#cuando una puerta se cierra otra se abre

[tetha1950]

Ante una puerta cerrada...

Cuando Dios cierra una puerta, siempre abre otra mejor.

Hechos 16.5-10

¿Se ha enfrentado usted alguna vez a una puerta cerrada? Es muy frustrante, ¿verdad? El apóstol Pablo lo entendía muy bien. En su segundo viaje misionero, encontró una y otra vez el camino bloqueado por el Espíritu Santo.

A Pablo debió parecerle extraño que Dios le impidiera difundir el evangelio. Pero en vez de enfadarse o intentar abrirse camino a la fuerza en un nuevo territorio, Pablo esperó la dirección del Señor. La Biblia no nos dice cuánto tiempo permanecieron él y Timoteo en Troas, pero el apóstol no se movió hasta que el Señor le reveló la entrada a un nuevo campo misionero.

Si usted se encuentra en un período de espera, haga lo que hizo Pablo. Considere su situación como una oportunidad para buscar el propósito y la dirección de Dios. Pregúntele al Señor por qué le ha impedido seguir adelante; tal vez no sea el momento adecuado o haya algún pecado con el que usted tenga que lidiar. Cualquiera que sea la razón, es importante ser sensible a la dirección del Espíritu y prepararse para la puerta que se abrirá.

Cuando una puerta se cierra, Dios tiene una razón. Él nos está demostrando su amor y protección, incluso cuando no lo veamos. Dios siempre cumple su promesa de hacer que todo sea para nuestro bien (Ro 8.28).

(Ps. Charles Stanley).

#Charles Stanley #cuando una puerta se cierra otra se abre #la voluntad de Dios

[flowersephone]

August. Enzo V

Un actor famoso, asustado por la fama repentina, se cruza en el camino de una médica veterinaria igualmente respetada, hasta que sus destinos se entrelazan en una circunstancia inusual. Mientras él enfrenta la presión de la fama, ella se sumerge en la rutina desafiante de la veterinaria. Juntos, descubren una conexión única y se sumergen en una aventura que les traerá consecuencias futuras.

❧ fluff, angst, smoke, age gap, weed, mature, smut, and some more.

Elle's pov

En el exterior de mi clínica a las 02:45 am, fumaba mientras esperaba que pasara el estrés del ajetreo nocturno. Siempre he abogado por mantener las clínicas veterinarias abiertas las 24 horas; durante la madrugada, siempre suceden cosas malas. Observando la escasa actividad, los pocos autos que pasan por la calle, me distraigo al escuchar un grito masculino a lo lejos: '¡No cierren! ¡Por favor, no cierren!'. Al encontrar de dónde venía el sonido, me encuentro con un hombre sosteniendo a un gato, aparentemente inconsciente y muy débil.

'Es mi gata, Uma, creo que se tragó algo y no puede respirar'. Puedo percibir la nerviosidad en la voz del hombre. Entro rápidamente a la clínica, me pongo mi bata, lavo mis manos y me coloco los guantes, siempre con el hombre siguiéndome. Luego, tomo a la gata de sus manos, la ausculto, le aplico anestesia local para no afectar más los latidos del felino y comienzo mi procedimiento.

Al salir del quirófano, el hombre se levanta y me mira nervioso. '¿Qué pasó? ¿Cómo está Uma? ¿Murió? ¿Por qué no la trajiste?'. Dispara sin siquiera respirar. 'No te preocupes, Uma está bien, solo comió algo que no debía. Tenía muchos elásticos para el cabello en su estómago y uno atascado en su garganta dificultando la respiración, pero ahora está bien, solo está un poco aturdida. Si quieres, te llevo a verla', sonrío tratando de aliviar la tensión.

En la sala de internados, él observa a otros animales hasta que se encuentra con su gata. 'Se ve graciosa con la lengua afuera', comenta en tono bajo y risueño, viendo que lo peor ya pasó. '¿Cuándo puedo llevármela?' Voltea hacia mí mientras acaricia la patita de la gata a través del vidrio.

En ese momento, me siento extraña, con un escalofrío y mis vellos erizados. Sacudo la cabeza intentando evitar cualquier pensamiento. 'Me gustaría dejarla al menos unas 5 horas en observación. Está en suero con medicación para el dolor. Puedes quedarte todo el tiempo que quieras. Voy a preparar un presupuesto para ti. ¿Te gustaría hacer un plan en la clínica? Puedo anular la carencia debido a la emergencia', sugiero mientras ajusto mi bata y paso la mano por mi cabello.

Después de pagar la cirugía, Enzo regresa al banco. 'Puedes ir a casa si quieres, te avisaremos cuando esté lista'. El hombre se acomoda en el banco y cierra los ojos. 'No hay problema, esperaré', dice mientras se acomoda. 'Entonces, puedes ir a mi sala de descanso; estaré observándola', señalo la puerta para que vaya. Él se va sin dudar.

Alrededor de las 6:30 am, Uma ya había despertado y estaba inquieta en su cabina. Después de dedicar un tiempo a los demás animales, me vuelvo hacia ella, que aún está débil. Cojo un colchón, me acuesto cerca de ella y le pongo snacks para animarla a comer. Mientras tanto, busco a Enzo en mi Instagram, lo encuentro fácilmente: ¡1 millón de seguidores! La recepcionista avisa que el siguiente turno está llegando, así que empaco mis cosas.

Al llegar a la sala de descanso, me encuentro con Enzo acurrucado en la cama. Admiro por unos segundos y comienzo a guardar mis cosas. Al mirar el reloj, me doy cuenta de que es hora de dar de alta a Uma. Toqué el hombro de Enzo, llamándolo, y él se enrosca en mi brazo como si fuera una almohada. Con la otra mano, le paso los dedos por el cabello para despertarlo, y abre los ojos asustado. 'Buenos días, señor Enzo', observa la situación y suelta rápidamente mi brazo. 'Lo siento, ¿puedo llevármela ya?' Me alejo mientras él se levanta y se acomoda.

'Claro, de hecho, estoy terminando mi turno. Será mi última paciente de hoy. Solo le pasaré sus medicamentos y le daré una caja transportadora'. Fuera de la clínica, me pongo mi abrigo. Puede que no sea el día más frío de Argentina, pero como soy brasileña, siempre siento frío. Al caminar hacia mi auto, escucho pasos: Enzo me llamó por mi nombre, captando mi atención antes de abrir la puerta del auto. 'Hum... doctora Ellise', se aclara la garganta, '¿puedo invitarte a un café? Por haber salvado a Uma de la muerte y haber cuidado tan bien de ella', dice mientras sostiene firmemente la caja de la pequeña gata. 'No hice más que mi trabajo', río mientras acomodo mi flequillo. 'Pero sí, encantada. Puedes llamarme Elle'. Cojo un trozo de papel, una pluma y anoto mi número, entregándoselo. 'Ahora ustedes dos necesitan descansar', sonríe mientras toma el papel y lo pone en la boca para no perderlo en el bolsillo mientras sujeta la casa. Entro al auto, le hago un gesto de despedida y me dirijo a casa, preguntándome a qué hora me llamará.

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[grvesgf]

VLADIMIR MAKAROV X HYBRIDCAT!READER FEM!READER.

ADVERTENCIAS: Vladimir ya es una advertencia, pistolas, sangre, ¿acoso?

RESUMEN: Conoces a Makarov en el club que trabajas.

PALABRAS: 762.

NO ESTA CORREGIDO, PERO NECESITABA ESCRIBIR SOBRE VLADIMIR.

✦ Siempre fuiste cuidadosa con quien hablabas, tus padres te enseñaron desde pequeña que la gente mala existe, especialmente para gente como tú, con tus orejas y cola de gato, llamando la atención.

✦ Trabajas en un club como mesera, atendiendo mesas a cierta hora, la hora conocida como "los contratos", donde los clientes firmaban y organizaban los contratos que cambiarían sus vidas.

✦ Tu cola se movía de lado a lado, tus orejas moviéndose por el ruido de la música, tu jefe te mando a atender una mesa.

