“Hay días, que estoy tan viva como el gran río de la colina, pero aveces soy tan pequeña como un pez en un estanque, hablo de esos peces que están en la veterinaria del pueblo. Que parecen que están olvidados, pero aún así cuidan de ellos”.
Gracias a videos tomados por drones, los científicos consiguieron observar por primera vez cómo uno de los peces más rápidos del mundo cambia de color y brilla antes de atacar a sus presas.