Tumgik
#distraído
aylonascimento · 1 year
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Só um pouquinho #maluquinho #distraído #abestado (em Brazil) https://www.instagram.com/p/CmWm3oXu-py/?igshid=NGJjMDIxMWI=
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psicoonline · 1 year
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A #sociedade do #cansaço é um termo descritivo p o mundo #contemporâneo, onde a sobrecarga de #informações, tarefas e #responsabilidades parece nunca cessar. Vivemos em uma #cultura onde o tempo é cada vez mais escasso e a #produtividade é valorizada acima de tudo. Essa dinâmica gera uma série de consequências, como o #burnout, que é um estado de exaustão física e mental causado pelo excesso de trabalho e #estresse. O burnout é um problema cada vez + comum em nossa sociedade, especialmente entre os #profissionais q trabalham em áreas estressantes. Essas pessoas mtas vezes trabalham longas horas, enfrentam pressão constante e sentem que ñ têm tempo p cuidar de si mesmas. O burnout pode levar a problemas de saúde, #depressão e até mesmo afetar negativamente a vida pessoal e profissional. Em um mundo onde estamos constantemente #distraídos por dispositivos eletrônicos e mensagens instantâneas, a qtidade de #atenção q dispensamos às tarefas e às pessoas está diminuindo. Estamos nos tornando cada vez + #impacientes e #exigentes, o q pode levar a problemas de #relacionamento e #frustração. Além disso, o desejo de estar sempre conectado e disponível impede q nos desconectemos do mundo e nos dediquemos a atividades q nos tragam #felicidade e #relaxamento. O #descanso ativo é um fenômeno q tem se tornado cada vez + comum em nossa sociedade. A ideia de q o tempo é #dinheiro levou mtas pessoas a encararem o lazer como uma tarefa q deve ser aproveitada de forma #produtiva. O descanso ativo pode levar à sensação de q nunca estamos realmente #relaxando, o q pode aumentar a #ansiedade e o estresse. É importante lembrar q o descanso não é uma #tarefa, mas sim uma necessidade vital. O #tédio, o #descanso e o #ócio são tão importantes qto as atividades produtivas. Esses estados ajudam a #aliviar o estresse, promover a #criatividade e até mesmo melhorar o desempenho em tarefas complexas. É importante saber q descansar não é uma forma de #preguiça, mas sim um comportamento saudável e necessário. Qdo nos permitimos descansar, recarregamos nossas baterias e nos preparamos p enfrentar os desafios do dia a dia com + energia e resiliência. https://psico.online (em Descansoooooo) https://www.instagram.com/p/CpxjjQFMD0g/?igshid=NGJjMDIxMWI=
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vilevampire · 1 year
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quero desenhar o ronove br tb
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smileflowcr · 1 year
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sigo viva, al borde de la locura, pero viva(?)
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Assista a ""SE EU MORRER MUITO NOVO" | Fernando Pessoa" no YouTube
youtube
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mis5citasfavoritas · 8 months
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Un día como hoy...
Mis #5 de "Bestiario"
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s2jjunie · 10 months
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Mis ojos están puestos en él, pero él es muy distraído y nunca lo nota.
— Rose Noire.
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La intimidad no es a quien dejas que te toque. La intimidad es darle a alguien tu atención, cuando otras diez personas lo están pidiendo. La intimidad es la persona que siempre está en el fondo de tu mente, sin importar lo distraído que estés.
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va-cios · 6 months
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Conocí la paz el día que tus ojos distraídos encontraron los míos qué llevaban mucho tiempo observándote.
—natsame
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greatkinglulu · 2 months
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okokok vi el post de juanicar, YO SUGIERO (humildemente) un imagina así bien cute donde en un stream revela q está en una relación amorosa y tdo eso para luego presentarlx (fem, male o gn) al chat recibiendo mucho amor y apoyo x parte del chat
Sorpresa
Imagina Juani Caruso x fem!character
Warning: Ninguno? Fluff.
Conteo de palabras: 850.
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27 de febrero, 2024
Mensajes nuevos: Juanicar 🎀
16:27 holaa locurasss
16:27 hoy prendo a las 18, atentiss
16:29 los espero con una sorpresa 💋💋
Así se comunica Juani habitualmente en su canal de difusión de Instagram. Cada mensaje que manda, ansiosamente esperado por sus fans, recibe incontable cantidad de reacciones con emojis, a modo de respuesta. Por supuesto, hoy no fue la excepción con miles de corazones de diferentes colores, caritas felices, enamoradas y banderas de diversos países entre otros adornando cada uno de sus textos. Mucho menos cuando en el último que envía antes de desaparecer hasta el horario pactado, promete esperarlos con “una sorpresa”.
¿Una sorpresa? Esto puede significar cientos de cosas distintas. ¡Qué manera de generar suspenso este pibe!
Algunas de las hipótesis que rondan las mentes de los integrantes del fandom: ¿Anuncia una canción?, ¿Alguna participación en otra película?, ¿Capaz una serie?, ¿Y si invita a alguno de los chicos del cast hoy? ¿¡Y si aparecen todos!?
¿Y si está de novio?
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Los minutos pasan, más lento para algunos, más rápido para otros y poquitos minutos pasadas las 18:00 llega la noti de Twitch del amigo más personal de todos.
No puede y no falta el recordatorio en el canal de ig.
Mensajes nuevos: Juanicar 🎀
18:06 bebyyyysss 
18:07 ESTAMOS AO VIVO EN TWITCH.tv/juanicar_
18:07 los veo ahí para charlar un ratoo
Entrando al stream, aparece Juani con su fondo habitual, solo y con música para ambientar de su playlist de spoti, Juanicar musiquette🎀. Tiene puesta una de las musculosas que acostumbra, color blanco, que no deja mucho a la imaginación con sus brazos al descubierto. El sol que entra por la ventana le baila en la cara a medida que él se mueve y charla con miles de espectadores del otro lado de la pantalla y sus icónicos rulos se están formando después de una ducha; tiene el pelo húmedo todavía.
Después de semejante anuncio apenas hora y media antes por insta, el chat está revolucionado y quiere respuestas, pero Juani trata de no darse por aludido. Los mensajes preguntando por la sorpresa no paran de llegar y solo siguen aumentando a medida que más gente se prende al vivo.
A Juani se lo nota algo distraído, fuera de lo habitual; incluso hasta un poco nervioso. Se le escapan risitas sin motivo aparente y mira demasiado hacia un costado fuera de cámara; está pendiente del vivo y del chat, por supuesto, pero algo más llama su atención. Mira como expectante hacia un lugar que la cámara de su celu no llega a enfocar sea a propósito o sin intención.
El chat enloquece todavía más viendo esto, pero nadie está preparado para lo que se escucha apenas de fondo, mientras Juani está respondiendo alguna pregunta que se quedó muy arriba, sobre el detrás de escenas de la peli.
“Amor, ¿no viste la crema de peinar? No la encuentro.” 
Seguido una sombra apenas visible por la rapidez de su caminata, pasa por detrás de él de una esquina de la pantalla a la otra y desaparece. Juani sonríe una sonrisa enorme, se le sube un poco el color a los cachetes y solo puede asentir, tapándose un poco la cara con las manos, cuando los mensajes del stream le pegan a la sorpresa: “JUANI ESTÁS DE NOVIO?”, “JUAN IGNACIO CARUSO CÓMO NO NOS CONTAS QUE SOMOS TUS AMIGOS MÁS PERSONALES???” Son tantos, tan rápido que no llega a leerlos todos.
“¡Tranqui, ya la encontreeeé!” La voz femenina alarga la última vocal de la palabra, con un tonito algo cantado.
“Bebé,” llama él, mirando para un costado, sonriendo embobado otra vez. “¿venís un toque?” 
Se escuchan pasos a la distancia cada vez más sonoros hasta que aparece en pantalla una castaña desenredándose el pelo mojado, con una remera manga corta blanca, visiblemente grande para ella y un short azul. Él la abraza por la cintura y gesticula que se siente sobre sí. Ahí cae en cuenta: miles de personas la están viendo. “Ay no, no no. ¡Qué vergüenza! Estoy así nomás, desarreglada, amor.” Se señala de pies a cabeza. “¿Cómo me vas a pedir que aparezca así?” La chica se tapa la cara con las manos y Juani aprovecha a sentarla en sus piernas, riendo. 
Le da un beso en la frente “¿Pero qué decís? Si sos hermosa vos, bombón.” 