"T/N ve a la mesa de arriba, sé lo más amable posible, pero no tanto, tenemos un invitado especial esta noche."

"¿Invitado especial? Pensé que todos nuestros clientes son importantes, pero entendido."

Tomas la bandeja y mientras subes las escaleras un escalofrío te recorre, te detienes un momento, piensas que has conocido gente mala desde que trabajas, pero esta sensación de peligro nunca las habías experimentado tan fuerte. Suspiras, solo queda una hora y puedes irte a tu casa, caminas hacia la mesa con tu mejor sonrisa.

"Bienvenidos, mi nombre es T/N y seré su mesera de esta noche." Miras a cada uno de las personas mientras sonríes, enrollas tu cola en una de tus piernas. "¿Qué es lo que desean?"

"¿Estás tú en el menú? Te comería entera."

Un hombre con un acento raro te mira, su mirada te pone incómoda.

"Lo siento, para su mala suerte no lo estoy, si quiere estar con alguna chica conozco a algunas."

"¿Y si te deseo a ti?"

El hombre se para, puedes sentir su aliento en tu cara, está claramente borracho, por instinto tus orejas se agachan cuando sientes que las toca.

"Nunca había conocido un híbrido en mi vida, no sabía que eran tan hermosos."

Algo te salpica en la cara, llevas tus manos a tu boca en shock, miras el cuerpo del hombre en el suelo, está muerto.

"Oh dios mío."

Levantas la mirada para darte cuenta de que un hombre tiene una pistola, abre y cierras tu boca intentando no entrar en pánico, pero recuerdas las reglas del club, respiras profundamente y llamas a tu jefe.

"Tenemos un cuerpo en la mesa vip, ¿Puedes venir a arreglar esto? Gracias."

En menos de dos minutos el piso está brillando de nuevo y no existe un cuerpo, te limpias las gotas de sangre de tu cara y vuelves a sonreír, ocultando tu miedo.

"Bueno ese fue un buen comienzo, ¿alguno quiere pedir algo o tendremos que vivir un momento así otra vez?"

Los hombres empiezan a pedir, tú anotas sus pedidos, pero notas qué falta uno, el hombre que disparo.

"¿Usted no desea nada?"

Inclinas tu cabeza en curiosidad.

"Nada en este momento, gracias."

Tus orejas se mueven, este hombre igual tiene un acento, pero no te molesta, ruso, reconoces fácilmente.

"Traeré sus pedidos inmediatamente."

Mientras te vas miras para atrás, tu mirada choca con el hombre ruso. Llevas todos sus pedidos con una sonrisa.

"Sí necesitan algo solo aprieten este botón, y yo vendré enseguida."

Los dejas solos, los minutos pasan y tu turno se termina, sales por la puerta trasera, cuando lo ve, fumando apoyado en una pared, dudas si hablarle o no, pero lo haces.

"Hey, perdón por molestar, pero quería agradecerte por haberme ayudado arriba, no estoy acostumbrada que los clientes de este club me hablen de esa manera."

El hombre tira su cigarro y se acerca.

"No fue nada, igualmente necesitábamos una excusa para sacarlo del camino."

Su acento y voz te causan un sonrojo, estiras tu mano.

"Soy T/N, sé que me presente, pero siempre es bueno recordarlo."

El desconocido aprieta tu mano, tu cola se mueve rápidamente, su toque te causa electricidad.

"Makarov, Vladimir Makarov."

Sonríes, sin saber que sellaste tu destino.

"Es un gusto conocerte Makarov, ¿O Vladimir?"

Preguntas en honesta confusión.

"Los dos están bien."

Un auto toca la bocina, llegaron por ti.

"Fue un gusto conocerte Makarov, pero han llegado por mí."

"¿Un novio?"

"¿Qué? No, no, solo mi hermano mayor, no tengo novio."

"Eso es bueno saberlo. Adiós T/N, espero volver a verte."

"Sí vienés unas dos horas antes me vas a encontrar, solo trabajo en la hora de los contratos."

Te despides de Makarov y caminas hacia el auto, te subes y suspiras, tu hermano te mira.

"¿Nuevo sugar daddy?"

Golpeas a tu hermano en el hombro.

"Cállate idiota. Solo le estaba dando las gracias, me salvo ahí arriba."

Sin que supieras, tu destino cambiaría, a Makarov le gustaste, y cuando algo le gusta, debe ser suyo. A cualquier costo.

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[suzukis-posts]

𝗟𝘂𝘀𝘁𝗳𝘂𝗹 𝗰𝗮𝗿 - 𝗞𝗘𝗜𝗦𝗨𝗞𝗘 𝗕𝗔𝗝𝗜/ 𝗛𝗔𝗡𝗘𝗠𝗜𝗬𝗔 𝗞𝗔𝗭𝗨𝗧𝗢𝗥𝗔

Hanemiya Kazutora/ Keisuke Baji x Fem!Reader

𝗔𝗗𝗩𝗘𝗥𝗧𝗘𝗡𝗖𝗜𝗔: Carsex, NSFW en general.

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Después de volver a cambiarte a tu ropa normal, saliste del exuberante restaurante, con una sensación de fuego todavía encendida en tu vientre aunque aún no posees el rubor de vergüenza en tus mejillas.

Tu situación era la misma de siempre, un grupo de pandilleros te mantenían aislada de toda persona a excepción de ellos y otras amistades.

Estabas en una especie de relación abierta con los pandilleros, todos podían tenerte, obviamente con tu previo consentimiento.

Te quedaste con las ganas ya que Hina te había interrumpido a ti y a Baji. Observas a Baji y Kazutora esperándote afuera del auto, Baji con una expresión impaciente grabada en su rostro. Una vez que te ven, Baji abre la puerta del asiento trasero.

── Entra.

Levantas una ceja ante su actitud antes de entrar y deslizarte hasta el final, pero Kazutora abre la puerta desde ese lado.

Baji también entra rápidamente y cierra la puerta mientras miras entre ellos con confusión. ── ¿Q-Qué están haciendo-?

Baji captura tus labios rápidamente mientras desabrocha tu camisa. ── Voy a terminar lo que empezamos. ── Murmura contra tus labios mientras Kazutora pasa sus manos arriba y abajo de tu cuerpo desde atrás.

Te sonrojas antes de alejarte un poco.── ¿E-espera ahora mismo? ¿¿En el coche??

── Joder, sí. Las ventanas están polarizadas, ¿recuerdas? ── Baji confirma antes de colocar besos húmedos en tu cuello.

── Pero alguien... podría... ── Gimoteas mientras Kazutora mordisquea el lóbulo de tu oreja.

── Me importa una mierda. ── Baji gruñe y te diste cuenta de que no había forma de salir de esto, así que lo dejaste empujarte contra Kazutora y tirarte de las bragas antes de provocar tu entrada con los dedos.

── ¿Tan mojada estás? Apenas empezamos~ ── Él sonríe, mirándote mientras miras hacia otro lado avergonzada.

Kazutora baja la parte superior de tu camisa y tus senos se derraman. ── Eres tan linda. ── Murmura, con el rostro de un tono rojo oscuro mientras los acaricia suavemente con cuidado.

Baji pone los ojos en blanco. ── ¿Así es como la nombras? ── Gimes un poco pero tratas de contenerte.

── ¿Ya probaste el anal? ── Kazutora susurra roncamente en tu oído.

── ¡S-Sí... con Izana y-! ── Tu espalda se arquea cuando Baji roza tu sensible manojo de nervios.

── ¿Mikey? ── Kazutora termina por ti. Asientes con un gemido entrecortado mientras Baji se desabrocha los pantalones.

── Adelante. Ella puede soportarlo. ── Baji sonríe a Kazutora. Miras fijamente, con los ojos entrecerrados mientras Baji se empuja contra tu agujero.

── Date prisa, lento. ── Baji gime cuando Kazutora libera su miembro de sus pantalones. Una exhalación temblorosa se escapa de ti mientras Kazutora te desliza lentamente sobre su eje.

