Tumgik
#sabré como ayudarte.
amucreations · 1 year
Text
Needle felt Dunsparce by TheMindOfAmu on Etsy
Tumblr media
Este adorable Bicho es un Pokémon y se llama Dunsparce. Mide aproximadamente 25 cm de altura y está hecho de lana mediante la técnica de fieltro con agujas.
(Se realiza bajo pedido). Todos nuestros artículos están hechos a mano con amor y cuidado y algunos pueden tardar más en hacerse que otros, por lo que el tiempo de procesamiento puede variar, pero normalmente tomará 1-2 semanas.
Cada Pokémon de fieltro puede parecer ligeramente diferente al de la imagen; debido a la naturaleza artesanal del producto. Los colores o el tamaño pueden variar ligeramente.
Mis productos son adecuado para la decoración de habitaciones, decoración de Pascua, detalles como regalo de aniversario, cumpleaños, decoración de escritorio. Regalo hecho a mano para cualquier ocasión. Un hermoso regalo para todos los que admiran las creaciones ecológicas hechas a mano. Por favor, no dude en ponerse en contacto conmigo si tiene alguna pregunta.
⚠️Las esculturas de lana deben ser tratadas con delicadeza y se recomienda solo para fines de exhibición. (No es un juguete para niños ni para mascotas). No tire de las extremidades ni de la lana suelta.⚠️
NOTA: Todos los derechos están reservados a Nintendo y The Pokémon Company. Dunsparce no es mi personaje y no pretendo poseerlo ni ningún otro Pokémon.
Si buscas cualquier otro pedido personalizado no dudes en ponerte en contacto conmigo, sabré como ayudarte.
Puedes seguirme en mis redes sociales: Twitch: BecaGlez (Aquí me verás en vivo realizando las figuras) Instagram: Amumeow
7 notes · View notes
growingold · 4 months
Text
I can’t find a pulse, my heart won’t start anymore.
Cuando era más joven solía compararme con un camaleón. Decía que era fácil para mí encajar en todos lados por mi capacidad de moldearme en distintos colores y formas dependiendo de mi entorno. Una vez que fui creciendo me di cuenta de que soy más como un fénix. Quemando etapas en mi vida y reuniendo las cenizas entre mis manos para renacer intacta, más fuerte que nunca, como nueva. Quizás solo con el tiempo y a medida que iba creciendo aprendí a ser resiliente, a sanar mis propias heridas y seguir avanzando.
No puedo tomar todo el crédito por eso porque tengo claro que de no haber vivido algunas experiencias yo nunca hubiese sentido la necesidad de velar por mí misma. Solo sé que solía pensar en una vida donde cuidaran de mí y sintiera cierta permanencia era mi final feliz, pero una vez que saqué un pie al exterior y me di cuenta de que en realidad no estaban cuidando de mí empecé a desligarme y esa sensación de permanencia se fue desvaneciendo con el pasar de los años.
Fue como cuando enciendes un fósforo y todo parece iluminarse, solo que esta vez el fósforo no se apagó más. Mi mente se fue llenando de ideas nuevas, yo tenía sed de otro tipo de experiencias y sensaciones, de otro tipo de sentimientos, cosas que siempre quise y que dejé a un lado solo para poder encajar y porque mi alma de camaleón se podía el peso de cambiar constantemente para amoldarse a todos esos entornos. 
Y después cambié por última vez y nada fue como antes. 
Quemé todas esas sensaciones que ya no quería sentir, esas cosas que me había guardado las saqué y empecé a ver el mundo de manera distinta, más brillante, más parecido a mí. 
Recuerdo que alguien que estaba ahí conmigo tomó mi “despertar” como algo negativo, se espantó porque yo empecé a decir que no, porque empecé a pedir cosas que no había pedido antes, porque dejé de llorar y empecé a exigir, empecé a cerrar puertas, a cortar oportunidades. Puse todo sobre la mesa y poco a poco mis latidos fueron disminuyendo, cada vez menos, cada vez más lento, con pausas más grandes. Pasé los últimos años viviendo a base de latidos agónicos, que estaban en las últimas, aún con un poco de esperanza porque una pequeña parte de mi corazón seguía esperando su final feliz.
Entonces se escuchó el pitido.
Ese pitido en las máquinas que te chequean el pulso en los hospitales, el que te da a entender que ya no late tu corazón. Ensordecedor, pero para mí: Liberador. 
Cerré todas las puertas, corté todas las oportunidades. Le dije adiós la última hojuela de ceniza que tenía esa alma de camaleón, la junté con todas las otras y finalmente me despedí de la persona que solía ser. 
Viven dos ideas en mí ahora respecto al amor. Una de ellas cree que al final todos encontramos a quien podemos llamar “alma gemela”, que no es quien te complementa (porque ya venimos completos) pero sí con quien la vida tiene un nuevo significado y le encontramos el disfrute. Alguien que es como uno, que te ayuda, que te enseña, que te cuida de la misma manera en que lo ayudas, le enseñas y lo cuidas. 
Y la otra cree que quizás el alma gemela solo somos nosotros mismos. Que no existe nadie que vaya a ayudarte, enseñarte y cuidarte de la misma manera en la que lo harías tú mismo por ti. Porque nadie más te conoce como te conoces tú. Es simple. Quien vaya a estar a tu lado va a ser su propia persona también y sabrán acompañarse mutuamente, a seguir creciendo y conviviendo en armonía. 
Para ambas ideas sé que nunca me voy a conformar con menos. Y si eso me lleva a una vida en donde solo voy a estar yo, al menos sabré que no volví a doblegar mi espíritu solo por encajar ni por esa sed de pertenencia. 
4 notes · View notes
nian-spiral · 2 years
Text
Puedo notarlo, cada vez te resulta más difícil estar aquí y eso está bien, después de todo, soy una persona complicada.
Solo buscaba ayudarte pero nunca supe cómo, en su lugar te orillé a buscar refugio en otro sitio, y eso está bien si con ello obtienes la paz que tanto anhelas.
Como sea, el día de mañana te habrás marchado, y yo... Yo sabré vivir con ello.
8 notes · View notes
imnaturalgirl · 2 years
Text
Texto sobre Rafa, chico del camión.. 
Son tantas ganas de volver a verte, solo por curiosidad, primero para confirmar que eres real, después para asegurarme que tu rostro sigue siendo el mismo que conocí y que al verte, podría reconocerte, porque a decir verdad, ahora mismo mi mente no lo tiene claro.
No sé que hice mal para no saber más de ti.
Hay días en los que me hago a la idea de que ya no sabré más de ti, a pesar de que os dos vivimos en esa ciudad nada grande.
Algo de mí me dice que tu eres ideal y que quiere que lo seas. Quiere ayudarte a conseguir, encontrar eso que andabas buscando y que yo con gusto te puedo ayudar, yo sé lo que buscas, que paz buscas.
Permíteme ayudarte mientras tu seas la sal, pimienta, azúcar en mi vida. Que seas un motivo de levantarme día a día y quererte compartir lo que aprendo, leo, veo cada día.
Tengo muchos planes que primero Dios, quiero ponerlos en acción, uno de ellos, quiero que seas mi compañero de viaje.
Ese compañero con el cual aprender juntos, divertirse, conocer, compartir, bailar, conversar de temas interesantes y temas, tal vez tontos, y hasta conversar sin palabras.
Caminar calles largas, caminos largos, escuchando ruidos de cada lugar, grabarlos en nuestras mentes y hasta pelearnos por cosas bobas para después carcajearnos.
No solo quiero que seas como una canción de los Arctic Monkeys en mi cabeza, sino que seas todo un soundtrack y repetirlo cuantas veces quiera.
No te pido primero amor, besos, caricias y abrazos de una típica relación de lo que llaman "novios". Primero quiero un compañero de viaje, después un amigo en el transcurso del viaje y de ahí, un amigo que me conozca bien, que seamos un par de amigos que se conocen hasta los defectos de cada uno.
Y aún así, seguir siendo amigos.
Quisiera de alguna manera, hacer contacto contigo, si se pudiera hacer telepáticamente y poder entrar a tus sueños y decirte que estoy ahí dispuesta a escucharte sin juzgarte. Estoy ahí, estoy aquí, tengo paciencia, sé escuchar, quiero escuchar y quiero ayudar en lo que pueda.
Estoy interesada.
Quiero decir tu nombre en voz alta sin miedo a nada, quiero que no sólo seas un nombre que recuerdo, sino más que eso. Se de ti varias cosas y quiero saber más.
Ayúdame a encontrarte. Sé que no eres un fantasma que se apareció en el camión ese día a lado mío. Dios no hace las cosas por casualidad, sino que todas tienen un propósito y tu aún no has cumplido el tuyo, ni yo el mío.
Después de tantos meses, no logro desprenderme de tu recuerdo y tu esencia. Y no quiero hacerlo.
Todas las noches hago un esfuerzo por encontrarte en mis sueños. De aquél sujeto sin rostro que llega y me dice que es él, tenga tu rostro. Que se aparezca en la vida real.