La observa con ojos amorosos y niega incrédulo, mordiéndose el labio; no puede creer que ella le haya dado bola. El chat no para, explota. Aman a la pareja. Exigen un nombre para formar el ship. Es hermosa. Él repite el beso, pero no en la frente.
“Sí, chicos.” Vuelve su atención a la cámara, risueño. “No, no es una canción, ni otra peli, ni serie. No viene Blas, ni Fran, ni Enzo. Sí, estoy de novio y con esta belleza. no, yo tampoco lo puedo creer. Se las presento.”
Agradece todos los buenos comentarios y deseos que llega a leer de parte de los fans, se despide y promete volver mañana.
juanicar_ ya no está en vivo.
Taglist al 08/03/2024 para fluff con Juani: @thqueerestmf @motherandloverofallfandoms @sotsfan @motley-baby @dark-122-blog @f1lover55 @jaspimirandera
N/A: Hola, Nonnie! Cómo estás? Disculpá la tardanza, lo prometido es deuda. Espero que te guste, estoy medio oxidada porque hace muchísimo no escribo, pero le puse toda la onda :).
A aquellas personas que dejaron un mensajito en el form del taglist: muchísimas gracias por sus palabras ❤️.
Nos leemos pronto!
Si querés estar en el taglist, anotate acá.
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star-elysiam · 28 days
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ლ lsdln cast x linguagem de amor: toque físico ლ
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◍ pairing: lsdln cast x fem!reader
◍ sum: como os meninos do cast expressam a linguagem do amor com toque físico
◍ w: provocação (nada exagerado), texto narrado
◍ a/n: a ideia é fazer um hc para cada linguagem do amor e como enxergo os meninos expressando cada uma delas, então com certeza vamos ter outros hc falando sobre palavras de afirmação, tempo de qualidade, presentes e atos de serviços 🫶
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Matías
Mati sempre que pode vai querer entrelaçar seus dedos com os dele;
Podem estar fazendo alguma coisa simples, como uma sessão de filmes em casa ou no cinema, quando estão na piscina ou praia, quando estão no elevador, não importa o lugar e ele vai querer te tocar;
Saíram para jantar com seus país ou amigos? Vai puxar sua mão por baixo da mesa e vai ficar segurando, fazendo um carinho nas costas da sua mão, enquanto todos conversam e esperam por seus pedidos;
Ama sair de mãos dadas com você, sem se importar com o que os outros vão falar;
Dar as mãos é também uma forma silenciosa de dizer que te ama. Ele vai pegar em sua mão, enquanto te olha profundamente e trocam um pequeno sorriso. Não precisam dizer uma palavra sequer para saber o que tem na cabeça um do outro;
Sempre que te vê ansiosa ou nervosa com alguma coisa, vai puxar sua mão para te acalmar. O mesmo acontece quando é o contrário, sempre que ele está ansioso e vocês unem as mãos, toda a ansiedade evapora do corpo dele como fumaça;
Até quando estão mais íntimos, ama quando fica por cima e segura suas mãos acima da sua cabeça entrelaçando seus dedos. Desse jeito, ele consegue observar bem seu rosto e ficar mais pertinho de você.
Simón
Acariciar? É com ele mesmo!
Ele é o típico cara que depois do relacionamento é um gato preto com os outros e um verdadeiro golden retriever com a namorada;
Sempre que pode quer sentir sua pele, fazer um carinho, ficar de chamego contigo;
Gosta quando deita a cabeça no colo dele, assim ele pode acariciar seus cabelos;
Ama ver como você fica molinha com o toque dele. Isso só faz com que ele sempre te dê um carinho na primeira oportunidade;
Uma coisa que ele sempre faz é colocar seu rosto entre suas mãos, enquanto acaricia sua pele levemente e te admira, olhando no fundo dos seus olhos e em cada detalhe do seu rosto;
Se estão sentados um ao lado do outro, ele não vai perder a chance de passar o braço por trás da sua cadeira e alisar suas costas;
Vai alisar sua coxa por debaixo da mesa, subindo aos poucos enquanto vê sua respiração ficar desregulada. Pode não chegar as vias de fato mas ama te provocar assim, mesmo que estejam em um evento cheio de pessoas e correndo o risco de serem vistos;
Fica encantado com a maciez da sua pele, é como se tivesse um ímã nas mãos dele e outro em você, que sempre puxa ele para perto de ti.
Kuku
Fazer massagem com certeza é um ato de amor para o Esteban;
Até mesmo quando está distraído conversando com alguém mas com você sentada ao lado dele, vai acariciar sua perna de um jeito tão natural e automático, que nem se dá conta do que está fazendo e continua a conversar como se não fosse nada demais;
Ama deixar a mão repousando sobre sua coxa;
Ama quando conseguem um tempinho para vocês dois, aproveitando um da companhia do outro e podem relaxar em uma banheira cheia de espuma, com várias velas aromáticas espalhadas pelo banheiro enquanto são a única iluminação do ambiente, com uma música suave ao fundo em um volume baixinho e com suas costas virada para ele, enquanto te massageia;
Ama quando você faz uma massagem nele depois de um dia estressante de filmagem mas nada se compara com ele poder te massagear. Quando te faz relaxar com o toque dele, quando te vê suspirar e se arrepiar quando "apertou" um ponto certo em você;
Adora provocar você enquanto massageia. Se está massageando suas costas nuas, vai descer os dedos de propósito para as laterais do seus seios, vai passar a mão bem devagar pela região da sua costela, só para te ver suspirar;
Se massageia os seus pés, também vai dar um beijinho no final;
Isso quando a massagem não vai subindo pela sua perna, passa pela parte interna da coxa e quando acha que ele iria te tocar lá, pula para o seu abdômen. Claro que no final, nenhum dos dois resiste as provocações.
Pardella
Te abraçar é o hobbie favorito dele;
Ama ter você entre os braços dele, deixar seu corpo tão próximo e juntinho do dele;
Ama a sensação de sentir seu corpo relaxar toda vez que ele te abraça, é como vício para ele;
Dormir agarradinho? Sempre! Para ele dormir com você nos braços dele, com a cabeça apoiada no peito dele, é a melhor forma de ter um sono tranquilo;
Ama te abraçar por trás, quando está cozinhando, quando chega em casa e te encontra;
Também não tem um pingo de vergonha em fazer isso em público, sempre e em qualquer lugar vai procurar uma chance de te puxar para um abraço;
Mesmo na frente dos amigos, em algum momento ele vai te chamar para perto dele e vai te abraçar pela cintura, para ficar coladinha nele;
Até mesmo aqueles meio abraço, puxando você para junto dele enquanto passa o braço pelo seu pescoço;
Consegue fazer tudo isso sem ser grudento demais;
Ele sabe que você ama isso nele e ele ama poder fazer isso com você, te abraçar a qualquer hora.
Enzo
Com certeza um dos toques físico favoritos do Enzo é o beijo;
Ele ama te beijar, passaria o dia te tocando assim;
Ama quando dormem juntos e ele pode te acordar com vários beijinhos do seu pescoço até o seu colo, enquanto te aperta e puxa para mais perto dele;
Sempre que te vê concentrada, gosta de ficar te admirando e não resiste em roubar um beijo;
Em qualquer momento do dia, sempre que tiver oportunidade vai te dar um beijinho. Na testa, na bochecha, no pescoço, na boca, no ombro...
Seu corpo é um templo para ele e sempre que tiver oportunidade, vai beijar cada centímetro de pele sua. Ama ver como sua pele vai se arrepiando, respondendo a cada beijo deixado;
Quando está longe de você, sempre é uma das coisas que ele mais vai reclamar por estar sentindo saudades... "Dificil esa, nena. Quería que você estivesse aqui, para te beijar todinha";
Como todas sabemos que ele não é inocente e nem bobo, ama te dar aqueles beijos intensos, dramáticos, de cinema, daqueles que ele vai te pegar desprevenida, puxar pela cintura enquanto delicadamente pressiona os grandes dedos pelo seu pescoço, fazendo um carinho entre o pescoço e a bochecha;
Ele ama mostrar o quanto te ama pelos beijos, te beijar até ficarem sem ar e quando se separam para respirar, ama a cara de derretida que fica pelo beijo surpresa, deixando ele com vontade de te beijar de novo.
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yzzart · 2 months
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𝐈𝐭'𝐬 𝐚𝐥𝐥 𝐭𝐡𝐞 𝐰𝐢𝐧𝐞'𝐬 𝐟𝐚𝐮𝐥𝐭.
