Tumgik
#hogar destrozados
leslychoco15 · 9 months
Text
Tumblr media
Donbot and Kraang April for your hearts. I think they met again 🫂💛💜✨ Here April mutated by awakening her powers to one hundred percent while fighting alongside Raph, Donnie, Mikey and Casey but that wave due to Casey dying and Mikey being separated from the rest of the team. When April woke up there was no one else, she had gone far away and she felt that she had destroyed her home and her family. Thanks to this second mutation, April ages much more slowly 👀🙌🏼
~Donbot y April Kraang para sus corazones. Creo que ellos se reencontraron de nuevo 🫂💛💜✨ Aquí April mutó al despertar sus poderes al cien por cien en una pelea junto a Raph, Donnie, Mikey y Casey pero esa onda provocó que Casey muriera y Mikey se separa del resto del equipo. Cuando April despertó ya no había nadie, se había ido muy lejos y sintió que había destrozado su hogar y a su familia. Gracias a esta segunda mutación April envejece mucho más despacio. 👀
219 notes · View notes
love-letters-blog · 2 months
Text
Tumblr media
DEDICADO A ELLOS...
A ellos que muchas veces nadie le pregunta como están, como estuvo su día, si se han sentido bien, si desean conversar, si desean tiempo para descansar, si necesitan su espacio por un momento para estar a solas.
Ellos que también desean ser admirados, valorados, respetados y reconocidos por una mujer.
Ellos que muchas veces en silencio guardan su tristezas, sus inseguridades, sus frustraciones, sus inquietudes, sus miedos, sus tropiezos, su errores.
Ellos que van por ahí siendo una maquina de trabajo, simples proveedores que nadie ve el esfuerzo, los sacrificios, el esfuerzo que hacen para dar lo mejor en un hogar.
Ellos que intentan controlar su emociones para que nadie los vea llorar, porque crecieron en un mundo donde no debían llorar por el simple hecho de ser hombre.
Ellos que se hacen los valientes, los fuertes, cuando posiblemente en su interior se sienten abatidos con angustia tratando de liberarse de alguna tormenta vivida y necesitan contención.
Ellos que también han sufrido alguna desilusión, algún engaño, alguna infidelidad que le ha destrozado el corazón.
Ellos que también sienten, que necesitan ser rescatados, ser salvados, ser cuidados, una mano que los sostenga, un hombro que les permita llorar y poder desahogarse, un abrazo un consejo, un te quiero un te amo, un todo estará bien.
Ellos no solo son imagen de macho recio, que todo lo soluciona, que todo el tiempo debe trabajar.
Ellos también son emocionalmente sensibles, desean ser aceptados, desean expresar sus emociones, desean ser reconocidos, desean ser amados y respetados, también necesitan de demostraciones, de detalles, ser enamorados, ser consentidos, ser mimados, etc,...
Ellos no siempre deben dar seguridad, contención, comprometerse, ser fieles, prometer, preocuparse de un hogar, pagar cuentas, llevar a pasear, invitar a un cine, o un restaurante, no siempre debe ser él que lleva las flores y el que conquista, el que toma la iniciativa en el amor.
—-☮️
15 notes · View notes
yuzuyom · 1 year
Text
Shhh, es un secreto
Tumblr media
Pareja: Neteyam x Reader.
ADVERTENCIA: obscenidad | angst | sangre | violencia | situaciones incómodas | manipulación emocional | daño emocional.
Anterior:
~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~
Capitulo diez.
" HOGAR "
Neteyam no soltó ni un segundo tu mano mientras volvían a la aldea, dándote miradas ansiosas, sonriéndote emocionado cada vez que tus ojos se encontraban con los suyos y realmente estabas mirándolo. Su cola se enrollaba en tu pierna con cuidado, asegurándose de que fuera real todo lo que estaba sucediendo en este momento.
Dejaste que hiciera cada una de estas cosas ya que se veía tan sincero y feliz de que estuvieras a su lado que te dejaste envolver por su aura.
Cuando llegaron a la aldea Toruk Makto los miró a lo lejos, lo observaste saludar a su hijo con ojos tristes haciendo que tu pequeño corazón se apretara, sin entender porqué el Olo'eyktan se vería tan cansado y agobiado.
Tus ojos miraron a Lo'ak quién estaba a su lado, el cuál solo los miró con una grandes ojeras. Casi llorabas al verlo, se veía tan cansado y decaído. Para nada al chico enérgico en el cual te habías apoyado, sentiste como tu cuerpo temblaba intentando retener los sollozos ante la vista de un Lo'ak tan destrozado.
Al parecer Neteyam pudo sentir tu cuerpo temblar, porque de inmediato te miró preocupado brindando una pequeña sonrisa de apoyo. Apretando un poco más tu mano para asegurarte que estaba bien que fueras hacia su hermano menor.
Asentiste ligeramente tomando aire para brindarte fuerza y con cuidado levantaste tu mano, tu meñique se movió tembloroso y tus ojos observaron como lo que Lo'ak tomaba en sus manos caía al suelo. El Na'vi corrió rápidamente hacia a ti con pasos desesperados.
Neteyam te soltó, dejándote correr hacia su hermano.
Con el sentimiento a flor de piel corriste hacia el Na'vi, la emoción salía por cada uno de tus poros y podías sentir tus manos temblar por la ansiedad de tener a Lo'ak en tus manos. Cuando el Na'vi ya estaba a pocos pasos de ti te lanzaste a los brazos de Lo'ak. Sus brazos te abrazaron con todas sus fuerzas mientras que de su boca salían grandes sollozos. Reiste entre lágrimas, aferrandote a tu gran amigo el cuál ya estaba arrodillado en el suelo mientras lloraba en tu hombro.
---- ¡Maldita tonta! ¡Cómo pudiste dejarme!, ¡skxáwng, skxáwng, skxáwng!---- reclamó el Na'vi aferrandose a tu cuerpo con todas sus fuerzas.
Tomaste su rostro entre tus manos, sonriéndole mientras limpiabas cada lágrima de su cara.
---- Perdón ---- hablaste con voz temblorosa ---- Perdón por dejarte, tonto.
Él volvió a llorar aferrando sus manos una vez más. Juntaste tu frente con la del él y con fuerza apretaste sus manos entre las tuyas.
---- Te prometo que no volveré a irme, Lo'ak.
----Mas te vale, porque si vuelves a hacerlo voy a patear tanto tu trasero que hasta tu descendencia la sentirá.
Soltaste una risa ante su amenaza. Tu momento fue interrumpido cuando sentiste que unos pequeños brazos te abrazaban, miraste a tu lado donde una Tuk llena de mocos te abrazaba con fuerza.
----Hola Tuk, ---- saludaste con voz temblorosa, abrazándola con cariño mientras la niña sollozaba en tus brazos ---- perdón por dejar de haber jugado contigo.
Ella negó, llorando más fuerte en tus brazos.
----¡Estás aquí! ---- exclamó feliz ---- ¡Haz vuelto!
Cuando levantaste la mirada podías ver qué Kiri estaba a tu lado. La miraste con una pequeña sonrisa cuando sentiste como ella te atraía a sus brazos en un suave y cálido abrazo, podías ver qué de sus ojos dejaba caer lágrimas silenciosas acariciando tu cabello con cariño. La abrazaste con cuidado, acariciando su espalda esperando a que no se hubiera sentido tan sola mientras no estabas.
---- Tonta, eso es lo que eres.
Reíste entre sus brazos asintiendo en su pecho.
----Ya lo sé.
Entonces Kiri se hizo a un lado. Toruk Makto te miraba fijamente y tú cuerpo tenso ante su mirada penetrante solo atinó a darle el típico saludo humano que siempre le dabas. El Olo'eyktan soltó una risa ante tu acción provocando que una pequeña sonrisa se formara en tus labios. Saltaste en tu lugar con sorpresa cuando una gran mano tomó tu cabeza y en cuestión de segundos fuiste atraída a su abdomen. Sus enormes brazos te encerraron entre ellos y recordaste a los brazos de un padre cariñoso. Mordiste tus labios, comenzando a sentir las lágrimas bajar por tus mejillas.
Habías olvidado eso.
Habías olvidado como se sentía preocuparle a varias personas.
Te aferraste a él, sollozando como una niña pequeña que es consolada por un padre.
----He vuelto.
----Bienvenida a casa, niña.
¿Casa? Un hogar... Tus ojos miraron a Neytiri quién veía la escena de lejos, sus ojos tranquilos observaban con calma. Cuando tus ojos se encontraron con los de ella la viste soltar un suspiro y notando el pequeño asentimiento en tu dirección.
Un hogar... Realmente un hogar.
Así que esto se sentía pertenecer y ser bienvenida a algo al fin.
---- Estoy en casa... ---- murmuraste abrazando con más fuerza a Jake.
Estabas tranquila, al fin estabas tranquila después de haber peleado por años en este lugar.
Toda la tarde los hermanos Sully estuvieron en tu carpa, contándote todo lo que habían hecho mientras tú no estabas. También se burlaron de cómo Lo'ak no había dejado de llorar todos estos días que tú estuviste fuera. El lo negó mientras estaba recostado en tu muslo. Jugaba con tu mano con una sonrisa, juntando sus dedos meñiques cómo medio de calma.
Tuk estaba entre tus piernas, colocando florecitas en tu cabello mientras Kiri lo trenzaba con cuidado. Quitando piedras del cabello de Neteyam para mantener las trenzas.
El hermano mayor estaba detrás tuyo, dejando que tú espalda descansará en su pecho mientras sus mano rodeaban tu cintura suavemente. Las colas de todos se movían felices y por un momento te sentiste tan lleno de la familia Sully que no sabías a dónde mirar. Reías ante sus peleas y disfrutabas a cada momento de los silencios que a veces llenaban.
Cuando Jake llegó sacó a todos de la carpa para dejarte descansar. Reíste ante las quejas de todos, siendo llevados a rastras por su padre. Él único que no se movió de su lugar fue el hermano mayor.
Neteyam no se movió ni un milímetro de su lugar, observando cómo sus hermanos salían y ellos se quejaban de porqué él si podía quedarse. Reíste cuando Neteyam sonrió presumido disfrutando de su momento a solas con una suave sonrisa.
---- ¿Vas a quedarte? ---- preguntaste mientras girabas para mirarlo.
Él te miró asintiendo suavemente sin dejar de tocar tu cintura.
---- ¿No quieres? ---- preguntó en un murmullo suave, acaricando tu mejilla con su mano, te recargaste en ella asintiendo sin dejar de mirar sus ojos amarillos.
----Me gustaría que te quedarás...
El sonrió, atrayéndote a un beso suave. Sus labios se movieron tan cuidadosos y amorosos que te sentiste derretir en sus brazos. Sus manos ya te habían acercado a su cuerpo, juntando su pecho con el tuyo mientras que sus dedos se aferraban a tu cintura. Reíste cuando su cola se enrolló en tu muslo con suavidad, el Na'vi se separó de ti con su respiración irregular.
----¿Qué sucede? ---- preguntó mirando tus ojos.
Negaste, acariciando sus mejillas con amor. Dejando un pequeño beso en su pecho, haciéndolo suspirar con amor.
---- Nada, solo que... Me gusta, esto me gusta.
Grandes palabras puesto que a ti nunca te había gustado nada de esto. Al menos no en la relación anterior.
Neteyam sonrió, tomando tus manos entre las suyas para acercar nuevamente su rostro con el tuyo.
---- A mi también... ---- sus ojos miraron los tuyos, bajando a tu labios para volver a tus ojos. Una mirada suplicantes apareció en su rostro. ---- (T/N), déjame hacerte mia y volverme tuyo.
Tu corazón se aceleró ante sus palabras, sentías como tus mejillas comenzaron a colorearse de rojo mientras que tu estómago te hacía sentir mariposas ante el significado de esa frase. No dudaste en asentir sin dejar de mirar sus ojos, el Na'vi tomó tu rostro entre sus manos y nuevamente volvió a juntar sus labios. Eran tan suaves y amorosos que te sentiste extasiada. Sus manos tomaron con firmeza tu cintura, llevándote con cuidado al suelo, tomando tu nuca para que no te golpees.
Soltaste una risita junto con él cuando casi cae encima tuyo.
Las manos de Neteyam acariciaron tus costados con cariño mientras que sus labios comenzaban a besar tu cuello con suavidad, pequeñas mordiditas acompañaban a sus labios en su recorrido, un suspiro abandonó tus labios cuando succionó ligeramente en la curva de tu hombro. Lamiendo suavemente para recorrer tu clavícula con sus labios, dejando besos por todo el camino. Sus labios decidieron succionar la curva tu cuello, una pequeña mordidita fue dejada causando que tus cuerpo se encendiera debido a la expectativa.
Sentiste como su rodilla se ponía entre tus piernas obligando a que tus piernas se separaran. El calor de su piel tan cerca de la tuya te hizo suspirar, tus manos acariciaron su espalda provocando que su cola se moviera ansiosa, mostrando toda la emoción que su cuerpo albergaba.
Neteyam no dudó cuando te despojó de tu vestido, tu cuerpo desnudo se presentó nuevamente a él haciendo que mordiera su labio, apreciando cada centímetro de tu figura, amando cada parte de tu piel. Sus labios bajaron por tu pecho tomando tu pezón entre ellos para comenzar a lamerlo con suavidad. Podías sentir como su boca tomaba tu pecho con ansias mientras que su pulgar comenzaba a acariciar tu otro pezón con cariño. Dejaste salir un suspiro mientras que tus manos tomaron su cola que se movía de un lado a otro desesperada. La enredaste entre tus dedos haciendo que Neteyam soltara un suspiro debido a tu suave toque.
Estaba siendo tan lindo contigo y por primera vez estabas disfrutando de este toque suave que recorría cada centímetro de tu cuerpo. Amabas que se tomará su tiempo con cada centímetro de tu piel.
Sentiste cómo sus labios comenzaron a bajar lentamente por tu abdomen enviando escalofríos por todo tu cuerpo debido a su atención. Su lengua lamió cada parte de ti para detenerse entre tus piernas, sus ojos amarillos se dirigieron hacia tus ojos con una suave sonrisa.
----Te ves tan hermosa desde aquí ----. Coqueteó con un susurro. Sus labios besaron tu centro con amor ----. Y esto de aquí sabe tan bien... Lo extrañaba tanto ----. Su lengua saboreó entre tus pliegues haciéndote soltar un suspiro deseoso.
----Neteyam... ---- llamaste suplicante abriendo más tus piernas para darle espacio.
Su lengua comenzó a subir y bajar por todo tu coño llevándote a las estrellas al sentir su lengua lamer deseosa entre tus piernas, podías sentir cómo comenzabas a sudar debido a el movimiento de tus caderas y todo el calor que comenzaban a salir de sus cuerpos.
Neteyam tomó tus muslos entre sus brazos evitando que llegaras a mover tus piernas, sus manos acercaron más tu coño a su boca para comenzar a saborearte desesperado, los sonidos sucios de su boca contra ti comenzaban a invadir toda la carpa. Aquello hizo que el pene del Na'vi doliera, recordando cuánto extrañaba poder ser tan íntimo contigo. Sus ojos miraron borrachos como te retorcías debajo de él, Neteyam comenzó a restregarse contra el telar cuando notó como tu boca se abría dejando salir pequeños gemidos deseosos por él.
Su lengua se centró en tu clítoris haciendo pequeños círculos con ella para después succionar suavemente, sus manos se mantuvieron firmes ante tus muslos que estaban intentando cerrarse debido al éxtasis que su boca te brindaba. Neteyam sonrió orgulloso, cerrando sus ojos para disfrutar de tu sabor en su boca, disfrutando de su calor y cómo tus fluidos bajaban por su mentón. Su boca provocó sonidos de chapoteo causando que él se encontrara soltando gemidos contra tú coño provocando que te retorcieras por su respiración caliente. Tu cuerpo comenzó a temblar debido a su lengua, tus piernas intentaron cerrarse provocando que su cabeza sea atrapada por tus muslos, él no se quejó, de hecho disfrutó que tus muslos suaves lo atraparan. Comenzó a moverse contra el suelo de la carpa, intentando bajar su propio placer mientras su lengua no dejaba de moverse entre tus piernas. Neteyam suspiró cuando tus muslo se cerraron con más fuerza.
----¡N-Neteyam yo-...! ¡Mmm!~
Neteyam gimió gustoso. Separó ligeramente sus labios de tu coño mirándote con deseo y anhelo.
----Está bien, bebé... ---- succionó tu clítoris con suavidad ---- puedes hacerlo en mi boca.
----N-Neteyam~... Ahhh
Su lengua se movió con más rapidez contra tu clítoris sintiéndose mareado debido al aroma y al suave sonido que salía de tus labios provocando que su placer creciera más y más. Cuando tus muslos comenzaron a fallar Neteyam succionó con un poco más de fuerza.
----¡N-Neteyam!~
Tus fluidos se resbalaron por su mentón, el bebió con gusto comenzando a limpiar con su lengua los restos. Dejando pequeños besos alrededor. Subiendo por tus muslos para dar mordiditas, succionó tu piel en cada muslo dejando marcas moradas. Sus ojos amarillos te miraron con amor, levantándose un poco para darte un beso en los labios. Ambos suspiraron aliviados por el contacto que tanto deseaban. Cuando se separó un poco hiciste que Neteyam juntara su frente con la tuya. Acariciaste sus mejillas con una suave sonrisa.
----Te veo, Neteyam.
El sonrió dejando un pequeño beso para mirarte a los ojos.
----Te veo, (T/N).
Negaste. Tomando su cabeza para volver a juntar su frente con la tuya.
----Debes decirlo mientras nuestras frentes están juntas.
Neteyam sonrió divertido, asintiendo para volver a murmurar.
----Te veo, (T/N) ---- tomó tus manos con fuerza, llevándolas a su pecho donde su corazón latía con calma --- mi corazón y pensamientos te pertenecen.
Suspiraste enamorada.
Tus ojos apreciaron su hermoso rostro y como esos ojos amarillos estaban siendo tan sinceros en estos momentos que podrías llorar de alivio.
----Quiero hacerte sentir bien ----. Murmuraste comenzando a levantarte.
Neteyam negó manteniendo tu cuerpo en el suelo, sus manos comenzaban a quitar su propio taparrabos.
----Está bien así ---- sus ojos miraron tu cuerpo desnudo bajo de él ---- me siento bien cuando veo que te hago sentir bien.
Sonreíste ante eso, notando como su pene se levantaba con líquido preseminal en la punta. Suspiraste ante la vista viendo lo bonito que era y la necesidad que tenías de tomarlo. Sin embargo, en verdad querías hacerlo sentir bien entonces una idea surgió en tu cabeza y lo detuviste con cuidado haciendo que él te mirara preocupado.
----¿Estás bien?--- cuestionó acariciando tu rostro cuidadoso ---- ¿Sucede algo? Podemos parar.
Negaste tomando su mano entre las tuyas.
---- Y-yo quisiera hacer algo si me lo permites... ---- Neteyam ladeó su cabeza curioso ---- ¿Podrías entregarme tu trenza?
Neteyam no dudó ni un segundo en pasarla enfrente entregándola en tus manos lo cual te hizo sentir cálida, ya que su trenza era lo más importante para un Na'vi. Era su vida entera siendo entregada a tus manos. Agradeciste tomándola con cuidado, tus dedos tocaron la punta abriendo para que los zarcillos se asomaran. Neteyam te miró con ojos brillosos observando como tus dedos comenzaban a acariciarlos con suavidad haciéndolo soltar un suspiro deseoso.
---- Puedes seguir... ---- informaste con una sonrisa.
Tus piernas se abrieron para él haciendo que el Na'vi sonriera suavemente. Sus manos tomaron su falo con sus cuatro dedos, rozando su punta de arriba hacia abajo en tu entrada, burlándose de ti ligeramente. Aquello te robó un suspiro deseoso provocando que tus ojos miraran los suyos con amor. Neteyam soltó un pequeño suspiro cuando la punta de su pene entraba en tu coño, sintiendo como era bienvenido por tu calidad.
----Neteyam~... ---- gemiste mientras tus dedos acariciaban con cuidado los zarcillos mirando los ojos sedientos del Na'vi ----- p-puedes moverte
El Na'vi sonrió, su dedo acariciaba tu clítoris mientras poco a poco deslizaba su pene más profundo.
---- Eres preciosa, bebé ---- su mano rozó tu vientre abultado debido al tamaño de su miembro ---- entró por completo. Estoy tan orgulloso de ti, bebé. Tomándome tan bien.
Gemiste por sus palabras, apretando tu coño haciendo que él suelte un gemido. Sus labios comenzaron a besar tu cuello, lamiendo y mordisqueando tu piel con lentitud dejando que te acostumbres a su tamaño. Te retorciste cuando sentiste que su pulgar no dejaba de dar círculos en tu clitoris, soltaste un jadeo cuando él empujó un poco sus caderas.