── Finalmente. Empecemos con la diversión. ── Baji sonríe con un brillo loco en los ojos antes de empujar bruscamente.

Tus ojos se ensanchan por el dolor y placer que generan sus estocadas, cierras un ojo y un grito silencioso sale de tu garganta cuando él te golpea sin descanso. Estaba sexualmente frustrado en este momento y necesitaba desquitarse contigo por la atención que les bridabas a los demás.

Lágrimas brotaban de tus ojos fuertemente cerrados mientras gemías, gritando su nombre una y otra vez por lo bien que se sentía. Kazutora no se molesta en moverse, excepto por algunos empujones ocasionales aquí y allá.

Tu agujero estaba apretándose alrededor de él fue suficiente para poder inducirlo a un orgasmo. Así que simplemente se recostó y escuchó tus hermosos sonidos mientras besaba tu cuello, dejando moretones por todas partes.

── Mierda. ── Murmura Baji antes de levantar tus piernas sobre sus hombros y empujar más profundo.

Tus ojos se abren y sacudes la cabeza bruscamente. ── ¡N-no! ¡No!

Él arrulla. ── ¿Acaso es ese tu punto dulce? ── Se ríe sombríamente cuando empezaste a sollozar de placer.

Golpea tu punto g una y otra vez mientras sollozas, el placer es demasiado para manejar. El coche se balancea ligeramente de un lado a otro debido a los fuertes movimientos.

── Joder, sí. ── Él gime, tu vagina revoloteando a su alrededor deliciosamente. El sudor rueda por su cuerpo y su cabello negro se pega a su frente mientras jadea pesadamente.

Él estaba cerca. Solo necesitaba que te corrieras con él. Las ventanas del auto estaban completamente empañadas ahora por todas las actividades que ustedes tres estaban haciendo y el aire estaba cargado con el olor a transpiración y sexo.

Kazutora finalmente decide hacer algo y baja su mano hacia tu clítoris. Con unos pocos roces suaves, estabas cremoso alrededor de la polla de Baji y apretando alrededor de la de Kazutora.

Los sollozos ahogados se escapan de tus labios mientras Kazutora te besa rápidamente. Los movimientos de Baji tartamudean antes de liberarse dentro de tu matriz con un profundo gemido.

Kazutora también se corre adentro, alejándose de tus labios con respiraciones pesadas y una expresión sonrojada.

Los tres jadean pesadamente, reuniendo sus pensamientos de la sesión de sexo confusa. ── Eso fue genial. ── Baji sonríe tontamente mientras pones los ojos en blanco. Se retira y se esconde mientras intentas levantarte.

Haciendo una mueca de dolor, caes hacia atrás, pero Baji te ayuda a levantarte, deslizándote fuera de Kazutora.

Él suspira, cerrando los ojos mientras su pene se ablandaba a la vista. Una vez que todos regresaron a la sede, Mikey e Izana estaban esperando afuera con impaciencia.

Ambos los ven a ustedes tres caminando hacia ellos. ── Bueno, ustedes se tomaron un tiempo terriblemente largo. ── Mikey frunce el ceño.

── Pero aun así volvimos, ¿no? ── Baji se encoge de hombros antes de pasar al edificio.

Izana observa antes de hablar algo que lo hizo tropezar. ── Dúchate, apestas a sexo.

Baji se da la vuelta con el ceño fruncido y una expresión nerviosa mientras miras hacia abajo con timidez. Mikey suspira antes de agarrar tu mano y tirar de ti, sin perderse la forma en que cojeabas. ── Vamos a ducharnos juntos _______.

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[stupidworld]

Cuando se cierra una puerta, se abre otra; sin embargo, a menudo miramos tanto la puerta cerrada que no vemos la que se nos ha abierto.

[tengomilpalabrasparati]

Qué hacer cuando tu pareja quiere terminar pero tú no

Es difícil aceptar y asumir que tu pareja quiere terminar con la relación cuando tú aún la amas. Los motivos por los que esto puede suceder son varios: ya no siente lo mismo, le gusta otra persona, quiere tomar otro camino…

Quizás no te lo esperabas. Puede que no estuvieras viendo los problemas que había (o no quisieras verlos). Es posible, incluso, que tu pareja te hubiera comentado que tenía otras motivaciones, pero tú no la estabas escuchando con atención. Ahora bien, tampoco es necesario que te culpes por ello.

Cuando tu pareja quiere terminar, pero tú no, es importante que tengas en cuenta algunas cosas importantes. 

Poner punto y final a una relación no suele ser fácil: son muchos los momentos vividos y muchos recuerdos que se han formado a partir de ello, pero es posible. Tan solo necesitas tener presente que superar una ruptura es un proceso que requiere tiempo y un gran trabajo emocional.

Por ello, a continuación te facilito unos consejos que debes tener en cuenta para salir reforzado de esta situación.

No mendigues una segunda oportunidad

Lo peor que puede suceder si mendigas una segunda oportunidad es que tu pareja te diga que “sí“. ¿Por qué? Porque, tarde o temprano, esa relación volverá a estar en la misma situación que ahora. No es un paso adelante, es un paso atrás.

Claro que es necesario que pidas explicaciones y que te las den. Esto te dejará más tranquilo: tendrás un motivo que explique la causa de la ruptura. Sin embargo, esto no debe abocar en súplicas para que no te dejen.

Por muy duro y difícil que pueda sonar, es necesario que aceptes que tu pareja quiere terminar la relación. Va a doler, y mucho. No obstante, no puedes intentar manipular a la otra persona para continuar una relación forzada.

Contacto cero en todos los casos

Seguro que si tu pareja quiere terminar y tú no, no te planteas el contacto cero bajo ningún concepto. Lo cierto es que es necesaria una distancia para asimilar la ruptura. Nadie es de piedra y, como hemos dicho, las rupturas no son sencillas.

Por ello, en caso de que tu pareja quiera terminar y tú no, dejar de contactar es fundamental. Así, evitarás mendigarle una segunda oportunidad, posibles rechazos y que te duela aún más verla disfrutando con sus amistades.

Es necesario que te des el tiempo que requieras para cerrar este capítulo, aunque te esté costando mucho hacerlo. Cuando hayas sanado, podrás retomar el contacto si así lo deseas.

Refúgiate en tus seres queridos y busca ayuda si la necesitas

Rodéate de tu familia y de tus amigos durante este trance. Te sentirás arropado y apoyado y será mucho más fácil pasar por el bache. De la misma forma, no dudes en acudir a terapia si sientes que lo necesitas

Cuando tu pareja quiere terminar, puede que tú no lo desees porque lleváis tantos años juntos que no sabes qué hacer con tu tiempo. De repente, te ves solo, sin planes, sin futuro… Sin embargo, reflexiona acerca de todas las metas que te has dejado por el camino.

¿Querías hacer puenting? ¿deseabas viajar a Australia?¿tu sueño siempre ha sido volver a estudiar? Si nada te lo impide y lo que lo dificultaba era una relación de pareja, ¡ahora no tienes excusa!

Piensa en todos aquellos sueños que dejaste de lado por estar en una relación y que ahora puedes alcanzar porque no hay nadie que te lo impida. Quizás, tu ruptura no sea una puerta que se cierra, sino una ventana que se abre.

ℜ𝔬𝔰𝔞🖤

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[palabrasenpastillas26]

Escribiendo desde la otra orilla, Daniela Arboleda

Estoy mirando el techo y recordando todas las miradas que lograron perseguirme entre el humo y el licor de ese cubo fosforescente al que fui con mis amigos a bailar para olvidarme de mi.

Como deseo de media noche, viene en forma fugaz la silueta de un chico tímido, pero con mirada profunda, de esas que te invitan a pasar todo una vida arrullándote frente al mar, pero el solo ve la cotidianidad como problema personal.

Intento llegar a el, pero sus piernas temblorosas y hábiles se resguardan en esquinas frías con bufones protegiéndolo. Se queda en mi cabeza como una buena migraña antes de empezar el día, curiosamente me hace pensar en todas las veces que creemos elegir lo correcto, olvidando la adrenalina de ser valiente para fracasar en grande.