⇢ esteban kukuriczka x f!reader.
⇢ sumário: noites de vinho sempre levam para esperados caminhos.
⇢ contagem de palavras: 1.715!
⇢ avisos: 18+!, smut, menção de álcool, fingering, dirty talk, putaria na cozinha, palavras explícita, conteúdo explícito
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"Aceita, nena?"
Se retirando dos pensamentos, que eram, devidamente, insignificantes em relação ao exato momento, você virou sua cabeça em direção ao forte e cauteloso tom de voz; se endireitando, com decência, na ilha da cozinha, na qual estava sentada.— E logo, é deparada à uma taça com uma bebida, vivamente, avermelhada em tom de roxo.
Um divino vinho. — Meu deus, era isso que você precisava e clamava.
Esteban a segurava com delicadeza e paciência, acompanhado por um sorriso convidativo e um olhar cativante misturado com uma intuito afável. — Talvez, escondendo a verdadeira intenção. — Esperando alguma resposta ou ação sua. — E, mentalmente, torcendo para que você aceitasse.
Estava tão focalizar em uma linha de assunto, agora, esquecida, que não teve a chance de perceber de onde ele havia pegado aquela bebida. — Mas, isso, realmente, importava agora?
"Obrigada, Kuku." — Respondendo ao seu questionamento mental, você aceita; ao pegar na taça, que era primorosa, seus dedos, de forma sutil, se tocaram contra os do mais velho. — O argentino piscou para você, correspondendo.
Mantendo aquele sorriso, e reconfortado pela seu contive ter sido aceito, Esteban estender sua mão para uma segunda taça, logo, adicionando a bebida. — Em toda a ação, seus olhos se atentaram em cada movimento do seu namorado, até mesmo aqueles minúsculos gestos; parecendo que algo a intrigava. — Possivelmente, a forma, com agilidade e delicadeza, como sua mão segurava a garrafa de vidro exorava sua mente; apertando ela.
E aquelas mangas de sua blusa que foram arrumadas até seus cotovelos não ajudavam nem um pouco. — Tudo isso se percorria em você sem mesmo uma gota da maldita bebida.
"Honestamente, tinha esquecido da existência dele pelo armário." — Proferiu, pouco distraído e balançando, com cuidado, a taça e a movimentando em direção a sua; um sinal para brinde que rapidamente foi consentido.
Um fino ruído de vidro se chocando se exclamou pela cozinha, não incomodando nenhum dos dois; sem delonga e preocupação, você guiou a taça até meus lábios, ao mesmo tempo, se agradando com aquele típico e tão intenso aroma. — O gosto era impecável, claro; um sabor, perfeitamente, prazeroso de se degustar e apreciar. — Em dois goles, uma fina linha roxa se formou no fundo.
Assim, como a imagem diante dos seus olhos; Esteban levando, pela segunda vez, a taça até seus lábios e os deixando em uma leva pigmentação roxa. — Provavelmente, seus lábios estão na mesma situação. — Sua postura meritória causava uma ardência lúdica em você, e sendo visível em suas avermelhadas bochechas. — E o vislumbre de uma relevância em sua garganta enquanto saboreava...
"Querida..?" — Sua voz prestativa chamou por sua atenção, novamente. — "O que está acontecendo, huh?" — Colocando a taça em uma distância razoável do seu corpo, o argentino se focalizou em você; apoiando suas grandes mãos em suas coxas.
Nada. — Era isso que você desejava responder, de fato, mesmo sendo uma peculiar mentira e o mais velho iria perceber que não era a verdade; não adiantava. — Como você poderia explicar que a razão pela sua distração era ele?
"Me dê isso aqui." — Esteban retirou a taça de sua mão, juntando ela com a dele e logo, passando, suavemente, seus dedos em sua bochecha; a agradando com uma doce carícia. — "Fala comigo, meu bem." — Pediu com ternura com aqueles olhos que demonstravam adoração e tanta dedicação em relação a você. — "Vamos." — Estalou a língua.
Era assim que Kukuriczka olhava para você. — Desde o dia que lhe conheceu.
Seu coração estava acelerado, talvez, pela influência do pouco álcool que havia digerido, ou o desejo que se almejava em seu peito pelo argentino; provavelmente, os dois. — Assim, como seus olhos estavam, levemente, pesados que se guiaram pelo rosto do mais velho, o contemplando. — E ao mesmo tempo, tentando transmitir uma mensagem, um sinal ao invés de, realmente, discutir sobre o que queria.
Uma das suas mãos se movimentaram até um dos ombros largos e vestidos de Esteban, um pequeno brilho, da iluminação do cômodo, se exclamou em sua esmaltação; você optou por depor uma pequena carícia, permitindo um ar inocente. — Como uma ação inofensiva do mesmo ao se encaixar entre suas pernas.
Kukuriczka agradeceu, mentalmente, por você ter decidido usar uma saia naquela noite.
"Me beija, Kuku..." — Um pedido, uma necessidade, cercada com seu olhar carente, pidão, se libertou de seus lábios com a voz fraca, quase desaparecendo porém chega, perfeitamente, nos ouvidos do direcionado.
Inclinando a cabeça, se reforçando em um sorriso amoriscado e segurando seu rosto, Esteban, rapidamente, atendeu seu pedido. — Seus lábios se juntam contra os dele, formando, no início, um beijo gentil, deslumbrado; passando em uma movimentação um pouco mais densas entre suas línguas, e, claro, uma pequena briga por um espaço. — Vocês estavam se saboreando, se explorando, como se fosse a primeira vez que se beijavam.
Mesmo se deleitando com os lábios de Kuku, você sentiu sua outra mão, que estava presente em sua coxa, subindo, lentamente, e passando por baixo do tecido da saia; enquanto aquela que segurava seu rosto, passou para sua nuca e robustecendo uma intensidade. — Ele lambia, chupava sua boca, sentindo, vigorosamente, o gosto dela misturada com o sabor do vinho.
Seu corpo estava fervendo, o dele também; você estava começando a ficar desesperada, e ele também. — Lentamente, com um ar de pouca felicidade, Esteban separa seus lábios dos dele, porém, fez questão em morde-lôs; permanecendo um olhar prepotente no inchaço corrente.
"Olha isso." — Sua voz demonstrava um pouco de cansado, euforia e desejo. — "Era só isso que mi princesa queria...?" — O maldito sabia muito bem da resposta.
Sem perder tempo, Esteban distribuiu pequenos e molhados beijos pela região do seu rosto, deixando uma pequena sensação de aflição pela sua barba castra, e percorrendo um caminho até seu pescoço. — Você tombou, de leve e um pouquinho, sua cabeça para trás; dando mais liberdade para ele. — Era seu ponto mais sensível, fraco e a deixava tão débil, vulnerável.
"Oh, não vai abrir essa boquinha, não?" — Sussurrou com sedução, roçando seus dentes pela sua pele e tentando, ao máximo, manter os olhos em seu rosto e captar qualquer reação.
"Kuku!" — Um choramingo saiu de seus lábios ao sentir uma força mínima em seu pescoço, e, provavelmente, uma marca de dente estará presente por ali; você sentiu os lábios de Esteban se formarem em um sorriso arrogante.
"Isso." — Falou com doçura, retirando a mão de sua nuca e se conduzindo até sua saia, e se cansando de ver aquele pedaço de roupa. — "Cuidado, amor." — O mais velho bateu, levemente, em sua perna como um aviso e levantou a peça até sua cintura.
A frieza do mármore se debateu contra sua pele, enviando um arrepio pelo seu corpo, nada que poderia incomodá-la; agora, o visual de sua peça íntima era visível para seu namorado. — Era de uma cor escura, para ser específica, rebu; então, não seria complicado admirar o quão molhada você estava. — Obviamente. — Enganchando os dedos no cós da peça e a puxa para baixo, sendo cuidadoso como antes.
Seus olhos, que transmitiam desespero pelo toque do mais velho, tiveram o privilégio de ver sua calcinha desaparecer em um dos bolsos do mesmo. — Guardando ela como um presente.
Na face de Kukuriczka, era visível uma expressão sacana, sem vergonha e libertino; em uma boa condição, você iria proferir isso de forma direta. — Chegava a ser ridículo.