Cuando tu mirada llorosa volvió a su rostro notaste cómo sus ojos te miraron, preguntando si ya estabas lista para que él comenzará a moverse. Asentiste sintiendo como su frente se pegaba a la tuya para comenzar con un lento y profundo movimiento de caderas haciéndote gemir.
Sus ojos amarillos miraban tan profundamente a los tuyos que sentías que estaba leyendo cada uno de tus pensamientos. Tu cuerpo se movía a cada choque de caderas, sintiendo cómo su gran mano se entrelazaban con tu mano izquierda. La otra evitaba que su cuerpo cayera por completo encima del tuyo mientras que de su boca soltaba jadeos y suspiros. Besó tus labios con tanta suavidad que dejaste que las lágrimas cayeran debido a lo dulce que estaba siendo.
Estabas tan drogada por cómo te hacía sentir, te estaba llevando a las nubes sin siquiera tener que ser rudo. Simplemente te trataba con tanto amor que sentías que te ahogabas.
Unas ligeras cosquillas te hicieron mirar la trenza que estaba en tu mano, con suavidad comenzaste a acariciar los zarcillos de su trenza. Con lentitud lo llevaste hacia tu boca donde con cuidado comenzaste a dar pequeñas lamidas, dejando que estos temblaran por la sensación de algo tan suave y humedo recorriendo entre ellas. Una pequeña sonrisa se formó en tu rostro cuando notaste a Neteyam contraer su rostro en placer, sus caderas titubearon dejando caer su cabeza en el hueco de tu hombro.
---- M-maldición~...---- gimió sintiendo como todo su cuerpo comenzaba a temblar debido a tu atención.
Se obligó a mover sus caderas, sintiéndose débil debido a tu lengua en su tswin. Sonreíste chupando suavemente estos pequeños hilitos haciendo que sus caderas titubearan de vez en cuando, lo hacía sentir tan eufórico y poco duradero, sentía que estaba a punto de explotar simplemente por tu lengua en su trenza.
Neteyam te quitó su trenza cuando sintió como había comenzado a llorar debido al placer. Sus ojos miraron los tuyos mientras daba pesadas bocanadas de aire.
---- B-basta... Me vas a hacer venir solo con eso.
Sonreíste divertida. Besando sus labios mientras dejabas una pequeña mordida en el inferior. Neteyam sonrió, siguiendo el beso en cuestión de segundos. Sus lenguas comenzaron a jugar entre ellas y pronto ambos gimieron entre el beso cuando Neteyam volvió a mover sus caderas. Su pene entraba tan profundo que te estaba haciendo ver estrellas a cada empujón dejabas que tus manos se aferraran a las suyas cuando sentiste como la cabeza de su pene rozaba tu punto dulce a cada movimiento. Gemías en sus labios haciéndolo reír divertido. Él no se despegó ni un momento del beso comenzando a gemir cuando los movimientos de sus caderas se volvieron a ser más desesperado.
Sentía tu coño apretando tan deliciosamente su pene. Podría morir ahí mismo y sería la persona más feliz del mundo, sentía cómo su vientre se calentaba conforme tus gemidos se hacían más fuertes. Sus dientes mordieron tu cuello cuando sintió un escalofrío recorrer todo su cuerpo.
Maldijo cuando volviste a brindarle atención a sus zarcillos.
Se sentía tan bien que lo estaba volviendo adicto a ti.
----Mierda, bebé... Estás tan bien~ ---- gimió sin dejar de mover sus caderas.
----¡N-Neteyam! Aaaahh~ ---- tus caderas se movieron junto con la suyas, gimiendo cada vez que su pene golpeaba con fuerza.
Tu cuerpo comenzó a temblar cuando el Na'vi volvió a brindarle atención a tu clítoris sin dejar de mover sus caderas. Lloraste cuando un pequeño pellizco fue dejado en tu zona más sensible. Neteyam se veía tan descuidado y desesperado cuando tu lengua paseaba entre sus zarcillos que te hacían mojar de sobremanera, su boca dejaba escapar jadeos placenteros mientras que su estómago ya comenzaba a verse brillante por su sudor.
Tus piernas comenzaron a temblar con el tacto de sus dedos en tu clítoris y la sensación de ser llenada estaba siendo demasiado para tu cerebro, que te sentías totalmente drogada debido a los movimientos de Neteyam. Tu vientre comenzó a apretarse y la desesperación de tus caderas hacían alusión de que pronto llegarías.
----¡Yawne voy a-
Neteyam asintió moviendo con más fuerza sus caderas contra las tuyas, yendo más profundo. Su pulgar comenzó a acelerar sus movimientos.
----Ven, cariño. Ven para mí.
Tu espalda se arqueó y pronto dejaste escapar su nombre sintiendo como los fluidos salían disparados. Tus ojos se volvieron blancos cuando Neteyam no detuvo sus movimientos ni un segundo, sobreestimulando todo tu cuerpo. Neteyam comenzó a gruñir, gimiendo con suavidad mientras sus movimientos titubearon en cada movimiento, tu boca en sus zarcillos fue demasiado para todos sus sentidos. Su cabeza daba vueltas mientras su cuerpo temblaba y su polla palpitaba cada vez más deseosa. Cuando sintió que todo era demasiado y estaba por venirse salió rápidamente de ti manchando todo tu vientre y pecho de su blanquecino semen.
El jadeó cuando tu lengua dejó de jugar con sus zarcillos.
Te levantaste un poco con los codos mientras jadeabas y observabas como su pene bajaba lentamente. Neteyam tomó tu vestido, comenzando a limpiar su desastre para después dejar un suave beso en tu frente. Se recostó con cuidado en el suelo, atrayéndote a él colocando tu cuerpo encima de su abdomen para comenzar a acariciar con cuidado tu cabello.
Soltaste un suspiro tranquilo, sonriendo cuando tu mejilla comenzó a restregarse contra su pecho. Y entonces sucedió, el pequeño temblor que te hizo mirar a Neteyam con sorpresa.
Su pecho dejaba salir un suave ronroneo que te hizo mirarlo.
----¿E-estas ronroneando? ---- preguntaste emocionada.
Neteyam te miró con calma. Frunciendo su ceño extrañado al ver tu rostro tan emocionado y asombrado.
----¿Sí...? ¿Hay algo mal?
Reíste negando, volviendo a recostarte en su pecho dejándote arrullar por el sonido.
----No... Me gusta mucho ---- tus respiraciones se volvieron suaves y aquello a Neteyam lo tranquilizó.
Acarició tus cabellos, pensando en tu sorpresa del simple hecho de que él ronroneara. Es normal que un Na'vi lo haga cuando está muy cómodo, debiste haberlo escuchado por lo menos una vez con tu anterior pareja. Neteyam te miró, analizando aquellas marcas de mordidas que estaban esparcidas por todo tu cuerpo. Acarició con suavidad una que estaba en tu omóplato, las cicatrices eran tan obvias. Como si lo hubieran hecho con rabia, como si estuvieran dispuestos a arrancar un pedazo de tu piel.
Neteyam borró eso de su cabeza, cerrando sus ojos para descansar sin dejar de sentir tu piel. Debía centrarse en el ahora, en ustedes dos aquí en la carpa demostrándose su amor.
Eso lo hizo sonreír feliz, al fin lo veías. Al fin le habías entregado todo tu corazón y pasarían su vida juntos a los ojos de Eywa.
Abrió sus ojos rápidamente, mirándote fijamente al notar que aún no se habían unido ante Eywa y esa era la muestra más grande de amor. Mañana te llevaría allí y le rogaría a Eywa que los uniera eternamente, sonrió ante el pensamiento. No podía estar más emocionado ante la idea.
Neteyam fue el primero en despertar, sus orejas se movieron incómodos ante el ruido que venía de fuera. Te observó en sus brazos y no evitó reír al verte roncar mientras babeabas en su pecho, con cuidado te recostó a un lado cubriendo tu cuerpo en una pequeña manta que Norm te había entregado. Neteyam dejó un pequeño beso en tu frente levantándose de tu lado para colocarse su taparrabos y salir para averiguar de qué se trataba el alboroto.
Los Na'vi de la aldea estaban reunidos en medio del pueblo.
Su padre discutía con otro Na'vi desconocido, nunca antes visto por él. Cuando se acercó pasando entre la multitud se colocó a un lado de su padre quien era acompañado de su madre, ambos miraban alertas al Na'vi de ojos verdes.
Neteyam miró con sorpresa al Na'vi, el mismo que lo había atravesado con una flecha venenosa, el mismo Na'vi que lo miró con rabia diciendo que había tomado algo que a él le pertenecía.
El Na'vi lo miró, sus ojos verdes lo observaron fijamente mientras su ceño se fruncía con rabia.
---- Ustedes tienen algo que es mío y vengo por él. No deseo el enfrentamiento.
Neteyam observó a lo que pensaba que eran del mismo clan de este tipo. No venían en son de paz, podía ver las armas y la pintura de guerra en su cara.
---- Invaden mi clan, vienen armados y con pintura de guerra. Yo dudaría mucho tu pacifismo ---- exclamó su padre dando un paso adelante ---- no me gusta que me amenacen en mi propio territorio.
El Na'vi sonrió levantando sus manos fingiendo inocencia.
---- Soy el Olo'eyktan del clan Tormakticaya, guerrero y cazador. Conocido como Skakix, el gran asesino de humanos.
Jake asintió, recordando haber oído de este Na'vi con Mo'at justo en la guerra contra los del cielo. Recuerda que este no quiso unirse debido a que estaba lidiando con sus propios humanos y claramente era un clan orgulloso, pues tampoco acepto ayuda de nadie.
---- Soy Toruk Makto, el Na'vi que envió a Pandora a la victoria contra la guerra de los del cielo.
El Na'vi de ojos verdes saludó, un claro te veo en forma de respeto.
---- Lamento mi comportamiento, pero vi como se llevaron algo mío. Seguí su olor y esto me trae aquí, su olor está por cada rincón de la aldea ---- los ojos verdes lo miraban fijamente.
Neteyam podía notar la rabia acumulada en cada uno de ellos y sabía que esté Na'vi estaba controlandose simplemente por la presencia de su padre.
Neteyam infló su pecho, mirando con ojos serios a aquel Na'vi. Una lucha por el dominio se presentó en sus miradas, Neteyam tenía un muy mal presentimiento con este tipo, no le gustaba que vinieran a pelear en su propio territorio, amenazando a todo su hogar por una acusación estúpida.
---- Aún así, debo aclarar que no hemos tomado nada de nadie. No hemos invadido ningún territorio y nunca cazamos cerca de otro clan ---- habló Jakesully con seguridad, provocando que el Na'vi desviara su mirada a su padre ---- así que, si vuelves a amenazar a mi clan. No dudaré en responder a la amenaza.
Jake dio un paso adelante. Su madre miraba fijamente con arco en mano.
---- Es hora de que se vayan ---- despidió su padre sin titubear.
El Na'vi asintió, apretando los labios mientras su mano acariciaba su frente frustrado.
---- Lo aceptaría... Sino estuviera oliendo su esencia en él.
Neteyam mostró los dientes cuando el Na'vi siseó en su dirección. Neytiri ya había levantado su arco y su padre ya había devuelto el siseó acercándose al rostro del tipo.
---- Fuera de mi maldito territorio, ahora ---. ordenó Jake.
El tal Skakix dio unos pasos atrás, apretando su arco dispuesto a irse. Hasta que su oreja se movió y sus ojos se abrieron ansiosos mirando rápidamente en una sola dirección. Neteyam observó cómo sus hombros se levantaban mientras sus ojos demostraban un gran alivio. Observó cómo su padre miraba con sorpresa a la dirección en la que el Na'vi miraba y Neteyam temió. Su corazón comenzó a apretarse cuando sus ojos miraron rápidamente hacia la dirección donde ese Na'vi había dejado toda su atención. Soltó un suspiro tembloroso cuando te vio de pie mirando fijamente al Na'vi con ojos llorosos.
Neteyam observó como Skakix se movió hacia a ti con rapidez, provocando que él también se moviera.
Neteyam llegó antes.
Escondió tu cuerpo detrás de él sintiendo cómo temblabas. Sus ojos miraron rabiosos al de ojos verdes, el cuál lo miró colérico apunto de saltar a su cuello.
Neteyam lo miró firme, no dejaría que te llevara a ningún lado. Tú lo mirabas a él.
No más Ska'anekx.
Cuando lo miraste sentiste que todo tu mundo se vino abajo. No encontraste a Neteyam a tu lado y aquello te hizo sentir nervios al recordar cómo en tu pasado siempre despertabas sin nadie a tu lado. Te levantaste rápidamente tomando prendas Na'vi que Lo'ak te había dejado para ponerte rápidamente y salir a buscar a Neteyam.
Tu atención se desvió al tumulto de Na'vi que había en medio de la aldea y pensando que Neteyam estaría ahí te acercaste. Caminaste entre los Na'vi comenzando a sentir tu corazón pesado mientras tus entrañas se revolvían, una voz que conocías como la palma de tu mano comenzaba a entrar en tu cabeza.
Cuando miraste a Ska'anekx soltaste un jadeo aterrado. Cuando sus ojos te miraron las lágrimas comenzaron a llenar tus ojos presa del pánico, ¿Cómo te encontró?, ¿Qué hacía aquí?, ¿Porqué sus ojos mostraban tanto alivio al verte? Comenzabas a hiperventilar y cuando lo viste acercarse a ti estabas segura de que ibas a gritar. Su mano estuvo a punto de tocarte de no ser porque rápidamente te ocultaron detrás de alguien. La voz de Neteyam invadió todos tus pensamientos enviándote a la calma. Comenzabas a concentrarte en tu respiración, intentando no caer presa del pánico. El siseó de Neteyam te hizo sentir protegida, hasta que oíste la voz de aquel tipo.
---- Ella es mía. Ella es lo que me pertenece.
---- Ella no es tuya, hace tiempo dejó de serlo ---- contestó Neteyam de vuelta, envolviendo su cola en tu cintura aún ocultándote de Ska'anekx.
Lo oíste reír. El tintineo de sus trenzas te hizo temblar ante la expectativa.
---- Humana, sal de ahí ----. Ordenó el Na'vi ----. Debes de volver.
Jakesully se interpuso.
---- Ella no irá a ningún lado ---- Toruk Makto alejó a Ska'anekx de su hijo, llevando su mano a su cuchillo de ser necesario ---- es parte del clan y aquí se va a quedar.
Cuando lo escuchaste soltar una risa sarcástica temblaste.
----¿Parte de? Es una humana ---- murmuró Ska'anekx ---- ¡Tienen a un demonio del cielo como parte del clan!
Cerraste los ojos con fuerza, sintiendo como cada palabra se encajaba en tu pecho.
---- Ella no es como ellos ---- murmuró Neteyam ---- Ella ha demostrado su amor por Pandora y Eywa ha demostrado que la acepta.
---- Es un soldado ----. Reveló el Na'vi con rabia ----. La hice mi prisionera después de que asesinara a la mitad de mi clan.
Guardaste todo el aire, observando como los Na'vi del clan Omaticaya te miraban. Comenzando a alejarse mientras murmuraban con pánico.
La cola de Neteyam siguió aferrada a tu cintura, envío su mano hacia atrás tocando tu espalda con suavidad para brindarte calma.
----¡Asesinó guerreros Na'vi, mujeres y niños! ¡No pueden darle la bienvenida a alguien así!.
Lloraste recordando la guerra, recordando que él tenía razón y porqué caíste en sus garras. Pero también recordaste haberte detenido y salvar a un niño Na'vi. El hijo de Ska'anekx y la razón por la que él había perdonado tu vida.
---- Y sin embargo la buscaste desesperadamente por todos estos meses diciendo que ella es tuya ---- exclamó Jake de vuelta dando pasos hacia él recriminando ---- ¡si era un peligro para toda Pandora debiste haberla asesinado ese mismo día, no haberla dejado viva y que vagara por los bosques!
Ska'anekx maldijo, rascando su nuca con frustración para mirar iracundo a Jake sully.
----Me la voy a llevar y vengaré a todo lo que ha matado en este tiempo.
----No puedes llevártela ----. Interrumpió Neteyam, irguiendo su espalda mirando fijamente a sus ojos verdes ----. Ella es mi pareja e intentar llevártela sería ir contra la voluntad de Eywa.
Te paralizaste.
Tu cuerpo tembló del miedo mirando a Neteyam con horror dejaste escapar un jadeo de terror cuando Neteyam te empujó lejos.
---- ELLA ES MIA ---- gritó Ska'anekx lanzándose hacia Neteyam, comenzando golpearlo con fuerza.
Observaste como los del clan Tormakticaya levantaban sus arcos amenazando al clan omaticaya. Neytiri y los demás también levantaron sus arcos, dispuestos a entrar en una batalla sangrienta. Tus ojos volvieron a Neteyam, quién siseaba y devolvía los golpes con fuerza provocando que sangre saliera de la nariz de Ska'anekx. Jakesully levantó su arco cuando el Na'vi de ojos verdes tomó la navaja, levantándola listo para atravesar el cuello de Neteyam.
El pánico entró y pronto entraste en modo supervivencia.
Al sentir amenazada a tu pareja tomaste el cuchillo del Na'vi que estaba a tu lado, el cuál se alejó de golpe mientras daba un grito de sorpresa, Jake te miró. Perdiendo la concentración para disparar a Ska'anekx.
Entonces gritaste.
---- BASTA.
Ska'anekx te miró abriendo sus ojos aterrados alejándose de golpe de Neteyam, el cuál se levantó rápidamente para mirarte. Sus ojos se abrieron asustados ante el cuchillo que estabas poniendo en tu propia garganta.
----Yawne... Baja el cuchillo ----- murmuró Ska'anekx.
----Diles que bajen los arcos o me revano el cuello ---- amenazaste con ojos paranoicos. Él negó intentando hablarte provocando que apretaras con más fuerza dejando que un hilito de sangre saliera ---- ¡Diles que bajen los arcos!
Ska'anekx miró a sus seguidores haciendo que ellos bajaron las armas, Neteyam te miró preocupado intentando acercarse para dar un paso hacia atrás cuando lo miraste igual de temerosa que a Ska'anekx.
----(T/N)... Baja el cuchillo, por favor ---- suplicó Neteyam.
---- Yawne, está bien. Volvamos a casa debes cálmarte.
Negaste alejándote, no volverías a ese infierno.
---- No, no, no quiero. No voy a volver.
Los ojos de Ska'anekx penetraron por completo tu valentía, el cuchillo en tu mano comenzó a temblar cuando las lágrimas comenzaron a bajar de tus ojos.
----Vas a volver a casa ---- Ska'anekx dio un paso adelante ---- ¡Estamos unidos ante Eywa! ¡Tuviste a mis hijos en tu vientre! ¡Me perteneces!
Ah... Cierto. Cómo lo odiabas, cuánto odiabas haber hecho eso. Te había destrozado tanto que ya le pertenecías, se habían unido ante Eywa. Nadie se juntaría a ti cuando ya fuiste desechada, cuando eras simplemente una humana inútil en este hermoso mundo.
Pero aún así, aún así.
Aunque este hombre de aquí fuera la última opción para ti...
Preferias morir.
Quedarte no era una opción, siempre volvería por más. Atacaría a todos y cada uno de los que se habían convertido en una familia, sería un nuevo problema para Jake Sully y se veía tan cansado que ya no querías ser una carga.
Y Neteyam, oh tu gran amor, Neteyam... No podías simplemente dejarlo después de prometerle que jamás volverías a irte.
----No soy una Na'vi. Esas leyes no aplican conmigo--- miraste a los ojos de Ska'anekx ----. Soy una humana, soy un inútil humano. Soy Kawtu ---- soltaste con rencor ---- soy Kawtu el fantasma de Tormakticaya.
Ska'anekx negó, dando otro paso hacia ti
----No, mi amor ---- él se acercó más, suplicandote con su mirada ---- esas palabras fueron mentiras, mentiras para que no me abandonarás. Vuelve a tu hogar, a mi lado. Déjame amarte de nuevo.
Negaste colérica, apretando el cuchillo con más fuerza.
----No, no me mientas. No más, por favor ----. Suplicaste, sollozando con rabia ---- arruinaste mi vida, me prometiste amarme y protegerme. Solo gané muerte y odio en tus brazos, me volví nadie en cuestión de segundos y no te importó.
Neteyam guardó silencio, la rabia comenzaba a invadir su cuerpo con cada palabra que salía de tu boca.
----Será diferente, lo prometo. Será todo como antes de Maikte.
Temblaste ante la mención de su nombre, ella asesinando a tu bebé se caló en lo profundo de tus pensamientos.