Sí, aquellos intentos donde el miedo no hace parte de la ecuación, solo responde a la seretonina de vivir el presente y no andar de pelea con el hubiese. Donde el para siempre no atosiga, sino que se convierte en caminar como un todo, una decisión diaria que respetan dos personas conscientes de que el amor es el ejercicio práctico que abre las puertas del jardín, cierra las bocas inquietas del engaño, pero sobretodo: alimenta el alma con la simple franqueza de aceptar ese sentimiento divino que vive dentro de cada uno.

Aquel chico me recordó todas las escenas varoniles donde la masculindad de muchos fracasados rodearon mi falsa idea de morir de amor, esperar lo perfecto, perdonar lo inperdonable o vivir el sueño de un cuento infeliz. Por un momento volví a esas partes donde fui una estación más de trenes que no llegaban a ninguna parte, donde nadie se arriesgó a darlo todo sin consultar con el cara o cruz como seguro vital para la toma de decisiones trascendentales de la vida.

Vi como los domingos se convirtieron en rutinas de películas y sexo post-depresión secuestrando mi habitación, de que las horas en el diván se desvanecieron con una simple sonrisa pícara apuntando a mi cara, siendo una promesa de esas bárbaras y efervescentes de la adolescencia que gritan: me costarás la vida, pero lo quiero todo. Sin embargo, quedé suspendida en ese hilo tan delgado cuando ves la realidad, pero las decisiones se escabullan entre el miedo. Entendí que prefería la compañía de los recuerdos y una herida por sanar que pisar infiernos con sabor a soledad en brazos débiles y con miedos: ya no era una forma sexy de darle un abrazo a mis latidos.

La niebla se disipó y entendí que aquel chico prefirió el miedo por pensar en que yo también lo tendría,pero ignoró un detalle: la valentía estaba detrás de su espalda gritándole porque corriera a saludar, pues me cansé de buscarlo en esas esquinas donde prefirió esconderse.

Le diría que viniera, me abrazara como quien nunca ha conocido la felicidad, pero también debe entender que yo no curo sus heridas, tengo la firme intención de abrazar su desamor, más no de alentar sus miedos. Puedo crear un jardín pronunciando su nombre, más no acepto que quiera regarlo con lágrimas ajenas. Aquella noche nos elegimos, pero esperaré paciente para hacernos realidad.

#cafeparalaluna #palabrasenpastillas

[positive-ism]

Cuando una puerta se cierra, otra se abre; pero a menudo miramos tanto tiempo y tan tristemente la puerta cerrada, que no vemos la que se ha abierto para nosotros. Alexander Graham Bell

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[neuroconflictos]

¿Cuántos 'te quiero' son demasiados cuando quien los genera tambien los devuelve? ¿y cuántos cuando no son recíprocos? ¿quién decide cuando un amor pasa a ser EL amor? ¿y quién cuando este deja de ser incluso uno? Un sinfín de interrogantes que nunca tendrán respuesta, al menos no una universal. Nadie conoce la verdad absoluta y cada quien siente a su manera. Pero... ¿Que es sentir? Sentir es experimentar, es animarse, atreverse y esperar lo mejor. Es arriesgarse y resguardarse, es permitirse ser y limitarse a la vez. Sentir nos condiciona y nos libera, nos abre un sinfín de puertas y nos cierra otras. Sentir nos hace pensar subjetivamente y accionar tontamente, pero también nos permite vivir, disfrutar y ser felices. Entonces, ¿por qué da tanto miedo? ¿Por qué? Si se supone que siempre nos trae cosas buenas. ¿Por qué? Si es 'lo mejor del mundo'. ¿Por qué? si 'el que no siente aún no aprendió a vivir'. ¿Por qué? si el que ama nunca pierde.

Cherryofsaturn

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[isidro]

Hellen Keller

Cuando una puerta de la felicidad se cierra, otra se abre. Pero solemos quedarnos mirando a la puerta cerrada por tanto tiempo, que no vemos la otra que se ha abierto para nosotros. Hellen Keller flickr Más información 

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[yeirobert]

*Reiki... paz... en ti universo...*

Si no salió como esperaba y es para algo, no me desanimo, todo lo tomo con esa paz...

Sé que en cada contratiempo se oculta una oportunidad para algo mejor.

La vida me reserva sorpresas maravillosas y a veces, lo que parece una decepción o un fracaso es sólo el camino que me lleva hacia lo que realmente necesito.

En ti universo merezco momentos y situaciones mucho mejor de lo que espero...

Yo mantengo la fe en mi Ser Supremo y en mismo, cuando una puerta se cierra, otra se abre con infinitas posibilidades de recibir lo mejor... siempre soy agradecido.

Aprendo de cada experiencia que me fortalece e inyecta el entusiasmo para avanzar a cada meta propuesta.

Hoy padre y madre tomo la de determinación de ser mejor día a día con la convicción de que lo mejor está por venir.

El cosmos, mi cuerpo, células, espíritu y alma conspira a mi favor y mis logros me esperan con los brazos abiertos.

*Para mi... Ho'oponopono..*

*Respiro profundamente y sigo confiando.. Námaste...*

*Recibo toda la luz anaranjada del universo...*

[proyecto-anunciador]

La "pequeña puerta" que Dios abre

Dios muestra un bien inesperado en medio de la cruel maldad humana. Dietrich Bonhoeffer quería vivir estudiando tranqui lamente e instruyendo a sus estudiantes, pero esta puerta estaba cerrada para él. De hecho, Bonhoeffer pasó la vida sufriendo en un seminario teológico subterráneo y en un campo de concentración hasta que perdió la vida. Sin embargo, dejó un legado de fe que continúa conmoviendo los corazones de miles de personas. Una niña solitaria recibió un diario íntimo, que tenía cuadros rojos y blancos, por su cumpleaños número 13. Como no tenía muchos amigos, este pasó a ser su mejor amigo y todos los días escribía allí sus sentimientos y pensamientos que no le contaba a nadie. Lamentablemente, la niña murió luego de dos años de permanecer encerrada. Esta era Ana Frank y El diario de Ana Frank se convirtió en una de las obras maestras literarias del siglo XX. Así, esa puerta que para nosotros parece enorme, para Dios es diminuta; y lo que para nosotros luce como una puerta pequeña, para Dios es grande. De este modo, cuando se cierra esa puerta que parece magnífica y exitosa, se abre otra pequeña que nos lleva hacia una nueva misión y es Dios quien la abre. Como no podemos comprender todo lo que Dios hace, no debemos frustrarnos cuando se cierra la puerta que tanto deseábamos. Y, aunque nuestra vida esté manchada de fracasos y decepciones, la gracia de Dios produce la chispa de la oportunidad, aquella que ofrece un gran cambio para nosotros.

Tantos destinos a donde ir... ¿cómo saber cuál elegir? John Ortberg.

[hablemosdeloquepodemos]

AMAPOLA

¡Ay que lindo es poder compartir lo que puedo hablar!  Bueno, "AMAPOLA" es de mi autoría, participe con esta breve historia de cinco capítulos en un concurso literario y es la historia de dos personas se aman profundamente. No todos tenemos la posibilidad y la valentía de vivir un gran amor. Y de sostenerlo a pesar de las tormentas de la vida. Aún así, creo que tanto amor que se separa por cosas triviales a él, termina pululando por el universo como energía que trasciende de alguna manera. O al menos creo eso como respuesta a ¿a dónde se va el amor que no es amado? ¿a dónde va el amor que no fue vivido? ¡¡Gracias infinitas por leerme!! Mer <3 

5 de abril de 1995. Córdoba, Argentina.

Es de noche dentro de ese lugar, lleno de silencios.

Lugar de almas deambulantes, historias tejidas de antaño, la noche cálida de otoño en la ciudad de Córdoba. 

Subieron las escaleras entre risas. Los nervios no hacían más que aumentar la adrenalina por sus cuerpos. Por momentos se sentía esa niña del ayer enamorada del mismo joven. Por momentos, una mujer llena de poder, que todo lo puede, que todo lo soporta. 