Com sua boceta, embaraçosamente, molhada, pulsando e exposta, Esteban movimenta sua mão pela sua coxa, apertando, brevemente, ela; porém, com a outra mão, ele ocasiona um pequeno tapinha em sua bochecha, querendo sua completa atenção. — Indicando um contato visual.
Mantendo, prendendo seus olhos contra os dele, você sente dois longos dedos, anelar e o do médio, de Kuku passando sobre sua fenda, uma simples e torturante carícia, logo, deslizando eles para dentro. — Enviando um choque impiedoso, pouco surpreendente; assim, como suas costas se arquearam e suas unhas agarraram o ombro do argentino. — Deus, era tão bom.
A sensação de preenchimento, um prazer flamejante e deleite faz você se sentir em um verdadeiro paraíso; e no inferno ao mesmo tempo. — Choramingos, algumas palavras, completamente, sem nexo e ainda se contentar com a imensa vontade de fechar os olhos, querendo aproveitar ao máximo a sensação deliciosa que triunfava.
"Mírame, cariño." — Murmurou, querendo zombar com uma leve descrença e estímulo, fazendo movimentos de vai e vem em seu buraquinho molhado; trazendo um som obsceno acompanhando seus gemidos. — "É gostosinho pra' caralho, não?" — Estalou sua língua, inclinando um pouco sua cabeça, uma provocação.
Você balançou sua cabeça, desorientada em concordância e proferindo, mais uma vez, um lacrimoso gemido; Kuku lhe entregou com sorriso lascivo, sendo sua boceta apertando seus dedos e garantindo que você seria a morte dele.
"Kuku...!" — Você gritou. — "Kuku, Kuku..." — Balbuciando seu nome e mordendo seus lábios, quase sentido o gosto metálico, e se prolongando na velocidade dos dedos do ator; desejando liberar toda aquela tensão, pressão e excitação que estava acumulado em você. — Mais um grito foi liberto por sua boca, o polegar dele passou a estimular, rapidamente, seu clitóris.
"Venha, querida." — Sussurrou, agradando você.
Flexionando, rapidamente, seus dedos e satisfazendo seu prazer, Esteban observa alguns espasmos que seu corpo realizava e se agradando com eles; recebendo o prazer das suas paredes internas apertarem seus dedos. — Assim, você sentia seu orgasmo próximo, toda sua angustia prazerosa se encerrando no momento.
Com um voluptuoso gemido, que se formou em um suspiro de alívio, você goza; seu corpo se torna um pouco enfraquecido, suavizado e sua mente misturada entre milhares de emoções ao mesmo tempo, procurando um apoio. — Mas, satisfeita e deleitosa.
Os dedos de Kukuriczka permanecem dentro de você, se mantendo pegajosos, aquecidos e molhados; um grande prazer para ele. — Até que uma sensação de vazio surge em seu buraquinho; abaixando o olhar para avistar o que estava acontecendo, você consegue observar um imenso e encharcado brilho entre os dedos do seu namorado.
Seu gozo estava ali, exposto naqueles longos e irresistíveis dedos; levando até a boca, mantendo um contato visual, Esteban chupou, com desejo e vontade, eles. — Causando um barulho tão molhado e estalador diante de sua presença, saboreando seu gosto e quase implorando, mentalmente, por mais.
"Deliciosa." — Elogiou com muito apetite, limpando um cantinho de sua boca; mexendo e estalando a língua, aproveitando ao máximo seu gosto pregado em seu paladar. — "A garrafa ainda está cheia e temos a noite inteira, nena."
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a--z--u--l · 3 months
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¿Alguna vez te has distraído tanto hablando con alguien que te hace olvidar del resto del mundo?
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mywritingonlyfans · 1 month
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Kuku, pai de menina! 🩷🎀 // Esteban Kukuriczka X Fem!Reader
words: 1,4k.
eu percebi que não curtiram mt minha primeira fic, mas infelizmente tenho mais algumas e vou aparecer nas tags, mas vai ser temporário!
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Suas mãos estavam geladas, e você lembrou da sua mãe, sua mente rapidamente recordando a necessidade de curativos em casos de ferimentos quando era criança. No entanto, algo parecia mais sério do que o usual. Quando Esteban ligou, você estava prestes a encerrar uma reunião. Sua voz denotava tremor, e você podia imaginar seus dedos nervosos bagunçando o cabelo. Isso naturalmente te deixou apreensiva, e à medida que você fazia perguntas, ele parecia ficar ainda mais perturbado. Por fim, ficou claro que você precisaria buscá-los no hospital.
 Um nó incontrolável se formou em sua garganta, e a tensão era palpável. A busca por uma vaga no estacionamento parecia levar uma eternidade, e fazer a baliza foi uma das piores experiências de sua vida. Sentindo o quão rígido seu corpo estava, você se reclinou no banco, fechou os olhos e respirou fundo. Sua mente foi desacelerando conforme pensava em como Esteban acalmava ela, seja quando ela sentia dor, nervosismo ou sonolência. Ela segurava o dedo indicador dele em sua mão pequena e repousava o rosto, repleto de sardas, em seu peito, buscando conforto. Ele era habilidoso em fazê-la sentir-se ouvida e especial, e você o amava ainda mais a cada vez que testemunhava essas interações. Esse pensamento momentâneo trouxe algum alívio; afinal, você confiava em seu marido.
A cena que você observava naquele momento era familiar: Mia, com o rosto corado como o de Esteban, segurava firmemente a camiseta do pai, enquanto seus olhos pequenos demonstravam preocupação. A sala, decorada em tons de azul claro, exibia alguns desenhos de bichinhos nas paredes, e na mesa havia agulhas e linhas grossas esterilizadas. Esteban parecia ainda mais apreensivo do que Mia.
"Olhe para mim, está tudo bem, baixinha," ele sussurrou suavemente, segurando-a e tentando acalmá-la da melhor maneira possível. Seus olhos estavam inchados, e lágrimas inundaram-nos assim que ele encontrou o olhar doloroso dela. 
Ela entrelaçou os dedos na camiseta dele e fechou os olhos; a voz dele ainda era suave, assim como a mão que estava carinhosamente em seu ombro. "Você é muito corajosa", ele disse. Aquilo fez você sorrir levemente. Conforme o médico se afastava, Mia notou você ali. "Mamãe?!" Esteban olhou para você mais relaxado, e você assentiu para ele antes de ir beijar sua pequena. Ela estava com os olhos miúdos, claramente cansada, e você a deixou se aninhar em seus braços. "Como está se sentindo?", você perguntou. A bochecha dela encostou em seu ombro, evitando que o curativo tocasse algo, e ela balançou a cabeça. "Bem, eu chorei bastante, mas papai estava certo, não doeu tanto, e me sinto melhor agora que já passou", ela disse em pequenas pausas e com as mesmas escolhas de palavras do pai; você achava aquilo tão fofo. Kuku costumava rir disso, mas ainda falhava em esconder a preocupação.
"Eu quero ir para casa, por favor?" Mia choramingou. Assim que a pergunta veio, você olhou para Esteban, e ele concordou, pedindo para você ir indo para o carro enquanto ele pegaria os medicamentos que ela precisaria. A fala breve e os olhos baixos mostravam que ele se sentia culpado, e por isso você concordou em esperar por ele.
Você ficou ao lado dela, segurando-a pela cadeira e colocando seu casaco para apoiar sua cabeça e evitar que ela balançasse demais. "Quer que eu dirija, vida?" Você acariciou os ombros dele, e mesmo distraído, ele virou o rosto para receber um beijo seu. "Ela está bem", você disse assim que ele afirmou não ver problema. Ele suspirou pesadamente, como se estivesse prestes a dizer "Mas, e se..." em protesto, mas desistiu.
O caminho foi rápido, e às vezes ele olhava para vocês pelo retrovisor. Ele não podia negar que ser contemplado com seu doce sorriso o fazia se sentir mais seguro. Ao entrarem em casa, com Mia nos braços, ele finalmente desabafou: "Eu a deixei cair do brinquedo", ele olhou para ela com pesar, uma pausa amarga em seu peito. "Eu estava de olho, sabe? Pensei que seria bom dar autonomia a ela, mas continuei por perto. Tentei ajudá-la antes que caísse, mas não deu muito certo." Você o ouviu atentamente; ele estava ofegante e você entendia sua aflição.