----Estas obsesionado, Ska'anekx. No puedes amarme, solo necesitabas saber que estoy bajo tu poder ---- la rabia volvió a invadir cada parte de tu cuerpo recordando a a la joven e ingenua tú ---- Dejé que me destrozaras, dejé que aprisionaras y que quebraras cada maldito hueso de mi cuerpo con tal de que me amaras. ¡Renuncié a todo por ti! ¡Dejé que asesinaras a cada uno de mis bebés con tal de que estuvieras a mi lado!
Diste pasos hacia atrás cuando él comenzó a acercarse lloroso.
----¡Renuncié a mis costumbres, mi personalidad, todo por ti! ---- el cuchillo cayó de tus manos cuando acarició tu rostro con suavidad ---- ¡El mundo me odio, me golpeó y dejé que me hiciera sangrar con tal de quedarme contigo! ¡Hice todo con tal de que fueras mío! ---- diste manotazos intentando alejarte de él ---- ¡Pensé que eras mío! ¡Te odio! ¡Odio cada recuerdo que tengo contigo! ¡Odio cada segundo que pase a tu lado! --- te dejaste caer al suelo aferrandote a sus rodillas mientras sollozabas, miraste hacia arriba observando fijamente esos ojos verdes que dejaban caer lágrimas ---- Me mataste, Ska'anekx. Dejé que me destruyeras y aún así... Aún así, nunca fuiste mio.
El Na'vi te hizo levantar.
---- Te veo, (T/N) ---- murmuró juntando su frente con la tuya.
Abriste tus ojos, sintiendo sus manos en tus mejillas. Sonreíste suave, tus manos se aferraron a su cuello y acercándote a su rostro susurraste.
---- Te veo, Ska'anekx --- una mueca de disgusto se formó en tu rostro ---- Te veo sufriendo por el resto de tu descanso en las manos de Eywa.
Cuando el cuchillo atravesó la piel en el pecho de Ska'anekx sentiste como sus brazos apretaban todo tu cuerpo, sentiste tus costillas quebrarse dejando que un gran grito de dolor abandonara tu garganta.
Fuiste tirada al suelo cuando Neteyam se lanzó hacia Ska'anekx con rabia. tus ojos miraron cómo Neteyam golpeaba una y otra vez el rostro de el líder del clan Tormakticaya.
Escuchaste los gritos de los Na'vi a tu alrededor y pronto las flechas hicieron aquel ruidos que tanto odiabas. Atravesaban cráneos sin dudar.
De repente estabas en el campo de la batalla, tu arma estaba en tus manos mientras con la máscara de oxígeno avanzabas entre la espesa maleza de Pandora. Tus ojos miraron cuerpos de Na'vi tirados en el suelo, madres intentando proteger a sus hijos mientras tus aliados disparaban sin dudar. Cuando una flecha fue en tu dirección no dudaste en disparar al Na'vi macho, el cuál cayó en cuestión de segundos al suelo.
Te giraste rápidamente al oír un ruido de una rama. Un niño Na'vi lloraba desconsolado mirándote asustado, abriste los ojos con duda. Sin saber qué hacer realmente con el niño, tus ojos miraron a uno de tus compañeros que gritaba quién sabe qué. Lo miraste tan confundida en ese momento ante el ruido insonoro que te rodeaba, cuando viste su arma ser levantada contra el niño te moviste rápidamente disparando a tu compañero para tomar al niño en brazos y correr.
Era un niño. Un maldito niño, de otra especie , pero un niño finalmente.
Y él iba a dispararle.
Lo apretaste entre tus brazos sin dejar de correr, disparando a quien sea que te mirara. Te ocultaste detrás de un árbol, intentando calmar al niño con suaves arrullos y una canción de cuna. El Na'vi te miró, calmando su llanto mientras imitaba tu canto, sonreíste suave ante sus enormes ojos. Levantaste los ojos aterrada cuando una sombra se presento frente a ustedes, el niño fue arrebatado de tus brazos bruscamente y tú no dudaste en pelear levantando tu arma para disparar. Esta fue lanzada lejos y pronto tu cuerpo fue golpeada contra un árbol, tu garganta siendo fuertemente apretada.
Miraste nerviosa unos ojos verdes que te veían iracundos.
El Na'vi te analizó soltando palabras al niño, el cuál golpeaba a su padre para que te soltara.
Respiraste asustada, mirando su gran daga pensando que eso dolería como el infierno. Pero te soltó, te soltó y te pateó alejándote de ellos.
Lo miraste aterrada, pensando que atravesaría tu cuerpo con su flecha, pero no, te hizo una señal para que te largaras. Apuntando con su arco cuando vio que no te movías y entonces corriste. Corriste lo más rápido que podías con tu vida siendo perdonada por un Na'vi.
Esa fue la primera vez que conociste a Ska'anekx.
Tus oídos fueron cubiertos por tus manos, intentando ignorar está pequeña guerra campal entre clanes y así no pensar en las vidas que se perderían. Estabas tan dispuesta a volver a encerrarte en tu mente hasta que escuchaste la voz desesperada de Neytiri.
----¡Tuk!
Levantaste la mirada rápidamente mirando cómo un Na'vi del clan Tormakticaya tenía a la pequeña tomada de la trenza, un cuchillo descansaba en su garganta esperando a rebanar en cuestión de segundos.
----SUELTEN A SKA'ANEKX O LE REBANO EL CUELLO.
Neteyam miró desesperado a su hermana y el Na'vi que estaba debajo de él se permitió empujarlo fuera de él. Sus ojos verdes te miraron y sabías que estabas jodida porque te estaban poniendo a elegir entre Tuk y tú.
Y por supuesto Tuk era claramente elegida por todo su clan, incluso por ti.
Tus ojos miraron aterrados como el Na'vi de ojos verdes se acercaba a ti y nadie hacía nada para detenerlo. Cubriste tu rostro cuando él ya estaba a centímetros tuyo, su mano tomó con fuerza tu cabello y en cuestión de segundos ya te estaba arrastrando hacia su ikran haciendo que tus costillas dolieran como el infierno.
----¡Sueltame, déjame ir maldito enfermo!---- gritabas tomando su mano con fuerza intentando levantarte para que el dolor de tu nuca bajara.
----¡Devuelvan a la niña! ---- pidió Toruk Makto, casi rogando por su pequeña.
Tus ojos miraron a la pequeña quien lloraba aterrada, gritando de dolor por el feo agarre en su trenza. Cerraste los ojos con fuerza, rogándole a Eywa que tenga piedad por la niña y la protegiera del loco de Ska'anekx.
----Se negaron a darme lo que por derecho era mío, ¿Porqué te devolvería a la niña? ---- soltó el de ojos verdes con una sonrisa divertida ----. Es el pago por robarme.
----¡Mamá, papá! ---- llamó la niña.
Cuando el lider del clan Tormakticaya soltó tu cabello ya estabas a los pies de su ikran. Lo ignoraste mirando hacia Tuk, quién seguía siendo aprisionada por el guerrero de Ska'anekx. Te levantaste de golpe, aferrandote a su taparrabos aunque tus costillas dolieran como el infierno.
---- Por favor, por favor Yawne ----. Sus ojos verdes te miraron ante el apodo ----. Deja ir a la niña, por favor. Ella no ha hecho nada, si la dejas ir seré obediente, te lo prometo.
El Na'vi te miró desde arriba tomando con cariño tu mentón.
---- Aún si no la dejo ir, tú serás obediente ----. Tus ojos se abrieron aterrados cuando el Na'vi levantó su mano.
Cubriste tus oídos gritando mientras el alarido de Neytiri calaba en lo más profundo de tu cerebro. Tus ojos miraron rápidamente a la niña que había sido lanzada a tus pies, miraba tus ojos llorosa susurrando cuánto dolía su abdomen. Tus manos apretaron con fuerza su herida, evitando el desangrado desesperada.
Tus ojos miraron a todo el clan Omaticaya, los cuales ya estaban levantando sus arcos dispuestos a pelear.
Por un momento pudiste ver cómo Neteyam te miraba perplejo. Sus ojos en estado de shock ante la herida de su pequeña hermana que se desangrabas a tus pies. Sollozaste cuando Lo'ak estaba gruñendo, dispuesto a pelear por su hermana.
----Por favor Eywa, haz que pare. Haz que viva y te entregaré todo lo que me pidas. Por favor, Eywa ---- pedías mientras el Na'vi te tomaba en sus manos, obligandote a subir a su ikran con Tuk en tus manos.
----No quiero que la dejes ir, pequeña ----. Susurró en tu oreja ----. Ella es nuestro boleto de escape.
No podías hacer que ella fuera con ustedes. Tuk era un alma libre y si la niña iba con ustedes se apagaría por completo. Por qué a Ska'anekx le gusta tener todo bajo control.
Él no dudaría en desecharla una vez que haya cumplido con su objetivo.
Tus ojos miraron a los de Toruk Makto, quién miraba impotente hacia Ska'anekx. Sabías que no atacarían porque su hija seguía en sus manos y había una pequeña posibilidad de que viviera. Apretaste los dientes con fuerza, mirando a la pequeña Tuk quién temblaba y lloraba en tus manos pidiendo a su mami para que la abrazara.
Tomaste bocanadas de aire cuando el ikran se elevó dispuesto a irse y entonces estuviste dispuesta a cometer una estupidez.
Los guerreros se adelantaron guiando el camino de su líder, tus manos tomaron a Tuk con fuerza y con un beso dejado en su frente la lanzaste fuera del ikran.
-----JAKE ---- llamaste cuando la niña caía en direccion hacia el duro suelo.
----¿¡Qué mierda crees que haces!? ---- gritó Ska'anekx detrás tuyo.
Su ikran estaba dispuesto a ir por la niña y la caída en el Banshee te trajo el recuerdo de cómo te atrapaba entre sus filosos colmillos cada vez que intentabas lanzarte al vacío.
Aquello te hizo temblar, pensando que una pequeña niña no soportaría ese dolor.
Cuando el ikran estaba a punto de alcanzar el cuerpo de la niña tus brazos abrazaron la cabeza del ikran haciendo que su hocico se cerrará de golpe, haciendo que uno de tus brazos fueran mordidos por la criatura quebrando tu hueso.
Gritaste llena de dolor ante las punzadas de tus costillas por el movimiento brusco, te lamentaste ante el nuevo dolor, sin embargo, miraste hacia abajo. Tuk había sido atrapada por las ramas de Eywa haciéndote reír cuando la viste en los brazos de su padre.
Mientras tu vista se nublaba dejaste que una lágrima cayera al suelo de Pandora. Esperabas que Neteyam te pudiera perdonar por haberlo vuelto a dejar.
47 notes · View notes
rralcalde · 3 months
Text
DEDICADO A ELLOS...
A ellos que muchas veces nadie les pregunta cómo están, cómo estuvo su día, si se han sentido bien, si desean conversar, si desean tiempo para descansar, si necesitan su espacio por un momento para estar a solas.
Ellos que también desean ser admirados, valorados, respetados y reconocidos por su mujer y su amante.
Ellos que muchas veces en silencio guardan su tristezas, sus inseguridades, sus frustraciones, sus inquietudes, sus miedos, sus tropiezos, su errores.
Ellos que van por ahí siendo simples proveedores que nadie ve el esfuerzo, los sacrificios que hacen para dar lo mejor en un hogar.
Ellos que intentan controlar su emociones para que nadie los vea llorar, porque crecieron en un mundo donde no debían llorar por el simple hecho de ser hombre.
Ellos que se hacen los valientes, los fuertes, cuando en su interior se sienten abatidos tratando de liberarse de sus sentimientos y necesitan gritar al mundo su condición.
Ellos que también han sufrido alguna desilusión, algún engaño, alguna infidelidad que le ha destrozado el corazón.
Ellos que también sienten, que necesitan ser rescatados, ser salvados, ser cuidados, una mano que los sosten suya, un hombro que les permita llorar y poder desahogarse, un abrazo un consejo, un… te quiero, te amo, todo estará bien.
Ellos también son emocionalmente sensibles, desean ser aceptados, desean expresar sus emociones, desean ser reconocidos, desean ser amados y respetados, también necesitan de demostraciones, de detalles, ser enamorados, ser consentidos, ser mimados, etc.
Ellos que siempre deben dar seguridad, preocuparse de un hogar, pagar cuentas.
Llevar a pasear, invitar a un cine, o un restaurante.
No siempre debe ser el que lleva las flores y el que conquista, el que toma la iniciativa en el amor.
Ellos necesitan un macho seguro de si mismo, que sepa sacar el lado más oscuro de su amada esposa para que pueda sentirte 100% cubierta en su sexualidad, ellos también tienen emociones y un gran corazón.
Tumblr media Tumblr media
DEDICATED TO THEM...
To them, many times no one asks them how they are, how their day was, if they have been feeling well, if they want to talk, if they want time to rest, if they need their space for a moment to be alone.
They also want to be admired, valued, respected and recognized by their wife and her lover.
They who often silently keep their sadness, their insecurities, their frustrations, their concerns, their fears, their setbacks, their mistakes.
They go around being simple providers that no one sees the effort, the sacrifices they make to give the best in a home.
They try to control their emotions so that no one sees them cry, because they grew up in a world where they should not cry for the simple fact of being a man.
They who act brave, strong, when inside they feel depressed trying to free themselves from their feelings and need to shout their condition to the world.
They who have also suffered some disappointment, some deception, some infidelity that has broken their heart.
They who also feel, that they need to be rescued, to be saved, to be cared for, a hand to hold them, a shoulder that allows them to cry and be able to vent, a hug, advice, a... I love you, I love you, everything will be fine.
They are also emotionally sensitive, they want to be accepted, they want to express their emotions, they want to be recognized, they want to be loved and respected, they also need demonstrations, details, being in love, being spoiled, being pampered, etc.
They who must always provide security, worry about a home, pay bills.
Take him for a walk, invite him to a movie, or a restaurant.
It should not always be the one who brings the flowers and the one who conquers, the one who takes the initiative in love.
They need a confident male who knows how to bring out the darkest side of his beloved wife so that he can feel 100% covered in his sexuality. They also have emotions and a big heart.
7 notes · View notes
elvagopit · 2 months
Text
Poema: Me llamo metanfetamina.
Destruyo hogares y fragmento familias enteras. Te quito a tus hijos, y ese será sólo el principio. Soy más brillante que un diamante, más preciado que el oro dorado. El sufrimiento que provoco es peor que la pesadilla de un loco.
Si me necesitas, soy fácil de encontrar. En cualquier ciudad, a cualquiera hora, le doy maldad a cualquiera que implora.
Vivo con los ricos. Vivo con los pobres. Vivo con tu ser más amado, tal vez en la habitación de a lado.
Soy hecho en un laboratorio, pero no el que te imaginas. Puedo ser hecho en cualquier casa, detrás de las cortinas.
En la cajuela de un coche, incluso afuera en la noche. Puedo destruir una nación, sólo usa tu imaginación.
Tengo mil nombres. Estoy segura de que has oído hablar de mí. Me llamo metanfetamina de cristal.
Mi poder es increíble, prueba y te sentirás invencible.
Prueba una vez, y tal vez te deje ir. Prueba dos veces, y da por hecho que tu alma ya me pertenece.
Una vez que te posea, vas a robar, mentir, manipular, incluso matar. Harás lo que sea necesario, sólo por una dosis más.
Los crímenes que cometerás por mí sueño narcótico no harán reír ni al más cínico cómico.
Le mentirás en la cara a tu madre, le vas a robar a tu padre. ¿Lo peor? Cuando veas sus lágrimas, ni siquiera estarás triste.
Olvidarás tus valores y cómo te criaron. Pensaré por tí, te enseñaré cómo moverte. Sigiloso en la noche, oculto de las criaturas que tu patética mente psicótica ha creado. Buscando cámaras en las paredes mientras susurras cosas sin sentido.
Le quitó sus hijos a los padres, y le quito los padres a los hijos.
Te lo voy a quitar todo. Tu amor propio, tu orgullo y tus logros. Todo por lo que has trabajado, y todo por lo que trabajarás.
Lo vas a perder todo. Tu salud, tu dinero, tu control, tu mente, tu cuerpo, tu familia. Quedarás aislado y solo.
Te voy a quitar todo hasta que ya no te quede nada por dar. Cuando finalmente termine contigo, agradece si sigues con vida.
Si me pruebas, estás advertido. Da por seguro que te voy a quitar la cordura.
Las pesadillas que te daré asustarán hasta al más frío asesino. Las voces y las sombras en la oscuridad.
Los delirios y la paranoia.
Las taquicardias, el sudor, los temblores, los ataques de pánico, las visitas a urgencias, sangrado nasal, riñones destrozados.
Todos esos son mis regalos.
Vas a tratar de dejarme. Pero a esas alturas, sabrás en lo más profundo de tu bastarda alma que ya me perteneces. Jamás volveremos a estar separados.
Te vas a arrepentir de probarme, todos los hacen. Pero no me culpes a mí. Yo no te busqué, fuiste tú a mí.
No debiste probarme. ¿Cuántas veces te advirtieron? Pero subestimaste al mismo diablo.
Sólo tenías que decir no, y seguir con tu vida. Si pudieras volver a ese día, ¿Qué responderías?
Yo seré tu amo, y tú serás mi mascota. Si quieres hasta iré a tu funeral.
Puedes probarme por diversión, pero no soy un juego.
Te voy a hacer sentir tanta miseria y dolor que las palabras jamás podrán explicar.
Vamos, toma mi mano. Déjame guiarte al infierno.
5 notes · View notes
fucking-lifes-things · 2 months
Text
Verdad o Mentira
Como saber sí lo que viviste fue verdad, si el final es triste y no como esperabas.
Como saber sí lo que viviste fue mentira, si se sintió tan real y hermoso.
Los cuentos, las historias, los libros, todas tienen una parte que es verdad y mentira, pero cuando eres espectador puedes decidir cuál quieres que sea verdad y mentira, sin embargo, cuando lo vives, no tienes ese derecho, solo pasa y la vida sigue, no tienes control, te toca sufrir, vivir tu peor pesadilla y aún así, intentar no morir en el intento. Quedar destrozado y sin un camino que seguir, unir cada ladrillo caído que intentaste tan duro por hacerlo crecer junto a los otros y proteger, hasta llamarlo tu hogar, para que de un día a otro, todo se derrumbe y tengas que empezar de nuevo.
5 notes · View notes
sicl5 · 25 days
Text
Capítulo 9
(La historia es una adaptación de la obra FINAL FANTASY VII por lo tanto incluye SPOILERS de esta.)
-
Autopista derrumbada del sector 6.
Volviamos al sector 7 para poder avisar a los demás de que por suerte estábamos bien. Elmyra nos había dicho que este atajo era el más rápido y que llegaríamos en un santiamén. Estaba todo destrozado, la plataforma de encima se había caído en esa autopista y no parecía el camino más seguro.
— Démonos prisa, este camino no me da buena espina.- Dijo Cloud mirándome fijamente.
— Entendido. 
Empezamos a recorrer la autopista, las escaleras de muchas zonas eran inaccesibles así que teníamos que utilizar una especie de grúas para poder pasar al otro lado. Hacer team así con Cloud era genial, bueno yo personalmente me lo pasaba bien. Sentía que nos complementábamos y que éramos un buen equipo. 
A más de la mitad del camino nos encontramos una hoguera que parecía que había sido recién apagada. 
— Ha pasado gente por aquí hace poco.- Miré al rubio, algo desconfiada de la situación. 
— Mirad qué tenemos aquí.- escuchamos una voz claramente de un tipo maleante que venía desde nuestras espaldas.- ladrones, pillaos in fraganti
Nos giramos para mirar de dónde venía y nos pusimos en posición de guardia al ver a tres maleantes que daban hasta un poco de yuyu.
— ¿Cómo sus atrevéis a saquear los hogares de ciudadanos de bien?- Dijo otro de los maleantes.
— Creo que tendréis que compensarnos por… daños y perjuicios.- No paraban de decir tonterías.
— Eso, ¡por tantos prejuicios! O sea, perjurios… ¿Cómo era?- Dijo el tercero de los maleantes, bajito y gordito. 
— ¿Cómo pués tener la cabeza tan hueca? To el mundo conoce esa palabra. Te compensan por daños y prejuicios cuando… Pos… Cuando te han dañao… Ya sabes.
— ¡Fijo! Es lo que te dan cuando…. Lo tengo en la punta de la lengua, coñe.
Se estaban discutiendo literalmente porque no sabían como definir una palabra, delante nuestro.
Vaya maleantes
Sin querer no pude aguantar la risa y se me escapó un poco, haciendo que los tres se giraran mirándome fijamente a mi.
— ¿Te has reío?- Me dijo uno mirándome fijamente acercándose peligrosamente a mi.- Podemos solucionar esto por las wenas si nos dais una remuneración.
— Renume… ¿Renuqué?- El otro maleante fue directamente hacia el que parecía el jefe- ¿Qué nos enumeren algo?