Seis años después, aún lo eran. Dos cuerpos enamorados.

Sabían que estaban haciendo lo que no debían, pero sabían que, si no lo hacían en ese momento, la vida les robaría el tiempo y como un reloj de arena, se escaparía grano tras grano de arena. 

Un paso en falso y ambos, podrían perderlo todo. 

Malena recorría los años dorados de su juventud, pero en ese mundo de sentimientos y perpleja ante la oportunidad que le estaba dando la vida, no sabía que estos hermosos años quedarían marcados. 

El sentir de las escaleras en sus pies, como pasos de gigantes queriendo escapar. Lujosas y marmoladas escaleras los separan de la mejor locura de sus vidas.

Llegaron al pasillo. El primer descanso, al subir las escaleras, era largo y sombrío; pulcro pero antiguo; silencioso, extraño, como si de lo grande y vacío te asfixiara. Lleno de puertas que parecían interminables de abrir y cerrar. En el transitar del corredor, y casi con un eco imperceptible, se escuchan voces, a lo lejos. 

Llegaron a la habitación: una puerta blanca, de madera laqueada que cuando se abría, el picaporte largaba en su crujido, todas las historias pasadas. Apenas entraron, esa mirada cómplice envolvía de energía todo el espacio. Las manos sudorosas, estrechadas, nerviosas. Julián, guía cada paso. Al pararse en la antesala pequeña y blanca, Julián le susurra con pudor: - Male, ¿estás segura de seguir? -. Malena afirma en silencio, sus ojos y su cuerpo estremecido de amor y entrega; avanza junto a Él. Y al entrar, es como si ese lugar se transformara en una mandala de inmersos colores, y tonos. 

Como si fuera un suspiro que al cerrar los ojos sentimos, se huele el perfume de la limpieza. Un baño de un tenue color celeste se percibe al continuar. Las toallas, blancas. Enfrente de ellos, una segunda puerta, igual a la primera. Pero esta es la puerta que dispone para la entrega. Perceptiblemente, dos corazones laten al son de su natural sístole y diástole; diástole y sístole; reiteradas veces, cada vez más rápido, cada vez más inquietos. Julián abre rápidamente la segunda puerta, y es igual que pasar un umbral de color blanco, colmado de vida. Como un mundo que solo algunos pocos han conocido al ser atravesados por el verdadero amor. Eran las perras mariposas moviéndose en sus estómagos, inundados de felicidad, inundados de deseo mutuo…Inundados. (suspiro)

Enmudecida por el tan esperado encuentro que se suscita ¡al fin!, en realidad, Malena se deja llevar hasta los brazos de Julián y tiembla. Julián la suelta a medias y fija su mirada en ella mientras que le repite: ¡sos temiblemente hermosa! y todo así cierra y abre, con un beso que otra vez, los dejo sin respirar........

#amapola #amor #historias #continuara #historiacontada

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03: Distracciones

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Bowser Jr. estaba aguardando afuera de la habitación de Larry, a punto de tocar la puerta, pero detiene su mano al escuchar una conversación que no distinguía bien. Al cabo de un momento y sin que le dé tiempo a Jr. para reaccionar, Larry abre la puerta y lo nota ahí.

Larry: ah! Eres tú! ¿Qué haces aquí?

Jr. se sentía algo apenado mirando erráticamente a varios lados

Jr.: n-nada… sólo… quería jugar un ratito contigo… ¿puedo?

Larry lo miraba con algo de fastidio mientras levantaba una ceja y apoyándose en el marco de la puerta.

Larry: ¿es en serio? Dijiste que nadie querría jugar conmigo, en el desayuno

Jr. se quedaba un momento en silencio antes de continuar mientras pokeaba sus dedos

Jr.: yo… lo siento por eso

Larry: (suspira) como sea… ahora saldré un rato. Si quieres jugamos en la noche

Salen Bobby y Larry, el cual cierra la puerta de su habitación

Bobby: (a Jr.) iremos por helado, ¿quieres venir?

Jr.: (alegrándose) sí! Quiero! Quiero!

Bobby: entonces vamos! (sonriendo)

Larry parecía no estar muy de acuerdo con ello pero luego sonríe tiernamente al ver el entusiasmo de ambos

Larry: claro, vamos!

Antes de que si quiera se muevan, alguien aparece por detrás interviniendo

- espera un momento! -los tres pequeños Koopa ahí voltean su mirada con cara de duda. Se trataba de Ludwig, quien había salido de su habitación con un portafolio, un libro y unas hojas, acercándose a los chicos y poniéndose al lado de Bowsy. Larry pone una ligera cara molesta

Larry: ¿y ahora qué quieres?

Ludwig: Bowsy tiene que atender un asunto, tiene un examen de matemáticas

En eso Jr. pone cara de susto

Jr.: (pensando) rayos! lo olvidé… y no estudié nada

Ludwig: estudiaste, ¿cierto?

Jr. se pone nervioso y trata de disimular su respuesta

Jr.: c-claro, cómo no iba a hacerlo? De todos modos… me están llamado de… algún lado…

Después de decir eso se pone a correr, pero Ludwig lo agarra de su bandana, lo cual hace que Jr. se detenga bruscamente y se ahorque un poco con ella, cayendo hacia atrás. Tanto Bobby como Larry se sorprenden al ver eso.

Jr.: (levantándose) ¿tengo que ir ahora? No quiero…

Ludwig: ¿Por qué no?

Jr.: quería un helado…

Bobby se le acerca a Jr. y le calma

Bobby: tranquilo, ya saldremos en otra ocasión. Esto es importante

Bowsy refunfuña y exclama con un tono de resignación -está bien…- y luego de eso va con Ludwig. Los otros Koopas se empeñan en caminar.

Larry: ¿ya ves? Hace un numerito por todo

Bobby: calma… no es como si a todo nos guste estudiar, sé generoso con él

Larry: siempre tengo que serlo, odio cuando se lleva toda la atención. Por una vez quiero que lo regañen por ser caprichoso.

Bobby: (riendo nerviosamente) eh… bueno… cambiando de tema, ¿qué te gusta hacer aparte de jugar videojuegos? ¿Algún deporte favorito?

Larry: hasta el momento no

Bobby: (poniendo su mano en su mentón) ¿qué me dices si jugamos algo para ejercitarnos un poco?

Larry: (nervioso) p-pero no soy bueno en ello

Bobby: yo tampoco, la idea es divertirse. ¿Se te viene algo a la mente ahora mismo?

Larry mira a todos lados y nota el patio donde hay una cancha

Larry: bueno, ¿qué te parece si jugamos tenis? Papá suele practicar ahí y de vez en cuando jugamos

Bobby: me parece bien. ¿Sabes jugar?

Larry: ni idea

Bobby: ah… entonces juguemos por diversión.

En lo que esos dos van a la cancha, Jr. y Ludwig llegan a un salón de clase donde hay un pupitre pequeño para Bowsy, el cual ocupa. Saca su lápiz y goma de su mochila con forma de hamburguesa, y Ludwig le entrega su examen.

Ludwig: aquí tienes. Es un examen de fracciones, con alternativas. Cuentas con una hora para terminar. Si dices que has estudiado, entonces será el momento de ponerlo en práctica.

Después Ludwig se sienta en un pupitre más grande situado en dirección al pizarrón, colocando un cronómetro en una mesa cercana y luego saca un libro para leer. Mientras tanto, Jr. oculta un poco su mirada de nerviosismo mientras lee. Por desgracia, parece no estar muy concentrado y divaga mientras trata de leer el examen. Mira disimuladamente a Ludwig y voltea a ver su hoja. Pone su nombre en ella, con cierta dificultad ya que le tiembla la mano un poco.

Al cabo de un rato mira el reloj y nota que ya han pasado veinte minutos y no ha escrito nada. Sentía que su mente estaba en blanco. Trataba de respirar para luego tratar de responder, pero en vez de concentrarse en los números, lo que hacía era dibujar sobre el mismo examen, un gatito.