Ele a colocou na cama, soltando aos poucos a mão dela que se enroscava em sua camiseta. "Não poderemos protegê-la para sempre, Kuku. É importante que ela também entenda isso", você disse, criando uma barreira com lençóis ao redor da cama para evitar que ela se machucasse enquanto descansava. Ela estava tranquila, o cabelo bagunçado como o do pai, assim como os olhos um pouco inchados de chorar. Você sorriu para si mesma.
“Tenho medo de que ela pense que não poderei ajudá-la quando precisar, que não confie em mim. Não gosto da sensação de não ter evitado que algo ruim acontecesse com ela", ele disse em um choro baixo, e você sentiu o nó em sua garganta.
"Não fale assim", você negou, indo até ele, ficando nas pontas dos pés enquanto usava seus dedos para afastar as lágrimas. "Você tem noção de que sua preocupação sobre isso te faz ser o melhor pai do mundo?”
“Você está chateada?" A ponta do nariz dele tocou o seu, os fios de cabelo dele te fazendo cócegas. Ele era um bobo que se preocupava demais.
"Óbvio que não, não teria tido uma filha com você caso não te achasse capaz." Ele riu, permitindo que você o abraçasse.
"Eu não gosto de vê-la machucada ou saber que está com medo, mas não é como se eu achasse que foi sua culpa, sei que não foi. Crianças são imprevisíveis, e ela confia tanto em você, isso não vai mudar agora. Dentro da salinha, ela estava tão concentrada em você, na sua voz e calma - que eu sei que você estava atuando - fazendo ela saber que tudo ia ficar bem." Ele não havia refletido sobre isso, mas percebeu que era verdade.
Ele tinha medo de Mia estar chateada com ele de alguma forma, mas tudo, como você disse, indicava que não. "Mas você pode conversar com ela amanhã, o que acha? Pode falar o que sente, e deixar ela saber que pode contar com você quando precisar porque você vai estar lá por ela." Ele assentiu, parecia uma boa ideia.
O nariz dele roçou em seu pescoço e ele beijou o local, seguido por seu rosto. Você o abraçou mais forte, "eu te amo, muito." Ele suspirou, e você pôde sentir que ele estava menos preocupado. "Eu também, te amo tanto." Os lábios dele tocaram os seus e ele riu levemente do gosto salgado.
“Quer comer alguma coisa? O que almoçou?" Você tentou quebrar o ar melancólico. "Não cheguei a almoçar, embora tenha feito Mia comer na espera do hospital e ela tenha me obrigado a comer pedaços dos sanduíches que fiz pra ela." Ele te viu morder os lábios e houve uma comunicação entre olhares que fez ele não precisar acrescentar o quão parecida com a mãe ela era.
"Tá bom, a gente vai comer agora, antes que você fique louco sem nutrientes no corpo." A risada dele foi descontraída e te fez bem vê-lo bem.
Na manhã seguinte, ainda sonolenta, evitando ao máximo ter que se levantar, você ouviu a voz de Mia, falando baixo com ele. Ao abrir os olhos, você viu os dois ao seu lado, as mãos pequenas nas bochechas de Esteban, apalpando a barba dele que segurava um sorriso.
"Tudo bem, eu insisti para ir no escorrega sozinha, mas mesmo assim você estava lá comigo." Ela descansou o rosto no peito dele e ele beijou a cabeça dela em múltiplos estalos. Ela esticou a mão ao te ver acordada, segurando a sua. "Bom dia, mamãe." Ver ela feliz também te deixava contente.
Era tão bom ter os dois. O corretivo da vez era rosa, e você se amaldiçoou um pouco por ter perdido a interação de Kuku com ela enquanto trocava. Ela pulou em você, te abraçando forte, e ele te olhou com os olhos brilhando e um semblante que te dizia silenciosamente "você estava certa e eu estava hiper preocupado à toa".
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louismyfather · 5 months
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Dark But Just a Game 2
"Um pouco do que aconteceu com Louis e Harry depois de finalmente se entenderem como casal."
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Se alguém chegasse para Harry há uns três meses atrás e lhe falasse que em um futuro próximo ele passaria todas as suas noites abraçado com o homem com quem se casou, com todo desrespeito, ele reviraria os olhos e deixaria a pessoa falando sozinha. 
Pulando algumas casas, o ômega já não gostaria de estar em outro lugar senão dentro dos braços de seu alfa em mais uma noite de outono como aquela, sentindo seu cheiro amadeirado, enquanto suas peles nuas se tocavam sobre os lençóis. 
Seus olhos verdes olhavam preguiçosamente para a bagunça que seu corpo era, para a cintura marcada pelos dedos do alfa que minutos atrás o segurava com firmeza, sentiu suas bochechas coraram por desejar que suas mãos voltassem a apertá-lo, como se suas respirações desreguladas não denunciassem que encerraram a poucos minutos, mas se não fosse suficiente, ainda era possível ver seu abdômen manchado pelo seu prazer, enquanto o de Louis foi derramado no lado inferior de suas coxas fartas.
Harry pressionou uma coxa na outra sentindo o esperma quente deslizar em sua pele e se achou um devasso por sentir sua entrada piscar desejando Louis em seu interior novamente. 
Aquela noite marcava dois meses desde a noite em que fizeram amor pela primeira vez. Quando Louis saiu pela porta naquela manhã, o coração de Harry se apertou ao duvidar se a noite especial e manhã de beijos e café feito pelo alfa não havia passado de um sonho e quando a tarde chegasse eles voltariam a se tratar de forma fria como antes. 
Mas não poderia estar mais errado em imaginar essa possibilidade, ao fim da tarde, sentiu dois braços rodearem sua cintura por trás enquanto preparava uma lasanha completamente distraído, após o susto inicial, Harry teve seus lábios tomados em um beijo doce, ainda não havia se tornado um expert no assunto beijo, mas tentou dar seu melhor para retribuí-lo por gostar da sensação dos lábios de Louis nos seus.
Naquela mesma noite após o jantar, os dois sentaram para conversar sobre eles, sobre como seria dali para frente, como gostariam que fosse, o ponto crucial em que concordaram foi que gostariam de aproveitar um pouco dessa vida a dois antes de decidirem aumentar a família. 
Gostariam de resgatar de alguma forma o tempo que perderam, de aproveitar a companhia um do outro e se conhecerem melhor. 
Essa decisão lhes rendeu muitas madrugadas viradas conversando sobre diversos assuntos, pessoais, do passado ou só aleatórios, e também rendeu madrugadas onde os únicos sons que saiam de suas bocas eram suspiros, gemidos e, as vezes, palavras sujas nas quais Louis amou descobrir que seu ômega gostava de escutar enquanto era tomado. 
Apesar de ter ficado escandalizado quando Louis o pediu para ficar de quatro pela primeira vez, Harry se mostrou muito aberto sobre assuntos sexuais, não sabia o quanto tinha para saber sobre isso e o quanto era inocente, até sentir sua língua coçar para fazer as mais diversas perguntas a cerca de cheiro mais intensificado, lubrificação, nó, e do porque quando Louis o tocava em um ponto específico dentro de si, ele sentia como se fosse explodir de tanto prazer.
Ele conseguia fazer Louis ficar corado com tantas perguntas e igualmente excitado, o que fazia com que quase todas as sessões de perguntas encerrassem com o corpo do alfa sobre o do ômega, com seu pau tocando repetidas vezes em seu ponto doce até que fosse demais para os dois aguentarem e ambos gozassem sobre o abdômen do ômega.  
Louis evitava finalizar dentro de Harry pela decisão que tomaram de não aumentarem a família por enquanto, não queriam correr de conceber um filhote sem que estivessem prontos para tal.
Mas Harry não poderia mentir, não se sentia cem por centro satisfeito sem sentir o nó de Louis se desfazendo em seu interior, era por isso que poucos minutos após terem transado, se sentia excitado outra vez, e desconfiava que seu alfa também não se sentia completamente saciado, pois quase sempre acabavam a noite com um segundo e um terceiro round. 
⸺ Sinto falta de sentir o seu nó. ⸺ Harry sussurrou baixo e vermelho de vergonha por assumir tão de repente um pensamento tão promíscuo.
Louis estava com os olhos fechados, e Harry achou que ele estava dormindo então sequer o escutaria, mas assim que encerrou sua frase, sua primeira resposta veio em forma de um aperto forte em sua cintura que o fez gemer manhoso.
⸺ Você prepara um alfa antes de falar uma coisa dessas. ⸺ Louis respondeu, abrindo os olhos, mostrando ter ficado claramente afetado pela forma que seu pau deu um pequeno sinal de vida. 