TEXTO ALGO VIEJO QUE TENÍA ESCRITO EN HOJAS DE LIBRETA Y GUARDADO.
TEXTO SOBRE EL CHICO QUE CONOCÍ EN EL CAMIÓN HACE 8 AÑOS.
2 notes · View notes
you-moveme-kurt · 2 years
Text
Glee «Her mortal enemy» Part III
Agosto de 2022
-¿Tienen planes para esta noche? -¿¡Qué!?... ¿por qué lo preguntas?… —se adelantó en preguntar Kurt abriendo sus ojos como dos huevos fritos. -Por nada… -¿Segura?... ¿qué escuchaste cuando llegaste?... —insistió apuntándole. -Nada… ¿estás bien?... ¿aún piensas en esa araña que no fue?... —añadió la chica moviendo su cabello -No… -Entonces… -¿Entonces qué?... —repitió Kurt volviendo a lo de abrir los ojos. -Kurt… tranquilo… —murmuró Blaine abrazándolo por la cintura, Kurt lo miró un segundo y acto seguido suspiró aliviado, sintiendo, como siempre, que nada malo podía pasar si tenía los brazos de su esposo rodeándolo, ya sea en una situación seria, una estúpida, con Rachel, sin ella, como fuera y cuando fuera. -Super Blaine… —dejó escapar Kurt sin pensar, Blaine sonrió engreído y no pudo evitar bajarse la mascarilla para darle un beso, Rachel blanqueo los ojos para luego hacer notar que ella estaba ahí mediante una carraspera como de enfermo terminal— ¿necesitas agua querida?...—agregó apartándose de su esposo.
-No… —contesto alargando la «o»— solo necesito que me presten atención y que se den cuenta que hay más personas aquí…—añadió señalándose  ella y a Brandon que seguía inmerso en el universo de su teléfono móvil— así es que no se ponga a hacer sus… cosas… —añadió poniendo mala cara. -Muy bien entonces… —dijo Kurt caminando dos pasos para sentarse pierna arriba, Blaine se acercó a él y se sentó en el brazo del sofá— ¿pudiste grabar decías? -Por supuesto y no quiero parecer petulante pero… me quedaron sensacionales… ¿cierto Brandon?... —dijo dándose vuelta para mirar al chico en cuestión, este solo se limito a lo de alzar un pulgar nuevamente— hombres… —murmuró negando con la cabeza. -¿Y qué canciones escogiste? -Pues las mejores de mi «répertoire»… -Por favor no me digas que usaste los aparatos de última generación que tiene mi esposo para grabar «Don’t stop believing» y «Don't Rain On My Parade»… —dijo Kurt alzando su ceja inquisidora mientras le tomaba la pierna a Blaine cuando mencionaba lo de su esposo.. -Por supuesto que no… -Fue exactamente lo que hizo… —murmuró Brandon sin despegar sus ojos del teléfono, Kurt y Blaine soltaron una risa la unísono -¡Oigan!... ¡son mis canciones y yo sabré que elegir!… —exclamó la chica cruzándose de brazos molesta al máximo -Como digas…—agregó Kurt abriendo sus manos y aun riendo. -¿No deberíamos?... —dijo Blaine señalando su reloj pulsera, Kurt lo miró con el ceño fruncido tardando un par de segundos en caer en la cuenta. -¡Si!, ¡obvio!…—exclamó recordando lo de la cena— claro que sí… en fin… —dijo levantándose— ¿ya te vas Rachel?, con Blaine tenemos un montón de cosas por hacer antes de nuestro viaje a Lima… —añadió moviendo sus manos como si tratara de hacer que un rebaño de ovejas abandonara el salón y no su amiga del alma. -¿Que cosas?... -Cosas Rachel, cosas… —dijo Kurt repitiendo lo de las manos. -Pero pensé que podríamos cenar juntos… ya que a Brandon aquí lo único que le interesan son las teclas de colores del tablero P no se cuanto… -De hecho es la AR… da lo mismo… ahora bien… —añadió Blaine acercándose a ella— fue un gusto verte y ayudarte… vuelve cuando quieras… y lamentablemente no podemos cenar juntos porque como dijo mi esposo Elwood, mi jefe, nos invitó a  su casa en el lago Cayuga y el camino para allá es largo y… -Un momento… —interrumpió Rachel levantándose con las manos en alto— ¿no es que tenían que prepararse para ir a Lima?…—pregunto mirando a su amigo de manera alternada. -Bueno… -O uno o los dos me están mintiendo y me parece super horrible de su parte que lo hagan, parece que quieren deshacerse de mi o algo… —añadió haciendo tras la mascarilla, un gesto infantil de tristeza con su boca. -Nadie se quiere deshacer de ti Rachel —corrigió Blaine—  la verdad es que… -La verdad… —se adelantó en decir Kurt temiendo que su esposo tuviera uno de sus arranques de sinceridad y terminara por revelar todo— la verdad  es que Blaine tiene indigestión… -¿Qué?... —preguntaron Blaine y Rachel al mismo tiempo. -Eso,  ya sabes es super vergonzoso hablar de la palabra con «d»…—agregó con una mano cerca de su boca en un gesto de disimulo— por eso tenemos que quedarnos aquí… donde hay baños a la mano… lo siento. -¿Es verdad eso?... —preguntó Rachel mirando a  Blaine, este a su vez miró a su esposo que abría sus ojos como diciendo en silencio «di que si por favor» -La verdad es que sí… —contestó tocándose la panza— no se que fue, pero… ya sabes…—agregó haciendo una mueca de dolor como si le hubiera dado un retorcijón en ese mismo instante, Rachel puso cara de asco y se decidió a irse. -Esta bien… agendamos para otro día la cena entonces… -Oye… —dijo Brandon mirando su teléfono— ¿este eres tú?... —pregunto enseñando la pantalla del aparato y la foto de él con las protagonistas de West Side Story. -Con un demonio… —murmuró Kurt tocándose la frente. -¡No!… —contestó rápido Blaine acercándose a él— no… —repitió como mirando la foto de mas cerca— en fin… fue un gusto conocerte Brandon, las puertas de mi estudio siempre estarán abiertas para ti… —agregó casi llevándoselo a la salida. -No puedo creer que conozcas a Adriana de Bose y a Rarchel  Zegler… son super sexys… —insistió. -¿¡QUE!?... —exclamo la otra  Rachel levantándose como en cámara lenta y con cara de loca demente, se acerco a Brandon y le quito el teléfono de las manos. -Rachel.. —dijo Kurt tratando impedir con voz calma lo que seguramente venía. -¡¿QUÉ DEMONIOS SIGNIFICA ESTO?! —grito mostrando la pantalla a todos. -Rachel… —repitió Kurt aproximándose a su amiga. -¿Qué demonios significa esto Blaine?... ¿cómo puedes hacerme esto?… -¿Hacerte qué?... -¡ESTO!... ¡esta foto con esta gente!... ella es mi enemiga mortal… dile Kurt… —añadió meneando el teléfono de Brandon hasta que lo arrojó lejos. -¡Oye!... —dijo este yendo en busca del aparato que por suerte había caído en uno de los sillones de la sala. -Nunca olvidaré esto… ¿me oyen?...¡NUNCA! —exclamó mientras tomaba su bolso y se arreglaba la mascarilla. -Y yo nunca olvidaré que eres una histérica… no me vuelvas a llamar… —agregó el técnico en sonido mientras revisaba su teléfono móvil para cerciorarse que si funcionaba y encaminaba sus pasos a la salida. -Y yo nunca olvidaré que casi rompes mi lámpara Tiffany con ese exabrupto de adolescente que te dio… si eres tan amable… —dijo Kurt señalando la salida. -¡Uy!... —exclamó de vuelta Rachel empuñando sus manos— están en mi lista… —agregó señalando a ambos— además, yo soy la que debiera estar disgustada… te dije que ella era… -Tu enemiga mortal.. lo se… —dijo Kurt con fastidio -¿Entonces?… ¿por qué no se lo dijiste a él?... -Se lo dije… -Entonces es un problema de entendimiento… ¿tanto gel en el cabello te produjo una disminución de neuronas?… —añadió mirando a  Blaine. -Ok… ahora solo estás siendo una arpía desagradable… vuelve cuando  se te haya pasado todo esto…—dijo su amigo insistiendo en lo de señalar la salida -¡Uy!... —repitió Rachel con mas ahínco—nunca los perdonaré por esto… ¡nunca! —agregó mirando a ambos con el ceño fruncido como si les echara una maldición de manera silenciosa o algo parecido, se dio media vuelta y le dio un buen golpe a Kurt en la cara con las puntas de su cabello. -Vaya… —dijo este señalando hacia atrás y mirando por donde se había ido su amiga. -Si… vaya… —repitió Blaine con las manos en los bolsillos -¿Puedes creer su comportamiento? -En realidad… si… —respondió su esposo arrugando la nariz -En realidad yo también… —agregó Kurt soltando una pequeña risa. -Y lo más increíble, es que ni siquiera llegamos a mencionar lo de la cena de esta noche… —dijo Blaine también riendo. -¡Es verdad!... ¿te imaginas qué hubiera pasado?… -Una hecatombe más grande de seguro… -De seguro… -¿Crees que es verdad eso? -¿Qué cosa?... —preguntó Kurt acercándose a su esposo. -Eso que dijo que «no nos perdonará nunca»… —respondió Blaine tratando de imitar a Rachel con movimiento de cabello y todo. -No… de seguro ya nos perdonó en el piso 8… me disculpo en su nombre en todo caso… -¿Si? -Obvio… ¿por qué esa cara?...  —quiso saber Kurt al ver que su esposo lo miraba con suspicacia divertida. -Por nada… es decir… me encanta cuando haces eso…—contestó tomándolo por una de las trabillas del pantalón para ceñirlo a él. -¿Qué cosa?... —preguntó de vuelta dejándose llevar. -Eso de pedir disculpas o decir lo siento… —Kurt alzó un poco su ceja— y no me malinterpretes, no lo digo por criticar es… los problemas que tuvimos en el pasado esa fue una de las causas… y lo que trato de decir… es que me alegra que ya no lo sea…—termino por decir abrazándolo para luego darle un beso. -Ok…  —dijo Kurt coqueto— ¿qué tal…?... ¿qué tal si ahora me disculpo porque las cosas se están poniendo un poco calientes aquí?... —agregó bajando sus manos por el cuerpo de él. -Disculpas aceptadas… —contesto Blaine rindiéndose a aquello.