Jr.: (pensando) aww qué lindo!

Ludwig: (apareciendo por detrás) es un lindo dibujo, no?

Al escuchar eso, Bowsy se asusta y tapa su examen, poniendo sus ojos como platos, exhalando un pequeño gemido

Ludwig: será mejor que te concentres (se dirige a su propio asiento)

Jr.: (pensando) ¿en qué momento se acercó? No me di cuenta

Jr. trata de retomar su examen, pero empieza a soñar despierto, imaginando que los números cobran vida y revolotean a su alrededor, riendo mientras deja el tiempo pasar. Ludwig lo mira con una cara de suspicacia y extrañeza. Poco tiempo después, suena la campana del cronómetro y Bowsy despierta del trance, el cual susurra -oh no…- y mira su propio examen, que estaba en blanco, salvo por los dibujos y rayones que había plasmado ahí.

Ludwig cierra el libro que leía y lo deja en la mesa, para luego ir a recoger el examen. Jr.  voltea la hoja bocabajo y miraba a otro lado mientras movía sus manos entre sí. El hermano mayor mira su examen y pone una cara de indignación, suspirando pero no diciendo nada y se retira. Jr. mira hacia abajo y se lleva sus manos a la cabeza.

Jr.: estoy frito…

En eso, llega Kamek junto a Ludwig para hablar del examen.

Kamek: bueno… (llevándose la mano a la frente) ¿qué te puedo decir? Has reprobado, Jr… otra vez…

Jr. hacía risitas nerviosas nuevamente, tratando de mirar a otro lado y teniendo una expresión incómoda.

Ludwig: (suspira) me dijiste que habías estudiado

Jr.: sí… es que… me distraje un poco

Ludwig toma el examen y lo zarandea frente a Bowsy mientras le alza un poco la voz

Ludwig: ¡¡¡¿¿¿llamas a esto un poco???!!! ¿Acaso eres un tonto? ¿No te ha servido de nada lo que te he ensañado?

Deja caer el examen al suelo. Jr. lo recoge y lo conserva.

Kamek: cálmate, Ludwig

Ludwig: ¿cómo esperan que me calme? Siempre es lo mismo con Jr.

Jr.: L-Ludwig… (Con pequeñas lágrimas en los ojos) p-perdón… te prometo que yo…

Ludwig: no! Ya basta de promesas. Varias veces me has dicho lo mismo y no progresas nada. No sé para qué me molesto, la verdad

Kamek: sólo necesita un poco de ánimos, aún es muy pequeño y le cuesta

Ludwig: él ya lleva varias semanas con la misma materia y no creo que aprenda

Kamek: démosle otra oportunidad, tal vez en esta ocasión mejore

Ludwig: yo ya me cansé de eso. ¿Sabes qué? Renuncio a ser su profesor. Búscate a alguien más…

Ludwig sale de ahí furioso, azotando la puerta, a lo que Kamek suspira y va tras él. Saliendo de ahí, el pequeño Koopa agarra su mochila guardando sus cosas y se dirige a su habitación. Su forma de caminar es lenta y arrastrada, suspirando de vez en cuando. En ese momento se tropieza y cae hacia adelante, dejando caer sus útiles escolares. Al cabo de unos momentos, se pone a sollozar un poco, todavía estando en el suelo. Alguien que estaba cerca va donde está él.

- ¿estás bien, amiguito? -dice ese alguien con una voz serena. Bowsy mira hacia arriba y nota que es Mykey, el cual le extiende la mano para ayudar a levantarlo. Jr. le da su mano y es ayudado a levantarse sacudiéndose del polvo del suelo. Mykey nota sus pequeñas lágrimas

Mykey: ¿qué te pasó?

Jr.: (tratando de evitar contacto visual) me caí

Mykey: sí, entiendo, pero me refería a antes de eso. Me percaté que estabas cabizbajo

Jr.: es que… soy un tonto… eso es lo que pasa…

Mykey: no digas eso

Bowsy sacaba algo de su mochila, era la hoja del examen que había reprobado, mostrando un enorme cero con marcador rojo y con una leyenda que decía “no hay caso”, a lo que Mykey lo mira y comprende lo que trata de decir. Posteriormente a eso Mykey toma la hoja para ver los detalles y preguntas, notando a su vez el pequeño dibujo de un gatito en la esquina.

Mykey: vaya!

Jr.: ya lo ves… es por eso que soy un tonto. Ludwig ya me lo dejó en claro…

Mykey le toma de la mano y lo lleva a la ventana más cercana

Mykey: no creo que lo seas. Quizás no hayas podido responder el examen… pero pareces dibujar muy bien. Eso no te hace tonto, sino con habilidades diferentes

Jr.: sí… pero ahora estoy en un problema enorme

Mykey le observa algo confundido

Jr.: Ludwig era mi maestro y renunció a serlo… (pokeando sus dedos) por mi culpa… si yo no hubiese sido tan flojo (con lágrimas en los ojos) y haber hecho mis deberes… esto no habría pasado…

Ante eso empieza a llorar, cubriendo sus pequeños ojos con ambas manos. Mykey se le acerca y le abraza un poco para calmarlo

Mykey: calma, pequeñito… estas cosas pasan. Vamos a hablarlo con Ludwig para ver si se puede llegar a un acuerdo, tal vez sólo estaba algo cansado, recuerda que ya son las más de las 6 de la tarde.

Bowsy seguía sollozando mientras miraba a Mykey, a lo que éste pone sus manos en las mejillas del pequeño y le seca las lágrimas con sus pulgares

Jr.: p-pero… no quiero ir solo… ¿me puedes acompañar?

Mykey: desde luego, pequeño

Jr.: (sonrojado mirando a otro lado) d-dime Jr., o Bowsy…

Mykey: (enseñando la lengua) sí, perdón

Luego de eso, ambos van donde Kamek en su despacho, donde por cierto también estaba Ludwig recogiendo sus cosas.

Mykey: ¿hola? Permiso, ¿están ocupados?

Kamek: oh, adelante, hijo. ¿qué se te ofrece?

Mykey: es sobre Bowsy, está preocupado por su tutela

Ludwig: ¿desde cuándo?

Mykey: no sabría decirte, pero Jr. no quiere que renuncies

Ludwig: (acercándose a Mykey) lo intenté pero no quiso poner de su parte

Mykey: bueno… ¿quieres que te ayude un poco a educarlo?

Con esas palabras, Ludwig lo mira levantando una ceja

Ludwig: ja! No necesito tu ayuda, pero ya que insistes, te dejo ser su profesor (le entrega sus notas de estudio) vamos a ver cuánto pasa antes de que pierdas la paciencia

Mykey: (pensando mientras miraba a Ludwig) ¿pero qué…?

Posteriormente Mykey mira de reojo a Kamek, el cual hace se encoge de hombros con una cara de duda de lo dicho por Ludwig.

Mykey: ah… está bien. No era ésa mi idea, pero está bien

Jr.: ¿Ludwig?

Éste último mira a Jr.

Jr.: perdóname por ser un tonto… (agachando su mirada)

Ludwig sólo lo mira con indignación y se retira sin decir nada. Mykey lee las notas de estudio de Ludwig. Mientras Kamek va a donde Jr.

Kamek: Bowsy, amor, ¿estás bien?

Jr. niega con la cabeza, no queriendo responder

Kamek: bueno, por lo pronto habrá que ver este asunto

Jr.: bueno… si Mykey está de acuerdo… quisiera que él fuese mi profesor (mira a Mykey) ¿puedes, por favor?

Mykey lo mira, notando su cara de tristeza. El Koopa mayor se siente conmovido con él

Mykey: no te preocupes, te ayudaré con esto

Jr.: ¿aunque yo sea un tonto?

Kamek: no eres un tonto, no creemos que lo seas

Jr.: Ludwig sí

Kamek: tal vez, pero… bueno, no sé qué decir

Mykey: lo que no te dijo Ludwig es que hay varios tipos de inteligencia. No todos son buenos con las matemáticas, pero tú tienes un talento más bien creativo, y eso es lo que haremos

Jr.: ¿cómo?

