#No nos callamos más
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La cacería de brujas o #TERFlist
Ayer en Twitter nos encontramos con la desagradable sorpresa de que dos usuarios transactivistas habían recolectado todas las cuentas que consideraban “transfóbicas”, creado un bot que sigue recolectando datos (van más de 42.000 cuentas de TODO el mundo) y hecho pública esa lista negra en la plataforma…
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#feminismo#feminismo radical#feminista#inqueersición#misoginia queer#No nos callamos más#queer#RADFEM#secta queer#sex not gender#stopcensuraqueer#stopsectaqueer#teoría queer
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Ya somos 5.000 jartit@s y es mucho, y es bueno serlo, porque no nos conformamos con cualquier cosa, no. Podríamos ser más, pero algunas personas se confundieron con lo que creían había aquí y no había lugar para ellos, por lo cual, pienso que estamos los que de verdad no vamos detrás del rebaño, los que no nos rendimos y los que buscamos algo más fuera de lo que hay. Vendrán más, que pasen, al fondo queda mucho sitio aún, y espero tener más participación de todos y hacer de los que no nos callamos, de los que no miramos para otro lado un rincón donde poder ser "algo más y mejor".¡Gracias a tod@s! AnA Orny
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Usted será por siempre la aventura jamás contada,
esa que se ahogaba en mi boca cuando me besaba,
el nombre jamás pronunciado por mis labios frente a los demás,
el hombre prohibido que disfrutó a escondidas mi cuerpo.
Usted fue quien despertó mi lujuriª con una sola mirada,
quien me conoció por completo,
quien atrapó con sus dedos y su boca la humedad entre mis piernas.
Nunca nos faltaron las caricias;
las ganas,
los besos desesperados,
los gemidºs que callamos cuando nos mordiamos los labios.
Fuimos tan nuestros,
tan de otros,
tan clandestinºs,
el secreto que se esfumaba en las madrugadas,
el amanecer con olor a culpa...
del pecado cometido.
Somos dos cuerpos tibios que se quedaron con ganas,
de un orgasmº más,
de un gemidº más,
de una noche más.
—-☮️
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Claro muchachos, es que no la vemos, es obvio que que los jueces tengan que usar la peluca, el matillo ese y la toga va a hacer que la pobreza infantil disminuya.
Igual pasa que no lo estamos dejando gobernar y nos callamos los últimos 40 años, así que la derogación de la ley de fuego o la restricción a las reuniones de más de tres personas en un lugar público va a ser algo bueno también, totalmente democrático, aparte solo paso una semana y no es tan malo lo que hizo, no?
Cierto?
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No me queda nada, sólo el recuerdo.
Quizás, es por eso que dejo que la imaginación revolotee. Que mis manos te pinten, como si de un cuadro se tratara.
Nunca pudimos sacarnos una foto. Plasmar, casi inmortal, todo lo tangible de aquello que no nos decíamos. Pero rebusco entre los cajones. Allí, en lo profundo del alma. Hago lugar, saco las cajas polvorientas. Y aunque las palabras no resbalan, ni salen a borbotones de entre las sombras, te encuentro.
Puedo sentirte, acá conmigo. Dicen que a veces la mente bloquea las memorias que aún desgarran para mitigar el dolor. Que nos engañamos, al menos por un ratito, para que los agujeros negros no nos consuman.
Yo nunca supe engañarme, Hanji. Creo que vos podés verlo más claro que nadie. Te reías de mi hablar crudo, y me susurrabas al oído, y limabas mis asperezas— tal vez, con el afán de hacerme parecer más suave. Hacerme pensar que este corazón viejo y cansado tenía un espacio pequeño dentro del tuyo.
No me arrepiento, igualmente. De las palabras que callamos, o de no tener fotos tuyas, o de nunca haber sido digno de tu amor. Las fotos envejecen, se destiñen bajo el arrullo del tiempo. Pero yo puedo moldearte bajo mis palmas, casi como si te conociera de memoria. Si cierro los ojos, puedo bordear tus recovecos, llenarte de color.
