedad de mi alma, habitante de mi dolor y mi esperanza.
Te quiero. pero te quiero y te deseo; y eres inquietud, dolor, angustia; y muero y nazco todos los días para verte pasar. Y siempre eres la misma, espejismo para mi corazón, distancia y lejanía para mi sed de ti.
No sé hasta donde me lleve este camino, este difícil camino de tu espera. No sé hasta donde te persigue mi sangre, hasta donde se prolongue tu encuentro. Si yo pudiera rogar, te rogaría, si pudiera pedir te pediría; te pediría que pronto, que vinieses a mí ahora mismo, que te necesito, que esto es urgente, pero me he acostumbrado a aguardarte en silencio, deseándote, deseándote nomás; y ahí en el fondo de mi alma, te espero, íntimamente, confío en ti, creo en ti -porque creo en mi amor, porque sé que no hay amor baldío-, y estoy como si esperara a madurar una fruta, como si esperara que callese un beso, como si esperara florecer un sueño.
Porque te quiero, linda, porque te quiero, amor. Porque eres distinta a todas las mujeres, en tu cuerpo, en tu andar, en lo que eres para mis ojos, en lo que sugieres a mi corazón. Quisiera estar junto a ti, para decir sobre tu oído: te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, y repetirlo constantemente, infinitamente, hasta que te cansarás tú de oírlo, pero no yo pronunciarlo. ¿Cómo marcártelo en un brazo? ¿Cómo sellártelo en la frente? ¿Cómo grabártelo en el corazón?
Escúchalo otra vez: te quiero. Y déjame soñar contigo indefinidamente… ¡Si supieras como ya eres mía hasta mi muerte!