Mykey: (sonriendo) ya lo verás, pero dime… ¿quieres empezar ahora o mañana?

Jr.: ehm… quisiera comenzar mañana. Ahora tengo un poco de hambre

Kamek: es cierto, ya va siendo la hora de cenar. Con permiso, chicos. Debo ir a preparar la mesa. El rey ya debe tener lista la comida. Mykey, ¿puedes decirle a los demás que vayan a cenar, por favor?

Mykey: con gusto. Vamos, Bowsy

Kamek sale primero y va volando en su escoba. Jr, mientras cierran la puerta del despacho de Kamek, se acerca un poco a Mykey

Jr.: ¿crees que pueda mejorar en matemáticas?

Mykey: yo creo que puedes, mañana intentaremos algo, y si no funciona intentaremos otra cosa hasta que logres aprender (le guiña con una sonrisa)

Jr. sonríe también y asiente, afirmando y exclamando -¡sí!-

No muy lejos de ahí estaban Bobby y Larry, regresando de su partida amistosa de tenis, algo cansados

Larry: (agitado) v-vaya! No me había cansado tanto en mucho tiempo

Bobby: es porque te falta salir un poco más, pero he de admitir que yo igual (risas)

Larry: ¿qué te parece si venimos mañana a jugar de nuevo? Esto se ve divertido!

Bobby: claro, me encantaría.

Ambos se encuentran con Mykey

Mykey: ah! Hola, hermanito, Larry. Dice el señor Kamek que vayan a cenar, pero antes a lavarse las manos.

Larry: nah, qué flojera y tengo hambre.

Bobby: vamos, que si no, no podremos comer

Larry: pero…

Antes que termine de hablar, Bobby le agarra la mano y se dirigen al baño.

Bobby: vamos!

Larry: ok, pero yo puedo caminar

Bobby: es una pequeña venganza (sacando la lengua)

Larry se ríe ante eso. Al poco rato, los chicos llegan al comedor y empiezan a comer. Al llegar Bobby y Larry e ir a sus lugares y también llega Jr.

Bobby: hola, Bowsy, ¿qué tal te fue?

Jr. mira algo apenado pero responde sutilmente

Jr: b-bien, al menos en parte…

Larry: volviste a reprobar, ¿cierto?

Jr.: c-cállate, Larry!

Larry: ¿me equivoco?

Ambos se acercan y se hacen morisquetas y enseñándose la lengua el uno al otro mientras Bobby los mira

Bobby: mejor vamos a sentarnos (yéndose a su lugar)

En eso Jr. lo detiene

Jr.: espera, Bobby. No quieres sentarte al lado de Larry?

Bobby: ah, pero ese es tu lugar y acordamos en respetarlo

Jr.: sí, pero…podemos cambiar por esta vez? (susurrándole) no quiero estar frente a Ludwig por un buen rato

Al oír eso el pequeño peliverde se confunde un poco mirando de reojo a Ludwig

Jr.: por favor…

Luego de una pequeña pausa y mirando a Jr., Bobby responde

Bobby: está bien, Jr.

Luego de sentarse comienzan a comer. En eso llegar Bowser a instalarse también

Bowser: hola, mis niños, ¿Cómo han pasado?

Roy: bien, aunque sin mucho qué hacer

Iggy: sí, estuvo muy tranquilo hoy día

Wendy: tal vez porque Larry y Jr. estuvieron en sus cosas y no molestaron a los demás

Larry: pues, para tu información, hoy estuve jugando tenis con Bobby

Todos ahí se sorprenden y miran atónitos

Lemmy: ¿desde cuándo te gusta salir de tu habitación?

Larry: es verdad que no lo hago, porque no me gusta, pero Bobby me invitó a jugar, y pues… ¿Cómo no decirle que no a este Koopa tan amigable?

Wendy: vaya! Felicidades, Bobby, lograste algo que ninguno de nosotros pudo: sacar a Larry de sus videojuegos

Bobby: ¿no les gustaría venir a jugar un día? Será divertido

Iggy: no soy muy fan de los deportes, lo mío es la ciencia

Lemmy: yo podría, pero no sé jugar

Morton: TAMPOCO MORTON

Roy: prefiero más el rugby

Bobby: bueno, sí algún día quieren nos acompañan.

Bowser: eso es una buena idea. Pasar tiempo con tus seres queridos es de lo mejor. Por cierto, Ludwig, ¿cómo le ha ido a Jr. con sus tareas?

Ludwig se pone algo serio y responde con cierta evasiva

Ludwig: honestamente creo que le irá mejor con otro profesor. Mykey se ofreció, así que él le enseñará de ahora en adelante

Mykey: (susurrándole a Ludwig) eso no es del todo cierto

Jr.: bueno, sí… papá… es que… saqué un cero la última vez…

Bowser: ¿Cómo pudo ser eso posible?

Jr.: es que no estudié muy bien que digamos

Ludwig: (sarcástico) sí, ¿quién lo hubiera dicho?

Bowser adoptó un tono más serio

Bowser: bien… entonces estarás castigado sin juguetes, ni videojuegos ni postre hasta que estudies mejor y aprendas

Bowsy se quedó en silencio mientras era regañado y sus hermanos le hacían burla por eso. Ludwig sólo comía sin prestarle mucha atención al asunto. Mykey interrumpe todas las burlas de los demás Koopas

Mykey: bueno, yo creo en Bowsy. Quizás le cueste, pero nos esforzaremos por conseguirlo (mirando a Jr.) ¿cierto, Bowsy?

El pequeño pelirrojo levanta la mirada, para luego sonreír y asentir, exclamando -¡sí!-

Ante eso Ludwig rueda sus ojos en señal de indiferencia

Bowser: eso lo veremos más adelante. Si Mykey está dispuesto a enseñarte, entonces pon de tu parte, ¿entendiste, Jr.?

Jr.: (entrelazando sus manos) sí, papá

Bowser: bien, es hora de comer. Ya después habrá tiempo para lo demás

Todos ahí asienten y empiezan a cenar. Mykey trata de conversar un poco con Ludwig

Mykey: oye, Ludwig, ¿más tarde te gustaría salir a caminar un momento?

El Koopa peliazul bebía un poco de agua y miraba a Mykey mientras le hacía esa pregunta, a lo que terminando de beber le contesta

Ludwig: te agradezco la oferta, pero tal vez otro día, ya que hoy estoy algo cansado

Mykey: claro, cuando gustes (sonriéndole)

Ante esa sonrisa, Ludwig no puede evitar tener un pequeño sonrojo, pero bebe agua nuevamente y cierra sus ojos para no hacerlo notar. Iggy, por su parte, hace una pregunta muy adecuada.

Iggy: papá, ¿Dónde dormirán los chicos nuevos?

Bowser: ahora que lo pienso… no tengo idea

Todos ahí se sacan un poco de onda ante lo dicho por el rey. Éste trata de aclarar un poco su garganta y piensa en algo al respecto

Bowser: ¿alguna sugerencia?

Larry: (alzando la mano y meneándola) Bobby puede dormir en mi habitación, hoy me dijo que la encontró cómoda, además que cabemos los dos

Bowser: no sé, Larry. Primero hay que ver si está de acuerdo, además que tú te mueves mucho. Recuerdo que cuando eras bebé eras tan inquieto que cuando dormías conmigo era yo el que terminaba en el suelo de tanta hiperactividad tuya

Bobby: bueno, no importaría compartirla con Larry

Iggy: prácticamente tendrás que amarrarlo a la cama si quieres dormir

Wendy: es por el exceso de azúcar que consume. ¿Cómo puede caber tanto en un cuerpo tan pequeño?

Bobby: hoy no le vi comer golosinas ni nada de eso, al contrario, estuvimos más que nada gastando energías. Es súper simpático

Lemmy: estás seguro que era Larry? No se oye como él

Larry: bueno, basta, no? (algo apenado)

Bowser: bien, si estás de acuerdo, Bobby, entonces no habrá problemas, pero si cambias de idea me avisas.