3 notes · View notes
girasol-de-tristeza · 2 years
Text
"«Carta a alguien que se suicidó», por Violet Markey.
¿Dónde estás? ¿Y por qué te fuiste? Supongo que nunca lo sabré. ¿Fue porque te hice enfadar? ¿Porque intenté ayudarte?
¿Porque no te respondí cuando lanzaste piedrecitas contra mi ventana? ¿Y si te hubiera respondido? ¿Qué me habrías dicho?
¿Habría podido convencerte de que te quedaras o de que no hicieras lo que hiciste? ¿O habría sucedido igualmente?
¿Sabes que ahora mi vida ha cambiado para siempre? Antes pensaba que era así porque tú habías llegado a ella y me habías enseñado Indiana y, con ello, me habías obligado a salir de mi habitación y abrirme al mundo. Incluso cuando no estábamos de excursión, incluso desde el suelo de tu vestidor, siempre estabas enseñándome el mundo. Pero no sabía que el cambio para siempre de mi vida iba a ser porque me quisiste y luego te marchaste, y de un modo tan definitivo como este.
De modo que supongo que al final lo del Gran Manifiesto no existía, aunque me hiciste creer que sí. Supongo que solo había un trabajo del instituto.
Jamás te perdonaré por haberme abandonado. Ojalá tú sí pudieras perdonarme. Me salvaste la vida. "
-All the Brigth Places
20 notes · View notes
Text
Para cuando estés leyendo esto seguramente ya me habré ido. No me mal interpretes, lo hago por amor, porque te quiero más que nada en el mundo, y por encima de mi estás tú.
Nunca he deseado con tanta fuerza que alguien fuese feliz, y me duele no ser suficiente para ayudarte a ello. Me esfuerzo e intento mil formas solo para ver cómo los planes que a mí me rechazas los haces con ella. Y ya te dije, si fuese solo sexual, no me importaría porque es algo que se puede hacer a ciegas, pero ella te da algo más, y ahora la que sólo buscas para sexo es a mi, y eso sí que me duele.
Nunca creí, ni creo que alguien como tú pudiera siquiera fijarse en mi. Tu eres mi sueño, mi deseo, casi perfecto, tan inalcanzable...
Me he pasado este tiempo intentando recuperar una chispa de algo que se apagó en ti antes siquiera de admitirlo. He intentado ser tu amiga, pero no puedo, no puedo ser solo eso, me quema no ser alguien importante para ti, alguien en quien confiar, con quién pasar el rato y a quien le puedas contar tus tormentos. Me duele ser una desconocida para ti.
Tengo tu regalo de cumpleaños. No se acerca ni un poco a lo que te mereces y lo que me has dado, solo pensé en tu cara de niño ilusionado al verlo en la tienda y pensé que podría ver esa cara otra vez al dártelo. Lo empiezo a dudar.
Me volví a poner tu amarre, de forma voluntaria, para tener algo de ti en mi, aunque sea poco, ya que es lo único que me queda.
Ya nada es igual desde que te fuiste, la gente es insulsa y los días se estancan. Es cierto, de vez en cuando apareces en mi día y lo llenas de luz, pero es tan efímero...
Se que esto es lo mejor para ti, que soy un problema menos dado que ni siquiera me querías ya, pero no puedo evitar pensar en aquellas cosas que nos prometimos: que iría a pasar los días contigo cuando tuvieses el piso, que me pondría aquel vestido canela cuando me recojieses en coche, que nos iríamos de viaje a la nieve y nos alojaríamos en un iglú, que me llevarías a conocer a tus tías, que tendríamos un bebé con tus ojos... Todo pareció tan real...
Lo siento por haber aparecido en ti vida, por haberte hundido y quitado tu chispa. Por desearte la felicidad mientras lloro al ver cómo la consigues sin mi, por mentirte al decirte que estoy bien... Lo siento, no mereces todo el mal que te he llevado ni mucho menos el que te estoy dando.
Cuando leas esto no sabré si querré verte más o desaparecer.
Seguramente lo segundo.
Atentamente,
La persona a la que llamabas mi vida.
-Khyo (@mejor-si-es-prohibido), te amo, siempre tuya, mi todo.
65 notes · View notes
skywordsp · 2 years
Text
No sé cómo comenzar esto, es tanto lo que tengo para decirte que realmente no sé ni por dónde empezar...y es irónico por qué se que nunca leerás esto y es por eso que lo escribo...me he preguntado muchas veces ¿Por qué teniendo algo tan bonito lo dejaste ir? ¿Por qué teniendo una gran persona y poder durar mucho más tiempo, dejarlo ir? Y bueno quizá tengas tus razones, las cuales nunca sabré pero igual a veces me lo pregunto, y si en algún momento una persona me llegará a preguntar si te extraño, yo respondería que no, pero mi respuesta tiene dos lados, el primero sería que no, no te extraño, ya que si regresaras a mí no me gustaría volver con la versión que eres ahora, me harías mucho daño y realmente no hay necesidad, así que esa sería la primera respuesta que daría, un no, ya que te has vuelto una persona totalmente distinta y yo creo que el cambio fue para mal, ya que solo has alejado a la gente que más te quería y eso no tiene sentido por qué ahora estás con la gente que quizá te haga más daño...en fin...el otro lado de la respuesta es que si, si te extraño aún, pero extraño a esa persona que eras antes, esa persona que hizo todo para conquistarme y que lo logro las veces que quiso, por qué realmente te tomabas el tiempo para escucharme y conocerme nuevamente y eso fue algo muy bonito, demasiado...así que esa sería la segunda respuesta la cual no diría y me la dejaría para mí solita. Y bueno ver la persona que eres ahora me da mucha tristeza y en parte un poco de lástima, por qué realmente creo que eras feliz con lo que tenías, con lo que teníamos, aún que eso que tenías y que no sé si sigas teniendo, te lo impidió, y pues nunca me dijiste nada al respecto, todo te lo guardaste para ti y eso nose si estuvo bien o mal, por qué realmente te quería ayudar, pero después entendí que no era mi culpa ni mi obligación ayudarte, pero aún así lo hice y pues aún que no obtuve nada bueno a cambio, te agradezco por todo, por todo infinitamente, me diste muchos recuerdos en varios años y eso se agradece, gracias a ti he aprendido muchas cosas y quizá algunas de la peor manera pero bueno, de los momentos malos también se aprende no?. Así que de verdad espero que te valla bien, que seas feliz sea con quien sea, y que te des cuenta las personas que tienes cerca y a las que alejaste, nunca es tarde para aprender así que te deseo mucha suerte, y pues espero, de verdad espero que, si la vida nos vuelve a juntar sea para bien, no te guardo rencor, al contrario te mando una gran sonrisa y por ahora espero no volver a encontrarme contigo y si es así, que sea de la manera más positiva, ya que sé que en el fondo, muy muy en el fondo aún está tu verdadero tu y pues tarde o temprano te darás cuenta de todo lo que has provocado con tu cambio y pues nunca es tarde para cambiar así que mucha suerte en eso, y si es que tú personalidad se quedará así, espero que seas feliz, por qué te lo mereces, no eres tan malo como aparentas ser, eres una gran persona y aún que en su momento todo lo que hiciste estuvo mal, agradezco por el tiempo y los momentos que me brindaste, fue un gusto haber llegado a estar contigo y a pasar momentos buenos y malos, te voy a querer siempre, por qué me has dejado marcada y aún que intente sacarte de mi vida por completo sé que no se podrá, así que solo te dejaré ir de esta manera, agradeceré y te mandaré las mejores vibras y siempre que te recuerde será con un bonito recuerdo, así que gracias infinitas...