⸺ Eu andei pesquisando sobre reprodução e não é como se eu estivesse fértil todos os dias do mês. ⸺ Harry contou, e Louis assentiu compreendendo. O ômega engoliu em seco, incerto sobre a reação que receberia de sua próxima fala. ⸺ Mas mesmo que eu esteja… eu quero. Eu quero, Louis. 
Louis segurou a cintura de Harry enquanto se virava de lado na cama para ficarem de frente um para o outro. Os olhos do alfa se tornaram frenéticos, olhando para cada canto do rosto do ômega, como se tentasse achar algum rastro de brincadeira no que ele disse.
⸺ Você está falando… sobre o que eu acho que está falando? ⸺ Louis perguntou, sentindo seu coração bater mais forte quando as covinhas marcaram as bochechas coradas e o dono delas assentiu.
⸺ Eu quero gerar um filhote nosso, alfa, sempre achei o ato de dar a luz encantador e mal conseguia esperar pela minha vez, esse desejo havia passado por um tempo, mas está aqui e eu me sinto pronto. 
⸺ Harry, eu… ⸺ Louis tocou o rosto macio, se tornando ainda mais apaixonado por aquelas traços marcantes e se aproximou, selando sua testa. ⸺ Faz tempo que sonho em ver um mini você correndo pela casa de um lado para o outro. 
Os dois riram sentindo seus corações mais aquecidos e se abraçaram forte. 
⸺ Eu amo você, alfa. ⸺ Harry disse, já havia dito isso outras vezes, mas aquela foi especial, mais intensa.
⸺ Também o amo, ômega. ⸺ Louis declarou de volta e seus lábios não demoraram a se juntar em um beijo quente. 
Harry gemeu ansioso quando seu corpo foi coberto pelo de Louis, o alfa começou a distribuir beijos por todo seu pescoço enquanto sua mão direita fazia caminho entre suas pernas.
⸺ Tão molhadinho, ômega… ⸺ Louis elogiou, sentindo seu pau doer pela rigidez, e Harry não conseguiu evitar de corar, não poderia mentir para si mesmo, adorava quando o alfa falava palavras sujas, mas era impossível não se envergonhar por todo o decoro que foi ensinado sua vida inteira a ter.
⸺ Alfa… sabe que fico envergonhado quando fala essas coisas. ⸺ Falou em um sussurro.
⸺ É claro que sei, suas bochechas ficam tão vermelhas quanto ficam quando fodo você com força, metendo fundo só para ver até onde você aguenta. 
⸺ Louis… ⸺ Harry gemeu, sentindo pré gozo vazar de sua glande. 
Louis olhou para baixo vendo a situação de seu ômega e não segurou o sorriso malicioso que quis romper seus lábios.
⸺ Eu até pararia de falar dessa forma se não soubesse o quanto você gosta disso. E eu sei que minha putinha ama isso. 
Harry apertou os ombros de Louis quando ele entrou com tudo em seu interior, afastando suas pernas para ter a visão de seu pau usando a entrada sensível e avermelhada pela transa anterior. 
O corpo de Louis caiu sobre o de Harry, ele afundou seu rosto no pescoço alheio, sentindo seu cheiro doce direto da fonte, não conseguindo controlar suas estocadas de ficarem mais fortes quando a cada vez que entrava de forma mais intensa, o cheiro se intensificava. 
O ômega rodeou seus braços ao redor do pescoço de seu alfa e pediu pelos seus lábios ao se sentir tão perto do limite, Louis realizou seu pedido, tomando seus lábios como tomava seu corpo, não demorou a também se sentir na borda e quando menos percebeu seu nó começou a se formar no interior apertado enquanto seu prazer o invadia.
Harry gemeu tão alto ao sentir seu interior se expandir mais para aguentar aquele nó, que o alfa achou impossível os vizinhos não terem escutado, mas não importou de qualquer forma, queria mais era que todo soubessem que ele dava conta de dar prazer a um ômega tão gostoso com era o seu, e esse fato se comprovava com jato que manchou seu abdômen e o de Harry quando ele veio forte entre seus corpos.
O nó demorou alguns bons minutos para se desfazer, mas quando se desfez, Louis apenas saiu de cima de Harry, cobrindo-os rapidamente com o cobertor para voltar a abraçá-lo dessa vez sob as cobertas até caírem no sono, o que não demorou a acontecer levando o estado de cansaço e de satisfação de ambos.
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Harry desceu a escada que dividia o andar de cima do baixo dando passos lentos e cuidadosos, o sono ainda tentava vencê-lo, fazendo com que seus olhos se fechassem, mas seguiu firme, criando coragem para se manter de pé ao acariciar seu ventre alto.
O ômega estava com sete meses de gravidez, sua barriguinha era bonita e evidente, se sentia cada dia mais belo e orgulhoso de estar carregando o fruto do seu amor com seu alfa em seu ventre. Louis não estava muito diferente, o alfa havia se tornado um verdadeiro alfa babão, era um sacrifício para ele sair para trabalhar de manhã, porque, segundo ele, era uma tortura ter que passar o dia longe de seus ômegas.
Ah sim, Louis tinha certeza que o filhote seria ômega, e Harry dizia que era cientificamente impossível deduzir a classe do filhote dessa forma, mas Louis não ligava. O importante era que no fundo concordavam que o que importava era que o filhote viesse com saúde, que fosse o primeiro fruto de muitos.
Harry abriu a porta principal, fazendo seu caminho até a caixa de correio, desejou um bom dia simpático para os vizinhos ômegas da casa da frente e do lado, que aguavam calmamente suas plantinhas, e pegou as duas cartas guardadas dentro da caixa.  
Assim que a porta foi fechada, Harry rasgou um dos envelopes, encontrando a conta de água, e apenas entregou para o alfa agora sentado no sofá. 
⸺ Bom dia para você também, querido. ⸺ Louis falou, olhando o valor que constava na conta. 
⸺ Bom dia, amor. ⸺ Harry sorriu com suas covinhas, abrindo o outro envelope. 
Estava pronto para entregá-lo para Louis também, acreditando que fosse outra conta, mas suas mãos tremeram ao ler que o remetente era o Jornal Estadual. 
Há algumas semanas atrás, Harry havia submetido um de seus desenhos para um concurso de arte promovido pelo jornal mais influente da cidade, o tema daquele ano era paisagismo, e Louis encheu os ouvidos do ômega até ele concordar em participar, ele acabou aceitando, mas com a condição de usar um pseudônimo ao invés de seu nome real, Harry ainda tinha, não só um, mas o dois pés atrás sobre o sistema que viviam, ele gostaria que os ômegas pudessem ser vistos e ouvidos, mas sabia que seria um processo lento que estava longe de sequer começar, ele não queria ser o primeiro a dar aquele passo, mas mais pela insegurança de ser rejeitado e colocado em "seu lugar" do que qualquer outra coisa. 
⸺ Eu… eu ganhei o concurso de desenho, Louis. ⸺ Harry quase não conseguiu pronunciar as palavras em voz alta, não parecia real até falar o que leu em voz alta. 
Louis abriu um grande sorriso e correu para abraçar seu ômega com cuidado para não machucar sua barriga.
⸺ Eu tinha certeza que ganharia. ⸺ O alfa disse, beijando seus lábios e passando os dedos na pele abaixo dos olhos verdes marejados. ⸺ Você é o melhor.
Harry nada disse, apenas se segurou para não chorar e voltou a olhar a carta, notando um detalhe que não havia percebido antes pela emoção.
⸺ Espere, aqui está constando o meu nome. ⸺ Disse, confuso. ⸺ Lembro-me claramente que assinei com um pseudônimo. ⸺ O ômega olhou para o alfa, vendo-o desviar o olhar para a janela. ⸺ Você não teria algo a ver com isso, ou teria?
⸺ Ômega… eu posso explicar. ⸺ Louis respondeu diante o olhar fuzilante de Harry. ⸺ Talvez eu tenha trocado seu pseudônimo pelo seu nome real quando fui entregar a carta com o desenho no correio.
Harry entreabriu os lábios surpreso pela confissão apesar de saber que se tratava disso. 
⸺ Louis! ⸺ Harry deu um tapinha no ombro do marido. ⸺ Mas porquê você fez isso?
⸺ Porque eles precisavam apreciar sua arte sabendo que ela foi feita por você! Sabendo que a arte que eles admiravam foi feita por um ômega incrível. 
⸺ Lou… ⸺ Harry continuava tentando segurar o choro.