Bobby: no se preocupe, señor Bowser.

Bowser: ahora, en cuanto a Mykey… ¿dónde te gustaría dormir? Al menos por esta noche, ya mañana nos acomodamos mejor

Mykey: mmm… no lo sé…

Jr.: ¿p-podrías dormir conmigo esta noche?

Mykey: ¿de verdad?

Jr.: digo… si es que quieres…

Mykey: sí, me encantaría

Bowser: bien, entonces está decidido.

Al cabo de un rato, todos terminan de comer. Kamek ordena un poco la mesa y tanto Ludwig como Mykey ayudan a llevar los utensilios a la cocina.

Kamek: gracias, chicos

Ambos se retiran de ahí y se dirigen a sus habitaciones. Yendo hacia allá, Ludwig detiene un poco a Mykey y le comenta algo, manteniendo la mirada apartada

Ludwig: bienvenido, espero que te sientas cómodo

Luego de eso deja al Koopa mayor, el cual sonríe ante esas palabras y se dirige a la habitación de Jr.

- FIN DEL CAPÍTULO -

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[davidsoto666]

El Espíritu del Tabaco. 🍂🍃🧙🏽‍♂️

El tabaco es un espíritu, un ser medicina de las estrellas manifestado en Pachamama en forma de planta, que asiste y acompaña a la humanidad toda en su evolución desde el origen de los tiempos.

La planta de Tabaco es una planta Maestra, una planta de Poder, una planta Medicinal.

Se dice que ella es la Madre de todas las Plantas, quien abre las puertas a los espíritus de las otras plantas.

La planta de Tabaco tiene el propósito de guiar el espíritu de los hombres, en ella se encuentra un espíritu poderoso capaz de recibir las energías cósmicas y materializarlas en la tierra.

El tabaco se usa desde hace miles de años para comunicarse con el mundo superior, con los espíritus que gobiernan los cuatro elementos que lo conforman todo: el agua, el fuego, el aire y la tierra. Se usa para pedir, para agradecer, para ofrendar. Se usa para Rezar. Es quien nos conecta con el Gran Espíritu, con el Gran Misterio "Wakantanka"

Quien tiene a esta planta como aliado puede procesar las energías densas que nos imposibilitan ese contacto, esa conexión. Es un Conector y un Limpiador al mismo tiempo. Ayuda a que los espíritus sagrados de la naturaleza ingresen en nuestro cuerpo físico para así ser sanados, limpiados, purificados.

El tabaco es un protector, tiene la función de cuidar al espíritu en su llegada y en su partida. El tabaco ordena los momentos en una ceremonia y en nuestra vida sagrada en pachamama. Abre y cierra puertas entre los mundos, nos ayuda a entrar y salir, a ajustar la percepción y la atención en momentos de transición.

El fumar sagrado es fumar concientes, atentos, despiertos, en nuestro centro, dispuestos a ir mas allá de nuestra mente y nuestro corazón. Es reconocer la necesidad de agradecer, de pedir ayuda, de recibir sabio consejo de los abuelos. Es disponerse a reparar, ordenar y armonizar todas nuestras relaciones, para que todo en nuestra vida pueda alcanzar su propósito más elevado.

El tabaco se vuelve sagrado cuando así decidimos relacionarnos con él, cuando nos permitimos reconocernos como sagrados, al igual que todo lo que convive con nosotros. Tabaco sagrado es el que sembramos, cuidamos y cosechamos, el que nos llega de manos del Gran Misterio cuando más lo necesitamos, el que nos acompaña en el morral y con su espíritu a todas partes, el que amasamos con esmero, el que compartimos con nuestra familia. Es el tabaco que despierta y libera nuestro espíritu.

[hala2021]

No es fácil

Llegué a casa y me puse a realizar las cuentas. Ya el salario no alcanza. Cuando debes ahorrar en cosas básicas, es señal de miseria.

Ahora estoy haciendo una dieta, y veo que mi abdomen está más deshinchado. Esta consiste en comer lo que quieras, pero en pequeñas porciones; solo el desayuno, almuerzo, merienda y cena. Pero debes cuidarte de no sentirte lleno. Cuando deseas un bocado más, es el momento de decirte: «no, hasta acá llegué». Pero esa dieta, además de ser saludable y de que no acumulas grasa, ayuda a tu bolsillo. ¿Y de qué estábamos hablando? Pues, de la miseria.

Hoy miraba a tres alumnas que comían, porque hoy festejaban la fiesta del estudiante. Las tres excedidas de peso. Y yo pensaba que los ahorros de los padres se encontraban ahí, en esas panzas abultadas.

Hace dos semanas compré una torta individual, pequeña, sin gluten. Y unas tostadas dulces, también sin gluten. En dos días comí la mitad de la torta y todas las tostadas. Y me filmé en la pieza y después vi el video. Me deprimí. Mis glúteos parecían la parte trasera de una ballena y la celulitis brillaba como una reina.

Y me di cuenta de que por no tener autocontrol, muchas personas se pierden, en todo sentido. Algunas pueden contar con sobrepeso; otras, exceso de drogas, tanto medicinales como otras; deudas impagas y falta de servicios, etc. ¿Y todo eso por qué? Por no tener autocontrol. Yo fui a la dietética y compré una bolsa de rosquitas con azúcar, sin gluten. También, tostadas dulces y galletitas con dulce de membrillo. Recién me tomé un café con leche y una tostada, después de comer dos torrejas y una porción de porotos. Las dos cosas equivalen a la merienda y el almuerzo, porque recién llego.

En una palabra, todavía tengo las rosquitas, las tostadas y otra porción de porotos. Y asimismo, también la billetera llena. ¿Qué logró eso? Pues, el autocontrol. Ya sé, tú me dirás: «yo no puedo».

Y vamos a analizar esta última frase: «yo no puedo». Tú no puedes dejar de comer, pero lloras porque no te puedes comprar un celular nuevo; tú no puedes dejar de comer, pero observas con envidia a la modelo que varios hombres ven, con deseo; no puedes dejar de comer los dulces, pero no tienes suficiente dinero para ir al cine.

Yo decidí comer lo justo y no acumular grasa en mi abdomen. Yo si quiero, puedo comprarme un celular nuevo; también, mi figura se va estilizando; y además, para sumar, puedo ir al cine este sábado.

¿Te das cuenta de que todo está dentro tuyo? En ti están las puertas abiertas del paraíso y del infierno, pero de ti depende de cuál puerta se abre y cuál se cierra. ¡No! Para mí tampoco es fácil. ¿Acaso no te conté lo de la torta y de las tostadas? ¿No te conté del video que hice en mi cuarto y me horroricé? La diferencia está en que yo sé cuál es el secreto: el autocontrol.

La templanza es la mejor de mis virtudes. Cuando un alumno se burla de mí, respiro hondo y le contesto suavemente, de forma aterciopelada, y le explico en qué debe mejorar su dibujo. Tal vez, llega tarde al aula o piensa que yo no me doy cuenta de que lo hizo rápido y de forma descuidada. El autocontrol no significa que no tengas carácter, que no tengas defectos, que no tengas emociones ni tampoco que no tengas ganas de comer. Lo que significa es que el autocontrol es el dominio de tu vida. ¡Y créeme!, cuando has dominado el control de tu propia vida, te ríes de los demás, que han quedado atrás, pero tú vas primero en la carrera.

¿Y por qué te cuento todo esto? Porque yo estudio Escritura y practico todos los días. Y a veces no sé de qué escribir. Pero hoy pensaba, cuando llegué a casa y vi la caja con las rosquitas y las tostadas sin comer, en cuánto me ahorro. Y también pensaba en cuánto deben sufrir los padres de aquellas alumnas que comían, excedidas de kilos, porque ellos seguro de que no llegan con el dinero a fin de mes.

Claro..., no es fácil aguantarse de no comer, pero tampoco es fácil escribir doce párrafos como recién lo hice. ¡Y lo logré! ¡Eso es el autocontrol!