Quizá está no sea la única carta que hago hacia ti, pero por ahora es lo que mi corazón y mi mente me dicen que escriba, y pues siempre que tenga un recuerdo tuyo trataré de escribirlo para que poco a poco mi mente y mi corazón se liberen de ti
Gracias por existir personita ✨
C-A
9 notes · View notes
amucreations · 1 year
Text
Needle felt Canela/Isabelle Animal Crossing by TheMindOfAmu on Etsy
Tumblr media
Canela/Isabelle del fantástico juego Animal Crossing de Nintendo. Mide aproximadamente 20 cm de altura y está hecho de lana mediante la técnica de fieltro con agujas.
(Una unidad en stock). Todos nuestros artículos están hechos a mano con amor y cuidado y algunos pueden tardar más en hacerse que otros, por lo que el tiempo de procesamiento puede variar, pero normalmente tomará 1-2 semanas.
Cada figura de fieltro puede parecer ligeramente diferente al de la imagen; debido a la naturaleza artesanal del producto. Los colores o el tamaño pueden variar ligeramente.
Mis productos son adecuado para la decoración de habitaciones, decoración de Pascua, detalles como regalo de aniversario, cumpleaños, decoración de escritorio. Regalo hecho a mano para cualquier ocasión. Un hermoso regalo para todos los que admiran las creaciones ecológicas hechas a mano. Por favor, no dude en ponerse en contacto conmigo si tiene alguna pregunta.
⚠️Las esculturas de lana deben ser tratadas con delicadeza y se recomienda solo para fines de exhibición. (No es un juguete para niños ni para mascotas). No tire de las extremidades ni de la lana suelta.⚠️
Si buscas cualquier otro pedido personalizado no dudes en ponerte en contacto conmigo, sabré como ayudarte.
Puedes seguirme en mis redes sociales: Twitch: BecaGlez (Aquí me verás en vivo realizando las figuras) Instagram: Amumeow
5 notes · View notes
Photo
Tumblr media Tumblr media
6X15: “APRENDIENDO A DEJAR IR”. | CHICAGO, ILLINOIS  — 20 DE MARZO, 2021 |
El viernes finalmente había llegado. Un día tan deseado para los habitantes de Idris en el que todos pensaban en tomarse un descanso de todas las actividades y trabajos que tenían durante la semana. Habían otros que se sumaba un diferente trabajo, y así era la vida de Gabe como Inquisidor, su trabajo era de todos los días y debía siempre moverse cuando algo sucedía.
Desde que Novalee había dejado el gran cargo, sus horarios nunca los había organizado y nunca fue un problema. Justo se había separado de una relación bastante larga y así sus objetivos cambiaban sólo a sus hijos y lo laboral. También en el último año fue una forma de sanar completamente, se tomó más de un año en dejar ir muchas cosas sentimentales porque siempre estuvo en sus planes que si volvía a tomarse una segunda (o tercera) oportunidad con alguien, debía ser con todo superado porque la otra persona no debía llevar la carga pasada. Cómo había superado dos puntos muy importantes, debía sumar una tercera. Su decisión radicaba porque estuvo secuestrado en las últimas dos semanas. Había sido tan organizado que su ausencia estuvo muy bien justificada y aunque para él no era un error demasiado grande por lo que le hicieron, el que tomaran a sus hijos si había dejado huella, tanto que se encontraba en el búnker a medio día para conversar con Clary quién era la guardiana en los horarios dónde estaba todo más tranquilo. Sabía muy bien que cuando estaba allí era para entrenar o tomarse un tiempo a solas. Lo sabía porque era también su conducta.
Bajó las escaleras del subterráneo y fue hasta el control de mando dónde estaban todas las cámaras de seguridad. Su compañera estaba mirando firmemente una de las computadoras pero había más información de informes antiguos que seguramente repasa. — ¿Estás ocupada?  — Se sentó en el borde de la mesa y se cruzó de brazos con una ligera sonrisa, nunca completa. — He escapado del Gard un momento. Aproveché que quería darme una vuelta por aquí también antes de ir a buscar a Isabelle de sus entrenamientos — Soltó con naturalidad. Nunca era bueno dando explicaciones a nadie, pero Clary era como su hija también. Cuando sus ojos se encontraron, hizo una mueca antes de soltarle la bomba que tenía. — Quiero dejarte oficialmente el Búnker y que tomes el control de todo — Su voz fue suave y amable, considerando la gran responsabilidad que le estaba pidiendo. Si lo rechazaba, no lo dejaría porque no sentía a nadie tan bueno para tomarlo. — Por supuesto, si quieres. Sé que tienes las clases y la vigilancia de Shadowhunter pero, quería pedírtelo — Finalizó mirando sus ojos Clarissa había sido muy metódica en las últimas semanas, mucho más que lo que había sido en toda su vida. No sólo porque el que había sido su compañero en los horarios del búnker había desaparecido un tiempo y por lo cual, deseaba cumplir de mejor forma su trabajo para cuando regresara, sino porque su pareja también estaba siendo muy consciente con el trabajo, donde ambos dejaban sus vidas personales por el trabajo. No le molestaba, en realidad le gustaba que Jace fuese así y lo había conocido de esa manera. En aquel momento estaba echándole un vistazo a que todo marchara como estaba presupuestado. Tenía en su mente la preparación de una de sus clases, pero estaba en su lista para hacer luego cuando no estuviese cumpliendo con ese trabajo. Que Gabe llegara a su lado fue una sorpresa, aún cuando había sentido un par de pasos, jamás esperó que el Inquisidor se desviara de sus actividades, pero él era muy distinto a cómo había sido Novalee. Movió su cuerpo junto a la silla con ruedas en su dirección y se inclinó hacia atrás para observarlo. Siempre era un gusto verlo, no sólo lo veía como un amigo íntimo, familia; lo admiraba por sobre todas las cosas. —Todo está tranquilo y para ti siempre tengo tiempo— le dijo con cariño y cortesía. Asintió con la cabeza para darle a entender que todo estaba bien y que continuara. Podía sentir que le daría alguna orden o trabajo, es por eso que toda su concentración estaba puesta en él. Al ir escuchándolo su boca formó una “O” de sorpresa y arrugó ligeramente el entrecejo, confundida. Se tuvo que tomar un tiempo para analizar realmente sus palabras, su respuesta era clara pero no estaba segura de si realmente era algo que Gabe dejaría. No sonaba como algo que haría él. —¿Está… todo bien? Quiero decir, se que tus responsabilidades han aumentando exponencialmente desde la salida de Novalee, pero… este trabajo es como un… desahogo, eres bueno en esto. —suspiró y luego negó con la cabeza. Su mirada siguió sobre la suya y no pudo evitar observarlo con preocupación. — Sería todo un honor seguir tu legado, Gabe, lo sabes. Creo que estoy preparada tras todo tu entrenamiento y si necesitas que me haga cargo, lo haré. Te haré sentir orgulloso— respondió convencida. Apoyó ambos brazos sobre el borde de su silla y se puso de pie para estar más cerca, quizás, en busca de un momento más íntimo. —Sabes, no soy una niña ya, y gracias a ti soy mucho más fuerte. Puedes confiar en mí, puedo ayudarte en lo que sea, —agregó, con la esperanza de poder ser más de ayuda de lo que podría esperar de ella. Gabe mostró una amplia sonrisa por la seguridad que denotaban sus palabras. Siempre había sido así desde el primer minuto en el que la había conocido, podía no haber sabido nada sobre ese mundo tan extraño para cualquier mundano pero Clary siempre mostraba ese grado de superación que la hizo llegar a ser una de las cazadoras con más potencial de su generación. En su opinión, el hecho de haber aprendido todo sólo en la Academia le hacía merecer el mejor puesto de cualquier lugar de trabajo ya que alcanzó el nivel de los mejores. Apartó aquellos pensamientos de su cabeza y respondió en un tono muy amable lo que le mencionaba. — Sabes manejar muy bien el búnker, ¿Te has dado cuenta de eso? Jamás pediste mi ayuda, ni siquiera en los primeros días en el que te dimos este trabajo y sigue así, todo en orden — Murmuró con su voz diferente, siempre era serio pero le era difícil poner esa postura con ella, era como su hija. Se cruzó de brazos sobre su pecho y dejó que se tomara unos minutos para que pudiera procesar muy bien lo que le había mencionado porque suponía una gran noticia para cualquiera.  