— No, cacho melón, re-mu-ne-ra-ción. Es… ¡Como el perjuicio!
No callaban ni debajo del agua, parecía que les faltaban piezas dentro de la cabeza por su forma de hablar y por lo incultos que eran.
— Cloud, ¿podemos deshacernos de ellos?- lo mire fijamente, quería seguir avanzando el camino y ya me estaba cansando un poco.
— Si, señorita.- me asintió con la cabeza.
Nos enfrentamos a duelo contra ellos, ya me estaba acostumbrando a luchar al lado de Cloud pues ya teníamos mejor sincronización y eso hacía que termináramos con nuestros objetivos mucho más rápido. Parecía que subiéramos de nivel cada vez que luchábamos juntos, era toda una experiencia.
Les dimos una paliza, terminaron los tres en el suelo, aunque se notaba que se estaban haciendo los muertos para poder escapar de nosotros y que no los matáramos. Eso me hizo reír un poco más y Cloud se me quedo mirando fijamente, sin saber que tipo de mirada era pero sin ningún ardor de hielo de por medio. 
Parque verde del sector 6. 
Por fin después de esta divertida experiencia salimos de la autopista y llegamos justo a las puertas del sector 7. Allí, se encontraba un pequeño parque de niños que aún era parte del sector 6.
— Sil.- Me miró fijamente Cloud como si quisiera decirme algo importante.- ¿Descansamos un rato?
— ¿Quieres descansar? ¿Qué mosca te ha picado?- Me reí un poco, querer descansar no era para nada algo típico de él, por lo que le conocía.- ¿Qué tal allí arriba?
Señalé con el dedo encima de lo que parecía un tobogán para los más pequeños con forma de animal redondo. Cloud asintió y subió primero, ayudándome a subir después agarrándome la mano. Nos sentamos los dos juntos, bastante cerca. Siendo realistas, me encontraba muy cansada de todas las emociones vividas hoy, no había sido un día corto.
— Hoy no ha habido ni un momento de pausa.- Miraba las luces del cielo, con nostalgia en la ojos. Este sitio me traía recuerdos vacíos que no podía describir, no sabía qué recuerdos eran.
Cloud me miró fijamente intentando analizar mi mirada. Parecía que buscaba un momento idílico. 
— Sil.- Me acercó un poco a él, este gesto me sorprendió y lo miré a los ojos. Que ojos más bonitos tenía, el mako solo hacía resaltarlos más. De tan atónita que me quede mirándolos, mi corazón empezó a ir muy rápido.- Esto… es para ti.
Me sonrió, era de las primeras veces que lo veía sonreír así. Y en medio de su sonrisa me tendió una rosa roja. 
Me sorprendí mucho, y lo miré a los ojos, sin creer lo que veía, sintiendo que mi corazón iba a salir de mi pecho. Sin pensarlo mucho, le abracé fuerte, también era la primera vez que lo hacía pero mi cuerpo sintió la necesidad de hacerlo.
— Gracias Cloud…
Tumblr media
Cloud correspondió mi abrazo y nos quedamos abrazados por un par de segundos antes de que él deshiciera el abrazo y me acercará aún más a él. Nuestros labios quedaron muy cerca, pensaba que me iba a besar. No podía controlar ni mi corazón ni mis mejillas, sentía que me fallaban las piernas. El ambiente gritaba que nos besáramos, sus reacciones, las mías, todo.
Justo en el momento que yo creía que Cloud iba a juntar nuestros labios escuchamos un ruido proveniente de algún tipo de objeto metálico a unos escasos metros de nosotros. En ese momento nos sobresaltamos un poco los dos y nos separamos. Tosí un poco escondiendo mi vergüenza, seguía sin controlar el ruido de mi corazón. 
Cloud bajó rápidamente del tobogán poniéndose en guardia y acercándose donde había sonado el ruido.
— ¿Quién anda ahí?- Exclamó sacando su espada.
— Vale, perdón perdón.- De golpe salió Aeris riendo un poco de detrás de un muro con las manos en alto.- Soy inocente.
— ¿Aeris?- Pregunté yo sin entender nada, bajando del tobogán. Cloud suspiró y guardó su espada en su espalda.
— Os he arruinado la cita, ¡qué rabia!- Añadió Aeris mirándonos fijamente.
— Pero tú…- Le dije acercándome a ella.- ¿No estabas durmiendo en tu casa?
— Si, bueno. Pero no me podía perder este momento.- Ella rió y miró a Cloud sonriéndole de manera cómplice a lo que él desvió la mirada. No entendí nada.
— Aeris pero… deberías volver a casa. Es muy tarde.- Le dije, preocupada por ella.- Pero, queda algo lejos de aquí… ¿te acompaño?
— Ah, no. No te preocupes Sil. He venido sola hasta aquí también, no me pasará nada.- Me respondió ella.- En caso de emergencia conozco otro camino. Y es más seguro.
— Entonces ve por allí, ¿si?- Le dije con una sonrisa.
En ese momento las puertas de la barriada del sector 7 se abrieron. Que raro. A tales horas de la noche era muy raro que unas puertas de una barriada se abrieran. De dentro salió un carro siendo tirado por un chocobo. Al mirar dentro del carro vimos a Tifa que iba dentro de este.
—¿¡Tifa!?- Exclamamos Cloud y yo al unísono.
Fuimos corriendo siguiendo el carro y nos pusimos detrás de este haciendo que Tifa nos reconociera. Ella iba vestida con un vestido azul muy corto, con un gran escote.
— ¡Sil! ¡Cloud! ¡Estáis vivos! Pensé que no os volveríamos a ver…
Nos subimos al carro, agarrados a la barandilla y yo la miraba fijamente sin entender absolutamente nada.
— ¿Qué haces aquí?- Preguntó Cloud a lo que Tifa lo mandó a callar rápidamente.
— Os lo explicaré más tarde.- Respondió Tifa.- Ahora mismo voy a ver a Don Corneo.
— ¿A Don Corneo?- No pude evitar escandalizarme un poco al relacionar esas palabras y la manera en la que Tifa iba vestida.
— Será mejor que volváis a El Séptimo Cielo y os reunáis con los demás.- Agregó Tifa.
— Pero…- Intenté hablar.
— Sil, no te preocupes por mí.- Me sonrió con una sonrisa sincera.- Ya has visto que patadas pego.
— Ya…
Cloud me agarró del brazo y me hizo bajar del carro, viendo como Tifa se iba dirección el mercado muro.
— ¡Cloud! ¿Qué haces? Hay que ir detrás de ella.- Le dije mirándole fijamente, muy preocupada.
— Es mayorcita, y le sobra fuerza para encargarse de tipos como ese. O peores.- Me respondió Cloud.
En ese momento apareció Aeris donde estábamos y puso sus manos en su cadera.
— Ni de broma, tienes que ir tras ella Cloud.- Dijo Aeris dándome la razón.
— Cloud no conoces a Corneo, ¿Verdad?- Le miré fijamente.
— Don Corneo siempre se las apaña para volverlo todo en tu contra, da igual lo fuerte o inteligente que seas.- Exclamó Aeris.- Y… ¿dónde crees que va a reunirse con él? En una mansión llena de matones.
— Ay, Tifa…- Exclamé yo.
— ¿No te preocupa lo que le pueda pasar?- Dijo Aeris mirando fijamente a Cloud.- ¡Tienes que ayudarla!
La puerta de la barriada del sector 7 se cerró en ese momento y yo le agarré el brazo a Cloud haciéndole un gesto de ir dirección mercado muro, a salvar a Tifa. Emprendimos los tres la marcha y llegamos a una estación de chocobos donde estaba el carro y el chocobo que habían transportado a Tifa hasta aquí.
Nos paramos justo en frente y un mozo de cuadra cuidaba al chocobo.
— ¡Hola! ¿Adónde os llevo?- Nos preguntó el mozo.
— Hace poco ha llegado en chocobotaxi una chica. ¿Sabes dónde está ahora?- Preguntó Aeris al mozo.
— No, y si no habéis venido a coger un taxi, largo. ¿No veis que estoy trabajando?- El chaval nos envió a pastar.
— No se te ve muy ocupado.- Le dijo Cloud.
— ¿Qué me has dicho, cacho…?- El mozo se giró mirando fijamente a Cloud.
De golpe salió otro hombre de dentro de la estación de chocobos que también llevaba un gorro como el taxista.
— ¿Qué pasa aquí? No os conozco. ¿Qué queréis?
— Estamos buscando a unas chica que ha venido en chocobotaxi. ¿Nos puedes ayudar a encontrarla?- Le pregunté educadamente al señor.
— Quizás. ¿Por qué la estáis buscando?- Preguntó el señor.
— Bueno… para… algo muy importante personal.- Dijo Aeris mirando fijamente al señor esperando que no hiciera más preguntas.
— ¿Ah, no me digas? Bueno, tengo muchos clientes, así que es difícil acordarse de todos. ¿Cómo es esa chica?
— Bueno… Es una chica de pelo largo atado al final de ojos carmesí. Iba muy sexy.- Respondí.
— Espera, ¿os referís a Tifa?- Preguntó el hombre.
— Sí.- Mencionó Cloud.
— ¿Estás pillado por ella, chaval?- Preguntó el hombre.- Siento romperte el corazón, pero vas a tardar bastante en volver a verla.
— ¿Qué quieres decir?- Le dije yo mirándolo fijamente, notaba la mirada de Cloud en mi nuca, fijamente.
— Es una chica muy guapa. Corneo va a hacer otra prueba de selección y ella es una de las candidatas.- Respondió el de los taxis.
— ¿Que selecciona?- Preguntó Aeris.
— A su próxima chica de compañía.
— ¿Cómo?- Me sobresalté.- Está hablando de seleccionar a una chica para…
— Claro, Tifa es un bellezón y cumple todos los requisitos.- El señor se me quedó mirando.- Aunque si quieres para la próxima te puedo recomendar a ti, también entrarías dentro de sus gustos.
— ¡Ew!- Expresé.- No, gracias.
— Igualmente, mi experiencia me dice que Tifa no va a salir de su mansión en mucho tiempo; quizá no lo haga nunca…
— ¿Dónde podemos encontrar a ese tal Don Corneo?- Preguntó Cloud.
— ¿Por qué lo preguntas? ¿Vas a ir a buscar bronca por tu chica?
— No es mi chica.- Cloud me acercó a él y no pude evitar ponerme como un tomate.- Pero es mi amiga.
— Bah, lo que digáis. Haced lo que queráis pero a mi no me metas. Ya tenéis toda la información, ¿no? Entonces largo.
Nos dio aire y me separé de Cloud aun algo roja. 
— Creo que ya no nos va a ayudar más…- Dijo Aeris, suspirando.- Bueno, quizás tengamos más suerte en otro sitio. Vamos a dar una vuelta
Mercado Muro.
Entramos a mercado muro. Un sitio abarrotado de luces y de un ambiente un poco especial. Aunque era muy de noche había muchísimo ambiente.
Bienvenidos al mercado Muro, ¡la capital del placer de Midgar! Aquí hay opciones para todos.- Dijo un señor de relaciones antes de mirar a Cloud.- Oh, vas bien acompañado eh chaval. Podéis pasarlo bien juntos, por separado, ganaros unos guiles si queréis. ¡Aquí nadie os va a mirar mal! Tenemos una oferta limitada…
— No gracias.- Dijo Aeris poniendo las manos en la cara.- Vamos chicos.
Nos adentramos un poco más y Aeris decidió mirar una tienda que había allí que parecía de bebidas. En ese momento un señor nos paró a Cloud y a mi.
— ¡Vosotros! Sí, vosotros dos. ¿Tenéis donde disfrutar de esta noche de ensueño?- Nos preguntó. No pude evitar sonrojarme y mirar a Cloud de reojo.- Tenemos una habitación perfecta para unos tortolitos como vosotros.
— ¿Cuánto cuesta?- Preguntó Cloud.
— ¡Cloud! Tenemos que ir a por Tifa…- Le dije agarrándole el brazo.
— Si cambiáis de idea, ya sabéis dónde encontrarme.- Dijo el señor.
Fui rápidamente hacia donde estaba Aeris y seguimos los tres el camino investigando el mercado muro intentando ver si podíamos llegar a alguien para que nos contara más acerca de como poder hablar con Don Corneo.
De golpe un hombre de pelo rojo hacia arriba salió corriendo al lado nuestro.
— Disfrutar en plan tranquis de la compañía de chicas guapas… ¡Eso me pide el cuerpo!- Dijo el chaval ese.
— Vamos, a ese le conozco.- Dijo Cloud.
Fuimos corriendo detrás de él siguiéndolo y se paró delante de un sitio con muchas luces.
— Entro pa dentro o no entro pa dentro… Si entro, ¡a saber qué me encuentro! ¡Qué tormento!- Dijo el chaval mirando a Cloud, como si nada.- ¿Entiendes qué te quiero decir, no?
— No.
— Bah, estaba cantao. No te veo en plan filosófico como el menda. Los que tenéis cara de niño bueno sois lo peor, tronco. Sois unos brutos que zurráis a to el mundo pa disimular la inseguridad. Mazo triste. ¿Eh? ¿Qué pasa?
— ¿Has visto a Tifa por aquí?- Preguntó Cloud.
— ¿Tifa? ¿El amor de mi vida? ¿Quién eres y de qué la conoces? Bah, eso me da igual. ¿Tifa está por aquí? ¿Y eso? ¿¡Por qué!?
— Pero, ¿este quien es?- Le pregunté a Cloud sin entender nada.
— Un imbécil.- Me respondió.
— ¡Ay, no!- Exclamó el chaval otra vez.- Es culpa mía, ¿no? ¡Fijo que ha venío a pedirme que no me largue sin ella! ¡Déjate de tonterías Johnny, Tifa te necesita! ¡TIFA, YA VOY, TESORO MÍO!
El hombre salió corriendo gritando esas últimas palabras. Parecía borracho o si no, no entendía absolutamente nada.
Decidimos seguir el rumbo mientras investigábamos el mercado. De lejos vimos una gran mansión con arquitectura japonesa. Fuimos directamente allí, parecía ser donde vivía alguien que podría ser importante, es decir, Don Corneo. Cloud abrió la puerta y entramos a lo que parecía una sala de recibimiento con otra puerta gigante al fondo. Delante de ella se encontraban tres tíos que no daban mucha buena espina.
— Alto, chaval. Quieto Ahí. Aquí no entran chicos guapos.- Dijo el chaval del medio con pelo gris.
— Estamos buscando a alguien.- Dijo Cloud mirándole.
— Me da que eres nuevo en el mercado Muro.- Añadió el chaval.
— Sí, ¿y?
— No se puede entrar a la mansión de Don Corneo así como así, menos aún los hombres.
— ¿Y que tal yo?- Pregunté
— ¿Y yo?- Preguntó Aeris justo después.
— Quizás, pero no os lo recomiendo.
— Pero oye, Leslie, una es muy mona, algo sosa pero muy mona y la otra tiene… buenos atributos y una cara bonita.- Dijo otro de los tíos que había allí.
— ¿Perdón?- Le dije fijamente.
— ¿Cómo dices?- Aeris se enfadó también mirándolo.
— Bah, podría pasar una, pero ser "mona" no es suficiente.- Dijo el tal Leslie.
—  Porfa, ¿no nos puedes ayudar?- Pidió Aeris de la mejor manera posible.
— ¿Tienes idea de en qué líos os estáis metiendo?
— Leslie va, las chicas tienen su punto, las dos. Con algunos retoques aquí y allá…- Dijo el otro chico que había.
— Me los voy a cargar.- Dijo Aeris muy cabreada.
— ¿Te ayudo?- Le pregunté mirando fatal a los tres matones.
— Si de verdad queréis participar en las pruebas, necesitáis una carta de recomendación.
— Bueno y ¿quién nos la puede proporcionar?- Preguntó Aeris.
— El triunvirato, las únicas tres personas que conocen el gusto de Don Corneo a la perfección.- Respondió Leslie.- El primero es Sam, el experto en chocobos. Luego está Madame M, propietaria del salón de masajes. Y por último, Andreas Rhodea, del Honeybee Inn. Son un tanto particulares, la verdad, y no recomiendan a cualquier atontada que se les presente.
— Bueno, vale. Volveremos pronto.- Dije yo mirando a Cloud y a Aeris para salir allí.
Salimos de la mansión y suspiré, tantos comentarios innecesarios estaban haciendo de esta experiencia todo un infierno.
— Deberíamos ir a ver a Sam otra vez. Dijo que me podría recomendar a mi.- Dije yo.
— Sí, buena idea Sil.- Me dijo Aeris.
— Sil…- Cloud me miró fijamente a los ojos.- ¿Estás segura?
— Sí, cualquier cosa por salvar a Tifa. No voy a dejar que le hagan nada.- Expresé.
En ese momento apareció ese tal Johnny otra vez mirándonos a los tres con los brazos cruzados.
— Conque era eso, ¿eh? Han invitao a Tifa a la mansión de Don Corneo. Pero pa conseguir ese honor, hay que tener el visto bueno de alguien del triunvirato. ¿Cierto?- Nos señaló a los tres.- Es decir, que sé qué tenéis que hacer pa salvarla. ¡Tifa, aguanta! ¡Te vamos a ayudar! ¡Johnny te va a rescatar, tesoro!
— No se le ve muy espabilado, ¿eh?- Dijo Aeris sin entender nada de lo que acababa de pasar mientras Johnny se iba corriendo.
— No.- Respondió Cloud.
Emprendimos rumbo a ver al señor Sam, de los chocobos. No me hacía demasiada ilusión pero había que hacer cualquier cosa, el tiempo pasaba. Llegábamos rápidamente con la suerte de que Sam estaba fuera, arreglando algún chocobo.
— Otra vez vosotros… Ya os lo he dicho, pero os lo vuelvo a repetir: no contéis conmigo. Largo de aquí.- Nos dijo con mala cara.
— Antes de hablarnos así, escucha lo que tenemos que decir.- Le dije.- Eres del triunvirato, ¿no? Quiero la recomendación para las pruebas.
— ¿Eh?- Preguntó Sam confundido.
— Por favor.
— Como quieras.- Me dijo mirándome fijamente.
— ¿En serio? ¿Así de rápido?- Pregunté yo.
— Sí. Para las próximas pruebas te tendré en cuenta.
— Ya decía yo…- Suspiré.- Para las próximas no me valen. Necesito para este si o si.
— ¿Estas mismas? Imposible, muñeca. Ya he nominado a Tifa, y va a ganar de calle.
— Hm… ¿Tan seguro estás de eso?- Le pregunté.- Aunque sí, Tifa es un bombón. 
— ¡Tu también tienes muchas posibilidades, Sil!- Me dijo Aeris con una sonrisa.
— Madre mía.- Dijo Sam.- Vaya ganas de participar, ¿eh?
— ¡Muchas!- Añadí poniéndome las manos en la cadera.
— ¿Qué tal si nos lo apostamos?- Aprovechó Sam sacando una moneda y haciéndola girar.- Tú dirás.- Señaló a Cloud.- Cara o cruz. 
— Cara.- Respondió Cloud.
— Cruz, has perdido.- Sam se rio.
— Oye, enséñame esa moneda.- Le dije acercándome a él.
— Me has pillado, ¿eh?- Nos enseñó la moneda la cual era cruz por los dos lados.
— ¡Eh! Eso es hacer trampas.- Le dijo Aeris enfadada.
— Así se juega aquí, en mercado Muro.- Nos miró fijamente.- Pero si tan empeñados estáis, tendríais que intentar convencer a los otros dos.
— Aún así…- Aeris parecía muy indignada con la situación.
Decidimos poner rumbo a ver alguno de los otros dos del triunvirato. Nos teníamos que empezar a dar más prisa aunque la noche seguía siendo joven. Llegamos a un local del cual salía el tal Johnny de allí dentro. Por fuera estaba lleno de luces LED de color purpura y rojas, parecía un sitio poco apropiado.
— ¿Es aquí?- Preguntó Cloud.
— Eso creo.- Respondió Aeris.
— Entonces, dejad que me ocupe yo. Esperad fuera, ¿vale?- Dijo Cloud mirándonos a las dos.
— ¿Y eso por qué?- Preguntó Aeris mirándolo fijamente.
— Nosotras vamos contigo.- Dije yo mirando también a Cloud fijamente.
— No creo que…- Intentó justificarse él.
— El habla no es tu fuerte, Cloud. Vamos los tres.- Le dije mirándolo sin poder evitar soltar una pequeña sonrisa al ver la cara con la que me miraba al decirle eso.
Cloud suspiró y entramos los tres. Había una recepción que llevaba a una puerta bastante grande. Habían muchas chicas disfrazadas con traje de abejita sexy custodiando la zona. No entendía donde habíamos entrado. Fuimos a hablar directamente con el chico que estaba atendiendo en la recepción.
— Buenas tardes.- Nos saludó el recepcionista.
