Hablando en serio, usted es mi amor y es solo por ser usted que le voy a amar, sin importarme su humor cambiante, su sonrisa parca, sus manos grandes y tostadas al sol, su mirada de hielo, en sus horas grises y sus días malos... Le voy a entregar mi corazón, le pondré un lugar en mi alma y estará en mi pensamiento.
"Não me pede pra ir devagar, aos poucos. Não me pede pra colocar só um pé e ficar com o outro atrás pra manter o equilíbrio. Não me pede pra eu me entregar pela metade. Não me pede pra não te mostrar as minhas infantilidades, chatices, loucuras e traumas. Não me pede pra não te mostrar todos meus gostos e desgostos. Não me pede pra ser outra coisa a não ser intensidade. Não me impede de ser eu. Me deixa ficar e te mostrar que quem sabe, talvez, por acaso, sem querer, no meio dessa loucura toda há um lugar pra eu e você."
Dar también es recibir. Todo debe estar en equilibrio para que las relaciones sean sanas. Si das más de lo que recibes, quizás sentirás el peso de las consecuencias, pero al final de cuentas, siempre habrás ganado, es tu esencia.
Saborear o bom, mas aqui e ali enfrentar um ruim. Suportar sem se submeter, aceitar sem se humilhar, entregar-se sem renunciar a si mesmo e à possível dignidade.
Há ocasiões em que o ser humano resiste à dor e morre sem se entregar. Mas para todo mundo existe algo intolerável – algo para o qual não consegue nem olhar. Nada a ver com coragem ou covardia. Se você cai num precipício não é covardia agarrar-se a uma corda. Se mergulha e depois aflora à superfície da água, não é covardia encher os pulmões de ar. É mero instinto, uma coisa que não há como reprimir.
Entregue tudo nas mãos de Deus e acalma o seu coração. Deixa o Senhor cuidar de tudo, Ele tem poder para fazer infinitamente mais daquilo que pedimos e pensamos. Vai dar tudo certo, confie que Ele tem o melhor para sua vida. Vai dormir tranquilo que Deus está cuidando de tudo...
"Mi versión enamorada es tan sincera, que me nace entregar, cuidar y desbordar cursilerías, que sé yo.
Y en un mundo tan caótico,
Sigo creyendo (aún con el corazón roto) en el amor lindo, a la antigua y transparente justo por la manera en la que yo amo.
Sigo creyendo que el amor existe, que la lealtad también existe.
Lo que casi no existe son personas capaces de asumir
ese compromiso.
Yo no pido nada extraordinario, nada especial,
solo un amor de verdad, leal y sin mentiras, capaz de superar juntos los obstáculos, las barreras que nos traza la vida.
un amor intenso, un amor cursi y per•verso, un amor mutuo, que asuma el compromiso y sostenga la decisión de amarnos a pesar de las adversidades, de elegirnos a pesar de nuestras diferencias, de no soltarnos a pesar de las tormentas, de seguir juntos...
Cuando actúas siempre desde el amor, nadie puede arrebatarte nada. Las veces que ayudaste, regalaste, cuidaste o hiciste algo desde el fondo de tu corazón, todo eso se queda contigo. Te conviertes en todo el amor que das y eso nadie lo cambia.