Un gran cambio con muchos riesgos. El chico asintió ligeramente con su cabeza e hizo un ademán con su mano para que no se preocupara. Sabía que iba a ser muy fácil que se diera cuenta que había pasado algo que le habría hecho tomar esa decisión pero la historia era muy larga y se quería enfocar más en el puesto que en lo otro. — Han sido muchas cosas que hacer en el último tiempo… si — Soltó un suspiro y sus hombros se relajaron. — Es un sinfín de puntos que me han hecho tomar esta decisión, hay otros temas que debo comunicarme con Novalee pero, estuve pensando y este lugar siempre debería haber un Green Arrow. Yo no puedo serlo, tengo el puesto en el Gard, las leyes, mi familia e Isa está demandando más tiempo; mucho más que su hermano mayor — Murmuró siendo muy honesto con los temas. — No puedo decirte que no apareceré en las noches a ayudarte, pero seguiré tus órdenes porque mereces llevar la dirección de esto más que nadie, Clarissa — Extendió su brazo para alcanzar su mano y le dio palmaditas sobre el dorso para que pudiera mirarlo a los ojos. — No necesitas probarme nada, porque he estado tan orgulloso desde que te graduaste que puedo irme durante un tiempo y sabré que has hecho lo mismo que yo, incluso has aprendido ciertas conductas no saludables de mi parte — Se rió suavemente y alzó ambas cejas. — Eres una gran mujer Clarissa Fairchild, no hay rastros de la Clarissa Bourne de años atrás. Tu crecimiento es mi mayor mérito — Sus palabras eran claras y su sonrisa no se perdía de vista con ninguna palabra. Clarissa hizo un gesto gracioso cuando los halagos empezaron a salir de la boca de Gabe. —He sido muy buena en el manejo del búnker porque te he observado a ti, has sido mi pilar más fundamental en el crecimiento y en realidad me siento orgullosa de hacer sido elegida. Además… sabes que solía ser muy llevada a mi idea y que me costó durante mucho tiempo el seguir órdenes, pero… tú has sido mi guía, realmente me cuesta imaginar este lugar sin tu presencia. Todos te extrañaremos el que des órdenes por aquí y me incluyo en la lista, top número 1. —Suspiró larga y cansinamente, pero a la vez lo comprendía. Imaginaba su posición, con una familia y con cargos tan importantes encima. Hasta ella buscaría bajar un poco la carga. O eso imaginaba. No tenía mucho más que hacer y le era algo natural el asentir obediente ante sus palabras y así lo hizo. —Haré mi mejor trabajo y siempre serás bienvenido cuando te quieras unir, siempre… que no te pierdas durante mucho tiempo. Me gusta pasar tiempo contigo, patear traseros y adquirir tus mismas mañas, cosa que me ha sido imposible de evitar. —soltó una carcajada y negó con la cabeza al recordar muchas actitudes que había imitado de forma inconsciente de él, como sus reacciones, su malhumor cuando hay un caso importante, pero en silencio, le gustaba. Bajó su rostro al sentir su mano sobre la suya y ella hizo lo mismo con cariño. Sus ojos ardieron al escuchar sus palabras y como una niña se emocionó por sus palabras. Quizás tenían que ver el hecho de que nunca había escuchado esas palabras de un padre o que se diera cuenta que, en último tiempo, él no solo había sido su jefe, sino un tipo de imagen paternal que veló por enseñarle todo lo que ahora sabía, pero ahí estaban. Ahora le dolía más que nunca perder su cercanía. — Y ahora lo he arruinado al comportarme como una niña, ¿No? —rió y se limpió las lágrimas con el puño de su chaqueta y sonrió ampliamente. —Te voy a extrañar un montón, ¿sabes? Por favor no te pierdas, por último, llámame si necesitas que haga de niñera. —bromeó con una risa amarga. Escuchar sus palabras hicieron que sonriera de oreja a oreja, dejando marcas en su rostro que denotaban la edad que ya tenía. Asintió varias veces, en algunos puntos tenía razón y no se iba a poner a desmentirle a esas alturas. Ya se conocían bastante bien como para llegar a eso. — Por supuesto, eras una persona demasiado terca y muy llevadas a sus ideas, pero eso también tiene que ver con la madurez, con las experiencias y has tenido muchas en los últimos años. ¿No crees que eso también tuvo que ver? Las pérdidas nos hacen cambiar y hacer que nuestra piel se haga mucho más gruesa — Repuso sin quitarse todo el mérito, pero debía darse cuenta de esos pequeños detalles que les cambiaba por completo la vida de las personas que habían escogido esa clase de vida. — También te extrañaré, pero esto no es una despedida. Sabes dónde estaré las doce horas del día en el Gard y sino, somos familia, en mi hogar siempre serás bienvenida — Le recordó alzando sus cejas. Sus hijos la amaban y le habían tomado mucho cariño, sin olvidar que había estado en los peores meses en dónde tuvo que adaptar toda su vida desde cero.
Puso sus manos en sus bolsillos, observándola detenidamente. A veces cambiaba su mirada a los monitores, pero era una actitud que ambos tenían para no perderse ningún detalle de lo que podría estar pasando.
— Por supuesto que vendré, pero bajo a tus órdenes y en los lugares que tu decidas. ¿Sabes? Necesito también esto para vivir, cuando llevas haciendo esto hace tantos años que es parte de tu vida y no podría dormir por las noches sabiendo que no hice nada por ayudar. Ayudar físicamente hablando, no detrás de un escritorio, dando órdenes y haciendo que la ley se haga en Idris — Murmuró con modestia. No odiaba su cargo, pero era demasiado administrativo para su gusto. A pesar de todo esto, sabía el rol que cumplía para la sociedad Nefilim. Cuando vio sus ojos, Gabe extendió sus brazos para que se abrazaran. No era muy de piel con la gente, pero cuando le tenía un gran cariño podía ser muy expresivo con ellos. En este caso, estrechó entre sus brazos a Clary. — Podría llamarte de cualquier manera, pero niña no. Todos podemos ser vulnerables y en mí siempre tendrás lo que necesites. Eres como una hija y eso no cambiaría ni siquiera con la distancia — Susurró con un corto beso en su cabeza. Quizás en los últimos años había crecido como Nefilim y había adquirido el máximo de aprendizaje en el último tiempo. No tan sólo con las clases o las relaciones con sus amigos cazadores de sombras que eran buenos en su trabajo, sino que había aprendido como defenderse de diversas situaciones a nivel emocional. Aun así, eso no había sido suficiente como para que ella perdiera su sensibilidad, seguía siendo la misma Clary a la que le brillaban los ojos cuando veía una escena emocionante, si tenía pena o rabia. Pero Gabe tenía razón, su piel estaba más gruesa e impenetrable y las pérdidas si bien le dolían, no la destruían como solía hacer. Era mucho más fuerte. Que le mencionara que las puertas de su hogar fue lo que necesitó para asumir toda la situación y puede que eso fuera todo lo que buscara escuchar. Estar ahí no solo significaba aprender del mejor, sino estar con quién consideraba un padre y sus hijos pequeños eran como hermanos a los que cuidaba de vez en cuando. Al menos no los perdería, no como lo había hecho con sus propios padres y hermano. —Está bien. También yo les estaré haciendo visita en casa y lo más probable es que te busque cuando necesite consejos en algunos casos. El ángel sabe que eso ocurrirá a menudo, hasta que me sienta más segura en el cargo. —rió suavemente y puso los ojos en blanco de forma melodramática. —Gracias, Gabe…—Susurró cuando lo abrazó apretadamente y ocultó su rostro sobre su chaqueta con ese aroma tan suyo. Se inclinó hacia atrás y sonrió ampliamente.—Te aconsejo que busques a Jace o le hables, creo que se está sintiendo muy celoso de nuestra amistad y que él quede de lado. Ya sabes lo maniático que es con respecto a ser un buen soldado. Me harías un buen favor… a mi relación, —bromeó. —Y te invitaremos a cenar, a todos. Pediremos comida en Taki’s y disfrutaremos de una buena velada. ¿Qué dices? Te diría de traer una cita, pero dependerá de la asistencia de los niños, Igual puede ser una cita doble.
Cuando se alejó tomó el rostro con sus manos con mucha delicadeza en aquel movimiento. Si bien sus manos eran ásperas con la piel más dura de lo normal, el gesto era sencillo y con mucho cuidado. Siempre se preocupaba de no ser demasiado torpe y lo había aprendido con tantas quejas de su hija que ya lo tenía muy instalado en su cabeza. Era lo primero que hacia al hacer cualquier movimiento a una persona que quería.