Es que eso eras, Hanji. Una explosión del color más vivo y vibrante. El brillo de los fuegos artificiales, el neón del atardecer. Eras tu melena alocada en el viento, encrespada como el vaivén de las olas. Los lunares que salpicaban tu barbilla; casi constelaciones lejanas, inconexas.
A la noche, cuando las luces se apagan, tu imagen se me aparece de entre los rincones. Al principio dolía, un dolor tan demoledor que calaba hasta los huesos. Ahora, creo que duele menos. O que aprendí a vivir con el dolor. Como cuando aceptamos que la luna tiene cráteres, huecos, oscuridad incluso bajo la luz.
Quizás, es porque cuando te veo, te veo sonriendo. No hay rastros de guerra, ni de pérdida, ni de lo poco que nos quedó de humanidad. Vestís de blanco, con coronas de "no-me-olvides" en el pelo. El sol te acaricia, igual de suave que como yo hubiese querido hacerlo. Y me decís: "suficiente, Levi". "Ya pasó, Levi".
Y entonces te creo.
Me siento con vos, y permito que la eternidad flote entre nosotros. Te preparo un té con mis mejores hierbas, observo atento cómo el rubor te arde en la piel. Me digo que ya no importan; el dolor que demuele, los secretos bajo llave, las fotos arrugadas, o las que no pudimos conservar.
Si cierro los ojos, puedo delimitar tus facciones. Las líneas rectas de tu nariz, el arco de tus pestañas. Puedo inhalar el calor de tu cuerpo, hablarle a las estrellas.
Y hay semanas, o meses, en los que quisiera volver atrás, gritarte que no te vayas, que sin vos el mundo es una imagen en blanco y negro. Pero, ¿sabés, Hanji? Hoy, que puedo grabarte en acuarelas, entiendo que con eso me basta.
Por eso, te hago un lugar en mi mesa, y en todas las grietas del alma. Limpio la casa para recibirte, desempolvo las cajas. Ya no hago preguntas, aún convencido de que no tengo las respuestas. Dejo que tu voz cante, y entreteja en mil paisajes las maravillas que siempre supiste tararear. Te escucho, como un niño desbordado de ilusión. Y en mi alocado desvelo, te guardo conmigo; en cada parpadeo, en cada amanecer, en cada latido.
Porque estás ahí, todavía. Lo sé, Hanji. Un día, los velos del olvido van a llevarme a mí también. Las galaxias van a tragarme, como polvo de estrellas, y voy a tener todo el aire en el espacio para pensar en cada madrugada en la que fallé.
Pero no me arrepiento. De nada. Qué extraño, ¿no? Si pudiera, te juro, lo haría casi todo de nuevo, así tal cual fue. Las heridas que nos vendamos, el reír a carcajadas, haber sido cómplices en cada pedacito de vida. No lo cambiaría. Y menos aún, si es que pudieran asegurarme que voy a cruzarme con tu sonrisa otra vez. Como cuando me susurrabas al oído. Como cuando mis sueños te pintan.
Entonces me duermo, incluso estando despierto. Cierro los ojos, y mi mente me arrastra hasta ese lugar en donde todo está en pausa— un claro en el bosque, la casa que construimos. Me contás, como siempre, que Erwin está más tranquilo. Que mi mamá te adora. Que Eren y Sasha no paran de pelearse.
Y sonrío. De esas sonrisas que sólo vos podías arrancarme. El té se nos enfría, el sol se derrite tras la ventana. Pero estás ahí, Hanji. Estás ahí, aunque no pueda tocarte nunca más.