— Hola.- Respondió Aeris con una sonrisa.
— Bienvenidos al corazón del mercado Muro, el Honeybee Inn. ¿Buscan la compañía de una abejita o de un zángano?- Preguntó el recepcionista.
— Hemos venido a ver a Andreas Rhodea.- Respondió Cloud con una mirada insípida.
— Ah, la gran estrella del Honeybee Inn. ¿Tiene cita con él, caballero? ¿Me puede decir su nombre?
— Ah, no hemos concretado una cita.- Dijo Cloud desviando algo la mirada.
— Entonces lo siento mucho.- Respondió el recepcionista.- Es obligatorio concertar una cita, y el próximo hueco libre es… dentro de tres años.
— ¿¡Tres años!?- Exclamó Aeris.
— Solo serán cinco minutos. Seguro que puede hacer un hueco.- Mencionó Cloud cruzándose de brazos.
— Necesitamos ayuda para que Aeris y yo podamos participar en las pruebas de Don Corneo.- Dije yo mirando fijamente al recepcionista.
— Sean cuales sean las circunstancias, no es posible hablar con él sin cita previa.
— ¿En serio? ¿No hay otra manera?- Preguntó Aeris.
— Aunque no sea frecuente, el señor Rhodea a veces invita clientes que le llamen la atención.- Respondió el recepcionista.- Si no, me temo que no existe otra manera.
— Supongo que no hay nada que hacer…- Dijo Aeris.- En fin, vamos a probar con el que queda.
Asentí y salimos del Honeybee Inn en dirección al último sitio que nos habían dicho. Si fallábamos aquí ya no había más esperanza. Llegamos a una calle donde ya no había tantas luces ni tan ambiente pero por como estaba de poco cuidado se notaba que seguía siendo mercado Muro. El local de la última del triunvirato se encontraba allí y nos lo indicó cuando escuchamos unas voces desde fuera del local.
— ¿De qué vas, tronca? ¡No pienso pagar tanto!- Era la voz de Johnny.
— Esto es un negocio, listillo. Si no tienes dinero, ¡largo de aquí!- Dijo la voz de una chica.
En ese momento justo cuando llegamos a la puerta salió corriendo Johnny del local. Que pesadilla de tío.
Entramos los tres y allí estaba la chica. Era una chica que iba vestida con ropas tradicionales, con lo que parecía ser un kimono y un decorado en el pelo. Debía ser Madame M. Cuando entramos se giró mirándonos fijamente a los tres.
— Bienvenidos, pasad. ¿Solo vosotros tres? Venid.- Dijo la chica con una sonrisa.- Decidme, ¿qué tipo de masajes deseáis?
— ¿Cómo dice?- Pregunto Aeris mirándola.
— ¿Es vuestra primera vez en este establecimiento?- Preguntó Madame M.- Este es un salón de masajes. La fatiga y la tensión pueden convertir hasta la tarea más basica en una tortura. Aquí nos complacemos en ayudar a nuestros clientes a liberar esa tensión. ¿Qué mejor manera de relajarse que disfrutar de un masaje profesional? Ahora que nos entendemos perfectamente, ¿qué tipo de masaje queréis?
— No somos clientes.- Respondió Cloud.
— ¿Entonces?- Preguntó Madame M mirándole fijamente.
— Pensamos que nos podrías recomendar a ella y a mi.- Aeris me acercó a ella.- para la audición de Don Cor…
— Acabáramos… Di otra palabra más y te tragas el abanico.- Nos amenazó con su abanico y suspiró.- Lo que me faltaba por oír… Sois jóvenes y tontos, así que quizá os creáis que podéis hacer lo que os dé la gana. ¿Qué venís pidiendo? ¿Un favor?- La chica se acercó a Cloud.- Pues escuchadme bien. Esto es un salón de masajes, un establecimiento respetable. Si no habéis venido como clientes… ¡decidme una cosa! ¿¡No creéis que estaría en mi derecho de echaros a la calle por hacerme perder el tiempo con memeces!? ¿¡Y BIEN!?
El tono de Madame M ya era demencial, se notaba que le habíamos hecho enfadar. Los tres nos quedamos en silencio por unos momentos ya que no nos esperábamos para nada esta reacción. La chica puso su abanico en el mentón de Cloud.
— ¿Cómo te llamas?- Le preguntó
— Cloud Strife.
— La mano.- Le pidió de golpe Madame M.- ¡Dame la mano!
Cloud le hizo caso y le dio su mano y Madame M se puso a mirarla al detalle y a apretarla.
— Una mano fuerte y firme típica de un guerrero, aunque posee cierta delicadeza y tersura. Muy bien, Cloud. Veamos de qué pasta estás hecho. Y luego… ya hablaremos. Bueno, ¿qué opción de masaje deseas?
— El masaje de… 3000 guiles.- Respondió Cloud.
No pude reír un poco por la situación y miré a Aeris quien también reía un poco.
— Pasa entonces a la habitación del fondo y… espera.
Cloud pasó a la habitación y Madame M fue detrás de él. Aeris y yo nos quedamos en recepción mirándonos sin entender nada. 
— Está costando más de lo que pensaba.- Le dije a Aeris.- Espero que a estas alturas Tifa esté bien.
— Seguro que lo está, Sil. No sobre pienses.- Ella me sonrió y se acomodo.- Por cierto, quería pedirte perdón.
— ¿Perdón? ¿Por qué?
— Bueno…- Ella negó con la cabeza.- Por nada… Siento haberte arruinado el momento.
— ¿Qué momento?- Le pregunté sin entender nada.
— Con él.
— Ah, no, me hace ilusión que estés aquí.- Le sonreí.
— Muchas gracias, está siendo una experiencia esto.- Me respondió mirándome.
— Totalmente.
Reímos un poco y en ese momento salió Cloud con una cara de perdido que no se la aguantaba ni él.
— ¿Cómo ha ido?- Le pregunté.
— ¿Eh?- Dijo él, confundido.
— ¿Estás bien?- Le preguntó Aeris mientras él se apoyaba en la pared.
— Sí…- Respondió con un hilo de voz.
— Estás rarísimo Cloud.- Le dije yo mirándolo fijamente.
— ¿En serio?- Me respondió sin mirarme.
— Muy raro.- Agregué.
En ese momento Madame M se acercó a Cloud y lo abanico un poco con su abanico.
— ¿Crees que vas a repetir?
Cloud desvió la mirada bajándola, algo rojo. ¿Qué había pasado en esa habitación?
— Muy bien. Ya nos entendemos perfectamente.- Dijo Madame M.
— Entonces…- Añadió Aeris acercándose a Madame M.
— Decidme qué necesitáis y ya veremos si os ayudo.- Respondió ella. 
— Eres del triunvirato, ¿no?- Preguntó Aeris.- Quiero que nos recomiendes a ella y a mi para las pruebas de Don Corneo. 
— ¿Y por qué ibais a querer participar en las pruebas?- Preguntó Madame M abanicándose.- Bueno, vale.
— ¿De verdad?- Pregunté yo sorprendida.-
— Pero no podéis ir vestidas así.- Dijo Madame M
— ¿Eh?- Dijo Aeris.
— Jamás enviaría a Don Corneo dos candidatas con vestidos tan… sencillos.
Aeris me miró fijamente el vestido y luego se lo auto miro a ella para volver a mirar a Madame M.
— Si lo hiciera, cuestionarían mi puesto en el triunvirato.- Seguía explicando Madame M.
— ¿Qué tiene de malo mi vestido?- Me preguntó Aeris.
— Es muy bonito, te pega muy bien Aeris. ¿Y el mío? Pensaba que no era… sencillo.
Cloud desde la pared me miraba fijamente de arriba abajo, analizando mi ropa.
— Yo no lo había visto sencillo para nada.- Me dijo Aeris.- Entonces… ¿qué tenemos que ponernos?
— Yo me encargo de eso. Los vestidos que os voy a conseguir parecerán que os han costado un millón de guiles.- Mencionó Madame M.- Pero me lo tendréis que pagar.
— ¿Y cuánto valen?- Preguntó Cloud.
— Lo que he dicho.- Respondió ella a lo que a mi un poco más y se me cae la cara al suelo.- Pero descuida. Salta a la vista que no podéis permitiros unos vestidos tan caros. Así que escuchad, tengo una idea. Existe un coliseo subterráneo en este distrito. Cloud, espero que te apetezca luchar, porque pienso inscribirte. Si ganas el torneo, convertiré a Sil y a Aeris en unas bellezas sin parangón. 
— ¿Dan algún premio por ganar?- Preguntó Cloud.
— Sí, pero lo cobra quien inscribe al campeón. Bueno, ¿qué me dices?
— Muy bien.- Respondió él.
— ¿Yo también puedo participar?- Pregunté mirando a Madame M.
— Los tres, sin problema. Llévadles esta inscripción. Ya estarán apuntando a los luchadores así que será mejor que os deis prisa.
Salimos del salón de masajes y pusimos rumbo los tres hacia allí. 
— ¿En qué lío nos hemos metido ahora?- Preguntó Aeris.
— En uno gordo. No creo que en este barrio peleen limpio.- Respondió Cloud.
— Estoy segura de que podremos ganar.- Dije yo mirándolos a los dos con una sonrisa.- Estáis con la mejor especialista de materias de Midgar. 
— Me encanta tu confianza, Sil.- Dijo Aeris riendo un poco.- Pero mejor que mantengamos los pies en la tierra por si acaso.
— Si, eso también es verdad.- Me reí un poco.
Nos dirigimos rápidamente al coliseo donde se hacía el torneo de Don Corneo. Fuimos al chico que estaba en la puerta y le dijimos que íbamos a luchar como un equipo. Nos dio paso y nos metimos a un ascensor para llegar a la sala de descanso.
Abajo nos esperaba un encargado que nos paso a una especie de sala de espera. Me senté en una de las sillas y me puse a mirar mis materias y limpiarlas bien.
— ¿Haces esto seguidamente?- Me preguntó Aeris poniéndose a mi lado.
— Sí, me gusta mantenerlas bien limpias y brillantes. Manías mías.- Me reí.- Nos dará suerte para el combate.
— Ahora voy más segura.- Aeris también rio. 
En ese momento nos dieron aviso de que iba a comenzar el torneo y se abrieron las puertas. Habían dos presentadores en el medio de la arena de combate quienes daban los coros de bienvenida.
— ¡Aquí en la ciudad que nunca duerme!- Dijo uno de los presentadores.
— ¡En el paraíso del vicio y del pecado, del dolor y el placer!- Dijo el otro.
— En el lugar donde cualquier deseo puede hacerse realidad por el precio adecuado: ¡el mercado Muro!
— Queridos amantes de la locura y violencia… ¡Os damos la bienvenida!
— ¿Estáis cómodos? Esta noche seréis testigos del espectáculo más sangriento del mercado Muro… qué digo, ¡del mundo!
— Aquí, ¡en el Coliseo de Don Corneo!
En ese momento todo el mundo aplaudió y gritó muy fuerte, parecían eufóricos por el torneo.
— ¡El premio de esta noche es nada más y nada menos que un millón de guiles! Y solo hay una forma de conseguirlo: ¡masacrando al rival!- Seguía diciendo el presentador.
— ¡Dándole una somanta de palos!
— ¡Con saña!
— ¡Sin miramientos!
— ¡Hasta que escupan sangre!
— Solo los luchadores más despiadados…
— Los que aguanten hasta el final…
— ¡Se harán con el premio y la gloria!
— ¡Ha llegado el momento que tanto ansiabais! ¡Bestias sedientas de sangre lucharán para vuestro disfrute!
— ¡Combatientes de lo más variopinto lucharán a muerte para vosotros! 
— ¡Aquí y hoy, en la Copa Corneo!
En ese momento Aeris me miró muy sorprendida de la presentación de los presentadores.
— A vaya sitio hemos ido a parar…
Me reí un poco y le dijimos al encargado que estábamos preparados para el primer combate. En ese momento nos hicieron pasar a los tres hacia la arena.
— Para el primer encuentro, demos la bienvenida a tres luchadores.
— Un chico y dos chicas. ¿Cuál de las dos podrá conquistar al chico?
— ¡Vaya lugar para decidirlo!
— ¡Es su primer torneo! Y será el último si no tienen experiencia, ¿o sí la tienen?
— ¡Un aplauso para Cloud, Sil y Aeris!
Al pasar todo el mundo nos medio abucheaba y nos gritaba cosas obscenas a Aeris y a mi. 
— Ahora sí que estoy cabreada.- Exclamó Aeris.
— Que se note.- Le sonreí
— ¡Su contrincante será uno de los mejores domadores de bestias del mercado Muro!- Seguía presentando uno de los presentadores.
— ¿Acabará el trío amoroso en la panza de sus mascotas?- Decía el otro presentador.
— Contemplad a estos perros del averno: ¡los canes infernales!
En ese momento las grandes puertas que habían al otro lado de la arena se abrieron. De golpe el encargado del otro lado salió corriendo chillando y los chuchos asquerosos del domador de bestia se lo intentaron comer antes de que el domador les llamara de vuelta y el encargado saliera chillando.
—¿¡Luchas con animales!?- Preguntó Aeris.
— ¿Eh?- Dijo el domador.- ¿Sois nuevos? Las reglas no dicen nada de que solo puedan competir personas.
— ¡Esto está que arde señoras y señores!- Decía uno de los presentadores.
— ¿Quién se alzará con la victoria en este duelo de hombres y bestias?- Seguía el otro presentador.
— ¡Esto podría acabarse en un abrir y cerrar de ojos, así que nada de pestañear! Sin más dilación, ¡que empiece el combate de la primera ronda!
Dieron la señal y mientras Aeris se encargaba de uno de los perros y Cloud del otro yo iba directamente al domador de bestias. Solo de usar un par de veces mi materia PIRO+ cayó al suelo de rodillas y los perros terminaron de la peor manera posible. Fue un combate muy fácil.
— ¿¡Quién iba a imaginarse que el combate terminaría así!?- Dijo el presentador
— ¡Qué desenlace tan inesperado, señoras y señores!- Añadió el otro presentador.
— Y los ganadores de este combate son… ¡Cloud, Sil y Aeris!
En ese momento se abrieron las puertas para que pudiéramos volver a la sala de espera hasta nuestro siguiente turno. 
— ¡Primera victoria! ¡A seguir así.- Mencionó Aeris contenta.
— Y ha sido para chuparse los dedos.- Dije yo orgullosa.- Gracias materia piro, te quiero.
Aeris se rio haciendo que yo me riera también y miré a Cloud quien se apoyó en la pared, pensativo.
— ¿Qué te pasa?- Le pregunté.
— Las reglas no tienen ni pies ni cabeza.- Dijo Cloud.
— Ya…- Respondió Aeris.- ¿Quizá el siguiente combate sea más justo?
— No os esperéis demasiado.- Añadí yo.- Es posible que cada combate sea más injusto que el anterior.
Nos sentamos en una de las mesas y esperamos tranquilamente hasta que un mensaje de megafonía anunciaba que nuestro siguiente combate iba a empezar en breves. Nos dirigimos rápidamente a las puertas y estas se nos abrieron, dando paso a la arena otra vez.
— Continuamos con el segundo encuentro de la semifinal…- Dijo uno de los presentadores.- Recién salidos de una cita con la muerte, os presento… ¡al trío amoroso afortunado!
— ¿Por qué nos llaman así?- Pregunté sin entender nada.
— Su suerte es nuestra desgracia.- Dijo el otro presentador.- ¡Otro aplauso para Cloud, Sil y Aeris! 
Un montón de gente seguía quejándose y diciendo mierda desde las gradas. Los abucheos nos perseguían.
— ¡Sus contrincantes son una panda de ladrones, buitres del vertedero, los asesinos más viles de Midgar! Sabandijas profesionales, ¡lo peor de lo peor!
— ¡Señoras y señores, cuidado con las carteras, que estos tienen las manos muy largas!
— Os presento la escoria de Midgar: ¡la pandilla del Chungo!
En ese momento aparecieron los tres maleantes que nos habíamos encontrado en la autopista derrumbada antes Cloud y yo.
— ¡Flipa con el humo! Tapaos la boca. ¿To bien?- Dijo El Chungo.
— Eh, ¡son los pavos de antes!.- Dijo El Broncas señalándonos.
— ¡Buah, chaval! La venganza es un plato que se sirve caliente.- Mencionó El Chungo.- Espero que tengáis ganas de postre, porque vamos a repartir tortas.
— ¿Encima vas a invitarles al postre?- Le preguntó El Pardi a El Chungo.
— ¡Es un decir, melón! ¡Estás tonto!
De golpe la puerta se volvió a abrir y aparecieron más detrás de ellos, siendo un grupo bastante grande de maleantes.
— ¿Son más?- Preguntó Aeris.
— ¿De dónde han salido estos amigotes tan impresentables?- Dijo el presentador.- Se ve que la pandilla del Chungo tiene un total de ocho miembros.
— Bueno, pues van a volver corriendo por donde han venido.- Añadí yo.
— Pero eso no vale.- Dijo Aeris muy indignada.
— Ow, la única regla que vale es que no hay reglas.- Mencionó El Chungo.- Si a Don Corneo le parece bien, te aguantas.
En ese momento en la pantalla apareció un dibujito de Don Corneo dándoles el OK.
— Don Corneo ha dado su aprobación.- Dijo uno de los presentadores.
— ¡Esto es absurdo!- Mencionó Aeris.
— ¡Esto va a ser una carnicería!- Dijo el presentador.- Querido público, no miréis para otro lado, ¡no vaya a ser que os perdáis lo mejor!
— ¡Que comience el segundo combate de las semifinales de la Copa Corneo!
En ese momento inició la batalla. Ellos iban con armas como hachas así que decidí usar la materia de protección en los tres para evitar ser aniquilados vivos. Empezamos a luchar juntos, aunque ocho contra tres no era demasiado justo, eran bastante malos peleando y al final nos los cargamos en un santiamén. 
— Eran tres contra… no sé cuántos exactamente, pero muchos. Aun así, nuestros ganadores son…- Dijo el presentador.- De nuevo, ¡Cloud, Sil y Aeris!
Se nos abrieron las puertas y entramos rápidamente a la sala de descanso otra vez. Me senté y cerré los ojos descansándolos un poco.
— ¡Ahora a por la gran final!- Exclamó Aeris.- Aunque… no se os ve muy contentos.
— ¿Yo? Ah.- Dije.- Solo estoy algo cansada, pero voy bien. Lo estamos haciendo genial.
—  ¿Y tú Cloud?- Le preguntó Aeris.
— Solo estoy pensando en el siguiente combate.
— Bueno, no pienses demasiado. Si hemos llegado hasta aquí podemos con lo que se nos venga.- Respondí sacando una materia y lanzándola al aire y agarrándola sucesivamente.
Nos quedamos allí por un rato más hasta que volvimos a escuchar la megafonía diciendo nuestros nombres para que fuéramos hacia la puerta. Las puertas se abrieron enfrentándonos a nuestro combate final. 
— Señoras y señores. ¡El espectáculo está llegando a su fin!- Dijo el presentador.
— Esta Copa Corneo ha estado repleta de giros inesperados y mucho tomate, ¡y ahora está a un combate del desenlace!- Añadió el otro presentador.- Nosotros tampoco queremos que acabe. ¡Pero ya se dice que lo bueno, si breve, dos veces bueno! ¡Por eso, vamos a despedirnos por todo lo alto y a voz en grito! ¡Que nos oigan hasta en la plataformaaaaaa!
— ¡Tenemos aquí el trío amoroso que nos han dejado con la boca abierta combate tras combate. Super unidos por su insaciable sed de sangre. Los campeones de Madame M: ¡Cloud, Sil y Aeris!
Cloud suspiró y lo miré fijamente. Se notaba que se empezaba a cansar también de los comentarios.
— ¡Vamos! ¡Más alto! ¡No os oigo animar! ¡Desgañitaos!- Dijo el presentador saltando y animando con los brazos.- ¡Se enfrentarán a los ganadores por quinta vez consecutiva de la Copa Corneo! ¡Dos máquinas de matar que han descuartizado a cientos de contrincantes! 
— ¡Y desmembrado a otros cuantos!
— ¡Un dúo duro de pelar que corta por lo sano y por lo menos sano! 
— Los verdugos mecánicos… Los campeones de Sam… ¡Sierritas y Balitas!
— ¡Aquí llegan!
Se abrieron las puertas y aparecieron dos máquinas aniquiladoras de Shinra.
— ¿Son robots?- Preguntó Aeris.
— Más bien armas de Shinra.- Respondió Cloud
— Más bien tramposos.- Mencionó ella.
— Pan comido.- Dije yo preparándome para la lucha.
— ¿Quién se llevará el millón de guiles? ¡Preparaos para un combate que hará historia!- Dijo el presentador.- ¡Que empiece el combate final de la Copa Corneo!