Negó con su cabeza levemente y puso sus ojos en blanco ante el comentario de tener que llamarlo. Sabía que no lo haría pero nunca estaba mal saber que siempre tenías a alguien cuidándote la espalda. — Por supuesto, cualquier cosa que necesites correré para ayudarte o darte unos cuántos consejos en un día caótico. Aunque ya sabes qué hacer en casos que sean varias situaciones a la vez — Arrugó su ceño y sonrió levemente. — Ven, no hablemos de trabajo mejor — Se puso a reír y nuevamente la abrazó, aunque esta vez duró menos minutos que antes. Se puso de lado pero apretando unos cuantos botones en el computador central, que era mucho más grande en tamaño de pantalla y los botones del teclado. Con el tiempo había aprendido la función de cada uno de ellos. — ¿Qué pasa con Jace? ¿Tiene tiempo para ponerse celoso? — Bromeó mirando de reojo cuando le explicaba que era acerca de su amistad y le gustó oírlo; que también le viera como algo mucho más que trabajo. — Es el mejor soldado que existe en esta generación y no es sólo mi opinión. De hecho, está siendo mi opción si es que Novalee no quiera volver. Si vuelve, tendrá otro cargo más, porque confiamos en sus capacidades y su lealtad — Repuso tranquilo pero sabía que a Clary le gustaba cuando hablaban tan bien de su pareja. — Pero no le digas, el ego estará a años luz, más de lo que ya lo tiene — Guiño su ojo y sonrió con su invitación. — Puedo ir, así ayudo a tu relación y a mi estómago — Sacó su celular y escribió rápido un mensaje de texto. — ¿Te parecería bien a las nueve? Sin niños. Debo llevarlos ahora a un parque y probablemente se acaben durmiendo después del baño — Dijo con mucha obviedad en su rostro. Eran enérgicos pero todo lo que subía, bajaba de golpe. —¿Puedo fingir alguna crisis de vez en cuando para que bajes y me acompañes? —fue la última pregunta que soltó con respecto al trabajo, pero luego soltó una carcajada juguetona y negó con la cabeza, teniendo claro que no era algo correcto para hacer. Pero se conocía y su popularidad ante lo testaruda que era a veces no era para nada un simple chisme. Se acercaba demasiado a la realidad. Se apoyó contra una de las mesas y lo observó a lo lejos mientras se pasaba las yemas de los dedos bajo los ojos para dejar ese aspecto de llorona que la había perder el profesionalismo. Volvió a reír ante su pregunta. Si había algo que le gustaba demasiado era la relación de cercanía que también tenía Gabe con Jace, claramente con la seriedad que ambos transmitían al tener personalidades parecidas, pero no dudaba del cariño mutuo.—No lo dijo… ya sabes, directamente. Pero sí hizo algunos comentarios que me hicieron dar cuenta de que tiene celos. Profesionales y personales. —le aseguró con una sonrisa de oreja a oreja al recordar esa conversación. El intento de Jace por sonar relajado, pero lo conocía bastante bien como para tener en claro, hablaba en serio. Su pensamiento con respecto al futuro la hicieron casi irse de espaldas. —¿En serio? Vaya. Diría que me sorprende, pero no es así. Eso terminaría por eliminar mi tiempo libre para pasar tiempo con él, pero me hace mucha ilusión, ¿sabes? Jace vive por lo que hace y es algo que siempre admiraré de él, sería una muy buena mano derecha para ti, Gabe. —le aseguró con determinación, casi como si quisiera terminar de convencer a su amigo. —Prometo tra…tratar de no decirle, pero es que me es imposible no decirle todo. —Puso los ojos en blanco y rió. —Bien, pediré comida en Taki’s y te obligo a traer cita, entonces. —sentenció mandona. Ella también tomó su móvil para contarle a Jace de la cena y para empezar a buscar menús de Taki’s para ordenar con antelación.
— No es tan malo si después de varias semanas no me ves por acá. Necesitaré algún tipo de ayuda para que la pilas de archivos por firmar no acaben conmigo antes de lo esperado — El chico bromeó ligeramente y se rió un poco por eso. No había pensado en lo que haría cuando llegara el momento de sólo enfocarse en una tarea y darse cuenta que su vía libre ya no existía para él, porque no podría manejarlo.
Se quedó en silencio, permitiéndose escuchar con atención lo que decía de su compañero y amigo de trabajo. Mientras tanto, el chico jugueteaba con sus dedos por el borde del panel de control, haciendo ligeros sonidos cuando le daba golpecitos contra la madera del escritorio. Alzó ambas cejas curioso y dudo si decir algunas palabras porque eran mucho de decir sus sentimientos y en eso no era muy bueno. — Jace se parece a mi. A veces lo veo como un hijo, que necesita control y buenas directrices a pesar que lo haga todo perfectamente bien — Soltó con una amplia sonrisa al recordar lo bien que trabajaba. — Pero otras, la mayoría he de admitir… — Soltó levantando su índice para darle mayor énfasis a lo siguiente que iba a mencionar. — Es verme y eso no sé si es bueno — Se rio con suavidad pero bajando su mirada a su mano.
— Necesito más que un compañero, un amigo. No te puedes dar muchos lujos en este tipo de trabajo y bien lo sabes — Repuso alzando su mirada a Clary. — Jace se define como un soldado pero es mucho más que eso. Protege lo que ama y ama de la misma manera en cómo yo he amado este lugar. Es por eso que lo quiero a mi lado — Le dijo casi como dando información concreta. Sabía que lo captaría sin tener que confirmarlo con las palabras exactas.
— ¿Cita? Soy de los que se sienten cómodos con ser la tercera rueda — Repuso bromeando, tal vez no podría conseguir a una acompañante tan pronto pero siempre había alguien que podía acompañarles para pasar un buen rato. Después de escuchar con atención, emitió un suspiro y se dejó caer sobre una de las sillas con respaldo que había alrededor de todas las computadoras y máquinas que había en ese lugar. Lo miró fijamente buscando las palabras adecuadas para decirle. Si había alguien a quien conocía mejor que nadie a Jace era ella. Le había gustado desde siempre la pasión con la que trabajaba, por más que toda su vida girara en torno a ello y era una de las cosas que más admiraba de él. ¿Era tan malo que se pareciera a Gabe? Para ella no. Su amigo que estaba en frente solo le había demostrado las buenas cosas de ese tipo de vida y era buena persona por todo eso. Si, a pesar de que Gabe no fuera el más abierto a expresar los contratiempos que conllevaba ese estilo de vida, lo veía. Más en su faceta como padre y pareja, las complicaciones que podría traer el mezclar el trabajo que realizaban con la intención de tener una familia. Pero Jace y ella llevaban se dedicaban a lo mismo. Sacudió la cabeza y desprendió esos pensamientos de su mente y volvió al tema principal con su amigo. —Jace siempre considera como familia a la gente que lo rodea. Sé que te ve así y estoy segura que será una gran mano derecha. No necesito vendértelo, lo sé. —rió y puso los ojos en blanco. —Mi punto es… que, en estos momentos, estamos un poco corto de personal, ya sabes, en el ámbito de liderazgo. Sé que tú sueles tener mucha fé en las personas y ves su potencial de inmediato, pero yo… yo no sería buena líder. Jace tiene ese material, así como tú y Novalee en su tiempo. Y sé que tú tienes tu prioridad ahora con tus hijos y es lo correcto a hacer, pero tal como lo dices, Jace es muy parecido a ti, por lo cual, te conviene. —sentenció con claridad. —¿Estás seguro? Bueno, nosotros no somos de los que andamos encima del otro cuando estamos con visitas, pero creí que tú quizás querrías presentarnos a alguien, es todo — se encogió de hombros y se puso de pie, encaminándose hacia él. —Le avisaré entonces y me pondré manos a la obra, la idea es que pasemos un buen rato de normalidad fuera del trabajo. — puso una mano sobre su hombro y le dio un suave apretón con cariño. Gabe tenía bien merecido tener momentos de normalidad en familia y pretendía brindarle aquello de ahora en adelante.
6 notes · View notes
Note
Hola Rosa ,Chica con Insomnio te saluda. Espero y deseo que te encuentres bien y te envío mucha buena energía . Te escribo para actualizarte como estoy. Y bueno siento que cada día es mejor que el anterior pero no puedo decir que estoy bien . Aún hay momentos de baja y aún lloro un poco. Me sentí tan ahogada que busque por otro lado a una amistad. Me costó mucho decidir hablarle pues siento que seguir hablando del tipo es no dejarlo ir. Pero sentía tantas cosas aún atragantadas que necesitaba hablarlo. lo bueno esq esta amiga me ayudó a desahogarme y me sugirió y hasta ayudarme un poco con empezar algún proyecto de emprendimiento. Y en estos días es lo que he estoy preparando. Espero que funcione. La verdad tengo q agradecerle a mi amiga pq a veces es como un recordatorio jaja diciéndome que como voy avanzando con mi proyecto. Hablando con ella en ese día de desahogo termine de darme cuenta que me siento tan culpable conmigo misma, que siento que me falle , me lo reprocho mucho, siento que vivo con un resentimiento propio por ver cómo la relación se agodataba y no me marche, no supe cómo. Mi amiga dice que deje de pensar esas cosas xq era una experiencia que tendría que suceder y sucedió y que ya la próxima sabré que no debo permitirlo. Y si tiene razón pero a la par que estoy haciendo mi proyecto y me siento mejor debo reconocer que sigo sintiendo como si estuviera peleada conmigo mismo. Como te dije al no tener idea de cómo sería una ruptura me ayudó a leer unos libros sobre qué pasa cuando termina la relación. He buscado algo similar para reconciliarme conmigo misma, perdonarme ( xq repetirmelo casi todos los días no parece tener efecto ) conoces algún libro o alguna forma de poder hacer eso. Me despido por ahora, agradeciendo una vez más tu tiempo.