Me acuerdo, todavía, de esa vez en la que vimos la luna. Era primavera, y los chicos entrenaban cerca del arroyo. Te pregunté, por qué no brillaba igual que al caer la noche; “¿no debería brillar más ahora, con la luz del día?”, dije. Te relamiste los labios, como siempre que ibas a salpicarme con historias, y respondiste, claro y sencillo: “algunas cosas necesitan de oscuridad para ser descubiertas.”
¿Será por eso que te siento adentro mío, enlazada a cada exhalación? ¿Que nuestro escondite en el bosque es una rendija de cielo, donde nada quema ni lastima? ¿Será que me estoy escurriendo, y en mi afán obsesivo me aferro a tu amor? ¿Que en el vacío que dejaste, sólo hay espacio para sembrar estrellas?
Quizás haya perdido la cordura, Hanji. No lo sé. Pero empiezo a pensar que te transformaste en luna. En cuarto creciente. Con cráteres y todo. Que tu destello rasga hasta las penumbras más negras. Es un faro de esperanza que guía las mareas. “Suficiente, Levi”, repetís, casi como un arrullo de cuna, con tus manos en mi pelo y tu boca en la mía. Y entonces te aprieto, bien fuerte contra mi pecho. Y dejo que llenes las grietas, y las cajas, y que tiñas de color cada foto que no tenemos.
“Estoy bien, Levi”, me asegurás. “Vamos a volver a vernos.”
Y entonces, porque nunca supe hacer otra cosa, o porque ya no me queda nada, te creo.
#levihan#levi ackerman#hange zoe#Soft Levi Ackerman#Levi Ackerman Needs a Hug#POV Levi Ackerman#Canon Compliant#fanfiction#fanfic#writing#attack on titan#shingeki no kyojin#Implied/Referenced Character Death#Angst#Fluff and Angst#Tragic Romance#POV First Person#Español | Spanish#Emotional#Grief/Mourning#Fluff#Fluff without Plot
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Las dos palabras que no solemos decir.
Las callamos y nos ahogan por dentro.
Nos abrazan y nos dejan sin aliento.
Las dos palabras más difíciles de decir, pero en realidad, nos acompañan todo el rato.
Nos piden a gritos salir.
Esas dos palabras que nos dejan vulnerables, y al mismo tiempo, nos hace sentir libres.
Te amo, por que así lo siento.
Nineties girl
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Numb - xxxtentation
Que sientes ?
Pss no lo sé...
Crees que sientes algo?
La verdad, creo que sí.
Puedes describirlo?
No, solo se que siento algo ...
Si sientes algo pero no puedes describirlo como tal, podrías ocupar palabras que se te vengan a la cabeza cuando piensas en eso y que sería?
Pues, si cierro mis ojos y me mantengo tranquila en una posición por un momento, dejando mi mente aún más neutral de la que puede ser, puedo verme a mi misma.
Ella está sentada abrazando sus piernas con la cabeza hundida en ellas, la noto pensativa y quizás un poco triste pero al mismo tiempo silenciosa. Me senté al lado de ella pero no quise interrumpirla o al menos eso sentí si le hablaba.
Espere a ver si en algún momento levantaba la cabeza simplemente para verla con más detención, entonces lo hizo.
No tuve que preguntar ni mirar tanto como pensé.
Ella deja caer su mano en mi hombro sin mirarme.
Miró hacia el frente y luego al cielo, afirmando su cabeza en la pared detrás de ella. Sus ojos secos y profundos, no había ninguna expresión en particular en su rostro, sus labios cerrados y callados.
Su mano seguía sobre mi así que la toque para darle confort a su manera, sentí una pequeña inseguridad antes de tocarla pues su mano tenía algo a su alrededor como cuando uno intenta ver el aura de las personas antes de saludarlas.