En ese momento llegó el momento de empezar el combate. Tenía en mente que este combate iba a ser bastante sencillo porque el electro afecta muy negativamente a cualquier máquina y se me daba bastante bien usarlo. Estuve en lo correcto porque tanto el aniquilador como el triturador duraron poquísimo en combate. Cloud, Aeris y yo nos compenetramos bien para romper los dos brazos de la máquina y luego escacharrarlas. 
— Esto nunca a… ¡No me lo puedo creer!- Dijo uno de los presentadores.
— Los ganadores de la Copa Corneo, el trío amoroso asesino… ¡Cloud, Sil y Aeris!- Dijo el otro presentador.
Salimos de la arena y me senté de inmediato. Estábamos los tres bastante agotados pero ya estaba todo cumplido por lo que parecía.
— Ahora ya podemos centrarnos en salvar a Tifa.- Dijo Aeris.
— ¡Por fin!- Exclamé.- Espero que esté bien… 
— Volvamos al salón de Madame M para que os podáis cambiar… Luego adonde Corneo.- Dijo Cloud.
— ¡Vamos!- Dijo Aeris.
En ese momento entró Madame M a la sala de descanso con una cara algo enfadada.
— Lo siento, pero tengo una mala noticia.- Exclamó ella.- Aún os queda un combate más.
— ¿En serio? ¿Por qué?- Pregunté sin entender absolutamente nada.
— Habéis cautivado al público y han apostado fuerte. No os hacéis una idea de la suma de las apuestas. Don Corneo le va a sacar toda la tajada que pueda.- Explicó Madame M
— ¿Entonces?- Preguntó Cloud.
— Tendréis que derrotar al luchador que elija Don Corneo para que os declaren campeones de la copa.
— ¡Oye ese no era el trato!- Mencionó Aeris indignada.
— ¿¡Te crees que no lo sé!?- Exclamó con una fuerte voz Madame M.- ¡Es un cerdo avaricioso! ¡Un baboso de mierda! ¡La madre que…! 
En ese momento ella suspiró intentando calmarse.
— Pero es lo que hay. Es Don Corneo quien dicta las reglas.- Siguió Madame M.- De todas formas, si ganáis este combate no le quedará más remedio que aceptar vuestra victoria. El público se asegurará de ello.
— ¿Este será el último combate?- Preguntó Cloud no demasiado convencido.
— Eso espero.- Respondió Madame M.
— Bueno, esperemos que sea igual de fáciles que los anteriores.- Agregué.
En ese momento nos volvieron a llamar por megafonía. Esperaba sinceramente que fuera la última vez, estaba bastante cansada. En ese momento se abrieron las puertas y entramos a la arena una vez más.
— La Copa Corneo de esta noche ha sido histórica.- Dijo uno de los presentadores.
— La despedida de este torneo nos ha dolido tanto como a vosotros, querido público.- Dijo el otro presentador.
— Pero nadie está tan apenado como el propio Don Corneo… ¡por eso ha decidido celebrar un combate más!
La gente chillaba muy fuerte, había un ruido increíble en toda la arena. Todo el mundo parecía emocionado.
— En este encuentro participará el trío amoroso del momento, aquellos que han arrasado esta noche. ¡Cloud, Sil y Aeris!
— ¡Cloud! ¡Cloud! ¡Salúdanos!- Chillaba una persona del público.
— ¡Eres el mejor, Cloud!- Decían otras chicas del público saltando para poder llamar su atención. 
— ¡Aeris! Te amo, ¡cásate conmigo!- Decía otro tío del público.
— ¡Sil! ¡Yo pago el hotel! ¡Vente conmigo esta noche!- Decía otro.
— Su contrincante llega directa de las profundidades del coliseo.- Dijo un presentador.
— ¡Se trata de una pesadilla hecha realidad, una bestia liberada de su prisión para el deleite del público!- Dijo el otro presentador.- ¡El arma secreta de Don Corneo! Un aplauso para… ¡la casa infernal!
En ese momento en vez de abrirse las puertas, se abrió el suelo saliendo literalmente una casa de este. 
— Pero… si es una casa.- Dijo Aeris
En ese momento la casa se movió y empezó a echar llamas de sus ventanas.
— ¡No es una casa cualquiera!- Dijo Cloud poniéndose en posición de combate.
— ¡A un lado, la residencia del mal!- Dijo el presentador.- ¡Al otro, el trío amoroso más rompedor de Midgar! ¿¡Dónde se ha visto un duelo más épico que este!? En ningún sitio, ya os lo digo yo. Lo que vais a presenciar hoy y aquí ¡es el nacimiento de una leyenda! 
— No os perdáis ni un segundo de la acción, señoras y señores.- Exclamó el otro presentador. 
— El combate final finalísimo de la Copa… ¡comienza ahora!
Empezamos rápidamente el combate. La casa se especializaba en bombardear y en embestir, o por lo menos eso parecía al principio. Parecía que no había manera de fatigarla. Para ser una casa se movía demasiado rápido y como te pillaba te metía dentro para sacudirte hasta dejarte tonto. En una de estas pilló a Cloud y lo metió dentro, parecía que lo estaba explotando dentro de las cuatro paredes. Le curé con mi materia y seguimos el combate hasta que de golpe la casa se paró.
En ese momento mi instinto fue correr rápidamente hacia ella para cargárnosla pero Cloud me agarró por la cintura parándome.
— ¡Quieta ahí!- Me dijo.
En ese momento la casa empezó a temblar y de ella salieron dos brazos, cuatro piernas y una cabeza enorme.
— ¡Cuidado!- Exclamó Aeris al ver que la casa iba directamente en dirección donde estábamos Cloud y yo.
Cloud se puso delante mío y paró la casa de un espadazo para que no pudiera darnos. Rápidamente intenté usar algunas de mis materias pero tenían muy poco efecto, parecía que se había puesto algún tipo de escudo. 
— Mierda, hay que buscarle un punto débil.- Exclamé yo.
En ese momento me fije en que los colores de sus paredes cambiaban y sus colores eran parecidos a los colores elementales así que cuando se le pusieron las paredes amarillas decidí usar AERO y la casa entró en fatiga.
— ¡BINGO!- Dije contenta.
Después de averiguar su punto débil parecía que todo se había vuelto más fácil, su vida bajaba considerablemente rápido. Llegó un punto que hasta la casa volaba para intentar aplastarnos pero por suerte éramos más rápidos. En una de estas la casa se escacharró así que Cloud aprovechó la oportunidad y saltó sobre su cabeza clavándole su espada haciendo que la casa explotara y se quedará en ruinas. 
En ese momento todo el mundo parecía no creerlo y yo miré a Cloud de manera inconsciente.
— ¡Lo hemos hecho!- Exclamé.
Cloud asintió y se acercó a mí poniendo un brazo sobre mi hombro y acercándome a él haciendo que me sonrojara un poco. Era como… un medio abrazo de su parte. Cogí una materia y la lancé fuerte hacia el aire como símbolo de victoria y la recogí cuando volvió hacia mi. Aeris vino rápidamente hacia nosotros dos y chocamos los cinco.
— Los ganadores…- Dijo uno de los presentadores.
— Los campeones…- Dijo el otro presentador.
— Son ¡Cloud, Sil y Aeris!- Dijeron los dos al unisono. 
En ese momento salimos de la arena y también del coliseo ya que teníamos que ir a ver a Madame M al salón de masajes para que nos cambiará a Aeris y a mi. Con tanta euforia se me había medio pasado el cansancio. En un abrir y cerrar de ojos llegamos al salón de masajes.
— Habéis venido.- Nos dijo Madame M, recibiéndonos.- Ya tengo todo lo que necesitamos… Por cierto, Cloud. ¿Tú eres el mercenario del que hablan? Me han dicho un pajarito que has ayudado mucho a la gente del sector 5. Me parece muy loable por tu parte.
— No lo hice solo.- Dijo Cloud mirándome. 
— Bueno, voy a vestir a Sil y a Aeris con los modelitos más impresionantes que hayas visto. Te vas a quedar boquiabierto. Y… Ahora que he dejado las cosas claras. ¿Estáis listas?
— Sí.- Dije yo.- Acabemos con esto.
— Muy bien, manos a la obra. La belleza lleva su tiempo y esfuerzo, más de lo que te imaginas.- Dijo Madame M mirando a Cloud.- Mientras tanto, a ver, a ver… Seguro que hay cosas que solo te atreves a hacer sin tus amigas. Aprovecha que estás solo para pasártelo en grande. Tengo la sensación de que ya le estás cogiendo gustillo a la zona. Aunque como eres nuevo por aquí, quizá no sepas bien cómo aprovechar el tiempo y divertirte. Por eso decidí hablar con Sam, él se encargará de guiarte. 
— Yo no te he pedido que me busques una guía.- Dijo Cloud algo mosqueado.
— Pero hay muchas cosas que desconoces.- Le dijo Madame M.- Es el momento perfecto para que conozcas mundo y madures un poco. No se hable más, Sil, Aeris, venid conmigo.
— ¡Ay! ¡Qué ganas de ver el vestido!- Exclamó Aeris.
— Espero que sea de mi rollo… Si no, no me lo pongo.- Dije yo.
— Los vestidos son importantes, por supuesto. Ya he buscado uno que os pegara a cada una. Pero también hay que maquillaros bien y arreglar esos peinados. Voy a sudar tinta.
— Bueno, hasta luego Cloud.- Dijo Aeris.
Yo solo le sonreí y Aeris y yo nos metimos para dentro. 
— Por cierto…- Dijo Madame M antes de que Cloud se fuera.- Como cotillees, te arranco los ojos. 
Cloud suspiró y salió del local. Madame M empezó a hacer un trabajo espectacular con nosotras. A Aeris le puso un vestido rojo hasta los pies que le quedaba espectacular y además le hizo un peinado precioso que parecía sacado de un cuento de hadas. Luego Madame M se puso a trabajar conmigo poniéndome un vestido tipo lolita de color negro y rojo que definitivamente me favorecía un montón y me peino poniéndome un tocado bonito en el pelo a juego con el vestido. Luego nos maquilló a las dos poniéndonos bien bonitas y terminamos con un poco de perfume.
— Así podríais conquistar a cualquier chico que queráis.- Nos dijo Madame M mirándonos fijamente.
¿Cualquier chico que quisiera?
— Estás preciosa Aeris.- Le dije dándole una vuelta para ver todo su look completo.
— ¡Tu si que estas bonita, Sil! Eres una monada.- Dijo Aeris dándome una vuelta a mi.
— Por cierto.- Nos dijo Madame M.- Hay alguien que quiere conocer a Cloud, podríamos decir que le ha llamado la atención. Si no queréis entrar solo vosotras dos a la mansión de Don Corneo será mejor que llevéis a Cloud ante él, quizás puede darle también una carta de recomendación.
— ¿Hablas de Andrea Rhoeda? ¿El director de Honeybee Inn?- Pregunté.
— Exactamente.- Contestó Madame M.- Y creo que él podría tener una idea para conseguir que Don Corneo no note nada. Será mejor que una de vosotras vaya a verle al Honeybee Inn y la otra avisé a Cloud.
— Entonces, yo voy al Honeybee Inn.- Dijo Aeris mirándome.- Tu encárgate de Cloud.
— A las ordenes.- Dije con una sonrisa.
En ese momento salimos las dos del salón de masajes y una fue dirección HoneyBee Inn. Yo debía buscar a Cloud pero de golpe apareció Johnny en mi camino.
— No me digas na, ¿vas a buscar a Cloud verdad?- Me dijo mirándome fijamente.
— Sí, ¿Cómo lo sabes?- Le pregunté.
— Yo se donde esta, te llevó con él.
Johnny me llevó hasta el puente de la mansión de Don Corneo, justo antes de llegar un montón de gente se nos apelotono mirando mi vestido. No pude evitar ponerme algo roja de la situación, no estaba tan acostumbrada a recibir tanta atención. 
— Eh, ¡largo! Nada de mirar. Venga, fuera, ¡vamos!- Johnny iba haciendo paso entre la gente y puso una alfombra roja corta entre donde estaba Cloud y yo.
Me acerqué a él lentamente, algo sonrojada, con las manos al frente y le miré a los ojos. Él me miraba con la boca medio abierta, vi como se le dilataban las pupilas, mi corazón empezó a ir muy muy rápido, pensaba que iba a salir de mi pecho.
— Ese vestido…- Me dijo cuando estaba cerca de él.- Estas preciosa.
Me dio la mano y me acercó a él. Lo miré a los ojos, sentía que me iba a morir de lo rápido que se movía mi corazón. 
— Gracias…- Le dije con la voz algo baja.
Él me miró fijamente a los ojos, agarrándome fuerte la mano. El tiempo se había parado. Me estaba poniendo tan roja que desvié la mirada y me aparté un poco.
— Perdona.- Me dijo él.
— N-No, no te preocupes…- Le respondí.
— Me da que este asunto es más peligroso de lo que pensábamos.- Mencionó Cloud mirándome.- Ni siquiera sabemos qué os van a pedir en esas pruebas de selección. Ni en sueños voy a dejar que las dos entréis solas por vuestra cuenta.
— Ah, si, tenemos un plan para eso. Pero primero tienes que acompañarme a un sitio.- Le respondí. 
— ¿Qué plan?- Me preguntó.
— Según Madame M, has llamado la atención de alguien divino y quiere conocerte en persona.
— ¿Cómo?
— Tú sígueme.
Le llevé derecho al HoneyBee Inn y me paré en la puerta, mirándolo.
— Vamos a ver a Andreas Rhodea, del HoneyBee Inn, y a convencerlo para que te entregue su carta de recomendación.- Le dije.- No querías que fuéramos solas, ¿no? Si nos ayuda Andreas, podrás venir con nosotras. Va venga, entremos, Aeris debe estar esperando aquí también. 
Le agarré del brazo y lo llevé a la fuerza hacia dentro del HoneyBee Inn donde estaba el recepcionista esperándolo.
— Bienvenido al HoneyBee Inn, el paraíso del ocio y la diversión.- Nos dijo el recepcionista.
— Hemos venido a ver a Andreas Rhodea.- Dijo Cloud.
— Supongo que usted es el señor Cloud. Le está esperando.
— ¿El "señor" Cloud?- Preguntó Cloud a lo que yo reí un poco. 
— Me ha pedido que le haga pasar cuanto antes. Por favor, pase al escenario del fondo.
— ¿Qué escenario?- Dijo Cloud.
— El que está al fondo, señor. Cruce esa puerta y siga todo recto.
Cloud y yo nos dirigimos a la puerta del fondo donde unas abejitas lo esperaban y le hicieron pasar rápidamente, antes que a mi. En ese momento Aeris vino hacia mi y me sonrió.
— ¿Le has convencido?- Me preguntó.
— Creo que aun no entiende que va a hacer allí.- Reí un poco.- ¿Entramos?
— Sí.
Entramos a la sala de la función donde en el escenario bailaban las abejitas y el señor Andrea, justamente estaban sacando a Cloud al escenario. Aeris y yo nos sentamos juntas en un sofá mirando toda la escena.
— Bienvenido al Honeybee Inn, Cloud.- Le dijo el señor Andrea acercándose a él.- Quieres que te recomiende, ¿no es así? 
En ese momento el señor Andrea le puso un dedo en los labios para evitar que dijera nada. 
— Te entiendo.- Dijo Andrea.- Pero para ganarte mi aprobación, vas a tener que conquistarme con un baile. 
Andrea se puso a bailar con las demás abejitas y en ese momento Cloud se intentó dar la vuelta siendo interceptado por varias abejitas y siendo arrastrado a la fuerza al medio del escenario. En ese momento se percató que Aeris y yo estábamos sentadas allí y le animamos haciéndole señas de ánimo con los brazos. 
Cloud suspiró y se quedó con Andrea en el escenario.
— ¿Crees que puedes seguirme el ritmo?- Le preguntó Andrea.
En ese momento empezó el espectáculo de verdad donde Andrea y Cloud se pusieron a bailar juntos, haciendo una tremenda obra. No pude evitar soltar alguna que otra carcajada mientras bailaban, ver así a Cloud era tan divertido.
— ¡Eso Cloud! ¡Demuestra quién manda!- Dije yo animándolo desde el público.
El siguió bailando dándolo todo, se le daba extrañamente bien bailar. Estaba siendo todo un espectáculo. Parecía que Andrea y Cloud estaban hasta sincronizados con los pasos.
— ¡Que buenos pasos!- Dije yo desde el público aplaudiendo.
— ¡Baila super bien, Cloud!- Exclamó Aeris aplaudiendo también.
Andrea se puso delante de Cloud y le hizo un corazón con las manos.
— Mi abejita reina… Me has conquistado. Sí. Te voy a convertir en una belleza sin igual. No hay tiempo que perder. ¡Manos a la obra!
En ese momento las abejitas pusieron una silla en el centro del escenario y sentaron a Cloud. Taparon la escena con unas plumas y cuando desviaron las plumas Cloud estaba cambiado totalmente. Le pusieron un vestido con corsé azul con una falda larga lila. Le habían maquillado e incluso le habían puesto el mismo tipo de trenzas que yo llevaba.
Estaba guapísima.
Aeris y yo nos quedamos boquiabiertas mirando fijamente su tremendo vestido y lo bonito que le quedaba. 
En ese momento Andrea fue hacia él le dio la mano e hicieron un par de vueltas bailando más y para rematar los dos quedaron tan cerca que parecía que se iban a comer la boca en ese instante. No pude soltar un pequeño chillido de emoción al ver la escena.
— ¡Ideal!- Dijo Andrea.- La belleza de verdad es una representación del corazón. No cede ante la vergüenza y no se rige por los conceptos de género. No tengas miedo, Cloud. 
Se dieron la mano e hicieron una reverencia indicando que el show había terminado. Aeris y yo salimos primero del HoneyBee Inn y le esperamos fuera. En una de estas lo vimos salir sin decir absolutamente ni una palabra, nos acercamos rápidamente a él. 
— Hala Cloud. ¡Vaya espectáculo!- Le dijo Aeris.
— Ya ves, no sabia que bailabas tan bien.- Le dije yo.
Cloud siguió andando ignorándonos por completo. 
— ¿Cloud?- Le pregunté. 
— Eeeo, ¿Cloud? ¿Hola?- Le dijo Aeris.
— ¡Te estamos hablando Cloud!-Le dije con un tono mas serio.
— Callaros.- Nos dijo de golpe.- No digáis nada más.
— ¿Nada de nada?- Preguntó Aeris. 
— No.- Remarcó él.
— ¡Pero si estás divina, Cloud!- Exclamé sin pensar demasiado. 
En ese momento Cloud suspiro y nos dirigimos los tres directos a la mansión de Don Corneo con nuestras tres cartas de recomendación para las pruebas. En la puerta estaban los tres tipos de antes, incluido Leslie.
— No puede ser…- Dijo Leslie.
— Aquí tienes: las recomendaciones de Andreas Rhodea y Madame M. Con eso vale, ¿no es cierto?- Preguntó Aeris.
— ¿Vais en serio?- Preguntó Leslie
— ¿Hay algún problema?- Pregunté yo mirándolo fijamente. 
— Vosotras sabréis…
En ese momento nos abrieron las puertas y entramos a la mansión de Don Corneo de verdad. Allí nos esperaban varios lacayos de Don Corneo.
— ¿Habéis venido a las pruebas?- Preguntó el lacayo.- Por las escaleras, última puerta a la izquierda. Y nada de husmear. 
Subimos las escaleras mientras escuchábamos como los lacayos hablaban de manera muy asquerosa sobre nosotras. Entramos a la sala que nos habían dicho y era básicamente una sala de trastos. De golpe escuchamos un fuerte ruido y habían sido las puertas que las habían cerrado de golpe.
— Esto no pinta bien.- Dije mirando la situación. 
— ¿Qué es ese olor dulce tan raro?- Mencionó Aeris.- ¿Y por qué me estoy mareando?
— Es gas.- Dijo Cloud de golpe.- Vámonos. 
Cloud intentó abrir la puerta pero sin éxito. En unos segundos nos quedamos los tres en el suelo, super mareados, sin poder casi movernos. Se abrieron las puertas y entraron los lacayos.
— ¿Os llevamos a la sala de espera para que descanséis un poco?- Dijo uno.
— Bueno, tirando que es gerundio.- Dijo otro.
— ¿Adónde… nos… lleváis?- Preguntó Aeris con la poca voz que podía.
— Arriba monada.- Dijo un lacayo intentando levantar a Cloud el cual lo intentó apartar empujándolo un poco haciendo que el lacayo intentará volver a levantarlo bruscamente.
— ¡Eh, trátala bien, gilipollas!- Dijo su compañero.
— ¿Qué haces? ¿Quieres bronca o que?- Le respondió el lacayo.