Pues me parece genial que tengas a esta amiga tan predispuesta a ayudarte y que además sepa como hacerlo 👍
“ me siento tan culpable conmigo misma, que siento que me falle , me lo reprocho mucho, siento que vivo con un resentimiento propio por ver cómo la relación se agodataba y no me marche, no supe cómo. “
Estos sentimientos pertenecen a una de las fases del Duelo, eso significa que poco a poco vas avanzando y saliendo del túnel, aunque tu creas que sigues estancada.
Hay un ejercicio bastante efectivo, yo lo recomiendo mucho en mi consulta y aquí también ..
Cartas de DRENAJE para soltar emociones 📝  ◀
Vas muy bien 💋, eres más fuerte de lo que creías 💪
4 notes · View notes
mot-stellaire · 3 years
Text
Irse cuando quieres quedarte
Yo nunca quise irme. 
Nunca quise terminar. Nunca quise nada de esto.
En mi ingenuidad siempre he creído que el amor es la solución a todos los problemas es el amor. No solo el de parejas, sino el fraternal, el de familia. Culpo a los libros por pensar que el amor lo puede todo. 
Dios, te di todo, te amé-amo- con tanta intensidad que podría haber quemado a cualquiera ¿por qué mi amor no fue suficiente?
Nunca quise irme, nunca quise terminar, pero me sentí obligada, arrastrada, humillada a hacerlo. Después de meses, después de todo. Después de tus palabras frías, tus acciones... ¿todo era a propósito? ¿Era una manera de alejarme? A veces pienso que todo el último mes me gritabas en silencio ¡Términame! ¡Términame! Así no tendrías que hacerlo tú, sino yo.
Yo no quería terminarte. Tuve que hacerlo, pero no lo hice sola, lo hiciste conmigo. Era lo que tú querías hacer. ¿La diferencia? El deber.
A veces nos imagino en una caja, la cual es nuestro lugar feliz, nuestra relación. Nosotros la armamos, la hacemos más grande, más pequeña, la decoramos a nuestro antojo. Siento -lo digo para no afirmar nada- que en esa pequeña caja estaba yo sola. O quizás estabas ahí solo porque con ambas manos te hacía quedarte.
Pero tú no te quieres quedar ¿eso ibas a decirme? Estabas dispuesta a terminarme, eso hiciste. Te fuiste pero mucho antes de siquiera decir tenemos que hablar.
Me pregunto cuándo fue. ¿Con aquella mentira -no lo hice, jamás admitiré algo que no hice- de hace años? ¿Antes de tatuarnos, cuando el miedo fue más? ¿Cuándo empezaste a sentir algo por alguien más, por ella? ¿Cuándo besaste sus labios, más suaves que los míos, o sentiste su piel más tersa y clara? ¿Te fuiste cuando admitiste no sentir lo mismo por mí?
¡No sentir lo mismo! DIOS. ¿cómo luchas contra algo así? ¿Cómo das todo sabiendo que la otra persona no siente lo mismo por ti? Ya no, se esfumó, queda el cariño y por eso te abraza esta noche. Ya no siente lo mismo por ti y te dice te amo sin mirarte a los ojos.
Las últimas semanas te vi alejarte más y más, responderme -no hablar conmigo- por obligación. ¿Qué te pasa, mi amor? ¿Qué te aqueja? ¿Es tu mente, que no te deja tranquila, o males del corazón? ¿Yo te rompí el corazón, o tal vez fue ella? ¿Son esas voces que gritan, que susurran? ¿Es el miedo del futuro, la incertidumbre? Por favor, dime, no sé como ayudarte si no me dices como te sientes.
Oh, lo que sientes. 
¿Por qué me dices te amo? ¿Me amas o me tienes cariño? Ya, estoy siendo injusta, hay diferentes formas de amar. No tienes que dejar de amarme, solo dejaste de amarme igual. 
No puedo obligarte a sentir nada más por mi. Si hay un dios en el cielo él sabe que di todo por intentar enamorarte otra vez, para que vieras que en mí existe alguien por quien luchar. Alguien que lo da todo ¿por qué no fue suficiente, maldita sea?
No diré que no me amas. Eso es blasfemia. 
Nos queda el amor de Vicks, el amor de Jazz. Un amor diferente, pero no el que sostiene una relación ¿cierto? Algo así te entendí. 
Ya esto perdió el sentido original, mis manos están llenas de tinta. Volveré a escribir cuando deje de llorar.
¿En qué estaba? Sí.
Y me fui de tu casa queriendo quedarme. Crucé el umbral esperando un ‘’espera, quédate’’, y no solo en tu hogar, sino contigo. Supongo que esperaba en silencio muchas cosas, aunque todo estaba dicho mucho antes en un cuarto con olor a cigarros.
Me fui queriendo quedarme y por eso una parte de mí siempre estará ahí. No importa a donde vaya, esa parte se me quedó ahí y no la iré a buscar. Es mejor que se quede allá, así estará cerca de ti. Capaz no la sentirás, pero yo sí y sabré, en el fondo, que estoy junto a ti.
Me quedan cosas por decir y no sé como decirlas.
2 notes · View notes
nix-letras · 4 years
Text
Lo que debió pasar en 6to año
Harry pasaba vigilando a Malfoy tanto como podía, ahora, según el mapa del merodeador se encontraba en el baño. Fue hasta los baños para encontrarse con un Malfoy frente al espejo llorando y totalmente desesperado. 
Cuando iba hablar, Draco se dio cuenta de su presencia y se dio la vuelta con la varita en la mano y listo para atacar. Lanzó un hechizo que derribó a Potter, pero este no respondió, lo que enojó más a Malfoy así que intento lanzar más hechizos, pero estaba muy inestable y por alguna razón no salió magia de su varita, más que una pequeña luz. Esto le dio tiempo a Harry a ponerse de pie. Se acercó a Malfoy, pero este le seguía apuntando con la varita.
- Baja la varita Malfoy, no te voy a hacer daño. 
- No confío en ti Potter, si no sales de aquí te lanzaré un hechizo del que no podrás ni caminar. 
- Hace un rato tu varita falló, como piensas sacarme de aquí. - Eso alteró aún más a Malfoy y se lanzó a atacarlo con sus manos, claro que en ese aspecto Potter era aún mejor que con la magia, así que esquivó fácilmente el golpe y Draco terminó golpeando la pared. 
Draco empezó a golpear la pared una y otra vez, se sentía bien, parecía que al fin se hacía daño a quien debía hacer daño, así mismo. Potter quedó impresionado por cómo Malfoy siguió golpeando la pared, solo reaccionó cuando vio sangre en la mano de Draco.  
- ¡Malfoy para! ¡Malfoy! ¡Malfoy! - Pero Draco no le hacía caso, seguía golpeando la pared. Así que sin saber muy bien que hacer, lo tomó por la espalda encerrando los brazos de Malfoy en los suyos. Draco se removió en lo brazos de Potter, pero el no dejo el abrazo, hasta que sintió que él solo se rendía en sus brazos. 
Para no asustarlo, se movió un poco con Draco en los brazos hasta quedar en la otra pared y deslizarse con un Malfoy que había vuelto a llorar desconsoladamente. 
- Malfoy, está bien. Estás a salvo, respira, vamos respira. - Malfoy empezó a seguir la respiración que tenía en su espalda. 
- Todo es tu culpa Potter, sino estarías vivo... - Cuando lo dijo solo se volvió a alterar al darse cuenta de lo que dijo. 
- Está bien Malfoy, ahora solo necesito que te tranquilices un poco más y te soltaré. ¿Esta bien? - Para su sorpresa Draco solo negó con la cabeza.
- No, no, no quise decir eso, no soy malo, no, no, no - Empezó a hiperventilar de nuevo, así que Harry empezó a mover sus dedos sobre los brazos de Draco, para que vuelva a calmarse, mientras susurraba en su oído que no era malo. 
Se demoró un rato, pero lo logró calmarlo. Para cuando se dio cuenta, tenía a un Malfoy dormido en sus brazos, fue cuando Potter noto la marca, ahora realmente estaban en bandos opuestos, pero todo lo que había visto, le hizo notar que no era una elección de Draco serlo. 
Draco se despertó desorientado, pero se sentía a salvo, sus puños ya no estaban sangrando. Se sentía mareado y tenía un dolor de cabeza horrible, hasta que noto los brazos alrededor de cuerpo y su manga subida, viendo la marca. Se quedó en silencio, hasta que recordó todo y se asustó, lo había descubierto, Harry lo había descubierto. 
- Potter ya suéltame, no soy ninguna obra de caridad. Ya viste la marca, ya no tengo remedio. 
- Malfoy puedes por una vez no ser cabezota y dejarme ayudarte. Por lo que dijiste se que no fue algo que tu hayas elegido. 
- ¿Qué dije? ¿Potter que dije? - Parecía alterado, enojado y vulnerable de nuevo. 
- Nada de lo que debas avergonzarte. Déjame ayudarte ¿sí? 
- No me puedes ayudar - sintió que Potter se despegaba de él, eso lo desilusionó pero no dijo nada. Potter lo ayudó a recostarse en la pared y el se puso frente a él.  