Cuando por fin lo hice sentí un nudo pero no sabía dónde estaba, mi respiración se volvió un poco más rápida de lo normal, quería levantarme pero no podía, de a poco una desesperación recorrió cada parte de mi, mi cabeza comenzó a acelerarse sin ver nada a mi alrededor que pudiera distinguir, no podía ver hacia al frente, mis ojos estaba pesado, de la nada se humedeciero pero aquel nudo suprimió cada lágrima que ni siquiera había salido, mi respiración se iba perdiendo de a poco a medida que se ahogaba en ella misma, sentia una explosión en mi boca que se trasformaba poco a poco en implosión.
No puedo, no puedo con lo que estás sintiendo en este momento
Atlantis - seafret
Sin darme cuenta la miro y ella está mirándome fijamente con una pequeña sonrisa en su rostro, no la entiendo. Sonrió un poco más y levanto su mano de mi, se acercó un poco a mi y tocó mi pecho, sonrió aún más entonces saco su mano...
Ya no siento nada, solo la mire e intente sonreírle pero no pude.
No pude sonreírle como ella a mi, no pude hablarle, no pude hacer nada...
Quise poner mi mano en su hombro y demostrarle que quería de alguna forma ayudar en algo que pudiera hacer que no se hundiera ella misma otra vez.
Se levantó, me miró con esos ojos que por más húmedos no caía nada de ellos pero podía ver lo que querían hacer, su silencio me susurraba todo lo que quería gritar y su mano solo me alivio para luego irse lentamente hasta que desapareció.
Abrí los ojos y mire a mi lado, ya no había nada.
Por qué ya no preguntas nada? Le dije
Me miró como si nada pudiera salir de su boca, extrañada y silenciosa solo pudo decir algo entre palabras cortadas...
Es la primera vez que no puedo continuar la conversación...
Que puede proyectar un frío que el intenso no puede entender, por qué no saben lidiar con nosotros si tenemos nuestra propia intensidad, es una peculiaridad del frío, esa intensidad inexplicable que no ven.
Los fríos tenemos una intensidad particular que no mostramos pero marca una diferencia en nuestra conducta, pienso que es algo que solo algunos pueden ver, creo que es solo para las personas que de verdad nos ven y nos notan.
Ver la realidad de un frío no es para cualquiera y poder tocar una fibra de nosotros es tan imposible que cuando pasa nuestra perspectiva y mundo explota o mejor dicho implosiona dentro de nosotros y la altera totalmente.
No saben cuántos gritos aguantamos, el dolor desesperante que no lloramos, lo difícil que no sabemos explicar y el cariño que callamos y no sabemos trasmitir.
A veces pienso que los verdaderos intensos somos los fríos, las personas intensas no saben realmente lo que es la intensidad, como se siente realmente, como se muestra y la facilidad con la que se esconde.
Lidiamos con todo un mundo dentro de nosotros a parte del mundo real, el control total que somos capaz de ejercer en nosotros no tiene límites.
Si supieran cuántas veces hemos querido romper con ese control.
Pero usualmente nos gana, nos supera, no nos suelta y nos hace obligarnos a olvidar y dejar pasar.
Que ganas de poder explotar...
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"Aprender que somos responsables de lo que decimos y callamos. No de lo que los demás digan o callen.
Entender que la culpa pesa y no nos deja avanzar. Saber aparcarla es imprescindible para seguir adelante.
Comprender que hay cosas que no se pueden cambiar. Aceptarlas y aceptarnos a nosotros en las circunstancias que vivimos.
Jugar la partida con las cartas que tenemos. Sin pensar en lo que tienen los demás o simulando imposibles que solo nos hacen daño.
Disfrutar este momento. Sin culpa, sin miedo, sin control, sin red. Esto y nada más. Aquí y ahora."
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Aveces trato y puedo, aveces trato y siento que puedo hasta que me doy cuenta de que, si, puedo
Aveces trato y no puedo, por más que sienta que quiero, y que debería de poder...aveces simplemente entiendo y dolorosamente siento que, no puedo.
Aveces tengo que volver a enseñarme, que con todo, no puedo.