— Son las chicas de Don Corneo. Como les dejemos alguna marca, rodarán cabezas. 
— Ya, lo sé.
— Esta vez sí que están de rechupete las cuatro, ¿no te parece?
Se rieron y aprovecharon nuestro mareo y debilidad para llevarnos a otro cuarto. En ese momento noté una mano que me movía bruscamente.
— ¿¡Sil!? ¿Eres tú?
Abrí los ojos y era Tifa que me miraba fijamente.
— ¿Tifa? ¡Ai! Menos mal que estás bien.- Me tiré a ella abrazándola y ella me correspondió.- Pensé que te habría pasado algo malo…
En ese momento se despertó Cloud y miró fijamente a Tifa.
— ¿¡Tifa!?- Dijo Cloud.
— ¿Si…?- Preguntó ella sin entender nada.
— ¿Estás bien?- Le preguntó Cloud.
— Si… Espera… Un momento…  ¿¡Cloud!? ¿Eres tú? ¡Hala, qué de maquillaje! ¡Y con vestido!
— Ya sé que estoy divina. A otra cosa.- Respondió Cloud.
No pude evitar reír un poco por su contestación. En ese momento Aeris volvió a la consciencia y fui rápidamente hacia ella para ayudarla.
—  ¿Estás bien?- Le pregunté.
— Sí. Un poco mareada, pero no es para tanto.- Me respondió Aeris. En ese momento se percató de Tifa y fue rápidamente hacia ella.- Hola, Tifa. ¿Qué tal?
— Bien… 
— Ah, perdona. Soy Aeris, una amiga de Sil y de Cloud. Estábamos preocupados y decidimos venir a echarte una mano.- Dijo Aeris con una sonrisa.
— Eh… ¿Gracias?- Dijo Tifa aun sin entender nada.
— Ya hablaréis luego. Tenemos que irnos.- Dijo Cloud mirando la habitación.
— ¿Qué?- Preguntó Tifa.
— Ya mismo.- Exclamó Cloud.
— ¡No! No pienso irme sin lo que he venido a buscar.- Dijo Tifa.
— ¿Eh? ¿Y que es?- Le pregunté. 
— Pues… Cuando volvimos a la barriada, aparecieron unos tipos y empezaron a hacer un montón de preguntas. Así que me puse a investigar…
— ¿Tiene que ver con Don Corneo?- Le pregunté.
— Exacto. Estaban preguntando por Avalancha. Pero… no sabía por qué. Así que decidí venir y preguntarle en persona. 
— ¿En serio?- Exclamó Cloud. 
— Pensé que si nos quedábamos a solas en su habitación podríamos hablar cara a cara.- Explicó Tifa.- Pero luego me enteré de que en las pruebas compiten tres o cuatro chicas. Y si no lograba que me eligiera a mí, todo habría sido en vano. 
— ¡Entonces no tienes de qué preocuparte!- Dijo Aeris mirándola.- Porque aquí tienes a las otras tres candidatas. ¿A que si?
— Si…- Respondió Cloud sin demasiada motivación.
— Las cuatro unidas jamás seremos vencidas.- Dije riendo un poco.
— Eso espero…- Dijo Tifa 
— Sil, Cloud, tu y yo.- Dijo Aeris con una sonrisa.- Da igual a quién elija, ¿no? 
— No se, Aeris.- Dijo Tifa mirándola.- Me da cosa involucrarte en todo esto… sobre todo a ti.
— Déjala. Siempre hace lo que quiere.- Añadió Cloud.
— Es muy cabezona.- Añadí yo.
— ¡Ay, que bien! Ya empezáis a conocerme, por fin.- Mencionó ella con una sonrisa.
Cloud suspiró y nos pusimos a esperar a que vinieran a abrirnos a pasar a la siguiente fase.
— Salid por la puerta de la izquierda y subid las escaleras.- Escuchamos la voz de un lacayo.- Venga, chicas, al tajo.
Salimos por la puerta las cuatro en cuanto anunciaron el mensaje.
— Venga, chicas, vamos.- Dijo Cloud a lo que reí un poco.
— ¿Tantas ganas tienes?- Le preguntó Tifa a lo que él no respondió.
— Te estas metiendo en el papel, ¿eh?- Le dije yo.
— Sí, sí…
En ese momento llegamos a otra sala donde nos recibieron los presentadores de la Copa Corneo. Nos pusimos en fila y el presentador nos miró fijamente.
— Eh, vuestras caras me suenan. ¿Nos conocemos de algo?- Nos preguntó el presentador.
Aeris negó con la cabeza sin decir una palabra mirando fijamente al presentador. 
— Bah, da igual.- Dijo el presentador poniéndose una mano en la nuca.- Cojonudo. ¿Estáis preparadas? Venga, al tema. ¡Os presento al galán más carismático del mercado Muro! ¡El único, el inimitable… Don Corneo!
En ese momento salió de detrás de la pared un gordito bajito con poquito pelo rubio en la cabeza y una ropa horterísima. 
—¡Qué guapas! ¡Qué bien!- Dijo casi que babeando viniendo hacia donde estábamos.- ¿Con cuál de vosotras voy a intimar? 
Se acercó de golpe a Aeris y la miró literalmente de arriba abajo.
— ¿Me quedo contigo?- De golpe pasó a Tifa y le miró fijamente las tetas.- ¿O contigo?
Luego pasó a Cloud siendo un momento tenso porque si lo descubrían todo a la mierda. Le agarró y le tocó el brazo asintiendo y luego fue directamente hacia mi y se quedó con la baba fuera de la boca. Me agarró la mano y me dio una vuelta que casi me hace vomitar, pero tenía que fingir.
— ¡Síiiii! ¡Ya lo sé! ¡Decidido!- Dijo Don Corneo.- La elegida de esta noche es… la muñequita de rojo.
Suspiré y rodé los ojos, pero todo sea por el plan de Tifa. 
— Uhhh… Así me gustan más, con un poquito de actitud.- Dijo Don Corneo agarrándome de la mano. Por instinto puse un poco de resistencia.- ¿Te gusta hacerte la dura? Me gusta.. no lo sabes tu bien.. 
Cloud me miraba fijamente mientras Don Corneo me sujetaba, se notaba que tenía ganas de hacer pedazos a este gilipollas, igual que las tenía yo.
— Quedaos con las sobras.- Dijo Don Corneo a sus lacayos. 
Don Corneo me llevó a su habitación y me senté en el borde de la cama con las manos en la falda sin decir ni una palabra. Lo tenía atrás mío y lo escuchaba babear, me estaba dando mucho asco.
— Que muñequita mas bonita. Aunque vas vestida como una normalmente las de plástico no tienen tantas… ya sabes, tetas como tu.- Suspiré al escuchar esa mierda que había soltado por esa sucia boca.- Venga, deja la timidez y ven con papi. Solo estamos tú y yo…- Se acercó aún más a mi.- ¡Eres más mona de lo que pensaba!
— ¿Puedes parar de decir esa mierda?- Le pregunté con mi tono más calmado posible.
— Vaya, la muñequita es peleona. Cómo me pone…- Me respondió Don Corneo haciendo una foto con una cámara con flash.
— ¿Qué ha sido eso?- Le pregunté.
— No te preocupes, muñequita. Tan solo es una fotito para recordar este fogoso encuentro.- Dijo Don Corneo.- Y para que no se te ocurra ninguna tontería, como negarte… 
Me hizo otra foto pero más de cerca. 
— Dios, que asco.
— ¡UH! Sigue así, que me encanta esta personalidad que tienes…- Me dijo Don Corneo. 
— Te lo digo en serio, das puto asco.- Exclamé levantándome de la cama.- Lo único que parece que tienes es dinero porque lo demás…
— ¡Oye! ¿Quién cojones te crees como para hablarme así? ¡Que alguno entre y le dé una lección a esta zorra maleducada.- Exclamó Don Corneo.
En ese momento entraron Tifa, Aeris y Cloud a la habitación y Cloud me agarró de la cintura atrayéndome a él.
— ¿Estás bien?- Me preguntó sin poder evitar ponerme un poco roja.- ¿Te ha hecho algo?
— No, tranquilo, estoy bien.- Respondí yo.
— Lo siento pero…- Dijo Tifa mirando a Don Corneo.- La lección se la hemos dado nosotras a tus hombres.
— ¿Pero que…?- Preguntó Don Corneo sin entender nada.
— ¡Sil! ¡Toma tu ropa!- Dijo Aeris dándomela. 
Me puse detrás de un biombo que había y me cambié rápidamente de ropas volviendo a mis trajes normales.
— ¿Y en qué momento ha entrado un chico aquí?- Exclamó Don Corneo mirando a Cloud.- ¿A que habéis venido vosotros cuatro?
— Las preguntas las hacemos nosotros.- Dijo Tifa poniéndose las manos en la cadera.- Por ejemplo: ¿por qué estaban tus hombres preguntando por AVALANCHA en el sector 7?
— ¿Eh? No sé de qué estás hablando.- Respondió Don Corneo poniéndose bien. 
— No te hagas el tonto.- Tifa se cruzó de brazos y se acercó a él.- Segunda oportunidad. ¿Por qué estaban tus hombres preguntando por AVALANCHA en el sector 7? Desembucha o… 
— Te los corto.- Dijo Cloud apunto de sacar su espada haciendo que Don Corneo se asustara. 
— ¡Vale, vale! Hablaré, hablaré. Me pagaron para encontrar a un tipo con una ametralladora en vez de brazo.- Don Corneo hablaba de Barret.
— ¿Quién te pago?- Preguntó Tifa.
— ¡No te lo puedo decir! ¡Me darían de palos como a un chucho!- Respondió él. 
— Más te vale decírmelo, porque si no… 
— Te los quemo.- Dije yo sacando mi materia piro del bolsillo. 
— Y luego yo te los arranco.- Añadió Aeris haciendo que temblara de miedo.
— ¡Fue el director de seguridad pública de Shinra! ¡Heidegger!- Exclamó Don Corneo
— ¿¡Shinra!? ¿Y qué se traen entre manos?- Preguntó Tifa. 
— Hay cosas que es mejor no decir, ¿sabes?- Dijo él.
— Es mejor que sigas hablando… De verdad te lo digo.- Le dije mirándolo fijamente. 
— Te los aplastaré.- Dijo Tifa muy decidida. 
— Vale, os lo digo. No puedo decir que no a chicas tan guapas.- Exclamó Don Corneo.- Como AVALANCHA ha volado dos reactores, Shinra quiere aplastarlos a ellos y su base de operaciones. Y digo "aplastar", literalmente. Van a derribar el pilar, lo van a volar por completo.
— ¿El pilar?- Exclamó Tifa. 
— ¿Estás sorda?- Preguntó de mala manera Don Corneo.- Sin el pilar, la plataforma se derrumbará. Igual que pasó en el sector 6, seguro que habréis visto los escombros. Pues dentro de nada, ¡así va a quedar el sector 7! 
— No me lo puedo creer…- Dijo Tifa cambiándole la voz a muy preocupada.
— Tifa, hay que irnos.- Le dije rápidamente.
Los cuatro intentamos correr hacia la puerta cuando la voz de Don Corneo nos freno.
— Antes de que os vayáis… 
— Cállate.- Dijo Cloud.
— Por favor, seré breve.- Dijo Don Corneo.- Como sabéis los malos solo revelan sus planes llegado cierto momento. ¿Sabéis cuándo es?
— Cuando se creen que ya han ganado.- Respondí yo.- ¿a que sí?
— Señoras y señores, ¡tenemos una ganadora!- Dijo Don Corneo.- Habéis ganado un viaje con todos los gastos pagados… ¡a las alcantarillas! 
Don Corneo le dio a una palanca y el suelo se abrió tirándonos directamente hacia las alcantarillas, como en una caída libre. Todo se volvió negro de un momento a otro.
Tumblr media
-
Esto es una adaptación de la obra original FINAL FANTASY VII (SQUARE ENIX©) sin fines de lucro. Solo tiene fines lúdicos y de comunidad. Prohibida la copia de la adaptación igual que la extracción de personajes propios sin autorización.
CAPÍTULO ANTERIOR
CAPÍTULO SIGUIENTE
3 notes · View notes
leukiel · 1 year
Text
Perdóname, te he dejado entrar a este corazón de paredes rotas, de suelos desgastados y de jardines plagados de espinas. Discúlpame, quisiera poder ofrecerte un lugar en orden. Pero, incluso no habiendo un techo en este hogar destrozado, te ofrezco este cielo estrellado que no es más que mi amor que salpica el firmamento de astros, por ti.
—Leukiel.
35 notes · View notes
hotelbellamuerte0 · 1 year
Text
Cayetano Grossi:
"El hombre de la bolsa"
Tumblr media
Tumblr media
Cayetano fue un hombre de nacionalidad Italiana que en 1878 decide viajar a Argentina dejando atrás a su esposa, Rosa Ursomarso y a sus dos hijos de los cuales no se conoce su nombre. Ya instalado en Argentina consigue un trabajo como cartonero, posteriormente se casa con Rosa Ponce de Nicola, una lavandera de profesión. Ella anteriormente había estado casada con Juan Nicola, con quién tuvo tres hijas: Catalina, Clara y Maria. Pero lamentablemente el muere antes de que naciera su tercera hija, cuando la pequeña María solo tenía ocho meses, Rosa conoce a Grossi y juntos tienen tres hijos: Carlos, Teresa y Lorenzo.
Tumblr media
La carrera criminal de Grossi empieza el día 29 de mayo de 1896 (que curiosamente también es el año de nacimiento de Cayetano Santos Godino o el petiso orejudo, otro conocido asesino de la historia Argentina) cuando encuentran una bolsa negra en la basura que contenía el brazo de un bebé recién nacido, rápidamente la policía es alertada y se ordena una inspección ocular por toda la zona, después de un rato logran encontrar el cráneo aplastado de el niño, sus dos pequeñas piernas y su otro brazo, unas cuantas horas más tarde aparece en un carro de basura el tronco, completándose así el cuerpo como si de un macabro rompecabezas se tratase.
Después de que se realizará la autopista se reveló que el bebé había nacido vivo pero murió a causa de una fractura en la cabeza pero no se pudo encontrar a ningún culpable.
Dos años después, el 5 de mayo de 1898, encuentran en el mismo lugar y envuelto en una tela de arpillera y trozos de una chaqueta masculina de casimir negro, el cuerpo de un recién nacido, nuevamente con el cráneo destrozado y en un avanzado estado de descomposicion, presentaba quemaduras de primer y segundo grado en sus brazos y después de la autopista se pudo saber que tenía 4 días de vida y que fue extragulado hasta perder la vida.
Por algunas direcciones postales que había entre la basura que rodeaba el cuerpo del infante pudieron saber que carro había recogido esa basura, el carrero fue interrogado y confesó haber visto los restos del niño pero que no informo a la policía por miedo a quedar envuelto en la situación.
Después de revisar exhaustivamenta los elementos recolectados se percataron de que el pedazo de saco tenía numerosos remiendos hechos con género de luto y de que estaba extremadamente gastado, como si la persona que lo uso fuera un vendedor ambulante, los cuales portaban canastas con correas, en sus bolsillos había algunos restos de cigarrillos y anís, esto hizo que las autoridades concideraran la posibilidad de que su dueño fuese Español o Calabrés, porque ellos tenían la constumbre de comer anís. Las demás prendas por su calidad y estado sugerían la pobreza de su dueño.
Con todas estas pistas, el 9 de mayo de 1898, la policía gopea la puerta de una casa en la calle Artes 1438 (hoy Carlos Pellegrini) en el barrio de Retiro en Buenos Aires, hogar de una familia que siempre vestía de luto.
Los vecinos de la familia aseguraban que el padre violaba a sus hijastra y que ya las habían visto varias veces embarazadas, pero que tiempo después se las veia normal, sin saber nada de los bebés.
Cuando la policía reviso la vivienda encontró una lata, aparentemente de querosen, debajo de una cama, dicha lata contenía el cadáver de un bebé, rápidamente Clara, Rosa y Catalina señalaron a Grossi como el culpable pero este lo negó e intento culpar a su hijo Carlos que también estaba casado con Clara.
Aunque las pruebas lo inculpaban completamente, el siguió negandolo todo y aseguro que los embarazos de sus hijastas eran producto de las relaciones entre ellas y sus amantes, pero días más tarde confesó haber matado al primer bebé encontrado en 1896 y también haber insinerado a varios niños mas.
Tiempo más tarde reconoció haber tenido un hijo con Catalina y cuánto con Clara.
Rosa, Catalina y Clara fueron fuero juzgadas como "las encubridoras" de los crímenes y fueron sentenciadas a tres años de prisión efectiva, Cayetano por su parte fue sentenciado a la pena de muerte, que se llevó a cabo el 6 de abril de 1900 en la Penitenciaría Nacional.
Tumblr media
Aún con todas las pruebas en su contra Cayetano nunca dejo declararse inocente, recitado estás, en mi opinión, aberrantes últimas palabras : "Yo recibo con resignación la pena que se me ha impuesto, pero soy inocente. Yo no soy culpable de la muerte de esas criaturas, porque las culpables son esas mujeres que me han acusado asesino de sus hijos. Yo no soy el padre de las víctimas; los padres de esos niños eran los amantes de las mujeres Nicola. Si yo fuera un asesino tan feroz, yo hubiera muerto a mis hijos con la madre.
¿Cómo es posible que una madre haya permitido que yo asesinara sus propios hijos? ¿Por qué no me acusaron ante la Policía cuando yo salía a la calle, las madres de las víctimas? No siento morir y hago esta declaración por el amor a mis hijos legítimos”.
Tumblr media
Algunos minutos antes de las ocho de la mañana un piquete de soldados llegó a la puerta del lugar acompañado del juez Madero y del Director de la Penitenciaría coronel Boerr. Cayetano escoltado por dos guardias se dirigió al lugar de la ejecución, se sentó y dejo el cigarillo que tenía en la boca a un costado, como con la esperanza de poder seguirlo fumando, cosa no paso, pues al cerrar los ojos recibió la descarga de los fusiles, que tras un dolor punzante le dieron fin a su feroz vida.
16 notes · View notes
chocolateangelnight · 8 months
Text
Me he dado cuenta que he vivido durante mucho tiempo una mentira, dónde le demuestro al mundo donde mi vida es placentera pero la realidad es completamente diferente; y la verdad me estoy hartando de estar en esta situación donde la miseria y la soledad dominan mi ser y me mantienen encerrado en una prisión de dolor constante donde mi alma anhela esos días de felicidad y tranquilidad en mi hogar, con mi familia, mis amigos y mi amada. . . Pero he pasado tanto tiempo lejos de esa felicidad que ya nada me mantiene en pie, mi determinación ha terminado y solo queda un joven cuerpo destrozado, un orgullo destruido y un alma solitaria en un nuevo mundo que no pude ser capaz de afrontar después de todo nadie esperaba promesas de mi así que le estaría haciendo un favor a muchos si desapareciera dejando atrás un legado de malas decisiones, obras literarias que en su momento lograron darle un poco de esperanza a un joven escritor perdido pero ahora con las últimas gotas de tinta de esta pluma, con las últimas líneas de estás última hoja. . . Y con los últimos latidos de mi corazón solo espero que mi cuerpo logré encontrar ese descanso donde sea que termine y que mi alma pueda volver a volar como lo hacía en esas obras perdidas en el tiempo
-SAAX
2 notes · View notes
crecimiento-espiritual · 11 months
Text
HEBREOS 4:14-16
Descubre tu confianza
¡Feliz domingo! Nos alegra que estés aquí.
¿Por qué estás agradecido esta semana?
Haz una pausa y reflexiona.
Puede ser por algo grande o pequeño.
Respira profundamente y da gracias a Dios por ello.
No permitas que las sombras de la vida te hagan perder los pequeños destellos de belleza.
“Lamentarse” puede sonar a una palabra anticuada. Pero hemos descubierto que es transformadora. El género bíblico del lamento nos ofrece una guía para procesar los momentos difíciles con Jesús.
En el fondo, el lamento nos permite presentar todo nuestro ser a Dios. Es un "bienestar esencial" cristiano. Expresar una emoción dolorosa ante Dios no debe considerarse una renuncia a la fe ni una muestra de debilidad, sino un llanto de adoración a aquel que llora con nosotros.
Cuando encontramos pasajes de lamento en la Escritura, recordamos que no es preciso ocultarle nada a nuestro Salvador. Él puede ocuparse de lo que nos aflige. Nuestro reto, sin embargo, es hallar la confianza para acudir a Dios cuando la vida se pone difícil, en lugar de escondernos y alejarnos.
La confianza es algo curioso. No siempre se puede precisar. Todos sabemos cómo se siente la confianza, o la falta de confianza. Puede ser fácil de ver pero difícil de encontrar. Algunas personas, que no deberían tener confianza, tienen demasiada. Otras, que tienen todas las razones para tener confianza, no la tienen. La confianza es voluble y, a veces, escurridiza. Puede crecer durante años y perderse en segundos.