- Lo intentaré, hablaré con la Orden y buscaremos una forma de ayudarte. - Draco negó rápidamente y sus ojos mostraron miedo - Malfoy, por favor...
- No, no Potter, si me quieres ayudar no metas a más gente. - Malfoy intentó ponerse de pie, pero estaba muy débil, así que aceptó la mano de Harry. 
- Bien, pero deja que al menos yo te ayude. - Le tendió una moneda que usaron el año anterior en el ejército de Dumbledore - Sólo tienes que rozar el frente y sabré que me necesitas. Tengo una igual. - ¿Prometes que lo harás? 
Draco quería, enserio quería decir que no, o al menos saber que nunca la usaría, pero algo le decía que si lo haría. Se sentía vulnerable, pero al mismo tiempo los brazos de Potter la habían proporcionado una seguridad que sentía desde el inicio del año. 
- Bien, lo haré Potter lo haré.- Harry sonrió y ayudó a Malfoy a salir del baño y llevarlo a sus dormitorios. 
Cuando ya se iban Harry volteó a Draco fácilmente, estaba muy delgado, eso le preocupo un poco, pero no dijo nada. Lo abrazó fuerte, lo que sorprendió a Malfoy quien después de un rato subió sus brazos para corresponder el abrazo. Cuando ya despegaron Harry bajó un poco y le dio un beso en la frente, sonrió porque había logrando que Malfoy se sonroje un poco. 
- Adiós, Malfoy. Recuerda usar la moneda, sino quieres que te ande persiguiendo por todo el castillo. 
- Ya vete Potter, antes de que alma caritativa se vuelva una serpiente. La usaré, deja de seguirme. 
Cuando Malfoy entró a la sala común parecía más aliviado. 
5 notes · View notes
mikathronos · 4 years
Text
Hoy tengo que sacarme algo del pecho a riesgo de que suene a indirecta patética, porque este perfil siempre ha sido para mí un método de desahogo muy querido y ayudante fiel para sacarme pensamientos malos de la cabeza, incluso si sólo son para borrarlos en el momento de publicados o con el tiempo… en fin.
Es difícil comenzar, y no porque esté falta de palabras sino porque son tantas las que tengo atoradas que no sé qué escribir primero y tampoco creo tener la capacidad de darles una continuidad clara ahora mismo. Hasta dudo poder ser coherente con ellas. Siento y estoy casi segura de que todo se leerá como párrafos en desorden…
 Tus palabras me llegaron de una fuente tan confiable que puso en duda todo lo que creí saber de ti o de si te llegué a conocer realmente alguna vez. Lo primero que sentí fue que hablaba de una persona extraña y ajena, que se había confundido o malinterpretado algo, pero no sé. Ya no sé.
 Tengo sentimientos encontrados con todo y con cada una de las posibilidades. No estoy enojada, pero… tal vez si decepcionada o algo triste quizá. Tenía un recuerdo final de ti que sobrepaso todos los anteriores, me permitió cerrar ciclos sanamente y que creí había sido mutuo, como tú misma me dejaste saber en nuestro adiós. Pero de nuevo, ya no sé y puede que esta vez fui yo la que no capto la imagen completa, o no sé. De nuevo.
 Antes, durante y después de lo nuestro me recalcaste lo diferente que fui contigo a comparación de los demás… tantas veces y con una sinceridad que siempre creí verdadera, al grado de grabarme los recuerdos de tus palabras en la mente como para no olvidarlas aún al día de hoy. Y me contaste tantas cosas de lo anterior a mí que jamás puse en duda, pero que ahora repaso con lupa pensando: “Ya NO sé.”, ¿pero ahora? ¿Cuándo antes juraste lo contrario una y otra vez?
 No sé cómo llegar a lo que quiero, sólo tengo frases cortas vagando alrededor, y mis decepcionados sentimientos al respecto. No sé por qué lo haces ni por qué con una persona que sé tú sabes me lo haría llegar tarde o temprano, de alguna forma u otra.
 Lo nuestro tuvo muchas bajas, y me atrevo a decir superaron a las buenas más para mí que para ti. Hasta con un acto que JAMÁS esperé… no de ti. No conmigo. Pero te perdone, lo supere y avance. Justo como tú mucho antes que yo. Porque te tenía tanta estima y cariño que simplemente paso, con el tiempo. Sin siquiera tener la intención o quererlo.
 Sé que no estás bien, y que tienes momentos malos… muy malos. Pero eso no te exenta de lo incorrecto de todo lo que hiciste de ser verdad.
 Nuestro “principio del fin” fue horrible para mí.
Terminaste las cosas de forma tan cobarde y por razones tan… infantiles que me hirieron de tal manera que perdí la esperanza en nosotros casi al instante. Y la poca que sobrevivió la pisoteaste con tu deshonestidad. Con tu querer de… volver cuando tú sabías y YO noté casi al instante que eso no era lo que querías. Cuando ya tenías a alguien reemplazándome o a poco de.
Y no puedes salir con un: “Eso no fue así.”, “Fue después.” o cualquier otra excusa similar. Porque te encare (aunque no de forma presencial), te encare al respecto cuando jurabas que me querías y lo aceptaste. Jamás olvidaré tu: “¿Cómo lo supiste…? Nadie sabía, no se lo he dicho a nadie.” Que me golpeo tan duro que creí que me quedaría sin aire.
 Cosas pasaron, nos dejamos. Mi dolor me llevo a enviarte mensajes de “Te extraño.” esporádicamente (lo admito). A llegar a un lugar oscuro y muy profundo. Me insinuaste querer volver cuando lo nuevo tuyo pareció terminar. Me hiciste volver a confiar y a pensar en la posibilidad de eso, sólo para volver a lo mismo. Fuimos al cine. El dolor amargo paso y creí que, si bien todo era diferente, tal vez era lo que necesitábamos. Volví a ser esa persona que intentaba estar emocionalmente para ti cuanto pudiera por decisión propia, aunque físicamente poco a nada pude. Me pediste dinero, y acepte darte lo poco que disponía de buena manera, sinceramente. Llegaste junto con él. Fue extraño. Fue rápido. No quise que me lo pagaras, porque en mis palabras sabía que, de poder, lo harías en algún momento. Simplemente quería ayudarte. Me moví, y decidí que lo mejor para mí era pasar página y no volver a contactarte, pero dejándote en claro (a ti y a todo el que insinuara lo contrario) que nuestro último adiós real termino bien.
Tenía un buen recuerdo de lo nuestro y de ti, incluso si en un principio me sentí y creí estar destrozada sin remedio.
Y entonces… esto.
No planeo hacerte llegar este escrito, o si siquiera lo deje aquí o lo borre o lo que sea. Pero las frases siguen en mi cabeza.
 Yo sé cómo sucedieron las cosas, sé lo que hice y lo que no hice, el recuerdo de lo que me contabas como tu parte que coincidía con la mía, y por eso mismo no sé por qué razón salió esto justo ahora, o cuando sea que haya sido.
No sé qué esperas o esperaste en el momento o ahora.
Creo que jamás lo sabré o entenderé incluso si escucho razones de tu propia boca.
 Lo único que tengo claro es que… espero que algún día tengas la paz que siempre desee para ti y que te sigue faltando, como lo denotan tus acciones y palabras.
 Y no sé. Sólo quería sacarlo.
1 note · View note
dance-dreamer · 5 years
Text
Aveces no entenderé bien por lo que pasas, aveces no sabré como ayudarte. Pero prometo jamás soltar tu mano, aun cuando la tormenta sea fuerte, prometo nunca soltarte, y siempre estar para ti, Amiga.
35 notes · View notes
21candrade · 4 years
Text
Carta a alguien que se suicidó», por Violet Markey.
¿Dónde estás? ¿Y por qué te fuiste? Supongo que nunca lo sabré. ¿Fue porque te hice enfadar? ¿Porque intenté ayudarte? ¿Porque no te respondí cuando lanzaste piedrecitas contra mi ventana? ¿Y si te hubiera respondido? ¿Qué me habrías dicho? ¿Habría podido convencerte de que te quedaras o de que no hicieras lo que hiciste? ¿O habría sucedido igualmente?
¿Sabes que ahora mi vida ha cambiado para siempre? Antes pensaba que era así porque tú habías llegado a ella y me habías enseñado Indiana y, con ello, me habías obligado a salir de mi habitación y abrirme al mundo. Incluso cuando no estábamos de excursión, incluso desde el suelo de tu vestidor, siempre estabas enseñándome el mundo. Pero no sabía que el cambio para siempre de mi vida iba a ser porque me quisiste y luego te marchaste, y de un modo tan definitivo como este.
De modo que supongo que al final lo del Gran Manifiesto no existía, aunque me hiciste creer que sí. Supongo que solo había un trabajo del instituto.
Jamás te perdonaré por haberme abandonado. Ojalá tú sí pudieras perdonarme. Me salvaste la vida.
Al final, me limito a escribir:
¿Y por qué yo fui incapaz de salvar la tuya?
3 notes · View notes