⸺ E outra, não sei se você leu a matéria inteira sobre o concurso, a obra ganhadora será apresentada na semana anual de arte da cidade. Não teria como contratar um alfa para fingir ser você.
⸺ Mas a semana de arte começa semana que vem. ⸺ Harry arregalou os olhos, e logo em seguida negando com a cabeça. ⸺ Eu não posso ir, Louis, eu não vou suportar ver o olhar julgador de todos aqueles alfas duvidando que aquele trabalho é meu, porque acham que ômegas não são intelectualmente capazes de nada. Vou mandar uma carta para o jornal avisando que desisti e que é para eles elegerem o segundo desenho como o melhor. 
Louis segurou as mãos de Harry e o fez olhar para si. 
⸺ Eu sei que você não quer fazer que acabou de dizer. ⸺ Subiu suas mãos pelos ombros do ômega, parando em seu rosto. ⸺ Eu tenho sorte de estar casado com um ômega com você, tão inteligente e talentoso, você merece todos os aplausos do mundo e vai recebê-los. Eu vou apoiar você na decisão que quiser tomar, mas não posso mentir que adoraria estar ao seu lado semana que vem, escutando você ser elogiado pelo artista incrível que é. 
Harry sentiu seus lábios tremerem e não segurou mais as lágrimas, apesar de ter afundado o rosto do pescoço do alfa para que ele não o visse chorando. 
⸺ Meus hormônios estão a flor da pele por conta da gravidez, é por isso que estou chorando. 
Louis sorriu, negando com a cabeça, pelo ômega achar que precisava se justificar por sentir seus sentimentos, mas apenas o abraçou forte, acalmando-o com seu cheiro, até o choro cessar.
A semana de arte foi indescritível, Harry estava relutante até o momento que chegaram na galeria, mas passou quando eles foram acolhidos pelos representantes do jornal, o ômega segurou suas lágrimas quando viu seu quadro exposto, mas Louis estava ao seu lado para ser seu apoio e lá permaneceu o tempo inteiro. Era óbvio dizer que a maioria das pessoas que admiraram o quadro, se aproximavam do casal parabenizando Louis pela obra por achar que ele fosse o autor, isso deixava Harry cabisbaixo, mas o alfa sempre desmentia e contava orgulhosamente que seu ômega era o artista.
Harry sentiu seu coração quentinho com os elogios sinceros que recebeu, amou cada segundo do evento por Louis ter ficado ao seu lado o tempo todo, não poderia ter mais certeza que havia casado com o homem certo. 
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Harry pensou que iria morrer quando sentiu a primeira contração que o avisava que estava na hora de trazer seu filhote para o mundo. 
Louis arrumou a bolsa de Harry em um tempo recorde e o levou no colo até o carro, onde dirigiu com pressa para o hospital. 
Horas se passaram dentro da sala onde Harry tentava achar forças para continuar, sua mão apertava a de Louis, que dizia em seu ouvido o quanto ele era forte e que logo teria o filhote deles nos braços. 
Quando as palavras se concretizaram, Harry teve seu filhote nos braços após banhado e empacotado nos panos de algodão bordados que havia separado para aquele propósito. A primeira ação que teve foi de beijar a testa daquele pequeno serzinho cuidadosamente e ao aproximar seu nariz da pele frágil, Harry se segurou para não ter nenhuma reação ao sentir um aroma adocicado de rosas, queria que Louis percebesse sozinho que era um profeta idiota e o filhote deles era de fato um pequeno ômega. 
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Obviamente os primeiros dias com Austin, nome escolhido pelo casal Tomlinson para o primogênito, foram desafiadores, Harry não fazia ideia do quanto não tinha jeito com bebês após o seu nascer, chorou quando não soube pegá-lo direito do berço para o colo, e chorou quando aprendeu com a ajuda de sua mãe, que "se mudou" para lá naquelas primeiras semanas. Harry não tinha culpa de não saber trocar uma fralda ou ninar o filhote, não tinha irmãos nem teve contato com bebês alheios na infância e adolescência, para completar Louis também compartilhava da mesma situação, a mãe de Harry teve um grande trabalho, que valeu a pena quando viu o filho e o genro trocando a primeira fralda de Austin.
Harry gostaria de ter sido avisado que os meses se passariam rápido após essas primeiras semanas difíceis depois do parto. 
Dois anos haviam se passado e Austin era um filhote ativo, barulhento e cheio de si, seus cachinhos castanho claro eram um detalhe a parte, Harry poderia ficar horas admirando seu bebê cada dia maior, ele era sua companhia durante o dia, o ômega passava o dia mimando-o e fazendo suas papinhas, o que o fazia lembrar de um detalhe triste, Austin não queria mais saber de seu leite. 
⸺ Ele não mama mais. ⸺ Harry comentou chateado para Louis, enquanto observada Austin brincar com uma de suas pelúcias sobre a mesa de centro. 
Louis desviou seu olhar do livro que lia e fitou o ômega com olhos tristes. ⸺ Oh, querido… ⸺ Passou seu braço ao redor do marido sentado ao seu lado no sofá. ⸺ Mas já está em tempo, não? Ele já completou dois anos, minha mãe disse que eu deixei com menos de um ano.
⸺ É, eu também deixei com um ano e poucos meses.
⸺ Viu, é normal. ⸺ Sorriu, fazendo um carinho no ombro do ômega, que não sorriu de volta.
⸺ Mas não é bem esse o problema… ⸺ Harry sentiu suas bochechas corarem, não queria tocar naquele assunto com Louis, para si, aquele era um dos poucos assuntos que pertencia o universo dos ômegas.
⸺ Então qual é? ⸺ Louis perguntou, esperando que Harry fosse responder de forma imediata já que eles conversavam sobre tudo, mas não foi o que aconteceu daquela vez.
⸺ Eu… ⸺ Harry relutou em dizer, mas Louis soltou alguns de seus feromônios calmantes, indicando que ele poderia falar o que quiser, sem se preocupar com sua reação. ⸺ Eu… eu continuo a produzir leite. 
Louis não respondeu nada no primeiro instante, apenas tentou entender a situação.
⸺ Eu pensei que o corpo dos ômegas entendesse quando o filhote não queria mais mamar e parava de produzir o leite. 
⸺ Eu também achava isso! ⸺ Harry se virou para frente do alfa, indignado com a sua situação. ⸺ Talvez o caso a parte seja eu, mas porque que tinha que acontecer justamente comigo? ⸺ Choramingou.
⸺ Se acalme, ômega, deve ser mais comum do que pensamos. ⸺ Tentou acalmá-lo de alguma forma. ⸺ Mas… como é? 
Harry franziu o cenho. ⸺ Como é o que?
Louis não sabia como perguntar sobre aquele assunto, raramente naquelas dois anos viu seu ômega dando de mamar ao seu filhote por considerar um momento entre ômega e filhote, se sentia um intruso no ambiente, mas de repente, agora que Austin havia largado Harry, se sentia curioso sobre o assunto.
⸺ A situação com o leite. ⸺ Respondeu baixo. ⸺ Ele simplesmente… vaza e você joga fora? 
Harry se sentiu rapidamente incerto sobre o que responder, mas estava com aquele dilema há semanas, precisava desabafar com alguém e seria ótimo se esse alguém fosse a pessoa em que mais confiava, que nesse caso era seu marido.
⸺ Meus seios vão ficando cheios ao longo do dia, pesam e ficam muito sensíveis, e sim, acaba vazando pelos mamilos passarem o dia encostando no tecido da camisa, graças a essa maldita sensibilidade, mas eu acabo deixando o leite sair de verdade durante o banho, com a ajuda da água quente, ele vai embora junto com a água, me fazendo sentir finalmente leve. Tá tudo bem, Louis?
Harry olhou com certa confusão para o alfa, que olhava fixamente para seu peito coberto pela camisa branca de botões, quando sentiu sua boca salivar, acreditou que estava encarando a tempo demais. 
⸺ Eles estão te incomodando agora? 
O ômega abriu os lábios sem responder de início, primeiramente detestando ser lembrado que sim seus peitos estavam cheios e o matando. 
⸺ Sim, eles estão. ⸺ Assumiu envergonhado.
Harry pensou que o assunto se encerraria ali, decidiu levantar para pegar Austin, que estava quietinho abraçando seu ursinho — indicativo de sono —, mas no instante que ia levantando, escutou a voz de Louis preencher a sala.