Entonces, en tiempos difíciles, ¿cómo podemos acercarnos con valentía al trono de Dios "confiadamente", como nos exhorta el pasaje bíblico de hoy, especialmente si nos sentimos débiles o desilusionados?
La clave es identificar en quién o en qué está nuestra confianza y, si no está en Cristo, redirigir nuestra confianza de inmediato. Esto cambia las reglas del juego. El autor de Hebreos no nos dice que invoquemos la confianza en nosotros mismos cada vez que nos acerquemos a Dios. Eso nunca funcionará. Nos exhorta a confiar en Jesús. La confianza que tenemos como creyentes fluye del conocimiento de Cristo, y no de nuestras capacidades. Confiar en Jesús es la vía para establecer una relación de confianza con Dios.
¿En quién confías hoy?
Gracias a la muerte y resurrección de Jesús, podemos entrar en la santa presencia de Dios y encontrar allí un hogar seguro, incluso con nuestros errores y torpezas. Este es el evangelio. Jesús nos ha abierto el camino para acceder a nuestro Padre celestial cuando más lo necesitemos.
En consecuencia, el pasaje bíblico de hoy es significativo en el contexto de los lamentos. Implica que, cuando nos enfrentamos al sufrimiento, podemos expresarnos abiertamente delante de Dios con la plena convicción de que él nos acogerá con amor.
Recuerda siempre, por muy destrozado que te sientas, puedes estar completamente confiado al entrar en la presencia de Dios.
Así que si estás luchando, decide hoy convertirte en un “lamentador”, por extraño que suene. Acércate a Jesús y clama a él. Él te entiende. Llevar tu dolor a Dios es lo más transformador que puedes hacer con él. Es una tarea profunda que sana el alma. Como promete la Escritura, recibirás misericordia y encontrarás la gracia que te ayudará sobrenaturalmente en tu momento de necesidad.
3 notes · View notes
love-letters-blog · 2 years
Text
Tumblr media
DEDICADO A ELLOS 🟠
A ellos que muchas veces nadie les pregunta como están, como estuvo su día, si se han sentido bien, si desean conversar, si desean tiempo para descansar, si necesitan su espacio por un momento para estar a solas.
Ellos que también desean ser admirados, valorados, respetados y reconocidos por una mujer.
Ellos que muchas veces en silencio guardan su tristezas, sus inseguridades, sus frustraciones, sus inquietudes, sus miedos, sus tropiezos, su errores.
Ellos que van por ahí siendo una máquina de trabajo, simples proveedores nadie ve el esfuerzo, los sacrificios, el esfuerzo que hacen para dar lo mejor en un hogar.
Ellos que intentan controlar sus emociones para que nadie los vea llorar, porque crecieron en un mundo donde no debían llorar por el simple hecho de ser hombre.
Ellos que se hacen los valientes, los fuertes, cuando posiblemente en su interior se sienten abatidos con angustia tratando de liberarse de alguna tormenta vivida y necesitan contención.
Ellos que también han sufrido alguna desilusión, algún engaño, alguna infidelidad que le ha destrozado el corazón.
Ellos que también sienten, que necesitan ser rescatados, ser salvados, ser cuidados, una mano que los sostenga, un hombro que les permita llorar y poder desahogarse, un abrazo un consejo, un te quiero un te amo, un todo estará bien.
Ellos no solo son imagen de macho recio, que todo lo soluciona, que todo el tiempo debe trabajar.
Ellos también son emocionalmente sensibles, desean ser aceptados, desean expresar sus emociones, desean ser reconocidos, desean ser amados y respetados, también necesitan de demostraciones, de detalles, ser enamorados, ser consentidos, ser mimados, etc,...
Ellos no siempre deben dar seguridad, contención, comprometerse, prometer, preocuparse de un hogar, pagar cuentas, llevar a pasear, invitar a un cine, o un restaurante, no siempre debe ser él que lleva las flores y el que conquista, el que toma la iniciativa en el amor.
Ellos también necesitan, igual que la mujer tienen emociones y un corazón..❤️🤍🙏
47 notes · View notes
pinksunshine34 · 2 years
Text
El freak y la chica del upside down
⚠️Spoilers⚠️
Summary: Eddie esta muerto,no había nada que hacer pero una chica en el upside down decide aparecer.
Nota: me disculpo de antemano porque aún no se como funciona esta app, apenas estoy averiguando. Mis one-shots se encuentran en Wattpad, el link esta en mi perfil 🫶🏻.
🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻🔻
-Dustin debemos irnos-Steve trato de levantar a su amigo que aún se encontraba abrazando el cuerpo sin vida de Eddie Munson.
-No podemos dejarlo aquí, debemos llevarlo a casa-El chico estaba destrozado, acababa de perder a uno de sus mejores amigos y no podía abandonarlo en este horrible lugar.
Harrington sintió cómo su corazón se partía al escuchar a Dustin llorar, aunque quisiera llevarlo el portal estaba de cabeza y ya no estaba la sabana que utilizaban como cuerda. No había manera de trasladarlo hacia el otro lado.
-Dustin, cariño no podemos. Lamento mucho todo esto pero Vecna escapó, debemos ponernos a salvo primero- explico Nancy. Eddie no merecía todo esto.
Steve trato de alejarlo y abrazarlo al mismo tiempo pues el chico de quince años no podía abandonarlo pero sabía que era peligroso tanto para el y sus amigos seguir ahí. Así que comenzó a caminar volteando de ves en cuando.
▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️
Todo estaba muy silencioso, algunos demobats se movían por momentos pues aún seguían vivos pero sin fuerza. El cuerpo de Eddie se encontraba rodeado de estos monstruos que habían acabado con su vida y aunque aún había criaturas cerca de ahi el lugar se sentía solo.
Tumblr media
El joven Munson estaba cubierto en sangre y las mordidas derramaban este líquido. Sus ojos se encontraban cerrados ya que Dustin lo quiso así pues solo parecía que estuviera dormido, habían pasado solo unos minutos de su muerte pero lucia en paz.
De pronto una mano se acercó a su cuello, tenía una pulsera de mariposas y las uñas pintadas de azul. Puso dos dedos tratando de encontrar algun latido pero no había nada. Pensó en seguir su camino pero acercó su dedo índice a sus labios tocando la sangre fresca, tal vez no era demasiado tarde.
Bajo la cremallera del chaleco verde que tenía y lo hizo a un lado dejando ver su playera de Hellfire Club ella no entendía de que era pero con sus dos manos tomó el cuello de esta y la rompió hasta llegar a su abdomen. Miro las heridas que los demobats le habían hecho he hizo una mueca de dolor, vaya que las sentiría en unos minutos.
Puso su mano derecha en su pecho, exactamente en donde se encontraba su corazón sin latir, cerró los ojos y comenzó a sentir todo.
Mierda pensó con mucho dolor.
Siguió ahí por un tiempo, la sangre que salía de las mordidas volvía a su cuerpo, regenerándose. Su ropa aún estaba cubierta en sangre pero su torso ya no tenía ese líquido rojo, todo había vuelto dentro de el.
Quito su mano de su pecho y volvió a tomar su pulso.
Tumblr media
Ahí estaba, claro que ahí debía estar pues ahora ella se encontraba adolorida y con sangre en su ropa. Latía lento pero iba a sobrevivir, lo miro por unos segundos. No tenía el corazón para dejarlo ahí solo a su deriva, no sabía cuando iba a despertar y cuál sería su reacción. Se levantó del piso mientras sostenía su mano en el abdomen y se apoyaba en su rodilla. Limpio su boca y trato de caminar alejándose del chico.
Tumblr media
Eddie comenzó a flotar de forma delicada aún acostado y cada que la chica daba un paso el cuerpo se acercaba a ella, siguiéndolo.
▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️
Tumblr media
El clima era cálido, corría un poco de aire haciendo que los árboles de alrededor se movieran causando que las hojas cayeran al piso. El ruido de los pájaros se escuchaba pero la radio era más fuerte.
Hace menos de 48 hrs un terremoto de 7.4 azoto al tranquilo pueblo de Hawkins causando la muerte de cientos de personas y en busca de miles de desaparecidos. Los oficiales esperan que las cifras aumenten...
La chica que se encontraba sentada en las escaleras de su hogar con una taza de café en mano apagó la radio pues desde el "accidente" era lo único que escuchaba. Se levantó para ir a la cocina y servirse un poco más en lo que su pan salía de la tostadora, mientras esperaba a que sonara camino hacia la recámara principal, recargándose en la puerta y tomando un sorbo de su café.
Observó a el chico que aún seguía sin moverse desde que lo trajo, acostado en su cama. En uno de sus brazos tenía un suero intravenoso que goteaba cada cierto tiempo, ella sabía que iba a despertar pero entendía que regresar de la muerte no era como una siesta. Su cuerpo debía regenerarse hasta estar listo.
El sonido de la tostadora la saco de sus pensamientos, ya era hora pues tenía hambre, miro por un momento hacia la cocina y regreso su mirada al chico frente a ella.
Su mano estaba en su estómago ya que la enfermera esa mañana lo había dejado así, estaba a punto de irse a desayunar pero observo que su dedo índice se movió, no fue un movimiento rápido sino lento como si estuviera estirándose.
Se quedó quieta esperando a que pasara de nuevo y así fue, el seguía profundamente dormido pero sus dedos comenzaban a reaccionar. Río, tomo otro sorbo de café y se fue de ahi.
Era cuestión de horas para que despertara.
🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺🔺
¿Debería hacer parte dos o...?
24 notes · View notes
nolmuqta · 2 years
Text
sentía que te había permitido entrar en todos los rincones de mi hogar y tu habías manchoneado y destrozado todo lo que estuvo a tu alcance
16 notes · View notes
Text
Tear Me Apart
Tear Me Apart
by Morgan_uwu3
Crowley jamás imaginó que el infierno y el cielo serían capaces de matar... Y así fue... Aziraphale no existe más para dónde fue una vez su hogar, el cielo...y por lo tanto, ni siquiera para el infierno...
 ¿Cómo lidiará el demonio su pérdida?...
Sólo siendo destrozado poco a poco...
Y por alguien muy cercano
 Fecha de publicación: 15 de Agosto 2021 (W4ttpad)
Words: 488, Chapters: 1/20, Language: Español
Fandoms: Good Omens - Neil Gaiman & Terry Pratchett, Good Omens (TV), Buenos Presagios - Neil Gaiman & Terry Pratchet, Buenos Presagios (TV)
Rating: General Audiences
Warnings: Major Character Death
Categories: M/M
Characters: Aziraphale (Good Omens), Anthony J. Crowley (Good Omens), Aziraphale Fell (Good Omens), Crowley (Good Omens)
Relationships: Aziraphale/Crowley (Good Omens), Aziraphale & Crowley (Good Omens), Aziraphale & Raphael (Good Omens), Anthony J. Crowley / Aziraphale Fell
Additional Tags: Good Ending (Good Omens)
From https://ift.tt/uzfgDKe https://archiveofourown.org/works/46991164
2 notes · View notes
ricardo367things · 1 year
Text
|Thomas VS Serial Designation “N”|
Tumblr media
Este One-shot es un capítulo proveniente de mi libro experimental “|Encuentros|Tunek|”, espero que sea de su agrado.
Créditos al artista que realizó la imagen.
Enlace del libro: https://www.wattpad.com/story/330795978-encuentros-tunek
Aquél lugar no era el planeta Tierra, tenía similitud, pero no era su planeta, el tunek albino (tunek mitad humano, mitad ficha de juego) Thomas Infante se encontraba en un planeta en el que no debería estar; y eso lo desconcertó bastante, no tenía idea de cómo había acabado en otro lugar, cuando debería estar en la Tierra. El tunek albino no parecía reconocer el astro en el que se encontraba, de hecho ni siquiera sabía de la existencia de este planeta, pues hasta el momento tenía conocimiento sobre la existencia de ocho planetas solamente, esto causó que su curiosidad surgiera y comenzara a vagar por el lugar que poseía una especie de ciudad similar a los que podía encontrar en su planeta natal.
Thomas levantaba la mirada, lo primero que encontraba eran edificios destrozados además de torres de basura (y algunos con inquietantes cadáveres) que normalmente veía en los libros de ciencia ficción; se sentía algo intrigado y a la vez aliviado, pues por una vez en su vida no tendría que hacer la horrible guardia nocturna de su tierra. Ahora que estaba más pendiente de su entorno observó un momento al cielo, logrando visualizar un astro similar a Saturno pero brilloso, el tunek albino se encontró descolocado ante lo que veía. — Honestamente, no estoy seguro si es Saturno o una especie de luna para esta noche tan escalofriante. A pesar de que me está intrigando esta experiencia, me gustaría encontrar una forma de volver a mi hogar, extraño mucho a Susan... — la voz de Thomas sonaba muy pensativa además de resonar como un eco por todo el lugar, mientras recordaba a su prometida con mucho cariño. Algo que notó era que todo el lugar estaba cubierto de una leve niebla, pero no era tan densa por lo que podía ver con claridad todo lo que había a su alrededor.
Pasó un rato caminando, hasta que encontró una especie de cápsula/nave en medio de brazos mutilados, cabezas separadas de sus respectivos cuerpos; aceite derramada por todos lados. Esta terrorífica escena hizo que Thomas tuviera un pequeño escalofrío, pero no el suficiente para asustarlo, ya estaba acostumbrado a este tipo de escenas que traumarían a cualquiera; al parecer participar en varias guerras devastadoras sirve de algo después de todo. El tunek albino se acercó un poco a la cápsula/nave para inspeccionarla; sin embargo, sintió un presentimiento extraño que lo hizo sentir inquieto, cosa que era del todo entendible, pues de la nada aterrizó una criatura con mucha fuerza, la cual tenía en sus garras la cabeza de lo que parecía un dron, para después beberse su aceite, segundos después la tiró al suelo. Thomas estaba impactado por la presencia de aquella criatura, lo único que podía describir era que se trataba de un individuo alto, con alas metálicas en su espalda, además de poseer imponentes garras en sus manos, tenía una cola muy fina, con una aguja en su punta que contenía una especie de líquido amarillo que el tunek desconocía, no hacía falta mencionar que sus ojos estaba formado una enorme "X"; la criatura no parecía darse cuenta de su presencia. El tunek albino estaba algo paralizado, pero luego se golpeó a sí mismo para pensar con lógica. "Por favor Thomas, eres un tunek, puedes con esta basura" fueron los pensamientos de Thomas al golpearse levemente su cara.
La criatura finalmente se dio cuenta de su presencia, y emitiendo sonidos raros se acercó de forma amenazante hacia Thomas, el cual no se inmutó y se mantuvo en el mismo lugar; el individuo se acercó lo suficiente para volver a emitir un ruido extraño en la cara del tunek albino, el cual solo se limitó a dar una fuerte cachetada en la cara de la criatura, la cual se desprendió de su cabeza, Thomas entonces aprovechó para aplastar la cabeza cubriendo sus pies de ese extraño líquido similar a la sangre, de repente a la criatura le volvió a crecer la cabeza, sorprendiendo al tunek albino, además de notar que las alas y garras metálicas habían desaparecido rápidamente, sin embargo, no siguió atacando, pues la criatura al parecer entró en un estado de desconexión, para después entrar en un estado de reinicio, segundos después aquella "X" en su cara se transformaron en dos pupilas de color amarillo.— ¿Me acabas de pegar con tu brazo? — preguntó la criatura confundida al ver el brazo de Thomas, el cual lo miraba con una cara de póker, ahora que lo veía bien, se parecía a las cabezas que había encontrado en el suelo. — Claro que te golpeé con mi brazo ¿Tienes un problema con eso? — preguntó el tunek albino con algo de desconfianza, cosa que notó su contrario, quien lo analizó de pies a cabeza, por lo que de forma amable se presentó con carisma y amabilidad.
— No, lo siento, es solo que me duele un poco la cabeza. Oye ¿Eres nuevo en nuestro equipo? Eres un poco uh, bajito para un dron de desmontaje. Soy Designación en serie N, encantado de conocerte. Soy una especie de líder del escuadrón en esta ciudad, eso no es cierto, todos me dicen que soy un inútil y terrible — a pesar de la agradable presentación del dron conocido como "N", el comentario que le hizo a Thomas con respecto a su tamaño, hizo que una vena se asomara en su frente, por lo que calmado pero con malicia en su voz respondió con lo siguiente. — Pues sí tiene todo el sentido del mundo que parezcas un inútil, con ese aspecto que tienes no creo que seas muy capacitado si me lo preguntas a mí — esta respuesta hizo decaer un poco a N, quien con desánimo comentó. — Oye, no es necesario ser así.
De repente Thomas sintió dos presencias más, las cuales aterrizaron de igual forma que N lo hizo hace unos momentos, sin embargo, estas eran drones femeninas, las cuales tenían una cara de pocos amigos, además de observar con ojos asesinos al tunek albino, quien de inmediato desprendió un aura imponente que sintieron los tres drones de desmontaje. — ¿Y ustedes quiénes son? ¿Son amigas del imbécil este? — la pregunta pareció ofender a una dron que tenía dos colas de caballo en su cabello, ella parecía la de mayor rango; mientras que la otra chica, la cual su cabello le llegaba hasta el cuello soltó una pequeña risa.
— Compañeras de trabajo mejor dicho — corrigió. — Yo soy la Designación en serie "J", y la que está a mi lado es la Designación en serie "V" — contestó de forma fría la dron denominada "J"; Thomas entonces le echó un vistazo a la dron denominada "V", la cual parecía una muchacha sádica y una loca que estaba siempre lista para matar. — ¿Qué es lo que eres exactamente? Pareces un humano, pero al analizarte no encuentro parecido con la raza — preguntó V, ante esto el tunek albino, dibujó una leve sonrisa, para después reír, haciendo que los tres dones de desmontaje se extrañaran por el repentino cambio de humor del tunek. — Yo no soy un humano, al menos ya no, yo soy una especie superior a ellos, y si lo decido, puedo convertirlos en chatarras inservibles — al finalizar el tunek albino dibujó una sonrisa perturbadora en su rostro, pero en lugar de asustar a los presentes, no hizo más que enojar a J y V; quienes se abalanzaron rápidamente hacia Thomas, quien se agachó un poco esquivando a las drones, para después agarrarlas a las dos de la cabeza, e impactarlas una contra la otra, haciendo que ambas retrocedan desconcertadas por el golpe, preocupando un poco a N.
— ¿Qué pasa?  ¿No vas a ayudar a tus amigas? Tu pareces el más fuerte así que enfréntame — expresó Thomas de forma atrevida, retando a N; quien parecía dudoso, pero luego de un rato se veía decidido a luchar, y finalmente se volvió a transforma en aquella bestia que el tunek albino había conocido con anterioridad. Esto hizo que el tunek albino sonriera. — Al parecer tendré que usar mi as bajo la manga si quiero vencerte, dame unos momentos — la voz de Thomas se ralentizaba cada vez más antes de caer al suelo y sufrir una dolorosa metamorfosis, que hicieron inquietar un poco a los tres drones de desmontaje. Su cabello blanco comenzó a erizarse un poco, sus garras tanto de las manos como de los pies crecieron un poco más haciendo que las prendas que cubrían esos lugares se desgarraran irremediablemente, sus colmillos se tornaron más filosos y con una mordida de fuerza mayor, pero lo más resaltante fueron los ojos de Thomas, los cuales se tornaron verticales como las de un tigre, y se contrajeron un poco, pero no solo eso una especie de equis adornó aquellas pupilas, ahora el tunek albino tenía una apariencia más amenazante, en estos momentos estaba usando el "Modo Bestia".
— Muy bien, ahora estoy listo para luchar — comentó Thomas, antes de dirigirse a toda velocidad hacia N, arremetiendo con un puñetazo en la cara que hizo retroceder a su oponente unos cuantos metros de distancia, comenzando así la pelea...
Nota del Autor:
(¡Sí, mi primera vez escribiendo algo relacionado a "Murder Drones"!)
Sinceramente, pienso que Thomas y N están en igualdad de condiciones, pues a pesar de que el tunek albino sea más fuerte y posea más resistencia, le dron lo supera en velocidad y agilidad, además que al igual que los tunek, N posee una capacidad de regeneración, teniendo también en cuenta el hecho de que Thomas no puede usar por mucho tiempo el "Modo Bestia", debido a su contraproducente consecuencia. Sin embargo, si Thomas logra vencer a N, lo más probable es que estaría muy cansado, porque ambos individuos tienen una fuerza igualada, además por su transformación, lo que le daría la oportunidad a J y V de rematarlo, pero también existe la posibilidad de que N lo pueda derrotar. De la forma en el que lo veamos, Thomas no podría salir vivo de esta.
Fin.
Thank you for reading!!!
5 notes · View notes