Enseñarme otra vez, que yo estoy primero, que mis prioridades, mi enfoque y mi eje tiene que seguir igual, en primer lugar, siendo un poco egoísta para así protegerme, con esta coraza, de permitir que me vuelvan a dañar o permitirme a mí misma, volver a dañarme.
Aveces vuelvo a olvidarme de cómo, y de lo importante que es priorizarse uno.
Entonces me lo tengo que volver a enseñar a mi misma...
Aveces duele darse cuenta de que una vez más, nos dejamos de lado sin ser conscientes en ese momento exacto donde está sucediendo, donde nuevamente nos lastimamos y volvemos a pasar mal, aún así lo callamos y nos lo guardamos, y así empezó aquel bucle que me dije que no me volvería a permitir vivir.
Aveces no sabemos cómo ni por qué, aveces nos ahogamos en pensamientos que no sabemos cómo sacar para afuera de nuestro cuerpo ni de nuestra cabeza o nuestro sentir, aveces ni escribiendo, cantando o gritando, logramos sacar.
Escribo hoy, ahora, con angustia y mezcla de sentimientos encontrados...
Solo son instantes donde uno se da lugar a sentirse; solo, con uno mismo, donde uno se percibe sensible y se muestra fuerte, para que nadie pregunte, no por la querer contestar sino por no saber como hacerlo aun .
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Belleza
Y cuando cae la noche y me atrapa en su baile se que ahí es donde pertenezco, soy de donde las calles me lleven, de donde el arte me perciba.
Romances a la luz de la luna, pintura en cada esquina, crecí frente a esas paredes que llevan mi nombre.
Hurtos y misiones, compartirlo todo con mi gente, invierto en mi felicidad.
Y son esos locos que trepan edificios y patean las calles los que cuentan buenas historias, y no son más que locos los que me acompañan.
Detrás de cada rostro hay una tragedia pero preferimos no decirlo y es eso que nos callamos lo que nos une.
Emociones. Me desbordo en emociones y te las regalo, es todo lo que tengo porque cuando la wata ruge y no nos cubre un techo, lo que arde dentro de mi pecho es lo que me lleva a la salida del oscuro sendero.
Que el vino nunca acabe y que mi gente encuentre la paz, que el pasar del tiempo me moldee asi como mi destino lo prefiera.
Viviré contento haciendo lo que quiera y moriré satisfecho a cualquier edad, la libertad es solitaria pero llena de colores y son los que no ven la luz en los gestos de cariño de sus hermanos los que están condenados a vivir en una gris, fría y solitaria soledad.
Soy adicto a los buenos momentos, al calor de la mala vida, mi amor violento seguirá contra el sistema y la corriente hasta que la última gota de energía abandone mi cuerpo, puesto que un vividor nato jamás desaprende lo prohibido y lleva una armonia entre su luz y su sombra allí donde el caos se vea en calma y el orden represente una tiranía; me enamoro todos los dias un poco más de este desorden del cual se me culpa.
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Es inútil todo esto ¿Por qué sigo extrañándote? Porque sigues en mi mente siempre, porque hasta la mínima cosa me hace recordarte ¿Por qué sigues tan adherido a mi piel? ¿Por qué sigo recordando tu risa? ¿No sé supone que ya había muerto todo sentimiento hacia tu?... Te extraño maldita sea...
No es justo, no es justo para nadie, aún así lo hago, te extraño tanto que tú olor sigue rondando a veces por mi habitación, porque mi almohada aún te recuerda... Porque mis sábanas esconden tantos secretos junto a tí... Puedo pintar las paredes, cambiar de lugar todo, tirarlo todo a la basura, poner mil y un detalles pero aún así estás cuatro paredes que me rodean hablan, gritan tu presencia... Es absurdo, es tan estúpidamente absurdo, es estúpido pensar que sigo en tu mente, en tus recuerdos, lo sé, soy demasiado estúpido... Todo iba tan bien en mí ¿Que me hizo volver a recordarte? ¿Qué hizo que volviera a recordarte? Y se bien que manifiesto siempre y de manera inconsciente un mensaje o simplemente una señal de que me recuerdas... De que me extrañas... Es estúpido pensar que se realizará esa promesa que callamos y mantuvimos siempre en secreto... Es estúpido creer que sucederá en realidad...