⸺ Me deixa te ajudar. 
O ômega encontrou as costas no sofá e olhou para Louis com se perguntasse se escutou o que escutou.
⸺ Está falando sério? ⸺ Ainda não conseguia acreditar.
⸺ Uh-huh. ⸺ Concordou. ⸺ É melhor que desperdiçar, não?
⸺ Oh, claro, vamos fazer isso para evitar o desperdício. 
⸺ Então vamos mesmo? ⸺ Louis soou como uma criança recebendo a confirmação que iria para o parque de diversões, e Harry percebeu isso, riu e assentiu.
Após ninar Austin até que ele estivesse caindo de sono, Harry deixou o filhote adormecido no berço e trancou a porta, seguindo em direção ao seu próprio quarto, onde seu alfa o esperava empolgado. 
Harry não imaginou que passaria por uma cena como aquela, onde estava de pé em frente a cama mostrando seus seios cheios para Louis sentado em sua frente encarando-os como se fossem dois monumentos. Não era como se não tivessem uma vida sexual ativa naqueles dois anos, mas após o ômega começar a sofrer aquela situação incômoda, tentava evitar ter um contato direto em seus peitos, sempre sugerindo transarem de lado ou de quatro com o alfa tocando apenas de sua cintura para baixo.
Agora Louis entendia o porquê das escolhas de Harry durante no sexo, no instante que seu polegar tocou a região próxima do mamilo esquerdo, o ômega tremeu e gemeu sôfrego. 
⸺ Está tudo bem? ⸺ Perguntou preocupado.
Harry mordeu os lábios. ⸺ Sim, só estão muito sensíveis como eu avisei. 
Louis assentiu, e subiu seu dedo pela pele quente, tocando o mamilo rosado que imediatamente vazou uma pequena quantidade de leite. 
O ômega não segurou o gemido alto que sentiu vontade de soltar quando logo após sentir o leite vazar de seu mamilo, sentiu os lábios quentes de Louis ao redor de seu peito.
⸺ Louis! ⸺ Harry quis xingá-lo, mas tudo o que conseguiu foi gemer seu nome e cair em cima de seu colo quando ele o puxou para sentar sobre ele.
Louis continuou a sugar o mamilo, sentindo o seio esvaziar aos poucos enquanto sugava e o estimulava massageando o seio volumoso. 
Harry estava completamente duro quando Louis deixou o seio esquerdo, e mamou o direito, não conseguiu evitar de rebolar sobre o colo do alfa ao que sentiu o pau dele tão rígido quando o seu.
O alfa desceu suas mãos para a bunda de Harry, sentindo a umidez na parte de trás da calça de tecido e não resistiu em levar a direita para dentro da peça, tocando a entrada encharcada do ômega, que gemeu manhoso quando teve um dedo o invadindo com facilidade pelo quão lubrificado estava por estar tendo seus seios chupados. 
Não foi uma surpresa quando o ômega gozou em sua calça assim que Louis terminou de esvaziar seu seio enquanto tocava sua próstata com três dedos. 
Louis deitou com Harry em seu colo, que ainda teve energia o suficiente para levantar da cama e se despir da peça que ainda o cobria, voltou a se inclinar sobre o corpo do alfa para desabotoar sua camisa e retirá-la de seu corpo, fez o mesmo com o botão da calça e a desceu por suas pernas.
⸺ Retribuirei o favor. ⸺ Harry disse ao ver o pau ainda rígido de Louis entre suas pernas.
⸺ Não precisa fazer nada se não quiser. ⸺ Louis o assegurou, mas encontrou os cabelos longos do ômega com os dedos da mão direita no momento em que ele tomou seu pau da mesma maneira repentina que havia feito minutos atrás com seus seios. 
Harry chupou Louis até que o alfa estivesse se desfazendo em sua boca, gemendo o quanto sua boquinha era gostosa e o puxando para cima para deitar ao seu lado.
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⸺ Porque tenho que vestir isso? 
Louis escutou Austin reclamar mais uma vez sobre o terninho slim que cobria seu corpo, ao menos agora já estavam dentro da galeria, se o universo ajudasse ele se encantaria com os quadros de Harry e esqueceria da gravata que a cada dois minutos tentava desatar.
⸺ Ei, não tire a gravata, filho. ⸺ Louis se abaixou em frente o garotinho de nove anos, tirando alguns cachinhos teimosos de frente os olhinhos azuis. ⸺ Não quer que seu pai o veja todo arrumado? Sabe que ele acha lindo ver o pequeno ômega dele bem vestido e comportado nas exposições dele. ⸺ Austin concordou, cruzando os braços e parecendo aceitar por enquanto. ⸺ Jessie não parece incomodada com o vestido dela e é mais nova que você. ⸺ Louis olhou para a alfinha de cinco anos como o pai bobão que aceitou que era. 
⸺ Porque ela é uma chata, por isso! ⸺ Austin respondeu, olhando irritado para a garotinha de cabelos longos e lisos, que lhe mostrou a língua. 
⸺ Jessie! Isso é feio! ⸺ Louis repreendeu a filha, que não gostou de ser advertida, enquanto Austin ficou satisfeito com a bronca. 
Louis levantou e segurou as mãos dos dois filhotes na intenção de finalmente chegar ao salão principal onde Harry os esperava.
Anos poderiam se passar, mas a reação de Louis ao ver Harry sempre seria a mesma de quando o viu pela primeira vez no jardim da casa que morava com os pais, seu coração batia mais forte e seu estômago era preenchido por borboletas, a única diferença era que antes ele sonhava com o dia que teria aquele ômega para si, e agora se sentia o alfa mais feliz do mundo por ter ele ao seu lado, por tê-lo como seu ômega, pai de seus dois filhotes e com mais um a caminho como ficava evidente na barriguinha marcada mesmo coberta por um sobretudo grosso. 
Os olhos de Harry se iluminaram ao ver sua família entrar por uma das portas do salão, pediu licença para o jornalista com quem conversava e o deixou falando sozinho, estava mais que satisfeito com sua vida profissional, aquela era sua segunda exposição própria e participou de todas as semanas de arte desde a primeira, sendo destaque em todas elas, mas tudo isso parecia desaparecer quando seus olhos encontravam os de Louis, precisam estar juntos senão nada parecia certo, então foi o que fez, correu para os braços de seu alfa até ter seu nariz próximo à sua glândula aromática e sua cintura envolta por seus braços. 
⸺ Oi. ⸺ Harry sorriu grande, expondo suas covinhas.
⸺ Oioi. ⸺ Louis respondeu, encantado por aquele sorriso bonito.
⸺ Como vocês estão chiques! ⸺ Harry elogiou seus filhotes, se abaixando devagar para beijar a bochecha de Austin e pegar Jessie no colo. 
⸺ Ano que vem terei três filhotes para vestir. ⸺ Louis comentou, tocando a barriga Harry, empolgado para a chegada desse dia.
⸺ Ou quatro. ⸺ Harry disse, recebendo uma inevitável feição confusa de Louis. ⸺ Estou sentindo minha barriga maior e mais pesada e só estou com seis meses. ⸺ Explicou, vendo um sorriso de canto se abrir no rosto de Louis. ⸺ Não estou deduzindo nada, é apenas um palpite. 
⸺ Palpite ou não, nosso futuro ou futuros filhotes serão bem vindos. ⸺ Louis abraçou Harry pela cinturinha larga, se sentindo estupidamente feliz. ⸺ Eu nunca estive tão feliz. 
⸺ E eu nunca achei que seria tão feliz. ⸺ Harry sorriu, selando seus lábios no de seu alfa. ⸺ Agora me deixa apresentar a exposição para vocês. ⸺ Pediu, ignorando seus olhos marejados com lágrimas de felicidade, e segurou a mão de Louis, que pegou a de Austin, para verem a exposição do primeiro quadro até o último.
Harry estava certo, afinal, quatro meses depois ele deu à luz a dois ômegas grandes e saudáveis cujo batizaram de Edward e William, Ed e Will, como já saíram do cartório chamando. Outras exposições vieram e Louis se empenhou para vestir seus filhotes a altura do evento grandioso que cada uma das exposições de Harry se transformava. 
Mas o mais importante era que eles sempre estavam lá, assim como Harry estava lá por eles.
Dado a maneira que Harry e Louis foram unidos no passado, a última coisa que passou pela cabeça deles foi que seriam tão felizes juntos, mas agradeciam todos os dias por serem.
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