Me cuesta cada día más fingir que no te extraño, cuando estás día, noche y hasta en mis sueños siempre. Solo un mensaje, solo un contacto... Solo eso pido... Solo pido que rompas el contacto cero por una sola vez, solo pido ser yo ... Solo pido despedirme como se debe, sabes bien que me debes ese beso de despedida, ese beso que nunca nos dimos ¿Aún no ha acabado? ¿Aún te sigo esperando en silencio? Dejarte ir.... Necesito dejarte ir definitivamente... Dejar de extrañarte, de pensarte, de desearte, de amarte...
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#StopSectaQueer
¿Saben realmente lo triste y desolador que es enterarse cada día de un nuevo atropello de la secta queer y sus transactivistas contra LA MUJER? ¿Y el lavado de cerebro que están haciendo a las nuevas generaciones?
¿Hasta cuándo?
#StopDelirioTrans #StopCensuraTrans
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#feminismo#feminismo radical#feminista#inqueersición#misoginia queer#Mujer hembra humana adulta#No nos callamos más#RADFEM#secta queer#stopcensuraqueer#stopcensuratrans#stopdeliriotrans#stopsectaqueer#teoría queer#TERF#Woman adult human female
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Usted será por siempre la aventura jamás contada,
esa que se ahogaba en mi boca cuando me besaba,
el nombre jamás pronunciado por mis labios frente a los demás,
el hombre prohibido que disfrutó a escondidas mi cuerpo.
Usted fue quien despertó mi lujuria con una sola mirada,
quien me conoció por completo,
quien atrapó con sus dedos y su boca la humedad entre mis piernas.
Nunca nos faltaron las caricias;
las ganas,
los besos desesperados,
los gemidos que callamos cuando nos mordiamos los labios.
Fuimos tan nuestros,
tan de otros,
tan clandestinos,
el secreto que se esfumaba en las madrugadas,
el amanecer con olor a culpa...
del pecado cometido.
Somos dos cuerpos tibios que se quedaron con ganas,
de un orgasmo más,
de un gemido más,
de una noche más.
—-☮️
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Era un puntito diminuto que brillaba en una lejana oscuridad —sonreía—. Se creía grande, muy grande; ignoraba la verdad. Ese puntito distante pensaba que podía controlar la energía que lo mantenía latiendo sin parar —reía—. Pobre puntito iluso, ingenuo, torpe y soñador, no sabía que un hoyo negro lo rodeaba —suspiraba—. Ese agujero negro; inmenso, vacío, gélido, lo veía sin compasión. Quería devorarlo como a todo en esa dimensión —tragaba—. Mi hermanita Luz veía ese espectáculo desde la recepción. Yo la observaba a ella, pues me atraía su introspección —callaba—. Luz suspiraba; una lágrima caía por su mentón. Yo, en mi oscuridad, reía por su tonta emoción —latía—. Todo en este universo, tarde o temprano, terminará... Será tragado por el gran hoyo negro de la oscuridad. Luz lo sabe, no sé por qué llora.
"Oscuridad, sabes que mi alma es Luz, no te burles de mi desdicha, no me prives de la dicha de creerme superior" —llorando y temblando—.
"Ni Luz ni Oscuridad. Ambas son mi creación. Aquí el único superior, soy Yo" —apareció nuestro Creador—.
Callamos, nos agachamos, nos tomamos de las manos y esperamos por su bendición. Creador se acercó a nosotras para otorgarnos una flor.
"Ambas saben que la vida depende de las dos; son tan importantes como lo soy Yo. Luz sin Oscuridad, Oscuridad sin Luz. No concibo mundo sin ustedes dos. Son mis hijas, mis pequeñas. A ambas las amo Yo. En cuando a ese punto, su tiempo terminó" —lo señaló—.
Nos dejó elevar el rostro y miramos hacia el punto. El vacío caminaba, absorto, hacia él, pronto lo iba a comer —temblaba—. Luz quiso esconder su mirada, pero Creador se lo prohibió. Yo no podía dejar de ver, me excitaba ser parte de ese perfecto acontecer. Creador me sonrió. Me sabe la más fuerte, por eso fui a la primera que creó. Luz es débil, ella sólo piensa en dar amor —orgullo—. Una llorando, la otra sonriendo... Miramos al vacío tragarse al punto ingenuo. Ahí terminó. Creador salió de la burbuja, solas nos dejó.
"Así terminará mi vida... Así y nada más" —Luz suspiró—.
"Así, así te apagarás, mientras río yo" —Oscuridad se enorgulleció—.
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Hermanas, hermanos, hermanoas:
Muchas palabras se caminan en el mundo.
Muchos mundos se hacen.
Muchos mundos nos hacen.
Hay palabras y mundos que son mentiras e injusticias.
Hay palabras y mundos que son verdades y verdaderos.
Nosotros hacemos mundos verdaderos.
Nosotros somos hechos por palabras verdaderas.
En el mundo del poderoso no caben
más que los grandes y sus servidores.
En el mundo que queremos nosotros caben todos.
El mundo que queremos es uno
donde quepan muchos mundos.
La Patria que construimos es una donde quepan
todos los pueblos y sus lenguas, que todos
los pasos la caminen, que todos la rían,
que la amanezcan todos.
Hablamos la unidad incluso cuando callamos.
Bajito y lloviendo nos hablamos las palabras
que encuentran la unidad que nos abraza
en la historia y para desechar el olvido
que nos enfrenta y destruye.
Nuestra palabra, nuestro canto y nuestro grito,
es para que ya no mueran más los muertos.
Para que vivan luchamos,
para que vivan cantamos.
Vive la palabra.
¡Vive el Ya basta!
Vive la noche que se hace mañana.
Vive nuestro digno caminar junto a los todos que lloran.
Para destruir el reloj de muerte del poderoso luchamos.
Para un nuevo tiempo de vida luchamos.
La flor de la palabra no muere, aunque
en silencio caminen nuestros pasos.
En silencio se siembra la palabra.
Para que florezca a gritos se calla.
La palabra se hace soldado para no morirse en el olvido.
Para vivir se muere la palabra, sembrada para siempre
en el vientre del mundo.
Naciendo y viviendo nos morimos.
Siempre viviremos.
Al olvido sólo regresarán quienes rinden su historia.
Aquí estamos.
No nos rendimos.
¡Zapata Vive y, a pesar de todo, la Lucha sigue!
Desde las montañas del Sureste Mexicano.
Comité Clandestino Revolucionario Indígena
- Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
México, enero de 1996
Parte III, Cuarta Declaración de la Selva Lacandona.
enlacezapatista.ezln.org.mx/1996/01/01/cuarta-declaracion-de-la-selva-lacandona
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¿las madrugadas aumentan nuestros terrores, o solamente le dan voz a aquello que callamos?
En el silencio todo es más claro, escuchas cada pequeño ruido a tu alrededor y hace eco. Lo mismo creo que nos pasa a nosotros en nuestra mente por la noche en el silencio, el eco de nuestros pensamientos sin resolver en el día buscan el mejor momento para hacerse presente. Es la combinación de ambas, los temores buscan tiener su propia voz, adquieren la capacidad de hacerse conscientes por la madrugada, porque no hay ruidos que los encapsulen, y tienen la fuerza suficiente para hacerse oír.
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